traducciÒn al castellano de la obra deL MAESTRO NICOLETTO

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t r a ducciÒn a l castellano de la obr a deL MAEST RO
NICOLETTO GIGAN TI
-LIBRO PRIMERO160 6
Escuela o teatro
En el que son representadas diversas maneras de herir con la espada sola o acompañada de daga tanto para desviar
como para dar el golpe.
De Nicoletto Giganti, Veneciano
Traducción al castellano de Eugenio García-Salmones, director tecnico de la escuela de esgrima
Historica ''Don Diego Lopez de Haro'' mantenida por la ”A.V.E.H”, Asociación Vizcaína de Esgrima
Historica, miembro del HEMAC. Esta traducción esta dedicada a mi amigo y compañero de años
Felix Ramos, esgrimidor notorio , teniente de la A.R.I.E.A, Asociacion Riojana de Esgrima Antigua.
Nota del traductor al castellano
La presente traducción se hace italiano del siglo XVI/XVII al castellano. Las obra se escribio en 1606 ,
es pues una traducción directa y ello posibilita que haya menos errores o inexactitudes que si no lo
fuera. Espero que los lectores de nuestra lengua lo aprecien, disfruten y aprendan con su lectura tanto
como le he hecho yo, como lector y esgrimidor.
Versión 2.0.0, revisada el año 2011.
La traducción de “Escuela o teatro”. por Eugenio Garcia-Salmones
Esta licenciada bajo:
Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 3.0 España License .
PREÁMBULO.
La esgrima de maestro Giganti.
La esgrima que nos propone Giganti es aquella en la que ya tenido lugar la transición entre la esgrima de
punta y corte a la de punta, El debate habido entre los maestros de XVI sobre la efectividad de los tajos ya
ha quedado atrás. Giganti centra claramente su practica en la espada, o mas exactamente en la ropera
como otros autores contemporaneos suyos ; Fabris (1606) o Capoferro (1610).
El maestro Nicoletto Giganti escribe sus obras en los años de 1606 y 1608. Conocida es la polemica habida
con el Maestro Fabris quien le acuso de plagiarle en su segunda obra, no obstante los maestros italianos
de siglos posteriores le tratan muy bien, reconociendo sus grandes aportaciones, los contrapases de dentro,
la estocada larga, etc, etc., en suma el Maestro Giganti no tenia nada que plagiar a nadie y ocupa un
destacadisimo lugar en la historia de la esgrima, este libro presenta la primera de sus dos obras.
NOTAS
Los esgrimistas hoy en día utilizan una terminología completa y precisa, muy elaborada que permite
describir las técnicas puestas en practica durante los combates. Esta terminología valida para la esgrima
deportiva y escénica no permite una comprensión clara de la lectura de los tratados escritos en los siglos
XVI y XVII, los conceptos han evolucionado, algunas expresiones han desaparecido otras tienen un sentido
completamente diferente.
Es importante remarcar que en esta época la terminología no esta todavía fijada, cada maestro emplea su
propio sistema y puede haber mas de un termino describiendo el mismo concepto o conceptos muy
parecidos.
La traduccion del primer libro del Maestro realizada por mi en el 2007 se ha revisado en profundidad,
verdaderamente rehaciendose casi entera, esta vez basandome en el original italiano y no en la edicion
francesa; para los grabados de esta edicion se ha utilizado el ejemplar de la biblioteca August Herzog
impreso en 1622. Este primer libro contiene 42 bellisimos grabados.
De las guardias y las contraguardias.
Aquel que pretenda hacerse maestro de la ciencia de las armas tiene necesidad del conocimiento de muchas cosas. Para dar
comienzo a mis lecciones, tratare primeramente las guardias y contraguardias, es decir de las posturas y contraposturas de
la espada, porque es la primera cosa que en apareciendo la ocasión de querella hay que tener miedo, para poder asegurarse
del enemigo. Para ponerse en guardia hay muchas cosas que observar, como se puede ver en las figuras siguientes: A saber
meterse a pies firmes y estos estando de base del movimiento de todo el cuerpo; tener la espada y la daga bien firme en la
mano, ora en alto, ora en bajo, ora extendida; la espada ora en alto, ora en bajo, ora al costado diestro presta siempre a
parar o a herir según la ocasión se presente, de suerte que si el enemigo tira de punta o de tajo, se le pueda parar y herir en
el mismo tiempo, con la vida donde el cuerpo esta dispuesto y pronto. Porque si la disposicion y la prontitud del cuerpo
fallan, sera cosa fácil para el enemigo desordenarlo, o por un través o por un golpe derecho o por un golpe de punta , o
por cualquier otra manera, de suerte que como sea que pueda parar el golpe, seguirá estando en peligro. Y es necesario estar
avisado que la daga debe guardar la parte descubierta del enemigo, de suerte que en tirando el golpe resulte herido. Es en
esto en lo que consiste todo el artificio de esta profesión. Además hace falta hacer notar que todos los movimientos de la
espada hacen guardias para aquel que las sepa conocer y que todas las guardias son buenas para quien se ejercita, pero al
contrario ningún movimiento sirve de guardia a aquel que no lo entiende y no puede ser bueno para aquel que no sabe
usarlo.
Esta profesión no requiere de otra cosa que ciencia y ejercicio y estando ejercitado te dará la ciencia.
Es un artificio ponerse descubierto en guardia, y se hace a fin de que el enemigo queriendo dar su golpe se desordene y
ponga en peligro. También es un artificio de ponerse a cubierto porque atacando el enemigo se le pueda herir. Así que se nos
damos cuenta que toda guardia es útil a aquel que la entiende, y no aprovecha nada a aquel que no lo entiende. Y esto es
todo en cuanto a guardias.
En cuanto a las contraguardias, hay que hacer notar que aquel que tenga el conocimiento de esta profesión nunca se pondrá
en guardia, así hará lo posible para ponerse en contra de la guardia, y para ponerse en contraguardia hay que estar
advertido de ponerse fuera de la distancia, es decir en distancia con la espada y con la daga en alto, el paso firme y
mesurado. Después considerar la guardia del enemigo y atacarle poco a poco con la espada y afirmando la tuya de suerte
que el no pueda herir sino pasa la espada. La razón, si el pasa la espada hace 2 tiempos: el primero es el pase mismo, que es el
primer tiempo, después el herir que es el segundo; mientras que el pasa puede ser herido de muchas maneras (como veremos
en la figuras siguientes) antes de que haya tenido tiempo de herir. Si el cambia de guardia a contraguardia, hace falta
seguirle con la espada adelantada y con la daga en largo y asegurando siempre la propia espada, porque aquel que en el
primer tiempo pase su espada sera herido y noy de ninguna manera podra herir sino en dos tiempos, Por eso pararle sera
siempre una cosa facil. Y con esto es suficiente en cuanto a las guardias y contraguardias.
De los tiempos y de la distancia.
No por saber ponerse en guardia o bien contra la guardia, no es por saber tirar bien la estocada, un mandrito o un
reverso, no es por saber girar las manos o llevar bien el cuerpo ni por mehor dominar la espada, se puede decir que uno sabe
parar y sabe herir, sino que hace falta conocer el tiempo y la distancia. Y aquel que no lo conozca aunque pare y hiera, no
se puede decir que sepa parar y herir, porque tanto al parar como al golpear. puede cometer algún error e incurrir en mil
peligros.
Habiendo ya tratado sobre las guardias y las contraguardias, queda tratar del tiempoy de la distancia para poder saber
cuando se debe herir o parar.
Por la distancia entendemos cuando con la espada se puede llegar al enemigo y no se puede se entiende estar fuera de la
distancia.
El tiempo se conoce de esta manera: si el enemigo esta en guardia es necesario ponerse fuera de la distancia e ir con su
guardia asegurando con su espada la del enemigo y ponerse en guardia para ver que quiere o puede hacer.
Si el pasa se le puede herir en el pasar y es un tiempo, si el cambia de guardia, este cambio es un tiempo, si el gira, es un
tiempo, si se acerca para entrar en distancia mientras que el camina antes de llegar, es un tiempo, en el cual el puede ser
herido. Si tira parar y herir en un tiempo. Si esta en guarda para esperar, es también un tiempo en el cual hay que atacar,
estando en la distancia o donde se le encuentre descubierto y es tiempo. Porque cada movimiento de daga, de espada, pie y de
vida como cambiar de guardia es tiempo. De manera que todas estas cosas son tiempos, porque tienen entre si diversos
intervalos, y mientras el enemigo haga uno de estos movimientos sin duda que puede ser herido, porque mientras se mueve
no puede herir y esto es necesario conocerlo para poder herir y parar, como sera mostrado, diligentemente en mis figuras.
