LIBRO DEL DEUTERONOMIO PENTATEUCO PBRO. CARLOS LARA ALUMNO: SAMUEL CANEL AJQUEJAY Primero de Teología (2do semestre) GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, OCTUBRE DE 2020 ÍNDICE INTRODUCCIÓN ......................................................................................................... 3 1. ESTRUCTURA DEL DEUTERONOMIO ............................................................ 4 2. DEUTERONOMIO 6, 4-7 ....................................................................................... 5 3. APLICACIÓN PASTORAL EN LA VIDA............................................................ 6 CONCLUSIÓN .............................................................................................................. 7 REFERENCIAS BIBLOGRÁFICAS ........................................................................... 7 INTRODUCCIÓN Lo que me motivó a leer este libro del Deuteronomio es que abarca los discursos finales de Moisés a los hijos del pueblo de Israel antes de que ingresaran en la tierra de Canaán con Josué como guía. El título del libro del Deuteronomio significa “segunda ley” o remodelación de la ley”; en los discursos finales Moisés les insistió a los israelitas muchas de las leyes y mandamientos que constituían parte de su acuerdo con el Señor. Lo que Moisés hizo es exhortar a los israelitas a recordar y guardar su deber al enseñarles las consecuencias de obedecer o desobedecer las leyes y los mandamientos del Señor. El libro del Deuteronomio, ayuda a aprender la importancia de recordar las experiencias espirituales pasadas y de acordarse de guardar las leyes, los acuerdos y los mandamientos del Señor, para que puedan tener las mismas promesas de bienestar y protección que tuvo el antiguo Israel. Deuteronomio usa la misma base que tienen los libros como Éxodo, Levítico y Números, fortalecen la aplicación en el compromiso que transmiten, especialmente en los Mandamientos de Dios. Al comenzar a describir los acontecimientos y las enseñanzas de los otros relatos Moisés tuvo la necesidad de subrayar la importancia de la misión en la peregrinación con el pueblo de Dios. Al descubrir la sagrada Escritura con una mirada nueva, manifestamos que la misión es muy importante para Dios, ya que a través de la misión Dios ofrece la salvación y ésta se alcanza cumpliendo sus mandatos. El libro del Deuteronomio es sin lugar a dudas uno de los más significativos del Antiguo Testamento, por ello, en la vida de la Iglesia Católica, es considerado como el eje central. Este escrito permite comprender no sólo la teología del pentateuco, sino también la Historia Deuteronomista (Josué, Jueces, 1-2 Samuel, 1-2 Reyes), así llamada por estar comunicado desde los planes teológicos del Deuteronomio y los profetas, como Oseas y Jeremías. La ley, profecía, sabiduría, y los grandes mecanismos que acceden la Biblia hebrea, la cual se dan cita en esta obra importante. 3 1. ESTRUCTURA DEL DEUTERONOMIO Esta última obra del pentateuco inicia con la voz del escritor que, a su vez, vive en el otro lado del Jordán, ubicado a nueve kilómetros del mar muerto, en la orilla del río Jordán se encuentra Betania de transjordania, es decir, el lado de la tierra prometida donde estuvo el pueblo y su líder en los campos de Moab, frente a Jericó (Dt 1,1.5; Dt 34,1). Este libro del pentateuco forma principalmente una explicación homilética de la ley, es uno de los escritos más teológicos del Antiguo Testamento. Esta obra ofrece un panorama de la alianza y de la vida según la unión del pueblo de Israel con Dios; al mismo tiempo va a insistir en el concepto veterotestamentario de revelación y palabra de Dios. El Deuteronomio se puede explicar cómo una obra valida con su introducción y su conclusión, a las que se añade una herramienta homilética y pastoral de distintas razas. La estructura de este libro se parece mucho a la del Éxodo, sin largas secciones o apartados. (SU EMINENCIA AGUSTIN CARD BEA, 1971, pág. 150) El libro del Deuteronomio consta de tres importantes discursos pronunciados por Moisés el mes undécimo del año cuarenta de la salida de Egipto, poco antes de su muerte. Se cierra el libro con algunos complementos de carácter histórico, el principal de los cuales se refiere a la muerte y entierro del gran profeta y representante. (STEINMUELLER, 1950, pág. 18). El libro entero, sin embargo, parece ser una larga reflexión de Moisés que se dio, incluso, en el mismo día