REFLEXIONES SOBRE LA PROPUESTA DE FORO EDUCATIVO 2013 Pudiéramos empezar diciendo que todo espacio que pretenda promover la reflexión juiciosa sobre el presente y las perspectivas de la educación en Colombia, en particular de la educación pública, debe ser bienvenido! Y los primeros en abrazar estas iniciativas e incluso vanguardizarlas deberían serlo las organizaciones independientes de educadores con identidad profesional, círculos pedagógicos de estudio e investigación. Y claro, agremiaciones que reivindican de modo expreso el ser de la profesión, la enseñanza de las ciencias, la investigación, la ética en el trabajo y las transformaciones de las prácticas escolares para renovar la sintonía con los nuevos tiempos que son más exigentes en cuanto encausar y captar la atención de niños y jóvenes. Mas puede suceder que a faltas de este tipo de identidad profesional, el magisterio y sus organizaciones (entre las que parece ser la sindical, la más extendida y de mayor preeminencia) a la larga terminen dándole un trato marginal a aquellos eventos; abandonándolos, dejándolos a merced de la improvisación y los formalismos, a lo que finalmente los reduce el gobierno en sus distintas instancias. Parece ser que algo de esto puede estar pasando con los Foros educativos adoptados por la institucionalidad a instancias de las luchas impulsadas por la Fecode desde posturas de avanzada con respecto al papel a desempeñar en el aula por parte de los maestros, en momentos históricos concretos, dado el encargo social implícito en esta labor, que bien se expresó como Movimiento pedagógico, hoy venido a menos. El tema que se ha considerado como objeto del foro educativo 2013, se centra en los procesos de transición que se establecen y han de operar entre el ciclo de la educación formal de la básica secundaria y media y el nivel o subsector de la educación terciaria. Este asunto no sólo es importante sino pertinente toda vez que en términos de proyección, de futuro inmediato, se estaría por lo menos haciendo abordaje de esta compleja realidad, despejando, así sea parcialmente, la marejada de incertidumbre que reina en nuestra sociedad con respecto no sólo en cuanto a la consumación de la universalización del tradicional ciclo de la media sino de acompañar ésta de las correspondientes transformaciones en las prácticas y relaciones de aula, generadoras de calidad y humanidad, sino que conecte con la expectativas de vida de los jóvenes en la adolescencia tardía con su tránsito a una diversidad de opciones escolarizadas que contempla: 1. La universidad en su acepción clásica o tradicional (pregrado). 2. las escuelas o instituciones tecnológicas (que pueden ser universitarias) y, 3. Las técnicas profesionales. Dicha transición, como una de las variantes interviniente, cuenta con la arista de la ocupación laboral, no excluyente con los estudios formales. Como lo sugiere tal cuestión, la básica secundaria y la media no pueden seguir ignorando sus colindancias hacia adelante: ¿Qué se invierte en este ciclo en la gente, jóvenes, usuarios de ese servicio, que es derecho fundamental, para tributar pertinentementea los ramales de la educación terciaria? ¿Qué modificaciones significativas introducir en el currículo para contribuir a definir unos indicadores de madurez socio-emocionales, ligados a puntuales competenciascognitivas, ceñidas a una formación articuladora de orden ético, humano; con criterios y carácter, este último entendido como principios que enaltezcan la persona, que armonicen aspiraciones e individuo, con sus límites de salvaguardadel bien común y la convivencia general? Este sólo aspecto reclama a su vez una transformación curricular de las facultades de educación para garantizar educadores que respondan a esta demanda, al tiempo que una política de estado que estimule a los mejores estudiantes pruebas Saber 11º para que se la jueguen por las carrerasen educación que, para cohortes de egresados a mediano plazo contemple prerrogativas en términos de reconocimientos y apoyos en maestrías y doctorados. Lo planteado hasta aquí, y más si las pretensiones son mayores, como la de apostar por ciudadanos integrales, demanda que desde las más altas cumbres del estado y el gobierno, se sancione que, la educación comopatrimonio de la sociedad, presida la agenda política del Estado, cosa que hoy no alcanza siquiera la categoría de vagones en las locomotoras de Santos, quedando apenas, penosamente como tributaria del sector extractivo, evasor, depredador y enriquecedor de inescrupulosos nacionales y extranjeros. Otro aspecto que puede avizorarse en ese tránsito es que desde la básica se establezcan fuertes lazos comunicativos en la tarea formativa, con el Sena y, en la media con instituciones universitarias y/o tecnológicas y técnicas profesionales, por ejemplo, que permita que en jornadas complementarias se inicien ciclos que conecten con éstas al salir como egresados bachilleres. Los nuevos tiempos, la tecnología y la ciencias, deben obligar a la escuela a ganar