Los bienes materiales

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HIST. AGUIRRE ALVAREZ, ALEJANDRO
Titulo
Los bienes materiales (fuentes, monumentos, plazas, parques y jardines):
como proteger la herencia cultural e histórica que forma parte del
patrimonio de la población en general.
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Introducción
Los bienes materiales como son las fuentes, monumentos, plazas, parques y jardines de cada
municipio de nuestra entidad federativa tienen una relevancia indiscutible como legado cultural
e histórico. Conforman en su conjunto el patrimonio artístico de la sociedad.
Por ello, es necesario regular su uso y destino de estos bienes materiales, que no son exclusivos
de ninguna persona, ayuntamiento o partido político, los cuales, muchas veces, los demuelen o
los modifican a su capricho y antojo.
Es vergonzoso que los ediles en turno, independientemente de la agrupación partidista a la que
pertenezcan, abusando de su autoridad, incurran en el delito histórico de modificar dicho bien
escudándose en su papel de presidentes municipales, ya que muchas veces son demolidos,
abandonados, removidos, y deteriorados, sin que ninguna persona haga nada al respecto.
De esta manera, comprendemos que es necesario regular el uso de estos bienes materiales
mediante una legislación que los proteja del deterioro, del abandono, de la modificación en su
construcción y de su extensión territorial, del pillaje, del hurto, así como del abuso y
prepotencia de las autoridades en el poder.
¿Cómo proteger nuestro patrimonio cultural?
Aprovechando este foro de expresión, me permito la ocasión para señalar la importancia que
tiene el que se legisle algún decreto o ley que tienda a proteger, resguardar y defender nuestro
patrimonio histórico de las depredaciones de gente inconciente de la riqueza histórica, artística,
arqueológica, científica y natural que posee Tabasco.
Es vergonzoso lo que aconteció en la ciudad de Macuspana, durante la presidencia de un
gobierno perredista, que abusando de su autoridad, mando remover la estatua del distinguido
naturalista José Narciso Rovirosa Andrade, para colocarlo en un rincón de la avenida del mismo
nombre, para dar paso a una fuente que hace la alusión a una leyenda absurda, que nos hace ver
mal a los macuspanenses.
No es posible que las autoridades municipales no puedan tener freno a sus depredaciones en
contra del acervo municipal, pues escudándose bajo el “Bando de Policía y Buen Gobierno”,
atenten contra toda manifestación de inconformidad de la sociedad macuspanenses. Coartan la
libertad de expresión del pueblo mediante maquinaciones maquiavélicas, amparados bajo la ley
y el fuero que les proporciona su embestidura de primer concejal municipal.
Además, por si esto fuera poco, el primer regidor también se escuda ante la fuerza que le da la
mayoría de votos de sus regidores del mismo partido, que sin tomar conciencia del atentado
histórico que están cometiendo, aprueban cuanto les conviene para quedar bien ante su jefe o su
partido político.
Pasando a otro hecho, distinto en su caso, pero sin dejar de ser aberrante, fue lo que hicieron
unos paseantes que se introdujeron como “visitantes” en el Parque Museo La Venta en fechas
acaecidas el año pasado. Estos personajes, miembros de una secta religiosa, que sin sentido
común, y sin conocimientos básicos de historia y arqueología, agredieron sin motivo razonable
a las piezas monumentales de la cultura Olmeca que resguarda este sitio. Y digo sin motivo
razonable, por qué no presentaron pruebas fehacientes para haber hecho lo que hicieron.
O solo que estén fuera de sus cabales para atentar contra el patrimonio de todos los mexicanos
que valoramos y sabemos de la importancia que tienen nuestras culturas mesoamericanas a nivel
mundial.
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O será que estos mexicanos no saben apreciar la importancia de tales piezas monumentales de la
cultura Olmeca. O no cursaron siquiera la primaria, en donde debieron haber obtenido los
conocimientos básicos sobre nuestra cultura madre. O como dicen por ahí, ni madre tienen.
¿Dónde está la protección de nuestras autoridades culturales para la defensa de esta riqueza que
nos fue legada por nuestros ancestros?. Que nos fue confiada bajo resguardo por toda la
humanidad, que no fue fortuita obtenerla, nada más así, por gracia y obra de la divinidad.
