MEDICINA BASADA EN EVIDENCIA: EL GRAN CAMBIO DE LA MEDICINA DEL SIGLO XX Nombre: María Alexandra Pecho Ramírez Semestre 2020-I Curso: Historia de la Salud Grupo 10 Medicina sólo hay una, y es efectiva cuando tiene una evidencia científica detrás que la respalde. J.M. Mulet ¿Por qué los médicos recurren a pruebas adicionales al momento de diagnosticar una enfermedad? ¿Por qué no solo utilizan sus conocimientos y experiencia? Son algunas de las preguntas que quizás muchos pacientes se han hecho cuando por fin consiguen una cita médica y les solicitan realizarse pruebas adicionales lo que para ellos puede significar una pérdida de tiempo; sin embargo, esto tiene una razón. Desde el siglo XX la medicina ha sufrido cambios importantes, ya no se basa en creencias mágico-religiosas ni en lo que afirma un médico importante, sino que se sustenta en el método científico. Este periodo se conoce como Medicina Moderna, que como toda ciencia se ha seguido desarrollando con el pasar de los años y de ella surge la Medicina Basada en Evidencia, enfoque que actualmente es la base del actuar médico, no obstante, muchos profesionales y demás personas conocen muy poco acerca de lo que es y dudan de su importancia; por este motivo es necesario conocer de lo que se trata y los beneficios que ha traído al campo de la medicina. La Medicina Moderna es la etapa en la cual el método científico se funda como corriente principal del conocimiento médico lo que permite desarrollar los más grandes avances en el campo de la medicina. Muchos personajes como Louis Pasteur, Robert Koch, Alexander Fleming y demás aportaron con sus descubrimientos a una mejor comprensión del ser humano; sin embargo, la práctica médica seguía siendo empírica y paternalista (6) lo cual se evidenciaba en la manera de diagnosticar, basada en el sentido común del médico y la actitud que el paciente tenía frente al médico donde no era participe de las decisiones a tomar con respecto a su salud. Por tal razón se ha tratado de cambiar esta realidad y se ha desarrollado la Medicina Basada en Evidencias. La Medicina Basada en Evidencias (MBE) tiene distintos conceptos, algunos autores lo definen como la estrategia para superar la práctica médica basada en la intuición y experiencia clínica no sistematizada (2), programa científico para operacionalizar la práctica médica (1) o como un nuevo paradigma que se introdujo en el quehacer médico como un intento de mejorar la práctica clínica en la atención de los enfermos (5); sin embargo, todas coinciden en que el objetivo de la MBE es integrar la mejor evidencia científica disponible, los conocimientos clínicos del médico y las preferencias de los pacientes para tomar la mejor decisión, a esto se le conoce como triada de la Medicina Basada en Evidencias (5). A través de la MBE se busca que todo diagnóstico y tratamiento estén sustentados por bases científicas corroboradas donde no se deje de lado la capacidad clínica del médico y además se valore lo que el paciente desea para con su salud. En base a estos objetivos Vega-de Céniga et al. proponen una metodología básica para la práctica de la MBE que consiste en la identificación de lagunas de conocimiento en relación con decisiones clínicas, formulación de una pregunta clínica bien estructurada, búsqueda eficiente de la mejor evidencia disponible, valoración crítica de la calidad de la evidencia, análisis sistemático de los resultados de los estudios y aplicación de los hallazgos a la toma de decisiones de un paciente concreto. Esta metodología ayuda al profesional desde el momento que se encuentra frente a un paciente, ya que para diagnosticar tendrá que basarse en la mejor evidencia disponible que se tenga sobre la enfermedad a tratar y complementarla con su experiencia y habilidades clínicas, que si bien puede ser notable podría verse influida por cuestiones científicas, políticas y económicas (6). Para darnos una idea del grado de importancia entre estos dos principios se puede observar la jerarquía de evidencias que proponen Alva Díaz et al. donde la opinión del experto se encuentra en la parte más baja, no porque no tenga valor, sino que no basta para poder atender a un paciente. Sin embargo, para muchos profesionales de la salud tener que encontrar la evidencia precisa puede ser muy difícil ya sea por falta de tiempo o de habilidades en cuanto a reconocer aquella evidencia científica válida (4), por esta razón se han creado herramientas como revisiones sistemáticas, metaanálisis y guías de práctica clínica basadas en evidencia, además de base de datos como Cochrane, que facilitan acceder a información ya filtrada y cuidadosamente