de su muerte en la tierra de Moab, después de haber contemplado toda la tierra que Dios estaba dispuesto a dar a su pueblo (cf. Dt 34,1-12). Es Así, entonces como el libro fue concebido como el testamento que uso Moisés, antes de morir, dejó su pueblo, que estaba a punto de entrar y tomar posesión de la tierra prometida. En este documento está la exigencia de la fidelidad, sin la cual el pueblo no durará en la tierra. Porque el mismo relato describe que el pueblo deberé permanecer en fidelidad a Dios que prometió estar con su pueblo, y lo ha cumplido, ahora es el pueblo que debe honrar a Dios siendo fiel a su alianza y esta enseñanza que dejó Moisés el envidado de Dios lo tienen que seguir transmitiendo a todos los pueblos y a sus hijos. Todo lo que Moisés hizo y enseñó debe ser puesto en práctica, con el fin de prolongar su vida en la tierra prometida y con el objetivo que el pueblo cumpla los mandatos de Dios. El libro puede distribuirse en introducción, tres discursos de Moisés, su bendición sobre el pueblo y la conclusión, en el que relata la muerte de Moisés, en la que anuncia a Josué como sucesor en la dirección del pueblo. La introducción, que se une al final del libro de los Números porque los hijos de Israel acamparon en los campos de Moab, orienta todo el contenido al decir, “estas son las palabras que dirigió Moisés a todo Israel” (Dt 1,1 -5). Los tres discursos se inician por una fórmula similar a la fue utilizada en la introducción, “estas son las palabras,” abriendo el primer discurso (Dt 1.6-4,40); “Esta es la Torá”, abriendo el segundo discurso (Dt 4.41-49; 5,1-28,68); “Estas son las palabras de la alianza”, abriendo el tercer discurso (Dt 28,69- 32,52). Sigue la bendición introducida por la frase “esta es la bendición” (Dt 33) y el libro termina con la historia de la muerte de Moisés (Dt 34). El libro, abierto con las palabras de Moisés a todo Israel, termina con todo el pueblo llorando por la muerte de su incomparable líder. En el libro de Deuteronomio, se destacan importantes temas teológicos: la salida de Egipto, la alianza de Dios con el pueblo y la libre elección de éste; el don de la tierra; el don de la ley; la centralidad del único lugar de culto. El libro en su conjunto, es una síntesis teológica de los principales hechos que se narran desde Génesis hasta Números. Las diversas referencias a los patriarcas y a la salida de Egipto permiten que el tejido de la narrativa prosiga hacia el gran objetivo final: entrar y tomar posesión de la tierra prometida. El contenido de los discursos de Moisés pretende alertar a los hijos de Israel sobre las seducciones que encontrarán después de entrar y tomar posesión de la tierra. Por eso el tono de los discursos es exhortativo. Se dice lo que debe hacer y lo que definitivamente debe ser evitado. La ley por lo tanto, instrucción de Moisés, es el parámetro. 4 2. DEUTERONOMIO 6, 4-7 Este texto del Deuteronomio tiene un elemento importante que va relacionado con el evangelio de san Mateo, donde Jesús lanza la pregunta: ¿Cuál es el mandamiento principal de la ley? Hay que subrayar que Jesús vivía entre los levitas y éstos no perciben la ley como un conjunto de reglas impuestas con sus respectivas condenas, sino como una palabra que transmite vida de parte de Dios que les muestra el camino de la vida. La lectura del Deuteronomio habla del mayor y primer mandamiento de la ley, al referirse al pueblo de Israel les exhorta a tener la actitud de la escucha, para obedecer a Dios y amarlo a él con todo el corazón, con todo el alma, con todas las fuerzas y las palabra que el pueblo de Israel recibió de Dios, lo siguen recibiendo los pueblos que peregrinan en la tierra y estas palabras no deben quedarse en el aire, cada pueblo lo tiene que guardar en su corazón y transmitirlo a las generaciones futuras que Dios sigue iluminando la vida de cada uno con su palabra. Los mandamientos son la principal guía que tenemos para recorrer el camino que va hacia la vida eterna: “Amar a Dios sobre todas las cosas”, tiene un significado claro si queremos ser felices se debe permanecer fiel a nuestro Dios, cumpliendo los mandamientos, amando a él como único Dios. Lo que escuchamos en el Deuteronomio no es una obligación, sino una respuesta al amor de Dios y a su palabra que es vida. Por eso la lectura inicia con el relato fundamental “Escucha a Dios, medita su palabra, recibe su consuelo, deja que Dios te guie por el