Documento descargado de http://www.elsevier.es el 02/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. COMUNICACIÓN ESPECIAL ACTAS UROLÓGICAS ESPAÑOLAS NOVIEMBRE/DICIEMBRE 2001 LOS SOMOVILLA: FAMILIA DE LITOTOMISTAS RIOJANOS. DATACIÓN DE SU TRAYECTORIA EN ARNEDILLO, SIGLO XVI A. FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ Servicio de Urología. Complejo Hospitalario San Millán y San Pedro. Logroño (La Rioja). PALABRAS CLAVE: Juan de Somovilla. Francisco de Somovilla. Diego de Somovilla. Historia. KEY WORDS: Juan de Somovilla. Francisco de Somovilla. Diego de Somovilla. History. Actas Urol Esp. 25 (10): 692-697, 2001 RESUMEN En la segunda mitad del siglo XVI se pueden datar en la localidad riojana de Arnedillo a dos hermanos Somovilla: Juan y Francisco, ambos con el título de maese. Sus mujeres se llamaban Anna García e Iomar de Oña respectivamente. Hijos de Juan y Anna fueron Francisco, María, Diego, que fue bautizado el veinte de junio de 1566, e Íñigo. Juan de Somovilla falleció el 22 de diciembre de 1574, siendo su hermano el encargado de hacer su testamento. Comparando estos datos con los existentes en la literatura referente surge la duda de que el nombre del cirujano contratado por Felipe II, fuera Juan en vez de Francisco, como hasta ahora se creía. Arnedillo aparece citado en la obra de Francisco Díaz como balneario útil para padecimientos renales, siendo tal vez lugar de cita de pacientes con patología del aparato urinario, explicando este hecho, el porque surgió en esta localidad una familia de reputados litotomistas. ABSTRACT In the second middle of the XVI century lived in Arnedillo Juan and Francisco Somovilla, booths “maesse”. The names of his wives were Anna Garcia and Iomar de Oña. The brothers of Juan and Anna were Mardia, Diego baptised on 20 of june of 1566, and Iñigo. Juan Somovilla passes away on 22 of December of 1574. His brother made the testament. We think that Juan was the surgeon that we contracted by Felipe II, instead of Francisco. Francisco Díaz talked about Arnedillo, as an important thermal baths in the treatment of the kidney diseases, in his text. If Arnedillo was a centre of treatment of urinary disease, the Somovilla family could learn here the surgery of bladder litiasis. 692 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 02/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. LOS SOMOVILLA: FAMILIA DE LITOTOMISTAS RIOJANOS. DATACIÓN DE SU TRAYECTORIA EN ARNEDILLO, SIGLO XVI E para curar determinadas enfermedades, y en base a estas quejas, quedó establecido que fuesen restringidas y que las justicias locales castigasen a los que curasen más enfermedades que las autorizadas3. Un primer nivel de titulación era el otorgado por el Protomedicato. Pero existía un nivel más alto dentro de estas titulaciones no universitarias, y que es importante comentar, dado que nuestros personajes lo ostentaron, y del que se deben hacer algunas consideraciones, y es el de Maestro o Maese o Cirujano de la Casa Real. Esta titulación la daban las Cortes o el Consejo Real de Castilla, y que muchos de los que poseyeron esta titulación sirvieron a la Casa Real, como es el caso de nuestros personajes7. El título de maestro o maese o cirujano de la Casa Real exigía una serie de pasos previos y requisitos, así en primer lugar se requería una petición del interesado a las Cortes o al Consejo Real de Castilla. Estas peticiones quedaban plasmadas en las Actas de Cortes, así tenemos la evidencia de que otros personajes expertos en el tratamiento del mal de piedra (urólogos del siglo XVI) elevaron sus oportunas peticiones, como pueden ser el propio Francisco Díaz, el Maestro Izquierdo de Valladolid, Andrés Espinosa en 1609 hizo lo propio, así como