Sobre el modo de tirar la estocada
Después de haber tratado con suficiencia de las guardias, contraguardias, distancias y tiempos, es necesario mostrar y dar a
entender como hay que llevar la "vida"1 para tirar una estocada y salvarse. Ya que para aprender bien este arte, hace falta
primeramente saber llevar bien la vida y tirar las estocadas largas, presto, con fuerza y retirarse rapidamente fuera de la
distancia. Para tirar la estocada larga hay que dar un paso justo y firme, mas corto que largo, para poder alargarlo, y en el
tirar la estocada alargar el brazo de la espada, doblando la rodilla tanto como se pueda. La verdadera manera de tirar la
estocada es que después de ponerse en guardia se extiende o avanza el brazo y el cuerpo al mismo tiempo, de suerte que el
enemigo sea atacado antes de que se pueda poner en guardia. Pero si antes se avanzase "vida", el enemigo se dará cuenta y
sirviéndose del tiempo el podría parar y herir en el mismo tiempo.
Para retirarse hacia atrás, es necesario hacerlo comenzando por la cabeza, ya que retirándola el cuerpo la sigue y después el
pies es también retirado. Pues si retiráramos primeramente el pie, la cabeza y el cuerpo quedarían avanzados, no sin gran
peligro.
Entonces para bien aprender esta ciencia es necesario ejercitarse para tirar bien la estocada, y estando esta bien aprendida
todo el resto se comprenderá tanto mas facilmente, como al contrario sin haberla bien aprendido se trabajar el resto en
vano.
Es por lo que señores lectores que yo lo repetiré muchas veces en las lecciones siguientes según la ocasión se presente a fin
que sea tanto mejor comprendida con todas sus diversidades y no sea necesario objetarme que repito de seguido la misma
cosa.
1Podemos designarla etimologicamente como la zona que contiene los organos vitales,
señalar a la zona del torso y la cabeza como “la vida”.
y aunque es una zona anatomica del cuerpo que situamos mal, creemos que podemos
Porque el autor comienza por la espada sola.
Habiéndome propuesto de tratar en este primer libro de dos suertes de armas solamente, a saber de la espada sola o de la
espada y la daga juntas, yo he querido empezar por la espada, que es el arma mas común y usada, reservando el tratado de
otras armas para otro libro, el cual yo espero publicar si le place a Dios en breve. Y aquel que sabe jugar bien la espada
sabrá también manejar todas las otras suertes de armas. Pero en tanto que no se sirve para todo de la daga y rodela, hay
quien se hace ayudar y defender de la espada sola, yo quiero advertir a los amantes de esta ciencia que aprendan antes que
nada a jugar bien la espada. Asi estará asegurado en las querellas si el puñal o la rodela se le caen de la mano, se podrá
defender y herir con la espada sola. Porque si se ejercita a jugar la espada sola, sabra para y herir igual de bien que si
tuviera también la daga.
Guardias o posturas.
Figuras 2 y 3.
Muchas son las guardias en la espada sola, asi como también contraguardias. Pero en este libro yo no voy a mostrar nada
mas que dos suertes, tanto de guardias como de contraguardias, de las cuales se podrá servir en todas las otras lecciones que
serán propuestas en este libro. Así que antes de efectuar vuestra intención, iréis al enemigo desde fuera de la distancia,
asegurando su espada con la vuestra, metiéndola y teniéndola sobre la suya, de suerte que no pueda herir sino en dos
tiempos, a saber, pasando la espada que sera uno e hiriendo que sera otro. Os acomodareis en este manera contra todas las
guardias bajas o altas según veáis que el enemigo se acomoda estaréis siempre advertido de no dar al contrario ninguna
comodidad, ni ocasión a que pueda batiros en un solo tiempo. Que es lo que haréis, si os guardáis de que la punta de su
espada no apunte jamas directa sobre vuestro cuerpo, de suerte que en avanzando súbitamente os ataque. Entonces cubriréis
la espada del enemigo con la vuestra, como se ve en esta figura, de suerte que la espada del enemigo este fuera de vuestra
vida y no os pueda tocar salvo que pase, vos debéis estar asegurado sobre los pies, el cuerpo firme con el brazo de la espada
extendido y presto para poder parar y golpear, como se muestra en la figura. Si veis al enemigo en una guardia alta o baja,
no ataquéis su guardia si no os habéis asegurado de su espada u os encontrareis en un peligro, aunque el enemigo sea
menos ducho en la ciencia y en la practica de las armas, si ve que os puede herir o bien os puede parar, o poner en obediencia
por fintas y batiendo vuestra espada, o por otras cosas que el pudiera emprender. Pero si vos estáis seguro de su espada, como
ya he dicho mas arriba, el no se podrá mover o acometer otra acción sin estar apercibido de que no tenéis tiempo ni ocasión
de repararos.
Estas dos figuras son dos guardias con la espada por delante y dos guardias cubriendo la espada enemiga. Una se hace
acercándose al enemigo por adentro y la otra rodeándole por fuera, como veis en estas figuras y será todavía demostrado
en las lecciones siguientes.
Declaración de como hay que herir en tiempo.
Figura 4.
Esta figura os enseña como herireis al enemigo en el tiempo mientras el pasa su espada. Y lo haréis en aproximandoos desde
fuera de la distancia, metiendo vuestra espada sobre la suya, por dentro, como veis en la figura y asi el no podrá herir sin
pasar su espada. Y entonces en ese mismo momento que el la pase para heriros, vos avanzareis vuestra espada en girando el
dorso de la mano y lee herireis en el rostro como se ve en la figura. Y si por ventura quisierais parar primeramente y herir
después, la cosa podría salir mal, dado que el enemigo tendría tiempo de parar la estocada y quedaríais en peligro, pero si al
tiempo que el cambia de lado su arma vos le atacais rapidamente girando el dorso de la mano y parando, el enemigo
dificilmente podrá también parar.
Habiendo hecho esto y estando el enemigo a la espera os retirareis para aseguraros, fuera de la distancia teniendo siempre
vuestra espada sobre la del enemigo sin abandonarla jamás.
Pero si por ventura el enemigo no ha pasado su espada para herir, yo digo que debéis acortar distancia por dentro y rapido
asestarle una estocada, donde el este descubierto y después retiraros prestamente, teniendo siempre como ya he dicho vuestra
espada sobre la suya.
El verdadero modo de acercarse al enemigo y golpearle mientras que el pasa la espada.
Figura 5.
Aprended de esta figura que si vuestro enemigo esta en una guardia alta o baja, con la espada al costado siniestro, como le
iréis a atacar desde fuera de su espada y fuera de la distancia teniendo vuestra espada sobre la suya así que no la toque a
paso justo y fuerte y que vuestra espada preparada para parar y herir con el ojo bien vivo, como veis en la segunda figura
de las guardias y contraguardias. Y teniendoos en esta manera, el enemigo no podrá atacaros de punta, si el no pasa la
espada y mientras que el la pasa girad el dorso de la mano y tiradle una estocada en el mismo tiempo, como ha sido
enseñado en la cuarta figura. Y después de haber tirado la dicha estocada os retirareis prestamente en el mismo tiempo hacia
atrás y fuera de la distancia apoyando vuestra espada sobre la suya, a fin de que si quiere apartarla le podáis tirar otra
estocada, girando como antes el dorso de la mano y retirándoos fuera de distancia. Y tantas veces el intente pasar, tantas
veces vos le tirareis la estocada, en girando como esta dicho el dorso de la mano.
Para bien jugar a este juego hace falta ejercitarse diligentemente, ya que este es el medio principal por el cual se aprende a
golpear y parar con destreza y velocidad. Mientras, habéis de estar advertidos de manteneros siempre firmes sobre le cuerpo,
parar con firmemente con el fuerte de vuestra espada, ya que el enemigo tira con potencia y debéis parar de la misma
manera de tal forma que el se desordene, de suerte que le podáis golpear en el descubierto. Y esta será la primera lección que
debemos aprender en la espada sola, ya que de ella provienen todas las otras que yo he compilado en este libro. Y en sabiendo
bien herir en su tiempo, vereis como se deben parar todos los golpes, tanto los tajos y reveses como las estocadas, que van
encaminados directamente a la cabeza, como se mostrará de mano de las lecciones siguientes.
La verdadera manera de pasar la espada.
