el devenir de los cuerpos múltiples

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EL DEVENIR
MÚLTIPLES
DE
LOS
CUERPOS
Por Germán Cavallero
Desamor: Entrevista a Leonor Silvestri acerca de su último
libro, “Games of Crohn”
Edición y entrevista: Germán Cavallero.
Salud o enfermedad. Lozanía o vejez. Libertad o encierro. Bajo
su peso hacemos el esfuerzo de transcurrir y sobrevivir, pero
si la entrevistada es Leonor Silvestri, una pregunta puede
arrojarnos al pináculo de su jauría, de su palabra fulgurante.
Y así, a través de una enfermedad autoinmune como Crhon*,
alivianar la carga, descategorizar, poner en cuestión. La
sanidad es un bien, pero también es un mal si su consecución
implica sujeción a normativas que poco tienen de sano, más
bien, todo lo contrario. Salud o enfermedad. Libertad o
limitación, discapacidad. Detrás de un diagnóstico médico se
revela un diagnóstico social que, lejos de empoderar y
liberar, acentúa el desamor de un sistema en palpable agonía.
Pero se puede dar batalla en todos los cuerpos, no sólo en el
propio sino también en el social. De la mano de Leonor
Silvestri.
VIBRACIÓN POR SIMPATÍA
“Games of Crohn” es el título del último libro de Leonor
Silvestri. “Games of Thrones” resuena tal vez, no tanto por la
proximidad sonora de las palabras, sino quizás porque el
libro, como la serie, plantee un juego de tronos, una disputa
territorial…
La verdad, no lo había pensando pero supongo que sí. No vi la
serie, no suelo ver series, me aburren. Pero nos pareció -.al
fin de cuenta todo punto de enunciación es múltiple, son
agenciamientos de enunciación -un título pegadizo y divertido
para algo que es en serie y crónico, como una auto-inmune. Me
alegra que puedan proliferar sentidos en esa lectura que vos
proponés. Al fin de cuentas, el cuerpo es un espacio de
disputa soberana, donde damos nuestras últimas batallas.
El alma del sonido es su propia frecuencia, es decir, una
cantidad determinada de ondas que él mismo produce en el aire
en un segundo. Y el cuerpo del sonido es el instrumento que le
da vida. Si ese instrumento u objeto encuentra en el ambiente
en que suena otro objeto (una campana de ventilador de techo o
una manija de puerta), capaz de producir la misma frecuencia,
lo hace vibrar. Ese fenómeno se conoce como vibración por
simpatía, una vibración despierta a otra para vibrar juntas.
¿Escribir un libro es concebir una frecuencia singular,
única, pero también una búsqueda de vibración plural?
No tengo idea. Jamás pienso en eso cuando escribo. Pero espero
que puedan leerlo tanto las personas relacionadas a los
servicios médicos (desde personal de enfermería hasta médicos
y médicas) pasando por todas las personas interesadas en
discapacidad y diversidad funcional. Asimismo, el libro
propone un entrecruzamiento entre la diversidad funcional, el
eufemismo políticamente correcto para referirse a
discapacidad, y la lucha contra el régimen heterosexual de
normalidad y sus cánones. Por ende, es un libro donde la
biopolítica hace carne de la cintura para abajo.
No es un mito: la copa de cristal entra en vibración si la
nota emitida desde la garganta de una cantante tiene la misma
frecuencia que la de la copa. A veces las empatías resonancias, ecos- rompen estructuras. De pensamiento.
Yo soy de la idea de que las cosas le llegan a quienes le
tienen que llegar, cuando es necesario que les llegue. Creo
que, en la villa, debería haber taller de Spinoza permanente.
César González*** es un ejemplo. De la academia no formo
parte, la gente me confunde con ese sitio porque puedo
articular de corrido. Ciertamente, ahí estudié. Crohn no
discrimina. Como es genético, lo puede tener cualquiera. Si el
libro expulsa, será por intereses. A quien le interese pensar
que el Hospital es genial, los médicos santos y la ciencia,
salud, pues no le va a gustar. Del mismo modo que quien lee
Cohelo, quizás no lea Nietzsche. Pero Severino Di Giovanni con
su escasa escolarización era lector del bigotudo, así que ya
ves. Igual es chistoso cómo las personas de clase media
piensan que hacen algo por el bien de los de la periferia al
preguntarse si tal o cual material les incluye como su público
lector. Como si en la pregunta estuviera ya la garantía de
aporte del granito de arena de la buena conciencia. Yo te digo
qué me propuse hacer y seguro no va a satisfacer todos los
deseos de bien de las personas: me propuse salvarme mediante
la escritura que me agencié con Crohn, para formar un tercer
cuerpo más resistente. Eso, mediante una crítica mordaz, no
solo a los dispositivos médicos y a sus diagnósticos, sino a
la buena conciencia que todo lo corroe con sus ideas del bien.
