Subido por Ana Carolina

La sintaxis como objeto de ensenanza las (1)

Anuncio
Volúmenes temáticos de la
Sociedad Argentina de Lingüística
Serie 2012
Editores de la serie
Víctor M. Castel
CONICET y Universidad Nacional de Cuyo
Mabel Giammatteo
Universidad de Buenos Aires y Universidad del Salvador
Alejandro Parini
Universidad de Buenos Aires y Universidad de Belgrano
La Serie 2012 de los Volúmenes temáticos de la SAL publica una selección de trabajos de
los diversos campos que conforman las ciencias del lenguaje. La selección se hizo mediante
una convocatoria abierta a todos los autores que presentaron ponencias en el XIII Congreso de
la SAL (2012). Los volúmenes, editados y evaluados por expertos en los campos
correspondientes, reflejan el estado actual de las prácticas científicas de las respectivas
(sub)comunidades discursivas.
Volúmenes publicados
1. Enseñanza de lenguas e interculturalidad
2. Lenguaje, cognición y cerebro
3. Discurso especializado: estudios teóricos y aplicados
4. En torno a la morfosintaxis del español
5. Discurso, identidad y representación social
6. Léxico y sintaxis
7. Lenguas indígenas de América del Sur I. Fonología y léxico
8. Discurso argumentativo, jurídico e institucional
9. Lingüísticas del uso. Estrategias metodológicas y hallazgos empíricos
10. Enseñanza de la gramática
11. Lengua, historia y sociedad
12. Cuestiones de fonética, fonología y oralidad
13. El español rioplatense desde una perspectiva generativa
14. Rumbos sociolingüísticos
Volúmenes por aparecer
15. Lenguas extranjeras. Aportes teórico-descriptivos y propuestas pedagógicas
16. Lenguas indígenas de América del Sur II. Morfosintaxis y contacto de lenguas
17. Discurso literario, periodístico y mediático
18. Cuestiones lexicológicas y lexicográficas
19. Lenguaje, discurso e interacción en los espacios virtuales
20. Lexicografía, lexicografía especializada y terminología
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Enseñanza de la gramática
María Rita Guevara y Katerinne Leyton
Editoras
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Enseñanza de la gramática / Antista, Daniela M. [et al.]; edición literaria a cargo de María Rita Guevara y Katerinne
Leyton. - 1a ed. - Mendoza: Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional de Cuyo; Sociedad
Argentina de Lingüística, 2013.
E-Book. - (Volúmenes temáticos de la Sociedad Argentina de Lingüistica / Castel, V., Giammatteo, M. y Parini, A.)
ISBN 978-950-774-227-9
1. Enseñnza de la lengua 2. Gramática. 3. Enseñanza universitaria. I. Guevara, María Rita, ed. lit. II. Leyton,
Katerinne, ed. lit.
CDD 465.071 1
Fecha de catalogación: 04/04/2013
© 2013, Editorial de la Facultad de Filosofía y Letras
de la Universidad Nacional de Cuyo
© 2013, Sociedad Argentina de Lingüística
Editorial de la Facultad de Filosofía y Letras
de la Universidad Nacional de Cuyo
Centro Universitario
Parque Gral. San Martín
Casilla de Correo 345
5500 Mendoza
República Argentina
E-mail: [email protected]
Web address: http://ffyl.uncu.edu.ar
Contacto Serie 2012 de Volúmenes temáticos: [email protected]
Idea, diagramación, composición y diseño: Gráfica Brovedá
Primera edición: noviembre de 2013
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Contenido
Evaluadores de Volúmenes temáticos: serie 2012 ........................... 11
Autores del volumen ....................................................................... 15
Introducción ................................................................................... 17
María Rita Guevara y Katerinne G. Leyton
Capítulo 1 ....................................................................................... 23
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia
en la escuela primaria
Daniela Antista
Capítulo 2 ....................................................................................... 35
La actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua.
Consideraciones teóricas y aportes didácticos
Rosana Adriana Pascual
Capítulo 3 ....................................................................................... 45
Enseñanza de la gramática: ¿Para qué?
Reflexiones acerca del conocimiento gramatical
en relación a los objetivos de la escuela media
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
Capítulo 4 ....................................................................................... 55
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de
morfosintaxis que los docentes realizan en las actividades
de escritura de los alumnos
Stella Maris Tapia
Capítulo 5 ....................................................................................... 67
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
Angélica Vaninetti
Capítulo 6 ....................................................................................... 79
Un estudio del verbo en la Enseñanza Media
Silvina Lorena Palillo
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Capítulo 7 ....................................................................................... 89
Enfoque comunicativo, enseñanza de la gramática
y formación docente
María Eugenia Llambí de Adra
Capítulo 8 ....................................................................................... 99
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de
Principios y Parámetros de Chomsky
María Rita Guevara
Referencias ................................................................................... 119
Foto y filiación editoras del volumen ............................................ 126
Contratapa .................................................................................... 127
Evaluadores de
Volúmenes temáticos: serie 2012
Hugo Daniel Aguilar
María Paula Bonorino
Universidad Nacional de Río Cuarto
y Universidad Nacional de Villa Mercedes
Universidad de Buenos Aires
Luis Aguirre
Universidad Nacional de Cuyo
Universidad Nacional de Cuyo
Silvana Elizabeth Alaníz
Universidad Nacional de San Juan
Hilda Albano
Iris Viviana Bosio
Viviana Cárdenas
Universidad Nacional de Salta
Javier Carol
Universidad de Buenos Aires
y Universidad del Salvador
Universidad de Buenos Aires
y Universidad Nacional
de General Sarmiento
Guadalupe Álvarez
Isolda E. Carranza
CONICET y Universidad Nacional
de General Sarmiento
CONICET y Universidad Nacional
de Córdoba
Leandro Arce
Cintia Carrió
Universidad Nacional de Catamarca
Universidad Nacional del Litoral
y CONICET
Fernando Balbachan
Universidad de Buenos Aires
Vanina Andrea Barbeito
Universidad de Buenos Aires
Alicia E. Carrizo
Universidad de Buenos Aires
Víctor M. Castel
CONICET y Universidad Nacional de Cuyo
Yris Barraza
Programa de Formación de Maestros
Bilingües de la Amazonía Peruana,
Iquitos, Perú
Marisa Censabella
Juan Pablo Barreyro
María Chavarría
Universidad de Buenos Aires
Macalester College, Saint Paul MN, USA
y CONICET
Graciela Barrios
Universidad de la República
CONICET y Universidad Nacional
del Nordeste
Laura Colantoni
University of Toronto
Roberto Bein
Universidad de Buenos Aires
Mariana Cuñarro
Marina Berri
Universidad de Buenos Aires y CONICET
Universidad de Buenos Aires
y Universidad Nacional de
Lomas de Zamora
Cristina Boccia
Wilmar D'Angelis
Universidad Nacional de Cuyo
Juan Eduardo Bonnin
Universidade Estadual de Campinas
(UNICAMP), Campinas SP, Brasil
CEIL / CONICET
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Evaluadores
Alejandro de la Mora
Lilián Guerrero Valenzuela
Universidad Nacional Autónoma
de México
Universidad Nacional Autónoma
de México
Lorena de-Matteis
Yolanda Hipperdinger
Universidad Nacional del Sur y CONICET
CONICET y Universidad Nacional del Sur
Ángela Lucía Di Tullio
Inés Kuguel
Universidad Nacional del Comahue
Universidad Nacional de General
Sarmiento y Universidad de Buenos Aires
Juan Antonio Ennis
Universidad Nacional de La Plata
y CONICET
Georgina Lacanna
Andrea Estrada
Daniela Lauria
Universidad de Buenos Aires
Universidad de Buenos Aires y CONICET
Alain Fabre
Marta Lescano
Universidad de Tampere, Finlandia
Universidad Pedagógica
Ana Fernández Garay
Ángel Maldonado
Universidad Nacional de La Pampa
y CONICET
Universidad de Buenos Aires
Fernando García Rivera
Universidad Nacional de Río Negro
Programa de Formación de Maestros
Bilingües de la Amazonía Peruana,
Iquitos, Perú
Paula S. García
Universidad de Buenos Aires
Adalberto Ghio
Universidad de Buenos Aires
Marisa Malvestitti
Ana María Marcovecchio
Universidad de Buenos Aires
y Universidad Católica Argentina
María Mare
Universidad Nacional del Comahue
Universidad de Buenos Aires
y Universidad Nacional de
Lomas de Zamora
Angelita Martínez
Mabel Giammatteo
Ileana Martínez
Universidad de Buenos Aires
Mara Glozman
Universidad de Buenos Aires y CONICET
Lucía Golluscio
CONICET y Universidad de Buenos Aires
Luisa Granato
Universidad Nacional de La Plata
Beatriz Gualdieri
Universidad Nacional de Luján
Marymarcia Guedes
Universidade Estadual Paulista "Júlio
de Mesquita Filho" (UNESP), Campus
Araraquara , São Paulo, Brasil
Universidad Nacional de La Plata
y Universidad de Buenos Aires
Universidad Nacional de Río Cuarto
Salvio Martín Menéndez
Universidad de Buenos Aires y CONICET
Laura Miñones
Instituto de Enseñanza Superior en
Lenguas Vivas ‘Juan Ramón Fernández’
y Universidad de Buenos Aires
Mariana Morón Usandivaras
Universidad de Buenos Aires y CONICET
Liliana Naveira
Universidad Nacional de Mar del Plata
María Valetina Noblia
Universidad de Buenos Aires
Evaluadores
Susana Ortega de Hocevar
Mariela Rígano
Universidad Nacional de Cuyo
Universidad Nacional del Sur
Ana Pacagnini
Elizabeth Rigatuso
Universidad Nacional de Río Negro
Universidad Nacional del Sur
y CONICET
Constanza Padilla
CONICET y Universidad Nacional
de Tucumán
Silvina Rodríguez
Azucena Palacios
Grisel Salmasso
Universidad Autónoma de Madrid
CONICET y Universidad Nacional de Cuyo
Alejandro Parini
Rosa María Sanou
Universidad de Buenos Aires y
Universidad de Belgrano
Universidad Nacional de San Juan
Luis París
Universidade de São Paulo
CONICET y Universidad Nacional de Cuyo
Carlos Pasero
Universidad Nacional del Comahue
Raquel Santana Santos
Ana Karina Savio
Universidad de Buenos Aires
Universidad de Buenos Aires
y Universidad Nacional de Luján
Inge Sichra
Rosana Pasquale
Universidad Mayor de
San Simón, Bolivia
Universidad Nacional de Luján
y Universidad de Buenos Aires
Lidia Soler
Liliana Pazo
Instituto Superior del Profesorado
"Joaquín V. González"
Mercedes Pujalte
Universidad Nacional de Córdoba
Adriana Speranza
Universidad Nacional de Moreno
y Universidad Nacional de La Plata
Universidad Nacional del Comahue
Sonia Suárez Cepeda
Alejandro Raiter
Universidad Nacional de La Pampa
y Universidad Nacional de Córdoba
Universidad de Buenos Aires
María del Rosario Ramallo
Universidad Nacional de Cuyo
Silvia Ramírez Gelbes
Universidad de Buenos Aires
y Universidad de San Andrés
Gabriela Resnik
Universidad Nacional de
General Sarmiento
Marcela Reynoso
Universidad Nacional de Entre Ríos
Susana Rezzano
Universidad Nacional de San Luis
Mariana Szretter
Universidad de Buenos Aires
María Beatriz Taboada
Universidad Autónoma
de Entre Ríos y CONICET
Diana Támola
Universidad Nacional de Cuyo
Jimena Terraza
Universidad de Toronto, Canadá
Guillermo Toscano y García
Universidad de Buenos Aires
Augusto Trombeta
Universidad de Buenos Aires
Evaluadores
Alejandra Vidal
CONICET y Universidad Nacional
de Formosa
Maximiliano Wilson
Université Laval, Québec, Canada
Pablo Zdrojewski
Universidad de Buenos Aires y
Universidad Nacional de
General Sarmiento
Autores del volumen
Daniela Antista
Universidad Nacional de Río Negro
[email protected]
Florentina Guaita
Universidad de Buenos Aires
[email protected]
María Rita Guevara
IFDC San Luis
[email protected]
María Eugenia Llambí de Adra
Universidad Nacional del Comahue
[email protected]
Silvina Palillo
Universidad Nacional de Rosario
[email protected]
Rosana Pascual
Universidad Nacional de La Plata
[email protected]
Romina Trebisacce
Universidad de Buenos Aires
[email protected]
Stella Maris Tapia
Universidad Nacional de Río Negro
[email protected]
Angélica Vaninetti
Universidad de Buenos Aires
[email protected]
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Introducción
María Rita Guevara y Katerinne G. Leyton
La década del 90 marcó un antes y un después en la educación
argentina y, particularmente en la enseñanza de la lengua. Maestros y
profesores de los niveles primario y secundario se encontraron con un
modo de entender y enseñar la lengua muy diferente que, en un primer
momento, los llenó de temores y dudas. Los cambios que se
experimentaron en la disciplina fueron muy profundos pero podemos
resumirlos en el siguiente aspecto fundamental, a décadas de educación
centrada en el sistema, a la lingüística exclusivamente formal le siguió el
enfoque comunicativo, una lingüística exclusivamente funcional, como
con claridad lo explica María Eugenia Llambí de Adra en uno de los
trabajos que presentamos en este volumen. Entre buenas intenciones y
mejores ideas, se incorporaron nombres nuevos, teorías diferentes y
perspectivas hasta entonces ignoradas por docentes y alumnos de la
escuela primaria y media tanto en su práctica como en su formación.
Di Tullio, Ángela L. (2007) en su Manual de gramática del español
describe el perfil de la clase de Lengua luego de las modificaciones a la
currícula durante los años 90: “La asignatura Lengua se ha convertido en
una asignatura omnicomprensiva que se hace cargo de los problemas
más arduos de la escuela media al ir incorporando sucesivamente una
serie de nuevas perspectivas inexistentes en la enseñanza tradicional:
análisis del discurso, pragmática, sociolingüística, teoría de la
comunicación, técnicas de estudio, entre otras.” Esta nueva cara de la
asignatura para los niveles de la educación obligatoria tenía la bondad de
estar fundada en, como dijimos con anterioridad, buenas intenciones
sustentadas por mejores perspectivas teóricas. La clase de Lengua hasta
ese momento había adolecido de un exceso de formalismo que ante una
evaluación funcional del producto no parecía estar cumpliendo con el
objetivo principal de su enseñanza en la escuela: desarrollar las
habilidades de comprensión y producción textual. La escuela, entonces,
no estaba formando competentes usuarios de la lengua. El formalismo de
los años anteriores se aliaba con teorías psicológicas y modelos didácticos
que resultaban en prácticas enciclopedistas casi sin mediación didáctica.
El alumno era concebido como un pequeño lingüista que incorporaba
conceptos y procedimientos de forma mecánica e irreflexiva. Ante esta
realidad de la educación, totalmente volcada a la formación de individuos
que se limitaban a la reproducción mecánica de estructuras vacías y
asignificativas, los vientos de cambio soplaban en pos de un nuevo
individuo constructor de sus saberes mediante la resignificación de los
saberes de la sociedad, y la lengua, revitalizado su valor sociológico, debía
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton
reconocer y reavivar su función como instrumento ideológico
transformador o reproductor de los valores sociales. Al pulular de estas
teorías lingüísticas que llegaban con la fuerza de los grandes procesos
renovadores tendientes a darle a la escuela el lugar que le corresponde en
la sociedad, se le sumaron teorías pedagógico-didácticas que piensan la
enseñanza- aprendizaje en una dinámica de participantes activos y
responsables de su formación. El esquematismo del formalismo de las
épocas anteriores, particularmente en relación a la enseñanza de la
lengua justificó la condena absoluta y su posterior exclusión. De esta
manera, el abandono de un tipo de escuela, y en lo que nos atañe, de una
manera de enseñar la lengua implicaba en aquella instancia el abandono
y posterior exclusión de la gramática como responsable directa. Sin
embargo, hubo un análisis de la situación y una reflexión que no se hizo
a tiempo, la incorporación de los nuevos lineamientos y teorías se realizó
mediando el total desplazamiento de todo lo que se hacía hasta ese
momento en la asignatura sin realizar una revisión clara de lo que
realmente se estaba modificando, de por qué se modificaba y de si existía
la posibilidad de que esto pudiera tener algún tipo de consecuencia en la
formación lingüística de los alumnos.
El problema no fueron los nuevos contenidos ni las nuevas
perspectivas teóricas y didácticas, el problema que no demoró en
evidenciarse fue la ausencia total de la gramática.
En los primeros años del enfoque comunicativo, la situación de la
enseñanza de la Lengua era caótica en varios sentidos. Las currículas
desbordaban de contenidos poco articulados y de una gran variedad.
Posteriormente, y con el advenimiento de nueva documentación oficial,
tal es el caso de los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios, se logró
delimitar con mayor claridad lo que resultaba ‘prioritario’ para la
formación del individuo, sin embargo, en esta nueva documentación
tampoco se le dio un espacio de relevancia a la gramática.
Durante el año 2000, el Centro de Investigaciones Lingüísticas (2000)
de la Facultad de Lenguas de la Universidad de Córdoba publicó un tomo
de su revista Lingüística en el aula. Número 4, denominado Epa…¿y la
gramática? En el prólogo a este volumen comentan sus editoras,
Magdalena Viramonte de Ávalos y Ana María Carullo de Díaz, “Epa… ¿y
la gramática?, así interrogamos un día a quienes resumieron los CBC
(Contenidos Básicos Comunes) del área de Lengua como ocupados solo
de los relativo a escritura y a la lectura, como si ellas fueran actividades
abstractas, no encarnadas en la sistematicidad de una lengua”,
continúan luego, “Sin advertir que las ‘reflexiones sobre el sistema’
juegan un papel fundante en el equilibrio de estructuración de los CBC,
pues representan el punto de inflexión para la enseñanza, una
18
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Introducción
interpretación ligera ha llevado a estereotipar la afirmación ‘¡ya no es
importante la gramática!.
A decir verdad, lo que ocurre es exactamente lo contrario: se ha
avanzado tanto en gramática, las nuevas teorías han hecho aportes tan
trascendentes que los docentes se han visto desbordados por información
que requiere un procesamiento cuidadoso y lento, un estudio específico y
sostenido.
Entonces, lo que cabe no es repetir hueramente que desapareció la
gramática sino advertir que ella se vistió de siglo XXI y hay que aprender
a re-conocerla”. Esta revista dedicada a plantear la discusión sobre el
lugar de la gramática en la escuela fue una de las manifestaciones que se
sumaba a otras tantas que se estaban produciendo en torno a la
cuestión. Y no era caprichoso que estas manifestaciones se dieran así y
en este momento, la razón principal de ello se encontraba en el hecho de
que con algo más de quince años de educación funcionalista exclusiva las
promesas de la nueva enseñanza de la lengua comenzaban a dar sus
frutos y…no eran los esperados.
Viramonte de Ávalos y Carullo de Díaz señalan los caminos por los
que avanzará la discusión, en primer lugar, el reconocimiento de la
importancia de la gramática, no solo como contenido relevante, sino como
el articulador de los demás contenidos que conforman la currícula; en
segundo lugar, rever el problema de la confusión entre hablar de la
gramática o hablar de una gramática en particular. Como lo decíamos más
arriba, la gramática que se dictó aproximadamente desde los años 60
hasta la década del 90 fue una versión didáctica de la Gramática
Estructural. Para el advenimiento del enfoque comunicativo las
modificaciones implicaban la remoción de la gramática sin considerar que
en la escuela solo se enseñaba un tipo particular de teoría gramatical
responsable, posiblemente, de los errores que se le señalaban.
Actualmente se puede hablar de diferentes teorías gramaticales que
han alcanzado un nivel de desarrollo científico muy importante, sin
embargo, como lo señalan Viramonte de Ávalos y Carullo de Díaz, las
nuevas gramáticas deben ser procesadas cuidadosamente. La Didàctica
de la gramàtica tiene como deuda pendiente en estos tiempos, la
elaboración de propuestas de acción pertinentes útiles para la enseñanza
de la Lengua.
Los planteos de los autores de este volumen se encuadran en las
temáticas de discusión que hemos mencionado y que se encuentran
instaladas en los centros de investigación. Por esa razón hemos
organizado el libro de acuerdo con ellas en dos grupos, el primer grupo,
conformado por cuatro capítulos, se centra en la controversia del lugar
que ocupa actualmente la gramática en la escuela y de cuál es el lugar
que debería ocupar. El segundo grupo, formado también por cuatro
Enseñanza de la gramática
19
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton
artículos, además de adoptar una posición con respecto a la realidad de
la enseñanza de la gramática en la escuela actual, incluyen una
propuesta didáctica en la que se implementan nuevas teorías
gramaticales.
En el primer capítulo, Daniela Antista presenta los resultados de una
investigación realizada sobre la problemática observada en las prácticas
concretas de alumnos residentes en el nivel inicial. Observa en este
trabajo una serie de incoherencias en el desarrollo teórico gramatical, si
se considera el dictado de sus propias prácticas de residencia y las clases
recibidas en su formación. Para revisar estos momentos de la formación
docente, la autora analiza las clases dictadas por residentes en su
práctica docente y, posteriormente, analiza las clases recibidas por el
residente en el profesorado, arribando a importantes conclusiones en
relación a cómo se trabaja la gramática en los profesorados y en qué
condiciones llega el residente a realizar su práctica.
En el segundo capítulo, Rosana Adriana Pascual se propone analizar
la actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua materna,
particularmente algunas consecuencias didácticas de la enseñanza de la
gramática desde la perspectiva de la Gramática Generativa. Para ello se
propone demostrar tres posibles hipótesis: por un lado, que la reflexión
explícita se produce fundamentalmente sobre aspectos léxicos o textualdiscursivos, mientras que la reflexión sobre aspectos sintácticos solo se
produce con la intervención docente, en segundo lugar y a partir de la
hipótesis anterior, propone que los aspectos sintácticos pueden ser el
resultado de un aprendizaje sistemático. En tercer lugar, considera que
los aspectos sintácticos que requieren de esta reflexión apuntando a los
fines de la educación formal, son los vinculados con lo textualdiscursivo.
En el capítulo 3, Florentina Guaita y Romina Trebisacce revisan el
lugar que ocupa la enseñanza de la gramática en los programas
curriculares y en las prácticas docentes de la escuela media actual. El
propósito de su trabajo es repensar el papel de la gramática en el ámbito
escolar teniendo en cuenta los objetivos que ella persigue y en relación
con la problemática planteada desde la Sociolingüística sobre las
variedades que circulan en la escuela y el desarrollo de una variedad
estándar.
El capítulo 4, a cargo de Stella Maris Tapia, propone que el
desplazamiento que ha sufrido la gramática en la enseñanza de la lengua
ha desembocado en problemas recurrentes en la formación lingüística de
los alumnos. Estos errores se manifiestan cada vez más frecuentemente
en las tareas que involucran el nivel sintáctico. Posicionada en la línea
teórica y metodológica del interaccionismo socio- discursivo, la autora
tiene por objetivo revisar las correcciones que los docentes realizan de las
20
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Introducción
producciones escritas de alumnos preuniversitarios y del ciclo superior
de nivel medio para establecer cuál es la relevancia que le atribuyen al
conocimiento de la sintaxis. Luego de un detallado análisis de los errores
que se corrigen en la elaboración de los textos, concluye que si bien se
señalan abundantemente los errores de sintaxis, no son las correcciones
prioritarias, además de que las maneras de realizar la corrección no
contribuyen a la reflexión sobre el error ya que predominan las
sustituciones por la forma correcta, el tachado, el marcado sin referencia.
Este tipo de corrección podría deberse a que los contenidos gramaticales
no son trabajados explícitamente en la clase, y por lo tanto no pueden ser
corregidos.
En el segundo grupo de trabajos que conforman este volumen
reunimos los artículos que presentan además de una crítica a la
situación actual de la enseñanza de la gramática, una propuesta
didáctica sobre algún aspecto gramatical abordado desde una perspectiva
teórica basada en las investigaciones gramaticales actuales.
El quinto capítulo, de Angélica Vaninetti, desarrolla una propuesta
didáctica sobre la sintaxis del español desde una perspectiva que
relaciona el aspecto léxico- semántico con el sintáctico. Esta propuesta
intenta ser una alternativa ante las prácticas tradicionales que abordan
la sintaxis desde el aprendizaje de fórmulas que se aplican
irreflexivamente sobre la oración sin mediar una verdadera comprensión
de la oración ni de los procedimientos que se llevan adelante. Ante
prácticas centradas en la memorización de estructuras vacías y la
aplicación de fórmulas de reconocimiento sin tener en cuenta los
procesos semánticos que dan sentido a estas estructuras, la autora
propone una alternativa en la que la sintaxis se trabaje privilegiando la
comprensión de la estructura argumental y dé cuenta de la relación
semántica que vincula la función sintáctica con la categoría gramatical de
las palabras. Todo esto a partir de los conceptos de gramaticalidadagramaticalidad, indispensables al momento de evaluar el sentido de
oración.
En el capítulo 6, Silvina Lorena Palillo se propone reflexionar sobre la
enseñanza de la Lengua en la Escuela Media. El recorte que realiza para
atender a esta problemática es el abordaje para el estudio de los verbos
en los primeros años de la escolaridad desde el punto de vista gramatical,
las relaciones temporales que establece y el punto de vista de la
literatura. En su trabajo, revisa los criterios de enseñanza del verbo en
libros de texto, en los documentos curriculares prescriptos de la provincia
de Santa Fe y los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios, para detenerse,
finalmente, en una propuesta de abordaje reflexivo desde la proyección
argumental que caracteriza esta clase de palabra.
Enseñanza de la gramática
21
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton
El capítulo 7, a cargo de María Eugenia Llambí de Adra, comienza con
un replanteo del rol que deben cumplir los conocimientos gramaticales en
la enseñanza de la lengua materna para detenerse en una propuesta
didáctica que parte delanálisis de casos y la elaboración de juicios
lingüísticos, para producir reflexiones sobre la lengua en un rol
totalmente activo por parte del alumno, que aportará para ello como guía
de su proceso la intuición de hablante.
En el octavo y último capítulo, María Rita Guevara, se ocupa de un
modelo de análisis sintáctico basado en la Teoría de Principios y
Parámetros de Chomsky, Noam (1988). Este modelo, elaborado en
principio por Carrara, Hugo (2005), se basa en la diagramación de los
mecanismos de selección léxica y sintáctica del verbo y la saturación de
sus requerimientos en funciones sintácticas.
De este modo, este libro es una pequeña contribución a esta
problemática de singular actualidad, la Enseñanza de la gramática. Con
ella queremos mantener viva esta discusión fundamental que se
encuentra abierta desde hace más de una década, para que alcance a
quien corresponda y movilice las políticas lingüísticas, produzca cambios
que se incorporen en la formación docente, las prácticas efectivas, y
llegue al lugar donde todo se inicia y donde todo termina, la clase de
Lengua.
22
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Capítulo 1
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia
en la escuela primaria
Daniela Antista
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 23-33.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
En el proyecto de investigación, La formación docente en nivel inicial: ¿Cómo
construimos un saber didáctico en la enseñanza de la lengua primera?,
(Convocatoria INFOD 2009) encontramos un problema en la distancia e
incoherencia que media entre el desarrollo del saber teórico gramatical en la
formación y las prácticas concretas de nuestros alumnos en el aula en la
enseñanza de la lengua. Así estas prácticas disociadas de lo planificado y de los
esquemas conceptuales realizados en los procesos de formación evidencian un
problema en el trayecto de la transposición didáctica. Uno de los objetivos
específicos de nuestra investigación fue indagar en este proceso. Estos dos niveles
aparecen obviamente relacionados, el análisis centrado en dicha relación
posibilitaría revisar líneas teóricas que desde la lingüística operan en la enseñanza
de la gramática y en su didactización. Desde el marco teórico del interaccionismo
socio discursivo, compartimos la enseñanza de las capacidades discursivo
textuales como la posibilidad de dominio de las habilidades lingüísticas para
adaptarse y actuar en cada situación comunicativa concreta (Bronckart, Jean P.
2002). Específicamente, en el saber gramatical, los aportes de las corrientes
lingüísticas contemporáneas desde el estructuralismo en adelante han marcado la
concepción de la gramática y la enseñanza de las nociones gramaticales, en
algunos casos han decidido la ausencia de la gramática en las aulas. La presente
comunicación delimita los objetos de investigación, da cuenta del proceso de
recolección y sistematización de datos, la metodología empleada y enuncia algunas
hipótesis en referencia a la construcción de nociones gramaticales.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Daniela Antista
1 Introducción
Delimitación del objeto de investigación
Después de tres años de trabajo en Formación Inicial, en el equipo de
investigación de en Didáctica de la Lengua, observamos las dificultades
de los estudiantes para delimitar objetos de enseñanza de la lengua
primera y evidenciamos la distancia entre los procesos didácticos de la
Formación y los que realizan ellos luego en sus prácticas concretas.
En la escuela las prácticas están disociadas de la planificación,
encuadrada en un marco teórico que se desarrolla durante la formación
tanto en el área de Residencia como en la de Lengua y Literatura.
Por ello, en el marco del Proyecto (Convocatoria INFOD 2009) “Cómo
construir un saber didáctico en la enseñanza de la lengua primera”,
desarrollado en el Instituto de Formación Docente de Bariloche, nos
propusimos investigar los procesos de transposición didáctica que se
producen en los dos niveles: en el área de la formación y en el espacio de
la práctica profesional. Nuestro objetivo específico es “reconocer los
procesos de transposición que se producen en el nivel de la formación
tanto entre formadores y estudiantes como entre residentes y alumnos de
la escuela primaria” (Riestra, Fernández, Antista y otros convocatoria
2009)
Retomamos el concepto de transposición didáctica de Chevallard, I
(1995) como la interacción entre docente- alumno- contenido. Pero
considerando que, en el espacio específico de la didáctica de la lengua,
según señalara Bronckart, Jean P. y Bernard Schneuwly (1991), esta
relación se complejiza ya que el contenido a enseñar no sólo proviene de
un saber sabio, científico (formas gramaticales, discursivas, textuales)
sino también de las prácticas sociales de referencia (géneros de textos,
prácticas orales y escritas diversas) que, seleccionadas y adaptadas,
deberían conducir al dominio de habilidades concretas para actuar en
diversas situaciones. Debido a esta complejidad, lo que sucede en la
práctica es la parcialización de los contenidos que muestra una ausencia
de las formas gramaticales o una presencia de estos como conceptos
aislados, de naturaleza descriptiva que prescriben los currículums.
De los varios objetivos que fijó esta investigación, el presente trabajo
enfocará dos, vinculados a los procesos de transposición mencionados y a
la implicancia que tiene la interacción didáctica en la Formación para la
elaboración de objetos de enseñanza por parte de los estudiantes.
Particularmente, nos centraremos en los objetos vinculados a la
gramática que, a través de actividades escolares, permiten el aprendizaje
y el dominio de las formas lingüísticas como una de las capacidades
textuales.
24
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia en la escuela primaria
En primer lugar se expondrán brevemente el marco teórico y la
metodología utilizada para el análisis de los datos. Luego se incluirá
dicho análisis acompañado de los registros de clases. Al final se
enunciarán algunas hipótesis y preguntas de investigación para futuras
intervenciones didácticas.
