Facultad de Medicina Departamento de Salud Pública

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Facultad de Medicina
Departamento de Salud Pública
SUPERPOSICIÓN DE IMÁGENES
IDENTIFICACIÓN
FACIAL
BIDIMENSIONAL
Memoria que presenta, para optar al grado de Doctor,
Gela Merabishvili
En Barcelona, 2006
AGRADECIMIENTOS
- A todas las personas que tan generosamente me apoyaron y
ayudaron mis más sinceros agradecimientos, en especial:
- A mis directores de esta tesis doctoral Dr. Emili Huguet Ramia y
Dra. Margarida Luna Descalzo, por lo que me enseñaron y ayudaron
para que este trabajo se hiciera realidad, mi más sincero respeto y
profundo agradecimiento;
- A mis padres Mirian e Isolda con los que tengo una deuda de
gratitud por todo lo que hicieron por mí en los momentos más difíciles
de mi vida;
- A Sarah Marques Macêdo por su apoyo incondicional y su gran
cariño, mi más expresivo agradecimiento;
- Al Dr. Jordi Gratacos Roig, Director del Departamento de Dibujo de
la Facultad de Bellas Artes de la U.B, por su ayuda incondicional en
el desarrollo de esta tesis.
- Al Dr. Carlos Ascaso Terren, Profesor Titular de Bioestadística de la
Facultad de Medicina de la U.B, por su inestimable ayuda en el diseño
y desarrollo de la parte estadística, que ha permitido mejorar y
enriquecer la tesis, y por su amabilidad, paciencia y la buena
disposición que ha tenido en todo momento;
- Al Sr. Pere Clavero Padros, gerente de la Clínica Odontológica Fundación Josep Finestres, Facultad de Odontología de la U.B, y al
personal del servicio de radiología de la Clínica Odontológica
Universitaria, especialmente a la Sra. Adelaida Bontempelli Gimenez;
- A los funcionarios del Departamento de Salud Pública y de la
Secretaría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Barcelona.
A todos y cada uno en especial va mi gratitud;
- A mis amigos y compatriotas que hacen parte de la empresa
constructora, mi reconocimiento por la ayuda prestada en todas las
horas.
ÍNDICE
1. Introducción……………………………………………………………………
1
2. Objetivos………………………………………………………………………..
3
3. Justificación…………..……………………………………………………….
5
4. Antecedentes Históricos de la Identificación………………………
7
5. Técnicas Utilizadas para la Identificación Humana………………
13
5.1. Identificación de sujetos vivos..………………………………………………
14
5.2. Identificación de cadáveres recientes..…………………………………….
41
5.3. Identificación de esqueleto y restos cadavéricos….…………………
42
6. Reconstrucción del cráneo para la identificación..……………….
135
6.1. Principales técnicas de reconstrucción del cráneo..…………………
135
6.2. Ventajas y desventajas de las técnicas bidimensionales y
Tridimensionales……………………………………………………………………….
151
7. Material y métodos………………………………………………………….
153
7.1. Materiales………………………………………………………………………………….
153
7.2. Método……………………………………………………………………………………….
153
7.3. Consideraciones y discusión.………………………………………………….
248
7.4. A propósito de un caso práctico resuelto ………………………………. 251
8. Conclusiones…………………………………………………………………..
253
9. Bibliografía……………………………………………………………………..
255
1. INTRODUCCIÓN
Hace muchos años que existe el interés de historiadores, científicos y
el público en general, por el conocimiento del rostro de personajes
históricos, como también, en el caso de crímenes o accidentes,
conocer la identidad del siniestrado. El procedimiento comparativo
empezó hace más o menos unos ciento cincuenta años con los
estudios de las calaveras de personajes considerados famosos. Esta
era la costumbre que hizo que en muchos países desaparecieran
muchas calaveras de los cementerios, como ocurrió también aquí en
España con la cabeza de Goya, dato este que incentivó a muchos
criminólogos a llenar sus gabinetes de cráneos extraños o peculiares.
Después de muchos años de experiencia y progreso en este campo
científico basado en que la cara es el rasgo cognoscitivo principal en
la identidad humana individual, proponemos realizar la identificación
facial bidimensional a través de la superposición de imágenes
radiografía/fotografía.
El método de superposición, desarrollado recientemente, ha adquirido
una importancia vital para los gabinetes de identificación modernos,
ya que a través de él pueden deducirse conclusiones, sobre la cara
del fallecido y la morfología de ésta, claves fundamentales en el
proceso de identificación.
Si damos un vistazo al pasado hemos sido testigos de los grandes
personajes de la historia que han dejado huella y de las cuales tan
solo tenemos, en algunas ocasiones, una cierta mezcla de mitos y
leyendas sobre los mismos, pues en épocas pasadas no existían
recursos como los ordenadores, las cámaras de vídeo o fotográficas,
y programas que mucho nos ayudan en este camino. Hoy, gracias a
estos recursos podemos realizar de forma rápida y eficaz la
identificación facial.
En el cotejo de superposición radiografía/fotografía nos proponemos
desarrollar una técnica no destructiva y aplicable en casos especiales,
tales como en los cadáveres carbonizados, que tienen el estado de los
huesos frágiles y quebradizos, y en las grandes catástrofes, en
cadáveres irreconocibles por la destrucción de las partes blandas y
etc. Con este método también nos proponemos
determinar el
coeficiente o factor de ampliación cuando no es posible utilizar puntos
de referencia de objetos asociados a la foto. Utilizaremos las
proporciones faciales y las distancias entre los rasgos, o bien como
mínimo los 12 puntos anatómicos de referencia, tomados en la foto y
en la radiografía, entre ellos trazados, a los que se hará coincidir, si
es posible. En caso de coincidir los puntos anatómicos y las líneas,
quiere decir que se trata de la misma persona.
1
De esta forma estructuraremos el presente trabajo en partes
interrelacionadas y subdivididas en los siguientes temas:
Empezaremos tratando de los antecedentes históricos de la
identificación, las técnicas utilizadas y aplicadas a la identificación de
sujetos vivos, cadáveres recientes y a los esqueletos y restos
cadavéricos.
A continuación enfocaremos el tema de la reconstrucción del
cráneo para la identificación haciendo una mención a las técnicas
bidimensionales de superposición de imágenes, tales como: métodos
estático, dinámico y digital; y técnicas tridimensionales que incluyen
el esculpido facial y la reconstrucción facial computadorizada 3d.
Finalmente explicaremos la organización de nuestro estudio, la
metodología, las cuestiones pertinentes a la misma, expondremos y
explicaremos sucintamente el material que será utilizado en nuestro
trabajo para la perfecta identificación facial utilizando la técnica de
superposición de imágenes y presentaremos nuestras conclusiones,
consideraciones y discusiones.
2
2. OBJETIVOS
1. Desarrollar y perfeccionar el Método Estático de Superposición de
Imágenes (radiografía - fotografía) empleado en la práctica por los
autores: GLASTER y BRASH -BLUNDELL y WILSON (1937), con un
método digitalizado utilizando ordenador, programas y periféricos
informáticos.
2. Definir los puntos anatómicos de referencia en la radiografía y la
fotografía para que permitan llegar a las proporciones faciales y las
distancias entre los rasgos.
3. Definir con exactitud el coeficiente o factor de ampliación de la
radiografía y fotografía.
3
4
3. JUSTIFICACIÓN
Varios son los problemas prácticos por resolver en la identificación
forense. Los métodos existentes hoy han empezado a contribuir al
esclarecimiento de muchos casos famosos que hasta hoy esperaban
una resolución. En todos estos trabajos históricamente representados
y que vamos a mencionar en nuestro estudio, encontramos la
combinación de las técnicas más sencillas de observación (regla, lupa
y compás), con las más complejas, utilizando los recursos como
ordenador, cámara, etc.
Gracias a todos estos métodos fue posible cumplir distintos fines de
identificación, sea social o judicial, permitiendo a la justicia resolver
los complicados casos en el ámbito penal o tranquilizando la angustia
de familiares que tienen algún miembro desaparecido.
La experiencia histórica nos ha demostrado la eficacia de muchos de
estos métodos, pero también nos ha enseñado que no hay ninguno
exclusivo.
La
aplicación
y
su
rendimiento
dependen
fundamentalmente de las circunstancias del siniestro.
En 1937 GLASTER y BRASH -BLUNDELL y WILSON fueron los
primeros que utilizaron en la práctica (Caso Ruxton) el método
estático
de superposición de imágenes (radiografía - fotografía),
para la identificación, que consistía en obtener un negativo del cráneo
(radiografía) y un positivo del antemortem (fotografía) y
superponerlos de forma física, ampliando la fotografía antemortem al
tamaño real, pudiendo emplear algún objeto conocido.
La elaboración de nuestro trabajo, consiste justamente en combinar
el rigor científico de la ciencia y aportar una pequeña contribución y
perfeccionamiento del Método empleado por los autores mencionados
anteriormente.
Este trabajo pretende desarrollar a través de la Técnica Bidimensional
la perfecta identificación de un sujeto, utilizando un nuevo método de
superposición de imágenes, con auxilio del ordenador, programas y
periféricos informáticos, ofreciendo así una nueva herramienta
científica que contribuya al conocimiento médico-forense.
