SIMON BERNARDO ALVAREZ BASTIDA

Anuncio
Tenancingo, México15 de Junio de 2011
(RESUMEN EJECUTIVO)
VALORACION DE PRUEBA ILICITA EN LA ETAPA PRELIMINAR.
El objeto de la reflexión que pretende construir el contenido de mi exposición, es
establecer la necesidad de la prueba, su valoración y por lo tanto, su necesaria
exclusión cuando esta es ilícita en la etapa preliminar, en todos aquellos actos de
molestia que constituyen la facultad reservada a los Jueces de Control o Garantías
en la fase de la investigación. Porque resulta paradójico, que el órgano
jurisdiccional emita decisiones que en su aspecto fáctico se sustentan en pruebas
obtenidas de manera ilícita, cuando por definición, él es el garante de que, en las
técnicas de investigación que emplee la fiscalía respete no solo los derechos
fundamentales y garantías constitucionales de las personas, sino también aquellas
reglas que impone el orden jurídico.
Sin embargo, parece que constituye un obstáculo a la función elemental del Juez
de Control, el caracter adversarial que imprime el sistema acusatorio, bajo el
postulado de que al sustraer de las partes la discusión y debate que entre ellas
debe existir, por la intromisión del órgano jurisdiccional, para verificar la forma en
que se obtuvieron los datos de prueba, inevitablemente deriva en romper el
equilibrio e igualdad de armas, incluso más, en sustituirles.
Porque cuestionar la forma de obtención de los datos de prueba en que la fiscalía
sustenta su teoría fáctica, inevitablemente conduce, bien a justificar su omisión
sustituyéndole en su exposición o simplemente complementándola; o en caso
contrario, a beneficiar a la defensa, cuando se confirma su ilicitud, también
1
sustituyendo la argumentación necesaria o la abierta denuncia, que correspondía
a ésta realizar.
Ello demuestra la insuficiencia del Principio de Contradicción, como también el de
Lealtad de las Partes, cuando es claro que la exposición del fiscal respecto a los
elementos probatorios obtenidos en la investigación, no se encuentra constreñida
a que, para su evaluación, deba exponer, necesariamente, como presupuesto
elemental, la forma en que los obtuvo, es decir justificar su licitud.
El antecedente se constituye entonces, por la condición de espectador en que se
ha querido colocar al Juez de Control, bajo la premisa de que le está prohibido
acceder a la carpeta de investigación de la fiscalía, a fin de no contaminarse,
privándolo también del deber esencial que establece su existencia, realizar el
control o verificación del respeto a los derechos fundamentales y el sometimiento
a los requisitos de legalidad que el Ministerio Público debe observar en todos los
actos de investigación.
Consecuentemente, debe afirmarse que la valoración de las pruebas o de los
datos de prueba en que el Juez funda su decisión, conducen al argumento
inferencial de que si no existió señalamiento o denuncia de la defensa, respecto a
transgresiones que muestren la ilicitud del dato de prueba, estas deben ser
necesariamente consideradas como obtenidas con regularidad y merecedoras de
eficacia demostrativa, lo que sin duda conduce a una presunción de culpabilidad,
que trastoca inevitablemente, el principio Constitucional, de Inocencia, piedra
angular del sistema acusatorio.
La realidad imperante en México, demuestra que el inicio de la implementación del
sistema acusatorio, no obstante sus bondades, ha creado un desequilibrio en la
Procuración y Administración de Justicia, porque si debemos reconocer que la
falta de tecnificación de los operadores del sistema, en su etapa preliminar origina
deficiencias en los actos de investigación, no puede negarse que siendo el
2
resultado de ellos lo que sustenta la resoluciones judiciales, estas se encuentren
purgadas de todos los defectos de aquellas.
El problema central se encuentra entonces, en la convalidación ordinaria de las
técnicas de investigación, que por desconocimiento en su obtención o abierto
engaño de la fiscalía, ha llevado a los Jueces de Control, a valorar incluso pruebas
ilícitas y sustentar con ellas sus decisiones.
Por tanto, resulta imperativo que se establezca como un presupuesto esencial
para valorar los datos de prueba, en todos los actos de decisión del Juez de
Control, que el acusador exponga con objetividad y lealtad, no solo su contenido,
sino acaso más, la forma en que fue obtenido y la técnica de investigación que
empleó para ello.
JUEZ DE CONTROL Y JUICIO ORAL DEL DISTRITO JUDICIAL DE TENANCINGO.
ESTADO DE MEXICO.
LICENCIADO SIMON BERNARDO ALVAREZ BASTIDA.
[email protected]
3
Descargar