IGLESIA BIBLICA BAUTISTA BETHANIA. PREDICACION. TEXTO: HEBREOS. 11: 8 – 10. ASUNTO: LA FE BIBLICA. TEMA: LA FE DE ABRAHAM EN DIOS. INTRO: El último tema que hablamos fue sobre la fe de Noé en la persona de Dios. Cuando Noé fue advertido por Dios sobre el juicio sobre la humanidad, Noe con sabiduría de Dios preparó el arca donde se salvó su familia. Nos recordamos a nosotros mismos que siempre debemos estar preparados, a tiempo y fuera de tiempo, preparados para presentar defensa de nuestro evangelio que profesamos, con el fin de alcanzar a nuestra familia. Hoy veremos la fe de Abraham y sus características para que nosotros los creyentes en la palabra de Dios podamos imitar. A fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas. Hebreos. 6: 12. Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza. Romanos. 15: 4. 1.Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a donde iba. Hebreos. 11: 8. La fe bíblica trata de la manera en que nosotros obedezcamos a la palabra de Dios. Cuando Abraham fue llamado, él obedeció el llamado de Dios saliendo de su lugar, tuvo que dejar atrás a sus parientes, costumbres, bienes terrenales; salió para recibir una mejor herencia. La fe cristiana esta en la verdad de la obediencia a la palabra de Dios. La fe cristiana esta en el hecho de dejar atrás tu viejo pasado para vivir la nueva vida en Cristo Jesús. La fe cristiana es un llamado a recibir una herencia. 1 1.1. El llamado es a salir a evangelizar. La fe cristiana se ve y se distingue cuando la persona sale de su lugar para ir a hacer la voluntad de Dios. Un ejemplo un ángel del Señor le dijo a Felipe ve al desierto; Felipe ni siquiera preguntó que quieres que yo haga, quien está en el desierto, y porque el desierto; solamente vemos que ante el mandato del Señor dado por un ángel vemos que Felipe se levantó y salió al desierto; Felipe obedeció al Señor. Hechos. 8: 26 – 27. Este es el punto sobresaliente en la vida de Abraham, ante el llamado de Dios deja atrás su pasado y se encamina al lugar donde ha de recibir su herencia. No es asunto de saber solamente sino de obedecer, como estamos nosotros viviendo la fe en Jesucristo. 1.2. El llamado de Dios es a extendernos, proseguir hasta la meta. La fe es un llamado de Dios. Usted y yo hemos sido llamados por Dios. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. Filipenses. 3: 13 - 14. En la vida cristiana no puedo quedarme pretendiendo que mañana será mejor, estamos hablando e la vida cristiana, cuando no he hecho nada para que sea mejor; ciertamente me conviene olvidar lo que queda atrás, no es sabio vivir el pasado, tenemos que pensar en extendernos, tenemos que pensar en proseguir, tenemos que pensar que no hemos llegado a la meta, así es como vivimos la fe en Jesucristo. Tenemos que pensar en salir a evangelizar a otros lugares de Panamá, haciendo misiones en nuestro país. 2 1.3. El llamado es a vivir en comunión. Sabiendo sobre nuestro llamado, el apóstol Pablo nos dice: Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. Efesios. 4: 1 – 2. El punto a considerar sobre nuestro llamado es como estamos viviendo el llamado de Dios, el punto sobresaliente es la obediencia a la palabra de Dios, cuando vivo en humildad, cuando soy manso y soportó a otros, así es como estoy obedeciendo a la palabra de Dios. 1.4. El llamado de Dios es para vivir cumpliendo el propósito de Dios. Porque los Corintios fueron llamados por Dios a ser Santos, pero estaban viviendo carnalmente, lejos del propósito de su llamado. A la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro. Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer. 1 Corintios. 1: 2, 10. Carnalmente no podemos agradar a Dios, es por fe que agradamos a Dios. Nuestro llamado tiene un propósito, llamados a ser santos, llamados a estar perfectamente unidos en una misma mente y un mismo parecer para hacer el ministerio que le corresponde a la iglesia. 3 2. El Señor Jesucristo es nuestro ejemplo a seguir. 2.1. Consideremos la fidelidad de nuestro Señor Jesucristo. Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús. El cual es fiel al que le constituyó, como también lo fue Moisés en toda la casa de Dios. Hebreos. 3: 1 – 2. Siendo participante del llamamiento celestial debemos considerar a nuestro Señor Jesucristo apóstol y sumo sacerdote que fue fiel a Dios. La invitación a nosotros es que seamos fieles al Señor Jesucristo y como nuestro Señor Jesucristo fue fiel a Dios. Siendo fiel al Señor Jesucristo, estaré viviendo en obediencia a mi llamado. 2.2. Fidelidad es hacer conforme al corazón de Dios. Y yo me suscitaré un sacerdote fiel, que haga conforme a mi corazón y a mi alma; y yo le edificaré casa firme, y andará delante de mi ungido todos los días. 1 Samuel. 2: 35. La fidelidad a Dios implica hacer conforme al corazón de Dios. 2.3. Nuestro ejemplo a seguir es Jesucristo. Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas. 1 Pedro. 2: 21. Fuimos llamados, tenemos un ejemplo que seguir, la de nuestro Señor Jesucristo. 3. La fe se distingue por la obediencia. 3.1. La obediencia de nuestro Señor Jesucristo. 4 Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos. Romanos. 5: 19. La desobediencia trajo el pecado, mas la obediencia de nuestro Señor Jesucristo nos justifica ante la justicia de Dios Padre. Porque vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, así que me gozo de vosotros; pero quiero que seáis sabios para el bien, e ingenuos para el mal. Romanos. 16: 19. La obediencia es un buen testimonio de la iglesia para el pueblo. Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y victimas, como en que se obedezca la palabra de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención es grosura de carneros. Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tu desechaste la palabra de Jehová, el también te ha desechado para que no seas rey. 1 Samuel. 15: 22 – 23. La vida de fe se distingue por la obediencia a la palabra de Dios. Ciertamente el obedecer es mejor a hacer cualquier otro servicio que podamos hacer dentro de la vida de la iglesia. Dios en su soberanía nos permitirá la oportunidad de demostrar nuestra obediencia a Dios. Y fueron para probar con ellos a Israel, para saber si obedecerían a los mandamientos de Jehová, que él había dado a sus padres por mano de Moisés. Jueces. 3: 1 – 4. Comparado con Hechos. 5: 29. Cuando los apóstoles del Señor Jesucristo dijeron: es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres. Conclusión. Pastor Marcos Bobadilla. 5 6