Las dos figuras que hemos puesto mas arriba muestran como herir al enemigo mientras que pasa su espada. Y es a fin de
que no haya nada en estas mis lecciones que no sea mas claro. Voy a mostrar también el modo de pasar la espada
correctamente. Porque noten que estando vuestro enemigo acomodado en una guardia, sea cual fuere y vayais a el, le
tirareis una estocada al sitio que encontréis descubierto, y esta será tan avanzada que os demorareis en el cruce de las
espadas. Pero ahora, quiero que paseis vuestra espada sobre la guarnición del enemigo, girando rápidamente la mano y
tirándole una estocada en el mismo tiempo, hacia el lugar que encontréis descubierto. Y este es el verdadero y seguro modo
de saber pasar la espada y estocar en el mismo tiempo. Y si pasáis vuestra espada sin girar el dorso de la mano, daréis
tiempo y lugar al enemigo para golpearos; como lo demostrareis bien claro en probando y en ejercitandoos. Y si el enemigo
vuelve a parar vos volveréis a pasar en la manera susodicha, girando siempre el dorso de la mano, algo que haréis todas y
cada una de las veces que el vuelva a parar y que es lo mas seguro y lo mas fácil, tirando la estocada al mismo tiempo que
pasáis. Y esta manera de pasar no es menos necesaria que la que yo he enseñado en la declaración de la figura precedente, de
volver a parar siendo una de las cosas principales que es requerida para el manejo de la espada sola. Pero ya he advertido a
todos los amantes de esta ciencia, de ejercitar bien estas dos cosas a fin de que estando en distancia contra el enemigo y en
tiempo de pasar la espada la sepan pasar bien y prontamente, y en tiempo de parar, lo hagan también como es requerido.
Del contrapase por dentro de la espada.
Figura 6.
En esta figura yo muestro y enseño otra suerte de manera de parar y de herir por el método del contrapase*, el cual se hace
de la siguiente manera: Que habiendo cubierto la espada del enemigo de suerte que queriendo herir hace falta que pase y
ahora mientras el pasa yo quiero que vos paséis también de suerte que vuestra espada vuelva a su primer lugar, a esta
tecnica se la llama pase, contrapase y recontrapase; pero en pasando y sirviéndoos de los tiempos, le tirareis una estocada
donde le encontréis descubierto, retirando el cuerpo un poco hacia el costado derecho y teniendo el brazo siempre extendido,
de suerte que si el se acerca para golpearos se hiera a si mismo. Después de dar la estocada os retirareis hacia atrás fuera de
la distancia.
Del contrapase de la espada por afuera.
Figura 7.
Esta suerte de herir por el método del contrapase por afuera es parecida al contrapase por dentro, teniendo solamente la
diferencia que si vuestro enemigo esta en guardia y va hacia vos mientras estais fuera de la distancia, debéis salir al
encuentro de su guardia y en asegurándoos que su espada quede afuera, haced que el tome la resolución de pasar. O
mientras el pasa, pasad vos también en el mismo tiempo, girando la punta de vuestra espada en la suya con el giro del dorso
de vuestra mano, os apoyareis sobre el filo de vuestra espada y lo seguiréis con el brazo y el cuerpo extendido con un paso
creciente como veis en la figura, asi le herireis sin falta antes de que el pueda reaccionar e intente pararos.
Pero hay que estar advertido que si el enemigo da un golpe rápido y queréis pasar, hace falta que en pasando os retiréis hacia
atrás, a fin de que no seáis tocado por su espada y estéis asegurado, dado que el enemigo habiendo tirado con fuerza se
habrá puesto en desorden, de suerte que o bien el se herirá a si mismo con vuestra espada o bien os dará la ventaja de poder
golpearle donde os parezca mejor, teniendo buena cuenta de mantener su espada fuera de vuestro cuerpo a fin de no ser
herido.
Declaración de fintas.
Figura 8.
Las maneras de herir son diversas, así que también habrá diversidad en mis lecciones, pero que nadie espere que yo cuente
todas las cosas que se pueden hacer en esta profesión, ya que son tan infinitas que mi libro crecería también hasta el infinito
o por lo menos de tal manera que el lector se aburriria mas que instruirse. Así que procederé eligiendo siempre aquellas que
me parezcan mas bellas, artificiosas y útiles, de las cuales nacen otras mas fáciles y que tienen menos artificio.
Entre todas las maneras de herir artificiosamente la finta, según mi opinión es la mejor. La cual no es otra cosa que
aparentar que vamos a hacer una cosa mientras hacemos otra. Y esto se hace de diversas maneras.
Me gustaría entonces que os pongáis en pie y sobre el costado diestro con la espada avanzada y el brazo derecho y extendido
para dar ocasión al enemigo de que vaya hacia vos, y cuando el se haya situado en distancia, mirad si pretende herir a pie
firme o al paso, algo que conoceréis por el pase que hará con su espada, entonces apartareis también vuestra espada girando
el dorso de la mano aparentando querer tirarle una estocada al rostro, pero hace falta tirar lejos de la espada del enemigo
con el fin de que el no encuentre la vuestra y si el enemigo no la para, vos la tirareis resueltamente y así le alcanzareis sin
falta. Pero si el la para, en ese mismo instante vos pasareis vuestra espada y golpeareis como veis en esta figura, en la cual el
enemigo se hiere a si mismo de improviso. Pero debéis estar advertido que al repasar el enemigo no encuentre vuestra espada,
porque entonces las cosas no os saldrían tan bien, ya que al pasar vos retiraríais la cabeza y el cuerpo un poco para ver la
operación del enemigo ya que el tiraría y si vos no os retiraseis hacia atrás, caeríais en un encuentro en el que los dos seriáis
heridos.
Antes que nada hay que tener en cuenta que hay que pasar con el filo derecho de vuestra espada por el filo de la espada
enemiga, y en girando en alto golpear sobre el débil de la del enemigo y retirarse o asegurarse fuera de distancia, como ha
sido dicho, en cuanto hayáis tirado la estocada sea finta o resuelta.
La finta se hace de esta manera: primero mostramos la espada frente al rostro o el pecho del enemigo con el brazo
extendido, sin mover el paso y si el enemigo se mete a parar, vos girareis vuestra espada en el mismo tiempo y avanzando el
paso le cazareis sin ser apercibido. Y si el no para, vos acrecentareis el paso y y le herireis, he aquí una manera de herir por
finta.
Las dos figuras siguientes que parecen tan similares, son sin embargo muy distintas. Muestran dos maneras de fintar muy
diferentes con casi la misma forma de herir. Y aunque hay muchas, hubiera bastado solo una sobre la cual podríamos
descubrir y mostrar diversas maneras para herir y al mismo tiempo para mostrar claramente la diversidad en las fintas. Yo
he querido ilustrar dos de las mas diferentes como vereis en la declaración
Como se hiere en el pecho con la espada sola estando en distancia e iguales en la espada.
Figura 9.
En la presente figura es propuesto un modo artificioso de herir al enemigo en el pecho y asegurarse de su espada, en suerte
que el no os pueda molestar o herir mientras que pasáis para herirle. Esto se hace de la manera siguiente: Hay que ponerse en
segunda con la espada avanzada y si el enemigo va hacia ti y quiere cubrir tu espada con la suya, debeis dejarle acercarse
justo hasta que este en la distancia, y habiendo llegado a ese punto, pasareis metiendo vuestra espada por dentro de la suya,
mostrando la punta frente al rostro del enemigo, y si el no intenta parar, heridle resueltamente, corriendo filo de vuestra
espada por el filo de la suya, girando la mano y situando el cuerpo un poco de través. Pero si el enemigo mientras que pasáis
viene a parar y herirr, no tiréis la estocada, sostened la punta de vuestra espada un poco hacia fuera y al mismo tiempo que
el quiera parar y herir, pasar vuestra espada bajo la guarnición de la suya, de suerte que apunte al pecho, con lo que si
adelantáis el paso le herireis en el pecho seguro, como se ve en la figura. Estando avisado de pasar y repasar la espada en el
mismo tiempo sin sostenerla en firme, a fin de que el enemigo no la venga a encontrar, y mientras que el pase adelante vos
avanzareis también por afuera, echando vuestra mano sobre la guarda de su espada y empujándola hacia vuestra derecha,
colocándoos de esta manera en una posición en que el no podrá ofenderos y vos lo podréis hacer donde queráis, y en
abatiendo su espada le podréis volver a herir en 2 o 3 puntos vitales, algo que el no podrá impedir.
Del pase con una finta sobre la punta de la espada.
Figura 10.
Esta es otra forma de pase y finta que no es muy usada y la cual viene a hacer el efecto de las 2 figuras anteriores y se hace
de la manera siguiente: Hay que ponerse en segunda dejando aproximarse al enemigo para que vaya hacia vos en la manera
antedicha y como el viene en distancia, girad vuestra espada sobre la punta de la suya, si veis que el no para, tirad fuerte y
resueltamente como ya se os ha dicho en la otra finta. Pero si el para, no debéis dejar la espada quieta, así pasadla por
debajo de la guarnición del enemigo y *pasad hacia delante en la manera antedicha y le herireis en el pecho, después
retiraros como esta dicho.