2 Marco teórico
Desde el interaccionismo socio discursivo, las mediaciones formativas
tienen fundamental importancia en el proceso de desarrollo humano ya
que a través de ellas se realiza la transmisión de los saberes sociales y es
en ellas donde se producen las transformaciones de lo que ya existe,
produciendo la continuidad de la evolución de la sociedad o su
detenimiento (Bronckart, Jean P. 2007)
Entendemos hoy la relación entre aprendizaje y desarrollo que
Vygotsky enunciara ya en 1934, como central a la hora de debatir
posturas epistemológicas frente al objeto de conocimiento, en este caso el
lenguaje. El proceso de adquisición del sistema de la lengua pone en
juego dos instancias: lo social-colectivo y lo individual-psicológico. Dicha
adquisición opera como motor del desarrollo de las funciones psicológicas
superiores, y la intervención educativa tiene un rol fundamental en este
proceso.
Así en los procesos de mediación formativa la didáctica adquiere un
rol fundamental pasando a ser el centro en el campo de las
investigaciones de las ciencias humanas y sociales. La concepción de la
didáctica como acción (Bronckart, Jean P. 1997) conlleva a la
identificación de problemas en el espacio del aula y a una posible
intervención que genere una propuesta didáctica que pueda ser evaluada.
La investigación a partir de los datos proporcionados por la experiencia y
elaborados desde la didáctica trata de dar respuesta a esos problemas y
de reglarlos en un campo que excede lo estrictamente científico para
abordar cuestiones sociales y políticas. Desde este lugar la intervención
en los niveles educativos propicia la transformación de las prácticas,
intenta dar respuestas a demandas sociales actuales y generar resultados
que implican reglar cuestiones que limitan con situaciones económicas,
sociales y políticas a veces infranqueables (Riestra, Fernández, Antista y
otros 2009)
La formación y la investigación educativa, como campos diversos
pueden complementarse en la medida en que se enfoque, según
Bronckart, Jean P. (2002), problemas definidos y elaborados en función
de una lógica del conocimiento y en que la investigación en educación
aporte a la resolución de problemas prácticos.
Enseñanza de la gramática
25
Daniela Antista
En los últimos veinte años, las investigaciones en las Ciencias del
lenguaje y el desarrollo de la Lingüística produjeron nuevos y diversos
campos de conocimiento y objetos de investigación, ello generó la
circulación de múltiples nociones disjuntas en el espacio de la
enseñanza.
La construcción de los objetos de enseñanza, en el campo de la
didáctica de las lenguas,.nos enfrenta como docentes de todos los niveles
a procesos de transposición basados en la necesaria solidaridad entre
ellos. Bronckart, Jean P. y Bernard Schneuwly (1991) señalan al respecto
que “en materia de lenguaje, la parcialización ya está en vigor en el
campo científico en ausencia de teorización de conjunto, los que conciben
el currículum se ven obligados a tomar prestados sus elementos a
sistemas disjuntos es decir, contradictorios y a intentar construir un
mínimo de coherencia dentro del campo didáctico”.
Este problema complejo que se evidencia en las nociones discursivas y
textuales también es notorio en referencia a las nociones gramaticales
que a la manera de listados se leen en los diseños curriculares bajo el eje
denominado reflexión sobre el lenguaje.
Desde el interaccionismo concebimos la enseñanza de la lengua como
el desarrollo de las capacidades discursivo-textuales para lograr el
dominio de habilidades lingüísticas que nos permitan actuar eficazmente
en cada situación comunicativa y no como una construcción del
conocimiento acerca de ella. (Bronckart, Jean P. 2002)
Así en la misma entrevista que se cita del año 2002, Bronckart señala:
Uno de los desafíos fundamentales que tenemos aún, al fin de
cuentas, es tradicional. La progresión de las nociones gramaticales
que son introducidas en el análisis de la lengua deberían poder reexplotarse en el aprendizaje de textos y discursos, es decir, que todo
lo que se incorpore de los conceptos gramaticales debería poder
utilizarse como soporte para comprender y describir el
funcionamiento de los discursos.
A partir de la concepción de la arquitectura textual, los textos se
organizan en tres niveles superpuestos, a la manera de un hojaldre: la
infraestructura general del texto, los mecanismos de textualización, y los
mecanismos de responsabilidad enunciativa. (Bronckart, Jean P. 2004)
Según señala Riestra, Dora M. (2009) el lugar de la infraestructura
textual es donde aparecen formateados los tipos de discurso y en el
pasaje del texto al discurso podemos plantear los objetos de enseñanza
gramaticales para promover el razonamiento, motor del desarrollo.
Desde la lingüística, la relectura de Saussure, Ferdinand de (2004) a
partir de los Escritos ha permitido redimensionar la esencia dual del
26
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia en la escuela primaria
lenguaje, norma social y uso individual, que imprime a la gramática de
las lenguas una movilidad basada en relaciones de funcionamiento.
(Riestra, Dora M. 2009)
Frente al desafío que tenemos de introducir las nociones gramaticales,
se hace necesaria nuestra intervención para favorecer el razonar, pues la
investigación de las prácticas en las aulas evidencia que una dimensión
textual, la pragmática discursiva, predomina y sesga a la otra, lógica
gramatical. En el marco de las actividades de lectura y escritura, se
propicia el taller, la producción sin atender la organización de recursos
lingüísticos o se enseñan categorías descriptivas disociadas del hacer
textual. La enseñanza de la lengua en la escuela parece no poder
conciliar ambas lógicas, discursiva o pragmática y gramatical o
epistémica.
El problema didáctico en la formación escolar es el carácter
disjunto del hacer del lenguaje y del seleccionar/combinar de la
lengua, que nos plantea la necesidad de integrar ambas lógicas en la
enseñanza. Es decir, proponer e instalar un trabajo consciente y
planificado de transiciones entre texto y discurso (Riestra, Dora M.
2010).
En cuanto al problema de la distancia entre las prácticas de los
alumnos residentes y el desarrollo del saber teórico gramatical en la
formación, se vuelve absolutamente necesario indagar la formación.
¿Cómo enseñamos las nociones gramaticales en la formación inicial?
¿Cómo enseñamos a didactizar esas nociones?
La formación docente como formación profesional tiene en primer
lugar
incumbencias
académicas
que
determinan
conductas
medianamente prescriptivas y las disciplinas curriculares, en segundo
lugar, poseen saberes ya constituidos y otros que se producen en la
acción.
Desde el aporte de la teoría de la actividad profesional y el análisis del
trabajo, el sociólogo Jobert, G. (2002) aporta que “hay modelos de
conceptualización de la acción e invariantes cognitivas (operaciones
mentales) que se ponen en juego en la actividad real del trabajo, que son
transferibles y transmisibles como modelos de acción”.
La pregunta que surge es ¿Qué modelos de conceptualización de la
acción que operan luego en el trabajo real transmitimos en la formación?
3 Acerca de la metodología utilizada
La metodología de investigación utilizada tomó como instrumento de
recolección de datos, el registro etnográfico.
Enseñanza de la gramática
27
Daniela Antista
Para abordar los datos utilizamos la metodología de análisis del
trabajo real propuesta por el grupo de investigación (LAF) dirigido por
Bronckart en la Facultad de Ciencias de la Educación de Ginebra,
centrado en las relaciones existentes entre las conductas observables y
los discursos diversos que convierten esas conductas en acciones en la
práctica de los docentes.
La multiplicidad de nociones usadas hoy en los diseños curriculares y
en los manuales, provenientes de teorías lingüísticas diversas, en
intersección con la transmisión de conceptualizaciones en la formación
generan un contexto complejo desde donde abordar el trabajo real y la
elaboración de objetos de enseñanza.
El corpus estuvo conformado por siete clases de alumnos residentes
tomadas durante las prácticas de los mismos, tres filmaciones de clases
de maestros de escuelas públicas de la ciudad de Bariloche y cinco clases
de docentes formadores del área de Lengua y Literatura de los
profesorados de Nivel inicial y de Nivel Primario del IFDC de Bariloche. Se
realizaron registros etnográficos y transcripciones de filmaciones,
tomando en préstamo la metodología de De Tezanos, Araceli (2004).
Para el procesamiento de los datos organizamos
correspondientes a los dos niveles observados:
dos
grupos
A) registros de alumnos residentes y transcripciones de filmaciones de
clases de maestros y residentes.
B) registros de docentes de lengua del nivel superior.
El análisis de los registros se centró en las consignas formuladas al
inicio de las clases. El trabajo sobre la consigna como enunciado permite
identificar la tarea didáctica e indagar acerca de las nociones, como
objetos del saber que deberían adquirirse o ponerse en práctica. Las
tareas se enmarcan en actividades que se despliegan con determinados
fines y ponen de manifiesto la relación entre tarea y objeto de
enseñanza.(Riestra, Dora M. 2008) Por lo general, las consignas son
reformuladas y de alguna manera dan lugar a explicaciones y preguntas,
que conforman las interacciones que se producen en la clases como
procesos internos formadores del pensamiento.
Las consignas desde el marco teórico propuesto constituyen
enunciados que cumplen dos funciones simultáneas: comunicativa
(instructiva) y cognitiva (operaciones, acciones mentales). “En este
proceso, la acción que se propone como ejecución( elaborar, completar)
será la que, al lograr la meta determinada, constituya un paso en la
apropiación conceptual o procedimental”.(Riestra,Dora M. 2008)
Así como instrumentos de reorganización del pensamiento, desde
acciones externas se transforman en acciones mentales internas. Muchas
veces lo que sucede en la formulación de consignas en el espacio escolar
28
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia en la escuela primaria
es que se transforman en mecanismos de reproducción de conceptos y no
exigen una reorganización interna.
A partir del análisis de las consignas, se proponen las siguientes
categorizaciones: preguntas, explicaciones didácticas, nociones didácticas
y nociones teóricas que pueden explicitarse en la clase o estar implícitas.
El presente trabajo enfoca las nociones gramaticales que se abordan
en las clases observadas y la didactización de las mismas como
transformación de objetos a enseñar a objetos enseñados efectivamente.
A) El primer grupo de registros de los alumnos residentes evidenció la
formulación de la consigna al principio de la clase donde se explicita
la tarea. En referencia a los objetos de enseñanza seleccionados es
posible detectar una fragmentación o dispersión que a lo largo de la
clase se despliega en una diversidad de actividades cuyas finalidades
no guardan coherencia con dicho objeto. (Tabla de consignas
residentes.)1
Por lo tanto la presencia de nociones teóricas es escasa, en la mayoría
de los casos se explicita la definición de un género en la consigna inicial:
cuento de terror, receta, canciones, poesía, noticia. Pero no hay selección
de objetos de enseñanza vinculados a ese género ni una secuenciación de
tareas pertinentes. Se reiteran las consignas: leer, escribir la palabra,
copiar el título, completar, pegar como actividades diversas cuyas
funciones cognitivas no siempre se aproximan a la apropiación
conceptual. A modo de ejemplo:
Ahora les voy a contar un cuento. ¿Qué animalitos había en este cuento? Después
de copiar la fecha les voy a dejar unos dibujitos y tienen que ordenar el cuento
(5R).
¿Quién empieza la lectura? Sigue ella... Cada uno lee el cuento en forma individual
Leemos ¿Cuál es el terror en este cuento?..(3R)
Necesito que me ayuden a escribir el título. Copiar el título con color y ahora van
a pegar la canción debajo. (7R)
No se explicitan otras nociones teóricas en tanto que las gramaticales
se hacen presentes en tres clases de primer grado.
En el primer caso aparece explicitada la categoría verbo, en los otros
dos, la relación fonema -grafema está implícita en las preguntas
didácticas que evidencian la metodología de alfabetización usada. EJ:
Cuál sería la palabra de “ARMO” que termina en AR la termino en AR... ARMAR.
¿Se acuerdan cómo se llamaban estas palabras? Verbos (1R)
La flechita indica dónde van a tener que escribir la palabra sonidito por sonidito.
Vamos a decir sonido a sonido de la palabra ISLA. ¿De la palabra ISLA qué sonido
le presta a la palabra GATO? (4R)
Enseñanza de la gramática
29
Daniela Antista
Los conceptos gramaticales son enseñados en forma aislada,
desvinculados del hacer textual, no están enmarcados como nociones
instrumentales a un actuar comunicativo
Es importante señalar que las transcripciones de dos de las
filmaciones muestran consignas que evidencian selección de nociones
gramaticales precisas que se explicitan:
Bien, vamos a separar en sílabas: A ver separen con las manos (1V)
Hoy vamos a trabajar en Lengua con antónimos y vamos a usar un dominó (2V).
Las filmaciones pertenecen a maestros. En estos casos hay dos
observaciones importantes a realizar:
1) La desvinculación de la lógica gramatical del hacer textualdiscursivo (Riestra, Dora M. 2009). Es difícil integrar lo nocional
con lo accional.
2) La presencia de un saber escolar, curricular, saber a enseñar
(Bronckart, Jean P. 2002) que es explicitado bajo la forma de
nociones didácticas o simplemente nombrado.
Lo prescriptivo bajo la forma de contenidos curriculares a enseñarse
demuestra imponerse en el espacio escolar y los docentes resuelven en la
práctica concreta la transposición didáctica posible. La dinámica de las
clases está basada en el desarrollo de un tema con preguntas orales y
luego una actividad escrita vinculada al género o tema
Entendemos que las reformulaciones de consignas aparecen como
preguntas didácticas mayormente y en pocas ocasiones como
explicaciones
Las preguntas didácticas son reiteradas y operan como guías de
acciones concretas que van conduciendo procesos mentales. EJ:
¿Cómo empieza la palabra?, ¿La be Larga? ¿Ahora cuál va? 7R
¿Qué pasó al principio del cuento? ¿Después cómo sigue? 5R
¿Cuáles son los personajes de este cuento? ¿Cuál es el terror en este cuento? 3R
¿Cuáles son las partes de la receta? ¿Qué otro ingrediente había? 1R
La problemática que relevamos concretamente puede observarse en:
1) La escasa enseñanza de nociones gramaticales en nuestros
alumnos residentes
2) La dificultad de seleccionar y organizar en secuencias los
objetos de enseñanza.
3) La integración de las nociones disciplinares con el saber hacer,
conjunto de habilidades lingüísticas que permiten actuar
eficazmente.
30
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia en la escuela primaria
B) El segundo grupo de registros corresponde al nivel superior.
Analizamos cinco registros de docentes formadores de los
31rimário31ados de Nivel inicial y de Nivel 31rimário.
En la actualidad, los Institutos de Formación están habitados por
profesionales del campo universitario, así este espacio formativo aparece
más vinculado al campo científico particular de cada disciplina que al
campo de la práctica docente. Enmarcado en este contexto, el
relevamiento de datos muestra cómo en la Formación inicial, los docentes
formadores del área Lengua y Literatura han dejado de enseñar
gramática como un cuerpo teórico de nociones y relaciones del sistema de
la lengua que muestra su funcionamiento dándole mayor prioridad a
otros contenidos o nociones provenientes del campo de la lingüística
actual: géneros, discursos, textos, funciones del lenguaje. Dichos
contenidos cumplen una doble función, formar al alumno de nivel
superior y darle herramientas para didactizar ese contenido en la
enseñanza de la lengua materna.
Lo que evidencian los registros es una abundante presencia de
nociones teóricas en las clases, a modo de ejemplo: géneros textuales,
secuencia didáctica (F2, F5), situación comunicativa, contexto, secuencia
narrativa, (F3), intertextualidad, funciones sociales de la palabra, (F1),
narrador, voces, oralidad, (F4)
En referencia a las consignas registradas en la tabla, se vinculan
siempre al contenido, objeto de enseñanza de la clase y a la bibliografía
pertinente, no implican actividades de lectura o escritura (excepto una)
sino proponen preguntas que ayuden a elaborar oralmente los conceptos
o trabajos en grupo a través de exposiciones orales.
No se abordan procesos de transposición didáctica, elaboración de
objetos de enseñanza ya que no se trabaja sobre situaciones áulicas,
escolares. Las actividades propuestas vehiculizadas a partir de consignas
presuponen saberes ya conocidos por los alumnos focalizados en
prácticas académicas:
Vamos a definir primero qué es interacción (F1).
Si definieron copla humorística tienen que indagar de donde vienen, quiénes
son sus autores, cuáles son los mecanismos para construir coplas (F2).
Usar el dispositivo uso, sentido y forma para analizar el cuento de Borges (F3).
La idea de hoy es ver el trabajo de Carolina Cuesta (F5).
Enseñanza de la gramática
31
Daniela Antista
La problemática que observamos en este caso es:
1) La oralidad atraviesa estas clases repletas de explicaciones
didácticas y mucha interacción, dejando de lado la experiencia
directa con el ámbito escolar.
2) La ausencia de enseñanza de contenidos gramaticales
presuponiendo que los alumnos conocen el funcionamiento de la
lengua.
3) La presencia de saberes teóricos disciplinares que implican el
conocimiento de las distintas teorías anteriores que en un
recorrido histórico han influenciado en la enseñanza y las
relaciones entre ellas.
4) Los pasajes de transposición no son abordados al alejarse de lo
concreto, de la experimentación áulica.
4 Formulación de hipótesis
El haber llegado a esta etapa de la investigación, restando realizar
entrevistas con docentes y alumnos involucrados, nos permite en forma
provisoria formular algunas hipótesis o preguntas que den lugar a nuevas
investigaciones.
Podríamos suponer un quiebre entre el proceso de formación y la
práctica que el alumno lleva al aula. Las conceptualizaciones de la acción
que llevamos a cabo en el nivel superior no son transferidas al aula de la
escuela. Como docentes de la Formación nos posicionamos desde la
teoría como divulgadores pero no realizamos procesos de transposición
didáctica. ¿Por qué no se proponen entonces tareas o experiencias
áulicas a los alumnos en este proceso?
La práctica de los alumnos pareciera alejarse del marco teórico
propuesto por los docentes formadores, ¿cómo seleccionan entonces los
objetos de enseñanza para las clases? ¿Cómo fundamentan esta
selección?
Los alumnos residentes por su lado necesitan hacer ese pasaje del
saber sabio al didactizado y operarían con los contenidos curriculares
realizando este proceso.
La dispersión y la multiplicidad de conceptos lingüísticos que pueblan
los diseños curriculares abonan una incoherencia difícil de remediar en
la acción concreta.
En cuanto a las nociones gramaticales no se enseñan en la
Formación, podría presuponerse que el alumno ya las conoce y sabe
cómo funciona la propia lengua.
¿Porqué no enseñar gramática o abordar concepciones de la gramática
en la Formación ?
32
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Los conocimientos gramaticales: presencia o ausencia en la escuela primaria
Al respecto Bronckart, Jean P. (2002) aporta: “Entonces, cuando yo
digo examinar y comprender la esencia de esas teorías, quiero decir que
no se trata de conocer todas las teorías, sino por lo menos la relación
entre las teorías que, de hecho, orientan los programas de enseñanza
adoptados por un país, utilizar un juicio general de las concepciones de lo
establecido, qué es una Gramática social, qué va a hacer, cómo trabaja y
qué aporta una Gramática generativa, cuál es el proyecto, qué expresa a
nivel de la enunciación, qué son los considerados enfoques del discurso,
para que, por lo menos la lógica de los sistemas de referencia sea
globalmente dominada, que no es sino la lógica y los principios de los
resultados técnicos”.
Si enfocamos la enseñanza de las nociones gramaticales como formas
de razonamiento acerca del funcionamiento del lenguaje, ¿Retomar la
lectura de Saussure para dimensionar una gramática dinámica, centrada
en relaciones funcionales al uso, se convertiría en una propuesta viable
de ser didactizada?
Enseñanza de la gramática
33
Capítulo 2
La actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua.
Consideraciones teóricas y aportes didácticos
Rosana Adriana Pascual
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 35-44.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
El objetivo de este trabajo es explorar los alcances de la actividad metalingüística
en el aprendizaje de la lengua materna desde la perspectiva teórica de la
Gramática Generativa, y delimitar algunas consecuencias didácticas en la
enseñanza de la gramática, siguiendo los lineamientos de la pedagogía
constructivista y revisando los trabajos recientes del grupo GREAL de Barcelona.
Según GREAL, las operaciones metalingüísticas se manifiestan en tres niveles
dependientes del grado de conciencia y explicitación: implícito, procedimental y
reflexivo. Teniendo en cuenta los diferentes estratos lingüísticos (discursivo,
textual, léxico, morfológico y sintáctico), la hipótesis que se tratará de
fundamentar tiene diferentes aspectos: (i) la reflexión explícita se produce
fundamentalmente sobre aspectos léxicos o textual-discursivos, pero no parece
existir en lo estrictamente sintáctico salvo que medie la intervención docente; (ii)
por tanto, la reflexión sobre la sintaxis sólo puede ser resultado de un aprendizaje
sistemático; (iii) los aspectos sintácticos que requieren de reflexión están
vinculados fundamentalmente con lo textual-discursivo. Parece razonable suponer
que el hablante no necesita reflexionar sobre el aspecto sintáctico si partimos del
postulado de la GG de que lo nuclear de la gramática es un componente innato
codificado en principios abstractos susceptibles de parametrización (GU). Lo que
se aprende se vincularía con lo periférico, el léxico, la morfología, lo textualdiscursivo, fenómenos sobre los que sería necesario promover la reflexión
sistemática. Para fundamentar esta hipótesis se abordará un problema particular
relacionado con el uso de ciertas estructuras de relativo en la producción escrita
de estudiantes secundarios y universitarios.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Rosana A. Pascual
1 Introducción
La actividad metalingüística es una operación que subyace al uso de
la lengua desde los primeros estadios de su adquisición. Jakobson,
Roman (1967) demuestra que cualquier uso lingüístico que carezca de
estas operaciones se vincula con algún tipo de afasia; por tanto, su
ausencia deviene en casos patológicos. En estudios más recientes, Cots,
Josep M. y Lucila Nussbaum eds. (2002) afirman que las operaciones
metalingüísticas se hallan indisolublemente ligadas al uso verbal, tanto
en la vida cotidiana como en situaciones de enseñanza y aprendizaje,
para facilitar la comunicación o para adquirir nuevos conocimientos
sobre el lenguaje humano.
Así, en tanto actividad inherente al desarrollo y uso de una lengua, es
variada y presenta diferentes niveles considerados por investigaciones
llevadas a cabo en los últimos años, entre las cuales se encuentran las
del grupo GREAL de Barcelona. Según la propuesta de Milian, Marta y
Anna Camps (2006), Ribas, Teresa; Marta Milian, Oriol Guasch y Anna
Camps (2002), y Camps, Anna y Felipe Zayas (coords.) (2006), las
operaciones metalingüísticas puede manifestarse en tres niveles
diferenciados a partir del grado de conciencia y explicitación:
(1) Un nivel de actividad implícita relacionada con la adquisición, el
desarrollo y el uso de la lengua: cualquier hablante posee competencia
metalingüística que se manifiesta en paráfrasis, aclaraciones, selecciones
y sustituciones léxicas.
(2) Un nivel procedimental, más manipulativo que especulativo, una
“regulación sobre la marcha”1 manifiesta en reformulaciones, dudas,
autocorrecciones en pro de la gramaticalidad o de la adecuación a una
situación discursiva determinada. Se actúa sobre el lenguaje sin que la
metacognición se haga explícita, no hay justificaciones, ni comentarios
que den razones, simplemente se introducen elementos o cambios en el
proceso de construcción discursiva.
(3) Un nivel reflexivo, una especulación introspectiva o explícita sobre
la estructura de la lengua y sus usos, manifiesta en una búsqueda e
interrogación consciente. Se trata de una actividad analítica que sólo es
posible en un proceso de aprendizaje.
En este último nivel nos encontraríamos ante un conocimiento
declarativo de la gramática que, según GREAL, puede darse en lenguaje
cotidiano o en lenguaje disciplinar. No obstante, creemos que el uso del
metalenguaje no conlleva una simple distinción superficial, sino que
implica la sistematización de la reflexión metalingüística, ya que es el uso
1
36
Milian, Marta y Anna Camps (2006)
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua
de vocabulario específico lo que permite categorizar y construir una
organización de conjunto.
Por otra parte, en cualquiera de estos niveles es necesario considerar
la existencia de diferentes estratos lingüísticos que pueden desglosarse:2
discursivo (enunciativo, comunicativo); textual (cohesión y coherencia en
sus diferentes aspectos); léxico; tal vez uno morfológico –si podemos
postular su independencia-3 y sintáctico.
Según GREAL, los diferentes niveles de actividad metalingüística “no
suponen una evolución en el desarrollo del individuo, ni tampoco siguen
un camino que va de lo implícito a lo explícito”, pues a menudo se
presentan en paralelo y pueden ir de la reflexión al uso o viceversa.4 Sin
embargo, consideramos que el nivel reflexivo, y sobre todo en lo
concerniente a lo sintáctico, sólo puede ser resultado de un aprendizaje
sistemático. Para comenzar a abordar este problema, podemos tener en
cuenta dos tipos de situaciones en las que se pone de manifiesto la
reflexión metalingüística: la interrogación oral en el proceso de
adquisición de la lengua y la producción escrita.
2 Fundamentación. El caso particular de ciertas oraciones de
relativo en la producción escrita
Los niños desde temprana edad llevan a cabo procedimientos
metalingüísticos variados del tipo “¿qué significa X?”, “¿X es igual a Z?”
“¿significan lo mismo?”, “¿cómo se dice tal cosa?”, “¿se dice de esta
manera o de otra?”, pero no interrogan sobre aspectos relacionados, por
ejemplo, con la posición del sujeto o del objeto, o sobre la concordancia
sujeto-verbo, no reflexionan sobre qué verbo mover para formar una
interrogativa, ni tampoco sobre cómo y dónde se incrusta un
subordinante o con qué variable se liga, salvo que medie una intervención
escolar o similar. En este sentido, llama la atención que la reflexión se
produce fundamentalmente a nivel léxico o discursivo, incluso textual
cuando los niños comienzan con las primeras narraciones y buscan
autorregular la superestructura, pero no parecen existir los planteos a
nivel oracional.
Escribir implica una intensa actividad de reflexión sobre la lengua, ya
que demanda un alto grado de actividad consciente y de toma de
decisiones, tal como se puede apreciar en experiencias sobre actividades
de construcción colectiva de un texto. Esta actividad permite observar el
proceso de producción y llegar a conocer las operaciones mentales que se
Esta propuesta es abordada también, con algunas diferencias, por Jolibert, Josette
(1986a; 1986b) en términos de niveles de competencias lingüísticas.
3
En relación con esta problemática puede verse las propuestas de los últimos estudios
sobre morfología distribuida como el de Fábregas Alfaro, Antonio (2005)
4
Milian, Marta y Anna Camps (2006)
2
Enseñanza de la Gramática
37
Rosana A. Pascual
ponen en marcha cuando se intenta elaborar un texto escrito. De esta
manera, es posible analizar las estrategias empleadas para resolver los
diferentes problemas que plantea el acto de escribir y los diferentes
niveles de conciencia y reflexión sobre el lenguaje.
Al observar el proceso de producción escrita en situación de
elaboración colectiva, se manifiestan los distintos niveles de actividad
metalingüística que, en un primer momento es más manipulativa,
exploratoria del uso lingüístico: los sujetos observan, comparan,
proponen, resuelven; van apareciendo argumentos en lenguaje cotidiano
y puede darse en algunos casos el empleo del lenguaje metalingüístico
explícito al reflexionar sobre la lengua. Sin embargo, en el plano
sintáctico rara vez se excede lo manipulativo, como se puede apreciar en
los casos de reformulaciones, salvo que medie la intervención docente.
Parece razonable suponer que el hablante no necesita reflexionar
sobre aspectos sintácticos oracionales, de hecho no parecen existir
problemas estrictamente sintácticos que ameriten la reflexión si partimos
de la idea de que lo nuclear de la gramática es un componente innato
codificado
en
ciertos
principios
abstractos
susceptibles
de
parametrización que constituyen la Gramática Universal, y por tanto no
se aprende sino que se desarrolla en contacto con los estímulos
adecuados.5 Los estudios sobre adquisición que se han especializado en
las estructuras tardías del lenguaje infantil6 ponen de manifiesto la
complejidad formal de las estructuras que utiliza el niño desde temprana
edad y sin dificultad (por ejemplo, a los 3 años ya interpretan y producen
frases relativas); por otro lado, muestran que las representaciones de
adquisición tardía, que necesitan en muchos casos de reflexión y
aprendizaje escolar, son llamativamente pocas y dependen en su mayoría
de factores discursivos. Las que se vinculan con la complejidad
lingüística de las estructuras oracionales parecen estar restringidas a
tres áreas generales de la sintaxis: el control de los sujetos de infinitivo,
los clíticos y las relativas. La principal causa de su adquisición tardía
radica no tanto en la complejidad de la representación lingüística en sí
misma como en la escasa frecuencia o casi nula aparición en el habla,
limitándose su uso a la lengua escrita. De los tres fenómenos señalados,
abordaremos el de las relativas por tres razones: en principio por su
productividad en la escritura; en segundo lugar, por su alto grado de
complejidad; y finalmente, porque, según nuestra hipótesis, las
Los numerosos trabajos en lingüística generativa permiten corroborar esta hipótesis. Para
una aproximación se puede ver Chomsky, Noam (1988), Fernández Lagunilla, Marina y Alberto
Anula Rebollo (1995), Eguren, Luis y Olga Fernández Soriano (2004), Uriagereka, Juan (2005)
6
Se trata de determinadas representaciones gramaticales y de ciertas convenciones
complejas de la conversación que son de adquisición tardía, ya que aparecen
aproximadamente entre los 7 y 10 años. Ejemplos de estudios en español son Hurtado, Alfredo
(1982), (1984); Echeverría, Max (1978).
5
38
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua
dificultades que presentan en su uso son fundamentalmente de índole
discursiva.
Las oraciones de relativo constituyen una de las representaciones
estructurales más complejas de las lenguas humanas, ya que su
procesamiento implica poner en relación un antecedente (“el libro ” en el
ejemplo que sigue), un complementante (“que”, “quien”, “el cual”, etc.) y
una huella o hueco producido por el desplazamiento del complementante
a la posición inicial de la oración (marcada con “h” en el ejemplo), dando
como resultado la conformación de una cadena estructural (expresada
con los subíndices “(i)”):
Ejemplo: El libro (i) que (i) me regalaste h (i) está buenísimo
Sin embargo, en términos generales su uso es productivo desde
temprana edad sin necesidad de que medie la reflexión metalingüística.
Los casos que presentan dificultad en la sintaxis oracional son
restringidos y se relacionan con estructuras que son de uso muy escaso
en la lengua oral, como las cadenas con presencia de una preposición en
el complementante o con el relativo posesivo “cuyo”, que se encuentra en
alto retroceso en la lengua actual (Grupo A del Apéndice). Sin dudas, el
hecho de que la ocurrencia de estas representaciones sea muy baja en el
habla trae como correlato que su adquisición sea tardía, lo cual se pone
de manifiesto en las producciones escritas incluso de adolescentes y
adultos (Grupo B).
