212-2009 Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia: San Salvador, a las doce horas con veinticuatro minutos del día dieciocho de noviembre de dos mil nueve. El presente proceso de hábeas corpus fue iniciado por el licenciado Roberto Ernesto Archila Abrego, a favor del señor José Concepción Guevara Turcios, condenado en el Tribunal de Sentencia de la ciudad de Cojutepeque, por el delito de violación imperfecta. Analizado el escrito presentado y considerando: I.- El licenciado Archila Abrego sostiene que el favorecido se encuentra detenido de una manera ilegal e injusta por la violación a garantías constitucionales en el proceso penal instruido en su contra, pues no se ha probado suficientemente la culpabilidad del señor Guevara Turcios en razón que el Tribunal de Sentencia de Cojutepeque restó valor probatorio a las declaraciones de dos testigos. Arguye que, la declaración de la víctima es inconsistente pues manifestó conocer al imputado de la escuela y dijo no recordar su nombre, por lo que el Tribunal aludido no debió darte fe en cuanto al delito. Además expresa en su escrito lo siguiente: “Bajo el orden de ideas arriba planteado, se infiere que el Tribunal en mención incurrió en una detención ilegal en contra del encartado, ya que el escenario jurídico en el cual incurrió el mismo; el encartado, aplaca más para el delito de lesiones donde media el animus vulnerandi y no por un delito en contra la libertad sexual, donde media el animus lubricandi, es decir, no se establecieron los actos de carácter libidinosos o lujuriosos, que son los fundamentales para perfeccionar este tipo de delitos.” II.- Visto el contenido de la queja propuesta y previo a emitir el fallo que corresponda, es necesario exponer las siguientes consideraciones jurisprudenciales: a) la pretensión de hábeas corpus y la competencia de la Sala de lo Constitucional en el conocimiento de la misma; y b) la facultad de examinar de forma liminar la pretensión de hábeas corpus y de rechazar in limine litis –al inicio– la demanda presentada. En ese sentido se tiene: a) El hábeas corpus como proceso constitucional, constituye un mecanismo de satisfacción de pretensiones que una persona aduce frente a una autoridad judicial o administrativa e incluso particular cuando su libertad física o la de la persona a cuyo favor se solicita se encuentra ilegal o arbitrariamente restringida, así también cuando la restricción no exista pero sea inminente su producción; en consecuencia, todo proceso de Hábeas 1 Corpus supone una pretensión, que es su objeto, la cual consiste en el restablecimiento del derecho de libertad física de la persona favorecida. En reiterada jurisprudencia constitucional, v.g. las sentencias pronunciadas en los procesos de hábeas corpus número 2-2004 de fecha 11- 02- 2004 y 221-2004 de fecha 1003- 2005 –entre otros–, se ha puntualizado que la correcta configuración de la pretensión de hábeas corpus acredita a esta Sala conocer de aquellas afectaciones constitucionales que infrinjan directamente el derecho de libertad física del favorecido. Por tanto, su ámbito de competencia está circunscrito al conocimiento y decisión de circunstancias que vulneren normas constitucionales con afectación directa del derecho fundamental de libertad física. Es importante señalar que, este Tribunal se encuentra normativamente impedido para conocer de circunstancias que no tienen trascendencia constitucional, o cuya determinación se encuentra preestablecida en normas de rango inferior a la Constitución, siendo estas últimas los denominados asuntos de mera legalidad. b) Es jurisprudencia de esta Sala, a partir de la sentencia de fecha 27/09/01 emitida en el hábeas corpus con número 190-2001, posibilitar el examen liminar de la pretensión, con la finalidad de poder detectar ab initio –al inicio– del proceso, la existencia de vicios formales o materiales en la pretensión, los cuales imposibilitan el conocimiento del fondo del asunto o tornan inoperante la tramitación completa del proceso; de manera que, una vez advertidos al inicio del proceso la presencia de vicios en la pretensión, la misma debe rechazarse. III.- En atención a lo expuesto, este Tribunal al realizar el examen liminar de la pretensión planteada advierte un vicio en la misma, pues el impetrante no configura un reclamo de carácter constitucional del cual sea posible tramitar dicha pretensión. Por el contrario, los argumentos expuestos evidencian una inconformidad con la valoración de la prueba en la sentencia condenatoria que ha privado el derecho de libertad del señor Guevara Turcios, pues se alega específicamente haberse restado valor probatorio a las declaraciones de dos testigos, inconsistencia en el testimonio de la víctima y finalmente, que el Tribunal de Sentencia de Cojutepeque debió haber condenado al favorecido por el delito de lesiones y no por una agresión sexual. En ese sentido, es claro que lo incoado se refiere a una mera inconformidad con la valoración de la prueba y la consecuente sentencia condenatoria dictada en contra del beneficiado, situación que se traduce en los denominados por la jurisprudencia como "asuntos de mera legalidad", según lo dispone el artículo 13 de la Ley de Procedimientos Constitucionales, cuyo análisis y determinación corresponde a los jueces instaurados previamente por la ley para conocer en materia penal. Lo acotado implica que el licenciado Archila Abrego no ha hecho referencia alguna a circunstancias que vulneren normas 2 constitucionales con afectación directa del derecho fundamental de libertad física del favorecido. En consecuencia, los alegatos expuestos inhiben a esta Sala de emitir un pronunciamiento sobre el derecho fundamental tutelado mediante el hábeas corpus, pues de hacerlo estaría actuando al margen de su competencia. Y es que, si una persona se considera agraviada con el resultado de la valoración probatoria, el ordenamiento jurídico secundario contempla los mecanismos pertinentes a interponer en la jurisdicción penal –medios impugnativos– a fin de controvertir el perjuicio ocasionado por el pronunciamiento judicial que sea producto de ello. Por tanto, es de reiterar que si a través de este proceso se entrase a examinar aspectos puramente legales como el planteado, se produciría una desnaturalización del proceso de hábeas corpus, convirtiendo a esta Sala –con competencia constitucional–, en una instancia más dentro del proceso iniciado en sede penal, ocasionando un dispendio de la actividad jurisdiccional. Hechas las consideraciones que anteceden, y ante la imposibilidad de examinar lo propuesto por el favorecido, deberá emitirse una declaratoria de improcedencia. Por los argumentos expuestos y en base al artículo 13 de la Ley de Procedimientos Constitucionales, esta Sala RESUELVE: a) declárase improcedente la pretensión planteada en el proceso constitucional de hábeas corpus iniciado por el licenciado Roberto Ernesto Archila Abrego, a favor del señor José Concepción Guevara Turcios; b) notifíquese; y c) archívese. ---J. B. JAIME---F. MELÉNDEZ---J. N. CASTANEDA S.---E. S. BLANCO R.---R. E. GONZÁLEZ B.---PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN---E. SOCORRO C.---RUBRICADAS. 3