SEMINARIO ALTA DIRECCIÓN 2010-2011 GRANADA Los nuevos retos de la dirección de empresas en el siglo XXI ¿Por qué necesitamos hoy más que nunca el perfeccionamiento de las capacidades directivas? El entorno actual de las empresas se caracteriza por el rápido y continuo cambio debido, principalmente, a la feroz competencia que se ha desarrollado en esta etapa de estancamiento económico y caída del consumo. ¿Qué requiere este nuevo entorno de los empresarios y directivos? La complejidad del entorno exige al directivo una mayor capacidad para entender, e interpretar, la realidad de las situaciones por las que pasa la empresa y poder actuar rápidamente sobre ella. La creciente competitividad requiere de los directivos una actitud flexible y una mente ágil para ajustarse rápidamente a los cambios del entorno, detectar con anticipación los cambios en clientes y competidores, y buscar nuevos conocimientos e ideas para generar nuevas ventajas competitivas, ya que las actuales se quedan obsoletas rápidamente. ¿Cómo se puede conseguir desarrollar estas competencias y capacidades en empresarios y directivos? La formación directiva no es sólo una formación profesional, sino también un elemento de desarrollo personal y, por tanto, no se trata sólo de aportar conocimientos, sino de desarrollar habilidades y actitudes, fuertemente ligadas con la dimensión humana de los directivos y empresarios. ¿Cuál es el principal problema del empresario y directivo en su tarea de dirigir? En primer lugar, el empresario y directivo deben creer en el perfeccionamiento permanente y continuo si no quieren convertirse en el cuello de botella de su propia organización. El principal problema del empresario y directivo no es saber más, sino ser capaces de hacer más y mejores cosas. No se necesita saber mucho, sino saber hacerlo realidad.