5
6
4. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA IDENTIFICACIÓN
“La identificación es un elemento esencial y primario de
carácter jurídico que garantiza las relaciones correctas con
las personas”. (VILLALAÍN BLANCO, J.D. 2000:17)
En general cada persona es diferente y, no habiendo dos personas
iguales, cualquier detalle anatómico o funcional la identifica
plenamente. Da lo mismo que se trate de la figura, sus medidas, su
esqueleto, su voz, su olor, las propiedades inmunológicas o su
escritura. Una comparación adecuada entre la muestra dibujada y
otra u otras indubitadas permiten comprobar la identidad de
personalidades y personas. Así se ha venido haciendo desde siempre,
buscando o creando datos que permitan identificar a las personas,
desde la amputación de partes corporales al tatuaje o la mera
descripción personal.
En los días de hoy podemos decir que la identificación de las personas
se originó en la Antropología Judicial.
“La Antropología Forense tiene principalmente como fines el
estudio de los restos óseos esqueléticos con objeto de llegar
a la identificación personal, averiguar la causa de la
muerte, la data de la muerte, la edad, raza, sexo, estatura
del sujeto, marcas profesionales, antiguas lesiones óseas,
estudio de la cavidad bucal (verdadera caja negra del cuerpo
humano)
y
todo
cuanto
sea
posible
siempre
para
proporcionar información a los investigadores policiales para
que puedan llegar a la identificación del sujeto.” (REVERTE
COMA, José M. 1999: 39)
“Adolfo QUELETE (1796-1874) describió la Antropometría,
por los años setenta del siglo XIX entendiendo por tal la
medida de las diferentes cualidades del hombre. Pablo
BROCA (1824-1880) fundó la Escuela y la Sociedad de
Antropología de París; de esta fase arranca la Antropología
Biológica actual y una rica rama de la Antropología Criminal,
cuyo máximo exponente fue LOMBROSO, y que entre
nosotros alcanzó sus cotas más altas con Rafael SALILLAS.
7
No olvidemos tampoco los estudios antropométricos que
surgieron de la antropología pedagógica española y que nos
ofrecen una magnífica fuente para el conocimiento de la
realidad antropométrica de nuestro país. Al respecto pueden
verse los trabajos de BALLESTEROS (1882), DÍAZ MUÑOZ
(1914)
o
SIMARRO,
antropológicas,
con
creador
de
SALILLAS
y
las
célebres
SAIZ
hojas
CAMPILLO”.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000:18)
Según VILLALAÍN BLANCO, J. D. (2000), la identificación anatómica
fue propuesta por Enrique LEGRAND DU SAULLE (1830-1886) que
complementaba con la descripción de características particulares,
pero la aplicación del sistema antropométrico a la identificación fue
realizada por Alfonso BERTILLÓN (1841-1914), que aplicó los
conocimientos antropológicos que aprendió de su padre a la
identificación policial. Comparó el burdo sistema identificador al uso
por entonces en la policía francesa con el cuidadoso sistema
antropométrico que había visto desarrollar a su padre. Era hijo de
Luis Adolfo BERTILLÓN, estadístico y estudioso de antropología. Crea
la Antropología judicial que llega a imponerse como sistema
identificativo en todo el mundo civilizado. Se implanta en Francia en
1892 y llega a España a través de los estudios previos realizados y
los Reales Decretos de 10 de septiembre de 1896, 23 de marzo de
1905 y 12 de febrero de 1909 y la enseñaza medicolegal.
En 1879, BERTILLON inauguró en París un sistema de aplicación de la
Antropometría al individuo vivo, que muy pronto fue aceptado por
todos los países de Europa y América, influyendo en la creación de
gabinetes antropométricos en todos los centros policiales. Esta
técnica fue llamada bertillonaje y consiste en obtener varias medidas
del cuerpo del sujeto adulto, y elaborar una ficha donde era apuntada
la estatura de pie y sentado, la braza o envergadura, los diámetros
de la cabeza, altura y anchura de las orejas, longitud del dedo medio
izquierdo de la mano y los tatuajes existentes, el color del iris
izquierdo, marcas y rasgos diferentes de la fisonomía y de otras
partes del cuerpo. Todos estos datos se completaban con una foto,
estableciendo la misma distancia, altura y ángulo de enfoque. La
ficha se completaba con datos generales del sujeto, nombre, edad,
fecha y lugar del nacimiento. Este sistema, permitió la identificación
de muchos delincuentes, principalmente en los casos que reincidían.
La aparición de nuevos sistemas de identificación hizo que cayese en
desuso el complejo procedimiento identificativo que suponía el
bertillonaje. Dos meses después de haber muerto BERTILLON, se
reunieron en Mónaco especialistas de todo el mundo que se
decantaron por la Dactiloscopia como elemento básico identificador.
8
Por entonces cuando fue descubierta y reconocida la importancia de
las huellas dactilares, decayó el bertillonaje, pero no desapareció
totalmente, por lo tanto hoy este sistema es utilizado cambiando
medidas de Bertillon en la ficha policial juntamente con las huellas
dactilares y palmares. Actualmente hay un replanteamiento
antropométrico en obras como las de García Pindado, Peñalver Olmas
y Sanz Avalos, debido al cambio que se ha producido en los
problemas periciales y la necesidad de vuelta a sistemas anteriores
cuando faltan elementos dactiloscópicos o lofoscópicos de apoyo.
La aplicación de la fotografía a la identificación supuso un avance
importante, que aún hoy se sigue empleando como apoyo de otras
técnicas, pero dejó de ser operativo a medida que aumentaban las
colecciones fotográficas de los delincuentes, sin que se idease ningún
procedimiento efectivo de clasificación de las fotografías.
“Cuando a finales del siglo XIX, NIEPCE realiza la primera
fotografía
se
creyó
tener
el
recurso
ideal
para
la
identificación, sobre todo desde el punto de vista policial,
dado que si se disponía de la fotografía de un individuo que
había delinquido, podía ser reconocido nuevamente cuando
cometiera un nuevo delito.
Se vuelven a repetir los errores judiciales al confundir a
personas con gran parecido físico. Alphonse BERTILLÓN
trata de solucionar este problema mediante lo que él llamó
el señalamiento antropométrico y la fotografía signalética,
método basado en la descripción de las características de la
persona. BERTILLÓN reunió en un cuadro sinóptico todos los
rasgos fisonómicos que se pueden encontrar, cada rasgo es
considerado en su forma, en su longitud, altura e inclinación
distribuyéndola en siete grados. A esto añadió la fotografía
signalética, que consiste en realizar dos fotografías de un
mismo sujeto: una de frente que tiene como centro de foco
el nasion y otra de perfil cuyo centro está en el ángulo
externo del ojo, añadiendo por último la descripción de
marcas particulares como antiguas cicatrices quirúrgicas,
lunares, tatuajes, deformaciones congénitas o adquiridas, y
en
general
todo
individualización”.
aquello
que
pudiese
(CASAS
SÁNCHEZ,
ayudar
Juan
de
a
la
Dios
2000:1246)
9
Un avance significativo lo constituyó la Roentgenología judicial,
creada por LEVINSOHN, en Berlín, en 1899, esto es la aplicación de
los Rayos X a la Antropología judicial, a la investigación y pesquisas
policiales, rama que mantiene en la actualidad todo su interés y
posibilidades.
La Dactiloscopia, junto a la Odontología Forense, (especialmente útil
para resolver casos de cadáveres calcinados), y las avanzadas
técnicas analíticas de la actualidad (con las posibilidades que el ADN
ofrece ya en materia de identificación), permiten afrontar la
generalidad de los casos a resolver. Los avances técnicos de los
últimos años relacionados con la genética humana, auguran una
época, sin duda ya iniciada, y en constante desarrollo, donde cada
vez será más fácil relacionar unos restos humanos, incluso un solo
cabello, con una familia determinada.
En toda esta evolución hay una larga lista de hombres, de nombres,
de métodos, de técnicas, de procedimientos, encaminados todos al
mismo fin: identificar a cada individuo, ya sea un sujeto vivo, ya un
cadáver. Los nombres de PURKINJE, FRIGERIO, MATHEIOS,
LACASSAGNE, BERTILLÓN, AMOEDO, HERSCHELL, FAULDS, GALTON,
HENRY, VUCETICH, OLORIZ Y BALTHAZARD, entre otros, son figuras
relevantes en materia de identificación personal y es a ellos a quienes
debemos la creación, mejoras y progresos en las diversas técnicas
identificativas, hasta llegar al momento de auge actual en que se
encuentran.
Las tentativas de otros autores por la implantación de nuevas
técnicas, que algunos esbozaron, como el estudio de las uñas, de las
ramificaciones venosas del dorso de la mano, del fondo de ojo, de la
cicatriz umbilical, o el inyectar parafina bajo la piel con fines de
identificación, supusieron inquietud y preocupación por el tema, pero
no llegaron a consolidarse; menos aún el intento aislado de algún
autor atrevido que propuso tatuar a cada persona, fuera delincuente
o no, con su nombre y apellidos.
