KANT., CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA. Prólogo de la segunda edición.(1787). Índice: 1.- Sobre si la Metafísica ha alcanzado el seguro camino de la ciencia. 2.- La Crítica de la razón pura como un tratado sobre el método, propedéutico, de la Metafísica. 3.- Uso teórico y uso práctico de la razón 4.- Los resultados de la filosofía Crítica no afectan a las creencias religiosas o morales del común de la gente. 5.- Filosofía crítica se opone a dogmatismo, pero no a “procedimiento dogmático” en las ciencias. 1.- Sobre si la Metafísica ha alcanzado el seguro camino de la ciencia. Las disciplinas que han alcanzado el seguro camino de la ciencia se distinguen: a) porque no se quedan estancadas. b) porque no necesitan revisar continuamente sus logros. c) porque sus practicantes se ponen de acuerdo sobre los resultados alcanzados. 1.1. Ciencias a priori que no se ocupan de objetos: 1.1.a.- La lógica ha alcanzado ese camino seguro gracias a Aristóteles. Lo que se ha ido añadiendo desde entonces han sido aclaraciones (muchas veces desorientadoras, porque incluyen elementos psicológicos, antropológicos o metafísicos en la Lógica). La Lógica no se ocupa de objetos, sino de la razón misma, por eso es más fácil que haya alcanzado el seguro camino de la ciencia. 1.2. Ciencias a priori que sí se ocupan de objetos: Las ciencias de objetos pueden ser teóricas o prácticas, según la relación del conocimiento con sus objetos. En el caso de las ciencias teóricas, pueden ocuparse enteramente a priori de sus objetos o no enteramente a priori. Un ejemplo de las primeras es la Matemática, y uno del segundo caso es la Física. 1.2.a.- Ciencias teóricas 1.2.b.- Ciencias prácticas Nos ocuparemos de las ciencias teóricas de objeto: 1.2.a.1.- La Matemática ha alcanzado ese camino seguro gracias a Tales de Mileto, quien descubrió que para saber algo a priori en Matemáticas debía seguir un método consistente en extraer los conocimientos matemáticos de lo que la razón había puesto en los conceptos {es deducir teoremas a partir sólo del significado de los conceptos, sin añadir nada de origen empírico.} 1.2.a.2.- La Física ha alcanzado ese camino seguro, gracias a Galileo, quien basó su método en buscar en la naturaleza lo que la razón pone en ella. {se refiere al método hipotético-deductivo} 1.2.a.3.- La Metafísica pretende conocer a priori cómo son las cosas en sí mismas, usando sólo conceptos . A pesar de ser la disciplina más antigua, todavía no ha encontrado el seguro camino de la ciencia. Ello se debe a que no ha encontrado su método, y requiere que el que ha empleado hasta ahora sufra un cambio, una revolución. Hasta ahora se ha supuesto que todo nuestro conocer se debe regir por los objetos, y esto impide que podamos conocer a priori cómo son las cosas. El cambio de método, la revolución copernicana, consiste en suponer “que los objetos deben conformarse a nuestro conocimiento”, y así cabe explicar que sea posible conocer a priori dichos objetos antes e independientemente de que nos sean dados en la experiencia; en efecto, “...sólo conocemos a priori de las cosas lo que nosotros mismos ponemos en ellas.” Esta prueba de cambio de método se puede hacer referida a la intuición y también al concepto del objeto, de tal manera que se puede explicar que pueda haber conocimiento a priori sobre la intuición o sobre los conceptos si suponemos que el kt_1.odt 1 perpersanmat objeto viene regido por la actividad del sujeto, pero sea imposible explicarlo si se supone que es el conocimiento el que viene determinado enteramente por el objeto. Suponiendo que el objeto viene regido por el sujeto, es explicable la posibilidad de un conocimiento a priori de la naturaleza y, además, nos permite explicar algunas leyes de la naturaleza. Este cambio de método tiene algunas consecuencias extrañas, a saber: que limita nuestra capacidad de conocer a priori al ámbito de los fenómenos, de los objetos, de lo susceptible de ser experimentado, de lo condicionado. Por ello, reconoce la incapacidad de la razón pura, en su uso teórico, para conocer las cosas en sí mismas, los noúmenos, lo incondicionado; pero ese es precisamente el objetivo de la Metafísica. Por tanto, es inapropiado hacer Metafísica usando la razón en su vertiente teórica; lo incondicionado, lo suprasensible, las cosas en sí están fuera de la cobertura de la razón teórica, no puede conocerse, aunque sí pueden pensarse. 2.- La Crítica de la razón pura como un tratado sobre el método, propedéutico. La Crítica de la razón pura {en su uso teórico} es un tratado sobre el método, una propedéutica de la Metafísica, pero no es parte de la Metafísica. A pesar de ello, tiene consecuencias metafísicas: porque establece los límites de la Metafísica {del conocimiento a priori referido a los fenómenos}, y porque reconoce que la Metafísica es un sistema. Utilidad negativa de la Crítica: No se debe traspasar el límite de la experiencia con la razón especulativa. Si la razón teórica sobrepasa sus límites, entraría en contradicción con ella misma. Utilidad positiva de la Crítica: Si se sobrepasan tales límites, no se amplía el uso teórico de la razón, sino que se suprime el ámbito que corresponde al uso puro práctico de la razón. Este uso práctico es necesario para la razón, pues es la única salida que la razón tiene para satisfacer su impulso natural de conocer lo incondicionado, lo que está más allá del ámbito de los fenómenos. Para satisfacer tal impulso, la razón cuenta con el uso práctico, y si extendemos el uso teórico al ámbito de lo incondicionado, el uso práctico se queda sin una de sus tareas propias. 3.