*Superar al enemigo por su derecha
De la finta en distancia para herir en el rostro.
Figura 11.
Esta finta no se diferencia en nada de la precedente sino que en esta el pase no es por debajo de la guardia de la espada
enemiga sino por encima para herir al enemigo en el rostro.
En la cual estando parada la estocada deviene una finta, pero sino va resuelta. El resto se sirve de las mismas guardias y
distancias y el cuerpo también, igualmente la espada es gobernada de la misma manera, como vemos en la figura. Si nos
retiramos después de la estocada quedamos fuera de distancia. Pero la importancia principal es que sepamos hacer la finta al
natural, que no sea diferente de un golpe resuelto, y se hace de la manera siguiente: Giramos la punta (que servirá por un
ejemplo ) desde lo alto de la parte de afuera del rostro del enemigo el camino que hacemos con la dicha punta por debajo de
las guardias (arriaces) de la espada enemiga, hemos de hacerlo en fuerte, que en el pase la punta encuentre o bien el rostro o
bien el pecho del enemigo, y esta es tenida por la finta mas natural. Pero estad advertidos de no serviros jamas de la finta si
no veis que podeis resolver, porque de otra manera estaréis en peligro de ser los dos heridos y podríais llevar la peor parte.
La verdadera manera tirar la estocada mientras el enemigo nos tira un tajo.
Figura 12.
Esta figura os muestra como sirviéndoos del tiempo daréis a vuestro enemigo una estocada en el rostro, mientras que el
desea daros un tajo en la cabeza. Mientras que el levanta la espada y estando esta todavía en el aire, la esperaremos antes
que el la pueda abatir, lo que se hace de la manera siguiente: Después de poneros en guardia, en la guardia que a vos os
plazca, iréis al enemigo y habiendo entrado en distancia, si el enemigo os tira un tajo hacia la cabeza, vos en el momento
que el comience a levantar su espada os aprovechareis del tiempo y en avanzando le tirareis una estocada al rostro, donde
sin duda alguna le cazareis mientras que su espada esta todavía levantada, como bien veis en la figura. Pero en tirando,
hace falta girar el pulso en alto, casi como el filo derecho de la espada teniendo el brazo extendido y en alto, además hacer
que las guardas de vuestra espada os cubran la cabeza a fin de que la espada enemiga descendente os encuentre cubierto y no
pueda ofenderos.
Mientras tanto estad avisados de que esta herida se debe hacer rápidamente, ya que si no se hace así, el enemigo lo podría
parar y heriros. Después de herir vos debéis retiraros fuera de distancia en cubriéndoos con vuestra espada y asegurándoos
de la del enemigo..
Yo no he querido proponer en este primer libro todas las maneras de parar un tajo, las cuales son diversas, así que he
descrito solamente esta ya que me parece la mas útil y cómoda para saber conocer el tiempo y servirse de el, como es de
desear en todas las ocasiones.
Como herir en seguro con la espada sola usando ambas manos.
Figura 13.
Esta figura os muestra una manera segura de herir al enemigo, imposible de ser parada, se puede efectuar de dos suertes
diferentes. Primeramente hace falta encontrar la ocasión de estar con el enemigo iguales en la espada teniendo la vuestra
fuera. Y ahora presentareis la punta hacia el rostro de vuestro enemigo y si el no para bien, vos con fuerza le golpeareis en
el rostro como vemos en la figura cuarta, pero si el para bien y rápidamente acrecentareis el paso con el pie izquierdo y
metiendo la mano izquierda sobre vuestra espada la empujareis rápidamente a dos manos contra el pecho de vuestro
enemigo, abatiendo la guarnición de vuestra espada como veis en la figura. Quedad advertidos de hacer todas estas cosas en
un tiempo.
Para la segunda suerte: Vos debeis estar acomodado en guardia a la manera antedicha, pero con la espada por adentro, yo
quiero que apartéis la espada como si quisierais golpear por afuera y al mismo tiempo que apartáis debéis meter la mano
izquierda sobre vuestra espada y caer con la fuerza de las dos manos sobre la espada enemiga, la cual quedara apartada a
un costado vos avanzareis súbitamente con el pie izquierdo como veis en la figura. Pero a fin de que esta herida resulte
exitosa hace falta estar advertido que todas las cosas, a saber: pasar la espada, meter la mano encima, caer sobre la espada
enemiga, pasar adelante el pie izquierdo se deben hacer en el mismo tiempo, porque de otra manera sera imposible triunfar
y quedareis en peligro. Principalmente si tenéis asuntos con un hombre valiente que sabe pasar bien y súbitamente su espada,
hay que andar muy madrugador y herir de improviso.
Como hay que parar un tajo o un revés que viene hacia la pierna.
Figura 14.
En esta lección en la cual es tratado el tajo derecho o de revés hacia la pierna, yo no puedo decir otra cosa, para enseñar
como hace falta parar y golpear al enemigo en el mismo tiempo que mostrar que el enemigo se ofenderá el mismo con la
punta de vuestra espada, si inclinándose para dar el tajo o el revés donde hace falta que el acreciente el paso y avance el
rostro con el cuerpo, vos retirareis vuestra pierna avanzada y le presentareis la punta hacia el rostro, donde si el prosigue
su golpe sin falta se herirá el mismo sin poder pararse, y no podrá ofenderos de ninguna de las maneras. Hecho lo cual os
retirareis súbitamente fuera de distancia, como ha quedado dicho anteriormente.
De la encartada o giro del cuerpo (compás).
Figura 15.
Hace falta saber la razón de las encartadas o del giro del cuerpo (compás)para poder dominarla bien, en cuanto no es
ordinariamente usada y enseñada. Pero hay muchas y diversas maneras, de las cuales en este primer libro yo solo mostrare
tres, que a mi parecer son las mas seguras y bellas, como aparece en la presente figura.
La primera se hace en poniéndose en guardia fuera de distancia, con el pie derecho avanzado, el brazo extendido, la espada
larga teniendose fuerte sobre el costado derecho y sosteniendo la punta de la espada hacia el rostro del enemigo. Esperad así
que el enemigo venga y estando casi en distancia, pasad la espada en finta algo larga y al tiempo que el enemigo quiere
parar, repasarla, en suerte que ella vuelva como estaba antes, abriéndose camino en el pase por el filo de su espada de
manera que no habiendo sido completamente apartada, el enemigo resulte herido. Ya que si vos quisierais pasar y herir
después, estaríais en peligro, dado que son dos tiempos. 2Después lanzando la pierna izquierda al través y girando el
hombro siniestro haréis la pieza, dándole como se ve en la figura una punta o en el rostro o en el pecho, antes que el se
aperciba, teniendo el brazo rápido y cubriéndoos con la guarnición de vuestra espada, alejada de la espada del enemigo, el
ojo bien vivo hacia su rostro, advertido de jamas girar el rostro con el cuerpo como hacen algunos, ya que entonces os
encontraríais en peligro dado que no veríais como se desarrolla vuestra acción. Finalmente retiraros fuera de distancia
teniendo la espada sobre la suya, asegurándoos como queda dicho.
La segunda manera de girar el cuerpo (o usar el compás).
Esta no es diferente de la primera, sino en la manera de golpear, teniendo cautela a la hora de encaminarla sobre el filo de
la espada enemiga y golpearle bajo el pomo de su espada, alzando el brazo con el dorso de la mano, como vemos en la
figura. Y después de haber girado el cuerpo, pararos para no caer sobre el enemigo y de ninguna manera llegar a las presas
con el, o vos estaríais en peligro por no poder retornar fuera de distancia y aseguraros. Esta encartada es dificilisima de
2 Haciendo un paso de compás.
parar, por no decir imposible cuando esta hecha con calculo.
La tercera manera de girar el cuerpo (o usar el compás).
Esta tercera encartada es la mas bella y la mas segura de todas, y se hace así: Poneros en guardia como en las precedentes,
teniendo la espada en el costado derecho con el brazo extendido y firme. Y si el enemigo viene con su espada sobre la
vuestra, estando en distancia pasar la espada en girando el dorso de la mano, y si el no para, vos le daréis en el rostro,
haciendo el efecto mostrado en la figura sin necesidad de hacer otra cosa. Pero si el para, os encontrareis iguales en la
espada y entonces opondréis vuestra espada con fuerza sobre la suya, a fin de que el haga también lo mismo, y si lo hace,
pasareis y en pasando encaminareis vuestra arma por debajo de la guarnición de su espada, girando el cuerpo como arriba
y le herireis el pecho, sin ser percibido. Y después de acabada la acción os retirareis fuera de distancia y os asegurareis como
esta dicho en otras lecciones.
Una manera artificiosa de herir en el pecho en el cruce de las espadas.
