PAU Septiembre 2015 Opción A Historia de la Filosofía (Explicación esquemática) Explicación de la teoría hilemórfica en Aristóteles, consistente en que las cosas del mundo se constituyen de dos elementos fundamentales: la materia por un lado, y la forma por otro. La materia consiste en aquello de lo que está compuesto algo (Ej: una mesa de madera, su materia, será la madera). En cuanto a su forma, es lo que hace que esa misma mesa se mesa y no, por ejemplo, una silla. Y el compuesto de ambas es lo que hace que la cosa sea cosa; ahora bien, para Aristóteles lo que prima es la forma (por eso no es un choque directo con la teoría platónica, sino una rectificación: la explicación de esta idea sirve como contraposición con otros autores). Lo que prima es la forma porque se debe recordar que cuando hablamos de la metafísica aristotélica, de lo que se habla es de “en qué consiste el ser” o “en qué consiste que la cosa sea cosa”: lo que estamos haciendo es hablar de la ousia (esencia/substancia). Es el horizonte hacia el que nos movemos en esta explicación. Ahora bien, al tener que vincularlo al movimiento, estamos hablando de la física, o lo que es lo mismo, a “cuál es el origen de que hay movimiento en el mundo”. Como la metafísica y la física siempre van unidas en Aristóteles, la explicación que va a dar par un elemento físico es mediante un elemento metafísico: el primer motor inmóvil. Primero porque no hay otro antes. Motor, porque tiene la capacidad de mover a otros elementos (en este caso las esferas celestes y en consecuencia a la tierra). E inmóvil porque él mismo no se mueve. Así que cuando hablamos del primer motor inmóvil estamos hablando del dios que se piensa a sí mismo, y que solamente se ocupa de mover y, en consecuencia, es la causa del movimiento del mundo. Respecto al cambio, hay que buscar su causa y evidentemente el cambio substancial hace referencia a un cambio radical, cambiaría su esencia. El cambio ligado al movimiento tiene que ver con el motor inmóvil ya que se mantiene su esencia y habría que hablar del paso de potencia al acto, cuyo “cambio” nunca sería esencial ya que se mantendría la misma ousia siempre. Ejemplo: un músico con 30 años, en acto. Ese mismo músico, cuando tenía tres años ya sería un músico en potencia, es decir, ya tendría su esencia.