A nivel de la policía, a fines del siglo XIX funcionó un Gabinete de
Antropometría y Fotografía en el Gobierno Civil y el 18 de enero de
1906 se creó la Academia para los aspirantes a ingreso, luego Escuela
teórico-práctica, y 22 de marzo de 1906, la Escuela de Policía de
Barcelona. En la primitiva escuela constaba la enseñanza de Nociones
de Antropometría, que pasó a constituirse en la Escuela TeóricoPráctica en asignatura de Antropometría y fotografía como señal de la
influencia del bertillonaje en aquella época, que, en la reforma
ulterior pasó a ser de Identificación y Técnica Policial. En 1911
comenzó a funcionar en la Jefatura de Madrid un servicio de
identificación y poco después en Barcelona y otras provincias. En
1921 el Gabinete de Madrid pasó a ser Gabinete Central de
Identificación al que todos los gabinetes provinciales y locales debían
enviar un duplicado de fichas o reseñas que hicieran; en 1922 se creó
10
el Laboratorio de Técnica Policial; en 1925 la Escuela de Policía
Española. El 1934 (14 de noviembre) se reconoció el carácter oficial
del Servicio Central de Identificación y de las reglas a que deben
atenerse los Gabinetes Provinciales y Locales de Identificación en sus
relaciones con el Central. En 1969, el Instituto de Estudios de la
Policía; en 1988, el Servicio Central de Policía Científica.
11
12
5. TÉCNICAS UTILIZADAS PARA LA IDENTIFICACIÓN HUMANA
Cada ser humano se diferencia de los otros por un conjunto de signos
externos que permiten el reconocimiento, o sea, la identificación.
“Identificar a una persona es establecer el conjunto de
rasgos que permiten reconocerlo y que los distinguen de los
demás, determinando así su individualidad. A lo largo de la
historia, el hombre ha querido conocer la identidad de sus
semejantes
y
los
procedimientos
han
ido
desde
las
mutilaciones de determinados órganos, las marcas con
hierro candente y los tatuajes a los recursos verbales como
el nombre y apellidos y posteriormente escritos, como la
firma
y
filiación.”
(CASAS
SÁNCHEZ,
Juan
de
Dios
2000:1245)
“En la vida corriente cada uno de nosotros es llamado
frecuentemente a justificar su identidad, especialmente por
autoridades administrativas o de policías.” (SIMONIN C.
1973:814)
“En Medicina le tiene gran importancia el problema de la
identificación, y bajo el punto de vista médico, en aquellos
casos en que a partir de datos biomédicos se va a extraer la
información necesaria para identificar al individuo”. (CASAS
SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:1245)
Según KEITH SIMPSON (1981) en la identificación de seres humanos,
por una simple descripción de la edad, sexo, altura y peso, color de
los ojos y piel, detalles de los dientes, y de características especiales
como marcas del nacimiento o deformidades, heridas y cicatrices,
tatuajes, incluso alguna enfermedad o signos naturales manifiestos
pueden complementar los retratos de identificación. Con la ayuda de
un registro criminal, se puede llegar a más datos como: medidas
antropométricas estándar, fotografías y lo que es más difícil, las diez
huellas dactilares. Si estos datos citados arriba como: edad, sexo,
altura, etc. pueden complementar los retratos de la identificación, con
las huellas genéticas, huellas dactilares y la Queiloscopia y
Palatoscopia puede llegarse a una identificación precisa.
Según CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios (2000), se puede plantear los
siguientes supuestos:
13
“- Identificación de sujetos vivos: En el sujeto vivo se usan
técnicas que van desde la descripción somática y caracteres
fisonómicos, al estudio grafológico, estudio de la voz, de las
huellas dactilares, la palatoscopia, la queiloscopia o en los
últimos tiempos el estudio del ADN.
- Identificación de cadáveres recientes: En el cadáver
reciente es posible aplicar las técnicas de la descripción
somática y caracteres fisonómicos, el estudio de las huellas
dactilares, la palatoscopia, la queiloscopia y el estudio del
ADN.
- Identificación de esqueleto y restos cadavéricos: En el
estudio de los restos cadavéricos no son de utilidad las
técnicas usadas en los grupos anteriores, ya que las partes
blandas han desaparecido, y, en este caso, aplicaremos
técnicas propias de la Antropología Forense”. (CASAS
SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:1245)
Los métodos de la Antropología y Antropometría prácticamente han
desaparecido, de la formación policial, oscurecidas por el éxito
grandioso de la Lofoscopia. La práctica diaria, sin embargo, plantea la
necesidad de regresar a los orígenes para aplicar el sistema, más que
a la identificación del individuo vivo, a la necroidentificación en
cualquiera de sus fases, especialmente en la fase de esqueletización,
pero tampoco podemos olvidar la importancia que tiene la
informatización, tanto a la hora de facilitar la reunión de datos como
para plantear la identificación segura y definitiva.
Las técnicas a aplicar son múltiples y su uso depende, de los
conocimientos del identificador y su capacidad para aplicarlos.
La defensa de la colectividad y el orden social no aseguran una
identificación sin métodos que sean capaces de atribuir a cada ser
humano una identidad, una individualidad cierta, durable, objetiva,
invariablemente reconocible y fácilmente observable.
A continuación vamos a ir describiendo cada una de estas técnicas
por separado.
5.1. Identificación de sujetos vivos
Según CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios (2000), en el sujeto vivo se
usan técnicas que van desde la descripción somática y caracteres
fisonómicos, al estudio grafológico, estudio de la voz, de las huellas
14
dactilares, la palatoscopia, la queiloscopia, y en los últimos tiempos el
estudio del ADN.
5.1.1. Descripción somática y datos fisonómicos
En la descripción somática, se trata de recoger todos los datos físicos
y particulares del individuo. Dentro de esta descripción existe un
apartado que corresponde a la descripción de los datos fisonómicos
de esa persona. Este es el sistema ideado por BERTILLON en el año
1879 y hasta hoy día no ha perdido su uso y tiene gran importancia.
En este método se obtienen una serie de medidas sobre el cuerpo del
sujeto adulto, con la finalidad de elaborar una ficha con datos
somáticos y fisonómicos importantes del individuo Este ha sido el
método más usado a lo largo de la historia, pero desde el principio ha
generado algunos errores judiciales en personas que se parecían
físicamente y por eso hoy, estos datos son usados juntamente con
otras técnicas utilizadas en la identificación, como es el caso de las
huellas dactilares, técnica que abajo describimos.
5.1.2. Huellas Dactilares
Galton calculó que la probabilidad de que dos huellas de dedos
diferentes fueran identificadas era menor de una entre sesenta y
cuatro mil millones. Es significativo decir que nunca se encuentran
huellas idénticas a menos que procedan del mismo dedo, como es
demostrado en todos los registros del mundo del crimen. Incluso es
importante relatar que una porción de la palma de la mano que
aparecía entre la rotura de un guante que llevaba un reventador de
cajas fuertes, dejó detalles suficientes para el experto en huellas
demostrar la identidad; la huella de un pie desnudo señaló
concluyentemente al sospechoso.
La importancia de las huellas dactilares magnificada por su precisión,
en los días de hoy es tan grande, que extrapoló las fronteras de su
utilización por los órganos jurídicos y se está utilizando en los
aeropuertos y diversas empresas, para la correcta identificación
personal.
La piel del pulpejo de los dedos, de la palma de las manos y de la
planta de los pies no es lisa. Presenta finos pliegues destinados a
ofrecer una mayor superficie a los corpúsculos táctiles. Estos pliegues
forman surcos y crestas papilares que dibujan variadas figuras
lineales. Estas figuras pueden ser exactamente reproducidas, previo
embadurnado de los dedos con tinta, por aplicación de los pulpejos
digitales sobre una hoja de papel o un cartón: así se obtiene una
huella digital, también llamado dactilograma, o sea, dactilograma es
15
la impresión de los pulpejos de los dedos y de los pulgares
encontrados en cualquier objeto y a menudo en los objetos de crimen
investigados.
“En Escocia las huellas dactilares pueden ser tomadas en
cuanto la persona está bajo arresto, pero en Inglaterra no
pueden tomarse antes de ser declarada convicta, a menos
que exista aun autorización o una orden de una magistrado,
al cual puede recurrir un inspector de policía”. (KEITH
SIMPSON 1981:35)
Según VILLANUEVA CAÑADAS (2004) la identificación dactiloscópica,
hace más de mil doscientos años, ya era empleada en Corea en la
venta de esclavos. En el año 1829 PURKINJE estudia los dibujos
dactilares clasificándolos en nueve tipos. A partir de este momento
empieza su desarrollo científico, aun que no se aplicaron con fines
identificativos. Estos estudios fueron aprovechados posteriormente
por VUCETICH.
“Los
ingleses
fueron
los
primeros
en
pretender
una
aplicación práctica a estos dibujos: HERSCHELL, en 1958,
como recaudador de impuestos en la India, hace obligatorio
el que todos los contribuyentes estampen su dedo en los
documentos. FAULDS (1880) establece por primera vez el
carácter inmutable de estos dibujos. GALTON, entre 1891 y
1895, investigó la herencia de las huellas dactilares y dio un
sistema de clasificación demasiado complejo, que fue
simplificado por HENRY en 1901”. (VILLANUEVA CAÑADAS,
E. 2004:1291)
Diversos autores clasifican de manera distinta las huellas dactilares.
En el libro Manual de Medicina Legal y Forense de CASAS SANCHEZ
JUAN DE DIOS (2000) encontramos cuatro tipos básicos de huellas
dactilares establecido por JUAN VUCETICH (1881) a partir de las
experiencias de MALPIGHI, PURKINJE y MEISSNER. Y son: arco,
presilla interna, presilla externa y verticilo.