DEL MYTHOS AL LOGOS
Leonor afila su punta y selecciona minuciosamente el destino.
Así, los cazadores desprevenidos son cazados. Su dardo es una
lengua concisa, no admite rodeos: va al centro, viaja en
tiempo real, pero atraviesa todas las temporalidades, todos
los estratos de la palabra y sus significados. Y resignifica.
Y vibra en clave montaraz, ritual y dialéctica.
Las capacidades diferentes son diferentes, ¿a qué, a quién? La
idea de diferencia supone una normalidad de la cual se
difiere. No quiero pensar así. Prefiero pensar en diversidades
y multiplicidades. El diagnóstico médico hoy prescribe y
define una diversidad funcional que debería ser cuidada,
respetada y valorada como la diversidad de la flora y la de la
fauna. Pero diverso hoy no alcanza, porque es el eufemismo que
la buena conciencia utiliza para referirse a lo abyecto sin
sentirse un sorete al hacerlo. Prefiero tullida o disca
aunque, en realidad, creo que somos mutantes divinas que
deberíamos ser apreciadas por nuestro grado de singularidad,
como esas especies que viven en el fondo del mar y fosforecen;
o esas ranitas exóticas, o como fue Lucy, la primera monita,
tal vez considerada mas feúcha que el resto, porque su pulgar
era oponible; ésa que se bajó de la rama -o la bajaron con la
intolerancia- y de donde derivamos hoy todas las que tenemos
pulgar oponible. Mis capacidades no son diferentes ni menores.
LABOR DE LABORATORIOS
Fui testigo directo de cómo una paciente oncológica se
aferraba a la obra social, a la clínica y al médico, camino al
escurridizo paraíso que era su salud perdida. Y a la droga,
hostia salvífica, de un costo mensual de U$S 40 mil, diseñada
a la medida de los intereses de un laboratorio y no del
retorno al Edén expropiado. Y las confesiones masculladas del
médico, al corroborar aquello de que, en las sombras, un dios
enfermo de desamor se enriquece a merced de nuestro exilio
espiritual. Desamor, en la punta de la pirámide.
Por otro lado, están las políticas públicas de salud, aun
dentro de un engranaje turbio, con drogas accesibles,
gratuitas…
Las políticas públicas no son de salud, son médicas. El
concepto que en esos lugares se tiene de la salud no es el que
yo tengo, ni el que tenía- por decir alguien- Nietzsche.
Prefiero hablar de servicios médicos, o de asistencia médica.
Las drogas no son gratuitas, ya están pagas, lo mismo que los
subsidios no son dádivas. Cada vez que no me cobran como
discapacitada el subte es porque el pueblo argentino colabora
mediante la extracción de sus impuestos para que eso sea así.
Gratis no hay nada. No creo entender bien tu pregunta. No
obstante pienso que las drogas que mantienen con vida a las
personas con Crohn deberían estar liberadas, ser expendidas en
centros especiales sin tanta burocracia. Y estoy convencida
que, de costo, no cuesta tanto
producirlas. Pero es que la
industria farmacéutica y la
corporación médica de sanos no
tienen nada. Ellos son quienes
aumentan esos precios de tal
modo que solo puedan ser
accesibles mediante intervención
estatal. Y a mí no me molesta
ser o vivir en la contradicción, lo que me molesta es la
inconsistencia. La contradicción y el conflicto es vida. Tal
cual Crohn. La coherencia es nazi.
