España exporta biomasa a Italia y Reino Unido debido

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La industria del lujo apuesta por el medio
ambiente
Las grandes firmas han dado un vuelco a sus políticas medioambientales
enarbolando la bandera sostenible. Su preocupación es una muestra de
responsabilidad que da valor a la marca.
El espléndido mundo del lujo, ese que nos hace soñar, ese que
nos evoca a divas y mitos de mirada intensa que nos seducen
con un masculino reloj de última generación, un exclusivo
anillo de brillantes o unos stilettos de vértigo, ha emprendido
una trayectoria firme y sin retorno. Ha decidido reinventarse a
sí mismo. Una nueva conciencia y toda una declaración de
intenciones a la madre naturaleza son los nuevos hits de lo
exquisito.
La filosofía del 'green luxury' ha impregnado las políticas de
las compañías más exclusivas y ha iniciado acciones de la
mano de la sostenibilidad que lucha contra los excesos de un
voraz consumismo, la extrema pobreza y la protección del
medio ambiente."El sector del lujo goza de un gran potencial
para configurar la manera en la que debemos relacionarnos
con los productos y los servicios en el futuro si queremos vivir
en una sociedad sostenible”, explica Jem Bendell, coautor del
informe El lujo más profundo (Deeper luxury).
AUDITORÍA AL CARBONO
En este sentido, el Grupo LVHM (Louis Vuitton Moët Hennessy), que preside Bernard
Arnault, es uno de los pioneros en la protección y preservación del medio ambiente. Así lo
atestigua la creación, en 1992, de una comisión directiva del medio ambiente que requiere
que cada empresa del conglomerado establezca un sistema de gestión desde el que se evalúe
el impacto medioambiental de sus actividades. En 2004, LVMH puso en marcha el
proyecto Auditoría al Carbono en colaboración con la Agencia Francesa de Energía y
Medioambiente (ADEME) diseñando un método para medir el CO2, así como la emisión de
otros gases generados por sus producciones.
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BRASIL 2011
Los cambios en la industria del lujo, sus desafíos de futuro, su adaptación a los nuevos
clientes, así como la búsqueda de la sostenibilidad, son las piedras angulares que se debaten
en la Conferencia del Lujo que organiza desde 2001 el diario International Herald Tribune.
Por sus tribunas han pasado como oradores de excepción Bernard Arnault, François-Henri
Pinault -presidente de Pinault-Printemps-Redoute (PPR), que engloba firmas como Gucci,
Boucheron, Bottega Veneta, McQueen o Balenciaga; Giorgio Armani, Ralph Lauren o Tom
Ford.
La mayor cita del mundo del lujo, que congrega a expertos de la moda de más de 35 países,
será este año en São Paulo "En Brasil", comenta Suzy Menkes, editora de moda del diario,
"se da una extraordinaria combinación entre una economía emergente y una clase alta en
alza, lo que se traduce en una oportunidad de mercado que no se está dando en estos
momentos en el mercado occidental".
Según estos empresarios, Invertir en sostenibilidad es invertir en el futuro más verde, justo,
próspero y limpio que dejar a las generaciones venideras. No obstante, advierten de que, a
día de hoy, tiene un inevitable coste, que en muchas ocasiones repercute en el precio final
del producto.
Proteger la fauna es otra de las iniciativas del mercado. Cuando los exquisitos modistas
parisienses descubrieron la finísima y dulce lana de vicuña, un delicado camélido que no se
reproduce en cautividad y habita en el altiplano andino, la industria dio la bienvenida a una
exclusiva fibra, muy costosa porque el animal solo podía ser esquilado cada dos años. Su
persecución sin tregua dejó reducida esta especie a 5.000 ejemplares en todo Perú. Hasta
que el Gobierno prohibió el comercio de su fibra.
Por su parte, Gucci ha diseñado un programa ecológico para reducir el consumo de papel y
las emisiones de CO2 en su empresa. "La sostenibilidad es un valor en alza, y es el
consumidor el que lo reclama", afirma la empresa. Las compañías están incorporando
dichas políticas porque saben que es un factor que los clientes sopesan. En la demanda del
sector del lujo, el factor precio tiene baja implicación, por lo que se valora la sostenibilidad,
ya que de alguna forma va implícito en el precio.
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