OLÓRIZ (1908) los nombra como: adelto, dextrodelto, sinistrodelto y
bidelto, y a los que llama A, D, S, V.
Según KEITH SIMPSON en su libro Medicina Forense, que fue
publicado por primera vez en Inglaterra en el año 1947 por EDWARD
16
ARNOUD y traducido para la edición española por la MARTÍNEZ
SAURET en 1981, presenta la clasificación primaria de las huellas
dactilares basada en la disposición de las líneas del patrón cutáneo,
en uno de cuatro tipos generales. Las principales líneas caen dentro
de una forma de arco, asa, espiral, o mixta.
C. SIMONIN en el libro Medicina Legal Judicial que tuvo su primera
publicación en Francia en el año 1955 y fue traducido para la edición
española en el año 1962 y en su tercera edición datada de 1973
habla de la siguiente orden de clasificación de GALTON y HERSCHELL,
basado en JUAN VUCETICH: grupo 1, que llama arcos; grupo 2, con
los bucles a la izquierda; grupo 3, con los bucles a la derecha; grupo
4 o volutas simples; y finalmente el grupo 5 o volutas dobles.
CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios (2000) enfatiza que los puntos
característicos de un dactilograma son aquellos que particularizan
cada dedo, se distinguen de cualquier otro y representa en la
dactiloscopia las singularidades y las señales del retrato hablado.
El número de puntos característicos mínimos para establecer la
identidad en España es en torno a 10 ó 12. En cada país, varia entre
6 y 17 puntos.
“ Los puntos característicos usados por los distintos servicios
de identificación españoles
(ANTON BARRERÁ, 1998) son
los siguientes:
a)
Abrupta. Cresta papilar emplazada entre otras dos, casi
paralela a ella que termina sin volver a reaparecer.
b)
Bifurcación. Es la cresta papilar que parte del lado
izquierdo del dibujo y se desdobla en los que continúan
paralelamente un trecho más o menos largo.
c)
Convergencia. De igual forma a la anterior, pero de
situación opuesta. Puede presentar nueve subvariedades
conforme ambas ramas sean de igual longitud, sea mas
corta la superior, inferior, externa o interna y según sea
pequeña o grande cada una de las ramas.
d)
Desviación. La constituyen dos crestas procedentes de
lados
distintos
de la
impresión
que
parece
que van
encontrarse y formar una sola línea pero cuyos extremos se
desvían.
17
e)
Empalme. Se constituyen con una cresta corta de
dirección oblicua, que se funde por sus lados con otras dos
paralelas, creando ángulos muy agudos.
f)
Fragmento. Cresta de extremos abruptos y dimensión
variable. Se denomina “pequeño”, el fragmento que no es
cinco veces mayor que su anchura.
g)
Interrupción. Solamente se aprecia la natural. A veces
esta interrupción puede deberse a mal entintado u otras
causas atribuibles al operador.
h)
Ojal. Espacio elíptico formado por las ramas de una
cresta bifurcada que vuelve a fusionarse por convergencia.
i)
Punto. Pequeño fragmento de cresta, tan corto como
ancho. Suele aparecer en el centro de una interrupción o de
un delta hundido o entre dos crestas.
j)
Transversal. Cresta que se aparta de la dirección
principal y cruza otras dos de dirección opuesta.
k)
Cuña o ensamble. Cresta que entra por entre otras dos
paralelas, como el ensamble de un carpintero.
m)
Y o M. Es la bifurcación que se fusiona, por ambos
extremos desdoblados, con las crestas que le son paralelas”.
(Véase fig. 1). (CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:12491250)
18
Figura 1. (CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:1249)
Abruptas: 1,2,3,5,11,13,23,24,25,26,28,32,34,37,38,39,43,45.
Bifurcaciones: 4,29,30,33,41.
Bifurcación con rama grande inferior: 16.
Bifurcación con rama pequeña inferior: 7.
Bifurcaciones con rama pequeña superior: 12,27.
Convergencias: 19,21,31,46,47,48,50.
Convergencia con rama pequeña externa: 40.
Desviación: 6.
Empalme: 36.
Fragmento grande: 9.
Fragmentos pequeños: 15,20,49.
Interrupciones:8,14.
Ojales: 10,18,42.
Punto: 17.
Transversales: 35,44.
La comparación de unos dieciséis a veinte puntos en un área
pequeña, ampliada para demostrar el detalle de dibujos marginales,
se hace mejor cuando se toma una fotografía.
El médico llamado al local del crimen nunca debe tocar vasos,
muebles, teléfonos, o pomos de puertas, en los cuales se hayan
podido dejar impresiones que puedan ser muy importantes y
reveladoras. Los vestidos y la piel de la víctima no tienen ninguna
utilidad para las huellas dactilares, y el médico puede proceder a
establecer el hecho de la muerte sin temor de interferir en la
19
investigación criminal aunque manipule el cuerpo y los vestidos para
este objetivo legal.
La singularidad de las huellas dactilares nunca cambia, aunque las
cicatrices pueden modificarlas. Los intentos para desfigurar esta
marca de identidad acusadora por medio de cortes profundos sólo
añaden detalles desenmascaradores a la huella.
El cabello, el útero femenino y la piel de la yema de los dedos son las
porciones orgánicas más resistentes a la putrefacción. Por eso la
dactiloscopia está regida por las leyes de la perennidad; la
inalterabilidad, ya que se puede tomar a cualquier edad sin presentar
cambios; y la variabilidad, pues se modificarán las dimensiones
porque el individuo crece, pero no el trazado.
5.1.3.
Huella Genética
Molécular
-
Antropología
e
Identificación
“La huella genética, la identificación de un ser vivo, sea
humano o no, por las características singulares de su
genoma, se ha convertido en un método de identificación
universal en todas las aplicaciones en que es factible, con
una aceptación que hace 20 años apenas se vislumbraba”.
(JEFFREYS, Leicester Alec. Edición de internet, 15 de
septiembre de 2004:1)
Figura 2.
(JEFFREYS, Leicester Alec, Edición de
internet, 15 de septiembre de 2004:1)
La Hemogenética Forense nace a principios de siglo, cuando KARL
LANDSTEINER describe el sistema ABO de los hematíes y VON
DURGEN y HIRSCHFELD descubren su transmisión hereditaria. Esta
ciencia surgió como una rama de la Criminalística cuyo objetivo era la
identificación genética tanto en casos de investigación criminal como
en estudios biológicos de la paternidad. Inicialmente, las
investigaciones se centraban en el estudio de antígenos eritrocitarios
(sistema ABO, Rh, MN), proteínas séricas, enzimas eritrocitarias y
sistema HLA. Con el estudio de dichos marcadores podía incluirse o
excluirse una persona como posible sospechoso por poseer una
20
combinación genética igual o diferente a la del vestigio biológico
hallado en el lugar de los hechos.
Pero fue a mediados de siglo pasado, cuando gracias al
descubrimiento del ADN, de su estructura y al posterior avance en las
técnicas de análisis de dicha molécula, la Hemogenética Forense
evolucionó considerablemente, hasta el punto de que hoy en día
puede hablarse de una nueva subespecialidad dentro de la Medicina
Forense: la Genética Forense.
"Mi vida cambió en la mañana del lunes 11 de septiembre de
1984, a las 9.05.
momento
eureka
En ciencia no es habitual tener un
así.
Estábamos
obteniendo
patrones
extraordinariamente variables de ADN, incluyendo el de
nuestro técnico de laboratorio, su madre y su padre, así
como de muestras no humanas. Mi primera reacción a estos
resultados fue: 'esto es demasiado complicado' y de repente
me di cuenta de que teníamos una huella genética".
(JEFFREYS, Leicester Alec. Edición de internet, 15 de
septiembre de 2004:1)
La Antropología molecular es una parte de la ciencia de reciente
incorporación en el campo de la antropología biológica humana. Los
primeros logros alcanzados de impacto fueron los resultados
obtenidos por el equipo de ALEC JEFFREYS y el grupo de PETER GILL,
en el inicio de los años 90, cuando conseguirán informaciones de la
molécula de ADN de restos óseos antiguos (Caso Menguele y Caso
Romanov).
Hasta ese momento la identificación por medios antropológicos, había
contado con grandes investigadores en amplios trabajos, que
pusieron en marcha técnicas que permitían establecer la especie
(animal o humana) y el género (masculino o femenino) de los restos
óseos con gran rigor, pero cuya fiabilidad y exactitud no eran todo lo
deseable que se requería para la identificación.
“Con
la
incorporación
de
la
ingeniería
genética
y
el
conocimiento progresivo del genoma humano se consiguen
avances, que se verán incrementados en la próxima década
de manera impresionante, al aplicarse nuevas técnicas
(estudios de mutaciones puntuales) y métodos aun más
ajustados y refinados (microchips)”. (VILALLAÍN BLANCO,
J.D. 2000:393-394)
21
La técnica de la Huella Genética permite la identificación de individuos
con la metodología más exacta y fiable hasta ahora desarrollada. Esta
técnica consiste en estudiar ciertas regiones del ADN altamente
variables en la población, que permiten identificar a los individuos.