el Licenciado Martín de Castellanos8. Este paso exigía lo que se conoce como “probanza de testigo”, que requería la presentación de un escrito realizado por un escribano, en el que se detallaban los tratamientos exitosos que el aspirante había realizado en su trayectoria profesional. Así nos consta la que realizó el Maestro Izquierdo de Valladolid, plasmando información de testigos delante de escribano9. Al final de este proceso se obtenía el título de maestro o maese que llevaba consigo en la mayoría de las ocasiones, el ser contratado por la corona como Cirujano de la Casa Real, con las exigencias que en el contrato se plasmaran. También esta titulación permitía dar docencia de los conocimientos demostrados durante la serie de pruebas realizadas. Se trataba pues, en conjunto, de la más alta distinción a la que un “cirujano” sin titulación oficial podría llegar, e indudablemente significaba el reconocimiento a un profesional de gran prestigio. n la época a la que nos referimos, ni la forma de aprender ni la motivación por la que una persona decidía ejercer la actividad de sanar enfermedades de las vías urinarias, tenían nada que ver con lo que en el momento actual conocemos1. Si bien es cierto que existían unos estudios oficiales, que una vez cursados otorgaban una titulación universitaria, en ellos nada se aprendía de práctica quirúrgica2. Dada la necesidad social de personas expertas en el tratamiento de enfermedades, que hasta el momento tan sólo podrían esperar su solución mediante procedimientos cruentos, apareció toda una amplia gama de personajes, en muchos casos sin titulación de ningún tipo, que ofrecía sus servicios para el tratamiento de muy diversas afecciones. Es la época de los cirujanos empíricos surgían profesionales por un lado debido a la ausencia en la enseñanza oficial de práctica quirúrgica, y por otra a la necesidad de estos profesionales para tratar determinadas dolencias, como eran la litiasis vesical y las estenosis de uretra3. Tanto la monarquía como instancias oficiales se esforzaron en poner cierto orden en la práctica de este grupo de “cirujanos”, ya que la falta de legislación en este terreno daba lugar a la aparición de abusos, y a que personas sin escrúpulos se aprovecharán del padecimiento de otros3,4. Así nos encontramos con una serie de prácticos en la realización de una serie de procedimientos quirúrgicos, pero sin una titulación universitaria que les acredite. Esto plantea una situación difícil de resolver, pues exigía dar respuesta legal a una serie de cuestiones que básicamente eran: quién estaba capacitado para ejercer y qué técnicas podía realizar, asimismo si tenía derecho a enseñarlas o no5. El resultado de todo ésto fue una situación en muchos casos confusa, debido a la gran cantidad de autorizaciones y licencias que tanto el Protomedicato o las cortes concedieron durante muchos decenios en que la universidad no satisfizo la necesidad sanitaria de la sociedad6. En las Actas de las Cortes de Córdoba de 1570 y en las de Madrid de 1576 se nos informa de que los procuradores se quejan del gran número de personas que tienen autorización del Protomedicato 693 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 02/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. A. FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ De las diversas maneras que hay de aprender unos conocimientos eminentemente prácticos, y que como hemos comentado no estaban incluidos dentro de lo que podemos entender como enseñanza oficial, existe la de acceder a ellos gracias a la experiencia transmitida de padres a hijos. Existe información en este sentido de la familia Collot, dinastía de sajadores campañeses, que ejercían su labor en el Hôtel Dieu, y que