OCR Document - Centro de Documentación Judicial

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121 -C-2006
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las
quince horas y cincuenta y cinco minutos del veinticinco de enero de dos mil siete.
El doctor Héctor Ricardo Gómez Véjar, solicita a esta Sala, la revocatoria del auto de
inadmisión del recurso de casación que ha interpuesto, en su calidad de apoderado de la
señora María del Carmen Sosa de Múñoz, providencia que fue dictada a las nueve horas del
doce de julio de este año.
Los argumentos que presenta para requerir la revocación citada en el párrafo anterior son
los siguientes """"II) El día viernes trece del presente mes fui notificado de la resolución
pronunciada por esa Sala a las nueve horas del doce de julio del año en curso, en virtud de
la cual declaró inadmisible el Recurso interpuesto basándose en el artículo Cinco inciso
segundo de la Ley de Casación. Para fundamentar su resolución hizo varias consideraciones
que enumeró con los romano del I al VII; las cuales estimo que son teóricamente correctas,
porque en los juicios ejecutivos, salvo excepciones legales, al no pasar en autoridad de cosa
juzgada la Sentencia, las partes tiene la potestad de ordinariar la acción. Esto lo sabe
cualquier abogado y es todo lo que en esencia contiene la interlocutoria que rechazó mi
Recurso, porque tal como ésta se lee: ''''''ii) Puede suceder que se disponga el rechazo de la
ejecución, con motivo de carecer el título presentado por el acreedor, de alguno de los
requisitos que exige la ley para que tenga fuerza ejecutiva.""" ''''''''iii) Puede suceder,
igualmente, que el deudor sólo tenga un número limitado de defensas, y que la mayor parte
de ellas, se hallan restringidas en el ámbito probatorio.""" ''''''''En virtud de los supuestos
señalados la Legislación Procesal contempla la posibilidad de proseguir un proceso de
conocimiento pleno, el cual concluiría con una Sentencia que tenga autoridad de cosa
juzgada material, etc..."""----Claramente se concluye del testo de tales consideraciones, que
a juicio de esa Sala en los procesos ejecutivos nunca es procedente el Recurso de Casación
por motivos de fondo, porque siempre es posible ordinariar la acción de fallida en el juicio
Ejecutivo y, entonces, dicha acción ordinaria viene a ser la nueva acción sobre la misma
materia a que hace referencia el inc. 2° del Art. 5 Cas.; así lo confirmáis en la consideración
V) en la que decís: ''''''también debe tenerse en cuenta que, es admisible una pretensión
destinada a que en Juicio con plenitud de trámites, posterior a la ejecución, se discuta el
objeto del proceso y que podría promover el deudor."""" De acuerdo con las
consideraciones que he citado, se evidencia que la Sala ha confundido el derecho de las
partes para controvertir en Juicio Ordinario la obligación que causó la ejecución, Art. 599
Pr. C., cn la posibilidad de entablar nueva acción sobre la misma materia, a que se refiere el
Art. 5 Cas.. Sin embargo, la diferencia estriba en que de acuerdo con el Art. 599 Pr. C., en
lo juicios ejecutivos existe la posibilidad de ordinariar la acción; y esa posibilidad llega a
realizarse dependiendo de la sola voluntad de las partes, sin sujeción a los hechos que la
motivan; en cambio en el inc. 2° del Art. 5 Caso Aunque se contempla también la
posibilidad de ''''''''entablar nueva acción sobre la misma materia"""" -que sería obviamente
en juicio ordinario- como un impedimento para que proceda el Recurso de Casación, esa
posibilidad debe ser real, objetiva cuya existencia se base en los supuestos que señalasteis
en las consideraciones ii) y iii) de vuestra resolución y, por esa razón tiene que ser el
Tribunal de Casación quien decida si existe esa posibilidad y no las partes como sucede en
el caso del Art. 499 Pr. C.. No es cierto, pues, que en todos los juicios ejecutivos sea
posible entablar nueva acción sobre la misma materia; en primer lugar, porque ello
contradice el texto del mencionado inc. 2° del Art. 5 Cas. E igualmente porque puede
también suceder, honorable Sala, que los supuestos que vos señaláis no se den y por eso, el
inc. 2° del Art. 5 Cas. ordena la procedencia del Recurso de Casación solamente por