Así, analizando un determinado número de regiones polimórficas, la
probabilidad de que dos individuos sean genéticamente iguales es
prácticamente nula (excepto en el caso de gemelos univitelinos).
El término "huella genética" se acuño para definir la tecnología del
ADN recombinante que determina grupos de polimorfismos de ADN
altamente variables que permiten sean utilizados para identificar con
certeza la identidad de un asesino, violador o descubrir el causante
de un delito o falta, mediante el análisis de una muestra biológica
tipo sangre, semen, saliva, pelo, diente, hueso y otras.
En España la policía empezó a analizar de forma generalizada
material genético, el llamado 'ADN forense', en 1992. Desde entonces
se usa para todo tipo de delitos y identificaciones.
Las pruebas genéticas de identificación están revolucionando
actualmente la medicina forense, el sistema judicial y la
criminalística. El método de tipificación del DNA (ó ADN, ácido
desoxirribonucleico) desarrollado hace varios años por el profesor de
la Universidad de Leicester, ALEC J. JEFFREYS (1984), se basa en la
misma metodología desarrollada para estudiar las patologías
hereditarias, identificando los genes causantes de enfermedades en
familias portadoras de un trastorno congénito y prediciendo el riesgo
que puede correr el individuo de portarlo. El campo de trabajo que
comprende el análisis del ADN humano es amplio y muy diverso:
desde la biomedicina y la antropología hasta las ciencias policiales
forenses.
Comparativamente a la eficiencia de los marcadores de proteínas, en
la identificación forense la tipificación del DNA posee dos ventajas:
puede utilizarse en el análisis de muestras pequeñas y antiguas, y su
nivel de certeza de probabilidad es triple a cuádruple que la anterior
(NEUFELD Y COLMAN, 1991).
Para determinar si dos muestras de DNA poseen el mismo origen, se
examinan las regiones variables de los pares de bases del DNA. Estas
regiones pueden segmentarse mediante enzimas de restricción y se
les denomina RFLP (Fragmentos de
Restricción de
Longitud
Polimórfica). Para la identificación del DNA se requiere que los RFLP
sean altamente variables, es decir, polimórficos, con un gran número
de variantes o locus en la población. Algunas regiones del DNA
humano contienen secuencias centrales que se repiten variablemente
en cada individuo y por tanto, cuando las enzimas de restricción
22
cortan el DNA en millones de piezas, así también varía la longitud de
los fragmentos. Mediante la introducción de sondas que se enlazan
solamente con los fragmentos que portan la secuencia central se
aíslan los fragmentos variables de los irrelevantes.
Para entender el proceso de la identificación por ADN es necesario
conocer varios conceptos básicos en genética y biología molecular
aplicados en la investigación genética. Son conceptos como: célula,
ADN nuclear, cromosoma, genoma, alelos, perfil genético,
mitocondria, ADN mitocondrial, secuencia y otros más que iremos
citando a lo largo de este trabajo.
a) Conceptos Básicos:
La célula es considerada la unidad básica de un organismo vivo. Esta
unidad de vida tiene una estructura formada por un núcleo y un
citoplasma. En las dos zonas, los seres vivos pluricelulares poseen
ADN – Acido Desoxirribo Nucleico -, molécula donde se almacena, de
manera codificada, toda la información relacionada con la estructura
y metabolismo de un ser vivo.
“El núcleo es el lugar donde se conserva la información
genética de los individuos, en concreto en los cromosomas.
Los
cromosomas
van
a
ser,
entre
otras
cosas,
los
encargados de definir una especie y un género. Cada
especie animal (no trataremos aquí del mundo vegetal) se
caracteriza
por
poseer
un
número
determinado
de
cromosomas: 1 par de cromosomas tiene ciertos nemátodos
(gusanos); 6 pares, la mosca; 19 los gatos, 39 los perros,
24 los chimpancés y 23 pares el hombre”. (VILALLAÍN
BLANCO, J.D. 2000:394)
Así pues, por la cantidad de cromosomas se diferencian las especies,
y por los cambios acumulados en cada uno se diferencian los seres
humanos de una especie concreta.
Los cromosomas que determinan el sexo son llamados cromosomas
sexuales. En la especie humana, para saber si un sujeto es varón o
mujer, es necesario conocer los rasgos externos que los diferencian –
el fenotipo, como también el conjunto de cromosomas que
constituyen el llamado cariotipo en el que se incluyen los
cromosomas sexuales X e Y. En las mujeres el cariotipo viene definido
23
por dos cromosomas X (44-XX) y en los varones por un cromosoma X
y otro Y (44 – XY).
“El total de ADN, contenido en los cromosomas, es lo que se
conoce como genoma humano, que está constituido por un
conjunto
de
compuestos
químicos
conocidos
como
nucleótidos, cuya combinación a lo largo del genoma define
a un individuo de una especie concreta.
Sabemos que el material genético se expresa mediante un
código de letras,- A, T, G, C – que se corresponden con las
iniciales
de
sus
elementos
constituyentes,
llamados
nucleótidos. A por Adenina, T por Timina, G por Guanina y C
por Citosina”. (VILALLAÍN BLANCO, J.D. 2000:394)
Es importante enfatizar que cada persona hereda, del total de 46
cromosomas que posee en cada una de sus células, 23 cromosomas
de su madre y otros tantos de su padre y que todos ellos se
encuentran en el núcleo de la célula.
Un concepto imprescindible que se debe tener en cuenta es que todas
nuestras células además de poseer un núcleo (excepto los hematíes o
glóbulos rojos de la sangre) contienen en su citoplasma de
centenares a miles de orgánulos llamados mitocondrias que
desarrollan varias funciones reguladas por un ADN contenido en su
interior. Además todos nosotros heredamos de nuestras madres el
mismo ADN que ellas poseen en sus mitocondrias. Es fundamental
conocer esta peculiaridad, ya que es de enorme importancia en la
identificación genética.
Este material heredado y contenido en la célula (núcleo o
mitocondrias) una vez analizado en un tejido humano, en un resto
óseo o en una pieza dental, nos ofrece un perfil genético único, que
corresponde a un individuo concreto y sólo a él.
“El estudio de fragmentos del ADN contenido en todas las
células humanas ofrece, nuevas oportunidades en el campo
de la antropología. Así la aplicación de poderosas técnicas
para el análisis del ADN nuclear y mitocondrial por medio de
la Reacción en Cadena de la Polimerasa – PCR, del inglés,
Polymerase Chain Reaction – posibilita la recogida de
información genética directamente del hueso o de restos
24
momificados de pueblos antiguos, y promete proporcionar
gran cantidad de datos genético-poblacionales de enorme
valor, útiles en la identificación de personas, de vestigios y
en el estudio de la historia de la evolución humana”.
(VILALLAÍN BLANCO, J.D. 2000:396)
b) Aplicaciones Forenses y Policiales del Genoma Humano:
Todo el ADN que se hereda tiene interés en las investigaciones
policiales y forenses. Se puede clasificar el contenido de nuestro
genoma, de manera general, en dos secciones: una primera que
comprende el genoma de tipo expresivo –los genes- y una segunda
en donde el genoma carece de expresión, sin genes.
La primera representa un 5% del total del genoma humano que
denominamos codificante o con sentido ya que la información que
contiene sea traducida para que la célula realice una función
concreta: la síntesis de proteínas. Varia poco entre los individuos, y
su interés es biomédico. Su estudio permite conocer, por ejemplo, si
una persona padece una enfermedad. Esta peculiaridad invalida su
uso en identificación, con una excepción de una región localizada en
el cromosoma 6, concretamente en la región DQA1.
“Para la identificación por medio del análisis del ADN tiene
interés el llamado ADN no codificante, inexpresivo o “ADN
basura”, presente de forma mayoritaria -el 95%- en nuestro
genoma, pues la información que contiene no se traduce en
una función concreta y presenta una enorme variabilidad
interindividual.
Estas
variaciones
del
ADN
entre
las
personas, se conocen como polimorfismos genéticos. La
causa de estas variaciones son las modificaciones en la
secuencia del ADN, que van desde el cambio de un
nucleótido o mutación (polimorfismo de secuencia) hasta el
cambio en la longitud de una región específica por pérdida o
ganancia de varios nucleótidos (polimorfismo de tamaño).
Este ADN no codificante se encuentra en su mayor parte,
repetido muchas veces a lo largo del genoma nuclear de ahí
que se denomine también repetitivo”. (VILALLAÍN BLANCO,
J.D. 2000:397)
25
En cuanto al otro tipo de ADN, el que hace parte del genoma
mitocondrial, y que representa el 1% del total del genoma celular,
posee una región de escaso tamaño con ADN no expresivo llamada DLoop (Bucle o Lazo de Desplazamiento) que también puede ser
utilizada en identificación.
La identificación de un sujeto se realiza mediante el análisis del ADN
no codificante, sea nuclear o mitocondrial.