Pero la escritura, en su logística de antídoto contra el
antídoto…
Me lo recomendaron dos personas ante la locura producida
tanto por el encierro, como por el proceso de medicalización
del cuerpo y por el diagnóstico. El único compañero de la
secundaria que frecuento, Ricky Estévez, me hizo ver que,
lejos de tratarse de el fin, Crohn me proponía un comienzo
para un estudio aun en mayor profundidad y con una legitimidad
en la enunciación de la que antes carecía para el trabajo en
torno a los dispositivos de control de la biopolítica. Y, por
otro lado, mi psiquiatra, Daniela Tellias, que me sugirió,
entre otras cosas (dejar la bata de hospital, escuchar música
y arreglar la celda/habitación), que echara mano a la
escritura como recurso para no volverme literalmente tan loca
que ya no pudiera regresar. Es una afirmación producto de la
reactividad lógica que supone una situación de encierro.
¿Cómo organizaste el material del libro?
Escribí, promedio, una entrada por día de internación. Y
luego, continué escribiendo algo que a mí me gusta llamar
“Diario de Guerra”, donde continué con la externación, es
decir, con lo que suponía este cuerpo nuevo y enfrentarme a
otros dispositivos: las instituciones sociales discapacitantes
y a la gente.
y un libro como nueva voz del cuerpo…
Sin duda, como un agenciamiento hacia la lozanía de espíritu,
al estilo Niezstche- salvando las distancias-, quien, en cada
período de salud, aprovechaba para escribir lo meditado cuando
sus cefaleas y otras afecciones le tomaban el cuerpo.
LA OTRA FLECHA
No es áurea ni brilla en la punta. La flecha del desamor va
sin filo y con apagado plomo bajo la caña. Pero no todos los
cuerpos son sus blancos perfectos.
Yo no creo que el cuerpo sea algo, creo que el cuerpo
funciona de un determinado cómo. Para mí Crohn es el premio a
mi trayectoria, la posibilidad de saber que mi inadecuación
con un medio social y un mundo tiene sentido. No pertenezco
aquí. Crohn me permitió construirme unas narrativas mucho más
hermosas y alentadoras que las que venía llevando adelante,
sin desdecirme enteramente de lo anterior.
Crohn como flechazo de desamor del cuerpo hacia sí mismo,
como pérdida parcial de un autoafecto positivo…
Yo no creo en esas teorías, de hecho, hicimos varios
capítulos en el libro sobre el tema. De esta idea de desamor
hacia sí mismo de las autoinmunes se desprende una
reterritorialización
eugenésica
bien
pensante
y
culpabilizadora. Así, la enfermedad sería culpa de quien la
padece y de que sería mejor que no existiéramos (como alentar
el aborto de cualquier cuerpo que sepamos que nacerá con una
ostensible diversidad). Por el contrario, creo que lo que
llamamos Crohn, como otras afecciones, hacen parte a la
diversidad de los cuerpos, que vienen en múltiples formas y
funciones. Mi cuerpo no tiene nada malo, así funciona. Y como
cualquier otra máquina, funciona rompiéndose. Como todo hecho
vital no es ni eterno ni perenne ni incorrompible. Como
cualquier situación es móvil y precisa apuntalamientos. Todos
estos temas que discuten y objetan la noción de salud hacen
parte del ensayo. Donde veo desamor y afectos o pasiones
tristes y capturas es en torno a la organización médica que
nos trata (el hospital, sus modos, los laboratorios, el
encierro,
el
diagnóstico)
y
a
los
discursos
responsabilizadores desde la idea del bien; esa idea de que,
en realidad, portar una condición autoinmune, o cualquier otra
cosa, depende de eso que vos estás llamando “autoafecto”. Creo
que se trata de nazis mal vestidos, gente que viste harapos
pero piensa como el doctor Menguele. Y tiene un halo de bondad
protectora que invisbiliza sus malas intenciones.
Crohn como narrador de las múltiples facetas de un desamor
infalible…
¿Surgieron tipos de desamor a partir de Crohn?
Claro. La gente no sabe qué hacer con todo aquello que no
repita lo que ya sabe. No hay espacio para alojar y cobijar a
cuerpos que no funcionan como se nos dijo en el libro de
biología. Es decir, en el de política social: que un cuerpo
debe funcionar. Me hice un banquete de reflexión con la
violencia institucional y con la violencia de pensamiento de
las personas que se consideran sanas. Casualmente, son las que
te dicen- sin que se los pidas- que afecciones tipo Crohn
dependen de alguna obturación en el conducto de los afectos.