Al margen de las estructuras oracionales consideradas hasta aquí –
que requieren de activación más que de reflexión-, nos interesan en
particular los casos de usos de relativas que abundan en la producción
escrita de jóvenes y adultos, y que constituyen uno de los principales
problemas en la construcción del texto escrito (Grupo C). La hipótesis es
que se trataría de un fenómeno discursivo en tanto la distribución de
estas relativas parece corresponderse con la distribución de la
información perdiendo su carácter de estructuras subordinadas en la
oración; y esto se manifiesta en que:
(i) se ubican generalmente en posición final con carácter remático y el
complementante tematiza una información previa (ejemplos del Grupo C
del Apéndice);
(ii) en muchos casos no existe adyacencia entre el antecedente y el
complementante, restricción básica para la extraposición de relativas
explicativas (ejemplo 20);
(iii) en ciertos contextos, el relativo puede ser conmutado por pronombres
demostrativos (por ejemplo, en 26 “La cual” por “Ésta”) o conectores
discursivos (por ejemplo, en 19 “en donde” por “y”);
Enseñanza de la Gramática
39
Rosana A. Pascual
(iv) es frecuente el uso del relativo neutro “que”, que por carecer de rasgos
de flexión que lo vinculen con el antecedente no permite la extrapolación
de explicativas en posición final (ejemplo 25);
(v) se dan casos de antecedentes elípticos, lo que constituye una
transgresión aún más severa cuando el relativo usado es “el cual” debido
a los rasgos flexivos que debe cotejar con su antecedente (ejemplo 22).
Según lo expuesto, parece tratarse de enunciados independientes con
valor proposicional en los que el relativo pierde su condición y actúa
como un conector discursivo o como un pronombre demostrativo (ver
ejemplos 19, 20, 21, 22, 23, 24, 26). Esta hipótesis se puede corroborar
con mayor claridad en los casos en que aparece un constituyente que
ocupa la posición funcional correspondiente al relativo (casos 19, 20, 22,
25). Por tanto, no serían subordinadas en sentido estricto sino
construcciones paratácticas yuxtapuestas7 cuya función consistiría en
introducir o destacar aspectos remáticos de la información mediante un
“qu-“ que actúa como nexo con la función de tematizar una información
previa en el contexto discursivo.
Si la hipótesis es correcta, este fenómeno constituiría otra prueba
contundente de que lo que se aprende se vincularía esencialmente con el
léxico, la morfología y lo textual-discursivo, aspectos sobre los que es
necesario promover la reflexión sistemática para posibilitar el pasaje de la
mera actividad implícita (nivel 1) o preteórica y manipulativa (nivel 2) y
acceder a un saber declarativo (nivel 3) que pueda sistematizarse en un
metalenguaje.
3 Consideraciones pedagógicas y didácticas
Toda concepción pedagógica y didáctica es obviamente producto de
una postura ideológica y epistemológica. El abordaje escolar de un objeto
determinado, cualquiera sea éste, implica siempre ciertos presupuestos
teóricos en un doble sentido: sobre la práctica educativa y sobre las
características del objeto mismo. Respecto de la primera, creemos que es
fundamental situarse dentro de la perspectiva de la teoría del aprendizaje
constructivo según la cual el sujeto no responde a los estímulos externos
sino que interactúa con el objeto de conocimiento, siendo determinante
en este proceso la actividad desarrollada por el individuo en la
construcción del saber a partir de sus esquemas cognitivos. En relación
con el objeto específico sobre el que estamos tratando, la lengua y, en
particular, la gramática, proponemos partir de los principios teóricos que
En relación con la discusión sobre el carácter independiente de ciertas estructuras
relativas, como las explicativas y las yuxtapuestas, existen diversos trabajos, desde Bello,
Andrés (1847), que fuera retomado por la Rae (1928), hasta otros más recientes como Lope
Blanch, Juan (1984) y Brucart, José M. (1999).
7
40
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua
corresponden a la teoría lingüística y de la adquisición desarrollada por la
Gramática Generativa. Los esquemas cognitivos del lenguaje son
específicos y modulares, y en la medida en que son genéticos, poseen un
etapa crítica para la adquisición de una lengua dada. Todo esto es
esencial a nuestro propósito, ya que, por un lado, presupone que el niño
o el adolescente sabe mucho más de su gramática que lo que la escuela
pretende enseñarle, es decir que posee una competencia tal que le
permite no cometer errores que violen las representaciones y reglas de la
lengua (que muchas veces la escuela pierde tiempo sustancial en
describir y analizar); pero existen aspectos complejos de adquisición
tardía que necesitan activarse y desarrollarse. Por otro lado, el hecho de
poseer una etapa que llega a su punto crítico cerca de la pubertad,
implica que durante el período escolar el sujeto está en un momento
óptimo respecto del lenguaje y que lo que no consiga desarrollar en ese
lapso difícilmente pueda utilizarse productivamente. En ese sentido el rol
de la escuela se torna fundamental y por tanto debe definir qué es lo que
el individuo sabe y no requiere enseñanza especial y qué es lo que
necesita aprender para el mejoramiento de sus competencias lingüísticas.
Tomar una posición teórica respecto de qué se aprende y qué no, es
esencial para determinar qué aspectos requieren de reflexión y cuáles
sólo necesitan ser activados a través del uso. Así, en lo relativo a la
sintaxis, por una parte, lo pertinente sería analizar cuáles son los
fenómenos sintácticos que se vinculan con el plano discursivo y que
necesitan por tanto de reflexión sistemática. Creemos que algunos
ejemplos de esto, además del considerado anteriormente, son las
transformaciones sintácticas con intención tematizadora –como la voz
pasiva-, las incrustaciones múltiples de subordinadas con el fin de
condensar información a medida que se tematiza –muy habituales en las
producciones
periodísticas-,
las
relativas
explicativas,
ciertas
construcciones adverbiales complejas que modifican a toda la cláusula –
como las que denotan un evento que se vincula con la principal a través
de una relación lógica: condición, causa, fin, concesión- entre otras.8 Por
otra parte, también sería necesario considerar cuáles son las
representaciones sintácticas oracionales de adquisición tardía que no son
productivas en el lenguaje oral –como las relativas con antecedente y
preposición en el complementante- a fin de promover su uso y
sistematización.
En cualquier caso en que sea necesaria la reflexión metalingüística, la
construcción de un saber gramatical declarativo, es esencial preguntarse
cómo se puede dar sentido a este aprendizaje lingüístico en la escuela. La
respuesta parece ser simple: en la medida en que contribuya a usar
Se puede encontrar una exhaustiva consideración de estos fenómenos en Bosque, Ignacio
y Violeta Demonte (1999), vol 3.
8
Enseñanza de la Gramática
41
Rosana A. Pascual
mejor la lengua tanto en la producción como en la interpretación
discursiva. Para ello, desde el punto de vista pedagógico-didáctico,
resulta prioritario tener en cuenta los procesos mentales puestos en juego
por los sujetos para acceder al conocimiento de un objeto: síncresis
(totalidad significativa), análisis de las partes constitutivas y síntesis
(nueva totalidad comprendida). Esto implica que quien construye su
conocimiento nunca lo hace a partir de elementos no significativos o
aislados, y de allí la importancia de trabajar a partir del discurso, de la
complejidad de los textos que nos circundan para propiciar el
conocimiento reflexivo y sistemático de la lengua o para activar el uso de
ciertas estructuras. Formas de abordajes posibles dentro de esta
perspectiva serían: trabajar con enunciados reales (de los alumnos o de
circulación social), fomentar la conciencia lingüística mediante ejercicios
de manipulación de los enunciados (reformular, parafrasear, transformar
estructuras), propiciar las actividades de observación y análisis en pro de
una manipulación "consciente" de la lengua en el plano discursivo,
introducir progresivamente el metalenguaje en las intervenciones
docentes a fin de contribuir a la sistematización metalingüística necesaria
para la producción e interpretación de enunciados complejos.
4 Conclusiones
Es imprescindible que la práctica educativa se posicione respecto de
qué fenómenos de la lengua requieren sólo de activación en el uso y
cuáles necesitan que se propicie la reflexión metalingüística sistemática.
Creemos que en el plano oracional es importante la activación de ciertas
estructuras de adquisición tardía que con el uso pueden desarrollarse
productivamente sin dificultad, como sucede con las oraciones relativas
con preposición en el complementante. Por otra parte, la reflexión
metalingüística resulta indispensable en los casos en que la sintaxis tiene
alcances en el plano discursivo excediendo los límites de la oración, como
se ha intentado demostrar con el caso de las relativas yuxtapuestas en
las producciones escritas.
En cualquiera de estos casos, el acceso a los fenómenos lingüísticos
debe realizarse desde el abordaje de los textos en toda su complejidad. La
idea es en definitiva que los alumnos lleguen a realizar tareas de
observación, análisis, investigación y construcción de un saber
proposicional que se sustente en el mejoramiento de las formas en uso de
la lengua. El punto quizá más difícil es que todo esto es posible a partir
del interés del sujeto en mejorar sus condiciones de uso lingüístico, y si
este interés realmente existe entre nuestros adolescentes es una cuestión
que excede los límites de este trabajo.
42
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La actividad metalingüística en el aprendizaje de la lengua
5 Apéndice: Corpus ejemplificativo
Grupo A: ejemplos de relativas en las que el complementante es “que”
como sustituto de “P(reposición) + qu-” o de “cuyo” en la lengua oral de
adultos y adolescentes.
1) Vive con una chica que le dicen “gachi” o algo así. (Adulto)
2) Ese es el lugar que compré los ravioles el otro día. (Adulto)
3) Es una película que trabaja la que actúa en “La momia”. (Adolescente)
4) Es un cuento que el autor es también periodista. (Adolescente)
5) El Plan de Emergencia que con él piensan resolver la situación… (Tomado de
Lope Blanch, 1984)
6) Se trata de una idea que ayer daba vueltas sobre ella (Tomado de Lope Blanch,
1984)
Grupo B: ejemplos de relativas en las que los complementantes son
“que/el cual/donde” como sustitutos de “P + qu-” o de “cuyo” en la
lengua escrita de estudiantes secundarios (ES) y universitarios (EU)
1) Este recital se debió a la semana joven, que también fueron invitados grupos
musicales. (ES)
2) Se halló el cuerpo de una persona que se desconoce su identidad. (ES)
3) Se trata de un asesinato que interviene la policía. (ES)
4) Es una novela policial que su personaje central trata de descifrar una leyenda.
(ES)
5) Se trataría de los acompañantes del Renault, que su conductor, despedido por
el parabrisas, murió antes de ser encontrado. (ES)
6) Se plantea un enigma a partir de un delito que está como protagonista el
criminal. (ES)
7) Se realiza un investigación que está como protagonista el detective. (ES)
8) Había un gran número de personas corruptas, las cuales el detective debía
descubrir. (ES)
9) Ayer fue un día tormentoso donde ningún integrante del pueblo pudo salir. (ES)
10) Juno presentó a sus padres la situación que se encontraba. (ES)
11) En Chomsky encontramos cuatro grandes etapas, que sólo dos son modelos
teóricos y sirven para caracterizar la gramática mental de los hablantes y la
gramática universal. (EU)
12) (…) Chomsky plantea una diferencia entre competencia y actuación, donde la
primera tiene que ver con el saber, y la segunda está relacionada con el uso de ese
conocimiento. (EU)
Enseñanza de la Gramática
43
Rosana A. Pascual
Grupo C: ejemplos de relativas en yuxtaposición paratáctica en la
escritura de estudiantes secundarios (ES) y universitarios (EU)
1) Todo comenzó con su primera experiencia sexual en donde como producto de
esta da vida a un nuevo ser, el cual decide darlo en adopción. (ES)
2) Este “doble” del verdadero actúa de tal manera que no se preocupa en reprimir
nada y que la sociedad lo ve como un ser con pura maldad el cual todos
desprecian. (ES)
3) Es una novela fantástica por la naturaleza de los hechos narrados que es la
formación de Hyde, que no tiene explicación y no se puede probar. (ES)
4) El tema central que hace referencia Stevenson a lo que se puede esconder en
toda sociedad hipócrita. Los cuales todos son falsos que casi nunca piensan en lo
que dicen y hacen, si no es conveniente para ellos, es ahí donde hace referencia a
las represiones que es representado en la novela como Hyde. (ES)
5) Esto depende también de la noción de gramaticalidad, donde el lingüista debe
decidir si las expresiones cumplen con la regla lingüística; la aceptabilidad, que se
desarrolla con el momento en el que se le da uso a la lengua, donde el hablanteoyente debe decidir si lo expresado es gramatical y natural. (EU)
6) Lo que se une no es una cosa con un nombre sino un concepto con la imagen
acústica, que es la representación sensorial del objeto, que tenemos en la mente,
que si la llamamos materia es sólo por oposición al concepto, que es de carácter
abstracto. (EU)
7) Chomsky explica mediante la teoría de PyP, que rompe con el sistema de
conjunto de reglas de la gramática tradicional y que todo se reduce a una sola
operación “mueva-a” y que las propiedades del léxico se proyectan en la sintaxis, y
mediante las operaciones “satisfacer”, que tiene la propiedad de la formación de
frases y la operación “mueva-a” la propiedad del desplazamiento, junto con los
niveles de FF y FL se producen las estructuras lingüísicas. (EU)
8) Chomsky también formó parte de la Biolingüística. La cual es una ciencia que le
interesa estudiar algo muy real como el cerebro, sus características, funciones, etc.
(EU)
9) El principio de arbitrariedad que es el vínculo que hay entre el significado y el
significante, por el cual no hay ningún lazo natural que los una con la realidad por
el cual es inmotivado. (EU)
44
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Capítulo 3
Enseñanza de la gramática: ¿Para qué?
Reflexiones acerca del conocimiento gramatical en relación a
los objetivos de la escuela media
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 45-54.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
En esta ponencia nos proponemos abordar el lugar que ocupa la enseñanza de la
gramática en los programas curriculares y en las prácticas docentes actuales del
nivel medio. Los distintos enfoques didácticos surgidos a partir de teorías
lingüísticas como la textual y la discursiva han llevado, en las últimas décadas, a
un desplazamiento del lugar central que ocupó la gramática en la enseñanza de
dicho nivel. En este lugar desplazado, la gramática aún permanece como contenido
presente en la educación aunque su estudio se encuentra reducido a un conjunto
de prácticas automáticas, desprovistas de significado. De este modo, su enseñanza
se perpetúa incluso cuando los actores involucrados descreen de su utilidad. Lo
que nos proponemos en este trabajo es repensar el papel de la gramática en el
ámbito escolar (el que tiene de hecho y el que consideramos que debería tener)
teniendo en cuenta los objetivos principales del nivel medio: la enseñanza del
código lecto-escrito y la ampliación de los registros de los alumnos. En este
sentido, entendemos la inclusión de la gramática en los contenidos curriculares
como una consecuencia de la necesidad de aprendizaje de la lengua estándar, en
tanto código cuya enseñanza depende en gran medida de la educación formal.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
1 Introducción
La enseñanza de la gramática dentro de la escuela media ha sido objeto
de debate en distintos momentos. Actualmente la gramática ocupa un
lugar marginal. Bajo lineamientos curriculares lo suficientemente
amplios, coexisten en el aula puestas en prácticas diversas que parten de
diferentes posturas (con distintos grados de conciencia y reflexión)
sostenidas por profesores y por libros de texto. Dado que el currículo
escolar es una construcción socio-histórica, no es posible reflexionar
sobre la enseñanza de lengua sin reponer el marco de referencia histórico
que supone la práctica. Comenzaremos nuestro trabajo presentando un
breve recorrido histórico que muestra el modo en el cual el conocimiento
metalingüístico fue perdiendo su lugar privilegiado en el aula, a partir de
la introducción de ideas surgidas de los nuevos estudios en lingüística.
Luego intentaremos ver cómo las reflexiones introducidas por la
sociolingüística, que se centran en la discusión acerca de la noción de
lengua, evidencian el modo en el cual la escuela media ha invisibilizado
las múltiples prácticas lingüísticas de los estudiantes a través del estudio
de la lengua estándar como la única variedad valorada en el aula. Estos
nuevos aportes, que ayudan a deslegitimar aún más la enseñanza de
gramática, entran en conflicto con uno de los principales objetivos de la
escuela media: la enseñanza de la lengua estándar. Reflexionaremos
sobre la valoración de esta variedad en las prácticas sociales y sobre la
consecuente importancia de su aprendizaje por parte del estudiante.
Propondremos, por último, la necesidad de pensar nuevos modos de
enseñanza de lengua en los cuales el conocimiento metalingüístico
permita una reflexión crítica no sólo de la variedad estándar sino también
de las múltiples variedades del aula.
2 Breve recorrido histórico
El primer cambio importante de la gramática en el ámbito educativo se
produjo hacia mediados del siglo XX, particularmente a partir de la
década del 60, cuando se convirtió en dominante la teoría estructuralista,
con una postura crítica hacia la gramática tradicional que hasta ese
momento se enseñaba en la escuela. Los argumentos de los defensores
del estructuralismo partían del espíritu cientificista de la época, por lo
que sostenían la necesidad de una actualización teórica de la escuela
para aproximarse, con la mayor fidelidad posible, a los conocimientos
académicos.
Se basaban en la convicción de que la reflexión gramatical por sí misma
tendría como consecuencia natural el desarrollo de las habilidades de
recepción y producción de mensajes de los estudiantes. Como
consecuencia de este espíritu cientificista, la teoría pasó al ámbito escolar
46
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática: ¿Para qué?
con un grado mínimo de transposición didáctica. Por este motivo, la
gramática que se dictaba en la escuela era la misma que se analizaba en
los niveles superiores, pese a que la gramática como objeto de estudio en
la escuela media es necesariamente diferente a la gramática como objeto
de estudio de la investigación académica, ya que en cada ámbito
participan distintos actores que tienen también distintos objetivos. La
complejidad del objeto que se pretendía enseñar provocó que, en la
mayoría de los casos, los estudiantes lo incorporaran de manera
irreflexiva, sin que mediara una verdadera comprensión.
Asimismo, en la puesta en práctica del modelo en la escuela se privilegió
el nivel sintáctico sobre los otros niveles igualmente comprendidos en la
gramática estructural (es decir, fonológico, morfológico y semántico), a la
vez que se reducía la sintaxis a la práctica del análisis sintáctico. Tal
como señalan Otañi, Laiza y María del Pilar Gaspar (2001), al modo de
cajas chinas, la enseñanza de la lengua se redujo a la enseñanza de la
gramática, la enseñanza de la gramática a la de la sintaxis y la sintaxis al
análisis sintáctico. Tal vez el aspecto más negativo de cómo se llevó a
cabo la propuesta didáctica fue la forma mecánica y automatizada en que
fue abordada la práctica del análisis sintáctico.
Estos errores fueron consecuencia de la tensión que atravesó la escuela
al adoptar la versión cientificista del modelo estructural sin adecuarla a
los actores sociales involucrados en la práctica escolar, generando así un
aprendizaje irreflexivo y memorístico cuyo principal objetivo era el
reconocimiento y rotulación de las categorías o funciones sintácticas y no
la reflexión sobre la propia lengua. Este error provocó, en lo sucesivo, un
rechazo del ámbito educativo a la gramática como un todo.
En la década de 1980, a partir de la importancia que adquirieron dentro
de la disciplina lingüística en Argentina estudios centrados en el aspecto
comunicativo del lenguaje, comenzó a tomar fuerza una nueva forma de
pensar la enseñanza que dio lugar al predominio del denominado
“enfoque comunicativo”. Este cambio apareció acompañado por un
enérgico rechazo hacia las prácticas didácticas previas a causa de los
escasos resultados que se percibían en relación al objetivo de mejorar las
habilidades comunicativas. Ese fracaso que podría haberse atribuido a la
teoría estructuralista en particular o bien a la metodología empleada en
su enseñanza fue en cambio atribuido a la gramática como conjunto.
Bajo el supuesto de que la enseñanza de contenidos gramaticales o bien
colaboraba débilmente en función de ese objetivo o bien no colaboraba en
lo absoluto, la gramática fue relegada a un segundo plano, cuando no
directamente eliminada de la clase de lengua.
El auge del enfoque comunicativo puede marcarse en el momento de su
institucionalización a partir de la reforma educativa de 1994, con los
Contenidos Básicos Comunes que fijaron desde los lineamientos
Enseñanza de la Gramática
47
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
curriculares el cambio hacia lo comunicativo que ya se estaba
produciendo de hecho. Los CBC se proponían como una respuesta a las
demandas sociales que entendían el desarrollo de la competencia
comunicativa (especialmente la comprensión y producción de textos
escritos) como una deuda dentro de los objetivos de la materia lengua.
Actualmente, la orientación comunicacional no ha modificado, en los
hechos, aspectos esenciales de las prácticas didácticas que criticaba,
reproduciendo la lógica del trabajo centrado en el reconocimiento
automático sin ningún tipo de reflexión sobre las propias prácticas
lingüísticas y sin una articulación efectiva con actividades de lectura y
escritura. Se cambió el contenido y la perspectiva, pero este nuevo
enfoque continúa estudiándose de un modo mecánico. Respecto al lugar
que le corresponde a la gramática, los CBC señalan que, sin negar el
valor que tiene para la sistematización, esta rama de la lingüística debe
ser abordada desde otra perspectiva, ya que no se considera su estudio
como un fin en sí mismo sino que se lo subordina al objetivo del
desarrollo de la competencia comunicativa.
Más allá del acuerdo que se pueda tener con esa forma de plantear el
lugar de la gramática dentro de la clase de lengua, al no especificarse el
modo de abordar el estudio gramatical en función de ese objetivo, lo que
de hecho sucede es que, en los casos en los cuales la gramática sigue
ocupando un lugar en el aula, se la continúa enseñando de la misma
manera, sin adecuarla al enfoque comunicativo. Dado que con el
predominio de este enfoque existen nuevos contenidos en los cuales
poner la atención, la problematización sobre cómo enseñar gramática
queda completamente descartada del ámbito educativo.
3 La lengua estándar desde el enfoque sociolingüístico
Como ya hemos visto, los CBC de lengua dejan poco definido el lugar que
debe ocupar la gramática en la enseñanza en la escuela media, dado que
la subordinan al objetivo de desarrollar la competencia comunicativa.
Ahora bien, en los contenidos de los CBC de lengua podemos observar
que dentro de ese objetivo general se incluyen dos propósitos bastante
relacionados entre sí: la ampliación de registros y el aprendizaje9 de la
lengua estándar. Intentaremos demostrar que estos dos aspectos se
encuentran relacionados con la enseñanza de gramática, pero antes
abordaremos ciertas nociones sobre las cuales se comenzó a reflexionar
en el ámbito educativo a fines del siglo pasado.
Hablamos de aprendizaje de la lengua estándar, y no de adquisición, puesto que nuestra
propuesta tiene que ver con el hecho de entender la lengua estándar como una variedad
distinta de la variedad propia de cada alumno, motivo por el cual debe ser enseñada.
9
48
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática: ¿Para qué?
Las nuevas perspectivas educativas que enfatizan el aspecto
comunicativo del lenguaje se encuentran relacionadas con otros estudios
de la teoría científica lingüística. Los estudios sociolingüísticos han sido
de fundamental importancia en el debate de la enseñanza de lengua
puesto que han permitido cuestionar ciertos conceptos, posibilitando
nuevos modos de pensar la idea de lengua en el aula.
El concepto de lengua fue problematizado y comenzaron a surgir otras
investigaciones que intentaban abordar ya no la lengua como un sistema
del que dispone cualquier hablante-oyente, sino las múltiples
realizaciones efectivas (es decir, las múltiples variedades) que los
hablantes usaban según ciertas variables extralingüísticas, tales como la
edad, el estrato social, el lugar de origen, el ámbito de situación
comunicativa. De este modo, la lengua, esa abstracción que Saussure
delimitó con el fin de estudiar lo sistemático de este objeto, empieza a
perder importancia en estas nuevas perspectivas que intentan estudiar lo
heterogéneo del lenguaje a partir de las variables extralingüísticas que
entran en juego en las realizaciones efectivas de un hablante
determinado.
En el ámbito educativo, las ideas de la sociolingüística han permitido
reflexionar sobre ciertos problemas recurrentes en el aula, en la medida
en que el concepto de variedad permite distinguir la variedad que un
estudiante habla en su contexto más próximo de aquella que los
profesores hablan en el colegio (y que le exigen al alumno): la lengua
estándar. Estas nuevas perspectivas han comenzado a enfatizar en la
distancia entre estas variedades y en las dificultades que dicha distancia
acarrea. De este modo, también el concepto de lengua estándar es
problematizado, puesto que se hace hincapié en su condición de
arbitraria: se entiende que el estándar es una variedad entre otras, que
por motivos políticos e históricos (esto es: extralingüísticos) se ha
constituido como la variedad socialmente aceptada.
Gallardo, Andrés (1978), en su estudio sobre la lengua estándar,
mediante la idea que de ésta tiene la Escuela de Praga, asemeja el
concepto de estándar al de norma coseriana; esto es: todo lo que en el
habla correspondiente a una lengua es tradicional y constante o, dicho de
otra manera, el modo socialmente establecido y culturalmente válido de
realizar las posibilidades del sistema. Sin embargo, la correspondencia
entre norma y estándar no es de uno a uno. Mientras que en una
sociedad puede haber múltiples normas actuando simultáneamente10
(múltiples modos socialmente válidos de realizar una construcción
determinada), la lengua estándar se constituye como la única forma
Tal como lo señala Coseriu, Eugenio (1999), si intentamos comprobar la norma en todo un
idioma encontraremos, en realidad, varias normas parciales (ya sea, sociales, regionales) dado
que la norma es siempre menos general que el sistema.
10
Enseñanza de la Gramática
49
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
legitimada en términos políticos, que es asegurada a partir de ciertas
instituciones que intentan fijarla y normalizarla.11 Es decir, la lengua
estándar, que es el resultado de un proceso político e histórico (la
conformación de los estados nación), se constituye como la versión oficial
de la lengua y, por este motivo, su conservación debe ser asegurada
mediante ciertas prácticas sociales: la codificación a través de
diccionarios y gramáticas y su difusión a través de diferentes
instituciones que conforman el Estado, como las escuelas y
comunicación.
Una de las intervenciones fundamentales para la constitución de la
lengua estándar es la codificación explícita. En términos de Gallardo, una
lengua estándar es siempre un idioma escrito, en la medida en que es en
la forma escrita donde descansa la identidad cultural del idioma. En este
mismo sentido, Blanche Benveniste plantea que lo fundamental de la
escritura en la constitución de la lengua estándar es que ésta “elimina las
soluciones heterogéneas y la diversidad inherentes a las formas
habladas” (Blanche Benveniste, Claire; 2002:28),12 en tanto establece el
conjunto de normas que rigen los usos de la lengua.
Tal como podemos ver, la relación que se establece entre escritura y
estándar es tan estrecha que en muchas oportunidades resulta difícil
diferenciarlas. Cuando un estudiante aprende a escribir o desarrolla sus
habilidades de escritura se enfrenta, en muchos casos, a un doble
desafío. Además de aprender y perfeccionar una técnica, el alumno debe
aprender una variedad nueva: la estándar. Sin embargo, mientras que la
escuela tiene presente el artificio que significa aprender esta técnica y,
por eso, se ocupa de generar estrategias para su enseñanza, los estudios
sociolingüísticos han enfatizado en que la escuela no comprende el
desafío que representa para el estudiante el aprender una nueva
variedad, que incluso muchas veces se encuentra muy distanciada de la
variedad próxima al entorno de éste. Es decir, estos estudios llevaron a
discutir el modo en que la escuela ha homogeneizado durante décadas
todas las variedades que circulaban en el aula y el modo en que los
conocimientos metalingüísticos sólo han tenido únicamente como
referente la lengua estándar, que se propone como la lengua.
Es necesario aclarar que, tal como lo plantea Gallardo, la lengua estándar posee la
propiedad tener una estabilidad flexible; es decir, tiene la capacidad de adaptarse a las
diversas necesidades comunicativas de la sociedad.
12
Al hablar de una lengua estándar también estamos haciendo una abstracción en la
medida en que no existe un solo estándar. Existe, por el contrario, un conjunto de normas y
de instituciones que intentan constituir y conservar una variedad (lo que Bourdieu, Pierre
(2001) llama lengua “semiartificial”) y la realzan por encima del resto. En sentido gradual, los
hablantes se acercan o se distancian cada vez más de esa abstracción que es la lengua
estándar.
11
50
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática: ¿Para qué?
Si bien los estudios sociolingüísticos permitieron problematizar aspectos
poco trabajados hasta ese momento por la didáctica de la lengua,
contribuyeron también a desestimar la enseñanza de la gramática, dado
que enseñar gramática en la escuela implicaba enseñar la gramática de la
lengua estándar y considerar cualquier desviación de ella como un error.
Nuevamente, en lugar de cuestionar el modo en que se ha enseñado
gramática o bien en lugar de intentar pensar nuevas prácticas que
permitan la reflexión del alumno no sólo sobre la lengua estándar sino
también sobre sus propias prácticas lingüísticas, se ha cuestionado a la
gramática como un todo.
4 El aprendizaje de la lengua estándar
A partir de todos los estudios que hemos revisado aquí, podríamos
cuestionarnos acerca de la necesidad de enseñar la lengua estándar y
junto con ella, la gramática que intenta reflexionar sobre su estructura y
sus potenciales usos. Es decir, podríamos preguntarnos en qué sentido el
aprendizaje de la lengua estándar es significativo para el estudiante. En
lo que queda del trabajo intentaremos demostrar la importancia que tiene
tanto la lengua estándar como la enseñanza de la gramática en los
objetivos de la escuela media e intentaremos también reflexionar sobre la
necesidad de pensar nuevos modos de enseñanza mediante los cuales ese
aprendizaje resulte significativo.
En principio, podemos pensar que el alumno, como cualquier hablante de
una comunidad lingüística (occidental), se encontrará en situaciones
comunicativas que requieran el empleo de registros formales.
Entendemos aquí que un hablante de una comunidad lingüística maneja
distintos registros a la hora de comenzar la escuela secundaria; es decir,
que sabe adecuar su variedad a temas, interlocutores y situaciones
comunicativas diversas. Sin embargo, existen ciertas situaciones
comunicativas que requieren el empleo de registros formales; o dicho de
otro modo, que requieren que la variedad que utilice el estudiante se
encuentre más cercana a la lengua estándar, por ser ésta la variedad
socialmente legitimada. Para poder participar eficazmente en estas
situaciones comunicativas,13 el estudiante necesita un conocimiento
específico de la lengua estándar: al ser ésta una variedad distinta a la que
el estudiante usa, las particularidades propias de esta variedad deben ser
enseñadas de modo que el alumno pueda apropiárselas.
Por otra parte, la decisión de no enseñar el estándar para que todas las
prácticas lingüísticas del aula sean igualmente valoradas no implica que
la lengua estándar pierda su valor político y social. En su trabajo ¿Qué
significa hablar?, Bourdieu, Pierre (2001) plantea que los mecanismos de
13
Vale aclarar que estamos pensando, especialmente, en registros formales escritos.
Enseñanza de la Gramática
51
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
funcionamiento del mercado lingüístico suponen situaciones de
desigualdad social y procesos de dominación de unos discursos sobre
otros. Es justamente a partir de la institución de un estándar que el
Estado crea las condiciones necesarias para la constitución de un
mercado lingüístico unificado. El Estado trasmite esa lengua a través de
sus instituciones de modo que se convierte en la norma respecto a la cual
se miden todas las prácticas lingüísticas. Por más que desde la escuela se
reconozca la desigualdad que implica el funcionamiento del mercado
lingüístico, ese reconocimiento no suspende las normas que lo rigen. En
este sentido, la escuela, al desestimar la enseñanza de la lengua
estándar, está afectando las oportunidades de los estudiantes.