ADNn
ADNmt
LOCALIZACIÓN
Núcleo-cromosomas
Citoplasmamitocondrias
TAMAÑO
Enorme
Pequeño
ESTRUCTURA
Helicoidal
Circular
CANTIDAD
Único
Centenas a miles
HERENCIA
Ambos padres
Materna
GENOMA
Aún no conocido
Conocido desde 1981
CÓDIGO
La mayor
sentido
Nº DE GENES
Unos 100.000
Solo 37
FUNCIÓN
Síntesis proteica
Producción de energía
UTILIDAD
Filiaciones
Solo filiación materna
identificación siempre identificación
cuando
que quede ADNn
no hay ADN en la
muestra
parte
sin La mayor
sentido
parte
con
Tabla 1. (VILALLAÍN BLANCO, J.D. 2000:402)
c) Tipos de muestras consideradas idóneas
Es necesario saber cuales son las muestras sobre las que se pueden
aplicar las técnicas desarrolladas para un estudio en laboratorio.
Ciertos tipos de vestigios, tales como: cabellos, fragmentos de pelo o
restos óseos de cierta antigüedad, restos carbonizados, que eran
considerados atípicos y poco apropiados para una identificación
positiva, hasta hace tan solo una década, proporcionan, gracias a las
26
técnicas de ADN recombinante, suficiente cantidad de ADN para
realizar una identificación.
La posibilidad de éxito en este tipo de análisis está en función de
variables como: tipo de vestigio, grado de deterioro que presenta,
forma de recogida y manipulación, conservación y almacenaje, medio
de envío y tiempo de remisión.
VILLALAÍN BLANCO (2000) habla de la importancia de describir
cuales son las piezas más productivas para la obtención de
información genética y la razón de su interés, la forma de recogida,
de preparación y de embalaje, quedando por último el medio de envío
de recogido.
Así establece:
1. Si los restos cadavéricos están totalmente esqueletizados, y
se desea una identificación genética mediante la prueba de ADN, es
fundamental que se recojan con precauciones adecuadas y siempre
comprobando el nivel de integridad de las piezas, los siguientes
vestigios por orden de preferencia:
*. Huesos largos completos, de preferencia el fémur seguido del
húmero.
**. Piezas dentales:
conservados, íntegros.
molares,
si
es
posible,
que
estén
bien
***. Costilla de dos a tres piezas, clavículas, cresta ilíaca, escápulas.
****. Restos fragmentados. En este caso específico, el grado de
deterioro o los signos de degradación que estén presentes - aspecto
poroso o consistencia frágil - marcarán los límites para la obtención
del ADN.
2. Si los restos se encuentran parcialmente esqueletizados, el
orden de recogida será igual, teniendo en cuenta que se pueden
eliminar las partes blandas adheridas a los restos.
3. Si los restos cadavéricos son recientes y según el grado de
putrefacción que presenten, se puede recoger en tubos con
anticoagulante (EDTA) sangre de la cavidad cardiaca del cadáver y
porciones del músculo esquelético, unos 10 a 20 gramos, de la zona
más conservada, que generalmente es la mas cercana al hueso o la
más alejada de las agresiones medioambientales (insolación,
humedad, etc.)
4. Si los restos están en un avanzado grado de putrefacción, las
muestras idóneas son los huesos largos u otras piezas anatómicas
que se seleccionarán según ya hemos citado y en el orden de
preferencia ya señalado.
27
5. Si los restos están carbonizados debe recogerse la totalidad de
muestras cadavéricas. De todas formas, las piezas de elección son las
dentales, seguidas por aquellos restos o fragmentos que se
encuentren en mejor estado. Es importante destacar que después del
análisis del ADN las piezas pueden haberse roto, por lo que no podrán
recuperarse para otro tipo de estudios, que por supuesto deberán
realizarse previamente.
6. Si son fragmentos de cabello han de tener más de dos
centímetros de longitud para que la información genética sea
valorable. En este análisis pueden obtenerse resultados que
presenten diferencias incluso entre dos porciones del mismo cabello,
por ser un tejido sometido a fuertes presiones ambientales que
condicionan la degradación y la aparición de cambios en el ADN
mitocondrial que contienen.
En los casos en que se trabaja con muestras antropológicas recientes
o antiguas, hay que tener en cuenta que pueden ocurrir situaciones
adversas, que sean esperadas, como es el caso de no obtener
información de la muestra, debido a la degradación del ADN y la
presencia de sustancias que inhiban las reacciones químicas
necesarias para su obtención, como es el caso de metales y sales
propios del terreno, presencia de calcio, etc.…
Conociendo las peculiaridades del ADN y como el mismo puede
obtenerse de diversas fuentes en el trabajo forense, cuando es un
vestigio muy escaso o único, piezas óseas antiguas, restos humanos
degradados, fragmentos corporales, heces, cabellos cortados o sin
bulbo, etc., lo adecuado, para obtener información, es estudiar el
ADN sea mitocondrial o nuclear.
El ADN mitocondrial se analizará dada la característica de la muestra
encontrada, no siendo posible aislar en ella el ADN de tipo nuclear en
cantidad y calidad suficientes.
Tratando de restos arqueológicos, se ha obtenido éxito
fundamentalmente analizando piezas dentales de gran antigüedad,
tejido momificado, piezas óseas (crestas ilíacas, cadera, huesos
largos) e incluso fragmentos de huesos. En estos casos, el estudio del
ADNmt ha tenido aplicaciones específicas en el campo de la
arqueología y de la genética evolutiva, con fines diferenciados a los
forenses y policiales.
En el caso de restos humanos cuya identidad es desconocida, la
investigación policial es fundamental, al disponer de los antecedentes
personales del individuo cuya desaparición haya sido denunciada, ya
que permite localizar a familiares directos - ascendientes,
descendientes y/o colaterales -, y obtener sangre de los mismos o
conseguir vestigios biológicos indubitados del desaparecido (biopsias
28
clínicas, cabellos, piezas dentales, objetos personales que puedan
contener alguna célula nucleada), que servirán como fuentes de ADN
de referencia.
Entonces puede surgir la pregunta… ¿Para qué puede servir? La
respuesta es muy simple: para poder establecer la identidad genética
entre los dos tipos de muestra: la dubitada de la cual queremos
conocer la procedencia y la indubitada o de referencia, cuya
procedencia no se cuestiona, y así llegar realmente a una
identificación positiva y fidedigna. Para ello se realiza un cotejo de
perfiles genéticos, de forma indirecta, a través de los datos
obtenidos de los familiares o de forma directa a partir de algún resto
biológico antes de la muerte procedente del sujeto cuyo resto se
pretende identificar.
Es importante señalar que, ante la duda sobre el tipo de muestra que
pudiera ser de utilidad para el análisis, convienen consultarse siempre
con personal de laboratorio de genética forense, quienes conocen las
posibilidades reales para obtener información de vestigios por muy
insólitos que puedan parecer.
d) Recogida y Envío de Muestras
Es importante que la recogida de información sea hecha de manera
adecuada y por los procedimientos legales establecidos. VILLALAÍN
BLANCO (2000) acuerda algunas premisas básicas:
Ÿ Las muestras deben enviarse siempre secas y cuando sea posible
completas.
Ÿ El embalaje de las piezas, una vez secas, se realizará siempre en
bolsas de papel, sobres o cajas de cartón.
Ÿ Cada pieza se introducirá por separado, en los recipientes
adecuados.
Ÿ Cada envase debe ir debidamente identificado mediante etiquetas
adhesivas en el exterior, donde conste la descripción del contenido
del envase.
Ÿ En el caso de pelos y cabellos, estos deben recogerse completos,
es decir, con raíz, en un número de 10 a 50 unidades,
diferenciando y anotando la región del cuerpo de la que procedan.
Ÿ Si lo recogido son fragmentos de cabellos, debe hacerse constar
en la etiqueta exterior del envase.
En el cadáver reciente, cuando se sospeche la existencia de fluidos
biológicos (sangre, semen, saliva) sobre la piel del mismo, se
recogerán si la zona está seca por el método de la doble toma que
consiste en frotar suavemente y con movimientos rotatorios, la zona
29
de interés con un hisopo o varilla de algodón estéril humedecida en
agua bidestilada, también estéril. Este hisopo se rotulará con el
número 1 y se dejará secar a temperatura ambiente.
e) Obtener un perfil de ADN
Según VILLALAÍN BLANCO (2000) los pasos que se siguen en
laboratorio para obtener un perfil ADN son los siguientes:
Separarelelmaterial
materialbiológico
biológico- -ADN
ADN- -del
delsoporte;
soporte;
1º1ºSeparar
2º
Extraer
el
ADN
de
la
célula,
destruyendo
la
membrana;
2º Extraer el ADN de la célula, destruyendo la membrana;
3º
Cuantificar
la
cantidad
de
ADN
extraído;
3º Cuantificar la cantidad de ADN extraído;
Valorarlalacantidad
cantidaddel
delADN
ADNextraído
extraídoenenunungel
gelagarosa;
agarosa;
4º4ºValorar
5º
Amplificar
por
PCR
las
regiones
elegidas;
5º Amplificar por PCR las regiones elegidas;
Separarpor
porelectroforesis
electroforesislos
losfragmentos
fragmentosamplificadosamplificados-multiplicados 6º6ºSeparar
- y obtener
las variantes
en forma
de gráficos o
y multiplicados
obtener las variantes
en forma
de gráficos
o bandas;
bandas;
7º Visualizar las bandas por medio de tición argéntica o con fluorocromos;
Visualizar
las bandas
por
medio
de tinción argéntica o con
8º7ºLeer
las bandas
y anotar
los
resultados;
9ºfluorocromos;
Evaluar los resultados: cotejo de perfiles o de secuencias;
8º Emitir
Leer las
anotar los resultados;
10º
el bandas
informeypericial.