buen camino, acepta la penitencia, presta atención al amor de Dios y cuando respires agradece a Dios por todo el amor que te ofrece y decide adorarlo solo a Él”. En aquel tiempo fue el pueblo de Israel, ahora son los pueblos de esta generación los que necesitan ser formados, para tener una espiritualidad que se centre en los mandamientos de Dios, solo así se podrá acercar a los pueblos a la fidelidad de su compromiso de amar a Dios sobre todas las cosas. No hay que olvidar la importancia de estos dos mandamientos, los cuales se deben mantener en el corazón y llevarlo presente durante todos los días de la vida. Sin duda alguna, es necesario transmitir la fe, sobre todo en una sociedad tan secularizada, pero esa fe debe estar centrada en los dos mandamientos, amar a Dios y al prójimo, lo cual es un deber de todos ya que así lo instituyó el mismo Jesucristo y lo ha dejado para que se enseñase de generación en generación. Este mandamiento es el que debe regir la vida de la Iglesia y se eso se cumple le garantizará solidez y extensión. Esta lectura del Deuteronomio anuncia que hay un solo Dios y no se trata de un monoteísmo superficial, sino de dar a conocer la importancia de un Dios único y todopoderoso, es el Dios que orienta al pueblo hacia un principio y valores que no es netamente humano, sino divino. La creencia amorosa de un lugar, no es un mandato concretamente; es un fundamento que se empieza a construir con Dios, un principio de la vida en sociedad; lo que describe el Deuteronomio es algo fundamental en el que se hace una manifestación de fe, el hecho más importante para la población de Israel, es una fe, de una nación que acoge, oye y responde a la palabra de Dios. Dios es el centro de todo y para que el pueblo esté junto a él es necesario que lo ame y lo acepte como único Dios; al aceptarlo también es menester que cumplan sus mandatos, los cuales se revelan en la Palabra. Dios envió a Moisés a transmitir su mensaje al pueblo de Israel, porque lo que Dios quiere es que su pueblo lo escuche y que lo invoque como Dios de esperanza. Las comunidades que peregrinan en la tierra tiene la misión de transmitir el nombre de Dios en aquellas regiones que se desviaron del camino de Dios, dándole lugar a otros dioses que los ha llevado por el camino de la infidelidad, como se escucha en libro del Deuteronomio las palabras que vienen de Dios, se deben de guardar en el corazón y ponerlo en práctica. A las generaciones del siglo XXI se les debe hacer saber que solo hay un Dios, que es dueño de todo, y es un Dios que lleva al pueblo al plan salvífico que es el premio de la vida eterna. 5 3. APLICACIÓN PASTORAL EN LA VIDA Establecer desde la Sagrada Escritura la clave de la teología, para que la fe lleve a la persona una vida espiritual de la escucha, es muy compleja, en este caso en el libro del Deuteronomio lo que se busca es comprender las respuestas teológicas y didácticas para proponer unos lineamientos, para fundamentar la vida laical. En la pastoral está la misión de la Iglesia de poner la palabra de Dios en la boca y el corazón del pueblo, de tal forma que lo transmitido se convierta en semilla de esperanza para la vida de las personas. En la pastoral se presenta como algo imprescindible el hecho de fundamentar los cursos bíblicos con una espiritualidad cercana, que ayude a las personas a tener un mejor acercamiento a Dios, porque hoy en el contexto muchos van por otros caminos que no es el camino correcto. El esfuerzo de enseñanza al que está llamado una comunidad parroquial, se necesita realizar un camino sincero descubrir lo que la palabra de Dios quiere para todos y luego aplicarlo en la vida de los demás. ¿Al preguntarnos porque la pastoral Bíblica? La respuesta tiene ser clave. Conocer y anunciar la palabra de Dios de manera explícita y viva que produzca y alimente la fe, que ilumine la vida del hombre de hoy y que sea cimiento en la vida de la Iglesia. Una pastoral Bíblica que exhorte a los que la integran, para que les fortalezca el acercamiento a la palabra de Dios y al acercarse a la palabra de Dios conserven una actitud de escucha, como lo escuchamos en el texto del Deuteronomio dirigido al pueblo de Israel con esta frase: “escucha”, es aceptar el plan de Dios, cumpliendo su mandato. En este siglo XXI para la vida de la Iglesia es necesario la praxis de la escucha, solo así se podrá orientar la vida conforme a la voluntad de Dios y nacerá el