Actualmente, nos encontramos en una crisis en el ámbito escolar. Por un
lado, la escuela debe enseñar el estándar no sólo porque es una de las
instancias encargadas de su conservación y legitimación, sino también
porque su aprendizaje es una condición necesaria para un mejor
posicionamiento de las prácticas lingüísticas del estudiante en el
mercado lingüístico. Por otro, es esta misma institución el lugar en el
cual actualmente circulan las ideas sociolingüísticas que hacen hincapié
en el estudio heterogéneo del lenguaje y que ven una dificultad en el
estudio gramatical del estándar, dado que éste implica la
homogeneización de las prácticas lingüísticas reales. Dicho de otro modo,
tal como lo plantea Bixio, Beatriz (2003), la crisis radica en la tensión que
se establece entre las nuevas perspectivas sociolingüísticas y el objetivo
de homogeneización de la escuela media.
Las consecuencias de esta tensión son múltiples. Por un lado, los aportes
de la sociolingüística en el ámbito escolar resultan banalizados y
reducidos a enunciados generales meramente retóricos, sin que generen
un verdadero cambio en la relación entre la concepción del lenguaje y la
función de la educación. Por otro, si bien la enseñanza de los
conocimientos metalingüísticos queda desestimada en el aula (y tiende a
desaparecer, en algunos casos), las normas del mercado lingüístico no se
suspenden ni en el mercado laboral, ni en la misma institución escolar; lo
que significa que el estudiante que no haya aprendido el estándar puede
encontrarse con dificultades aún dentro de la institución educativa
misma.14
Dado que la escuela supone una situación comunicativa compleja en la cual se pretende
que el alumno utilice la variedad estándar (y esto es cierto para todas las materias escolares
que exijan la lectura y la producción de textos escritos), en los casos en los que no se hace
hincapié en el aprendizaje de esta variedad existen altas probabilidades de que se produzca el
fracaso escolar, sobre todo en los alumnos cuya variedad “materna” se encuentra más alejada
del estándar.
14
52
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática: ¿Para qué?
5 La importancia de la gramática en la escuela media
A partir de lo que hemos visto en los apartados anteriores, resulta claro el
porqué de la necesidad de enseñar la lengua estándar. Lo que conviene
cuestionarse ahora es el modo en que esto puede ser llevado a cabo. Es
decir, la pregunta que sobreviene es cómo se asegura la escuela de que
los alumnos aprendan la variedad estándar. Dado que ésta, en muchas
oportunidades, no es la variedad que el estudiante ha adquirido en su
niñez, la escuela debería brindar los medios por los cuales los
estudiantes puedan apropiarse de ella. Ahora bien, podríamos
cuestionarnos si ésta debe ser enseñada de una manera explícita o si
simplemente, tal como lo plantea el enfoque comunicacional, el
aprendizaje de la lengua debe llevarse a cabo a partir de la producción de
textos y la reflexión y revisión crítica de esas producciones. Es decir,
podríamos preguntarnos cómo debe ser enseñada: si mediante un
conocimiento metalingüístico explícito o mediante ejercicios de
producción textual.
Nuestra propuesta no excluye ninguna de las dos opciones.
Consideramos que la producción de textos por parte de los alumnos y la
posterior reflexión sobre estas prácticas lingüísticas son indispensables
para el desarrollo de las habilidades comunicativas. Sin embargo,
difícilmente la apropiación del estándar por parte de los alumnos pueda
darse solamente a partir de la producción y reflexión sobre textos
escritos. En principio, porque para reflexionar sobre las producciones es
necesario un conocimiento metalingüístico que permita objetivar las
propiedades formales del estándar. Por otra parte, porque al ser el
estándar una variedad distinta a la que el estudiante usa, es necesario
que la escuela se proponga como un objetivo (entre otros) ciertas
reflexiones metalingüísticas que le permitan al alumno reconocer la
distancia entre su variedad y el estándar. Es a partir de este
reconocimiento que, creemos, el alumno puede llegar a conocer esta
variedad para utilizarla en la medida en que sea necesario.
En este sentido, el aprendizaje de gramática es fundamental no sólo para
entender los mecanismos que regulan la lengua estándar sino también
para reflexionar sobre las propias prácticas lingüísticas de los
estudiantes. Actualmente, muchos trabajos en didáctica de la lengua
comienzan a plantear la necesidad de que sea la intuición (o bien, las
intuiciones) de los propios estudiantes lo que los guíe en la reflexión
sobre la(s) lengua(s). Estos planteos enfatizan la necesidad de que el aula
se convierta en un ámbito en el cual los estudiantes puedan reflexionar y
debatir sobre las múltiples realizaciones socialmente aceptadas que el
sistema habilita; es decir, sobre las normas parciales (en términos
coserianos). Tal como lo plantean Otañi y Gaspar: “reflexionar sobre las
relaciones entre las posibilidades que el sistema acepta y los usos o
Enseñanza de la Gramática
53
Florentina Guaita y Romina Trebisacce
desviaciones intencionales que los hablantes hacen en situaciones
específicas” (Otañi, Laiza y María del Pilar Gaspar; 2004:91).
Este nuevo modo de pensar la gramática supone que el estándar pueda
ser estudiado desde una perspectiva que permita evidenciar su carácter
arbitrario (o mejor dicho, político); es decir, reflexionar sobre las múltiples
normas existentes supone entender el estándar como una variedad más
entre otras. Por otra parte, la contextualización de las distintas prácticas
lingüísticas vistas en clase puede llevar al alumno a preguntarse de qué
modo estas variedades están funcionando simultáneamente en una
misma sociedad, así como también en qué medida y por qué éstas son
valoradas de distinto modo.
Entendemos, entonces, que la gramática en la escuela media es
fundamental no sólo porque consideramos que el aprendizaje de la
lengua estándar, uno de los principales objetivos de la escuela, depende
en un alto grado de los conocimientos metalingüísticos que el estudiante
tenga de esta variedad y de la suya propia; sino también porque creemos
que estos conocimientos metalingüísticos son fundamentales para la
reflexión sobre las propias prácticas lingüísticas del alumno y sobre la
relación que éstas establecen con la variedad estándar.
6 Conclusiones
En este trabajo hemos intentado abordar la problemática que implica la
enseñanza de gramática en la escuela media; problemática que es
producto de la tensión que se genera entre la necesidad de la escuela de
enseñar la lengua estándar y las reflexiones del enfoque sociolingüístico
sobre la(s) lengua(s). Hemos indagado en la importancia de este objetivo
escolar en tanto condición necesaria (aunque no suficiente) para que las
prácticas lingüísticas del estudiante sean valoradas en el mercado
lingüístico. El conocimiento metalingüístico de la variedad estándar y de
las variedades de los propios alumnos resulta fundamental no sólo para
lograr este objetivo, sino también (y sobre todo) para que esos
conocimientos permitan una reflexión crítica sobre la(s) lengua(s) y sobre
sus modos de circulación en las prácticas sociales.
54
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Capítulo 4
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de
morfosintaxis que los docentes realizan en las actividades
de escritura de los alumnos
Stella Maris Tapia
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 55-65.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
La enseñanza de la lengua materna en Argentina, en las últimas décadas, se
caracteriza por una creciente incorporación en las aulas de escuela secundaria de
categorías propias de la lingüística con fines descriptivos, y un desplazamiento
paulatino de la gramática, que no ha logrado articularse con las actividades de
escritura en su dimensión de saber epistémico, cuyo conocimiento es necesario
para la producción de textos. Las consecuencias de la falta de enseñanza de la
gramática pueden observarse en los errores más frecuentes en las tareas de los
alumnos, a nivel sintáctico. En este trabajo se enfoca cómo y para qué se corrigen
los errores de sintaxis en las actividades de escritura. Ubicado en la línea teórica y
metodológica del interaccionismo socio-discursivo, el análisis de las correcciones
realizadas por diferentes docentes en trabajos correspondientes a la materia
Lengua en cursos preuniversitarios y del ciclo superior de nivel medio, muestra
gran disparidad, tanto en el modo en que se da cuenta de los errores sintácticos,
como en su importancia para la ponderación y la valoración final de las
producciones. Este análisis indicaría el grado de relevancia otorgado por los
docentes a la gramática en las actividades de escritura.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Stella Maris Tapia
1 Introducción
La enseñanza de la Lengua en Argentina, especialmente en el nivel
secundario, se caracteriza por una dispersión en los objetos de
enseñanza, entre los que se encuentra, en una posición relegada, la
morfosintaxis del español.
Si hasta 1970 se enseñaba centralmente la gramática como disciplina
autónoma y objetivada, a partir de 1980 y, especialmente, en los noventa,
la aplicación de categorías de la lingüística textual en las aulas
justificada mediante los enfoques comunicativos (Riestra, Dora M. 2004,
2008, 2010 a y b) parece no haber tenido los efectos esperados en el
desarrollo de las capacidades textuales de los alumnos.
En un primer momento, las propuestas textualistas que ubicaban la
acción del lenguaje en un lugar protagónico fueron acogidas
favorablemente, porque numerosas demandas sociales se basaban en que
los alumnos no aprendían a escribir a partir de la enseñanza de
contenidos gramaticales únicamente, sino que era necesario privilegiar la
producción textual; pero la evaluación de estos cambios en el objeto de
enseñanza indica que tales demandas no se satisficieron, por cuanto
persisten las dificultades de los alumnos en las actividades de escritura.
En investigaciones anteriores, Riestra (op. Cit.) ha observado que esta
ruptura en la tradición de la enseñanza de la lengua trajo como
consecuencia la falta de articulación entre los contenidos textuales y los
contenidos gramaticales, entre el lenguaje como actividad o hacer
(Bronckart, Jean P. 2004) y la lengua como técnica histórica (Coseriu,
Eugenio 1991) conformada por un sistema de signos arbitrarios,
dinámicos, con los cuales es posible la creación, es decir, realizar el hacer
textual. Es por eso que Riestra, Dora M. (2005) postula la simultaneidad
de dos lógicas disjuntas: la lógica epistémica y la lógica praxeológica, que
no se han articulado en la enseñanza. Por otra parte, a partir del análisis
de consignas de clases, sostiene que en las prácticas de enseñanza, la
identificación y la descripción de categorías lingüísticas provenientes de
diferentes modelos (como macroestructura, actos de habla, funciones del
lenguaje) reemplaza la enseñanza de categorías gramaticales, pero no
deja, paradójicamente, de proponerse a partir de categorizaciones y
modelos que no operan como herramientas para que los alumnos
desarrollen sus capacidades discursivo- textuales.
Las consecuencias de esta ausencia de contenidos gramaticales
explícitos ha sido explorada en el proyecto de investigación UNRN 35: “La
universidad y la intervención en el sistema educativo: la enseñanza de la
lengua primera” (2009-2011) dirigido por D. Riestra; analizamos los
exámenes de ingreso de Lengua a la Universidad Nacional de Río Negro
según el modelo de la arquitectura textual (Bronckart, Jean P. 2004) y
56
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de morfosintaxis …
registramos las dificultades detectadas especialmente, en el nivel de los
mecanismos de textualización, esto es, en los mecanismos de conexión,
cohesión nominal y cohesión verbal. Los pronombres, las preposiciones,
los adverbios y las conjunciones fueron las categorías gramaticales
empleadas por los alumnos con mayor frecuencia de error. A partir de
ellos desarrollamos y evaluamos secuencias didácticas que se
instrumentaron en nivel medio.
Asimismo, en el proyecto de investigación UNRN 137, “De los efectos
formativos a la formación de formadores: la enseñanza de los
razonamientos argumentativos y la gramática de las lenguas” hemos
observado que la evaluación y la corrección de los trabajos de los
alumnos conlleva una dificultad para los docentes: cómo abordar los
contenidos gramaticales. Tal problema se manifiesta en las reescrituras,
ya que los docentes consideran que los alumnos no dominan las
herramientas gramaticales que les permitan revisar sus propias
producciones, incluso si estas presentan correcciones que señalen que se
han cometido errores morfosintácticos. Es, por lo tanto, una concepción
extendida entre los docentes, que los alumnos no podrán resolver los
problemas gramaticales que se les presenten en sus propios escritos, ya
que no han aprendido o no conocen sintaxis.
Como parte de los avances en mi proyecto de tesis doctoral “La
corrección de las tareas de Lengua: cómo se corrige y para qué se corrige”
presento a continuación análisis parciales de trabajos corregidos por
docentes de nivel medio de la ciudad de San Carlos de Bariloche,
considerando cuáles son las correcciones que corresponderían a aspectos
gramaticales que los docentes realizan en los textos de los alumnos.
He podido observar que la relación de concordancia, el uso de las
preposiciones y uso de los pronombres son los elementos de la
morfosintaxis que más a menudo se marcan como errores.
Frecuentemente varía el modo en que se marcan esos errores, y el criterio
con que se señalan o se ignoran, aun dentro de una única tarea
movilizada por una consigna.
2 Marco teórico: las consignas de enseñanza, los textos producidos y
sus correcciones
El interaccionismo sociodiscursivo explica las actividades de lenguaje,
cuyo producto son los textos, en función de los procesos de semiosis,
realizados en la interacción social, que permiten la organización, la
planificación y la evaluación de las actividades generales que
desarrollamos los seres humanos (Bronckart, Jean P. 2004). A través de
procesos de mediación formativa que buscan deliberadamente la
transmisión a las generaciones siguientes de las actividades de lenguaje
Enseñanza de la Gramática
57
Stella Maris Tapia
organizadas en géneros de textos y de los mundos formales de
conocimiento, los organismos humanos se apropian de propiedades
sociosemióticas y se transforman en personas. Por tanto, los procesos
formativos formales, particularmente, en las instituciones escolares,
permiten entender cómo son transmitidos los preconstructos históricos
de la vida social y cuáles son sus efectos en el desarrollo de las personas
(Bronckart, Jean P. 2007).
Para estudiar este proceso de transmisión es necesario enfocar la
interacción entre los docentes y los alumnos, por lo que observamos las
consignas de enseñanza y las correcciones de las tareas (los textos
producidos en situación de clase).
Riestra, Dora M. (2004, 2008) estudió la consigna como proceso
psicológico, instrumento construido por los enseñantes para ser realizado
por los alumnos. En tal sentido las consignas conforman “eslabones
dialógicos a través de los que interactuamos mentalmente con nuestros
alumnos en sus procesos de aprendizaje” y se pueden analizar “…tanto
[en] la acción verbal desplegada por quien enseña como [en] la acción
mental realizada por quien aprende, materializadas ambas en los
productos textuales”.
Enfocamos la corrección como tarea didáctica del enseñante, como un
instrumento que despliega una acción verbal para interactuar con los
alumnos en su proceso de aprendizaje. En este sentido, se consideran
correcciones los comentarios, las marcas verbales, las marcas gráficas o
la combinación de todos ellos que los docentes realizan en los trabajos de
sus alumnos y que tienen por finalidad realizar un control sobre la
actividad de lenguaje ya realizada. Esta unidad de análisis, pues, es un
texto dialógico conformado por la corrección del docente sobre el
producto de la actividad de lenguaje de los alumnos guiada por una
consigna. En tal sentido puede considerársela una actividad metaverbal
(Dolz, Joaquim y Erard Serge 2000) o “metalenguajera”, esto es, una
“forma particular de la actividad verbal caracterizada por un
distanciamiento y una objetivación del lenguaje a fin de adaptar el
proceso peculiar a las actividades verbales” (P. 165).
3 Metodología de recolección y de análisis del corpus
La metodología de las investigaciones referidas previamente es situada
e interpretativa, aunque no se prescinde de algunos datos cuantitativos.
El corpus de trabajos corregidos por distintos profesores de nivel medio y
de cursos preuniversitarios que analizamos se constituyó mediante el
pedido explícito a los diferentes docentes, con las indicaciones de que
fueran trabajos de escritura de los alumnos corregidos durante el año
2011, y de que la muestra reflejara la situación media del curso. Se
58
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de morfosintaxis …
recolectaron y fotocopiaron 100 trabajos de doce docentes que se
desempeñan en instituciones de nivel medio, públicas y privadas, de San
Carlos de Bariloche, y 100 de doce docentes que dictaron Introducción a
la Lectura y Escritura Académicas, de la Sede Andina, Universidad
Nacional de Río Negro, y Usos y formas de la Lengua Escrita, del Centro
Regional Universitario Bariloche, de la Universidad Nacional del
Comahue.
Los tipos de análisis que se realizan son el análisis textual de los
enunciados de las correcciones y el análisis a partir de la consigna. En el
primer tipo, siguiendo la arquitectura textual (Bronckart, Jean P. 2004)
se busca poner en evidencia: infraestructura general (secuencias, por
ejemplo instruccionales), mecanismos de textualización, mecanismos de
asunción de la responsabilidad enunciativa (modalizaciones y voces
empleadas) en los enunciados de las correcciones. El análisis a partir de
la consigna (Riestra, Dora M. 2004) busca articular la actividad, la tarea
realizada con esa consigna y las correcciones que dan cuenta tanto de la
evaluación de la tarea como de los contenidos de la enseñanza de la
lengua y de nuevas “instrucciones” en el uso de la lengua.
4 Análisis de correcciones de aspectos morfosintácticos en trabajos
escritos por alumnos de nivel medio
A partir de las consignas de los docentes y de los trabajos corregidos,
se han diferenciado las actividades de las tareas (Riestra, Dora M. 2004).
Mientras que las actividades comprenden la lectura, la escritura o la
combinación de ambas, las tareas propuestas a los alumnos son:
responder a cuestionarios, a veces con otra tarea inserta (dibujar un
croquis, escribir otro final para una película); redactar un texto inscripto
en un género dado (crónica, reseña), redactar un texto según un tipo de
texto dado (expositivo, argumentativo), escribir un registro de lectura.
El análisis del corpus en relación con cómo se corrigen los aspectos
morfosintácticos de las tareas, es decir, los textos escritos por los
alumnos como producto de la consigna, indica que, mayormente, la
sintaxis es un implícito. Entre las correcciones, podemos identificar
aquellos términos que explícita y técnicamente se refieren a un aspecto
del texto que presenta errores o deficiencias en su formulación. Se ubican
dentro de esta categoría tanto los términos que indican en qué nivel de la
textualización se han producido errores, como “gramática”, “sintaxis”,
“concordancia”; los que se refieren a las clases de palabras utilizadas
incorrectamente: “preposiciones”, “verbos”; o que dan indicaciones sobre
morfología o flexión verbal (por ejemplo: “singular/plural” para indicar un
error de concordancia). En estos casos, el término técnico funciona a
modo de indicación externa para los alumnos sobre las relaciones –las
combinaciones y las oposiciones- de los signos en el sistema de la lengua.
Enseñanza de la Gramática
59
Stella Maris Tapia
Sólo un 20,5% de las correcciones en el plano morfosintáctico da
cuenta del tipo de error cometido con algún término como los
mencionados anteriormente, mientras que la mayor parte de las
correcciones que los docentes realizan a los alumnos (79,5%) no explicita
cuáles son los errores cometidos con términos técnicos propios de la
gramática o que aluden a ella. Las formas de corrección no explícitas
abarcan tanto la reposición de la forma correcta por parte de los docentes
como el señalamiento o marca gráfica (cruz, subrayado, signo de
pregunta, círculo en el error, flecha, etc.).
Si concebimos la corrección como instrumento –en términos de
Vygotski, Liev (1979)- que opera sobre las funciones psíquicas superiores
por cuanto se interioriza permitiendo una transformación, o como
posibilidad de reconocimiento del error por parte de los alumnos para su
posterior autorregulación (Dolz, Joaquim y Erard Serge, op. Cit.),
podemos preguntarnos qué efecto buscado tiene un enunciado o una
marca que carece de los términos técnicos que dan cuenta de los saberes
a apropiarse, o en otras palabras, qué efecto formativo presupone una
corrección carente de explicitaciones teóricas sobre el desarrollo de las
capacidades discursivo-textuales de los alumnos.
En la tabla 1 se ha sistematizado la frecuencia de las correcciones en
el nivel morfosintáctico como porcentaje total de las correcciones hechas
por cada docente en los trabajos que integran la muestra. Podemos
observar que, en promedio, 9.44 % de las correcciones presentes en los
trabajos de los alumnos atienden a cuestiones morfosintácticas. Este
dato, en principio, puede contrastarse con las afirmaciones de Cassany,
quien sostiene que la corrección de la sintaxis ocupa el lugar privilegiado
en la enseñanza de la lengua: “Muchos escritores y profesores valoran la
corrección ortográfica y gramatical de los textos por encima de otros
factores como la coherencia, la adecuación o el desarrollo de las ideas.
Esto provoca que estas propiedades se desatiendan, corriendo el riesgo de
promover y difundir textos impecables de gramática pero pobres de
significado (con ideas subdesarrolladas, incoherencias, etc.)” (Cassany,
Daniel 1987/1997, 176). Ahora bien, vemos que incluso los dos docentes
que más correcciones de aspectos morfosintácticos realizan (alcanzando
22,22 y 15,74 % del total de las correcciones respectivamente efectuadas)
no corrigen la totalidad de los errores de los alumnos en este plano, lo
que consideramos contrapuesto a la afirmación de Cassany sobre la
sobrevaloración de la sintaxis en la enseñanza de la escritura. Incluso,
un tercio de los docentes destinan a este plano de los textos menos de 5%
de sus correcciones.
60
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de morfosintaxis …
Docente
Porcentaje del total de correcciones
1 NM
10,69 %
2 NM
2,56 %
3 NM
15,74 %
4 NM
10,86 %
5 NM
22,22 %
6 NM
7,44 %
7 NM
0,78 %
8 NM
10,94 %
9 NM
13,33 %
10 NM
13 %
11 NM
1,89 %
12 NM
3,93 %
Tabla 1: Correcciones correspondientes a aspectos morfosintácticos en relación
con la totalidad de correcciones efectuadas por los docentes en los trabajos de los
alumnos, por docente, en porcentaje.
No obstante, hay en los textos de los alumnos otros errores
gramaticales distintos de los corregidos, que no han sido considerados o
identificados en modo alguno. Notamos que no han sido señalados
errores correspondientes a la concordancia (sea en el número o en el
género) entre sustantivos y adjetivos en un sintagma nominal, entre
verbos y sujetos (en el número o en la persona), entre sujetos y
predicativos subjetivos, entre objetos y predicativos objetivos. También se
registraron omisiones de preposiciones o usos de una preposición o de un
pronombre en lugar de otros requeridos semánticamente, no corregidos.
Por ejemplo, hay en total dos correcciones en el nivel de la
morfosintaxis, efectuadas por el docente 7 en los trabajos de sus
alumnos. Una de ellas consiste en subrayar solamente el artículo
(femenino y plural) en una construcción nominal a la que luego se refiere
un pronombre masculino singular y que no guarda la relación de
concordancia con el verbo en singular:
“Las razones por el cual la literatura se divide en géneros es porque para el lector,
es más fácil identificar…”
La otra corrección consiste en la reposición de una preposición
omitida, que introduce el agente en una voz pasiva:
“Pero luego, este [el teatro griego] es modificado Tespis que inventó el solista…” [el
docente repone la preposición “por”].
Enseñanza de la Gramática
61
Stella Maris Tapia
En el mismo trabajo, en cambio, no se corrige el error de
concordancia:
“Aparecen lo peor de sus carácter [en la comedia]”
En otro texto, otro error de concordancia no señalado:
“Este tipo de teatro [el teatro del absurdo] se caracteriza por tener obras difícil de
comprender”.
Observamos que un mismo tipo de error a veces es corregido, y en
otras ocasiones no lo es, incluso dentro del mismo trabajo.
Esta situación se repite en el conjunto de los trabajos corregidos por
los distintos docentes; podríamos inferir: a) que los errores
morfosintácticos no han sido tenidos en cuenta para la evaluación y/o
calificación, y/o b) que no es intención de los docentes comunicar a los
alumnos estos errores presentes en los textos, porque no se refiere a ellos
estrictamente la consigna de trabajo, o porque no se considera que el
tema ya haya sido enseñado y sea, por lo tanto, evaluable. Estas son
hipótesis a considerar en una etapa siguiente de la investigación, a partir
de las representaciones de los docentes, que se indagarán mediante
entrevistas.
En cuanto al tipo de error y la forma predominante de corrección, nos
preguntamos si hay alguna relación entre lo que se corrige y el modo en
que se lo hace.
Las preposiciones en general se enmiendan: se suprimen (tachando) si
son innecesarias, se reponen (si son omitidas) o se reemplazan (si no
corresponden semánticamente). Los errores son subsanados mediante la
intervención directa del docente, que brinda la “solución” en el 80% de los
casos. En pocos casos se observa, en cambio, que se ha redondeado la
preposición incorrecta o se utiliza un signo de pregunta para dar cuenta
de que hay un error.
En las correcciones a errores de concordancia se utiliza mayor
variedad de enunciados y marcas para identificar el error. En la tabla 2,
se sistematizan diferentes formas en los que están corregidos los errores
de concordancia. Se distinguen tres formas: primero, la enmienda o la
reposición de número y género (o la supresión, tachando); segundo, la
marcación entre componentes que deberían concordar mediante un
código (flechas, subrayado, doble subrayado) acompañado o no por las
palabras “singular/plural”, “concordancia” o “mal redactado”; por último,
una pregunta, por ejemplo, a partir de la flexión verbal: “¿quién
[realizó]…?” o “¿Cuál es el sujeto de este verbo? ¿Es un sujeto singular o
plural?” para que se reconozca el sujeto.
62
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de morfosintaxis …
Docente
1 NM
2 NM
3 NM
Cómo se corrigen errores de concordancia
Tacha y coloca encima verbo en plural, repone
“s” (plural), “n” (flexión verbal en plural), agrega
“¿quiénes?” delante de un verbo en plural que no
está precedido por sujeto
Sin correcciones
Recuadra error. Al pie, indica: “Los fragmentos
recuadrados presentan problemas de concordancia
(singular-plural)”, agrega: “Revisá la persona del
verbo, ¿quién…? ¿Lo escribirías en singular o
plural?”,
“¿Quién…?:
Revisar
sujeto-verbo”,
“Persona verbal: ¿Cuál es el sujeto de este verbo?
¿Es un sujeto singular o plural”?
4 NM
Sin correcciones
5 NM
Repone “s” (plural), “n” (flexión verbal en plural)
6 NM
Traza flechas que unen los términos no
concordados, al final escribe: “Revisar errores de
concordancia”
7 NM
Subraya uno de los dos términos que no
concuerdan
8 NM
Remarca (subraya con una línea quebrada)
términos, al lado coloca “singular” y “plural”, agrega
“mal redactado”
9 NM
Señala con flechas, repone “s” (plural), “n”
(flexión verbal en plural), escribe: “concordancia”,
redondea y subraya, une con flechas dos términos y
coloca signo de pregunta
10 NM
Repone “s” (plural), “n” (flexión verbal en plural),
tacha e indica “masculino”
11 NM
Repone “s” (plural),” n” (flexión verbal en plural),
tacha uno de los dos términos que no concuerdan y
sustituye por el correcto
12 NM
Repone, subraya uno de los dos términos que no
concuerdan
Tabla 2: Cómo corrigen docentes de nivel medio errores de concordancia en los
trabajos de sus alumnos.
Las correcciones de los pronombres mayormente suponen enmiendas:
sustitución de uno por otro o su reposición, especialmente, entre los
pronombres relativos, cuando semánticamente corresponde el uso de otro
Enseñanza de la Gramática
63
Stella Maris Tapia
pronombre o cuando los referentes son ambiguos. Los docentes los
sustituyen por una forma correcta, sólo en algunas ocasiones los
subrayan o marcan con un círculo.
Habría, por tanto, una preponderancia de la corrección como
enmienda, sustitución o reposición de la forma conforme a la regla en el
caso de las preposiciones y los pronombres, mientras que se nota una
mayor variación en las formas de corregir la concordancia, lo que podría
dar cuenta de estrategias más variadas para intentar que los alumnos
reconozcan el tipo de error.
Los datos sobre las correcciones efectuadas por los docentes de nivel
medio en los textos producidos por sus alumnos serán cotejados con los
que se extraigan del análisis de correcciones en trabajos escritos por
alumnos de cursos preuniversitarios. Se pueden anticipar dos
observaciones: en primer lugar, los aspectos morfosintácticos ocupan en
promedio un porcentaje levemente superior en la totalidad de las
correcciones efectuadas por los docentes en los cursos preuniversitarios
(12% en vez de 9,5%); en segundo lugar, las correcciones privilegian el
uso de marcas gráficas y la referencia general al tipo de error cometido
(“sintaxis”) por sobre la sustitución por la forma correcta. Estos factores
podrían ser indicadores de diferencias entre las expectativas de los
docentes de nivel universitario acerca de lo que ya ha sido enseñado en el
nivel secundario y lo que efectivamente se ha hecho. Concretamente,
podríamos preguntarnos si los agentes de los diferentes niveles del
sistema educativo presumen la enseñanza de la morfosintaxis de la
lengua en los niveles anteriores, qué acciones de enseñanza desarrollan
en el caso de notar que no son saberes aprendidos por los alumnos, y
cómo se subsana la dificultad de corregir y evaluar lo que se supone
enseñado en una etapa previa de escolarización.
5 Conclusiones
Si concebimos las correcciones como textos dialógicos, en el sentido
en que cada palabra o cada enunciado es una síntesis dialéctica entre lo
social y lo individual, entre lo externo y lo interno (Voloshinov, Valentin
N. 1929), es porque entendemos que un texto corregido es un producto
de la acción de lenguaje del docente que continúa o se inscribe en la
acción de lenguaje del alumno. La corrección, simultáneamente, evalúa el
producto y opera como instrumento mediador de nuevos aprendizajes, si
está orientada a posibilitar el desarrollo de nuevas acciones de lenguaje
más ajustadas.
Observamos que las correcciones que los docentes realizan en las
tareas en el nivel secundario dan cuenta de la utilización de criterios
64
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
La sintaxis como objeto de enseñanza: las correcciones de morfosintaxis …
implícitos para referirse a aspectos de la morfosintaxis y decisiones no
explicitadas acerca de qué se corrige y qué no, y cómo se lo hace.
Si el efecto buscado por estas correcciones es que los alumnos
aprendan a partir de los errores morfosintácticos que han cometido en
sus textos, para no volver a incurrir en ellos, la enmienda o sustitución
por la forma lingüística correcta no parecería ser un instrumento que
potencie la autorregulación. Tampoco se conseguiría ese efecto mediante
la alternancia de criterios por los cuales se corrigen o no errores del
mismo tipo.
La aparente falta de efecto de las correcciones en el desarrollo de las
capacidades discursivo textuales de los alumnos sería una consecuencia
de no identificarlas como instrumentos externos, sociales, que los
alumnos deberían interiorizar durante el proceso de enseñanza de la
lengua. Esta falta de identificación del papel de la corrección como
instrumento para la enseñanza de la gramática puede ubicarse en el
marco de la poca articulación entre los contenidos textuales y los
contenidos morfosintácticos. Por lo tanto, una tarea pendiente para los
didactas consistiría en proponer la enseñanza de las actividades de
lectura y escritura en forma conjunta con la enseñanza de la gramática.
Enseñanza de la Gramática
65
Capítulo 5
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
Angélica Vaninetti
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 67-77.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
Este trabajo intenta brindar una propuesta didáctica que promueva la enseñanza
y, por lo tanto, el aprendizaje de la sintaxis del español desde un enfoque que
interrelacione el aspecto léxico-semántico con el sintáctico. En la práctica docente,
se comprueba que los estudiantes del nivel secundario y, también, los del nivel
terciario no abordan el estudio de la sintaxis a partir de la comprensión de la
oración, sino que, por el contrario, memorizan fórmulas de análisis que aplican
indistintamente a las construcciones sintácticas de acuerdo con las formas que
dichas construcciones presentan. Por ejemplo, en la resolución de ejercicios de
sintaxis oracional, frente a distintos sintagmas encabezadas por la preposición a,
los estudiantes no interpretan el sentido de la unidad de predicación que están
analizando, hecho que los lleva a no establecer diferencias entre un complemento
directo, indirecto, un adjunto adverbial o un complemento de régimen. Debido a
ello, es necesario plantear en el aula otra forma de estudiar la sintaxis del español.