flexibilidad y eficacia para responder a las expectativas de los jóvenes de hoy, ayudando a una sociedad cada vez más inclusiva, capaz a su vez de superar el odio y la caverna (de derecha e izquierda) para ganar una paz duradera con justicia y un modelo de producción cuyo márgenes de plusvalía se reinvierta en responsabilidad social, generadora de oportunidades para todos; que relegue a cosa del pasado la discriminación y los privilegios por apellidos o por pertenencia a las clases dominantes. Que los méritos, las competencias labradas en el estudio y en el trabajo como en los proyectos de vida que se asumen por los jóvenes, defina el acceso al mundo de las oportunidades. Las organizaciones del magisterio, su dirigencia nacional, regional y local, le compete en una visión renovada de sus compromisos, incorporar en su agenda la cuestión educativa, no como bandera retórica o tema de especulación, sino materia concreta que pensada y planificada, devenga en producto y se deje procesar en términos de proyectos que, a través de eventos tipo seminarios y congresos, se someta a deliberación y sanción, que obliguen al gobierno de dichas organizaciones a traducir sus decisiones en políticas a desarrollar bajo la forma de acciones pedagógicas, pautas de investigación y elaboración curriculare, políticas lectoras y, paradigmas de relaciones con los estudiantes, que le confiera a la escuela el carácter de escenario de diálogo e interlocución propositiva y creadora con respecto al paquete educativo del Estado. De otro modo, los educadores, han de optar por una personalidad de sujetos pensantes, estudiosos y responsables, y desde ésta, posicionarse de la escuela con proyectos concebidos juiciosamente por los eventos aludidos líneas arriba que le impriman a la escuela una dinámica trasformadora del maestro mismo y del pensar y formación de los estudiantes. Lo planteado supone una novedad organizacional en las entidades gremiales con identidad docente, que coherentemente debe contemplar un liderazgo pedagógico y de rigor en los saberes disciplinares al interior de la escuela, orientado a un aprendizaje eficiente, exitoso por partde los aprendientes, sobre la base de aprender a pensar y aprender a aprender, encarriladas por el cauce mayor del estudio de producciones textuales científicas, prácticas de investigación y sus producciones textuales, reflexiones, debates, abordajes sobre el trabajo y las relaciones de producción, la ética de los sujetos de la producción y el mercado, entre otros ítems. El magisterio debe superar la comodidad y las medias tintas, esa postura de casi espectador y servil de la indefinición y la mediocridad. Y en un nuevo horizonte poner fin a esa práctica perversa de “sobrevivir jugando con el gobierno al tiempo que con posturas alternas”; entretenimiento mortal para los intereses de los estudiantes y de la sociedad en general, dado que reproduce la lógica de la irresponsabilidad, la injusticia, la explotación y la miseria, como el “vivir a costas del más pendejo.” Sesionando en equipos coordinados, trabajar sobre escenarios posibles valorando las tendencias de la economía nacional y mundial, y sobre la base de sus resultados, asumir el riesgo de proponer iniciativas de educación en la media y el subsector terciario que tendencialmente responda al impacto de aquella, liberándonos y liberando a los estudiantes de experiencias reformistas no sostenibles, modalidades educativas obsoletas, improvisadasy efímeras que dejan a los egresados literalmente en la desocupación desesperanzadora, a merced sí del analfabetismo funcional y formas varias de degradación. Este espacio del foro educativo 2013, es singular oportunidad para compartir con ustedes, sin poses de extrema, en el marco de la democracia contrahecha que al momento nos merecemos, potenciarla con participación, disenso e iniciativas estructuradas, logrando hacerla avanzar en profundidad y madurezy, en esa misma medida, ganar en la cotidianidad del concierto de las prácticas sociales, que quienes tengan el control del poder de Estado y del gobierno, desde los menos a los más, desde los agentes directos que administran y conducen la instituciones de educación, pasando por las instancias intermedias gubernamentales en lo local y regional, hasta la cumbre ejecutiva, asuman la educación como insustituible interacción social sistemática con sus correspondientes prácticas actualizadoras de las grandes conquistas humanas, incluyendo las de última generación, superándonos hacia dimensiones inéditas en sensibilidad, conocimientos, arte, fraternidad, convivencia y bienestar. Encontrando siempre la intervención pertinente que limite la ambición obscenamente acumuladora que inevitable, conduce a segregar a otros humanos a la marginalidad y la miseria (…) Ramiro del Cristo Medina Pérez Coordinador con funciones académicas Institución educativa Luis Patrón Rosano Santiago de Tolú, julio 27 - 2013 _____________________ Proximamente unas notas sobre mi apreciación de lo que alcancé a vivir de se evento.