9º Evaluar los resultados: cotejo de perfiles o de secuencias;
10º Emitir el informe pericial.
f) Contaminación - Precauciones
Para evitar los problemas inherentes a la contaminación, VILLALAÍN
BLANCO (2000) resalta que es importante seguir de forma estricta los
protocolos recomendados que él resume como:
1. Empleo de guantes estériles, que deben cambiarse cada vez que
se manipule una muestra diferente;
2. Empleo de batas, que se cambiarán cada vez que cambie de área
de trabajo;
3. Empleo de mascarillas, a lo largo de todo el proceso, como
protección para el técnico y para evitar la contaminación de la
muestra.
4. Empleo de bancos de reactivo y controles (positivo y negativos) en
los procesos de extracción y amplificación.
5. Manipulación
de las muestras dentro de campanas de flujo
laminar, limpiando la zona de trabajo cada vez que se cambie de
muestra.
6. Conexión de la luz ultravioleta (UV) al acabar las tareas para
descontaminar el área de trabajo, teniendo la preocupación de
haber guardado todos los productos de ensayo.
30
7. Establecer áreas físicas independientes para cada uno de los
procesos del análisis (recepción y manipulación; extracción;
amplificación; separación y visualización; estudio e interpretación
de los resultados.
De no seguirse estas precauciones, el estudio de casos humanos
puede verse dificultado al no poder diferenciar entre la secuencia
genuina del ADN y la resultante de una contaminación.
5.1.4. Identificación Grafológica
Con este método la identificación del individuo es realizada a través
de la escritura y según CASAS SÁNCHEZ (2000) la identificación
grafológica se utilizaría en tres casos:
a) Para reconocer a un individuo cuya identidad es desconocida;
b) Cuando escribe deforme o modifica su escritura para hacerla
irreconocible;
c) Cuando un individuo imita un grafismo dado.
La identificación por la escritura es fundada en los siguientes
principios:
“- 1º La escritura es el registro gráfico de los gestos
automáticos ordenados por el sistema nervioso central y
condicionados por constantes anatómicas, fisiológicas y
psicológicas que imponen al grafismo caracteres personales
y permanentes;
- 2º El que escribe traza instintivamente las formas de letras
más simples o que son más usuales;
- 3º Una escritura disfrazada contiene particularidades
individuales,
constantes,
propias,
involuntariamente
introducidas en el trazado, que permiten la identificación del
que escribe. Una escritura artificial se relaciona con la forma
primitiva por los lazos representados por las especies
gráficas, las constantes gráficas”. (SIMONIN C. 1973:829)
31
CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios (2000)
existen tres métodos de identificación:
-
afirma que en la escritura
a) La grafología – Estudia la letra manuscrita mediante la valoración
del grafismo en función del test psicológico;
b) La grafometria – Estudia la medida de los valores de los caracteres
que son constantes en una persona. El método consiste en medir en
los textos el tamaño, forma, inclinación de las letras, velocidad y
presión, etc.
c) La grafopsicología – Busca descubrir en la escritura los tipos
psicológicos.
El estudio grafológico es muy importante para la identificación de las
personas, ya que los datos que se buscan son la distinción de la
escritura espontánea de la artificiosa, y los grafismos que modifican
las enfermedades mentales o somáticas, con su esencia en el estudio
de la morfología de la escritura y su cotejo. Actualmente, también se
incluyen en estos estudios
los cotejos de documentos hechos
mecánicamente que presentan unas particularidades propias y
específicas de éstos.
"En resumen, es sabido que los caracteres morfológicos,
biológicos y psicológicos separan, desde su nacimiento, a
unos individuos de otros y sirven para su identificación. En
el plan biológico, cada hombre es un espécimen único,
inimitable, de la naturaleza". (SIMONIN C. 1973:831)
5.1.5. Identificación por la Voz
La identificación en la voz de una persona está relacionada con las
características fisiológicas y de comportamiento (hábitos lingüísticos,
entonación de las frases, etc.) estando influenciada por:
32
ƒ
ƒ
ƒ
ƒ
Variaciones en los tamaños de las cavidades
del tracto vocal que permiten diferentes
resonancias.
Variaciones en el tamaño y elasticidad de las
cuerdas vocales que se traducen en el cambio
del valor medio de la frecuencia fundamental
de los sonidos.
Variaciones en el paladar blando y el tamaño
de la cavidad nasal que producen frecuencias
espectrales de los sonidos nasales.
Presencia de variaciones atípicas (relacionadas
con la dentadura, estructura del paladar) que
puede originar sonidos atípicos o una nasalidad
anormal. De esta manera, cada locutor
introducirá peculiaridades en la señal de voz
que hará que un oyente familiarizado con su
voz lo identifique.
Pero, hay factores que pueden cambiar estas peculiaridades de la
voz, como:
‰
‰
Variabilidad inherente a la propia señal de voz: dependientes de la
persona que habla (edad, sexo, estado emocional, estado físico,
presencia de estrés, velocidad de articulación, etc.), o
dependientes de factores extrínsecos (dispositivos de adquisición y
transmisión de la señal de voz, anchura de la banda del canal
transmisor, distorsión del canal, presencia de reverberación, etc.)
Variabilidad debida al paso del tiempo.
Los métodos que se han implementado para tratar de identificar la
voz han sido los siguientes:
a) Reconocimiento de voz espectográfico – El primer autor que
busca resolver el problema del reconocimiento por la voz en el
ámbito forense es LAWRENCE G. KERSTA, mediante un método
de espectrógrafo para el análisis de voz que fue denominada de
“voiceprint” queriendo significar que cada persona puede ser
individualizada por su voz como en el caso de las huellas
dactilares;
b) Análisis aural-espectográfico – determina y mide los
parámetros más invariables de un locutor, utilizando una teoría
fonética en la hora de realizar un estudio auditivo sobre voces,
33
efectuando un análisis instrumental espectográfico y un estudio
de los rasgos segméntales y suprasegmentales del locutor, sin
merma de otras ciencias de la lengua diferentes a la fonética
acústica;
c) Métodos semiautomáticos y automáticos - Estos efectúan una
comparación directa entre un determinado tramo acústico
supuestamente identificativo de la identidad de un hablante con
un tramo patrón o plantilla tomado como referencia
identificativa del locutor a reconocer.
"Actualmente
la
capacidad
de
los
sistemas
de
reconocimiento automáticos han experimentado un fuerte
incremento cuando se han aplicado esquemas de modelado
de clases fonéticas (cuantificación vectorial (VQ), modelos
ocultos de Markov
(HMM)
y
modelos
de
mezclas
gaussianas
(GMM),
o
esquemas basados en arquitecturas conexionistas (redes
neuronales NM).
Aunque
con
los
nuevos
métodos
automáticos
se
ha
avanzado en la fiabilidad para el reconocimiento de voz,
estos métodos
todavía siguen sometidos a controversia y
pueden ser de ayuda en la investigación criminal, pero su
aceptación en el ámbito jurídico como método científico
continúa planteando problemas". (CASAS SÁNCHEZ, Juan de
Dios 2000:1252)
5.1.6. Palatoscopia
En la identificación de un individuo no debemos olvidar otros
procedimientos que pueden suplir las huellas dactilares cuando estas
han sido destruidas por la acción del fuego, ácidos o la desaparición
de los dedos.
Una de estas formas de identificación es el estudio del paladar,
llamado palatoscopia. Siendo la cavidad bucal una de las partes del
cuerpo que mejor suele resistir a los agentes externos como el fuego,
puede ser muy útil el estudio de su morfología, especialmente el del
paladar.
Esta técnica se basa en un hecho plenamente demostrado de que el
paladar presenta una serie de rugosidades que permanecen
invariables a todo lo largo de la vida, desde un recién nacido (Véase
34
fig. 3). Cuando el sujeto vaya evolucionando al paso de los años, de
niño a adulto las rugosidades del paladar crecerán con las demás
estructuras, pero sin cambiar su morfología inicial ni su situación
respecto a la línea media del paladar o rafe. Esto las hace preciosas
para la identificación individual.
Figura 3. (REVERTE COMA, José M. 1999:386)
"El año 1924, el Doctor Armando López de León publicó en
Guatemala un libro titulado Odontología Criminal, en el que
dedica preferente atención a las rugosidades del paladar,
señalando que estas arrugas son un fuerte indicativo del
carácter o temperamento del individuo y las divide en cuatro
clases
según
temperamento
estos
bilioso,
temperamentos:
de
arrugas
temperamento
de
nervioso,
sanguíneo y linfático. Estudió en esta época las diversas
características
de
las
arrugas
palatinas
llamando
estomatograma a la fotografía o dibujos de las rugas
palatinas, línea del rafe, tejidos continuos y dientes. Además
dividió las arrugas en simples y compuestas. Las simples
podían ser rectas, curvas, ángulos o vértices, circulares y
onduladas. Las compuestas eran según su clasificación las
formadas por dos o más simples". (REVERTE COMA, José M.
1999: 385-386)
ARMANDO LÓPEZ (1924) utilizó las iniciales B N S L para las
arrugas de Biliosos, Nerviosos, Sanguíneos y Linfáticos. Y las letras D
e I para el lado derecho o izquierdo, con un número para designar el
número de líneas o arrugas de cada lado. El resultado lo llamó
rugograma, por ejemplo:
35
B D 12
B I 11
En este ejemplo se trataba de un individuo Bilioso que en el lado
derecho tenía 12 rugosidades y en el izquierdo 11.