Dicen eso cuando esas personas tienen sus conductosespecialmente los anales, porque suelen ser biovarones
heterocis-, más que obstruidos por la heterosexualidad como
régimen político.
La flecha del desamor
cosifica
Dafne)
COMPORTARNOS PARA ABONO
(Apolo
y
En niños de hasta casi dos años de edad, todavía no existe
repulsión ni al olor ni a lo que la mierda representa en los
adultos. Y, a lo largo de los años, se construye ese rechazo
como tantos otros: por eso terminamos con desodorante en
nuestras axilas para rehuir el olor propio.
Cuando Crohn se te declare, vas a ver cómo te empezás a
llevar mejor con los pedos y la mierda. A mucha gente no solo
no le dan asco los aromas corporales, sino que les encantan.
¿Te estarás juntando con la gente equivocada?
Si Crohn, en lo personal, confirma ese juego de tensiones
entre una permanente ansia emancipatoria y la subjetivación
impuesta desde la medicina, ¿se puede hablar de ganadores y
perdedores?
Yo no creo que una subjetividad se imponga, creo que se
construye. También siento que un acontecimiento, y todo
proceso de este tipo lo es, permite el devenir y -por ende- el
incremento de las potencias. En el corazón mismo del poder es
donde se encuentra la resistencia. Y, en el menor grado de mi
potencia física, me seguía sintiendo vitalmente entera, dando
mis luchas.
¿El cuerpo como aliado fundamental, trinchera o estandarte a
partir de Crohn?
El cuerpo siempre, el cuerpo son los cuerpos, porque somos
Trickster,
Priego, 2007
Joan
tecnovivas conectadas. Y no somos una, sino una multiplicidad
agenciándose con otros encuentros, que no incluyen solamente
personas, sino muchos cuerpos, cuerpo máquina, cuerpo libro,
cuerpo molecular.
Hay pasiones que reciclan y otras que putrefactan. Hay las
que amasan y redireccionan la energía, como verdaderas
lombrices californianas, y las que encajonan, sepultan y
enfrían, como emisarias de un desamor devenido sepulturero.
En el documental hablás de no perder el tiempo en “pasiones
tristes”, ¿se pueden pensar a las mismas como formas de
desamor hacia uno mismo?
No perder el tiempo con pasiones tristes, capturas. Insisto,
no veo a nadie que se ame menos a sí mismo que las personas
que son normales y realizaron, por amor, todos los
mandamientos de la heterocultura. No siento que una
autoinmune, un cáncer, VHI o glaucoma, esclerosis múltiple o
autismo tengan nada que ver con no amarse. Por el contrario,
creo que esas y otras son expresiones de la diversidad de
funcionamientos del cuerpo, cuando no síntomas e
inadecuaciones a un mundo que repele todo lo distinto y crea
narrativas de la bondad, para decirnos que es culpa nuestra no
ser normales. Y así, podernos enviar a las nuevas cámaras de
gas. Insisto, el discurso de querer es poder, el de la salud,
el de la normalidad y el del amor propio todo lo cura son
pasiones tristes y capturas de esclavos imperiales que te
quieren rendida o muerta. El cuerpo se expresa, yo celebro sus
expresiones, aunque duelan. Yo ya no pierdo más el tiempo con
la gente que lava sus culpas neo nazis fingiendo preocupación
y mandándote a hacer lavativas de lino, terapia de abrazar
delfines, o lo que fuera. Deberíamos pensar en la falta de
autoamor, por ejemplo, de todas aquellas mujeres que, pese a
la evidencia cotidiana, continúan casándose y reproduciéndose,
cuando la estadística arroja que es en el vínculo de pareja
heterosexual cotidiana donde se encuentra la muerte violenta.
Lo que la medicina, brazo armado de la política, llama
“enfermedad”, en la mayoría de los casos, no tiene cura. Por
ende, se trata de una condición del cuerpo, deseante y
deseable, que habla de la potencia de ese cuerpo (que es
mucha). Esa es nuestra singularidad, así somos. Acontece que a
la gente le da ansiedad pensar que dejará de ser normal (cosa
que simplemente ocurre porque ningún cuerpo se mantiene al
mismo nivel siempre) y conjura esa ansiedad, con esas
ficciones eugénesicas de que se enferma quien no se amó. Para
mí no se ama la gente que vive junta y en pareja, esa que no
encuentra otras maneras de vivir libre.
