Que es lo que uno puede decir acerca de un amigo que ha
fallecido?. Que era un fantástico ser humano y un profesional
Brillante?, Que adoraba a su familia y amigos y que en
reciprocidad recibía siempre el respeto y cariño merecidos?.
Para los aficionados a la lectura romántica esta es una parodia de
las líneas iniciales del famoso relato de Erich Seagal: Love Story
como preámbulo al doloroso recuento de un desenlace de
pesadumbre que escapaba al sentido común del autor quien
deprimido se hacia similares preguntas.
Tomas no fue un amigo intimo con el que tuve la oportunidad de
departir a diario, sin embargo en las múltiples ocasiones en que se
me dio la ocasión de compartir su ambiente, siempre dejo en mi,
como en todos los presentes, la sincera satisfacción de encontrarse
en compañía de un hombre sencillo, amable, con la eterna sonrisa
que es difícil imaginarlo sin ella, a veces con ambas manos en los
bolsillos e inclinándose ligeramente en forma de venia para
manifestar una sonrisa sincera y profunda si la conversación le
despertaba la vena humorística que aparentemente se encontraba
muy superficial en su conciencia.
Solícito a brindar una mano desinteresadamente como lo hizo
incontables veces no solo para organizaciones sociales como la
Casa de España, con la única remuneración de la satisfacción que
su contribución engendraba memorias de reuniones que quedaran
para siempre en la mente de todos los que tuvimos la suerte de
saborear el arte culinario por el cual ya era legendario entre sus
amigos y conocidos y por los feligreses que acudían a los
diferentes restaurantes donde presto sus servicios atraídos por el
imán de este extraordinario Chef como lo fue nuestro querido
Tomas.
Su benevolencia también hizo gala de su presencia en reuniones
privadas de sus amigos donde era conocida su magnánima
cooperación.
Un amigo mutuo quien me diera la trágica noticia el mismo día de
este nefasto incidente lo hizo durante su llamada de cortesía por mi
pronta recuperación de un accidente cardiaco sufrido dos días
antes. Este amigo me hizo mención de una conversación previa el
día anterior en que Tomas indago por mi salud y estoy seguro hizo
una agenda mental de ponerse en contacto conmigo en un futuro
mediato, lo que no pudo lograr por el inesperado acontecimiento
que le cegó su aun aparentemente vida de muchos programados
años.
Durante los dos primeros días de mi recuperación mi mente estaba
saturada de una rabia contenida, de una desatisfaccion
irremontable de pertenecer a este universo inane, sin sentido, sin
lógica, sin una clara explicación, a quienes los religiosos en raro
atino de inteligencia le han llamado apropiadamente “ ESTE
VALLE DE LAGRIMAS”, y como acertadamente Confucio solía
decir: Los seres humanos deberiamos saludarnos al encontrarnos
con las palabras “ Como está mi amigo del infortunio”. Esta Rabia
al enterarme de la inesperada desaparición de Tomas, se
transformo en parte en un profundo y doloroso estado de animo
que he tratado de manejar aparentemente sin éxito.
Es muy difícil expresarle a los dolientes cercanos, en este caso su
esposa, hijos y familiares, la profunda congoja que nos visita mas
que todo por ellos que son los que continúan en esta dolorosa
jornada que es lo que llamamos vida, por que Tomas descansa en
paz y regreso a la nada de donde se origino.
En cierta ocasión Mark Twain respondió a la pregunta: Usted le
tiene miedo a la muerte? Con la preclara respuesta. No, por que he
estado muerto por millones de años antes de nacer!
Pero la nada convertida en forma humana esta plagada de todos los
defectos imaginables y es el hedonismo y el egoísmo quien nos
promueve a tratar de aferrarnos a la vida por que siempre estamos
tras la esotérica idea de que la “vida es bien bonita”, y que la
satisfacción y el goce físico y el nirvana espiritual esta al voltear la
esquina y nos morimos todos sin haberla alcanzado. Es decir nos
morimos para siempre, no con la confianza que lo hacemos todos
los días al acostarnos, por que cada vez que dormimos en verdad
estamos muertos, inconscientes, incapaces de sufrir, o de gozar,
pero no nos da temor por que contamos en resucitar al siguiente día
buscando la zanahoria de la felicidad que siempre esta pendiente
de una vara inalcanzable delante de nuestras propias narices.
Es difícil lo repito hacerle saber a alguien nuestras angustias, y
entre las muchas llamadas que he recibido están por supuesto las
intensamente cargadas con eufemismos religiosos, con promesas
de rezo y deseos de bien, o con el abandono de decir: “Bueno, de
algo tiene uno que moririse”, o “ “ todos nos vamos a morir algun
dia” o “ Nadie vive eternamente”. Yo me sonrío por dentro y les
digo: Viejo lindo: Si a ti te invitan a una fiesta que empieza a las 8
de la noche y termina a las 4 de la mañana, me imagino que
tendras que armar un berrinche de ocho cuartos si alguien sin tu
permiso te empuja fuera de la fiesta a las 12 de la noche, con la
explicacion: Bueno la fiesta se termina de todas maneras a las 4,
nadie se queda mas alla de esa hora!. Se me antoja pensar todo el
mundo protestara: Bueno a mí me sale del forro de la silla de
montar que quiero quedarme hasta que la fiesta termine y no un
minuto antes.
Por eso es que el malcontento empieza a treparse en mi
nuevamente por que estoy seguro que a Tomas lo sacaron de esta
fiesta, sin su permiso, antes de que se bailara la ultima pieza. Y si a
Dios se le antojo una buena Paella podía haber mandado a un ángel
de cualquiera de sus nueve coros por una al Patricks, y no tenia por
que llevarse al chef y dejarnos a todos con esa cólera indolente que
por lo menos a mí me hace sentir tan mal y desesperanzado.
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