Los 7 hábitos de efectividad personal y organizacional El modelo de los 7 Hábitos está basado en principios que permiten a las personas y organizaciones alcanzar los resultados deseados, y sostener esa efectividad en el largo plazo. • Hábito 1: Ser Proactivo El hábito de la proactividad nos da la libertad para responder de acuerdo con nuestros principios y valores. Proactividad no significa solamente tomar la iniciativa. Significa también que, como seres humanos, somos responsables de nuestras propias vidas. Siempre que pensemos que el problema está “allí fuera”, el problema seguirá estando ahí. El enfoque proactivo consiste en provocar un cambio positivo en lo que está “allí fuera” : implica ser un modelo, no un crítico... implica ser parte de la solución, no parte del problema. “Liderazgo en Tiempos de Crisis” 1 • Hábito 2: Comenzar con el fin en mente Comenzar con el fin en mente hace posible que nuestra vida tenga razón de ser, pues la creación de una visión de lo que queremos lograr, permite que nuestras acciones estén dirigidas a lo que verdaderamente consideramos significativo en nuestras vidas. El modo más efectivo de empezar pensando en un objetivo consiste en elaborar un enunciado de la misión, filosofía o credo personal. Escribir y revisar un enunciado de misión nos obliga a pensar en nuestras prioridades y alinear nuestra conducta con nuestras metas. • Hábito 3: Primero lo Primero Poner primero lo primero nos permite liberarnos de la tiranía de lo urgente para dedicar tiempo a las actividades que verdaderamente dan sentido a nuestras vidas. El 80% de los resultados provienen del 20% de las actividades. Para decirle sí a las cosas importantes, hay que aprender a decirle no a otras actividades, algunas de ellas en apariencia urgentes. • Hábito 4: Pensar en Ganar­Ganar En el esquema ganar­ganar se ve la vida como un escenario cooperativo, no competitivo. Se procura el beneficio mutuo en todas las interacciones humanas. Pensar en ganar­ganar nos permite desarrollar una mentalidad de abundancia material y espiritual, pues contradice la premisa de que la vida es un “juego de suma cero”, donde para que uno gane, el otro necesariamente debe perder. Este hábito promulga que cuando establecemos el balance entre nuestros objetivos y los objetivos de los demás, podemos lograr el bien común. • Hábito 5: Buscar Primero Entender y luego Ser Entendido Esta es la esencia del respeto a los demás. La mayor parte de las personas no escuchan con la intención de comprender, sino con el fin de contestar. La necesidad que tenemos de ser entendidos es uno de los sentimientos más intensos de todos los seres humanos. Este hábito es la clave en las relaciones humanas efectivas y posibilita llegar a acuerdos del tipo ganar­ ganar. • Hábito 6: Sinergia La esencia de la sinergia consiste en valorar las diferencias: respetarlas, compensar las debilidades, construir sobre las fortalezas. La síntesis de ideas divergentes produce ideas mejores y superiores a las ideas individuales. La persona verdaderamente efectiva tiene la humildad y el respeto necesarios para reconocer sus propias limitaciones y apreciar los ricos recursos que pone a su disposición la interacción con otros seres humanos. Esa persona valora las diferencias porque las mismas acrecientan su conocimiento y su comprensión de la realidad. • Hábito7: Afilar la Sierra Afilar la sierra implica usar la capacidad que tenemos para renovarnos física, mental, social y espiritualmente. Es lo que nos permite establecer un balance entre todas las dimensiones de nuestro ser, a fin de ser efectivos en los diferentes roles que desempeñamos en nuestras vidas. 2 “Liderazgo en Tiempos de Crisis” 3