practicaban la litotomía rodeados de gran secretismo de tal manera que nadie podía acercarse a su santuario cuando practicaban la extracción de la piedra5. Indudablemente esta es una manera de transmitir conocimientos, y máxime de unos conocimientos eminentemente prácticos. En cualquier caso aún nos faltan otros componente del puzzle que explique por qué aparece una dinastía familiar de litotomistas en un sitio y no en otro. En el caso de la familia Collot era comprensible ya que realizaba su trabajo en el Hôtel Dieu de París, y éste era un centro en el que se concentraban gran cantidad de enfermos de muy diversa índole, pero ¿en Arnedillo?, en una actualmente pequeña población de La Rioja, ¿qué había que justificara la aparición de una familia de litotomistas de prestigio a los que contrató Felipe II?. El 17 de agosto de 1562 es bautizada María, segunda hija de este matrimonio11. El veinte de junio de 1566 es bautizado Diego de Somovilla, hijo de Maese Juan y de Anna, siendo padrinos el clérigo Juan Gonzalez, y madrina Ioma (o Yomar) de Oña mujer de Maese Francisco de Somovilla12. El último hijo de Juan de Somovilla que aparece referido es Iñigo de Somovilla, y fueron sus padrinos el clérigo Juan Gonzalez y Yomar de Oña, mujer de maese Francisco de Somovilla13. El 22 de diciembre de 1574 aparece en el apartado de finados, la anotación del fallecimiento de Maese Juan de Somovilla, siendo el texto completo de la referida cita el siguiente: “A veinte y dos días del mes de Diciembre del dicho año murió maese Jnu de Somobilla (en el margen aparece señaldado como maese Jnu de Somovilla) su herno, hizo su testamento, dexo por sus cabeçaleros a Jnu gonçalez chgo y a anna gonçalez su muger y a me franco de somovilla. Su hermano, mando hazer offcios solemnes como confrade que era de nuestra señora de peñalva con enterramiento y novena y cavo de año, dexo un aniversario por su anima todos los viernes del año por espacio y tipo de un año. Se diga un aniversario por los cofrades de peñalva vigilia de san Bernabe. Otro por los cofrades de S. Felices Sabado de la Trinidad, otro por los cofrades de s. tiago vigilia de s. tiago, otro por los cofrades de s. andres vigilia de s. andres otro por los cofrades de la vera cruz sabado deramos, / añal candela y oblación, una manga de cruz para defunctos o quatro ducados aelection de sus cabeçaleros / al sacramento, a nuestra sa de la torre, a nuestra señora de peñalva, a s. miguel, a s. andres sendas libras de azeite. A nuestra señora del rosario quattro reales a las ordenes acostumbradas lo que se acostumbra”. En el libro Primer, Capítulo X, Folio 108 vto., aparecen referidos los “baños de Arnedillo en Castilla la Vieja, La Rioxa16. MATERIAL Y MÉTODO Se ha revisado el archivo histórico diocesano de Logroño, donde se encuentran recogidos todos los libros de las parroquias e iglesias de la Comunidad Autónoma de La Rioja. En este archivo se encuentra el texto “Arnedillo. Bautizados y Finados 15601586”. Se ha revisado el texto de Francisco Díaz “Tratado Nuevamente impresso, de todas las enfer medades de los riñones, vexiga, y Carnosidades de la Verga y Urina”. RESULTADOS En el estudio del texto “Arnedillo Bautizados y Finados 1560-1586”, se encontraron los siguientes datos: Podemos constatar la presencia de dos hermanos Somovilla: Juan y Francisco, ambos aparecen señalados como Maese. La mujer de Juan era Anna Garcia, y la de Francisco era Iomar de Oña. El 26 de septiembre de 1560 es bautizado Francisco, hijo de Juan y de Anna Gonzalez10. DISCUSIÓN Por suerte ha llegado hasta nuestros días el libro de “Bautizados y Finados” de Arnedillo con los datos de la segunda parte del siglo XVI. En este documento se apuntan bautizos y defunciones habidos en la