quebrantamiento de forma en los juicio ejecutivos, posesorios y demás sumarios y
diligencias de Jurisdicción Voluntaria; más no por infracción de Ley o de Doctrina legal
cuando sea posible entablar nueva acción osbre la misma materia. Esta es la condición sine
cuanon para que no proceda el Recurso por motivos de fondo, o sea, que él no es
procedente cuando se dan los supuestos que habéis señalado y que yo acabo de citar. El
inciso segundo relacionado no prescribe que en los mencionados juicios, entre ellos el
ejecutivo, sólo procederá el Recurso por quebrantamiento de forma; pues también procede
por motivos de fondo cuando no sea posible entablar nueva acción sobre la misma materia
o sea cuando no se den los supuestos que a vía de ejemplo señalasteis en los romanos ii) y
iii) de vuestra resolución.-----En el Juicio Singular Ejecutivo que promoví contra el
BANCO AGRÍCOLA, S.A., para que cancelase una hipoteca abierta constituida a su favor
por mi mandante, en virtud de que ella le pagó la única obligación que ese gravamen
garantizaba no ha sucedido que los títulos presentados por ésta para exigir dicha
cancelación carezca "de alguno de los requisitos que exige la ley para que tenga fuerza
ejecutiva;" ni tampoco ha sucedido que mi poderdante solo haya tenido "un número
limitado de defensas, y que la mayor parte de ellas, se hallen restringidas en el ámbito
probatorio, " ni ningún otro supuesto que haya abierto "la posibilidad de proseguir un
proceso de conocimiento pleno el cual concluiría con una Sentencia que tenga autoridad de
cosa juzgada material. Por el contrario, en dicho juicio ejecutivo existe la prueba plena y
perfecta que se exige en el Art. 422 Pr. C. para resolver la cuestión litigada.--- Como ya lo
dije, es fácil advertir a través de las consideraciones hechas por esa Cámara que mi Recurso
de Casación fue rechazado indebidamente por tratarse de un Juicio Ejecutivo; ya que en
éstos, según el criterio de esa Sala no es procedente el Recurso de Casación, pero si éste
fue declarado inadmisible debido a que existen los supuestos a que se refiere esa Sala
en las mencionadas consideraciones ii) y iii) debió ser ese alto Tribunal el que
decidiera sobre su existencia, especificándolos, y derivando de ellos la posibilidad de
ejercitar una nueva acción. Aún más esa decisión debió tomarla después de conocer
del Recurso, de imponerse del mismo, de estudiar y leer su sustanciación en ambas
instancias; más nunca basar la inadmisión únicamente después de "estudiado el
escrito de interposición del Recurso" porque de dicho escrito de interposición es
imposible descubrir si existen causas que hagan posible "entablar nueva acción sobre
la misma materia". Para decirlo de otra manera, la improcedencia del Recurso de
Casación por la razón mencionada debió declararse en la Sentencia de Casación, si
ésta fallare no haber lugar al Recurso, pero nunca del solo estudio del escrito de
interposición.--Es desconcertante Honorable Sala de lo Civil que apoyéis vuestra
interlocutoria de inadmisión en la Sentencia de la Cámara ad-quem que precisamente estoy
impugnando, sin que vos halláis conocido del Recurso de Casación contra las
infracciones de Ley en ella cometidas y cuya violación mas relevante es que ambas
magistradas de la Cámara Primera de lo Civil hayan fallado, por ignorancia inexcusable
de lo que es una Hipoteca Abierta y sus efectos jurídicos que las condujo a una errónea
interpretación del artículo 1554 del Código de Comercio, en el sentido de "que el plazo de
la Hipoteca abierta cuya cancelación se pide, en el momento de iniciar el proceso, todavía
no había vencido, condición que es necesaria para que proceda la vía ejecutiva" (lo
entrecomillado es lo que esa Sala manifiesta en su resolución.)"""""
Sobre lo solicitado la Sala hace las consideraciones siguientes:
i) El derecho de acceso a la justicia es un derecho de configuración legal, ello quiere decir
que las leyes disponen lo pertinente sobre determinados requisitos o presupuestos para que
el órgano judicial, ante el que se formula la pretensión, pueda pronunciarse sobre ella y no
supone vulneración al derecho de defensa o audiencia de la parte.
