10 Diag 6619 39 15/2/07 13:04 Página 1 Diagnóstico a primera vista J.L. Fortes Álvarez. Especialista en Medicina de Familia y Comunitaria. Consultorio de Saceruela. EAP de Abenójar. SESCAM. Ciudad Real. España. Caso clínico Varón de 45 años, que consulta por la presencia de 2 tumoraciones de 15 mm de diámetro en el cuero cabelludo en la zona parietotemporal, de 2 años de evolución. Dichas tumoraciones son de consistencia elástica, están bien delimitadas, no son dolorosas, tienen menos pelo que en el resto del cabello y no tienen poro de comunicación con la epidermis (fig. 1). Figura 1. Con los datos clínicos expuestos, ¿cuál es el diagnóstico más probable? – Quiste sebáceo. – Quiste infundibular. – Quiste tricolémico. – Cuerno cutáneo. – Tricoblastoma. Comentario 60 JANO 23 DE FEBRERO-1 DE MARZO 2007. N.º 1.639 . www.doyma.es/jano fica, con telangiectasias superficiales y alopecia en la zona donde asienta el quiste. En los quistes tricolémicos no hay poro de comunicación con la epidermis, salvo en un quiste tricolémico llamado quiste híbrido, cuyo poro representa el infundíbulo folicular preexistente. A diferencia de un quiste infundibular, la infección del tricolema es muy rara al no haber poro de comunicación. La rotura espontánea no es rara y cuando ocurre puede desencadenar una reacción inflamatoria, formar un granuloma de cuerpo extraño y dividirse en fragmentos, dando la impresión de que hay varios quistes pequeños donde antes sólo había uno de mayor tamaño. Al haber un plano de clivaje entre la pared del quiste y la dermis adyacente, el quiste tricolémico suele extirparse con facilidad, no se rompe, por lo que se extrae entero. J Diagnóstico: Quiste tricolémico. Se trata de un quiste tricolémico, vulgarmente llamado “lobanillo”. El 90% de los quistes tricolémicos se localiza en el cuero cabelludo, y son mas frecuentes en la mujer. Hay una relación familiar en estos pacientes, y se sugiere que pueda tratarse de una herencia autosómica dominante, aunque recientemente se ha descrito un caso de mosaicismo cromosómico. Aunque al quiste tricolémico se considera frecuentemente como quiste sebáceo, las glándulas sebáceas no están implicadas en su histogénesis. Puede ser que el origen histológico del quiste tricolémico se desarrolle a partir de la vaina radicular externa en el istmo de un folículo en catagen. El contenido del quiste consiste en una queratina ortoqueratósica, eosinófila, que se comporta de manera similar a la queratina que se produce en la vaina radicular externa en el istmo, por eso se intuye que sea ésta su procedencia. Clínicamente suele presentarse en forma de masa cupuliforme, normalmente hemisférica, que hace prominencia sobre la piel del cuero cabelludo, pues ahí es donde normalmente se encuentra en la mayoría de los casos. Son de consistencia elástica y de contorno redondeado y delimitado. El diámetro suele oscilar entre 5 y 10 mm, aunque hay casos descritos de un tamaño considerable en personas de edad avanzada, con una importante repercusión estética. En estos casos de gran tamaño, la piel suele estar muy distendida, de apariencia atró-