Fueron años los que llevaron a nuestros ancestros a plasmar en esas piedras talladas con
majestuosidad, tanta belleza y riqueza cultural.
¿Dónde están nuestras autoridades educativas que no han podido enseñar en nuestros niños y
jóvenes el amor a la patria, a valorar nuestro acervo histórico, arqueológico, artístico y natural?
¿Qué pasa con nuestros planes y programas de estudio? ¿Dónde está la currícula que valora la
importancia de la historia y de la geografía?. ¿Es que buscamos desaparecer nuestros aportes
históricos?. Para mí, como historiador, fue bochornoso saber que fuimos noticia a nivel
internacional que en Tabasco, somos los destructores de nuestra propia riqueza cultural.
Qué en Tabasco, no apreciamos la importancia que tienen los monolitos de piedra basáltica de la
cultura Olmeca, nuestra herencia histórica, artística y cultural. Lo que nos mantiene orgullosos
de nuestros ancestros, lo que nos da identidad como tabasqueños.
Por otro lado, es importante señalar también que el gobierno federal a través del INAH debe
trabajar de forma conjunta con el gobierno del estado para proteger nuestro acervo arqueológico
e histórico. Es necesario que la federación notifique e involucre a nuestro estado en cualquier
decisión de hallazgo, protección, resguardo o exhibición del tesoro arqueológico estatal.
Conclusión
A manera de conclusión, quiero exponer que es imprescindible que nuestras autoridades legislen
decretos o leyes que defiendan de las depredaciones nuestro acervo cultural, y que las mismas
autoridades hagan cumplir las leyes que protejan nuestro patrimonio histórico.
Que es necesario fortalecer los conocimientos de la currícula educativa de los niveles de
educación básica, media y superior en nuestro estado. No podemos soslayar estos hechos, que si
bien han sido aislados, denotan la nula importancia que tiene para la sociedad el que se dañe y
deteriore nuestro patrimonio histórico.
Es obligatorio que se legisle para que las autoridades correspondientes penalicen como delito
grave el atentar en contra de nuestro patrimonio arqueológico e histórico. No permitir que
vándalos irrumpan en un recinto cultural y degraden el acervo estatal, y con la mano en la
cintura, pagando una fianza salgan libres, por no considerarse como delito grave.
Es necesario que se reglamenten los accesos de la población hacia los lugares públicos que
resguarden el acervo cultural de la nación.
No permitamos que se suspendan de la currícula educativa materias afines a despertar el interés
y el amor hacia nuestras raíces culturales. Exijamos a las autoridades educativas que se
replanteen nuevos esquemas de aprendizaje acordes con la realidad social en la que vivimos.
Como sociedad, demos valor a las asignaturas que tengan que ver con la identidad nacional.
Pidamos a nuestros gobernantes mayores acciones encaminadas a satisfacer nuestra demanda de
leyes congruentes con la defensa de lo autóctono, de lo rural y de lo indígena.
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Debemos defender nuestro pasado, eso es lo que nos da identidad territorial y social, sobre todo
en este mundo globalizado que nos toca vivir, en donde pasamos a ser un minúsculo puntito en
el ciber espacio de la tecnología.
Muchas gracias.
Titulo
Los bienes materiales (fuentes, monumentos, plazas, parques y jardines): como
proteger la herencia cultural e histórica que forma parte del patrimonio de la población
en general
AGUIRRE ALVAREZ, ALEJANDRO
Domicilio: Macuspana, Tabasco
Celular: 9932168870
[email protected]
Temática: Propuestas y recomendaciones para una Legislación Cultural:
Responsabilidades y funciones de las autoridades competentes
Currículum
Cursó la licenciatura en Historia en la DACSyH de la UJAT. Participó en el Programa
Científicos en México, pasado y presente patrocinado por el Instituto de Investigaciones
Sociales de la UNAM. Concursa en un evento local de cuento breve con la obra Las
letras engreídas realizado por un reconocido periódico local. Tiene publicado un artículo
titulado La aculturación religiosa en la gaceta La versión. Colaboró en la investigación y
redacción del libro Semblanza de un sabio naturalista tabasqueño José Narciso
Rovirosa. A trabajado como Docente y guía de museos. Actualmente tiene una obra en
vías de publicación por el Instituto Estatal de Cultura.