REBENQUE DE NÁYADE EN EL LOMO DE LOS RÍOS
Marix Intestino
Crohn empodera. O rescata los sedimentos de empoderamientos
postergados. O se configura como delta de empoderamientos
superadores.
Ni postergados ni superadores. No veo la vida así. Hegel, uno
de los bastardos de Platón, me parece un error de la
naturaleza. Siento que Crohn es una posibilidad vital de
empoderamiento para quien la pueda tomar así. Para mí fue el
gran acontecimiento de mi vida, lo más potente que me ocurrió
nunca y la posibilidad para pensar los flujos de vitalidad y
todo lo que me vino pasando a posteriori de una manera mucho
más potente.
… o Crohn como dique…
Voy a empezar a sentirme insultada por tus prejuicios y
preconceptos capacitistas. Mirá, un freno para mí es tener
coche, pareja, casita, querer tener bebés, ser varón
heterosexual. Esos son frenos. Crohn, que no tiene nada que
ver con la absurda conciencia y voluntad, es pura potencia. No
creo en la fuerza de la voluntad, del mismo modo que pienso
que lo mejor que le puede pasar a un sujeto es desujetarse. Y
a todo eso me ayuda Crohn, especialmente a los flujos de deseo
y a las pasiones alegres y las alegrías de acción que no
emanan ni emergen de un sujeto soberano que cedió su poder,
sino de la plena potencia del cuerpo que se expresa inadecuado
para su medio social heterocapitalista. Si querés te miento
así no te da tanto miedo a vos. Pero, sinceramente, cuando
pienso en un dique, la imagen en la cabeza se parece más a la
vida que supongo tenés vos.
Leonor, tornado vertebrado de contundencia verbal que vuela
techos y hormigones. Audaz. Creativa. En su peón entraña
reinas. Ahora, bajo el brazo, “Games of Crohn”: un libro como
arma lúcida para atravesar paredes, hospitales y todos los
istmos o ismos que se le presenten.
Antes de la presentación de su libro le pregunté cómo
imaginaba ese momento, ya que ha incursionado en performances
varias…
Las performances las hago ya en la clínica. Detesto presentar
libros, lo hacemos porque es necesario, porque somos muy
pobres y necesitamos venderlo para seguir produciendo. Espero
que pueda darse un debate y una charla interesante. Espero
poder contar con la presencia de algunas amigas queridas para
charlar el tema. Y con buena música y bebida. Un típico
convivium. Con eso me alcanza y me sobra.
“Crohn, es vital pensarte como un amanecer no
El cielo se serena aunque hoy tampoco salió el
de ópalo gris destiñe un manto lila por donde
línea esboza en mi pierna hoy magra, trae
como un ocaso.
sol. Una calma
un Kilin, cuya
finalmente la
prosperidad y la serenidad de este nuevo devenir incierto,
pero palpitante.”
(Leonor
Silvestri,
http://leocatlove.blogspot.com.ar/2014/05/atrapada-sin-salidagames-of-crohn.html?zx=8590907ad01235d7)
Games of Crohn, el documental:
https://www.youtube.com/watch?v=oTgv-3K9mg4
Para conseguir el libro:
https://www.facebook.com/gamesofcrohn/
https://www.facebook.com/leonorsilvestri/
*La enfermedad fue descripta por primera vez por Giovanni
Battista Morgagni (1682-1771). John Berg en 1898 y el cirujano
polaco Antoni Lesniowski en 1904 describieron más casos de la
dolencia. En 1932 la información fue publicada nuevamente por
Burril Bernard Crohn y de su apellido proviene el nombre más
conocido de la enfermedad. La EC es un trastorno inflamatorio
crónico, cuyos síntomas pueden ser constantes o intermitentes.
A pesar que puede afectar cualquier segmento del tracto
gastrointestinal – desde la boca hasta la piel alrededor del
ano- comúnmente afecta el final del intestino delgado (el
íleo) y el principio del intestino grueso (colon),
involucrando incluso las capas más profundas de la pared
intestinal. A diferencia de la CU, en la EC los tramos del
intestino enfermos se encuentran intercalados entre tramos
sanos. La enfermedad puede ir agregando segmentos
comprometidos. Es decir, por mucho tiempo puede estar
localizada en un área del intestino y luego afectar a otras.
http://www.masvida.org.ar/informacion/enfermedad-de-crohn.html
** César González es cineasta y escritor. Nació en el seno de
una familia muy pobre en la Villa Carlos Gardel (Morón) el 28
de Febrero de 1989. Es el mayor de 8 hermanos.