iglesia de Arnedillo, con su fecha. El auténtico fin con el que se anotaban toda esta serie 694 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 02/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. LOS SOMOVILLA: FAMILIA DE LITOTOMISTAS RIOJANOS. DATACIÓN DE SU TRAYECTORIA EN ARNEDILLO, SIGLO XVI de datos, era llevar la contabilidad de las donaciones y limosnas que se daba a la parroquia. El cura de la parroquia apuntaba junto a la fecha, unas líneas en las que se detallaba, en el caso de los bautizos, el nombre de los padres y los padrinos, con algunos datos acerca del parentesco u otro tipo de relación existente entre las personas que asistían al mismo. En las defunciones se realizaba una detallada exposición de las misas, novenas y todo tipo de donaciones que el finado realizaba. Asimismo aparecían reflejados los herederos y los cabezaleros encargados de representar a los herederos y realizar los pagos oportunos. Periódicamente estos libros eran revisados por un corregidor enviado por el obispo. Las cuentas tenían que cuadrar, y la parte proporcional correspondiente ser enviada al obispado. De tal manera esto era así, que si una persona tenía devoción por una u otra advocacion o santo y este era venerado en otra parroquia, podía ser bautizado en ella, eso si realizando allí las donaciones oportunas. Por tanto el interés censal de estos documentos no existía cuando se realizaron, pero en nuestros días es el más relevante. El estudio del referido documento nos aporta una serie de datos importante. En primer lugar como Somovilla con el título de Maese aparecen dos her manos que son Juan y Francisco. Hermanos por lo que parece muy unidos, pues son respectivamente padrinos de sus hijos, y madrinas sus respectivas mujeres: Anna Garcia (esposa de Juan), e Iomar de Oña (esposa de Francisco), asimismo Juan pone como nombre a uno de sus hijos, el de su hermano Francisco10, que aunque no sabemos con certeza si era el mayor, si es cierto que es el primero del que tenemos noticias, en orden cronológico. En dicho bautizo fueron los padrinos Pedro Fernández e Iomar de Oña, mujer de Francisco de Somovilla10. El 20 de junio de 1566 es bautizado Diego de Somovilla, “hijo de maese Juan de Somovilla y de Anna Gonzalez, su mujer, fue padrino Juan Gonzalez clérigo y madrina Iomar muger de maese Francisco”12. Luego Diego de Somovilla, contratado posteriormente por la corte como cirujano de la casa real, era sobrino de Francisco de Somovilla. Otro hijos de esta pareja fueron el referido Francisco, Maria e Iñigo, siendo de este último, padrino los señalados Juan Gonzalez clérigo, e Iomar de Oña mujer de maese Francisco de Somovilla13. El 22 de diciembre de 1574 fallece Juan de Somovilla14: “A veinte y dos días del mes de diciembre del dicho año murio maese Jnu de Somobilla (en al margen aparece como maese Jn u de Somovilla)...”. Fue su hermano Francisco de Somovilla el encargado de hacer el testamento y cono cabeçaleros”... cabeçaleros a Jnu gonçalez chgo y a anna gonçalez su muger.... y a me Franco de somovilla. Su hermano, mando hazer offcios solemnes como confrade que era de nuestra señora de peñalva son enterramiento y novena y cavo de año...”