En las lecciones precedentes de espada he mostrado las formas de las encartadas, es decir como las espadas son cruzadas
desde afuera, para golpear al enemigo por adentro. Aquí voy a mostrar como cruzar las espadas por adentro para herir
afuera. Estando acercándose el enemigo cruzad rápidamente con el filo de vuestra espada teniendo el fuerte de ella sobre la
espada del enemigo y la punta hacia su rostro. Si ocurre que el está mas débil que vos, le tirareis una estocada al rostro o al
pecho algo que el no podrá parar. Pero si ocurre que el es mas fuerte, algo que sentiréis en el cruce de la espadas, girad la
vuestra bajo la guarnición de la suya que la baje y tirad al mismo tiempo una estocada, que el presumiblemente no podrá
parar y pasad en este mismo tiempo sin ningún peligro poniendo la mano izquierda sobre la suya podréis herirle en tres o
cuatro puntos vitales. Después retiraos fuera de la distancia, asegurándoos como queda dicho.
Del modo de jugar la espada sola contra la espada sola en puntas resueltas.
Hay muchos que en la escuela cuando quieren debilitar al enemigo le tiran resueltamente de estoque y tajos con gran furia e
impetuosidad, poniendo en desorden a los mas buenos jugadores y esgrimidores, de tal manera que no aciertan en tales
ocasiones con el modo de defenderse. Es por ello que voy a mostrar aqui el modo y razón de defenderse en esas ocasiones.
Hace falta que os pongáis en guardia con vuestra espada en acto de defensa y fuera de la distancia en un paso mas corto
que largo, en el tiempo que el tire la estocada o el tajo vos golpeareis con el fuerte de vuestra espada sobre el del enemigo
acrecentando al mismo tiempo el paso tiradle una punta con la cual el será tocado en el rostro o en el pecho y retiraros a
vuestra posición anterior, apoyando vuestra espada sobre la suya para aseguraros de ella, en suerte que no pueda heriros
sino pasa. Y si pasa vos girando el dorso de la mano por fuera volved a abatir con el fuerte de vuestra espada la suya,
alargando el paso tiradle una punta, heridle y rápidamente girad a la derecha con el pie, como arriba, asegurando al mismo
tiempo con la vuestra su espada, y si empieza de nuevo a pasar responded siempre de la misma manera. Esta lección es mas
útil que bella, teniendo en ella dos tiempos, los cuales podréis aplicar antes que el enemigo se sirva de uno solo. El uno es el
de parar, el otro el de golpear, necesarios ambos para entender como se ha de herir.
Como se para una estocada tirada al pecho con la espada sola.
Figura 16.
En la presente figura es mostrado tanto la manera de tirar la estocada de espada sola hacia el pecho, como de pararla, lo que
se hace en diversos modos, porque algunos pasen en la distancia, otros se tienen en ella y otros fuera de ella. Pero aquel que
tenga el conocimiento del tiempo y de la destreza en herir como es mostrado en la figura, podrá parar facilmente todas las
maneras antedichas. Notad entonces que estando igual en la espada con el enemigo y que aquel pase para heriros en el pecho,
hace falta que sigáis en el mismo tiempo su espada con la vuestra, bajad vuestra punta en elevando el dorso de la mano y
parad con la misma, pasando con el pie izquierdo hacia el costado derecho y retirándoos de su espada. Y así le heriréis en el
pecho teniendo vuestra mano izquierda sobre la guarnición de su espada. Y después de haber tirado esta estocada, apartareis
vuestra espada en la manera antedicha y os retirareis fuera de distancia.
De la estocada hacia el rostro en girando el dorso de la mano.
Figura 17.
Esta figura muestra un bellisimo modo de herir en el rostro al enemigo. Esta pieza consiste en tener la ocasión de llegar a
estar con la espada igual al enemigo, haciéndole un movimiento de parar por la sospecha que el tendrá del giro de vuestra
espada, y entonces girando el dorso de la mano meteréis la mano izquierda a la guardia de su espada y acrecentareis el paso
del pie izquierdo en el mismo tiempo, entonces el será herido en el rostro, sin poder parar, si vos la hacéis bien. Una vez
hecha la pieza, mirad si tenéis todavía vuestra mano sobre la guarnición de la espada enemiga, si la tenéis podéis, en
apartando vuestra espada, herir dos o tres veces mas si os place. Después os retirareis fuera de la distancia, teniendo siempre
vuestra espada sobre la del enemigo como ha sido enseñado mas arriba.
Del contrapase en distancia.
Figuras 18 y 19.
Este es un mismo contrapase en distancia del que teniendose sobre el pie izquierdo quiere pasar como en una encartada. En
esta figura yo he querido mostrar las posturas y las maneras de golpear. Para comprenderlas bien hace falta que el enemigo
vaya con el pie izquierdo, vos os pondreis en guardia como veis en la figura 18 dando espacio al enemigo para tirar un
golpe hacia el pecho, entonces, si el es un hombre valiente, pasará subitamente de un pie a otro, girará el dorso de la mano
rudamente, a la manera de la encartada, para parar vuestra espada, pero vos en el mismo tiempo que el pase, pasareis la
espada por debajo de la guarnicion en agachandoos como se ve en la figura 19, ahi es donde encontrareis el efecto de esta
pieza, golpeando en el rostro antes que el pueda atacar. Cuidaros, ya que entretanto el avanzará el pie para pasar, y no
tendrá manera de parar vuestra estocada. Pero para llegar a hacer bien esta pieza es necesario ejercitarse con gran
diligencia en las dos posturas propuestas.
Como jugaremos la espada sola contra un enemigo con espada y daga.
Figura 20.
En esta figura vemos como se ayudará de la espada sola tanto para parar como para herir contra un adversario que
combata con espada y daga. Pondréis entonces el pie derecho delante en un paso justo y el cuerpo retirado teniendo siempre
la espada presta para parar y golpear cuando sea el momento. Y guardaros de ser el primero en tirar de miedo de poneros
en peligro, ya que el enemigo podría parar vuestra estocada con su daga y vos no podríais parar la suya, tirad con fuerza.
Pero si estáis en guardia, como ya he dicho arriba en acto de parar mostrando temerlo, el tirar á tanto mas ardorosamente
y con menos prudencia como aquel que se persuade de estar en ventaja. Entonces mientras el tira parareis gallardamente con
el fuerte de vuestra espada y le tirareis una estocada al rostro. Ya que el tirará con fuerza y de lejos y en tirando su daga
se alejará de suerte que le podais golpear sin peligro. Y dado el golpe os retirareis fuera de la distancia, teniendo vuestra
espada dentro de la suya en la manera arriba dictada. Y todas las veces que el tire, vos haréis la misma pieza. Advertid de no
tirar hacia el pecho, donde la herida no sera asegurada, no perdais de vista que aquel que cuenta con la espada y la daga, es
ordinariamente mas ardiente contra aquel que solamente tiene la espada, dado que está convencido de poderos tirar cuantas
estocadas le vengan en gana y avanzará sin temor. Así que teniendoos en vuestras guardias con juicio podréis parar sus
golpes, golpearle el rostro y retiraros teniendo vuestra espada sobre la suya fuera de la distancia sin peligro. Y si el enemigo
pasa la espada por dentro parareis girando el dorso de la mano y tirareis gallardamente en la manera antedicha.
LA ESPADA Y LA DAGA.
Como pararemos una estocada que viene hacia el costado izquierdo.
Figuras 21 y 22.
Para conseguir el efecto de la figura presente hay que ponerse en guardia de la siguiente manera, hace falta sostenerse con
el paso justo y firme con las armas prontas para parar y herir en cuanto la oportunidad se presente y la daga sobre la
guardia de la espada enemiga. Y en apercibiendoos que el enemigo tiene la intención de golpearos en el costado izquierdo
os sostendreis con vuestra daga hacia la guardia de su espada y al mismo tiempo que el tira, vos parareis con el filo de
vuestra daga y herireis al enemigo con vuestra espada en un tiempo. Pero hace falta andar vivo, así que tirar vuestra
estocada antes que el tire la suya, teniendo el ojo avizor y atento y así que le tiréis la vuestra al hombro y paréis la suya al
mismo tiempo que la quiera tirar, sin poder de ninguna manera molestar la vuestra, ya que le herireis al mismo tiempo que
el avance, como se vé en la figura. Una vez que hayais herido os retirareis fuera de la distancia en la manera ya descrita.
Como parar la punta que viene contra el costado derecho.
Figura 23.