- Uso teórico y uso práctico de la razón En la parte Analítica de la Crítica se demuesta que el espacio y el tiempo son formas de la intuición sensible, condiciones de la existencia de las cosas en cuanto fenómenos; también se demuestra que sólo pueden darse conceptos tales que haya intuiciones sensibles que puedan caer bajo ellos; también que no podemos conocer los objetos como cosas en sí mismas, sino en cuanto fenómeno; que todo conocimiento especulativo de la razón está limitado a los simples objetos de la experiencia, pero que, si no podemos conocer las cosas en sí mismas, sí podemos, al menos, pensarlas. Si no hiciéramos la distinción entre fenómenos y noúmenos, podríamos aplicar a los noúmneos los principios válidos sólo para los fenómenos, y llegaríamos a contradicciones,como la de reconocer que hay libertad y que es imposible la libertad, lo que implicaría una contradicción de la razón consigo misma. Pero si reconocemos que es imposible la libertad en el mundo de los fenómenos y que es posible en el de los noúmenos, se evita tal contradicción. No podemos conocer la libertad, pues el conocimiento está referido a los fenómenos, pero sí puedo pensarla, concebirla, pues “su representación no encierra en sí contradicción ninguna”. Esta representación es intelectual, distinta de la representación sensible. Esta distinción implica que los conceptos puros del entendimiento se aplican a las representaciones sensibles, pero no a las intelectuales {las referidas a noúmenos}. Si no hiciéramos tal distinción, entonces la moral, el uso práctico de la razón, que nos informa de que hay libertad, que la voluntad es libre, entraría en contradicción con el uso teórico de la razón, que nos dice que no hay libertad, que nada es libre. Pero conocemos a priori algunos principios morales, luego son necesariamente verdaderos, igual que son necesariamente verdaderos los principios teóricos, uno de los cuales es que no hay libertad, sino necesidad de causas y efectos. Esa aparente contradicción sólo se puede romper reconociendo que el conocimiento a priori de la razón teórica se está refiriendo a los fenómenos, donde reconoce que no hay libertad, y que el conocimiento a priori de la razón práctica se refiera al ámbito de los noúmenos, donde sí hay libertad -al menos la voluntad es libre. kt_1.odt 2 perpersanmat Esta distinción permite la utilidad positiva de la Crítica, dejando abierta la posibilidad de pensar algo del ámbito de los noúmenos, bien que a través del uso práctico, no del teórico. De esta manera podemos acceder a los tres postulados de la razón práctica (libertad, alma y Dios). Cuando extendemos el uso de los principios teóricos más allá de los fenómenos, tomamos lo que en realidad es un noúmeno en un fenómeno. Suprimiendo así el dogmatismo de la Metafísica que usaba métodos pre-críticos, se suprime la incredulidad en cualquier moral, pues la Metafísica no precedida de una crítica del uso teórico de la razón que reconozca los límites de ésta, la Metafísica dogmática, se extralimita e incurre en contradicciones, o suprime el ámbito propio del uso práctico de la razón, y con esto toda moralidad. Una crítica de la razón pura pone en evidencia los errores de los metafísicos acríticos, lo que se hará en una dialéctica de la razón, eliminando así una fuente de errores en materia moral y religiosa. 4.- Los resultados de la filosofía Crítica no afectan a las creencias religiosas o morales del común de la gente Esta limitación reconocida al uso teórico de la razón no tendrá consecuencias perniciosas sobre las creencias morales y religiosas de la gente, pues esas creencias no las han obtenido de las enseñanzas de las escuelas filosóficas, sino que creen en Dios porque ven orden en el mundo, y en la inmortalidad del alma porque tienen la esperanza de una vida futura, y en la libertad porque conocemos que tenemos obligaciones, y que éstas son distintas de nuestras inclinaciones. 5.- Filosofía crítica se opone a dogmatismo, pero no a “procedimiento dogmático” en las ciencias. La filosofía crítica se opone al dogmatismo, a la pretensión de conocer aplicando principios racionales obtenidos a priori a cualquier cosa, sin haber examinado si tal aplicación es legítima o no. La filosofía crítica no se opone al “procedimiento dogmático”, pues reconoce que la ciencia ha de proceder dogmáticamente, es decir, “demostrando con rigor a partir de principios a priori seguros” Lógica: conocimiento que expone detalladamente y demuestra con rigor las reglas formales de todo pensamiento, sea a priori o empírico. En la Lógica, el entendimiento no se ocupa más que de sí mismo y de su forma. La Matemática es un conocimiento teórico a priori que determina sus objetos enteramente a priori. La Física determina sus objetos parcialmente a priori. La Metafísica, conocimiento especulativo de la razón, Nota: El conocimiento a priori exige razón, y ésta tiene dos usos, dos formas de relacionarse con sus objetos: el teórico, dirigido a determinar el objeto y su concepto; el práctico, referido a su objeto para realizarlo. Primero estudiaremos la parte pura del uso teórico de la razón (“la parte en la que la razón determina su objeto enteramente a priori”). “ El conocimiento de un objeto implica el poder demostrar su posibilidad, sea porque la experiencia testimonie su realidad, sea a priori, mediante la razón. Puedo, en cambio, pensar lo que quiera, siempre que no me contradiga, es decir, siempre que mi concepto sea un pensamiento posible, aunque no pueda responder de si, en el conjunto de todas las posibilidades, le corresponde o no un objeto.” (Nota de Kant, B,XXXVII) kt_1.odt 3 perpersanmat