EL TAPIZ VEGETAL mada lleva una estepa arbustiva, en la composición de la cual entran, ade­ más de los elementos que ya hemos visto en Tadjest, Eupborbia balsamífera var. Rogeri, y en mayor proporción que al S., hasta hacerse domi­ nante, Eupborbia Echinus; Senecio anteu-phorbium se hace bastante co­ mún, y los liqúenes saxícolas son muy abundantes. M u y cerca del litoral, la hamada de arenisca entrecruzada está fuerte­ mente provista de arena y mucho más denudada. Allí se hallan casi única­ mente poblaciones de Zygo-phyllum gaetulum y Euphorbia Paralias. Borde N . de la Seguía el Hamra. El A i u m . Perfil de su vegetación ( ^ - X I - . ^ ) . — i , Lerrouxia ifniense 2, Nitraria retusa (guerzim); 3 , Tamaris gallica (tarfa); 4, Phragmites communis (legseiba); ç, juncus mus (smar); 6 , Cyperus distachyos. (zeiat); mariti- L a Seguia-el=Hamra: límite entre la estepa y el desierto, Smeid el Nzel, E l Aiún, Sniara, Masial M A T E U anota las siguientes especies en Smeid el Nzel, cerca de la desembocadura de la Seguía: laarad (Sais, tetrandj, yil (Sais, foeticty, remz (Haloxyl. tamariscifol}, gardec (Eyc. intricai}, guesal (Salsol gaetula Maire~j, guetaf (Atripl. halim), dajmús (Euphorb. Echin.}, mttlbeina (Launaea arborescens). Esta vegetación se dispone formando una cinta li­ toral. La composición del tapiz vegetal en este punto no difiere esencial­ mente de lo que hemos visto al estudiar el xero-acanthetum y crasi-pulvinocatdetum del Aiún, camino de Cabo Juby. Pero sí conviene indicar que estamos en el límite S. dé este tipo de vegetación en banda litoral. M á s al S. iremos hallando un tipo de vegetación que varía paulatina­ mente, según los datos de M A T E U , M U R A T y ZOLOTAREVSKY.