En las elecciones del año 1872 ganó un civil dando fin a el primer militarismo, en ese año el aún presidente, José Balta fue aconsejado por el ministro de guerra Tomas Gutiérrez para que dé un golpe de estado y no gobierne un civil. José Balta analizó y sus amigos empresarios le dijeron que eso era una estupidez, así que no accedió a dar un golpe de estado ya que eso sería muy tonto. Tomas tomó una decisión con sus cuatro hermanos para poder realizar el golpe de estado, así que, lo hizo el 22 de julio de 1978. Los militares entraron a palacio de gobierno y se llevaron al presidente José Balta a una carceleta y lo encerraron, en ese momento Tomas Gutiérrez se proclamó presidente de facto, para eso los congresistas no aceptaron su presidencia tomándolo de inconstitucional y Tomás con sus tropas fue al congreso de la república a amenazar a los congresistas y que lo proclamen presidente, pero ellos se negaron, así que Tomas y su tropa golpearon a los congresistas y se retiraron, entonces Tomas asumió el cargo de presidente. Para eso, el que iba a ser presidente, Manuel Pardo y Lavalle se atemorizó ya que asumió que Tomas iba a buscarlo para asesinarlo y este se escapó a Pisco. La gente muy enfurecida salió a protestar por que la presidencia de Tomas era ilegitima. Los cuatro hermanos eran: Tomas, Silvestre, Marceliano y Marcelino Entonces el 26 de julio, Silvestre subió a un tranvía en el que había personas en contra de la presidencia de Tomas y también había soldados rebeldes con armas, ellos gritaban en contra de Tomas, Silvestre decide sacar su arma y en ese momento disparó e hirió a una persona y los soldados le dispararon una vez en la cabeza toda la gente lo desnudó y lo llevo a la iglesia los huérfanos. Después se rumoreó que el hermano Marceliano ordenó que fusilaran a José Balta, y el rumor se volvió verdad y unos soldados fusilaron al expresidente, ese echo hizo que toda la gente salga a las calles a protestar. Marceliano se fue al Callao para poder calmar las trifulcas y en eso los protestantes se estaban dirigiendo a palacio de gobierno y Tomás se fue a escondidas al fuerte y los protestantes incendiaron todo el lugar en el que se encontraban Tomas y Marcelino los dos se escaparon a diferentes rumbos y después encontraron a tomas que estaba camuflado y lo lincharon hasta lo dispararon y con su cuerpo se dirigieron a la plaza de armas. A Marceliano le dispararon en el estomago y le hicieron sufrir. A los hermanos Silvestre y Tomás los colgaron en los campanarios de la iglesia mayor y los bajaron y a los tres hermanos los quemaron, Marcelino escapo y se reivindicó luchando en la guerra del pacífico El 2 de agosto José Balta asumió la presidencia diciendo lo siguiente: ¡Pueblo de Lima! Habéis realizado una obra terrible pero una obra de justicia... Aquellos tres cadáveres que se ostentan ante nuestra Metropolitana envuelven una tremenda lección que no olvidaré jamás… Como sabemos el presidente más tonto de la historia solo pensó en beneficio de él y los militares echando de lado la democracia, ningún acto violento tiene justificación, la gente se sentía oprimida y actúo de mala manera como Tomas también lo hizo. Nosotros los peruanos no sabemos elegir a nuestros presidentes y eso se explica con los últimos dos que tuvimos, el peruano no conoce sus derechos y es capaz de dar votos a cambio de beneficios agotables. Basadre hablaba de dos grandes problemas: El abismo social y el estado empírico. El primero se puede ver con las grandes diferencias que existen entre un gerente y un peón, el segundo se puede ver reflejado en los centros gubernamentales en los que se encuentran personas incapacitadas para hacer bien su labor, además de que se encuentran en casos de corrupción. Como podemos entender un presidente llega con promesas de cambio a palacio de gobierno y cuando se encuentra ahí se ve envuelto en un túnel sin final en la que las fuerzas económicas lo obligan a seguir un libreto. Los medios de comunicación son dirigidos por una gran corporación que cree que es dueño de lo que pensamos los peruanos. En el Perú existe una izquierda atada, que no puede participar en la política ya que le llueven comentarios de que es una izquierda antigua y que nunca va a triunfar, la izquierda tiene que liberarse y dar a conocer sus objetivos. En el Perú en estos momentos no existen partidos políticos, solo son grupos que intentan llegar al poder con promesas de cambio que nunca se cumplen, existían dos grandes partidos como lo eran el APRA el PPC ahora solo existe un recuerdo de lo que querían lograr, mas no lo hicieron. Ahora en las elecciones vimos como nos resignamos en votar a un partido político, estando pragmatizados y creyendo que es la única opción, el peruano se resigna con facilidad. Creímos que el Perú mejoró en 10 años, con una bonanza que nos hizo felices. Ahora lo peor es que la gente vive en condiciones precarias, en lugares llamados asentamientos humanos. Esa es la realidad de nuestro Perú. Hildebrandt siente que el Perú puede mejorar en un futuro lejano, tenemos que mejorar, crear valores y mejorar la educación. Siente la necesidad de que nazca un nuevo Mariátegui que sea tolerante, sería un alivio para el Perú. La derecha por un tiempo se sintió amenazada por sendero luminoso, cuando cayó este grupo terrorista, los de la derecha siguieron el mismo no cambiando nada y teniendo a los peruanos con ilusiones de cambio que nunca llegarán. Los pensamientos de aceptar algo a cambio de llevarse nuestro dinero, parece volverse más común creemos que si nos da obra y roba esta bien, todo el Perú se irá a la ruina, pero con obras. En el Perú las negociaciones son muy sagradas para las empresas privadas, dando un blindaje exclusivo para que no se puedan revisar los contratos, ese es el causante de que los peruanos no sientan que lo que tienen es suyo, no hay negociación entre las empresas privadas y el estado, sabemos que necesitamos una inversión privada o extranjera y de eso se aprovechan los grandes empresarios quitándonos lo que es nuestro y de nuevo cayendo en la resignación. Hildebrandt cree en la juventud que tiene las garras de defender a su país, a sus creencias y a sus derechos. Esa juventud que se planta hasta lograr sus objetivos, que sale a las calles a exigir sus derechos y que va a cambiar al Perú, seguramente los hijos de esos jóvenes son la promesa de nuestro país. El Perú es una sociedad insana que cree que ir por la vía fácil esta bien que no tiene sangre en la cara para poder coimear a un policía, que sabiendo que es peligroso cruzar la calle en rojo, lo hace, los demás países nos ven como una sociedad que esta desordenada y con sospecha. Nos aconseja que no paremos de luchar, que salgamos adelante y no nos detengamos. Nuestro país es muy hermoso luchemos para que los dos grandes problemas se acaben y así lograr una gran sociedad.