Esto significa analizar construcciones nominales y verbales desde un enfoque
sintáctico y léxico – semántico que privilegie la comprensión de la estructura
argumental del predicado oracional y que abandone el hábito de nombrar las
funciones sintácticas sin un fundamento sólido. El conocimiento de la sintaxis
debe convertirse en una herramienta que enriquezca la comprensión lectora y
resulte aplicable en la corrección de producciones escritas y orales.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Angélica Vaninetti
1 Introducción
En esta ponencia se intenta brindar un aporte didáctico que
promueva otra manera de enseñar y de aprender sintaxis oracional tanto
en la escuela secundaria como en los institutos superiores de formación
docente. Se trata de adoptar un enfoque que interrelacione el aspecto
léxico-semántico con el sintáctico a fin de que los estudiantes descubran
que analizar sintácticamente una oración no es una rutina vacía de
contenido, sino una construcción de sentido. Cuando los alumnos deben
resolver ejercicios de sintaxis, suelen formular preguntas básicas del tipo
¿Qué? ¿Cómo? O ¿A quién? Sin reflexionar sobre la coherencia que debe
fundamentar cada respuesta, puesto que cada una de ellas se relaciona
entre sí de una manera coherente y cohesiva, condición indispensable
para entender por qué una oración deja de serlo si no se interpreta como
un conjunto de naturaleza vinculante desde su aspecto léxico- sintáctico.
Memorizar los nombres de las funciones sintácticas de una oración sin
comprender dicha vinculación anula el proceso de interpretación porque
se lo reemplaza por un simple trabajo de repetición automatizada.
Por tales motivos, este trabajo pretende demostrar la necesidad de
enseñar sintaxis desde un enfoque léxico-sintáctico que privilegie la
comprensión de la estructura argumental de una oración y dé cuenta de
la relación semántica que vincula la función sintáctica con la categoría
gramatical de las palabras. Además, propone aplicar en la práctica de la
producción escrita los conceptos gramaticalidad-agramaticalidad, cada
vez más ausentes en las competencias lingüísticas de los estudiantes
dado que llegan a considerar gramatical a una oración que carece de
sentido.
En el trabajo Enseñanza gramatical y Análisis crítico del discurso, su
autor, Mónaco, Fabián (2006:95-96) reflexiona sobre la incidencia que
debe tener la enseñanza de los contenidos de gramática en la capacidad
comunicativa de los alumnos. Allí, Mónaco plantea la problemática del
desplazamiento que sufrió la enseñanza de la gramática en las décadas
de los años 80 y 90 en aras de un enfoque absolutamente comunicativo.
Concluye que los resultados fueron deficientes, pues sin el conocimiento
de los elementos gramaticales de una lengua nadie puede pretender el
buen uso de ella, ese uso es, sin lugar a dudas, comunicativo. Es
importante destacar que con la expresión “buen uso” no se hace
referencia a un enfoque exclusivamente normativo, sino a la posibilidad
de contar con una expresión oral y escrita coherente, gramaticalmente
aceptable, que transmita un mensaje, hecho que, a su vez, permita
entender aquello que se lee. Frente a estas competencias de escritura y
de lectura, en crisis permanente, el profesor Mónaco destaca que la
competencia gramatical es tan importante como las demás, por tal motivo
no corresponde priorizar el desarrollo de unas en detrimento de otras,
68
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
sino que se debe tratar de integrarlas porque así funciona el lenguaje en
la sociedad.
Desde esta perspectiva, este trabajo enfoca un conflicto de base: el
desconocimiento por parte de los estudiantes de la construcción
sintáctica de una oración junto con la falta de discernimiento entre la
gramaticalidad y la agramaticalidad de cada unidad de predicación cuyo
enlace organiza la coherencia del texto.
2 Desarrollo
2.1 La sintaxis y su didáctica: problemáticas y alcances
Se sabe que el proceso de enseñanza y aprendizaje de la sintaxis del
español no es tarea sencilla para los hablantes de la lengua madre. Desde
la experiencia docente en instituciones educativas de nivel secundario y
terciario, ya sea en la zona sur del Gran Buenos Aires o en la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires, se puede afirmar que el estudio de la sintaxis
oracional ha atravesado los caminos más diversos y dispersos: el análisis
sintáctico de “oraciones sueltas”, enumeradas, fuera de contexto o el
llamado “análisis integral” en el que se delimitaban las diferentes
construcciones y, después, se analizaba cada palabra desde el aspecto
sintáctico, semántico y morfológico. Hacia los años 90, la tajante división
entre gramática textual y oracional marcó una frontera que desplazó el
lugar de la oración, como si no formara parte del texto. Por supuesto, no
se discute la importancia de la gramática textual, sí se sostiene que su
estudio no tiene que anular el de la sintaxis oracional, por el contrario
debe ser su fundamento.
Sin dudas, hay que reconocer que no existe un acuerdo tácito
relacionado con la enseñanza de la sintaxis. Aún hoy, por ejemplo,
muchos jóvenes estudian de memoria los tiempos verbales, método que
brinda una utilidad restringida, pues de nada vale que un estudiante
indique que la forma verbal cantó pertenece al modo indicativo, tiempo
pretérito perfecto simple, si no puede aplicar esa forma verbal de manera
cohesiva en un texto, teniendo en cuenta la naturaleza de la acción
manifiesta en la palabra del verbo, la telicidad del evento o la marca de
agentividad.
Quien se desempeñe como docente de gramática y materias afines
compartirá la misma preocupación. La mayoría de los estudiantes
presentan dificultades cada vez más serias a la hora de producir un texto
o de entenderlo. Frente a este estado de cosas, se argumenta que las
causas responden a dos hechos absolutamente comprobables: la falta de
lectura y el uso indiscriminado de los aparatos tecnológicos que están
diezmando las habilidades comunicativas de hablar, escribir, leer y
comprender. No se desmienten estas causas, que se manifiestan en la
Enseñanza de la Gramática
69
Angélica Vaninetti
realidad cotidiana del aula, sino que se agrega el hecho de que los
estudiantes no conocen los elementos gramaticales básicos de la lengua
que hablan, de su lengua materna. Así como no se puede levantar una
casa sin construir los cimientos, es imposible esperar que un estudiante
corrija su expresión escrita, arme un texto, en el que pueda expresar
aquello que quiere decir, o descubra qué quiso decir el otro, ya sea el
emisor de un texto literario o periodístico, si desconoce la construcción
elemental de la unidad de predicación básica de todo texto, es decir, la
oración. Por ejemplo, frente a la incorporación de esta oración en una
producción escrita En la maestra repartió los exámenes, ¿cómo se explica
la agramaticalidad de esta construcción si no se conocen los sintagmas
básicos de una oración simple?
Por tales motivos, es necesario retomar el estudio de la sintaxis
oracional desde los primeros años del espacio curricular del nivel
secundario, en forma gradual y progresiva a fin de que los estudiantes
lleguen al nivel superior con una caja de herramientas gramaticales a la
que puedan acudir para desarrollar su capacidad expresiva de acuerdo
con las exigencias académicas que el nivel requiere. Además, porque
todos los estudiantes, no solo los que continúan estudios superiores,
deben contar con una competencia comunicativa eficaz para
desempeñarse con fluidez en cualquier ámbito social. Se sostiene que si
un alumno conoce la construcción gramatical de una oración, desde la
simple hasta la compleja, podrá interpretar la estructura jerárquica que
enlaza las diferentes oraciones que componen un texto, también discernir
argumentos de adjuntos. Además, experimentará la seguridad que
implica desarrollar con propiedad sus competencias lingüísticas frente a
cada situación comunicativa.
Debido a ello, esta propuesta afirma que para mejorar el desarrollo de
las competencias lingüísticas en los estudiantes se debe comenzar por el
estudio de la sintaxis oracional a partir de un trabajo que fomente la
relectura de las producciones escritas y la escucha atenta de las
manifestaciones orales con la consecuente reflexión sobre la
gramaticalidad del propio discurso. La función de la sintaxis es abrir el
camino hacia la comprensión, por lo tanto desde el aspecto léxicosintáctico se observará, en primer lugar, la vinculación semántica de las
palabras que forman una oración, teniendo en cuenta la naturaleza léxica
del verbo que rige el sentido de la predicación e indica qué argumentos
requiere para la formación de su estructura argumental básica. Una vez
interpretada dicha estructura, exigida por la clase de la base verbal, se
reconocerán los adjuntos que, al no ser imprescindibles, predican una
información accesoria. El aspecto léxico- sintáctico debe convertirse en el
primer procedimiento para que los estudiantes diferencien cuáles son los
constituyentes necesarios que componen el sentido del mensaje. De esta
70
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
manera, se intenta que los alumnos comprueben que el estudio del
análisis sintáctico es una actividad significativa en la formación de sus
competencias lingüísticas y comunicativas.
2.2 Marco teórico
Esta experiencia didáctica propone enseñar sintaxis desde un enfoque
descriptivo, basado en las propiedades léxico- sintácticas de los
sintagmas oracionales. Para tal fin, toma como marco teórico el concepto
de oración simple como una construcción que no contiene otras que
ocupen el lugar de algunos de sus argumentos (Rae 2009: 75). En cuanto
a las relaciones oracionales de coordinación y subordinación, se tiene en
cuenta la independencia de sus elementos, en el primer caso y la relación
dominante-dominado, en el segundo (López García, Ángel 2000) y el
estudio de la sintaxis oracional basado en las propiedades sintácticas de
las categorías gramaticales (Rodríguez Ramalle, Teresa M. 2005).
La propuesta que aquí se presenta toma en cuenta este lineamiento
teórico porque dicho enfoque permite vincular las categorías gramaticales
a partir de la comprensión de su naturaleza léxica, es decir, genera la
obligación de interpretar el sentido de cada construcción y no solamente
el rasgo formal de su estructura Por ejemplo, si en una actividad
curricular los alumnos tienen que analizar sintácticamente la oración Te
esperé dos horas eternas, es interesante que vinculen el valor semántico
intensificador que el adjetivo pospuesto proyecta en el cuantificador dos y
en el sustantivo horas, construcción nominal con función adverbial que le
agrega un plus de significación a la acción que manifiesta el verbo.
2.3 Descripción del aporte
Si se observa el contenido de un manual destinado a la enseñanza del
espacio curricular Prácticas del lenguaje, del nivel secundario, o un
cuadernillo de taller de expresión escrita, del nivel terciario, para el
estudio de la sintaxis siempre se reserva un “lugar aparte”, un apéndice
que contiene clasificación de palabras, la definición de algunas funciones
sintácticas, unos pocos ejemplos y una página destinada a las
conjugaciones de los paradigmas verbales. La ejercitación consiste en
analizar las diversas funciones sintácticas de las palabras que forman el
sujeto y el predicado: modificadores, objetos directos o indirectos,
predicativos y un grupo limitado de circunstanciales. Generalmente los
alumnos repiten esta serie de nombres que responden a ciertas reglas
impuestas por la memoria, por ejemplo, los reiterados “lo, la, los y las
reemplazan al OD y le y les, al OI”. En otros casos, se recurre a la batería
de preguntas tradicionales ¿Quién? ¿Qué? ¿Cómo? O se intenta
“adivinar” el nombre de tal o cual función.
Enseñanza de la Gramática
71
Angélica Vaninetti
Es indudable que con estos recursos el trabajo resulta muy limitado,
pues los estudiantes pueden llegar a descubrir alguna función sintáctica
básica en una oración simple, pero resulta imposible llevar a cabo con
éxito un análisis sintáctico aplicado a oraciones coordinadas o complejas.
Sin una reflexión léxico-semántica de las construcciones gramaticales se
impone la falta de razonamiento y la incomprensión del mensaje que
expresa la oración. A esto se le suma la falta de competencia para
identificar, en la expresión escrita, la agramaticalidad de las
construcciones oracionales, en la que se incurre por varios motivos: la
ausencia o acumulación de palabras que no guardan adyacencia, la
ubicación inapropiada de preposiciones y el uso incorrecto del pronombre
se, entre otros.
Para llevar a cabo la descripción del aporte, se comentará una
experiencia didáctica realizada con alumnos de tercer año de nivel
secundario y de primer año de la carrera de profesorado en inglés, nivel
superior no universitario. La actividad proponía resolver una serie de
ejercicios con oraciones simples y compuestas. A modo de ilustración,
tres ejemplos:
(1) Identificar la función sintáctica del sintagma a los niños en la oración Elena se
refirió a los niños con desprecio.
Las respuestas de los estudiantes del nivel secundario fueron las
siguientes:
a. a los niños: circunstancial de lugar
b. a los niños: objeto directo
c. a los niños: objeto indirecto
Cuando se les pidió que justificaran dicho análisis, lo realizaron de
esta manera:
a. es circunstancial de lugar porque empieza con la preposición a
b. es objeto directo porque el objeto directo empieza con a
c. es objeto indirecto porque a o para encabezan el objeto indirecto
d. porque a ellos se los refirió.
Por su parte, los estudiantes de nivel superior dieron respuestas
similares y manifestaron la necesidad de entender la sintaxis de su
lengua madre para sortear las dificultades que se les presentan cuando
deben estudiar aspectos gramaticales básicos de una segunda lengua.
Cabe aclarar que, en la resolución de este ejercicio no se pretendía
que los alumnos descubrieran el complemento de régimen del verbo
referirse, en este caso pronominal, pero sí se esperaba que observaran la
falta de sentido lógico de cada respuesta. Los participantes de ambos
grupos no reflexionaron sobre el mensaje de la oración ni atendieron al
significado del verbo, por el contrario apelaron a la memoria de fórmulas
72
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
o a las construcciones de estructuras semejantes-Elena mira a los niños,
Elena se refiere a los niños- sin observar la incoherencia que genera el
reemplazo pronominal en el segundo caso, pues es posible Elena los mira,
pero imposible se los refiere.
(2) Analizar sintácticamente esta oración En la fiesta estuvo buenísima y muy
divertida.
¿Qué observaciones puede realizar a partir de dicho análisis?
Los estudiantes no observaron la ambigüedad de la construcción,
puesto que la oración puede resultar agramatical, si se entiende que el
sintagma nominal la fiesta cumple la función de sujeto. En el caso de
suponer la presencia de un sujeto tácito, no se pensó en la necesidad de
contextualizar dicho sujeto agente para que el sintagma de flexión
conserve su sentido. Para ello, era necesario atender al empleo del
adjetivo buenísima que, en este sintagma, caracteriza el estado transitorio
de ese agente. Tampoco se reflexionó, a partir de esta segunda opción de
análisis, sobre los contrastes predicativos que, en algunos sintagmas,
presentan los verbos ser y estar ni se llegó a distinguir que, en esta
oración, el verbo que rige la predicación, estuvo, es un verbo de estado
que enfatiza la descripción del sujeto tema.
(3) Observar la concordancia pronominal relacionada con la acción que expresa el
verbo e identificar el sujeto en esta oración Les dio una lección de amor a los niños.
Se plantearon numerosos interrogantes que no se subsanaron con
una simple pregunta orientadora ¿quién? O ¿a quién? La respuesta no se
hizo esperar: sujeto tácito, ellos.
Ante esta difícil situación, se pone en práctica, considerando los
objetivos de aprendizaje en cada nivel de estudio, un método de trabajo
que vincula el aspecto léxico-sintáctico del verbo con las otras categorías
gramaticales que lo acompañan y forman su estructura argumental Se
considera que este enfoque permite: a) analizar e interpretar la naturaleza
léxica de los diferentes tipos de sintagmas que componen la estructura
argumental del verbo. De esta manera, a partir de cada unidad oracional,
es posible lograr la comprensión de la totalidad de un párrafo y, por lo
tanto, de un texto b) usar la gramática como se usa una computadora o
una cuchara, esto significa, hacer de ella una herramienta imprescindible
a la hora de trabajar con cualquier texto, transformarla en la “tijera del
sastre”.
Este método de trabajo consta de una serie de etapas:
Enseñanza de la Gramática
73
Angélica Vaninetti
1) Leer la oración e interpretar su sentido. Parafrasear la estructura
oracional conservando el mismo mensaje. Reconocer la gramaticalidad de
la oración por medio de la competencia intuitiva que todo hablante posee
de su lengua madre.
2) Analizar la palabra léxica clave de la oración: el verbo. Considerar la
clase de acción que manifiesta: estado, actividad, logro o realización (Rae
2009:427-432) Con este dato reconocer qué argumentos- componentes
imprescindibles- necesita ese verbo para organizar su estructura
predicativa. Es útil emplear el diccionario a fin de interpretar los sentidos
posibles que puede adquirir un verbo en un contexto sintáctico
determinado
3) Analizado y comprendido el sentido del verbo, identificar la clase de
palabras léxicas que lo rodean-sustantivos, adjetivos, adverbios,
pronombres y preposiciones. Observar la vinculación de las palabras
léxicas con las funcionales- determinativos y conjunciones (Giammatteo,
Mabel e Hilda Albano, 2009) y, de acuerdo con la proyección que las
relaciona, conformar las construcciones que acompañan al verbo.
4) De dichas construcciones, discernir entre aquellas que son verdaderos
argumentos, necesarios para la interpretación de la oración, de aquellos
que son adjuntos, accesorios.
5) Asignar el nombre de la función sintáctica que le corresponda a cada
construcción.
6) Realizado el análisis léxico-sintáctico de la oración, explicar y estudiar
el marco teórico pertinente.
Para cerrar la experiencia didáctica, se presenta el análisis completo
de Elena se refirió a los niños con desprecio que se realizó en la instancia
de corrección del premier el ejemplo citado:
1) Una persona llamada Elena habla de unos niños. Lo hace en forma
despectiva. En este primer paso el hablante pone en práctica su intuición
lingüística que le permite inferir que Elena es un sustantivo
antroponímico determinado por la naturaleza del verbo hablar y por la
manera en que lo hace, con desprecio.
2) Análisis de la palabra léxica clave, el verbo. Referir: tr. Dar a conocer,
de palabra o por escrito, un hecho verdadero o ficticio. Dirigir, encaminar u
ordenar algo a cierto y determinado fin y objeto
Poner algo en relación con otra cosa o con una persona. En el uso
pronominal remitirse aludir (Rae 2001). En esta oración es innegable que
el verbo expresa cierto proceso intelectual, del pensamiento, asociado con
un acto de comunicación; el pronombre se, palabra funcional, en este
caso acompaña el uso pronominal del verbo. Para comprobarlo, se les
sugiere a los estudiantes anular el pronombre y observar qué
74
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
modificaciones sufre el mensaje. No es lo mismo Elena refería a los niños,
porque en este caso se necesita el complemento directo que fue referido y
la construcción nominal a los niños señala a los destinatarios de la acción
del sujeto. Por lo tanto, el pronombre indica que la acción recae en la
persona de Elena que es quien remite, alude, es decir, habla de los niños.
3) De acuerdo con la naturaleza del verbo, una categoría sintáctica señala
el agente de la acción: Elena, sustantivo propio, antroponímico; otra
categoría, los niños, sustantivo común, concreto y contable, indica el
tema sobre el que Elena compone su mensaje. El sintagma preposicional
con desprecio, que indica la manera en la que se llevó a cabo la acción,
cumple la función de adjunto adverbial modal.
4) En este etapa, los alumnos deben inferir que la construcción nominal a
los niños es necesaria para conservar el sentido de la oración pues Elena
se refería o Elena se refería a, resultan agramaticales. En cuanto a la
construcción con desprecio, rever su designación como adjunto, pues es
posible argumentar que se trata de un adjunto adverbial que se convierte
en argumento por el sentido que le aporta a la oración. Es importante
señalar que estas inferencias deben surgir a partir del sentido común,
propiedad innata de cada hablante, que los estudiantes tienen que
aplicar cuando realizan ejercicios de sintaxis.
5) Reconocidos los diferentes sintagmas, se trata de asignarles el nombre
de la función sintáctica que cumplen. Es importante observar que la
designación de la función sintáctica guarde coherencia con la naturaleza
léxica de los constituyentes.
6) Por último, se presentan los contenidos del marco teórico pertinente.
Se concluye esta etapa a partir de la pregunta ¿qué aprendimos con este
ejemplo? En este caso, la importancia de los llamados complementos de
régimen, la alternancia pronominal y no pronominal de algunos verbos y
la marca de telicidad que adquieren con la presencia del clítico se
(Rodríguez Ramalle, Teresa M. 2005: 243-244). A partir de este ejercicio,
intenta fomentar la investigación sobre las diferentes funciones del
pronombre se en la formación de oraciones pasivas y medias
(Mendikoetxea, A. 2000) de uso tan frecuente en el habla del español
rioplatense y la relevancia que adquiere en la construcción oracional el
carácter transitivo o intransitivo de los verbos (Campos, Héctor 2000)
Además, se invita a reflexionar sobre la vinculación manifiesta entre la
agentividad del sujeto y la palabra desprecio que puede convertir a un
adjunto en un argumento por su incidencia significativa.
Enseñanza de la Gramática
75
Angélica Vaninetti
3 Conclusiones
La enseñanza y el aprendizaje de la gramática en la escuela
secundaria y en los primeros años del nivel superior generan una serie de
inquietudes entre los docentes y los alumnos. A los primeros se les hace
cada vez más difícil remontar las deficiencias que existen relacionadas
con el estudio de la palabra. Para los segundos, la palabra gramática
significa memorizar algunos conceptos abstractos que no pueden
relacionar con su propia práctica discursiva.
Recuperar el conocimiento de la gramática del español ya no es una
necesidad, sino una urgencia, esto significa trabajar con la palabra como
el artesano con la arcilla. Se considera que para mejorar el estado de esta
situación no alcanza con describirla. Es necesario buscar métodos de
trabajo que permitan, paulatinamente, encontrar soluciones. Sin lugar a
dudas, si un alumno conoce los elementos gramaticales con los que
cuenta para armar oraciones, tendrá la posibilidad de ser el primer
corrector de sus errores. La aplicación de un enfoque léxico-sintáctico y
la valoración semántica de las categorías gramaticales abre el camino
hacia la aplicabilidad de la sintaxis.
Desde esta propuesta didáctica, se logró que los alumnos
interpretaran, previamente, el mensaje de una oración, es decir, su idea
principal. Además se incentivó el uso del diccionario, no solamente para
conocer la naturaleza léxica- sintáctica de los verbos, sino también para
mejorar el conocimiento sobre clase de palabras. También, el trabajo fue
útil para incorporar la aplicación de los conceptos de gramaticalidadagramaticalidad puesto que los estudiantes comenzaron a armar
sintagmas vinculando la naturaleza léxica de los constituyentes, esto
llevó a que dedujeran que si dicha vinculación no es la correcta, se está
en presencia de construcciones agramaticales o ambiguas.
Asimismo, es importante considerar que en la última etapa del
proceso, la que está relacionada con la lectura del marco teórico
pertinente, resultó beneficioso para los estudiantes trabajar con material
bibliográfico de complejidad creciente puesto que dicha actividad originó
la necesidad de incorporar estrategias que les permitiera comprender el
discurso de diferentes textos académicos.
Sin lugar a dudas, la propuesta plantea un desafío. Se necesita
tiempo, esfuerzo y, sobre todo, perseverancia para modificar los mitos
que rodean al estudio de la sintaxis en los ámbitos escolares, por
ejemplo, las clásicas preguntas ¿para qué sirve? O las justificaciones “es
muy difícil”, “hay que estudiar preguntas de memoria”, “la sintaxis es
aburrida”, entre otros.
Frente a las dificultades ya expuestas, es innegable que se debe
revalorizar el estudio de la sintaxis oracional puesto que es el cimiento
76
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
El aspecto léxico semántico: un camino hacia la sintaxis
sobre el que se construye una expresión escrita coherente y cohesiva,
indispensable para la correcta comprensión de un texto y, por lo tanto,
para lograr cualquier acto comunicativo. Quien no conoce la estructura
sintáctica de su propia lengua no puede corregir sus producciones ni
siquiera llega a darse cuenta de sus dificultades ni, muchos menos, de la
gravedad de sus errores, porque desconoce conceptos gramaticales
básicos.
Es necesario revitalizar una gramática en acción que implique
desarrollar la competencia metalingüística, reflexionar sobre el lenguaje y
aplicar el razonamiento lógico en un análisis léxico-sintáctico
significativo. La gramática oracional resulta imprescindible en la
construcción de los procesos de lectura y de escritura, por lo tanto los
estudiantes deben comprobar que saber gramática les permitirá
emprender su propio camino hacia una producción de mensajes
adecuados y competentes. De lo contrario, comprender un texto y
expresarse eficazmente, en forma escrita u oral, o descubrir el valor que
tienen las palabras seguirá siendo una batalla perdida.
Enseñanza de la Gramática
77
Capítulo 6
Un estudio del verbo en la Enseñanza Media
Silvina Lorena Palillo
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 79-88.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
El presente trabajo se propone reflexionar respecto de las metodologías para la
enseñanza de la Lengua en la Escuela Media. Para ello, realizaremos un recorte
teniendo en cuenta el modo de abordaje para el estudio de los verbos en los
primeros años de Escuela Media, y el análisis de las posibles variables que
conformarían un estudio reflexivo de la cuestión. Partimos de considerar la
importancia del verbo como organizador del texto, ya sea desde el punto de vista
gramatical (a partir de la Estructura Argumental), ya desde las relaciones
temporales que establece, ya desde el punto de vista de los recursos literarios
(como el hipérbaton), entre otros. En primer lugar, revisaremos los criterios de la
enseñanza de los verbos presentes en algunos libros de texto para la Escuela
Media, cuáles son los enfoques que presentan y qué lugar le asignan a esta
temática. También, haremos una mención a los lineamientos que presentan los
documentos curriculares prescriptos, es decir, estudiaremos el lugar que posee el
tratamiento de este tema según el Diseño Curricular Jurisdiccional de la Provincia
de Santa Fe y los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios (N.A.P). En segundo lugar,
analizaremos una posible forma de abordaje más reflexiva, teniendo en cuenta la
proyección argumental. Como conclusión, sostenemos que para realizar el
abordaje de los verbos con los estudiantes de los primeros años del Nivel Medio,
sería conveniente partir del conocimiento intuitivo que tienen los alumnos como
hablantes, para poder llevarlos a reflexionar sobre esta temática compleja.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Silvina Lorena Palillo
1 Introducción
El presente trabajo surge de reflexionar, a partir de nuestra propia
práctica docente, acerca de las Metodologías para la enseñanza de la
Lengua en la Educación Media o Secundaria. Sobre ese marco general,
tomaremos como recorte el abordaje de los verbos en los primeros años
de la Educación Media.
Sostenemos que hablar de “verbo” supone acercarnos a una temática
compleja, que puede estudiarse desde el punto de vista gramatical, según
diferentes acercamientos:
A) A nivel descriptivo, es decir, como un elemento del sistema
lingüístico.
B) Según las relaciones temporales que establece con otros elementos
textuales (las cuales pueden ser de anterioridad, simultaneidad y
posterioridad).
C) De acuerdo a la Estructura Argumental, ya que los verbos
proyectan una estructura en base a la relación predicadoargumentos.
D) Además, desde el punto de vista de los recursos literarios, el verbo
incide en el paralelismo, en el hipérbaton, entre otros recursos.
El recorrido que trazamos en este trabajo es el siguiente: en primer
lugar, analizamos los criterios, enfoques y espacios asignados al verbo en
algunos libros de texto escolares y en los documentos prescriptos (los
Núcleos de Aprendizajes Prioritarios y el Diseño Curricular Jurisdiccional
de la Provincia de Santa Fe). Luego, proponemos otro modo de abordaje,
ligado a la reflexión metalingüística.
2 Estado de la cuestión
En general, observamos que se les brindan a los alumnos pocos (o
casi nulos) momentos dedicados a la reflexión del lenguaje en las clases
de Lengua: el abordaje que se realiza de las cuestiones lingüísticas se
vincula casi exclusivamente a la descripción de los elementos.
Para poder dar cuenta de esta situación, hemos hecho un
relevamiento de algunos libros de texto escolares, como así también de
los documentos prescriptos antes mencionados.
80
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Un estudio del verbo en la Enseñanza Media
2.1 Libros de texto escolares
Hemos realizado un relevamiento de seis libros de texto para los dos
primeros años del nivel secundario15 pertenecientes a cinco editoriales
diferentes.
A continuación, destacamos algunas cuestiones referidas al modo de
abordaje de los verbos.
A) De los seis manuales, tres comparten estas características:
Ubican al verbo en una sección al final del manual, en la que se lo
describe como elemento del sistema, teniendo en cuenta la
morfología, tiempo, aspecto, conjugaciones verbales (paradigma),
correlaciones verbales. Desde el punto de vista sintáctico, se lo
estudia según el punto de vista estructural, a través del análisis
sintáctico.
B) Otro de los manuales analizados posee la siguiente disposición:
Secciones relacionadas a las macrohabilidades: “leer y escribir” (la
narración, la descripción y la argumentación), “escuchar y hablar” (la
conversación), “reflexionar sobre el lenguaje” (texto, género, léxico,
sintaxis, diccionario). A pesar de que la última sección se titule
“reflexionar sobre el lenguaje”, la cuestión verbal queda sólo relegada
al ámbito del análisis sintáctico.
C) En otro libro de texto, observamos lo siguiente:
Comentarios marginales a pie de página que tienen que ver con el
análisis identificativo de unidades solamente desde el punto de vista
sintáctico, pero no se tienen en cuenta las relaciones que establece el
verbo con los complementos y adjuntos, y la cercanía del verbo con
su objeto; ya que las descripciones comienzan por la distinción de
sujetos y predicados y luego se abordan los modificadores del sujeto,
y junto con ello, los circunstanciales; el objeto directo se estudia a
posteriori.
D) En el último,16 si bien notamos algunas cuestiones semejantes a
los manuales anteriores, tales como la separación entre sección
“literatura” y sección “lengua”; y, en esta última, la descripción del
verbo según conjugaciones verbales, persona, número, modo, tiempo,
aspecto; y análisis de cuestiones tales como voz activa y voz pasiva,
formas no personales del verbo, frases verbales, verbos irregulares, la
oración simple; observamos una actividad diferente relacionada con
Nos referimos a los años del Nivel Secundario de acuerdo a lo adoptado por la Provincia de
Santa Fe (primaria de siete años y secundaria de cinco años).
16
El orden en el que se presentan los manuales analizados no responde al orden alfabético,
sino que es una forma de presentar los datos analizados: a través de características comunes.
15
Enseñanza de la Gramática
81
Silvina Lorena Palillo
la focalización, que consiste en la reformulación de oraciones a través
del movimiento de constituyentes.
2.2 Documentos curriculares prescriptos
Hemos consultado los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios y el Diseño
Curricular Jurisdiccional de la Provincia de Santa Fe.
Vale aclarar que, si bien la Ley Federal de Educación ya no está más
en vigencia en nuestro país y ha sido suplantada por la Ley de Educación
Nacional N° 26.206 del año 2006, los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios
están todavía en vigencia. En cuanto a los documentos de carácter
jurisdiccional, en la Provincia de Santa Fe se está realizando el proceso
de cambio curricular, que, por el momento atañe a los dos primeros años,
que conforman el Ciclo Básico de la Educación Secundaria. Es por ello
que hemos consultado el documento correspondiente a la Ley de
Educación Federal: el Diseño Curricular Jurisdiccional de la Provincia de
Santa Fe.