diseñada (3). Una característica muy importante de la MBE es que no solo se integra la evidencia científica con la experiencia del médico, sino que toma en cuenta también las opiniones y se adapta a las características de cada paciente, según Málaga et al. es por esta razón es que se ha considerado a la MBE como una forma de hacer de la medicina un poco más humana, donde el médico es el encargado de transmitir y ayudar a comprender al paciente todo lo referido a su enfermedad y juntos puedan tomar una decisión, lo cual según Vega-de Céniga et al. ayuda a expresar la autonomía del paciente. A pesar de sus cualidades no se puede dejar de lado que la MBE enfrenta ciertas limitaciones, según Alva Díaz et al., una de ellas es el “sesgo de publicación”, donde aquellos ensayos clínicos que tienen resultados positivos son publicados, pero se deja de lado a aquellos cuyo resultado es negativo, por tal razón diversas organizaciones como ALLTRIALS buscan que todos los ensayos sean divulgados sin importar su resultado ya que de alguna u otra forma aportan al desarrollo de la medicina. Otra limitación que se discute son los conflictos de intereses no controlados (1) y es que al conocer que las investigaciones son mayormente financiadas por farmacéuticas se ha especulado acerca de los resultados que se obtienen y como estas pueden estar favoreciendo a las grandes empresas, disminuyendo la confianza en sus conclusiones. Pero más allá de las limitaciones a las que se enfrenta la MBE no se puede dejar de lado su gran aporte a la medicina y la manera en que favorece a médicos, pacientes y hasta al sistema de salud. Gracias a la MBE los médicos pueden mejorar la calidad de su trabajo, los pacientes se verán beneficiados por esta calidad y tendrán confianza en la persona que los trata. El sistema de salud también se ve beneficiado ya que las herramientas de la MBE ayudan a que los recursos sean usados eficientemente y se ajusten a determinadas características que ayuden a reducir costos (1). En conclusión, la Medicina Basada en Evidencias es un tema del cual tanto médicos como cualquier persona debe conocer, no solo tomando en cuenta sus beneficios sino también sus limitaciones. Si ambas se consideran se podrá mejorar y desarrollar una mejor medicina en la que se pueda estar abierta a aprender y buscar lo mejor para todos, el médico confiará en sus habilidades, así como en la base científica que respalda sus acciones además de tomar en cuenta la situación y contexto que vive su paciente. Todas estas acciones ayudan a que se valore la dignidad de la persona, no solo viéndolo como una enfermedad sino también como un ser humano que sufre y que ha buscado en la medicina una forma de salvar su vida. REFERENCIAS: 1. Alva Díaz C, Aguirre Quispe W, Becerra Becerra Y, García Mostajo J, Huerta Rosario M, Huerta Rosario A. ¿La medicina científica y el programa Medicina Basada en Evidencia han fracasado? Educación Médica [Internet]. 2018 [consultado 13 jul 2020]; 19:198-202. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1575181317300992 2. Málaga G, Neira-Sánchez E. La Medicina Basada en Evidencia, su evolución a 25 años desde su diseminación, promoviendo una práctica clínica científica, cuidadosa, afectuosa y humana. Acta Médica Peruana [Internet]. 2018 [consultado 13 jul 2020];35(2):121-126. Disponible en: http://www.scielo.org.pe/pdf/amp/v35n2/a07v35n2.pdf 3. Montaño-Velázquez BB, Figueroa-Morales MA, Fernández-Celorio A, Ochoa-Carrillo FJ. Fundamentos de la Medicina Basada en Evidencias (MBE). Documento de la serie MBE, 1 de 3. Gaceta Mexicana de Oncología [Internet]. 2015 [consultado 14 jul 2020];13(5):274-277. Disponible en: https://www.elsevier.es/es-revista-gaceta-mexicana- oncologia-305-articulo-fundamentos-medicina-basada-evidencias-mbe-X1665920114804745 4. Rogelio A. Medicina Moderna-Medicina Basada en Evidencia. Presentado en Universidad de Salamanca. Disponible en: http://sabus.usal.es/site_med_2006/site_med/descargas/evidencias_rog elio.pdf 5. Vásquez-Márquez PI, Rojas-Peñaloza J, Castellanos-Olivares A. Limitaciones que presenta la Medicina Basada en Evidencia. ¿Cómo evaluar artículos de pronóstico? Revista Mexicana de Anestesiología [Internet]. 2016 [consultado 14 jul 2020]; 39(1):225-228. Disponible en: https://www.medigraphic.com/pdfs/rma/cma-2016/cmas161bz.pdf 6. Vega-de Céniga M. Allegue-Allegue N, Bellmunt-Montoya S, LópezEspada, Riera- Vázquez R, Solanich-Valldaura T et al. Medicina basada en la evidencia: concepto y aplicación. Angiología [Internet]. 2009 [consultado 13 jul 2020]; 61(1):29-34. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S00033170091100 40