La Ética Ciudadana constituye un elemento fundamental en el desarrollo integral y consciente de una ciudadanía responsable como ente patriótico, que promueve los valores culturales y sociales, siendo capaz de motivar a otros con el ejemplo. ORIGEN La palabra ética proviene del latín ethĭcus, y este del griego antiguo θικόςἠ transliterado como ēthikós. Según algunos autores, es correcto diferenciar êthos, que significa ‘carácter’, de ethos, que significa ‘costumbre’, pues “ética” se sigue de aquel sentido y no es éste. Según una corriente «clásica», la ética tiene como objeto los actos que el ser humano realiza de modo consciente y libre (es decir, aquellos actos sobre los que ejerce de algún modo un control racional). No se limita sólo a ver cómo se realizan esos actos, sino que busca emitir un juicio sobre estos, que permite determinar si un acto ha sido éticamente bueno o éticamente malo. Fernando Savater, en el primer capítulo de su libro Ética para Amador («De qué va la ética»), define la ética como «el arte de vivir, el saber vivir, por lo tanto, el arte de discernir lo que nos conviene (lo bueno) y lo que no nos conviene (lo malo)». Ello implica establecer una distinción entre lo que sea bueno y lo que sea malo desde el punto de vista ético, y si el bien y el mal éticos coinciden o no con lo que serían el bien y el mal en sí. ÉTICA Y CIUDADANÍA Ética: La ética, como una rama de la filosofía, está considerada como una ciencia normativa, porque se ocupa de las normas de la conducta humana Ciudadanía: condición social de un miembro nativo o naturalizado de una ciudad o Estado. Posición de miembro de un Estado con derechos y deberes definidos. La ética y la ciudadanía van de la mano, puesto que la ética establece las normas de conducta que deben regir a los ciudadanos de una región y ellos son los responsables de aplicar y cumplir con ética las distintas reglas y normas que se establezcan para una determinada región. A la existencia de un ámbito de ideas y de conductas en las que todos debemos coincidir, independientemente de nuestras diferencias le podemos llamar ÉTICA CIUDADANA. Ética Ciudadana, es el respeto a los derechos humanos, actuando con justicia y equidad, sin excepción de personas, en el cumplimiento de nuestro deber y desarrollando nuestro trabajo como ciudadanos con verdad y honestidad. Estamos en una fase de la civilización en la que las ideas y los modos de convivencia que tuvieron cierta vigencia en el pasado inmediato que ya no responden a los nuevos problemas que enfrentamos como humanidad La ética ciudadana es un modelo de conducta que viabiliza la vida en sociedad y la encamina por el rumbo de la responsabilidad, la solidaridad, el respeto y la integridad. Es la búsqueda del bien común, según los organizadores. Para evitar en gran medida los problemas de índole ético- moral que surgen en el ejercicio de una profesión o de un oficio, se deben poner en práctica principios éticos que establezcan los parámetros y reglas que describan el comportamiento que una persona puede o no exhibir en determinado momento. No es difícil poner estos principios en práctica, pero el omitirlos redundará en perjuicio propio y en el de las personas con quienes se interviene o se interactúa. “Una decisión en la que está envuelto el comportamiento ético de una persona, siempre va a estar enmarcada en uno de los principios y valores aquí señalados". Función de la ética ciudadana La Ética movernos ciudadana, en un nos ambiente permite sano y agradable donde todos somos un equipo trabajando en el mismo plan en beneficio de todos, utilizando cada uno nuestros talentos y aprendiendo unos de otros, sin egoísmos en paz y armonía, utilizando los valores positivos en los cuales una nación puede crecer y después ayudar a otros. En nuestro país y en el mundo, convivimos con personas de diversas mentalidades, por lo que hay un sinfín de maneras de entender las cosas, lo que hace complicado que todos nos pongamos de acuerdo en las conductas que deben regir nuestra vida. La ética ciudadana debe establecer con claridad las conductas a las que todos estamos obligados. Señala los derechos que todos debemos exigir y las obligaciones que todos debemos cumplir, sin importar sexo, raza, religión, partido político, etc. Esperar que todos piensen como nosotros es una actitud inmadura y condenada al fracaso Debemos crear los mecanismos eficientes para que la sociedad dialogue consigo misma y con ello poder definir y consensar los contenidos básicos de la ética ciudadana. La primera norma ética a la que nos debemos apegar es: todas y todos tenemos derechos y debemos respetarlos y hacer que se respeten.