2.2.1 Los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios (N.A.P.)
Este es un documento de carácter nacional, que consta de aquellas
habilidades que deben ser alcanzadas por los estudiantes en cada área y
en cada ciclo.17
Con respecto al área de Lengua, para el tercer ciclo, encontramos
entre los criterios que se han tenido en cuenta para la secuenciación en
el área, el siguiente “el grado de reflexión sobre la lengua y los textos
(desde procedimientos que sólo tienen en cuenta la intuición lingüística
hasta aquellos en los que se involucran conceptos sobre la lengua y los
textos para la resolución de las tareas” [p. 16].
Sin embargo, observamos que las habilidades no están pensadas
desde un criterio reflexivo. Citamos a continuación las habilidades
referidas al tratamiento del verbo:
1) “Conocimiento de las clases de palabras” (entre ellas el verbo) [p.
26 y 35].
2) “Emplear adecuadamente los verbos de decir y los tiempos
verbales” [p. 28 y 38].
3) “Correlación de tiempos verbales” [p. 35].
4) “El presente para marcar la atemporalidad en los textos de
divulgación” [p. 35].
Se entiende ciclo por ciclo de la Educación General Básica. Se distingue, entonces, primer
ciclo (que comprende, primero, segundo y tercer grados), segundo ciclo (cuarto, quinto y sexto
grados) y tercer ciclo (antes: séptimo, octavo y noveno años; hoy, en Santa Fe, séptimo, primero
y segundo años del Nivel Medio).
17
82
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Un estudio del verbo en la Enseñanza Media
5) “Las distintas formas de introducir la palabra del otro: verbos
introductorios (ampliación del repertorio de los verbos de decir)” [p.
35].
6) “Construcción verbal (núcleo y modificadores),
sintácticas en la oración simple.” [p. 35].
funciones
7) “Relato: subjuntivo para la relativización de los hechos” [p. 45].
8) “Los verbos de opinión (considero, creo, acuerdo, disiento)” [p. 45].
9) “Correlaciones en el estilo indirecto” [p. 45].
10) “Verbos: formas conjugadas y no conjugadas. Algunas formas de
verbos regulares e irregulares en las que suele cometerse errores.
Concordancia” [p. 46].
11) “Correlaciones verbales en las construcciones condicionales” [p.
46].
2.2.2 Diseño Curricular Jurisdiccional de la Provincia de Santa Fe
En la introducción del Diseño se realiza un recorrido acerca de las
distintas Teorías Lingüísticas y los aportes de los que la educación se
sirvió. Se pone el acento en las teorías comunicativas para la enseñanza
de Lengua y Lengua Extranjera.
Los objetivos didácticos (o “derivaciones”, según el Diseño) que se
desprenden de las Teorías son, entre otras: propiciar “la reflexión
metacognitiva” [p. 78] y “favorecer la descentración o extrañación de la
propia lengua como procedimiento de observación y análisis” [p.78].
Los contenidos están distribuidos en función de tópicos generativos 18
(formulados a partir de las macrohabilidades: leer, escribir, escuchar y
hablar), y se organizan en función de los tres años del tercer ciclo de la
Educación General Básica. Los tópicos generativos son cinco:
“Comunicación oral”, “Comunicación escrita”, “Formatos y mecanismos
lingüísticos de los textos orales y escritos”, “Los textos en contextos”, y
“El discurso literario”.
Encontramos referencia explícita a los verbos en el tópico “Formatos y
mecanismos lingüísticos de los textos orales y escritos”. Dentro de este
tópico, bajo el subtítulo “Mecanismos gramaticales y textuales”,
observamos los siguientes contenidos:
Para séptimo año:
1) “Verbos. Relación de tiempos verbales: modo indicativo (pretérito
perfecto simple, pretérito imperfecto y pluscuamperfecto)” [p 110].
Según el Diseño, los “tópicos generativos son temas, cuestiones, conceptos, ideas, etc., que
proporcionan hondura, significación, conexiones y variedad de perspectivas para apoyar el
desarrollo de la comprensión por parte de los alumnos”. [p. 104]
18
Enseñanza de la Gramática
83
Silvina Lorena Palillo
2) “Uso del presente en la exposición” [p. 111].
3) “Uso de la segunda persona verbal” [p. 111].
4) “Uso del imperativo” [p. 111].
5) “Verbos de decir: opinar, creer, declarar, etc.” [p. 111].
Para octavo (ahora, primer año):
1) “Construcciones con verbos copulativos (ser, parecer, etc.)” [p.
111].
2) “uso del infinitivo, gerundio y participio” [p. 111].
Para noveno (ahora, segundo año)
3) “modo verbal: el subjuntivo” [p. 111].
3 Una propuesta de abordaje
Consideramos que las clases de Lengua deben estar ligadas a la
reflexión, y no a los procedimientos que no parten de ella. Si bien en las
Fundamentaciones de ambos documentos analizados también se afirma
esto, no es lo que luego se refleja en las propuestas de los documentos ni
en los manuales analizados. Es por ello que nuestro planteo de abordaje
pretende llegar a la reflexión lingüística a partir del conocimiento
intuitivo.
Un objetivo didáctico a plantearse en las clases de Lengua (ligado al
recorte establecido en el presente trabajo) es que los estudiantes puedan
reflexionar acerca de la predicación verbal y no que esté ligada a una
mera práctica mecánica.19
El abordaje propuesto tiene en cuenta las posibilidades de predicación
que presentan los verbos y las posibilidades de descarga de los
argumentos. Para ello, nos servimos de la noción Estructura Argumental
(EA). Por otra parte, analizamos los verbos en un contexto oracional o
textual, ya que, de esa forma, pueden verse los argumentos ya
descargados en una estructura efectiva.
Esto no significa que no deba existir un primer momento descriptivo, pero no debe
detenerse allí el estudio de la Lengua.
19
84
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Un estudio del verbo en la Enseñanza Media
Analicemos la siguiente historieta, que hemos seleccionado para
introducir nuestra propuesta:
Figura 1.
Podemos observar que el humor se realiza en función de un juego con
la predicación. En el primer y cuarto cuadros, la palabra que falta es el
adjetivo que predica de “día” y de la primera persona del singular,
respectivamente. En el segundo cuadro, lo que está ausente es el objeto
de “comer”.
¿Por qué proponer un enfoque que tenga en cuenta la EA?
1) En primer lugar, en función de la información contenida en la EA,
generalmente podemos conocer el funcionamiento sintáctico del
verbo, es decir si se trata de un verbo transitivo o intransitivo, por
ejemplo.
2) Por otra parte, pensar en la proyección verbal nos permite
distinguir entre complementos (aquellos elementos exigidos por el
verbo) y adjuntos (aquellos que no están seleccionados por el verbo).
3) Además, a partir de los argumentos que selecciona un ítem verbal,
podemos analizar cómo pueden descargarse en las estructuras.
Estas son algunas de las varias posibilidades que nos brinda el
acercamiento al verbo a través de la EA.
¿Cómo podemos llevar esta propuesta al aula?
En primer lugar, se conduce a los estudiantes a reconocer los
“participantes” (argumentos) que intervienen en la proyección verbal.
Enseñanza de la Gramática
85
Silvina Lorena Palillo
Debe plantearse, por ejemplo, en “apagar”, cuál es el “alguien” y cuál el
“algo” (lo apagado), es decir, cuáles son los argumentos.
La idea es que los estudiantes comiencen a preguntarse cuáles son las
diferentes posibilidades que existen respecto de la predicación verbal.
En un momento siguiente, esto les será útil a la hora de la escritura,
por ejemplo, para pensar dónde conviene colocar un argumento
determinado.
Veamos los siguientes ejemplos:
1) “Los candelabros de los cardones abrieron los blancos cirios de sus frágiles
corolas. Parpadeantes las estrellas la velaron hasta el amanecer. Una brisa
apagó el pabilo de la noche. Se incendió el día.” [Ammar, Jorge J. (2005)
Leyendas mendocinas: p.16]
2) Se apagó el pabilo de la noche.
3) Los bomberos apagaron el incendio.
4) El incendio se apagó.
El verbo apagar selecciona dos argumentos. En el ejemplo (1) y en (3)
aparecen (se descargaron) los dos argumentos. El primer argumento es
“una brisa”, en (1), y en (3), es un agente, “los bomberos”.
Luego podría preguntarse a los alumnos, ¿qué ocurre en los casos (2)
y (4)? Esos ejemplos sirven para mostrar la cercanía del verbo con su
objeto, ya que éste último no puede elidirse, mientras que el primer
argumento (o argumento externo) no necesariamente se explicita. En las
oraciones pasivas, como (2) y (4), sólo intervienen el verbo y su
argumento interno.20 Esto marca la diferencia de vinculación que existe
entre el argumento interno y el externo.
Veamos los siguientes casos:
1) “Los obreros trabajan en la construcción de varias obras que levanta la
empresa Corporación Estrella en Haití, luego del terremoto de enero 2010.”
[En el cuerpo de una noticia periodística de un diario de República
Dominicana. En sitio web: listindiario.com.do]
2)
“Talleres
Gorlan
trabaja
www.noticiasdeempresas.com]
el
acero
inoxidable.”
[Sitio
web:
Aquí es posible preguntar, ¿se trata del mismo verbo? ¿cuáles son los
“lugares” (argumentos) que necesita? En estos casos, estamos en
presencia de dos EA diferentes. El primer ejemplo, alude a trabajar como
verbo intransitivo, cuyo único argumento es, en este caso, “Los obreros”.
El segundo ejemplo, refiere a un verbo trabajar transitivo, cuyo primer
argumento es “Talleres Gorlan”, y el segundo, “el acero inoxidable”.
Adviértase que no es posible la aparición de un argumento externo en (2) y (4) por la
presencia del pronombre “se”.
20
86
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Un estudio del verbo en la Enseñanza Media
El último caso que presentamos es el siguiente:
Figura 2.
Seleccionamos esta historieta de Mafalda a fin de analizar la
predicación de regalar.
Podríamos preguntar, ¿cuáles son las formas que tenemos en nuestra
lengua para referirnos al hecho de “regalar”?
En esta historieta, observamos dos formas en las cuales se presenta la
predicación de “regalar”: por un lado, en el tercer cuadro, estamos en
presencia del verbo liviano “hacer”, que está desemantizado y la
predicación se ha corrido al objeto “regalo”;21 en el cuarto cuadro, se
presenta el verbo “regalar” en su forma transitiva.
Estos datos constituyen sólo una pequeña muestra del trabajo posible
en función de la EA.
4 Conclusiones
Nuestro trabajo parte de una revisión acerca de las metodologías para
la enseñanza de la Lengua.
Hemos hecho un recorte en función a la enseñanza de los verbos. A
partir de ello, rastreamos en libros de texto y en los documentos
prescriptos qué lugar le asignan a esta temática.
Luego, propusimos un enfoque de abordaje a partir de la Estructura
Argumental y en función de oraciones o textos, a fin de conocer la
descarga argumental.
Creemos que queda pendiente una profundización en materia de la
“reflexión”. Si nos proponemos “reflexionar” sobre algo en la escuela, ¿a
qué estamos haciendo referencia exactamente? Según el Diccionario de la
Real Academia Española, reflexionar es “pensar atenta y detenidamente
21
Podría haberse dado también con el verbo “dar” (como verbo liviano). Ej: dar un regalo.
Enseñanza de la Gramática
87
Silvina Lorena Palillo
sobre algo”.22 Por su parte, el Diccionario Panhispánico de Dudas lo
define como “pensar con profunda atención”. Jorge Luis Borges en su
cuento “Funes el memorioso” se refiere de la siguiente manera al acto de
pensar:
[Ireneo Funes] [h]abía aprendido sin esfuerzo el inglés, el
francés, el portugués, el latín. Sospecho, sin embargo, que no era
muy capaz de pensar. Pensar es olvidar diferencias, es generalizar,
abstraer. En el abarrotado mundo de Funes no había sino detalles,
casi inmediatos [Borges, Jorge L. 1944].
Consideramos que es sumamente importante tender a la reflexión
metalingüística de esa manera, es decir, construyendo conceptos, en
función de la abstracción y generalización.
Definición perteneciente a la redacción propuesta para la vigésimo tercera edición del
Diccionario (consultada a través del sitio: www.rae.es).
22
88
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Capítulo 7
Enfoque comunicativo, enseñanza de la gramática
y formación docente
María Eugenia Llambí de Adra
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 89-98.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
El docente debe convertir los conocimientos lingüísticos teóricos, aportados por su
formación, en herramientas didácticas que le permitan elaborar una propuesta en
función del análisis y el diagnóstico de las dificultades lectoproductoras de sus
alumnos. Tal como señala Zayas, Hernando F. (1994) las ciencias del lenguaje
proporcionan los instrumentos para el análisis de los textos producidos en
contexto escolar y este análisis, por su parte, orienta la reflexión teórica y
metateórica del profesor hacia metas pedagógicas. La integración de las
lingüísticas del sistema y del uso en la enseñanza de la lengua desde un enfoque
comunicativo supone entender que los aspectos descriptivos del sistema son
operaciones de sistematización y generalización de los usos, con lo cual puede
ponerse de relieve que la organización de la información responde a necesidades
comunicativas específicas, que obligan al usuario a tomar decisiones sobre los
procedimientos gramaticales más apropiados para expresarlo. Esto supone un
abordaje explícito de contenidos lingüístico-gramaticales desde un planteo creativo
y acorde al nivel de desarrollo cognitivo de los alumnos/as. La integración de la
gramática dentro de este enfoque ha sido entendida en forma generalizada, quizás
por la tradición en la que se han formado los profesores durante años, de manera
desagregada y aplicacionista, por lo que se impone la necesidad de replantear en el
ámbito educativo la concepción y el rol que deben cumplir los conocimientos
gramaticales en la enseñanza de la lengua materna.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
María E. Llambí de Adra
1 Introducción23
La acertada preocupación pedagógica por el desarrollo de la
competencia comunicativa24 como meta formativa, produjo un “daño
colateral”: la enseñanza de la lengua pasó de ser exclusivamente
formalista a ser exclusivamente funcionalista. Este cambio de sentido
puede constatarse tanto en los planes de formación docente (sobre todo
de Nivel Primario), como en la descripción de contenidos de los
programas de la asignatura25 o en la mayor parte de los textos escolares
de lengua, donde la gramática aparece en calidad de “apéndice” junto a
las reglas ortográficas y de puntuación. En aquellos casos en los que la
gramática se sigue enseñando, ha quedado reducida a un saber fosilizado
de raigambre tradicional o estructural, planteada como una instrucción
irreflexiva, bajo la forma de rutinas de ejercicios descontextualizados.
En los últimos tiempos, se ha producido una modificación en la
situación descripta, dado que desde el ámbito académico se viene
reivindicado la importancia de la formación gramatical, sobre todo en
relación con su incidencia en el desarrollo lectoproductor de los
estudiantes. Si bien es alentador un viraje en este sentido, se observa un
panorama de cierta desorientación con respecto a cómo abordar la
reinserción escolar de los contenidos gramaticales, lo cual ha llevado en
muchos casos a reincidir en los viejos planteos didácticos irreflexivos,
descontextualizados y aplicacionistas.26
En este punto, es pertinente dedicar un párrafo a la relación entre la
gramática y el enfoque comunicativo. Este enfoque, nutrido de nociones
provenientes de las disciplinas que estudian los textos y la lengua en uso,
desplazó la perspectiva formal/estructural que dominó el panorama de la
enseñanza de la lengua hasta aproximadamente la década del ’60, pero
Este trabajo se enmarca en el proyecto de investigación H129 (Humanidades – UNCo) y se
nutre de experiencias y conclusiones del proyecto de investigación “El español de Argentina:
aspectos descriptivos, explicativos y pedagógicos”.
24
“El concepto de competencia alude a un saber hacer [con la lengua], a una capacidad para
resolver problemas que se aplica de manera flexible y pertinente, adaptándose al contexto y a
las demandas que plantean situaciones [comunicativas] diversas… La competencia no se
limita a los aspectos procedimentales del conocimiento, a la mera posesión de habilidades y
destrezas, sino que se ve acompañada necesariamente de elementos teóricos y actitudinales…”
(en: Díaz Barriga, F. y M. Rigo, “Formación docente y educación basada en competencias”).
25
Para ilustrar este punto, cabe mencionar que, en octubre de 2011, se organizó en la
Facultad de Ciencias de la Educación de la UNCo el 1er. Foro Patagónico de Didáctica de la
Lengua y la Literatura, el cual se centró en el análisis y discusión de programas de Lengua y
Literatura de Enseñanza Media, fundamentalmente de Río Negro y Neuquén. El denominador
común hallado fue: en casi todos ellos se propone la enseñanza casi exclusivamente de la
literatura en función de trabajar con tramas textuales (descriptivas, narrativas,
conversacionales), sin la inclusión de contenidos gramaticales y normativos o incluidos en
calidad de apéndices.
26
El objetivo educativo es salir del pensamiento aplicacionista y promover el pensamiento
estratégico.
23
90
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enfoque comunicativo, enseñanza de la gramática y formación docente
no parece haber terminado de cuajar en una clara propuesta
metodológica consecuente con los fines declamados, si consideramos que
no integró concretamente el saber gramatical dentro del espectro de
competencias a desarrollar.
Tal como señala Zayas, Hernando F. (1994), las ciencias del lenguaje
proporcionan los instrumentos para el análisis de los textos producidos
en contexto escolar y este análisis, por su parte, orienta la reflexión
teórica y metateórica del profesor hacia metas pedagógicas. En este
marco, el gran desafío de los profesorados es ofrecer una formación más
completa y actualizada sobre las ciencias del lenguaje y el de los
docentes, convertir los conocimientos lingüísticos recibidos durante su
formación, en herramientas que le permitan elaborar una propuesta
didáctica en función del análisis y el diagnóstico de las necesidades y
dificultades comunicativas de sus estudiantes.
En la inteligencia de que los aspectos descriptivos del sistema son
operaciones de sistematización y generalización de los usos y de que la
organización de la información responde a necesidades comunicativas
específicas que obligan al hablante –entre otras cuestiones- a tomar
decisiones sobre los recursos lingüísticos más apropiados en función de
ellas, se podrá idear articulaciones didácticas entre las lingüísticas del
uso y del sistema. Como ya se ha señalado en trabajos anteriores, la
reflexión gramatical forma parte de las actividades encaminadas al
aprendizaje del uso de la lengua, dado que no existe posibilidad de
usarla, ni en las situaciones más espontáneas, sin entrar en el
mecanismo total de la lengua y sin realizar algún tipo de control sobre el
uso del lenguaje.27 La elaboración de un texto implica el control
consciente de los recursos gramaticales. Para que el estudiante gane
autonomía en ello, se requiere de una instrucción sistemática y
planificada, a través de la cual se lo vaya dotando de un cuerpo de
conocimientos debidamente secuenciados y lógicamente relacionados,
teniendo en cuenta las relaciones jerárquicas y el alto grado de
integración que hay entre los distintos niveles de análisis lingüístico.
No es cuestión de prescribir abordajes teóricos o líneas de acción
didáctica en relación con los contenidos gramaticales.28 Con respecto a lo
primero, puede considerarse que no se trata de enrolarse en una
determinada corriente de investigación lingüística, sino más bien de
analizar el valor pedagógico de los conocimientos gramaticales
Tal como lo sostienen Camps, Anna y Felipe Zayas (2006).
Cualquier propuesta didáctica que se ofrezca solo operará como un simple ejemplo de
abordaje de la enseñanza de contenidos gramaticales, en cierto contexto y para cierto grupo de
alumnos y en función de la lógica de la planificación didáctica en la que se incluyan. Por eso,
suele ocurrir que, cuando se proponen secuencias de actividades sobre la enseñanza de la
gramática, suelen ser percibidas como artificiosas o descontextualizadas por quien lee su
descripción.
27
28
Enseñanza de la gramática
91
María E. Llambí de Adra
estabilizados,29 que han pasado a formar parte de lo que convenimos en
llamar la gramática descriptiva.30
Con respecto a lo segundo, la buena formación de las oraciones es
una meta didáctico-pedagógica central, si se piensa en articular la
gramática con el texto/discurso. La oración es una unidad de
construcción a partir de la cual el análisis y la reflexión sobre sus
componentes cobran sentido; por eso, las nociones implicadas (como son
los rasgos morfológicos de las palabras, las clases de palabras, las
funciones sintácticas, etc.) no deben proponerse con interés taxonómico,
sino quedar subordinadas, desde un abordaje didáctico, a la buena
formación de las oraciones. Este planteamiento debe contemplar,
además, las relaciones de interfaz entre los distintos niveles de análisis
involucrados en la construcción y comprensión de oraciones. Cabe
recordar que la gramática no solo se ocupa de unidades, estructuras y
reglas lingüísticas, sino también de los significados que la conjunción de
esos elementos produce.31
Cuando se habla de “buena formación de las oraciones”, puede
interpretarse que se hace alusión a cuestiones normativas o de
aceptabilidad. Sin embargo, también se puede hacer referencia al criterio
de gramaticalidad, ligado a lo estrictamente lingüístico.32 Desde estas
consideraciones, el error gramatical no siempre es fácilmente clasificable.
¿Toda “anomalía” puede categorizarse como error? Por definición, ningún
hablante produce emisiones agramaticales, es decir, que violen las reglas
constitutivas del sistema (Di Tullio, Ángela 2000); salvo en la actuación,
por la interferencia de factores como el cansancio, la distracción, el
nerviosismo, etc. De manera que, como plantea Demonte, Violeta (2000,
2001, 2003), cabe suponer que las variaciones que expresan esas
aparentes “anomalías” son manifestaciones de las posibilidades del
sistema, esto es, manifestaciones de la variación microparamétrica.33
Si el docente indaga acerca del origen, naturaleza y relevancia de los
aparentes “errores”34 y propone al alumno reflexiones metalingüísticas
acordes a sus posibilidades cognitivas, antes que sancionar sus errores
La Gramática de la Rae (2011) compendia el estado del arte en esta materia.
Para revisar la cuestión de los límites entre gramática descriptiva, normativa y teórica,
puede consultarse: Bosque, Ignacio “Reflexiones sobre las formas de entender la gramática”.
En Homenaje a Ofelia Kovacci, Buenos Aires.
31
lo cual está inscripto en la construcción de sentido del texto. La reflexión gramatical exige
una selección y secuenciación de contenidos, que deben ser articulados en las secuencias
didácticas pensadas para la comprensión y producción de textos.
32
Con esto no se está afirmando que siempre sea nítida la distinción entre gramaticalidad,
aceptabilidad y corrección. Por otra parte, obviamente, esta cuestión se encuadra en la
adecuación discursiva.
33
Explicación encuadrada en el Modelo de Principios y Parámetros de la GGT.
34
Con esta acción, el docente constituye una instancia de investigación de su propia
práctica.
29
30
92
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enfoque comunicativo, enseñanza de la gramática y formación docente
como incorrecciones, seguramente logrará que, para el alumno, sea una
oportunidad de aprendizaje significativo. La tan mentada reflexión
metalingüística exige la explicitación de conocimientos implícitos,35 lo
cual demanda la incorporación paulatina de nociones lingüísticas y de un
vocabulario especializado. Una aproximación desde el conocimiento
práctico de usuario es un buen punto de partida tanto para instituir una
mirada reflexiva sobre la lengua y refinar las reflexiones, como para la
adquisición gradual de ese metalenguaje imprescindible en las
interacciones de clase.
El conocimiento explícito sobre las formas de la lengua, su
organización y funcionamiento, en sus distintos niveles de análisis
(enunciativo, pragmático, textual, léxico, morfosintáctico), y sobre las
relaciones que se establecen entre ellos en los diversos géneros
discursivos y en los textos concretos requiere de una instrucción
sistemática, por medio de un proceso de focalización de cada uno de
estos aspectos, en el que las formas de intervención didáctica también
sean portadoras de conocimiento. Aplicado este criterio a la enseñanza de
la gramática, supone considerar salidas puntuales hacia contenidos
gramaticales, a través de actividades de aprendizaje que tengan sentido
en sí mismas. La propuesta metodológica que aquí se propicia toma como
punto de partida las competencias lingüísticas y comunicativas del
estudiante, para que este las ponga en juego en la resolución de
problemas, y así conducirlo hacia la reflexión metalingüística, hacia un
distanciamiento que le permita observar la lengua como un objeto
externo. De manera que las actividades de aprendizaje sobre contenidos
gramaticales pueden pensarse como tareas de resolución de problemas o
de indagación, en el sentido de pautarse en términos de recolección de
datos, de operaciones de observación, comparación, análisis,
argumentación, síntesis de resultados y generalización, para luego
incorporar el conocimiento adquirido como una herramienta de uso
habitual.36 El tipo de actividades descripto solo es posible bajo la guía
activa del docente, que es quien debe orientar las reflexiones y la
sistematización de las conclusiones obtenidas del trabajo con los datos.37
Cuando se desarrollan procesos de estas características, la consideración
de la motivación no puede estar ausente. La motivación –como sabemosEn línea con lo que se plantea en Karmiloff Smith, Annette y otros (1994) sobre la
“redescripción representacional”.
36
Los conocimientos gramaticales pueden (y deben) convertirse en pautas de automonitoreo
para que los estudiantes revisen sus producciones, sobre la base de ponderar conscientemente
sus opciones para expresar lo que quieren decir; sin que esto signifique plantearlos como un
saber auxiliar, cosmético u ocasional.
37
Se trata de una tarea mancomunada, en la que el docente guía la observación y la
indagación y el alumno busca y crea soluciones a través de la reflexión. Se diferencia de un
mero ejercicio en que demanda un proceso de reflexión y la toma de decisiones sobre las
acciones a seguir.
35
Enseñanza de la gramática
93
María E. Llambí de Adra
es un factor importante para aprender, pero es cierto que no siempre es
fácil lograr que los contenidos gramaticales en sí mismos sean
motivadores para los estudiantes. Una alternativa para salvar este escollo
es proponer actividades de sensibilización con determinados fenómenos
de la lengua (sean errores o no), a través de, por ejemplo, cambios de
significado provocados por la manipulación de las formas lingüísticas,
juicios de gramaticalidad, contrastes entre usos de distintas variedades
dialectales, etc.
2 Una propuesta de intervención
Para ilustrar el tipo de reflexiones lingüísticas que puede promoverse,
partiendo del nivel intuitivo, se puede tomar como ejemplo la
comparación de los esquemas básicos de oraciones según distintos
verbos con idéntico, similar o diferente significado o según distintas
acepciones de un mismo verbo (como se muestra en el punto 1 del
Anexo). Es necesario tener en cuenta que las palabras son portadoras de
información léxico-gramatical y que proyectan determinaciones que
conectan los planos léxico, semántico y morfosintáctico, por lo que esos
aspectos quedarían integrados a la hora de proponer actividades:38
partiendo de la consideración de las propiedades semánticas de los
predicados, se abre la posibilidad de establecer relaciones de interfaz
entre semántica, gramática y léxico; tales como observar la relación entre
argumentos (semánticos) y funciones sintácticas -proyección del léxico en
la sintaxis, exigencias de compatibilidad semántica, diferencias entre
adjuntos y complementos, alternancias entre estructuras posibles-, ver
qué clases de palabras realizan las funciones sintácticas, observar que
otras clases de palabras también tienen estructura argumental, entre
otras posibles reflexiones derivadas. El contenido que se ejemplifica se
basa en conocimientos estabilizados, que deberían formar parte de la
actualización lingüística del docente.
La secuencia didáctica que a continuación se describirá
esquemáticamente39 ha sido elaborada en base a las propuestas de
Camps, Anna y Felipe Zayas (2006) y está planteada como un trabajo de
investigación a pequeña escala organizado en tres momentos, cuyo
objetivo es producir un informe final con la evaluación de los resultados:
No abundan textos escolares que incorporen estas nociones y articulaciones en relación
con la construcción de oraciones.
39
El contenido de la secuencia ha sido elegido en base a las conclusiones obtenidas de
proyectos de investigación previos y de la evaluación de ingresantes a la Universidad y de
alumnos de Nivel Medio, lo que nos ha proporcionado orientación acerca de qué saben los
estudiantes y qué necesitan aprender en el plano gramatical, como parte de su formación
lingüística.
38
94
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enfoque comunicativo, enseñanza de la gramática y formación docente
En un primer momento, el alumno debe enfrentarse a la observación y
análisis de datos aportados por el profesor.40 En este caso se propone el
procesamiento de datos sobre distintos usos de un grupo de verbos
(ejemplificado en el punto 2 del Anexo), para lo cual se fija como criterio
agrupar los distintos usos, según el matiz de diferencia de significado que
los alumnos encuentren dentro del corpus; a la vez que se les pide que
traten de establecer sus argumentos, entendiendo que la oración expresa
un evento en el que los argumentos son los participantes. A partir de este
trabajo, los estudiantes deberán elaborar una hipótesis que prevea los
juicios de los informantes que serán consultados, respecto de si serán
capaces, como hablantes, de percibir las diferencias de significado –más o
menos sutiles- y atribuir un esquema argumental en términos intuitivos.
A partir de allí, cada grupo deberá someter los datos al juicio de
informantes, cuyas características deberán ser pautadas y para quienes
se deberá elaborar un cuestionario o instrumento de indagación sobre su
conocimiento.
En un segundo momento, deberán ponderarse las respuestas
obtenidas, sistematizando las coincidencias y tratando de confrontar los
resultados en función de las hipótesis de partida. En este proceso, es
muy importante valorar los razonamientos gramaticales tanto de los
informantes como de los estudiantes. Se realiza un trabajo en el que se
hace explícito el razonamiento gramatical de los estudiantes y en base al
cual se hacen visibles, para ellos mismos, sus conocimientos sobre la
lengua y su capacidad de reflexión metalingüística; al mismo tiempo que
se genera un espacio de interacción para que, entre pares, cotejen
información y confronten sus argumentos y los de los informantes. Es
decir que, no solo se hace un análisis de la información obtenida en
términos estadísticos o cuantitativos, sino que también se hacen
consideraciones cualitativas.
Posteriormente, se hace la puesta en común de las conclusiones o
generalizaciones alcanzadas, las que, obviamente, tienen una validez
relativa, dado que el universo de encuestados es limitado. Con ellas, cada
grupo elabora su informe final para ser plasmado en formato póster, el
cual permite expresar gráficamente el proceso seguido y además sirve de
guía para la exposición oral del informe. Durante el desarrollo de estas
reflexiones debe sistematizarse con el grupo clase los conocimientos
producidos, lo que implica una tarea de metacognición (Mateos, Mar
2001).
En otros casos los datos pueden ser el producto de una indicación de búsqueda. Inclusive,
dependiendo del grupo de clase y el nivel de desarrollo cognitivo de los alumnos, la tarea de
búsqueda de datos puede incluir la consulta a bases de datos –lo cual debe ser enseñado.
Asimismo, las distintas fases de la tarea de “investigación” pueden complejizarse.
40
Enseñanza de la gramática
95
María E. Llambí de Adra
Por otra parte, cabe destacar que el trabajo realizado lleva a los
estudiantes a la constatación de la variación y a la ponderación del valor
social que tienen las variantes que se registran en el uso, lo cual
contribuye a calibrar el estatuto que puede asignársele a la lengua
estándar y a la normativa en relación con la categorización de errores.41
El tercer momento corresponde al cierre del trabajo, el que puede
organizarse con la modalidad de una “feria de ciencias”, donde los
estudiantes podrán rotarse en el rol de expositores y de público. Los
grupos expondrán oralmente su proceso de investigación y defenderán
sus conclusiones, primero ante sus compañeros, y luego, frente a un
público más amplio, dentro del que estarían incluidos quienes
funcionaron como informantes.