deseo de una profundización en la teología. Si esto se lleva a cabo se podrá buscar personas más comprometidas con la Iglesia siendo sal y luz en el camino de otros laicos, que necesitan ser guiados hacia el bien. En la praxis se debe de hacer realidad la misión a la que cada Bautizado está llamado a vivir, por medio de una actitud de afrontar las circunstancias que suceden en los pueblos e iluminarlas según la óptica Divina, de tal forma, que se pueda ayudar al prójimo, y se logre hacer realidad el anhelado cambio de ser Iglesia encerrada a una Iglesia en salida, que ame a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a sí mismo. Todos los Bautizados tienen una parte activa en la Iglesia católica, no simplemente están invitados a evangelizar el mundo, sino también a ser testigos de Cristo, en medio de la humanidad. Los laicos tienen que educar con el esfuerzo de participar del diálogo que van a promover con el mundo y con los hombres de cualquier creencia. Ser testigos es tener los mismos sentimientos que Cristo tuvo, efectos de compasión, fue cercano a la gente, ahora en este tiempo de pandemia como seminaristas tenemos el compromiso de escuchar a la gente, sentir el dolor que ellos llevan, por los fracasos que ha dejado la pandemia. Muchos por estos fracasos se han olvidado de Dios, perdieron el sentido de su existencia, muchos ya no tienen la misma actitud de oración como antes, allí es donde viene el trabajo del discípulo primero saber escuchar, tener la iniciativa de dialogar, hacer saber que Dios sigue manifestándose en la vida el ser humano a pesar de la situación actual. En nuestra Iglesia hay personas que le prestan mayor atención a las estructuras del templo, o quizá piensan que la misión de la Iglesia es únicamente ad intra, olvidándose que existe una misión ad extra la cual exige compromiso profético, es urgente que todos vean como algo posible la anhelada salvación y que eso les exija una mejor actitud en su vida diaria. La profundización en este estudio debe de propiciar una escucha atenta a la palabra de Dios, para una transformación personal y social. Nunca debe olvidar el cristiano que Dios es fiel a su promesa, que siempre está al lado de su pueblo. . 6 CONCLUSIÓN Al volver a describir los acontecimientos de la historia fundamental del pueblo de Israel y la entrega de los mandamientos por parte de Dios, el libro del Deuteronomio relata claramente el valor de la responsabilidad en el cumplimiento de la alianza de Dios con su pueblo. Los textos habituales del libro son la necesidad que tiene el pueblo de confiar en Dios, obedecer sus mandamientos, acudir a él para recibir su auxilio. Si el pueblo abandona estos mandatos caería en idolatría, adorando a otros dioses falsos que el mismo ser humano lo crea. A veces estos contenidos pueden sonar inciertos o tipos ideológicos originalmente, se dan en figuras concretas y prácticas en la labor y en la vida diaria. Cuando las personas confían en Dios, tienen la actitud de agradecer por las cosas buenas que reciben, como los dones, la sabiduría, el entendimiento, además reconocen sus limitaciones y buscan que Dios les guie por el buen camino. Tener presente los mandatos de Dios implica vivir respetando a los demás, guardar silencio en los días de preceptos, ejercer con obediencia el compromiso para alcanzar la justicia por el bien común, trabajar por la misión para servir a los demás sin ningún interés personal, ayudar a las familias fortaleciendo la unidad entre ellos. Dios es bondadoso y a pesar de las muchas infidelidades del pueblo, pone los recursos necesarios para que cada persona sirva con disponibilidad al pueblo. El Deuteronomio da la enseñanza para formarnos en vivir los mandamientos en amar a Dios y a los demás, de manera tal, que lo que Dios pone a nuestro favor no sea para nuestra condenación, sino para alcanzar el plan de salvación. Al concluir este texto, el escrito fue dirigido a los pueblos antiguos, ahora es dirigido a cada uno de nosotros y a nuestro pueblo en particular, el mismo debe de ayudar a escuchar a Dios y permanecer fiel a su palabra. REFERENCIAS BIBLOGRÁFICAS Fernades, L. A. (2017 ). Verebete Sobre pentateuco. Brasil. STEINMUELLER, J. E. (1950). INTRODUCCIÓN ESPECIAL AL ANTIGUO TESTAMENTO. Buenos Aires: DESCLÉE, DE BROUWER. SU EMINENCIA AGUSTIN CARD BEA, S. (1971). Comentario Biblico de "San Jeronimo" Tomo 1. Madrid: Ediciones cristiandad Huesca, 44 Madrid. 7