Desarrollar el tema del conocimiento en Kant. Ideas clave: Fundamentación de la ciencia. Síntesis racionalistas-empiristas. Juicios de la ciencia. Crítica de la razón pura o Formas a priori o Categorías o Ideas Conclusiones finales sobre el conocimiento y la cosa en sí. Después de la crítica de Hume al principio de causalidad, la ciencia natural había quedado falta de plena fiabilidad como un conocimiento probable. Sin embargo, para Kant la validez de la ciencia es un hecho evidente, y por eso su labor consistirá en hallar su fundamentación. Kant aceptará que el origen del conocimiento es la experiencia, pero no que todo conocimiento tenga su origen en ella, ya que entonces no sería un conocimiento estricto y necesario. Para ello, es preciso que el fundamento sea a priori, independiente de la experiencia. En la Crítica de la razón pura, Kant demostrará cómo son posibles los juicios sintéticos a priori (que añaden conocimiento pero sin tener fundamento en la experiencia) tanto en matemáticas como en física, además de mostrar la imposibilidad de la metafísica tradicional. El filósofo nos explicará cómo el sujeto construye el conocimiento proyectando y aportando ciertas estructuras previas sobre la realidad. Nuestra sensibilidad lo hace con las formas a priori de la sensibilidad (o intuiciones puras), espacio y tiempo, que son el fundamento de la matemática, y el entendimiento con las categorías o conceptos puros como, por ejemplo, el de causalidad, que serán el fundamento de la física. Por tanto, intuiciones puras y conceptos puros son los elementos que garantizan la validez del conocimiento siempre que sean aplicadas al ámbito fenoménico de la experiencia. Es por eso por lo que la metafísica tradicional no puede constituirse en conocimiento, ya que pretende tener un conocimiento de la cosa en sí, del noúmeno, que aunque puede ser pensado permanece incognoscible para nosotros. A lo más, las ideas metafísicas de Dios, alma y mundo en su uso regulativo podrán guiar y orientar el avance del conocimiento científico.