A los 13 años empezó a recorrer un duro camino de adicción a
las drogas, comenzando con el poxirran, hasta ser un adicto
muy fuerte a la cocaína y rivotril. A los 14 comienza su
violento camino delictivo, robando casi todos los días autos y
casas a mano armada. Ingresó en varios reformatorios y
comisarias por los delitos de robo automotor, robo calificado,
resistencia a la autoridad, etc. A los 15 años quiso asaltar
un automóvil Ford Fiesta a pocas cuadras de la villa, sin
saber que quien manejaba era un policía de civil, que lo hirió
gravemente en el estómago. Volvió al robo de auto y casas
hasta que volvió a ser herido. Fue durante su estadía en
prisión, más precisamente en el Instituto Belgrano del Barrio
porteño de Once, donde conoce a Patricio Montesano, una
persona que dictaba talleres de magia, con la particularidad
de que dichos talleres se llevaban a cabo dentro de los
pabellones y no en la escuela penitenciaria como establece el
estatuto de una cárcel.
En el año 2007 César se le ocurre la idea de armar una revista
donde publicar sus primeros textos, que estaba empezando a
componer en cada noche de celda. El primer número de la
revista ¿Todo piola?, tal fue el nombre elegido por césar, es
un nombre que representa la simbología y las tradiciones del
pueblo villero. Desde un comienzo sus textos los fue firmando
bajo el Seudonimo de Camilo Blajaquis. Que conforma un
homenaje al revolucionario cubano Camilo Cienfuegos y al
militante sindical Domingo Blajaquis, mientras estuvo preso
salieron 4 Números de Todo Piola, con su idea de ser una
revista donde los más pobres, oprimidos y olvidados de la
sociedad puedan expresarse a través de la literatura . También
en su lapso de prisión y al ritmo de los golpes terminó la
secundaría, hizo diversos talleres de electrónica y reparación
de PC, Panadería y Plomería.
Una vez recuperada la libertad comenzó el CBC para la carrera
de Filosofía en la UBA y a los 5 meses de Salir de estar
privado de su libertad y con solo 21 años publica su primer
libro, “La venganza del cordero atado”, bajo el sello
editorial Ediciones Continente. Un compilado de 90 de sus
poesias escritas en prisión que presentó en la Feria del libro
de Buenos Aires en el 2010 junto al ex revolucionario del
PRT-ERP, Luis Matini y el reconocido crítico literario Noe
Jitrik.
En noviembre del año 2011 presentó en la Biblioteca Nacional
su segundo libro, Crónica de una libertad condicional, todos
poemas escritos en libertad.
El moderador de la presentación fue el sociólogo y director de
la biblioteca Nacional, Horacio Gonzalez y el libro fue
nuevamente ilustrado por Rocambole.
En el 2012 trabajo como conductor de un ciclo documental
llamado Alegría y dignidad, producido y dirigido por Cristian
Jure, emitido en TV por Canal Encuentro.
EN el 2011 publica su segundo libro de poesía “Crónica de una
libertad condicional”.
Desde su primeros pasos en libertad además de las letras,
César lleva realizado un extenso trabajo en cine. En el
periodo 2010-2012 presenta sus primeros trabajos realizados de
forma amateur, los cortometrajes de ficción; “El cuento de la
mala pipa” “Mundo Aparte” y “Condicional” (todos se encuentran
en youtube).
En Julio del 2013 estrena su primer trabajo profesional;
“Diagnostico Esperanza” largometraje de ficción, presentado en
el Cine. En diciembre del mismo año estrenó una serie de
formato documental en la pantalla de Canal Encuentro titulado
Corte Rancho, 4 capítulos que recorren diferentes villas de la
Capital y del Conurbano.
En 2014 realiza los cortometrajes “Guachines” y “Truco”.
En el 2015 llega el turno de su segundo largometraje de
ficción ¿Qué Puede un cuerpo? y de su tercer libro de poesía
“Retórica al suspiro de queja”.
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