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Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección General de Publicaciones
* VERSION PRELIMINAR SUSCEPTIBLE DE CORRECCION UNA
VEZ CONFRONTADO CON EL ORIGINAL IMPRESO
(S-3500/12)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación
DECLARA
Su recordatorio a la aparición del primer número de la revista “Caras y
Caretas”, fundada por José Álvarez -Fray Mocho- hecho ocurrido el
08 de Octubre de 1898.
Marina R. Riofrío.FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
El 8 de octubre de 1898 aparece el primer número de Caras y
Caretas, una revista que supo combinar el humor, la crítica y la
seriedad intelectual. La publicación se destacaba por su llamativo
diseño, donde abundaban dibujos de gran calidad, caricaturas y
publicidades ingeniosas. Por la revista pasaron varios escritores y
periodistas significativos.
El fundador de la revista fue Eustaquio Pellicer (1859-1937) nacido en
Burgos, España y durante los primeros años, dos dibujantes
representantes de la caricatura española ilustraron las páginas de la
publicación: Manuel Mayol (1865-1929) y José María Cao (18621918).
Con un comienzo muy modesto, y después de superar algunas
dificultades que implicaron dos postergaciones en su lanzamiento, la
revista se agotó con una primera tirada de 10.000 ejemplares. Una
segunda edición de 5000 ejemplares también se vendió en su
totalidad. Las cartas llovieron sobre la redacción. "¿Que si estamos
satisfechos del éxito? -decía Pellicer- Más que satisfechos,
asombrados "
Caras y Caretas alcanzó en poco tiempo una inmensa popularidad, a
lo largo y a lo ancho del país, penetrando en el alma de todas las
clases sociales con las famosas caricaturas de Cao y Mayol, las
pinceladas costumbristas de "Fray Mocho" y los divertidos editoriales
de Pellicer. Todos ellos retrataron, con singular frescura, los diferentes
tipos humanos que conformaban la fauna porteña y, con envidiable
humor, el hervidero social de una ciudad que crecía
desordenadamente por la llegada de extranjeros de toda laya, que
traían los modismos y los hábitos de sus países de origen.
En la revista abundaban los avisos publicitarios donde se notaba la
vertiente humorística y artística con la que contaba la publicación.
Comenzó abarcando el 25 por ciento del total de las páginas y, desde
entonces, acusó un progresivo aumento que, con pequeños altibajos,
alcanzaron su punto culminante en 1920 donde el material publicitario
ocupaba la mitad de la revista.
Es sabido que fue Caras y Caretas la pionera en introducir historietas
en los medios impresos argentinos y tal vez en toda Latinoamérica.
Caras y Caretas se autodefinió como "semanario festivo, literario,
artístico y de actualidad". Aparecía los sábados y su redacción,
dirección y administración se ubicaba en San Martín 284. Un dato por
demás curioso: el precio de tapa comenzó siendo de 0,25 ctvs; a partir
del número 13 bajó a 20 y así se mantuvo hasta 1939.
La revista constaba de dos portadas. Ambas contenían ilustraciones
sobre hechos de actualidad. La primera estaba impresa a color y la
segunda, en blanco y negro. Generalmente, estas portadas eran
separadas por páginas que contenían noticias de índole internacional
y culturales, además de la publicidad, que iba insertada -salvo en los
últimos años- en las primeras y en las últimas páginas.
En cada edición se abordaban una gran variedad de temas entre los
que podemos citar: las campañas electorales, el proceso de
modernización y reforma militar, la política impositiva, los
presupuestos nacionales y hasta los problemas fronterizos con Chile.
Caras y Caretas en el Senado: El 27 de Junio de 1995 por decreto N°
DP-216 de este H. Cuerpo se acepta la donación del Licenciado D.
Ricardo Esteves de 41 dibujos en tempera originales con caricaturas
de los artistas D. Víctor Valdivia, D. Agustín Caballe, D. Julio Málaga
Grenet y D. Alejandro Sirio.
Estos excelentes trabajos fueron cuidadosamente enmarcados,
patrimoniados y se realizó una investigación sobre cada uno de los
autores y de las publicaciones de la revista que aparecieron gracias a
la gran colección con que cuenta la Biblioteca del Congreso, que ya
los tiene microfilmados y para la consulta del público y que en la
actualidad se exhiben en el Museo Permanente del Senado de la
Nación.
En virtud de lo expuesto, solicito a mis pares la aprobación del
presente proyecto de declaración.
Marina R. Riofrío.-
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