Los requisitos procesales tienen su finalidad en la ordenación del proceso en garantía de los
derechos de las partes.
ii) No cualquier reclamación que se invoque ante el órgano judicial puede generar una
respuesta que acepte las razones del justiciable, no puede ser invocada de cualquier manera,
sino por el contrario, debe cumplir con ciertos y determinados requisitos que impone la ley.
iii) La actividad de las partes y de los jueces está reglada por la ley y lo que tuvo en cuenta
el legislador para definirla fue la clase de pretensión procesal invocada. En el caso que nos
ocupa, la posibilidad de la revisión casacional de una sentencia dictada en juicio ejecutivo,
le fueron fijados límites, máxime cuando la Ley de Casación no distingue a cual clase de
juicio ejecutivo se refiere, ya que como puede verse si la materia que se tramita no es de las
que la ley le tiene asignado recurso de casación por infracción de ley, no podrá concederse
éste, pues la ley establece la competencia y la compatibilidad de lo pedido con lo que debe
resolverse.
iv) No basta como ha ocurrido en el presente caso, con manifestar una voluntad de recurrir
la sentencia de instancia que sea desfavorable para los intereses de la parte, sino que hay
que hacerlo con las exigencias que impone el propio recurso interpuesto, máxime cuando se
trata de un recurso extraordinario, como lo es, en el ordenamiento procesal salvadoreño, el
recurso de casación en materia mercantil. Exigencias que impone en lo que aquí interesa el
Art. 5 de la Ley de Casación, las cuales no pueden soslayarse, pues de ellas depende la
necesaria delimitación del ámbito del recurso y que en modo alguno pueden considerarse
obstáculo al ejercicio del acceso al mismo, ya que su cumplimiento resulta condición
obligada de su admisión y menos aún puede pensarse que obstaculicen de modo excesivo e
irrazonable su ejercicio.
v) No sufre indefensión quien pudiendo defender sus intereses legítimos por medio de las
distintas armas que le ofrece el ordenamiento procesal salvadoreño no usa de ellas con la
pericia técnica suficiente.
vi) Es doctrina aceptada por la jurisprudencia que de la definición que da el Código de
Procedimientos Civiles, se infiere que la pretension ejecutiva puede deducirse si se dan
cuatro requisitos: acreedor legítimo, instrumentos ejecutivo, deudor cierto y obligación
exigible.
vii) La hipoteca abierta es una línea de crédito garantizada con una hipoteca de primer
grado cuyos subpréstamos u operaciones derivadas, pueden dirigirse hacia diferentes
actividades y que permiten al beneficiario mantener una disponibilidad de recursos durante
un plazo determinado, en el cual, sus amortizaciones forman automáticamente montos
nuevos disponibles..
Esta clase de hipotecas está dirigida a personas naturales o jurídicas que se califiquen como
sujetos de crédito y con un historial crediticio excelente, dedicados a una o varias
actividades de la economía que requieran financiación periódica para capital de trabajo o
inversión. Constituyen relaciones jurídicas por créditos abiertos con limitaciones en las
sumas.
Constituida la hipoteca, garantiza las cantidades en cualquier tiempo, siempre que no
excedan de la suma prefijada, de conformidad con lo establecido en el Código de Comercio
y en el Código Civil.
viii) El rango del gravamen se establece por la fecha de inscripción tal y como lo manda la
legislación registral y no por la del nacimiento del crédito.
La extinción del plazo de la hipoteca abierta, se da por el vencimiento del período para el
cual fue estipulado, tal y como lo disponen los Arts. 46, 47, 48 y 2162 del Código Civil y
1554 del Código de Comercio.
Pues bien, del examen de los documentos que corren agregados a los autos, puede
constatarse con meridiana claridad, que al momento que se interpuso la demanda ejecutiva
con que se inició el proceso, la hipoteca abierta a que se refiere la recurrente, no era de
plazo vencido; por tanto, de acuerdo con lo expuesto en los apartados que preceden, no
cabe más que concluir que faltó un requisito indispensable para que pudiera accederse a lo
pedido por la impetrante, razón por la que la sentencia que dictó la Cámara de Segunda
Instancia, es totalmente legal y no contiene el vicio que se denuncia. Añadido ésto al hecho
de que la normativa procesal de casación, no permite a este Tribunal pronunciarse sobre lo
recurrido. En tal virtud: declárase sin lugar la revocatoria solicitada. Notifíquese.
M. E. VELASCO----------------------PERLA J.--------------SONIA MADRIZ----------PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN---------RUBRICADAS---------ILEGIBLE.
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