En una segunda etapa –que aquí no se contempla-, debe plantearse
una secuencia en la que el alumno pueda dar cuenta del grado de
dominio del conocimiento gramatical abordado en la secuencia anterior,
para proyectar lo aprendido sobre el uso de la lengua, partiendo esta vez
de los textos (propios y ajenos).
Todo el proceso seguido obliga a reflexionar y a tomar decisiones sobre
aspectos de diversa índole: sobre cómo orientar la reflexión
metalingüística (sistema/uso), cómo desarrollar un trabajo de
investigación, cómo redactar un informe, cómo preparar una exposición
oral, cómo valorar la ayuda de textos normativos o instrumentales, entre
otras cuestiones.
3 Conclusiones
Esta modalidad de trabajo revierte el clásico planteo de resolución de
ejercicios gramaticales, basados en nociones expuestas por el profesor
que el alumno debe aplicar para completar, clasificar o identificar formas
o funciones. Por el contrario, el rol activo que tienen los alumnos en este
tipo de tareas de investigación, además de generarles satisfacción por los
resultados obtenidos, les enseña sobre la responsabilidad de la
producción de conocimiento y la importancia de la interacción para la
construcción de conocimientos, a la vez que alienta su curiosidad sobre el
lenguaje, es decir, tiene un efecto motivacional. Del mismo modo,
promueve la reflexión metacognitiva del estudiante sobre lo que aprendió
y cómo lo aprendió.
Para terminar, cabe aclarar que, al destacar aquí la incidencia de la
buena formación de las oraciones en el plano textual, no se plantea que
Con otros datos, se puede trabajar en la comparación diacrónica de los usos. La lengua es
historia viviente. Parte de la comprensión sobre la dinámica de la lengua implica reconocer la
evolución diacrónica de formas y significados, lo cual está conectado con el abordaje de la
variación y la normativa.
41
96
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Enfoque comunicativo, enseñanza de la gramática y formación docente
la composición de un escrito sea un ensamblaje de oraciones bien
construidas. Así como hay problemas en relación con los textos, que son
incomprensibles si nos mantenemos circunscriptos al plano oracional, lo
mismo sucede si no recurrimos a la gramática para explicar algunos
problemas textuales. Se trata entonces de trabajar en sucesivas
aproximaciones, haciendo patente la interrelación entre contexto de
situación, texto y formas lingüísticas, sin descuidar la focalización de
cada uno de estos aspectos.42
Apéndice
►1
Un verbo como elegir presentará un esquema básico como el siguiente:
ALGUIEN elige ALGO o a ALGUIEN (Juan eligió una mesa / a María). Si se
compara elegir con optar, se observa que, a pesar de tener el mismo
significado, este último verbo selecciona un esquema diferente: ALGUIEN
OPTA POR ALGO o ALGUIEN. El verbo optar permite la construcción de
una oración como Juan optó por ese candidato, pero no, de una como
*Juan optó ese candidato, porque requiere la presencia de un
complemento preposicional encabezado por la preposición “por”. Esto
explica los siguientes contrastes: *Juan optó ese candidato/ Juan eligió
ese candidato; Juan optó por ese candidato / #Juan eligió por ese
candidato (el signo # indica que la interpretación no es pertinente en
relación con el significado aquí considerado).
Puede ocurrir, por otra parte, que un mismo verbo tenga diferentes
significados y seleccione distintos esquemas para cada acepción: En Juan
eligió un delegado, el verbo elegir significa “seleccionar a alguien o algo
entre opciones” y solo requiere como argumento interno “lo que fue
elegido” (= un delegado), pero en “Eligieron a Juan delegado, elegir es
equivalente a “nombrar o designar a una persona por votación para
cubrir alguna función o recibir algún tipo de reconocimiento”, por lo que
requerirá dos argumentos internos “lo elegido” (= a Juan) y “el cargo para
el que fue elegido” (= delegado).
►2
Juan vive todavía.
Juan vive en Neuquén.
Juan vive la vida.
Juan vive una vida de carencias.
Juan vive transgrediendo las reglas / transgresoramente.
De más está decir que esta forma de trabajo requiere del establecimiento de acuerdos
pedagógicos que aseguren la continuidad didáctica y la graduación de complejidad a lo largo
de la escolaridad.
42
Enseñanza de la gramática
97
María E. Llambí de Adra
Juan vive cansado.
Juan vive a sus amigos.
Juan vive (intensamente) el bosque.
Juan vive (intensamente) el bosque cansado.
Juan vive su problema con entereza.
Juan vive al día.
Juan vive cansado todos los días de su vida.
Juan vive todos los días de su vida.
Si, a modo de ejemplo, analizamos el corpus precedente,
observaremos que el significado de “vivir” varía entre las oraciones
propuestas. Se trata de que los alumnos puedan reconocer esas
diferencias. Para guiar al estudiante en dicha tarea, el docente puede
orientar las reflexiones con intervenciones como las siguientes:
Tratá de comparar Juan vive todavía y Juan vive todos los días de su
vida. ¿Cuál es el significado del verbo en cada caso? Luego, hacer lo
mismo con Juan vive todos los días de su vida y Juan vive la vida y con
Juan vive cansado todos los días de su vida y Juan vive todos los días de
su vida.
Compará el significado de “vivir” en Juan vive cansado y Juan vive
transgresoramente.
¿Se pueden hacer modificaciones en las secuencias subrayadas sin
provocar cambio de significado en Juan vive al día (Juan vive a los días //
Juan vive a la noche // Juan vive el día…) o en Juan vive la vida (Juan
vive su existencia // Juan vive la vida loca…)? ¿Por qué?
¿Cuál es la diferencia de significado entre Juan vive el bosque / Juan
vive en el bosque? ¿Qué significado aporta la preposición “en”? ¿Podría
usarse otra preposición, respetando el significado que “vivir” tiene en esta
oración?
¿Por qué puedo decir Juan vive a sus amigos y no Juan vive a sus
plantas / a su perro / a su auto”? ¿Todos los hablantes hacen uso de este
sentido de “vivir”? ¿Cómo podemos saberlo?
¿Las siguientes oraciones te resultan posibles: Juan vive
(intensamente) el bosque cansado // Juan vive (intensamente) el bosque?
¿Podés explicar por qué?
Agrupá las oraciones en las que “vivir” tenga el mismo significado.
Estas reflexiones –entre otras posibles- son el punto de partida para
proponer actividades que conecten los planos léxico, semántico y
gramatical, en relación con la buena formación de las oraciones.
98
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Capítulo 8
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de
Principios y Parámetros de Chomsky
María Rita Guevara
En Guevara, María Rita y Katerinne Giselle Leyton, eds. (2013)
Enseñanza de la gramática.
Mendoza: Editorial FFyL-UNCuyo y SAL. Págs. 99-117.
ISBN 978-950-774-227-9
Disponible en http://ffyl.uncu.edu.ar/spip.php?article3824
Resumen
Es conocida la necesidad de trabajar en una aplicación didáctica de los avances de
la gramática en estas últimas décadas. En el siguiente artículo, nos ocuparemos
de un modelo de análisis sintáctico basado en la Teoría de Principios y Parámetros
de Noam Chomsky. Este modelo propuesto en una primera instancia por el
Licenciado Carrara, Hugo en su libro Una gramática posible I (2004), presenta de
un modo sencillo y claro los conceptos centrales de esta teoría aplicados a la
sintaxis escolar. El aspecto más innovador en este trabajo es la presentación de un
esquema de análisis basado en los mecanismos de selección léxica y sintáctica del
verbo y la saturación de sus requerimientos. El hallazgo, en este sentido, se
encuentra en la posibilidad de rastrear y plantear los mecanismos que, presentes
en la Teoría de Principios y Parámetros, permiten proponer un modelo de análisis
que por su arraigo en la intuición de hablante resulta accesible a individuos en
edad escolar. En nuestra investigación nos detuvimos en los mecanismos de
aplicación de este modelo para revisar sus características sobresalientes al
momento de ser implementado en el aula.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
María Rita Guevara
1 Introducción
Los datos que se presentarán a continuación fueron recogidos de una
selección de actividades desarrolladas por alumnos de 4to. y 5to. año de
la escuela “Hogar Escuela ‘María Benita Arias’” de la ciudad de Río
Cuarto, provincia de Córdoba, durante los años 2009, 2010 y 2011.
En el libro Una gramática posible I (2004) Carrara, Hugo presenta una
propuesta de análisis sintáctico para ser implementado en la escuela
secundaria basado en la Teoría de Principios y Parámetros de Noam
Chomsky. A este material, que en su origen estuvo dirigido a la formación
docente, le siguió la publicación en el año 2005 una serie de manuales
para su utilización en la escuela secundaria que se presentó como la
transposición didáctica de los conceptos centrales desarrollados en Una
gramática posible I para ser implementados en el Ciclo Básico. De esta
serie, para esta investigación, sólo nos referiremos al primero de seis
manuales publicados, El armario de las palabras 1 (Carrara, Hugo 2005)
Nuestra hipótesis de partida es que esta propuesta de análisis
sintáctico que intenta materializar los fundamentos de la Teoría de
Principios y Parámetros de Noam Chomsky propicia la reflexión
gramatical en la escuela, ya que permite comprender los mecanismos de
circulación de información y construcción de la oración desde su génesis.
El trabajo metarreflexivo que requiere implica tomar como punto de
partida los conocimientos que el alumno tiene como hablante competente
de su lengua para que a partir de ellos pueda comprender en mayor
medida los fenómenos que estudia. El estudiante se comportará en esta
labor reflexiva como un pequeño lingüista que desanda las estructuras de
la lengua. Este modo de operar con la lengua le permitirá, entonces,
conocer y dominar su lengua siempre que necesite hacer de ella un
instrumento comunicativo.
En este trabajo nos limitaremos a describir el modelo de análisis
propuesto por Hugo Carrara, el procedimiento de su implementación, al
tiempo que iremos estableciendo los conceptos pertinentes de la tesis
chomskiana que lo sustentan.
2 Desarrollo
En La nueva sintaxis. Teoría de rección y ligamiento (1988) Chomsky,
Noam propone el modelo de la Teoría de Principios y Parámetros
estructurada en los siguientes niveles de representación
100
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
(1)
(A) Léxico
(B) Sintaxis: 1) Componente de la base
2) Componente transformacional
(C) Componente interpretativo:
1) Componente de la FF
2) Componente de la FL
(Modelo extraído de la La nueva sintaxis. Teoría de la rección y el
ligamiento. (1988: 17)
Estos módulos o niveles presentan propiedades que debe cumplir la
oración bien formada.
A) Léxico
El componente léxico tiene una importancia fundamental al momento
de comprender el funcionamiento del modelo. En el léxico se encuentran
los ítems con sus rasgos semánticos y sintácticos y la capacidad de
asignar papeles temáticos. El principio de proyección (que veremos al
avanzar) permite predecir el comportamiento de la oración en todos los
niveles. De este modo, mediante el reconocimiento de estos rasgos es
posible diagramar la estructura que corresponde a la oración en
generación. Los papeles temáticos están inscriptos en el ítem léxico y al
momento de realizar la selección léxica, se establece el diagrama
estructural de la oración que debe ser saturado en la sintaxis. A partir de
estas especificaciones, es posible señalar la centralidad del Léxico en el
diseño del modelo.
La asignación temática se realiza, entonces, sobre sus complementos
subcategorizados (objeto directo) y, de forma composicional, sobre el
sujeto. El sujeto es, en este sentido, el argumento externo del verbo en
tanto no recibe directamente de él su rol temático. Tal y como lo señala
Chomsky en la cita que extraemos, el rol es asignado tanto por el verbo
como por su objeto, composicionalmente, esto justifica que su posición en
el diagrama arbóreo se encuentre en la rama superior, como especificador
del sintagma verbal completo.
B) Sintaxis. Componente de base
Como observamos anteriormente, en el lexicón los ítems se
encuentran asociados a un conjunto de rasgos (roles temáticos) que nos
permiten delinear la arquitectura estructural de la oración en tanto, a
partir de ellos, se establecerá una serie de funciones gramaticales
Enseñanza de la gramática
101
María Rita Guevara
derivadas. La estructura-P se genera a partir de estos roles temáticos que
deben ser saturados por una función gramatical. Así, las estructuras-P
son la representación de esas FFGG que vienen a saturar los espacios
establecidos, las posiciones argumentales, como requerimientos a partir
de la asignación temática del ítem léxico. La saturación de la asignación
temática en una FG sólo se produce sobre las posiciones argumentales, y
para que pueda considerarse una determinada posición como tal, es
requisito indispensable que haya recibido asignación de rol temático.
Entonces, si bien es indispensable que la FG ocupe posiciones
argumentales para configurar la estructura-P, el elemento léxico que
ocupará esa posición no necesariamente es un elemento fonéticamente
realizado, también puede ocupar esta posición un elemento PRO, es decir
nulo.
2.1 Subteorías que conforman el modelo de la TPP
Además de los niveles de representación sobre los que no nos
detendremos aquí (Componente transformacional, FF y FL), esta gramática
se plantea bajo la concepción de que la lengua conforma un módulo de la
mente con una estructura y un funcionamiento específicos. Este módulo
se halla dividido a su vez en submódulos que se ocupan de establecer los
principios en tanto reglas y representaciones de la GU. Los componentes
que describimos más arriba representan un algoritmo, un sistema
computacional, los submódulos son el subsistema que explica el
procesamiento de este algoritmo, el procesamiento que asegura la
generación de las estructuras. Ningún módulo es totalmente
independiente del otro ni totalmente responsable de las características de
una construcción, estos módulos actúan simultáneamente y en
interacción. Esta concepción modular es pertinente en relación con este
programa que busca caracterizar una serie de universales que
constituyen y explican la naturaleza del lenguaje humano. Los
subsistemas que se conforman de este modo se cruzan con los sistemas
de reglas de los componentes descriptos con anterioridad. Estos
submódulos son los siguientes:
I) Teoría de X-Barra
II) Teoría TEMATICA
III) Teoría del CASO
IV) Teoría de LIGAMENTO
V) Teoría de CONTROL
VI) Teoría de los LÍMITES
VII) Teoría de RECCION
Como señalan Múgica, Nora y Zulema Solana (1989: 30), este modelo
se organiza en torno a un conjunto de reglas muy generales y de
102
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
subteorías que actúan como módulos (Rección, Ligamiento, X- Barra,
Control, etc.). Los módulos actúan en algún nivel de representación, la
estructura profunda, la estructura superficial, forma fonética y la forma
lógica.
El eje del modelo es la Rección ya que establece las condiciones para
las relaciones estructurales que se dan en la oración entre núcleos y
complementos.
El
Ligamiento
establece
las
condiciones
de
referencialidad, mientras se encuentren dentro del ámbito de la Rección.
El Caso se subsume a la Rección, de modo que para que un sintagma
nominal tenga realidad fonética debe ser visible para asignación de caso,
este caso lo rige. La Teoría de X- Barra establece las condiciones de
organización de la oración. La Teoría de Roles Temáticos establece las
relaciones semántico- funcionales.
Para representar las interacciones que se producen entre los
diferentes niveles y los subsistemas, Santana Lario, J. (1997) propone el
siguiente esquema:
Figura 1
Desde el Léxico, se establece la información necesaria para poner en
movimiento el sistema computacional. El Principio de Proyección
garantiza que esa información sea satisfecha en todos los niveles de
representación. Este Principio y la relevancia que presenta el Léxico como
punto de partida de todo el sistema resulta el aspecto fundamental para
Enseñanza de la gramática
103
María Rita Guevara
comprender el funcionamiento de todo el mecanismo, por eso le
dedicaremos una reflexión particularizada.
2.1 Teoría Temática
Además de las condiciones formales establecidas por la Teoría X-Barra
a la Estructura-P, la Teoría Temática fija las condiciones semánticas. El
Léxico contiene los ítems léxicos cargados con información referente a los
roles temáticos que asigna o requiere de los constituyentes que lo
complementan en la construcción. Los complementos se fijan a partir de
estos datos en una relación de predicado-argumento.
Para garantizar que estos datos sean satisfechos en la estructura, es
decir que todos los roles sean cubiertos, saturados por una Función
Gramatical (FG) y sólo una, se formula el llamado Criterio Temático (QCriterion) como sigue:
“(…) a todo argumento, se le asignará un solo papel-θ, y todo
papel- θ determinado por las propiedades léxicas de un núcleo se
atribuirá a un solo argumento” (Chomsky, Noam 1988: 19)
Este criterio se basa en el hecho de que si la sintaxis es la proyección
de las propiedades léxicas del núcleo, entonces es necesario que cada
una de esas propiedades sea cubierta por un único argumento que sature
el rol temático asignado.
Estas propiedades léxicas del ítem verbal deben ser saturadas y esta
saturación está regulada por el Criterio- θ. Sin embargo, es necesario
tener en cuenta que estas propiedades, ya inscriptas en el ítem de forma
latente en el Léxico, deben ser saturadas en todos los niveles y para ello
se formula otro principio muy general llamado Principio de Proyección.
Chomsky, Noam (1988) lo enuncia de este modo:
“Las propiedades de asignación-θ de todo elemento léxico deben
estar representadas categorialmente en todos los niveles sintácticos:
en la FL, en las estructura- S y en la estructura- P”
De este modo, el Principio de Proyección es el regulador sintáctico y
semántico de todo el algoritmo, sus consecuencias se despliegan por
todos los niveles del sistema, de ahí su importancia.
Lo que resulta claro es que el Principio de Proyección garantiza que
aquellos elementos asignados temáticamente se mantendrán en todos los
niveles. De este modo, mediante el Principio de Proyección y su
realización es posible predecir la estructura de la oración en todos los
niveles, el sintáctico, el fonológico de la estructura-S.
104
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
Volviendo a la centralidad y la importancia del Léxico como punto de
partida del proceso de derivación, Múgica, Nora y Zulema Solana (1989:
37) señalan que en la concepción de gramática que supone la TPP:
“La teoría con que estamos trabajando (TPP) toma el léxico como
pivote y a partir de él cabe hablar de una selección-s (semántica) y
una selección-c (categorial) (…) De lo que acabamos de decir, se
deduce que la estructura semántica y sintáctica es una proyección
de las propiedades lexicales”
La prioridad que se le atribuye al léxico supone un modo de entender
la gramática. Una gramática que parte de un concepto de léxico que se
deriva en un comportamiento sintáctico, al que se entiende de un modo
también particular. La denominación Teoría léxica ya deja en evidencia
este modo de entender la gramática, una gramática que le da una
centralidad definitoria al componente léxico en relación a los demás
componentes.
A continuación, nos referiremos a la propuesta de Hugo Carrara como
una posible alternativa de implementación didáctica de estos conceptos
centrales de la TPP, con el objetivo de que sea puesto en consideración en
el ámbito de la Didáctica de la gramática.
2.2 Abrir el juego a la posibilidad de una gramática escolar
El punto de partida de la propuesta de Hugo Carrara es, entonces,
una posible aplicación didáctica de los supuestos de la Teoría argumental
y del Principio de Proyección, en tanto sostiene que los requerimientos del
ítem léxico deben saturarse en una función sintáctica en particular. Esa
función sintáctica puede, debido a esto, predecirse a partir de los
requerimientos contenidos en el léxico, ya que forma parte de su
estructura argumental, tal y como explicamos previamente en la primera
parte de este trabajo.
La secuenciación del procedimiento para su enseñanza es la siguiente:
1) RECONOCIMIENTO DE LA ESTRUCTURA ARGUMENTAL DEL
VERBO
2)
RECONOCIMIENTO
DE
CARACTERÍSTICAS
EXIGIDAS POR EL VERBO A SUS COMPLEMENTOS
SEMÁNTICAS
3) ESTABLECIMIENTO DE FUNCIONES SINTÁCTICAS QUE
CORRESPONDEN CON LAS CARACTERÍSTICAS SEMÁNTICAS
SE
4) MARCADO DE LA ORACIÓN
Enseñanza de la gramática
105
María Rita Guevara
2.2.1 Reconocimiento de la estructura argumental del verbo
Esta concepción que da sentido a toda la propuesta está ya presente
en el siguiente fragmento de Una gramática posible (2004: 55),
“El verbo es un elemento articulador que puede mostrar la
articulación de informaciones en el nivel de la oración. Y tiene una
estructura gramatical que todos conocemos, por ser hablantes de
una lengua determinada. Muchas veces, nuestra intuición como
hablantes puede ser más poderosa y profunda que cualquier
manual de gramática. Intentaremos demostrar cómo funciona. En
principio, planteamos que el verbo contiene una cierta
potencialidad de significado que debe ser obligatoriamente
completada por una oración que lo contenga, para que pueda ser
gramatical. Cada verbo que utilizamos contiene lo que podríamos
ver como una serie de casilleros vacíos que se deben llenar para que
la oración en que se encuentra esté bien construida.”
Luego agrega,
“Además, cada verbo acepta toda la información adicional que el
hablante quiera incorporar, aunque no sea obligatoria, para que la
oración sea gramatical.”
Este mismo concepto se presenta en el Armario de las palabras I, en
este caso, por tratarse del Manual de actividades para adolescentes en
edad de la escolaridad secundaria, la explicación es acompañada por la
actividad pertinente para ser ejercitado. (Capítulo 2: “Palabras en su
armario”. Pág. 23)
Para trabajar con estas concepciones, Carrara, Hugo (2004: 23)
propone una serie de ejemplos en un cuadro como el que sigue:
VERBO- JUEGO
PARTICIPANTES
REQUIEREN
QUE
SE
Abrir
Una persona (QUIÉN abre)
Un objeto (QUÉ abre)
Tabla 1
106
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
A partir de este ejemplo y otros similares se les propone a los alumnos
una actividad donde a través de la intuición y el conocimiento de
hablante de su lengua reconstruyen la estructura argumental del verbo.
La actividad se presenta en el marco de una explicación previa sobre la
caracterización del verbo como la clase de palabra que contiene
léxicamente la potencialidad de dirigir el juego que se desarrolla en la
oración. La idea del verbo como juego supone que la oración deberá
contar con determinados elementos obligatorios además de elementos
adicionales que no son indispensables. De acuerdo con esta metáfora, el
verbo en sí mismo dicta los elementos que resultan necesarios para
formar la oración y los elementos que se le adjuntan.
Una vez explicado y ejemplificado este procedimiento, la actividad
tiene el objetivo de afianzar esta caracterización.
En el siguiente cuadro, el alumno debe completar la columna de
participantes. Veamos un caso:
Figura 2
Los errores más frecuentes, como se puede advertir en la imagen
anterior y como señalamos en los casos a continuación, son de dos tipos:
a) Dificultades para reconocer el tercer argumento de verbos triádicos.
Enseñanza de la gramática
107
María Rita Guevara
Figura 3
b) Dificultad para diferenciar complementos de adjuntos
Figura 4
Sin embargo, los errores no son permanentes ni generalizados, son
errores que se presentan en esta primera etapa del aprendizaje del
modelo hasta familiarizarse con el procedimiento.
2.2.2 Reconocimiento de las características semánticas exigidas por
el verbo a sus complementos
Los roles semánticos no son trabajados como tales en la clase con los
alumnos. Carrara, Hugo (2005) propone una actividad en la que el
alumno debe desarmar los rasgos semánticos del argumento seleccionado
para reconocer la pertinencia semántica que los mismos deben tener para
poder saturar los requerimientos del verbo. Es decir, mediante esta
actividad, lo que se pretende es que el alumno reconozca de modo
intuitivo ciertos rasgos que caracterizan a determinados roles temáticos
sin nombrarlos como tales.
(Carrara, Hugo 2005: 115)
El estudiante
El perro
un sándwich
comió
El televisor
un ladrillo
un trozo de pan
Las flechas en este cuadro nos muestran qué selecciones puede hacer
el verbo, y cuáles no, de todas las que aparecen. Podemos formular, a
partir de las posibilidades ofrecidas, algunas oraciones gramaticales
(bien construidas):
un sándwich.
El estudiante comió
un trozo de pan.”
108
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
En la siguiente actividad los alumnos deben reconocer estos rasgos
semánticos.
Figura 5
Figura 6
En la imagen es posible ver cómo el alumno indica las características
semánticas del complemento, en la imagen, guiándose por los rasgos
Enseñanza de la gramática
109
María Rita Guevara
semánticos que intuitivamente reconoce en el complemento, señala
cuáles son los complementos admitidos.
2.2.3 Establecimiento de las funciones sintácticas
corresponden con las características semánticas
que
se
A partir de esta actividad es posible establecer las funciones
sintácticas que se vinculan con los requerimientos semánticos. Como
vimos más arriba, las posiciones temáticas abiertas para cubrir los
requerimientos del verbo deben ser llenadas, saturadas, por una función
sintáctica. Regulada por el Criterio Temático, que garantiza que la
relación argumento-papel temático sea de uno a uno, y el Principio de
proyección que asegura que las posiciones abiertas por los
requerimientos verbales sean cubiertas en todos los niveles. En la
siguiente actividad se trabaja sobre la proyección de argumentos.
Figura 7
Como es posible observar, el alumno desarma los rasgos semánticos
de los argumentos y señala la función sintáctica en la que esos
argumentos se saturan. Una vez asignada la FG, el argumento deviene en
complemento sintáctico.
110
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
Figura 8
Este cuadro es una síntesis del análisis realizado hasta aquí. Los
datos que el alumno extrae en los pasos anteriores se ubican de este
modo. Pese a que este cuadro puede resultar un procedimiento engorroso
y superficialmente innecesario, es el punto que se distingue en la
propuesta. Como veremos al avanzar, el marcado de la oración se
mantiene similar a lo que tradicionalmente se viene haciendo en sintaxis
escolar, la verdadera novedad de este modelo se encuentra en este
cuadro.
El primer punto que no debe olvidarse es que el cuadro se debe
confeccionar antes de marcar la oración en el texto. El procedimiento,
entonces, consiste en extraer de la oración el verbo principal y analizar
sus requerimientos léxicos en el orden que se propone en el cuadro. Las
cuatro primeras columnas se confeccionan sin observar la oración (la
oración se consulta para completar la última columna). Es importante
que el alumno se acostumbre a no mirar la oración hasta completar estas
primeras columnas, ya que la estructura argumental debe elaborarse a
partir de la intuición de hablante, este hecho garantiza que el alumno
anticipe las funciones sintácticas que marcará en la oración
posteriormente. En este aspecto es donde halla su justificación el modelo,
la problemática que se presenta en el análisis sintáctico tradicional (como
el propuesto por la Gramática Estructural actualmente utilizado en las
escuelas) es el hecho de que los constituyentes de la oración deben
reconocerse sin una reflexión sobre la naturaleza semántica de los
mismos que motiva y da sentido a la función sintáctica que está
cumpliendo. El reconocimiento se realiza ateniéndose a las características
formales del constituyente y a una serie de pruebas también formales
sostenidas en los rasgos morfológicos y sintácticos. El resultado de este
tipo de reconocimientos (un reconocimiento que sólo tiene como finalidad
la descripción estructural de la oración) es la mecanización de una serie
de pruebas que no se comprenden tampoco como propiedades de la
lengua sino como un mecanismo rígido que se aplica de la misma forma a
los constituyentes esperando que se acomoden a una estructura. Este
tipo de análisis conlleva, principalmente en los alumnos de la escuela
primaria y secundaria, que no se produzca una verdadera comprensión
Enseñanza de la gramática
111
María Rita Guevara
de las estructuras, de los procesos que le dieron lugar y, a partir de ello,
de las características intrínsecas del funcionamiento de la lengua.
2.2.4 Marcación de la oración en el texto
El procedimiento, entonces, implica partir de los requerimientos
semánticos y sintácticos del ítem verbal, para anticipar la estructura de
la oración. Si la oración es gramatical, esos requerimientos estarán
satisfechos, de una o de otra manera (esto implica que no siempre los
complementos están presentes físicamente en la superficie de la oración,
como sucede con las categorías vacías mediante sujeto pro y los
elementos pronominales). La predicción que desde el verbo es posible
realizar sobre la estructura de la oración reduce el trabajo de
reconocimiento a un rastreo del constituyente que mejor responde a esos
requerimientos. La última columna del cuadro, que no es indispensable
para el funcionamiento del modelo pero que establece el vínculo de la
estructura argumental que se esboza en las demás columnas y su
realización en la oración, será una guía para rastrear las funciones en la
oración y señalarlas.
La siguiente imagen corresponde a un texto ya marcado y resuelto.
Figura 9
112
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
Debemos recordar que el cuadro se debe completar primero, luego se
marca la oración. Si esto no se hace en este orden, el cuadro no tiene
sentido ni razón de ser porque el alumno no habrá realizado la reflexión
que supone la reconstrucción de los requerimientos léxicos del verbo.
Es posible señalar, a partir de aquí, los pasos que conlleva el
procedimiento:
I) Para comenzar el análisis de una oración se extrae el verbo
II) Se coloca el verbo en infinitivo en la primera columna del cuadro
III) Para completar todas las columnas, excepto la última, no se debe consultar
la oración: garantiza dos cosas= a) los requerimientos se extraen del contenido
léxico (no de la oración); b) se logra una verdadera predicción de la estructura
oracional.
IV) En última instancia se realiza la marcación de los datos que han quedado
señalados en la última columna.
La tercera columna es opcional, incluso al avanzar el análisis se
prescinde de este análisis ya que no colabora en la identificación de las
funciones sintácticas.
En el caso de los sujetos que se encuentran tácitos, el alumno
comprende que ese participante es un argumento que debe ser saturado
de algún modo, por ello, en la última columna del cuadro completa con la
forma correspondiente pero aclara que esa forma no está presente en la
superficie de la oración señalándolo con la etiqueta ST (sujeto tácito).
Otro aspecto que se destaca en este texto es el caso del verbo quedar en
la oración, “Después, quedó muy quieto”. Se observa que el alumno
reconoce el predicativo como argumento pero como no conoce la función
sintáctica lo señala como modo, su caracterización semántica. De esta
manera, reconoce el argumento por intuición de hablante, pero no conoce
la función sintáctica que representa la categoría convencionalizada, la
etiqueta que la distingue de otras funciones (aclaramos que el predicativo
y todas sus variantes son un tema posterior que se presenta al grupo
luego de fijado el modelo de análisis, por ello se le permite a los alumnos
que analicen de esta forma hasta que profundicen en estas funciones).
Una vez que el cuadro está completo y se ha marcado la información
obligatoria en la oración, pueden quedar constituyentes que no formen
parte de esos argumentos. Estos constituyentes no son obligatorios, por
esa razón no están incluidos en el cuadro, son adjuntos verbales. Los
adjuntos, tal como dijimos más arriba, son constituyentes que el verbo
admite al momento de completar contextualmente la oración, pero que no
los requiere para mantener su gramaticalidad. Esta es la razón por la que
no aparecen en el cuadro, ya que podemos construir una oración
perfectamente gramatical, en tanto completa y bien formada
sintácticamente, sin la presencia de adjuntos. Sin embargo, los adjuntos
cumplen diversas funciones, especialmente en tanto factor semánticoEnseñanza de la gramática
113
María Rita Guevara
comunicacional, ya que completan la información que transmite la
oración.