En esta figura, como veis, estando en la misma guardia descrita en las piezas precedentes y yendo el enemigo hacia vos con
la espada bajada, para golpearos en el costado derecho, alzareis el brazo de la espada y os situareis en tercera, con la punta
de vuestra espada hacia el rostro o el pecho de vuestro enemigo, la daga un poco baja y los brazos hacia la guardia de la
espada enemiga. Y así, si el enemigo tira la punta hacia vuestro costado, parareis y tirareis un revés hacia su hombro en el
mismo tiempo y así conseguiréis el efecto de la pieza. De todas las maneras sería mejor que viendo las intenciones de
vuestro enemigo de tirar, os previnieseis tirándola vos primero. Una vez dado el golpe retiraos fuera de la distancia.
Como se debe parar la estocada dirigida al rostro de espada y daga.
Figura 24.
Para conseguir el efecto de la presente figura os pondréis en guardia como en la figura precedente. Y si veis que el enemigo
os quiere tirar una estocada al rostro la parareis con el filo de la daga y le herireis en el mismo tiempo bajo la axila derecha.
Algo que hecho en el mismo tiempo el dificilmente podrá parar. Pero para llegar a este efecto de que el no pueda parar, no es
bastante conocer solamente estas cosas, sino que hace falta también la destreza para herir, saber que en un mismo tiempo se
está en guardia firme con el pie derecho adelantado y el izquierdo bien firme, sosteniendo todo el cuerpo, de suerte que
siempre que la ocasión se presente podamos avanzar o recular rápidamente, teniendo siempre la punta de nuestra espada
contra el rostro o el pecho del enemigo y la daga en alto, según la proporción de la espada enemiga. El cuerpo tirando mas
hacia atrás que hacia delante, el ojo avizor y el corazón ardiente y sin miedo al enemigo. Y si os tenéis en esta guardia y el
enemigo os tira una estocada o un tajo hacia el rostro, le parareis con el filo de vuestra daga y le tirareis en el mismo
tiempo, y ahi vereis las razones de esta pieza. Pero estad advertidos de parar con seguridad, retirando algo la cabeza y el
cuerpo y asi mientras que el tira, vos parando gallardamente tirareis vuestra estocada en el mismo tiempo. Ya que en
parando primero y queriendo después dar el golpe, no haréis nada, porque el enemigo retirando el brazo y el cuerpo tendrá
asimismo tiempo de parar y vos estaríais en peligro. Pero si paráis y tiráis en el mismo tiempo le daréis la estocada, mientras
que el avanza bajo el costado de su espada. Y haciéndolo con destreza y en el tiempo, el dificilmente se podrá defender.
Advertidos sois, que habiendo tirado la estocada os sostendréis firme sobre el pie izquierdo para poder retiraros rapidamente
fuera de la distancia. Para retiraros en seguro, hace falta que después de dar el golpe retirar primeramente la cabeza, el
cuerpo irá detrás, seguido de la pierna. Ya que si retiráis la pierna primeramente, la cabeza quedará avanzada y todo el
cuerpo estará en peligro, sin poder salir de la distancia. Y de ahí a tiraros una estocada larga y rápida que os cace sin poder
retiraros no va nada; para conseguir el efecto de esta pieza es necesaria la practica, en suerte que viendo que el enemigo
quiere tirar, vos debéis tirar también en el mismo tiempo, asegurándoos que le herireis el primero , aunque el haya tirado
antes.
Como se para con espada y daga un tajo que viene sobre la cabeza.
Figura 25.
En esta figura vemos la manera de parar un tajo que viene hacia la cabeza con la daga. Os pondréis en la guardia de la
primera lección y si el enemigo viene a tiraros un tajo hacia la cabeza saldréis a su encuentro con el filo de vuestra daga y
tirareis al mismo tiempo una estocada hacia su rostro, avanzando un poco el pie derecho para alargar el paso. Y si hacéis
estas tres cosas juntas al al mismo tiempo, veréis sin falta alguna el efecto de la pieza reproducido. En tal ocurrencia lo
mejor es amortiguar el golpe muy rápido, en suerte que pierda gran parte de la fuerza, mientras que está todavía en el
aire. Esto lo haréis de la manera siguiente; mientras que el enemigo eleve su espada para dar el golpe, le tirareis vuestra
estocada al rostro, entonces su reacción será retirar un poco la cabeza, igual hasta cerrará los ojos, por ello su golpe no
será certero, pero además perderá toda la fuerza. Es de notar que para obtener este efecto, habéis de ser corajudos, sin
ningún miedo a la espada enemiga, saber bien parar con la daga, saber tirar la estocada derecha y larga y guardarse de
parar nunca con el plano de la hoja de vuestra daga, ya que si el tajo desciende con fuerza os arrancará la daga de la
mano y sin ninguna duda os alcanzará en la cabeza. Pero si paráis con el filo no habrá ningún peligro. Una vez que
hayais herido os retirareis fuera de la distancia.
El modo de parar un revés con la daga.
Figura 26.
Aprenderemos de esta figura la manera de parar un revés que venga hacia el rostro. Os pondréis en la guardia de la
primera lección con la daga en alto y firme viendo venir el revés, saldréis a su encuentro con el filo de vuestra daga,
alargando un poco el paso del pie derecho le tirareis una estocada hacia el costado que encontréis descubierto y de esta
manera vereis la pieza cumplida.
Como parar una estocada contra el rostro.
Para poner en efecto esta pieza hace falta primeramente que estéis en la guardia antedicha y en viendo que el enemigo
pretende tiraros una estocada hacia la cara, la parareis con el filo de vuestra daga y le tirareis al mismo tiempo una
estocada al costado y así cumplireis la pieza. De todas las maneras hace falta estar advertido que cuando veáis la punta de la
espada enemiga enfilada a vuestro rostro tendréis vuestra daga un poco alejada de ella, como haciéndole sitio, y cuando el
tire, parareis con vuestra daga y girareis un poco la cabeza para retirarla de su espada, al mismo tiempo que paréis le
daréis con la punta al costado que quede descubierto, el mas expuesto al golpe, después os retirareis en la manera antedicha
Remarco que estas 6 piezas son todas del mismo genero hay que parar y herir en el mismo tiempo. Y si os detenéis aunque
sea un momento entre el parar y el herir seréis muerto. Es por ello que hay que ejercitarse diligentemente para adquirir
practica y retirarse rapidamente fuera de la distancia una hecha la herida.
Hay que estar advertido que estas seis lecciones son las mas importantes y mas bellas que se encuentran en la esgrima. Pero
hay que aprenderlas bien para poder llevarlas a cabo correctamente. Principalmente hace falta tener la daga firme y viendo
venir la espada enemiga contra vos, sea de filo o de estoque, salir a su encuentro con la daga y tirar la estocada en el mismo
tiempo hacia el lugar que veáis descubierto.
Punta tirada al pecho con espada y daga.
Figura 27.
El punto principal requerido en aquel que se deleita en la profesión de las armas es el de saber atacar al enemigo, darle una
estocada y retirarse prontamente en guardia fuera de la distancia. Para poder hacerlo es necesario tener conocimiento del
contrario, de las guardias y saber tirar prontamente la estocada hacia el lugar que encontremos descubierto. Y en viendo un
poco descubierto el pecho hay que ir a atacarle poco a poco con la espada baja, dirigiendo la punta hacia el pecho del
enemigo. Y teniendo la daga hacia la guardia de su espada, venido en distancia, tirareis primeramente la espada después el
cuerpo y finalmente el pie, y veréis el efecto propuesto en esta figura. Ya que avanzando primeramente el brazo de la
espada y después el cuerpo le acertareis en el pecho, antes que el se aperciba de ello. Pero al contrario si avanzáis
primeramente el cuerpo y tiráis después la estocada, no haréis nada ya que el enemigo en apercibiendolo, no fallará en
parar y responder al mismo tiempo y os encontrareis en peligro. Así una vez que hayáis dado la estocada, deberéis retiraros
fuera de la distancia, sosteniendoos en guardia con las armas prestas para parar y golpear. Porque el enemigo en sintiéndose
herido se echará sobre vos de punta y filo para vengarse, lo cual parareis y golpeareis en el mismo tiempo, como habéis sido
enseñado con las seis figuras precedentes. Pero la importancia principal de esta figura consiste en que después de haber
herido, sepa el jugador retirarse saliendo de la distancia. Y para hacerlo en seguridad es necesario, como ha quedado dicho
mas arriba, retirar primeramente la cabeza, la cual será seguida del cuerpo y la pierna, ya que si comenzais la retirada por
la pierna, os pondreis en peligro o de caer o de ser tocado por el enemigo en la cabeza que ha quedado avanzada, y esta es la
cosa principal que debeis aprender.
Como se tira la estocada mientras el enemigo se mueve.
Figura 28.