. Llama la atención la gran cantidad de Misas, novenas, donativos diversos que realiza nuestro personaje, lo que habla de la importancia y riqueza del mismo. Hasta ahora los datos que conocíamos de la familia Somovilla eran los recogidos por D. Manuel Jiménez Muñoz7 de los legajos englobados en quitaciones de Corte. Son estos textos una relación contable de los gastos que hacía la corona en contrataciones de personal diverso a su servicio. En ellos se señala la contratación de Francisco de Somovilla en 1566, así como su muerte en 1574. Esta información se contradice con la señalada en el libro de finados y bautizados de Arnedillo, ya que en ellos quien consta que murió fue Juan de Somovilla, hermano de Francisco. Además falleció el 22 de diciembre dejando muy pocos días para que falleciera su hermano dentro del mismo año. Indudablemente son datos que merecen ser aclarados y que de modo inicial se pueden achacar a la forma de escribir los nombres en aquella época pues eran frecuentes las abreviaciones, pudiéndose confundir Juan con Francisco, aunque parezca imposible con la gramática actual. La anotación realizada en el libro de bautizados y finados de Arnedillo es meridianamente clara pues en ella aparece señalado además del nombre del finado, el de su mujer, y su hermano, no dejando lugar a duda alguna. De todas formas la confrontación de los datos obtenidos en Arnedillo con los publicados hasta el momento actual arrojan más incógnitas. D. Mariano Pérez Albacete15 sugiere que Diego de Somovilla, contratado por la Casa Real en 1575, al año siguiente de que muriera ¿Francisco? o 695 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 02/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. A. FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ Juan según lo aquí señalado, podía ser hijo de Francisco de Somovilla. Los datos aquí señalados aclaran que Diego era hijo de Juan, y sobrino de Francisco. Aún hay otra serie de datos publicados previamente, que a la luz de los aquí aportados, nos llaman la atención. Si atendemos a la fecha en que aparece contratado Diego de Somovilla por la familia real como cirujano, nos encontramos que es el 21 de junio de 15757 de tal manera que se le contrató al cumplir 9 años. ¿Había otro Diego de Somovilla?. ¿Fue un contrato en el que contaba con el apoyo de su tío Francisco de Somovilla, que no deseaba abandonar Arnedillo?. Que duda cabe que los datos aportados en este estudio ponen en tela de juicio otros señalados hasta el momento actual y que creo deben ser al menos nuevamente contrastados, pues la actividad vital de la familia Somovilla está claramente referida en esta segunda mitad del siglo XVI, en los datos existentes en Arnedillo. Una pregunta que desde el inicio de este estudio supongo está presente en la mente de nuestro lector es el por qué todo esto sucede en Arnedillo. La villa de Arnedillo tiene un origen muy antiguo, prueba de ello es el hecho de que aparece incluido con el nombre de “Arnietello” en el voto del conde Fernán González, datado a mediados del siglo X. El 4 de marzo de 1156 el obispo de Calahorra, Rodrigo Cascante, donaba a su cabildo sus derechos sobre las tercias y las cuartas decimales de Arnedillo y otras localidades, ratificándose dicha cesión en 1179. De un documento del año 1200 suscrito por Juan Prejano para hacer pública la signación de recursos a la mesa capitular de Calahorra, se desprende que el rey Alfonso VIII de Castilla había cedido el señorío de Arnedillo a la iglesia de Calahorra, siendo por tanto ya señoría del obispo de Calahorra. Arnedillo es asimismo conocido desde época romana por la existencia de unos baños termales que en el momento actual están en plena explotación. La lectura de la obra de Francisco Díaz impresiona por muchas cosas y entre ellas por ser la de una personaje ilustrado con un gran bagaje cultural, y que en determinadas descripciones se tiene la sensación de que conocía personalmente los sitios que describe. En el Libro Primero, capítulo décimo, Folio 108 vto, 04 vto, señala “...tratemos de los vaños que goza nuestra España, que son muchos para esta y otros muchas indisposiciones utilisimos, entre los cuales son los vaños de Arnedillo, en Castilla la Vieja en la Rioxa...”16. Llama la atención que señale en primer lugar los de Arnedillo. Este dato de alguna manera nos habla de la importancia que para nuestro autor tenían los referidos baños. Hay además otro detalle digno de ser comentado, ya que a continuación señala nuestro autor “...y no muy lejos de estos (haciendo referencia a los baños de Arnedillo) los vaños de Itero....”