En el análisis de la oración “Suspira de nuevo” observamos el
constituyente de nuevo que no resulta indispensable para mantener la
gramaticalidad de la oración y que no aparece en el cuadro de
argumentos pero que está en la oración con una función semántica
fundamental, por ello decimos que no deja de ser importante pero sin
lugar a dudas para la gramaticalidad de la oración es prescindible y será
un dato que en otra oración podría no estar, mientras que en el caso de
que fuera un argumento debería estar presente siempre que se use este
verbo. Estos adjuntos son señalados por el alumno posteriormente a la
marcación de los constituyentes argumentales.
2.3 Ventajas del modelo
A partir de afianzar el procedimiento es posible comenzar a incorporar
algunas complejidades de los mecanismos lingüísticos e intentar
resolverlos con la aplicación de este modelo. Una vez que el alumno ha
incorporado los pasos y puede aplicarlos a textos con estructuras
sencillas como el anterior es posible proponerle estructuras más
complejas como oraciones con predicados compuestos por más de un
verbo, oraciones compuestas.
Incluso, es posible tratar diversos fenómenos que suelen considerarse
dificultoso al momento de aplicar un análisis tradicional. En el caso de
las oraciones compuestas, el aspecto que le permitirá diferenciar entre un
predicado compuesto con varios verbos como centro y una oración
compuesta es la línea de los sujetos. La reflexión que ellos tendrán que
hacer es que el sujeto de las oraciones simples con más de un verbo será
en todos los casos el mismo, aun cuando cambien los demás argumentos.
Por el contrario, los sujetos de las oraciones compuestas serán diferentes,
cada suboración tendrá su propio sujeto independiente.
Debemos destacar que las oraciones con las que se trabaja forman
parte de un texto, y analizar un texto completo presenta algunas ventajas
y muchas dificultades, principalmente para el análisis tradicional
utilizado hasta aquí para la enseñanza de la sintaxis en la escuela.
Generalmente, se utilizaban oraciones de laboratorio para evitar
complejidades propias de la gramática textual que desde un modelo
estrictamente oracional no se pueden resolver. Algunos contenidos que
eran exclusivos de la gramática textual vienen a completar y enriquecer la
gramática de la oración y viceversa. Veamos algunos casos en particular.
La pronominalización ha sido trabajada en la clase de lengua como
fenómeno de cohesión. Podemos proponer un ejemplo (entre otros tantos)
en el que la cohesión explica el uso del pronombre y la estructura
114
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
argumental explica la presencia del pronombre con una determinada
referencia anafórica. Por ejemplo, en la oración, “Arrancaba con cierta
dificultad las cáscaras de hierro y las tiraba al mar”, el pronombre ‘las’
toma la referencia las cáscaras de hierro. Este pronombre es utilizado
como prueba de reconocimiento por considerarse un remplazo del
objeto directo. Para la gramática del texto este pronombre deja de ser el
simple remplazo de una función sintáctica para convertirse en un
elemento fundamental para reconstruir el recorrido comunicativo del
texto. Lo interesante de esto es que pese a que ambas características y
puntos de vista sobre el pronombre son importantes y son tales, no se
han vinculado al momento de enseñarlo en la clase de lengua,
generalmente se trabajan por separado como contenidos aislados. En el
cuadro podemos observar el análisis del verbo tirar. Las informaciones
que requiere para formar una oración gramatical corresponden al
argumento ¿quién? que se expresa como sujeto y al argumento ¿qué?
correspondiente al objeto directo. Sabemos que estos elementos son
obligatorios porque sencillamente no sería posible que se produjera el
evento de tirar si no hay alguien que tire y que esa persona tire algo.
Entonces, esos lugares argumentales deben ser saturados en todos los
niveles, por lo tanto debemos tenerlos presenten de algún modo en la
oración resultante. La respuesta es sencilla y la obtenemos de la
cohesión textual: el elemento argumental que se debe llenar con un
objeto directo corresponde a las cáscaras de hierro pero si esta frase
aparece nuevamente en la oración para completar el objeto directo del
verbo tirar se produciría una repetición sancionada por la cohesión,
entonces, el pronombre permite saturar el requerimiento verbal sin
incurrir en un error de cohesión. Mediante esta reflexión podemos
observar que la gramática textual y sus conceptos permiten enriquecer y
entender mejor la gramática oracional.
Así como es posible hacer interactuar la gramática del texto con la
gramática oracional en lo referido a los pronombres, también es posible
alcanzar algunas explicaciones más acabadas de otros fenómenos como
son las del sujeto tácito o elipsis de sujeto y el uso de conectores. En
el caso de la elipsis resulta mucho más sencilla de comprender para el
alumno si se la asocia con el sujeto tácito.
Otro fenómeno oracional que resulta dificultoso al momento del
análisis sintáctico es la presencia de oraciones subordinadas. Veamos
un ejemplo.
El fragmento a continuación pertenece a una oración coordinada que
en una de las suboraciones presenta una subordinada interna al objeto
directo (la empuñadura que la espera). El análisis que hace del verbo
apretar en el cuadro le permite extraer sus argumentos (ver cuadro), el
Enseñanza de la gramática
115
María Rita Guevara
alumno reconoce en la respuesta a la pregunta ¿qué aprieta? un
constituyente con la subordinada en su interior.
Figura 10
Figura 11
3 Conclusión
El modelo de análisis sintáctico que describimos en este trabajo es
una posibilidad interesante en tanto se apropia de los conceptos
centrales de esta teoría y a partir de ellos desarrolla el procedimiento de
análisis. Los puntos claves que se valorizan son, entre otros, los
siguientes:
1) Se basa en los conceptos nucleares de la Teoría de Principios y Parámetros,
una teoría que marcó un antes y un después en la teoría lingüística.
2) Tiene un sustento epistemológico basado en la concepción de que existe
una gramática universal que el individuo adquiere genéticamente, el modelo
propone que el alumno tome como punto de partida una serie de
conocimientos intuitivos de la lengua, lo que ya sabe, para sistematizarlo y
hacerlo explícito alcanzando la reflexión metalingüística.
3) El alumno analiza la oración operando como un pequeño lingüista que
reconstruye reflexivamente la estructura de la lengua.
4) El trabajo metarreflexivo conlleva un grado de comprensión del fenómeno
que garantiza un mayor aprendizaje. Las habilidades desarrolladas con el
manejo de este modelo suponen acercar al alumno a la posibilidad de dominar
y manejar mejor su lengua.
A partir de todo lo analizado hasta aquí es posible concluir que el
modelo presentado en este trabajo se caracteriza por dos aspectos:
116
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Hacia una gramática didáctica basada en la Teoría de Principios y Parámetros
1) Un alto rigor científico que implica la posibilidad de trabajar sobre
fenómenos lingüísticos muy complejos con un esfuerzo intelectual medido.
2) El trabajo metarreflexivo que requiere este análisis sintáctico, implica que
el alumno reflexione sobre el proceso que está realizando y las estructuras
lingüísticas que está utilizando.
Por destacar algunas ventajas, podemos nombrar que el concepto de
análisis sintáctico de este modelo supone manejarse con una concepción
amplia en tanto parte de la semántica para derivar la sintaxis. Es un
modelo que se centra en el reconocimiento de ambigüedades, de
estructuras gramaticales y agramaticales, como punto de partida para
visualizar las construcciones y su funcionamiento en la oración. Y, por
último, el análisis con este modelo compromete procedimientos de
reflexión, lo que implica un ejercicio intelectual constante basado en la
argumentación.
Entre otras, estas razones resultan suficientes para poner en
consideración este modelo, en tanto una posibilidad de aplicación de un
marco teórico muy rico pero hasta aquí poco trabajado por la Didáctica.
Esperamos que este trabajo puede generar la curiosidad necesaria en
quienes se interesan por una enseñanza de la lengua con objetivos más
ambiciosos.
Enseñanza de la gramática
117
Referencias
Albano, Hilda y Mabel Giammatteo (2004) “Según pasan los años”. En: Revista de
la Sociedad Argentina de Lingüística Volumen 1, mayo: 133-147.
Alvarado, Maite, coord. (2001) Entre líneas. Buenos Aires: FLACSO-Manantial.
Alvarado, Maite, coord. (2004) Problemas de la enseñanza de la lengua y la
literatura. Buenos Aires: Universidad Nacional de Quilmes.
Alvarado, Maite y Adriana Silvestri (2004) La lectura y la escritura. Alvarado, Maite,
cord. (2004: 11-44).
Ammar, Jorge J. (2005) Leyendas Mendocinas: p. 16.
Arias, Ana [et. al.] (2010) Prácticas del Lenguaje II. Buenos Aires: Aique.
Bassano, Marcela y María S. Freidenberg, (2007) “Puntuación y gramática”. En:
Primeras Jornadas de Lectura y Escritura. San Miguel de Tucumán,
Argentina: Unesco. Disponible en http://www.filo.unt.edu.ar/jorn_unesco/cd.
Bassano, Marcela (2010) “Algunas cuestiones a tener en cuenta para la
determinación de una agenda en la enseñanza del español como L1”.
Enseñanza del Español como L1, de las Segundas Jornadas Internacionales
de Adquisición y Enseñanza del Español como Primera y Segunda Lengua,
Rosario, Argentina.
Bello, Andrés (1847) Gramática de la lengua castellana. Madrid: Arco, 1988.
Bixio, Beatriz (2003) “Pasos hacia una Didáctica sociocultural de la Lengua y la
Literatura: Sociolingüística y educación, un campo tensionado”. Lulú
Coquette. Revista de Didáctica de la Lengua y la Literatura. Barcelona:
Octaedro, año I, Nro. 2, noviembre: 24-35.
Blanche Benveniste, Claire (2002) La escritura, irreductible a un ‘código’. Ferreiro,
Emilia (comp.) (2002: 15- 30).
Borges, Jorge L. (1944) “Funes el memorioso” En: Ficciones. Buenos Aires: Emecé.
Ed. 2005: p. 165.
Bosque, Ignacio. (1994) “La enseñanza de la gramática”. En Actas IV, ASELE.
Bosque, Ignacio y Violeta Demonte (1999) Gramática descriptiva de la lengua
española. Madrid: Espasa Calpe.
Bosque, Ignacio (2001) “Reflexiones sobre las formas de entender la gramática”.
En: Homenaje a Ofelia Kovacci, Buenos Aires.
Bosque, Ignacio (2001) “On the weight of light predicates”. En: Herschenson, J.,
Zagona, K. y Mallén, E. (Eds.). Features and interfaces in Romance.
Amsterdam: John Benjamins.
Bourdieu, Pierre (2001) ¿Qué significa hablar? Economía de los intercambios
lingüísticos. Madrid: Akal.
Bronckart, Jean P. y Bernard Schneuwly (1991) “La didáctica de la lengua
materna: el nacimiento de una utopía indispensable” En: Textos. Barcelona,
Graó, año III, Nro. 9, julio de 1996.
Bronckart, Jean P. (1997/ 2004) “Actividad verbal, textos y discursos. Por un
interaccionismo
socio-discursivo”.
Paris: Delachaux et Niestlé, Madrid: Infancia & Aprendizaje.
Bronckart, Jean P. (2002) "Entrevista para D. Riestra". Propuestas, 7, Universidad
Nacional de Rosario, Argentina, 7-18.
Bronckart, Jean P. (2004) Actividad verbal, textos y discursos. Por un
interaccionismo socio-discursivo. Madrid: Fundación Infancia y Aprendizaje.
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
Referencias
Bronckart, Jean P. (2007) Desarrollo del lenguaje y didáctica de las lenguas.
Buenos Aires: Miño y Dávila editores.
Brucart, José M. (1999) La estructura del sintagma nominal: las oraciones de
relativo. Bosque, Ignacio y Violeta Demonte (1999, vol. 1: 395-522).
Campos, Héctor (2000) “Transitividad e intransitividad”. Bosque I. y V. Demonte
(dirs.) Vol.2.
Camps, Anna, Oriol Guasch, Marta Milian y Teresa Ribas (2001) “L'écrit dans
l'oral: le texte proposé”. En Bouchard, Robert et al (2001: 293-310) Le
processus rédactionel. Écrire à plusieurs voix. París: L'Harmattan.
Camps, Anna coord. (2006) Diálogo e investigación en las aulas. Investigaciones en
Didáctica de la Lengua. Barcelona: Graó.
Camps, Anna y Felipe Zayas (coords.) (2006) Secuencias didácticas para aprender
gramática. Barcelona, Graó.
Carrara, Hugo (2004) Una Gramática Posible. Tomo 1. Publicación del Instituto
Superior Particular Incorporado Nº 4013 “Padre Joaquín Bonaldo”.
Avellaneda. Sta. Fe.
Carrara, Hugo (2005) El armario de las palabras 1y 2. Reconquista, Santa Fe:
Soles Ediciones.
Casávola, Horacio y otros (1984) “El rol constructivo de los errores en la
adquisición de conocimientos…”. En: Castorina, J. y otros: Psicología
Genética, Buenos Aires, Miño y Dávila, pp. 43-61.
Cassany, Daniel (1987/1997) Describir el escribir. Cómo se aprende a escribir.
Buenos Aires: Paidós.
Centro de Investigaciones Lingüísticas (2000) “Lingüística en el aula”. Número 4.
Epa… ¿Y la gramática? Córdoba: Comunicarte Editorial.
Chevallard, I. (1995) La Transposición Didáctica. Buenos Aires: Aique.
Chomsky, Noam (1970) Aspectos de la Teoría de la Sintaxis. Madrid: Aguilar.
Chomsky, Noam (1988) El lenguaje y los problemas de conocimiento. Madrid: Visor.
Chomsky, Noam (1988) La nueva sintaxis. Teoría de la rección y el ligamiento.
Barcelona: Ediciones Paidós.
Chomsky, Noam (1990) Barreras. Barcelona: Paidós Comunicaciones.
Chomsky, Noam (1992) El lenguaje y el entendimiento. Barcelona: Planeta Agostini.
Chomsky, Noam (2007) Sintáctica y Semántica en la Gramática Generativa. 8va.
Edición. Madrid: Siglo XXI editores.
Coseriu, Eugenio (1991) El hombre y su lenguaje. Madrid: Gredos.
Coseriu, Eugenio (1999) Lecciones de lingüística general. Madrid: Gredos.
Cots, Josep M. y Lucila Nussbaum eds. (2002) Pensar lo dicho. La reflexión sobre la
lengua y la comunicación en el aprendizaje de lenguas. Lleida: Milenio.
D’Agostino, Mariana [et. al.] (2007) Lengua. Prácticas del Lenguaje II. Buenos Aires:
Santillana.
De Tezanos, Araceli (2003). “El camino de la profesionalización docente: Formación
inicial y perfeccionamiento en servicio”. En: Revista Prelac, Proyecto Regional
de Educación para UNESCO/UMCE/MINEDUC. Santiago, Chile.
Demonte, Violeta (2000) “Gramática, variación y norma: Una tipología”. En
Estudios Hispánicos (Revista de la Sociedad Coreana de Hispanistas), 17:12,
3-49.
Demonte, Violeta (2001) “El español estándar (ab) suelto. Algunos ejemplos del
léxico y la gramática”. En: II Congreso Internacional de la Lengua Española.
RAE / Instituto Cervantes. Publicado en www.cervantes.es/Congreso
Internacional/Ponencias.
120
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Referencias
Demonte, Violeta (2001) “Micro variación sintáctica en español…”. En: Álvarez, M.
y otros (eds.). Texto, Lingüística y Cultura. Actas de XIV Congreso de la
Sociedad Chilena de Lingüística, Osorno, Editorial Universitaria de Los Lagos,
pp. 9-40.
Demonte, Violeta (2003) “La esquiva norma del español. Sus fusiones y relaciones
con la variación y el estándar”. En Simposio “Variación e Prescripción”,
Instituto da Lingua galega, Universidad de Santiago de Compostela.
Desinano, Norma y Fernando Avendaño (2006) Didáctica de las Ciencias del
Lenguaje, Rosario: Homo Sapiens.
Di Tullio, Ángela L. (2000) “El error gramatical y su pertinencia pedagógica”. En:
Temas actuales en Didáctica de la Lengua, Rosario: Laborde.
Di Tullio, Ángela L. (2001) “El análisis de errores en la enseñanza de la lengua
materna”. En Segundas Jornadas de Lingüística Aplicada a la Enseñanza de
la Lengua. San Carlos de Bariloche: UNCo.
Di Tullio, Ángela L. (2005) Informe final Proyecto de Investigación “Gramática,
léxico y error”, Neuquén, UNCo, inédito.
DI Tullio, Ángela L. (2007) Manual de Gramática del Español. Buenos Aires: La isla
de la luna.
Díaz Barriga, F. y M. Rigo (2000) "Formación docente y educación basada en
competencias", en M. A. Valle: Formación en competencias y certificación
profesional. México: Universidad Nacional Autónoma de México, pp.76-104.
Dolz Joaquim y Erard Serge (2000) “Las actividades metaverbales en la enseñanza
de los géneros escritos y orales”. En Marta Milian y Anna Camps (2000).
Echeverría, Max (1978) Desarrollo de la comprensión infantil de la sintaxis
española. Chile: Universidad de Concepción.
Eguren, Luis y Olga Fernández Soriano (2004) Introducción a una sintaxis
minimista. Madrid: Gredos.
Fábregas Alfaro, Antonio (2005) “La definición de la categoría gramatical en una
morfología orientada sintácticamente: el caso de los nombres y de los
adjetivos”. Tesis doctoral presentada en la Un. Autónoma de Madrid.
Fernández Lagunilla, Marina y Alberto Anula Rebollo (1995) Sintaxis y cognición.
Introducción al conocimiento, el procesamiento y los déficit sintácticos. Madrid:
Síntesis.
Ferreiro, Emilia, comp. (2002) Relaciones de (in)dependencia entre oralidad y
escritura. Madrid: Gedisa.
Frías Conde, Xavier (2001) “Introducción a la semántica de la oración del español”
en Ianua. Revista Philologica Romanica. Suplemento 03.
Gallardo, Andrés (1978) “Hacia una teoría del idioma estándar”. RLA Revista de
Lingüística Teórica y Aplicada. 16: 87-119.
Gee, James P. (2008) “Social Linguistics and literacies”. New York: Routledge.
Gimeno, Menéndez F. (1990) Dialectología y Sociolingüística españolas. Universidad
de Alicante, Espagrafic.
Giammatteo Mabel e Hilda Albano (2009) ¿Cómo se clasifican las palabras? Buenos
Aires: Biblos.
Giammatteo, Mabel e Hilda Albano (coords.) (2009) Lengua, léxico, gramática y
texto. Buenos Aires: Editorial Biblos.
Hurtado, Alfredo (1982) “Teoría lingüística y adquisición del lenguaje”. México:
SEP, OEA. (1984) Estructuras tardías en el lenguaje infantil. México: SEP,
OEA.
Enseñanza de la gramática
121
Referencias
Indart, María I. [et. al.] (2010) Lengua. Prácticas del Lenguaje I. Buenos Aires:
Estación Mandioca.
Indart, María I. [et. al.] (2011) Lengua. Prácticas del Lenguaje II. Buenos Aires:
Estación Mandioca.
Jakobson, Roman (1967) "Dos aspectos del lenguaje y dos tipos de trastornos
afásicos". En: Jakobson, Roman y Morris Halle (1967) Fundamentos del
lenguaje. Madrid: Ciencia Nueva.
Jobert G. (2001) “Travailler, est-ce penser ? De l'action intelligente à l'intelligence
de l'action”. In F. Hubault (Ed.), Affirmer que travailler c'est penser, Toulouse,
Octarès.
Jolibert, Josette (1986a) Formar niños lectores de textos. Buenos Aires: Hachette.
Jolibert, Josette (1986b) Formar niños productores de textos. Buenos Aires.:
Hachette.
Karmiloff Smith, Annette y otros (1994) Más allá de la modularidad: La ciencia
cognitiva desde la perspectiva del desarrollo. Madrid: Alianza Editorial.
Lagunilla Fernández, Marina y Alberto Anula Rebollo (1995) Sintaxis y cognición:
introducción al conocimiento, el procesamiento y los déficits sintácticos. Madrid:
Síntesis.
Lara, Luis F. (2002) “La escritura como tradición y como instrumento de reflexión”.
En Ferreiro, Emilia (comp.) (2002: 53 -61).
Leona, Pablo [et. al.] (2002) Lengua 9. Buenos Aires: Longseller.
Lope Blanch, Juan M. (1984) Despronominalización de los relativos. Hispanic
Linguistics, I. 257-272.
López García, Ángel (2000) “Relaciones paratácticas e hipotácticas”. En I. Bosque I.
y V. Demonte (dirs.) Vol.3.
López Morales, Humberto (2004) Sociolingüística. Madrid: Gredos.
Mateos, Mar (2001) Meta cognición y educación. Buenos Aires: Aique.
Mendikoetxea, Amaya (2000), Construcciones con se: medias, pasivas e
impersonales en Bosque I. y V. Demonte (dirs.) Vol.2.
Mendikoetxea, A. (2000) “Construcciones con se: medias, pasivas e impersonales”
en Bosque I. y V. Demonte (dirs.) Vol.2.
Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la República Argentina (2006)
“Núcleos de Aprendizajes Prioritarios (N.A.P.)” Tercer ciclo EGB / Nivel Medio –
Lengua. Buenos Aires.
Ministerio de Educación de Santa Fe (1999) “Diseño Curricular Jurisdiccional”,
Tercer ciclo EGB – Lengua y Lengua Extranjera.
Milian, Marta y Anna Camps, ed. (2000) El papel de la actividad metalingüística en
el aprendizaje de la escritura. Rosario: Homo Sapiens.
Milian, Marta y Camps, Anna (2006) El razonamiento metalingüístico en el marco de
secuencias didácticas de gramática (SDG). En Camps, Anna coord. (2006:2553).
Mónaco, Fabián (2006) “Enseñanza gramatical y análisis crítico del discurso. Una
perspectiva integradora para abordar los textos en la escuela”. En Lengua y
Literatura. Prácticas de enseñanza, perspectivas y propuestas, Santa Fe:
Universidad Nacional del Litoral.
Múgica, Nora y Zulema Solana (1989) La Gramática Modular. Buenos Aires:
Hachette.
Múgica, Nora (1999) “Acerca de la relación entre las categorías V y N: herencia
argumental y herencia eventiva”. Revista de Letras N° 6. Facultad de
Humanidades y Artes UNR. UNR Editora. Rosario, Argentina.
122
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Referencias
Múgica, Nora y Zulema Solana (1999) Gramática y léxico. Teoría lingüística y Teoría
de adquisición del lenguaje. Buenos Aires: Edicial.
Múgica, Nora (2004) Léxico. Cuestiones de forma y de significado. Rosario:
Juglaría.
Múgica, Nora (comp.) (2006). Estudios del Lenguaje y enseñanza de la Lengua.
Rosario: Homo Sapiens ediciones.
Narvaja de Arnoux, Elvira (2008) “Los discursos sobre la nación y el lenguaje en la
formación del Estado (Chile, 1842-1862)”. Estudio glotopolítico. Buenos Aires:
Santiago Arcos Editor.
Ong, Walter J. (1993) Oralidad y escritura. Tecnologías de la palabra. Buenos
Aires: Fondo de Cultura Económica.
Otañi, Laiza y María del Pilar Gaspar (2001) “Sobre la gramática”. En Alvarado,
Maite, coord. (2001: 75-111).
Otañi, Laiza y María del Pilar Gaspar, (2001) “Sobre la gramática”. En: Alvarado,
Maite. (Comp.) Entre líneas. Teorías y enfoques en la enseñanza de la
escritura, la gramática y la literatura. Buenos Aires: Flacso/ Manantial.
Otañi, Laiza y María del Pilar Gaspar (2004) “La gramática”. En Alvarado, Maite,
coord. (2004: 71-99).
Otañi, Laiza (2008) “Una gramática reflexiva y contextualizada”. En: Limen, 8: pp.
22 a 25.
Palillo, Silvina (2012) “Sobre la organización de la frase: estructura argumental y
distribución de la información - Parte I. Acerca de los argumentos en la
frase”. Publicación para el Programa de Alfabetización y Escritura Académica
(Coord. Liliana Pérez y Patricia Rogieri). Facultad de Humanidades y Artes.
Universidad Nacional de Rosario. (En prensa).
Peñalver Castillo, Manuel (1991) La lingüística y la enseñanza de la lengua
española en el bachillerato, Granada: Comares.
Pérez, Liliana y Patricia Rogieri (2007) “La gramática en la escuela. Criterios de
decisión para su enseñanza”. En: Anales de la educación común. Tercer siglo.
Año 3. Número 6. Educación y Lenguajes. Publicación de la Dirección General
de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires. Dirección Provincial
de Planeamiento. Versión digital del artículo publicado en pp. 108 a 113 de la
edición en papel.
Pujalte, Mercedes (2011) Apuntes de cátedra del seminario de posgrado Teoría
léxica dictado en la Universidad Nacional del Comahue en el marco de la
Maestría en Lingüística.
Rae (1928) Gramática de la lengua española. Madrid: Hernando. [RAE 1928 en el
texto]
Rae (2001) Diccionario de la lengua española. Buenos Aires: Espasa Calpe, Tomo 2.
(2009), Nueva gramática de la lengua española. Madrid: Espasa, Vol. I, 1ra.
parte, 10-78.
Rae (2010) Nueva gramática de la lengua española. Buenos Aires: Espasa.
Rébola, María C: y María C: Stroppa (ed.) (2000) Temas actuales en didáctica de la
lengua. Rosario: Laborde Editor.
Ribas, Teresa; Marta Milian, Oriol Guasch y Anna Camps (2002) “La composición
escrita como objeto de reflexión”. En: Cots, Josep M. y Lucila Nussbaum eds
(2002: pp. 167-184)
Riestra, Dora M. (2002/ 2007) Entrevista a J.-P. Bronckart, Propuestas, CELA
UNR.
Enseñanza de la gramática
123
Referencias
Riestra, Dora M. (2004) Thèse de Doctorat. FPE 328. Las consignas de trabajo en el
espacio socio-discursivo de la enseñanza de la lengua. Genève, Université de
Genève. http://www.unige.ch/cyberdocuments/theses.
Riestra, Dora M. (2005) “Didáctica de la lengua. Acerca de las dificultades de la
práctica: la enseñanza de las nociones gramaticales. Un enfoque históricocultural”. Propuestas 10. CELA. Facultad de Humanidades, Universidad
Nacional de Rosario
Riestra, Dora M. (2008) Las Consignas De La Enseñanza De La Lengua. Un Análisis
Desde El Interaccionismo Socio-discursivo. Buenos Aires: Miño Y Dávila.
Riestra, Dora M. (2008) Las consignas de enseñanza de la lengua. Un análisis
desde el interaccionismo socio-discursivo. Buenos Aires: Miño y Dávila.
Riestra, Dora M. (2009) “Problemas de la Formación Docente: revisitar las
gramáticas de las lenguas en los textos”. I Congreso Internacional de
Interacción Comunicativa y enseñanza de las lenguas. Universidad de
Valencia.
Riestra, Fernández, Antista y otros (2009) “La formación Docente inicial: ¿Cómo
construimos el saber didáctico en la enseñanza de la lengua primera?” Del
IFDC Bariloche (Proyecto convocatoria INFOD 2009). Bariloche, Argentina:
IFDC Bariloche
Riestra, Dora M. (2010) Conferencia El campo de la didáctica de la lengua: el lugar
de la investigación y las propuestas. Universidad nacional de Córdoba.
Congreso de didáctica de la Lengua y la Literatura.2010
Riestra, Dora M. (2010 a) “Enseñar a razonar en lengua materna, las implicancias
discursivas y textuales de la acción de lenguaje”, en II Encontro Internacional
do Interaccionismo SocioDiscursivo in Lingistics studies, UNL, Lisboa, Portugal.
Riestra, Dora M. (2010 b) “Para debatir. ¿Cómo surgen y cómo llegan las
propuestas didácticas?” En El toldo de Astier. Propuestas y estudios sobre
enseñanza de la lengua y la literatura. Año 1, Nro. 1, octubre de 2010.
Rodríguez Espiñeira, María J. (2004) “Lecciones de sintaxis española”, Cuestiones
de gramática y norma, Santiago de Compostela, USC, Lalia Maior, 19,
pp.163-199.
Rodríguez Ramalle, Teresa M. (2005) Manual de Sintaxis del Español. Madrid:
Castalia.
Romaine, Suzanne (1996) El lenguaje en la sociedad. Barcelona: Ariel Lingüística.
Salvador Mata, Francisco (director) (1999) El aprendizaje lingüístico y sus
dificultades (Sintaxis de la expresión verbal), Granada: Grupo Editorial
Universitario.
Santana Lario, J. (1997). “La teoría de los Principios y los Parámetros. ¿Hacia una
Gramática “Degenerativa”?. Panorama de la Lingüística actual. Serie Granada
(págs.. 181-215). Granada: Método Ediciones.
Saussure, Ferdinand de (2004). Escritos sobre lingüística general. Barcelona:
Gedisa
Uriagereka, Juan (2005) Pies y cabeza. Madrid: Antonio Machado Libros.
Vassallo, Isabel [et. al.] (2010) Lengua y literatura: prácticas del lenguaje 2. Buenos
Aires: Kapelusz.
Vendler, Zeno (1967) Linguistics and Philosophy. Ithaca, N. Y.: Cornell University
Press.
Voloshinov, Valentin N. (1929/2009) El marxismo y la filosofía del lenguaje.
Buenos Aires: Godot.
124
María R. Guevara y Katerinne G. Leyton, eds. (2013)
Referencias
Vygotski, Liev (1979) El desarrollo de los procesos psicológicos superiores.
Barcelona: Crítica.
Vygotski, Liev (1995) Pensamiento y Lenguaje. Buenos Aires: Paidos.
Vygotski, Liev (1996) El Desarrollo De Los Procesos Psicológicos Superiores.
Barcelona: Crítica.
Zayas Hernando, F. (1994) “La reflexión gramatical en la enseñanza de la lengua”,
en Revista Textos de didáctica de la lengua y la literatura, Nº1, julio, agosto,
septiembre 1994, pp. 65-72.
Enseñanza de la gramática
125
Editoras del volumen
María Rita Guevara
Profesora Titular de Gramática
III y IV en el IFDC San Luis
[email protected]
Katerinne Giselle Leyton
Estudiante de la carrera de
Abogacía en la Universidad
Nacional de Río Cuarto
[email protected]
Volúmenes temáticos de la SAL: serie 2012
ISBN 978-950-774-227-9
Los cambios sufridos por la currícula de Lengua desde la implementación de la
Ley Federal de Educación señalaron el relegamiento de la gramática. En las
últimas décadas, la discusión en torno a las consecuencias producidas por este
relegamiento devino en un impulso, renovado, para su recuperación. Sin
embargo, ante la posibilidad de ver resignificado su lugar en la currícula, la
discusión pasa ahora por una revisión de los modelos gramaticales que se
adecúen a la nueva situación de la enseñanza de la lengua y las estrategias que
se utilicen para tal fin. A continuación, se presentarán algunas propuestas en
este sentido. En primer lugar, se proponen cuatro artículos que analizan la
situación de la enseñanza de la gramática en la escuela actual. Posteriormente,
se presentan cuatro artículos que desarrollan una propuesta didáctica teóricometodológica para ser implementada en el aula. Con la finalidad de que estos
aportes sirvan para revitalizar una discusión largamente dilatada, los capítulos
de este volumen aparecen como un acercamiento a una problemática central de
la educación lingüística actual que debe ser contemplada y estudiada en
profundidad.
Mendoza, Argentina
Descargar