El conocimiento del tiempo de la distancia y del herir prontamente son las cosas principales que son requeridas en la
esgrima, y las cuales observaremos en esta figura. Teniendo entonces la espada en la mano para encontrar al enemigo, ireis
a el iréis con el ojo vivo y las armas dispuestas a parar y herir. Y mirad si el quiere ser el primero en herir o no. Intentad
que el sea el primero, dadle tiempo de que el tire, mientras os tenéis sobre la parada, tiradle a el también una estocada en el
mismo tiempo de la manera antedicha. Pero si os apercibís que teniendo miedo de vos el se sostiene en guardia esperándoos,
id apretando poco a poco hacia la parte que veáis descubierta y habiendo llegado a la distancia, avanzando la daga hacia la
guardia de su espada le tirareis primeramente la punta, después el cuerpo, y después el pie teniendo siempre avanzada la
daga, con el fin de que si el enemigo tira en el mismo tiempo, vos le podáis parar, en suerte que los dos no os encontréis
heridos. Una vez dado el golpe hay que retirarse de la manera antedicha. Y mientras que intentáis atacarle el puede hacer
una de estas tres cosas a saber; que el tire, o que se tenga firme para parar o que el se mueva hacia el otro costado para
retirarse fuera de distancia, os comportareis si el tira o si se mantiene firme según el orden dado en la lección presente. Pero
si el se mueve retirándose de aquí o de allá o de la manera que quiera, le tirareis una rápida y súbita estocada mientras que
tiene el pie todavía haciendo el movimiento, puesto que durante su movimiento el no podrá herir al mismo tiempo que le
tiráis la estocada, después os retirareis fuera de la distancia como de costumbre.
Punta tirada sobre la daga.
Figura 29.
Para dar una estocada a aquel que tiene la daga bajada ha de hacerse como como vemos en la figura presente, ir a atacar
por el costado de la daga y en llegando a la distancia tirar primeramente la espada, después el cuerpo levantando un poco el
dorso de la mano, como veis en la figura, de esta manera encontrareis el efecto de esta pieza. Después os retirareis fuera de
distancia de la manera descrita en la pieza 27, lo principal es que estemos ejercitados en tirar primeramente la espada y
después el cuerpo y a retirarnos de la distancia en la manera ya antedicha, y que se sepa atacar al enemigo con tiempo y
llegados a la distancia, tirarle la estocada hacia el sitio descubierto, de lo cual dificilmente se podrá guardar. Y
necesariamente el se descubrirá en algún lugar, no pudiéndose cubrir del todo con su espada y daga. Iréis entonces y le
atacareis en la manera antedicha.
Sobre la guardias en general.
Hay muchas suertes de guardias desde las cuales nos podemos servir, ya que todas las maneras de sostener la espada son
reputadas como guardias, esto ha sido dicho arriba. Todas las guardias son buenas para aquel que conoce el tiempo y la
distancia. Como también en la guerra aquel que conduzca las guardias con artificio equivocara facilmente a su enemigo.
Guardia artificiosa con descubierta del costado izquierdo.
Figura 30.
Las guardias artificiosas son casi infinitas; de todas las maneras en este primer libro solamente voy a meter tres suficientes
para dar luz e instrucción a los buenos entendidos en hacer tantas guardias como deseen.
La primera y verdadera manera de tenerse en guardia artificiosa es de descubrir una parte del cuerpo de tal forma que
todas las otras queden cubiertas y que el enemigo no pueda herir sino en un solo sitio como se ve en la figura presente en la
cual veis todo el costado izquierdo descubierto, al cual el enemigo de todas las maneras no puede aproximarse sin peligro.
Ya que queriendo tirar una estocada o un tajo parareis y y le atacareis en el mismo tiempo, acercándoos con el pie que
acompaña la espada, mientras que paráis. Una vez tirada la estocada os retirareis rapidamente fuera de la distancia en la
manera antedicha. Estas guardias artificiosas son para los amantes del arte que tienen conocimiento del tiempo y de la
distancia, amén de buena practica. Porque con esta guardia se pueden hacer muchas cosas, se puede atacar al enemigo
mientras se esta aproximando y entre en la distancia y esperándolo se le puede herir en el sitio descubierto. O tirándole
podéis hacer muchas cosas como parar y golpear en el mismo tiempo o una finta y una pasada o todo aquello que se puede
hacer en cualquiera de las otras guardia, en la cual estéis ejercitado. Y si el enemigo estando en guardia tira
desordenadamente, tendréis el modo de parar y golpear al mismo tiempo de hacer la retirada segura. Esta guardia engaña
repetidamente, tanto a aquellos que saben jugar la espada como a los ignorantes. Ya que viéndoos así de descubierto ellos
caerán en la trampa y darán el golpe, pero lo parareis facilmente, golpeando en la manera antedicha ya que ellos estarán en
peligro sin apercibirlo.
Guardia artificiosa con descubierta del costado diestro.
Figura 31.
Esta es otra guardia artificiosa como veis en la cual queda al descubierto todo el costado derecho y cubierto todo el resto del
cuerpo de suerte que el enemigo nos os puede tocar sino es en el hombro derecho que esta descubierto. Pero le podéis parar
como queráis con vuestra daga y le podéis herir a pie firme o bien en avanzando el pie como mejor os parezca.
En esta guardia podéis hacer varias fintas y es singular para aquellos que están deseosos de herir y no tienen la paciencia de
tirar con tiempo y distancia. Ya que viendo al enemigo descubierto van a el sin considerar que se puede hacer, así se
enganchan repetidas veces. También son buenas para servirse contra aquellos que son bastante diestros. Ya que podéis ver
mejor vuestros actos y si el hace una finta vos podéis mejor pararle que estando en una guardia estrecha, y además las
puntas resueltas se paran mas facilmente en retirando la vida y volviendo a parar según lo que sean las puntas rápidas o
largas.
Guardia artificiosa descubriendo el pecho.
Figura 32.
He aquí una guardia en la cual el pecho esta descubierto, pero en la cual el enemigo no os puede herir ni del costado de la
espada ni del costado de la daga. Ya que en queriendo herir el tirará hacia el pecho descubierto y mientras que el tira vos
parareis y le herireis en el mismo tiempo o hacia el hombro derecho o en el rostro que son las partes mas cercanas. En esta
guardia se pueden hacer muchas fintas , pasar el pie y hacer todo lo que habéis aprendido en otras guardias. Es buena para
servirse de ella contra aquellos que tiran resueltamente y no hacen ninguna finta, pero no se debe usar contra aquellos que
dominen el tiempo y la distancia y saben tirar bien una punta resuelta con una finta. Contra estos, es mejor estar con la
guardia cerrada según la ocasión lo demande y sin peligro, buscar de cubrir con vuestra espada la del enemigo, fuera de
la distancia .
Finta de espada y daga para herir sobre la daga.
Figura 33.
Como el conocimiento del tiempo y de la distancia es el principal fundamento de la esgrima así el pase y la finta son el
ornamento de ella. El pase esta basado en el dorso de la mano, la finta en mostrar semblante de hacer una cosa y en hacer
otra. Y no puede haber una finta sin pase. Se pasa por arriba, por debajo de la guarnición de la espada, o de la punta de la
daga, o por dentro, o por fuera.
Yo no puedo tratar de la finta sin comprender el pase. La finta es un fraude mortal y casi irreparable lo mismo para
personas valientes y profesores de esta ciencia y para aquellos que no tienen conocimiento alguno. Es del todo inevitable, y se
hace de la siguiente manera. Para dar una estocada por encima de la daga en el pecho o en el rostro del enemigo es necesario
ir a el con la espada baja, bajo la daga, teniendo vuestra daga hacia la guardia de su espada. En encontrándoos en distancia
tirareis un estocada resuelta y os retirareis sin contención. Si la acertáis no hay nada mas que hacer, pero si el para, vos
retornareis al ataque y estando en distancia tirad la punta sin alargar el paso, teniendoos firme de cuerpo con la daga hacia
abajo. Y mientras que el enemigo la quiera parar bajando la daga, vos elevareis la punta de vuestra espada en girando el
dorso de la mano y alargando el paso, le herireis en el pecho o en la faz, sin ningún peligro sin ser apercibido, como veis en
la figura la cual a fin de que tenga su efecto requiere una gran destreza y rapidez a fin de que no se sepa si va resuelta o
finta. Y estad advertidos que en queriendo meter la punta de vuestra espada por encima de la daga del enemigo vais con el
pase de modo que pasáis y le heris en el rostro al mismo tiempo. Después retiraros fuera de la distancia como ya ha sido
dicho en asegurándoos de la espada enemiga.
Finta de espada y daga para herir en el pecho.
Figura 34.