. Todo el mundo que ha acudido a los baños de Arnedillo conoce que en efecto, muy próximos están los de Fitero, siendo ambos conocidos desde épocas antiquísimas, estando aún en nuestro tiempo en plena exploración, y aunque es cierto que estos datos pudieron serle dados por otras personas, sigue siendo llamativo que señale de modo tan claro una dato tan preciso. De una forma u otra el personaje más señalado del saber urológico del siglo XVI era conocedor de su utilidad, y los recomendaba en el tratamiento de padecimientos del aparato urinario. ¿Fue Arnedillo en el siglo XVI un centro al que acudían pacientes con patología del aparato urinario?. Si ciertamente así lo fue, esto podría explicar por qué surgió una familia de reputados litotomistas en este preciso lugar. Agradecimientos: Dr. D. Emilio Maganto Pavón REFERENCIAS 1. GRANJEL, L.S.: Noticias médicas en la Miscelánea de Luis Zapata: El ejercicio médico y otros capítulos de la Medicina Española, pp 193-204; Salamanca, 19974. 2. GRANJEL, L.S.: El quehacer de los empíricos. En: Retablo histórico de la urología española. Salamanca, 1986. 3. MUÑOZ GARRIDO, R.: Ejercicio Legal de la medicina en España (Siglos XV al XVIII). Pág. 144, Salamanca, 1967. 4. MAGANTO PAVÓN, E.: Los albores de la cirugía programada en urología. En: Hitos en la historia de la Urología. Edt. Pulso. Barcelona,1999; Vol. II, pág.. 19. 5. MAGANTO PAVÓN, E.: Evolución del procedimiento de la talla en Europa. Repercusión en la medicina Española de la Época En: Hitos en la Historia de la Urología. Ed. Pulso. Barcelona, 1999; Vol. II, pág. 15. 696 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 02/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. LOS SOMOVILLA: FAMILIA DE LITOTOMISTAS RIOJANOS. DATACIÓN DE SU TRAYECTORIA EN ARNEDILLO, SIGLO XVI 16. MAGANTO PAVÓN E.: El primer tratado de urología en la historia de la medicina. En: Hitos en la Historia de la Urología. Ed. Pulso. Barcelona, 1999; Vol. II, pág. 61. 17. JIMÉNEZ MUÑOZ M.: Médicos y Cirujanos en Quitaciones de Corte (1435-1715). En: Cuadernos de Investigaciones Históricas, Valladolid. 1977. 18. MAGANTO PAVÓN, E.: Vida y hechos del licenciado Martín de Castellanos. ISBN 84-605-0096-9. capítulo III, pág. 30, 1994. 19. Actas de Cortes de Castilla, 25: 104 (27 de febrero de 1609) 10. ARNEDILLO BAUTIZADOS Y FINADOS 1560-1586, libro 2, caja 1ª, folio 2. Archivo histórico Diocesano. Logroño. 11. ARNEDILLO BAUTIZADOS Y FINADOS 1560-1586, libro 2, caja 1ª, folio 4. Archivo histórico Diocesano. Logroño. 12. ARNEDILLO BAUTIZADOS Y FINADOS 1560-1586, libro 2, caja 1ª, folio 6. Archivo histórico Diocesano. Logroño. 13. ARNEDILLO BAUTIZADOS Y FINADOS 1560-1586, libro 2, caja 1ª, folio 14. Archivo histórico Diocesano. Logroño. 14. ARNEDILLO BAUTIZADOS Y FINADOS 1560-1586, libro 2, caja 1ª, folio 60. Archivo histórico Diocesano. Logroño. 15. PÉREZ ALBACETE, M.: La urología en el renacimiento y en el barroco. En: Historia biográfica y bibliográfica de la Urología Española, Emilio Maganto Pavón. Editorial Edicomplet, 2000, Vol. 1, pág. 105. 16. DÍAZ PÉREZ, F.: Tratado Nuevamente Impreso, de todas las enfermedades de los riñones, vexiga, y Carnosidades de la Verga, y Urina”. Libro Primero, capítulo décimo, folio 108 vto. 04 vto. Alcalá de Henares, 1588. Dr. A. Fernández Fernández Travesía Avda. de Madrid Las Garzas - Casa nº 5 26104 Lardero. La Rioja (Trabajo recibido el 6 de abril de 2001) 697