LA POLÍTICA MONETARIA Política Monetaria: Conjunto de decisiones que toma la autoridad monetaria de cada país, respecto a la fijación del tipo de interés y el control de la cantidad de dinero en circulación (oferta monetaria), con el fin de facilitar el crecimiento económico, reducir el desempleo y alcanzar la estabilidad de precios. Política Monetaria restrictiva Disminuir la oferta monetaria. Es decir, se va a disminuir la cantidad de dinero en circulación y con esto se reducirá la capacidad de consumo y de inversión de las familias y las empresas, consiguiendo así disminuir la demanda agregada por lo que sucederá una bajada de los precios y la inflación se reducirá. Aumentar los tipos de interés. Con ello se incrementan los costes de los préstamos y, por lo tanto, se limita el acceso a obtener dinero, las familias y empresas verán recortadas sus capacidades para consumir e invertir y esta disminución del consumo y de la inversión se traducirá en un descenso de la demanda agregada, de la producción y por ende una disminución del empleo. Política Monetaria Expansiva Aumentar la oferta monetaria: Al aumentar la cantidad de dinero, aumentará la capacidad de gastos (de las familias) y de inversión (de las empresas), con lo que aumentará la producción que influirá positivamente sobre el empleo. Reducir los tipos de interés: Al bajar los tipos de interés (dinero más barato), disminuye el coste de los préstamos y existirá un mayor acceso a ellos. Por consiguiente, tanto las familias como las empresas tendrán más capacidad para consumir e invertir, aumentando así la producción y el empleo pero también se generará subida de los precios y, posiblemente, inflación. TIPO DE CAMBIO Como ya sabemos El dinero es un medio de pago y de cambio que sirve para efectuar transacciones a través de los mercados por lo que es utilizado diariamente por millones de personas, pero las transacciones entre personas que viven en diferentes países se complican porque existen varios medios de intercambio y es por esta razón que se necesita cambiar una divisa por otra. El tipo de cambio mide el valor de una moneda en términos de otra siendo así un instrumento de suma importancia pues representa la fortaleza de una economía. Tipo de cambio Fijo Hablamos de un tipo de cambio fijo cuando el banco central interviene para garantizar el precio de la moneda nacional en términos de moneda extranjera, es decir evita las variaciones y lo mantiene constante para así tener el tipo de cambio en el nivel deseado, el banco central logra esto al comprar y vender unidades de moneda nacional al precio convenido en términos de la moneda extranjera, y cuando utiliza sus reservas de divisas para cubrir los desequilibrios entre la oferta y la demanda de estas monedas pero en la práctica no siempre será posible mantener un tipo de cambio fijo ya que el banco central debería tener suficientes reservas de moneda extranjera para poder intervenir cuando lo considere necesario. Tipo de cambio Flotante El tipo de cambio flotante es conocido también como tipo de cambio flexible y ocurre cuando el banco central no interviene y deja que el tipo de cambio varié en el mercado para ser definido según la oferta y la demanda, es decir que el precio de la divisa pueden cambiar rápidamente ya que variará dependiendo del nivel de la compra y la demanda del mismo y no están fijados ni controlados por los bancos centrales. ¿Qué lo diferencia de un tipo de cambio fijo? Cómo podrán notar por la diferencia de sus nombres el tipo de cambio flexible puede variar y mucho, ya que este siempre estará en continuo crecimiento o decrecimiento dependiendo si la economía se contrae o no. Ahora en cambio un tipo de cambio fijo como se indica en su propio nombre, no varía con el tiempo ya que siempre costará lo mismo. El tipo de cambio fijo jamás en la vida se verá afectado por las circunstancias económicas de un país o de una región, ya sea crecimiento, inflación, entre otros.