220-72403, 21 de octubre de 2003 Ref. mayorías calificadas Me refiero a su escrito radicado en este Despacho con el número 2003-01-156971, a través de la cual solicita concepto sobre ¿Cuál es el quórum requerido en la Asamblea para efectos de una reforma estatutaria cuando el estatuto social exige para este caso una mayoría calificada? Con la expedición del artículo 68 de la Ley 222 de 1995, introdujo el legislador modificaciones sustanciales al tema de los quórum necesarios para deliberar y tomar válidamente determinadas decisiones en las sociedades anónimas. Así, para deliberar, señaló la disposición la necesidad de existir un número plural de socios que representen, por lo menos, la mitad más una de las acciones suscritas, salvo que en los mismos estatutos se haya pactado un número inferior de miembros. La excepción que establece imperativamente la norma en comento, es que mantuvo las mayorías señaladas en los artículos 155, 420 (5) y 455 del Código de Comercio, en las cuales las decisiones se deben tomar por mayoría de los votos presentes; y en aquellas sociedades en las que sus acciones no se negocian en el mercado público de valores, dejó a la voluntad de los asociados pactar un quórum diferente o las mayorías superiores indicadas. Precisamente sobre esto último, y partiendo de la base de que la sociedad objeto de su consulta no negocia sus acciones en bolsa, debe anotarse que la ley permite a los socios la facultad de pactar en los estatutos de la sociedad mayorías calificadas para una decisión en particular, por lo que es a esa a la que deben ceñirse a fin de que sea válida. En otros términos, no existe un porcentaje distinto predicable de esa mayoría calificada, mas allá de la designada voluntariamente por los accionistas de la sociedad, y que el único camino que le queda al ente económico es el de que la asamblea general modifique lo estipulado, y a partir de allí, atenerse a lo dispuesto por el artículo 68 mencionado. En los términos anteriores se da respuesta a su consulta, y se le advierte que los efectos de este pronunciamiento son los previstos en el artículo 25 del Código Contencioso Administrativo.