Esta finta no es en nada diferente a la precedente, sino en que se hiere por debajo de la daga y no por arriba, y se hace
siguiendo las mismas reglas que la de arriba. Debeis tener aquí la espada alta y habiendo ido al enemigo le tirareis una
punta sobre la daga, elevando el brazo un poco mas que la punta de la espada. Esta manera de golpear se llama cortar la
daga. Si el no para no habrá otra cosa que hacer. pero si lo hace le presentareis la punta como antes, teniendoos seguro en el
paso y a pie firme y mientras el quiere parar vos encaminando la punta de vuestra espada bajo la guarnición de la daga,
girando el dorso de la mano y acrecentando el paso, le herireis en el pecho antes que el pueda apercibirse de ello. Después os
retirareis fuera de la distancia en asegurándoos de la espada enemiga como en la anterior pieza.
Finta de la espada y daga para herir en el rostro pasando la espada sobre la punta de la
daga.
Figura 35.
Para dar una estocada en el rostro de vuestro enemigo debeis usar la finta siguiente, la cual como mas difícil es también la
mas bella. Hace falta entonces atacar al enemigo por el costado de la espada, teniéndole la punta hacia el rostro en el
costado derecho y esperar si el va a herir o el va a sostenerse en guardia para parar.
Si el queda en guardia fingid que queréis tirarle una punta al rostro, la cual el va a parar, vos girando el dorso de la mano
y la punta de la espada por encima de la punta de la daga del enemigo le herireis antes que el se pueda apercibir, estando
descubierto del todo. Después de hecha la herida os retirareis como ha quedado dicho mas arriba.
Como se para una estocada larga con la espada en retirandose
Figura 36.
El parar es tan necesario en esta profesión que yo la estimo como la cosa mas importante en ella. Así que voy a mostraros 3
maneras de parar las estocadas largas. Os pondréis en guardia en la manera arriba descrita, con el cuerpo avanzado, el
pecho un poco descubierto en el limite de la distancia o fuera de ella, pero no dentro de ella. Y si estando en distancia veis
que la estocada os es tirada retirándoos hacia atrás, parareis con la espada, como veis en la figura y en el mismo tiempo (ya
que retirándoos, os salváis de la punta de la espada enemiga de suerte que ella no os podrá alcanzar) que estirando el
cuerpo se pone en desorden y dificilmente podrá parar, avanzareis el paso y le herireis como ha sido dicho arriba. Advertid
que en parando o en retirándoos os debéis tener firme sobre los pies.
Como se para con la daga en retirandose.
Figura 37.
Os situareis en la misma guardia que arriba, el cuerpo avanzado con artificio, teniendo la daga hacia la guardia de la
espada enemiga y estando en la distancia, viendo que el os tira la punta, parareis con la daga y en el mismo tiempo retirareis
el cuerpo en retirando el pie que estaba avanzado. Debeis tener la espada presta para herir como se ve en la figura, ya que
teniendoos fuerte sobre los pies y con la espada libre podéis hacer varias cosas antes que el vuelva a ponerse en guardia,
después tirando largo y agachando el cuerpo el os dará suficiente tiempo.
Del parar con la daga y herir con la espada en el mismo tiempo, en retirandose.
Figura 38.
Si como en las dos primeras figuras se para con la daga y después se hiere, lo cual se hace en dos tiempos el uno del parar y
el otro del herir, ahora bien en esta otra figura se muestra como parar y herir en un tiempo. La razón de llevar la vida en
diestro es que vais a desconcertar al enemigo y hacer mejor vuestro asunto. Entonces poneros en la misma guardia de sobre
espada y daga con la vida atrasada agachando el cuerpo y una vez esté en la distancia dejadle tirar y cuando este tirando
deberéis hacer tres cosas en un mismo tiempo; parar con la daga, atrasar la vida arrastrando el pie adelantado hasta
juntarlo con el atrasado, dejando el cuerpo curvado alargar el brazo y tirar la punta al pecho. Este modo de parar y herir
engaña al enemigo y es imposible que el se defienda. Después de esto salir fuera de la distancia y asegurarse como ya ha sido
dicho.
De la punta en el rostro en parando con la espada.
Figura 39.
Se muestra en esta figura una punta a pie firme muy útil y bella para aquellos que la sepan ejecutar y estén ejercitados. Se
hace de la siguiente manera: si el enemigo quiere tiraros una imbrocatta hacia el rostro o bien una punta directa, vos
parareis con la espada y tirareis al mismo tiempo la punta hacia su rostro, la cual el no podrá parar con su daga porque vos
tirareis al mismo tiempo que el tira, y si el quiere parar con la daga no podrá echarse sobre la espada de suerte que resultará
tocado en el rostro.
Esta lección no enseña otra cosa que a hacer la herida en el rostro y si queréis herirle en el pecho el tendrá el medio de parar
con su daga. Y para hacer la herida con artificio, de tal manera que un buen maestro sea engañado, es necesario descubrir
el costado siniestro y tener la daga bajada, dando ocasión al enemigo de tirar hacia el rostro o por encima de la daga en
persuadiéndose de que parareis con la daga y en el mismo tiempo con el fuerte de la espada, avanzareis el pie derecho
teniendo la punta de vuestra espada hacia el rostro donde le encontrareis impedido por su espada, de tal manera que el no
podrá ni parar ni herir como veis en la figura. Una vez hayais herido os retirareis fuera de la distancia como ya ha sido
descrito mas arriba.
De la pasada con espada y daga para llegar a la presa y herir con la daga en el rostro.
Figura 40.
Hay muchas maneras de llegar a las presas y herir con la daga, según la diversidad de las ocasiones en las cuales uno se
encuentra.
Muchos llegan a las presas cuando no pueden hacer nada o porque el enemigo es furioso en el pasar. Los otros pasan
encolerizados no teniendo la paciencia de jugar con la punta de la espada Otros pasan con artificio para herir con la daga.
En este primer libro no voy a meter mas que una pasada artificiosa para golpear sin peligro con la daga, en suerte que el
enemigo no os pueda ofender ni con su espada ni con su daga. La cual se hace de la manera siguiente: Hay que ponerse en
guardia de tal manera que todo el costado diestro quede descubierto y que el enemigo tenga la ocasión de tirar de manera
resuelta ya sea de punta o de tajo, entonces parareis con vuestra espada y pasando con el pie enfrentareis rápidamente su
espada con la vuestra y meteréis vuestra espada en el brazo de su daga como veis en la figura, afín de que el enemigo no
pueda manejar ni la espada ni la daga y le podáis asestar cuantas heridas con la daga deseéis. esta lección es muy segura
para quien la haya ejercitado.
Punta con espada y puñal tirada hacia el hombro derecho.
Figura 41.
Alguien que sea valiente en esta profesión no se pondrá jamas en guardia, pero en estando fuera de distancia considerará la
guardia del enemigo y le irá atacando por el lado descubierto y habiendo entrado en distancia herira en la manera de la
figura presente, en la cual vemos el hombro diestro descubierto, sois advertido de asaltarle por el costado de la espada y si le
veis ponerse en guardia para heriros, le tirareis la estocada rápidamente de la manera antedicha girando el dorso de la
mano hacia el costado de la espada enemiga como veis. Después de haber herido retornareis fuera de la distancia como
arriba.
Como se pasa con el pie con espada y daga.
Figura 42.
Esta figura no sirve de otra cosa que de muestra de lo he hecho en este primer libro pero en los otros que pronto verán la
luz (con la ayuda de Dios) trataré mas ampliamente las pasadas con espada y daga, es decir como se pasa adelante con el pie
ya que en este todo lo que se hace es a pie firme. Porque todo lo que se hace a pie firme se puede hacer también en pasando el
pie para lo que hay que servirse de los tiempos.
Entonces habiendo hecho la pasada hace falta saber pasar la espada y después salvarla como veis en esta figura en la cual
veis que quien ha pasado hace un pase con la espada en suerte que el puede dar tantas estocadas como le venga en gana sin
peligro mientras retiene la espada enemiga con su daga. Pero si el enemigo pasa la espada hay que seguirle con la daga y
mientras herir con la espada. Y después de haber dado las estocadas que queráis os retirareis fuera de la distancia. Ya que
aquel que sabe tomar bien el tiempo, pasa el pie, pero no sabe pasar la espada, solo puede ser estimado como ignorante
porque pasando antes de herir no esta de ninguna manera fuera de peligro, ya que el enemigo querrá también herir. Y se
encuentran hombres de gran coraje que sintiéndose heridos quieren tener su revancha y tiran a la desesperada de manera
que podéis ser herido y muerto. Si vuestro enemigo cuando estáis pasando os para la estocada os encontrareis en un
grandisimo peligro si no sabéis pasar la espada y combatir a media espada como se vé en la figura y no os podríais retirar,
como será demostrado Dios mediante en mis otros libros.
FIN DEL LIBRO PRIMERO
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