UBALDO CARREA (1934) hace referencia al trabajo del LUÍS SILVA
de Sao Paulo "Identificación Odontolegal del desconocido de
Colleguo", publicado en Rio de Janeiro, en el que hace importantes
deducciones sobre las líneas o rugosidades del paladar de varias
personas de la misma familia.
BELTRÁN (1944) ampliando estos trabajos iniciales hizo un estudio de
varios centenares de pacientes determinando las características de
las rugosidades del paladar: primero señala un detalle importante de
que la rugosidad palatal en el ser humano tiene una fuerte
característica que es su asimetría; segundo observó que las rugas o
crestas palatinas son absolutamente diferentes entre sí, invariables,
no cambian de forma y son individuales, siendo útiles para la
identificación. Realizó impresiones de la bóveda con pasta de
modelar, con cera, yeso e ideó una clasificación como las huellas
dactilares que permitiera localizar rapidamente una ficha de un
archivo: rugas dirigidas en sentido medial (I), en sentido lateral (II),
en sentido distal (III) y en sentido variado (IV).
TROBO HERMOSA (1954) continuó estos trabajos, al darse cuenta de
las ventajas de las rugosidades palatinas para la identificación. Para
él, su fácil acceso para poder dibujarlas o fotografiarlas, hacer
fácilmente un molde del paladar con alginato y su tamaño grande que
no exige ningún aparato amplificador, son las grandes ventajas de
este método. Trobo toma la impresión del paladar en algilato,
positiva este negativo y lo utiliza como molde. Lo fotografía con luz
tangencial para que los relieves se hagan bien aparentes. Traza sobre
el dibujo, así obtenido, una retícula que divide en cuatro sectores del
paladar (línea media y otra perpendicular a ella).
En estos sectores pueden verse diversas rugosidades que pueden
determinar en ellas su forma, así como su distancia al rafe con el que
se relacionan.
Todas las rugosidades obedecen a dos formas: las simples y las
compuestas o polimorfas (Véase fig. 4). Las simples son así
clasificadas: punto, recta, curva, ángulo o bumerang, sinuosa y
círculo. La unión de dos o más de estas constituye una forma
compuesta. Si la forma es compuesta, se llama principal a la que se
encuentra más cerca de la línea media o rafe y se representa por las
letras mayúsculas, ABCDEFX. Las rugosidades que derivan de ésta
principal se denominan derivadas que se representan por letras
36
minúsculas a b c d x. Una vez anotadas, la principal se separa de las
derivadas por dos puntos (:) y las derivadas terminales por un punto
(.).
BASAURI CHÁVEZ (1981) realiza la lectura de delante atrás del rafe
medio hacia cada lado, primero el derecho y luego el izquierdo.
También las representa por números 1 2 3 4 5 6 7. Los seis primeros
son formas simples, el 7 es mixto.
El aspecto de las rugosidades es el siguiente:
Figura 4. (REVERTE COMA, José M. 1999: 389)
Por su parte, en España, VILLALAÍN BLANCO (2000) propone un
sistema basado en una fórmula notada en dos columnas, una
correspondiente al paladar dubitado y otra al paladar indubitado. Por
último, en 1990 CARREA perfeccionó el sistema original de BASAURI
añadiendo una notación por cuadrículas, exhaustivo pero engorroso
(sistema Basauri-Carrea).
Abajo sigue la clave para la codificación del palatograma según
BRIÑÓN, 1982 y las abreviaturas usadas en palatogramas por
CARREA (1970).
37
Figura 5. (REVERTE COMA, José M. 1999: 393)
Figura 6. (REVERTE COMA, José M. 1999: 393)
38
5.1.7. Queiloscopia
Entre los distintos procedimientos para identificar a la persona, la
boca es un importante foco que proporciona valiosos datos.
Queiloscopia es el estudio, registro y clasificación de las
configuraciones de los labios. Es la ciencia que estudia los surcos y
huellas labiales, los cuales son individuales, salvo en los gemelos
univitelinos, presentando líneas, fisuras y combinaciones de líneas y
fisuras que son específicas, inmutables, perennes y clasificables. El
fundamento científico se encuentra en que el labio mucoso se
encuentra cubierto de pequeños pliegues que muestran diferencias
individuales y responden a una base genética. Ha sido estudiado por
RENAUD, SUZUKI Y TSUCHIHASI, que llegaron a establecer
ocho
tipos de surcos labiales, de los que cuatro (bifurcado o ramificado,
interseccionado, reticular y vertical) resultaron ser los más frecuentes
en la población japonesa. Las huellas labiales pueden ser, con
algunas modificaciones, por su longitud: cortas, medias o que cubren
todo el labio. Pueden aparecer a uno u otro lado del tubérculo labial
superior, sin que necesariamente sean simétricas.
Ya en 1930 DIOU proponía el estudio de los dibujos labiales para su
utilización en Criminalística. En 1932 LOCARD recomendaba el uso de
las crestas labiales. SNYDER (1950) impulsó su aplicación. MARTÍN
SANTOS (1966) también realizó aportaciones y más tarde SUZUKI y
TSUCHIHASI ampliaron las investigaciones, demostrando la utilidad
del método. En España han sido Calatrava, también DOMÍNGUEZ,
ROMERO y CAPILLA (1976), y RUBIO y VILLALAÍN BLANCO (2000),
quienes han realizado estudios.
Resultados de los Estudios sobre Queiloscopia Realizados en España
(Método de SUZUKI)
Tipo de huella
III. Entrecruzadas
Sevilla
Madrid
Media
Varón: 37,55%
36,72%
37,35%
Hemb.:
30,01%
30,85%
Varón: 20,35%
23,05%
21,70%
Hemb.:
20,15%
21,18%
31,76%
II. Bifurcadas
22,22%
39
IV. Reticuladas
Varón: 18,45%
17,04%
17,74%
Hemb.:
18,09%
19,44%
14,16%
12,90%
17,14%
15,60%
Varón: 11,58%
11,09%
11,53%
Hemb.:
11,62%
11,47%
0,31%
0,29%
0,62%
0,70%
20,81%
I. Verticales Completas Varón: 11,65%
Hemb.:
14,08%
II. Otras formas
10,37%
I.
incompletas
Verticales Varón: 0,28%
Hemb.: 0,78%
Tabla 2. (CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:1253)
CASAS SÁNCHEZ (2000) habla de la clasificación de SUZUKI y
TSUCHIHASHI, donde estos tomaran seis elementos principales,
basados en las diferentes formas y cursos que toman las estrías en la
huella labial.
Tipo I. Verticales completas:
Estrías rectas, bien definidas que
corren verticalmente a través del
lábio y cubren toda su extensión.
Tipo II. Verticales incompletas:
Las estrías son rectas, pero
desaparecen a medio camino sin
cubrir la anchura total del labio.
Tipo III. Ramificadas o
Bifurcadas: Las estrías se
entrecruzan en forma de aspas.
Tipo IV. Interseccionadas: Las
estrías se entrecruzan en forma de
aspas.
Tipo V. Reticuladas: Se producen
múltiples cruces que le dan aspecto
de retículo.
Tipo VI. Otras formas: En este
caso las estrías no se pueden
clasificar en ninguna de las
descritas y pueden tener una
mezcla de todas las formas
anteriores.
40
La queiloscopia y la palatoscopia son técnicas de identificación que a
pesar de haber sido superadas en su uso por otras técnicas de
laboratorio, no dejan de tener interés, ya que en ocasiones éstas
pueden ser las últimas huellas de que se dispone para identificar a un
sujeto. Esto puede ocurrir bien porque es lo único que se ha podido
recoger en el lugar de los hechos, en el caso de la queiloscopia o
porque el cadáver esté destruido, como en el caso de los incendios y
el paladar sea el único elemento de que dispongamos para cotejo.
5.2. Identificación de cadáveres recientes
Según CASAS SÁNCHEZ (2000), en el cadáver reciente es posible
aplicar:
1. La técnica de la descripción somática y datos fisonómicos; (Pág.
15)
2. El estudio de las huellas dactilares; (Pág. 15)
3. El análisis del Genoma Humano – Huella Genética; (Pág. 20)
4. La palatoscopia;(Pág. 34)
5. La queiloscopia; (Pág. 39)
Hoy con la vida moderna, en las grandes metrópolis son más
frecuentes los desastres, catástrofes que producen la muerte
simultánea de cientos de personas. En estos casos, cuando los
cuerpos son descuartizados, quemados, etc., hay que aplicar los
métodos identificativos de la antropología forense, tales como: la
identificación del sexo, estatura, edad, coloración de la piel, etc.
(estas técnicas estarán descritas abajo en el subítem 5.3.).
En las grandes catástrofes en las que perecen personas de distintas
nacionalidades, será necesaria la cooperación internacional, incluso
de especialistas médicos, odontólogos o de la Policía de los países de
origen de alguna de las víctimas.
Las radiografías son elemento fundamental
en el proceso de
identificación, básicamente cuando no hay huellas dactilares por
quemadura extrema o desaparición de las extremidades superiores o
cuando el rostro ha quedado desfigurado por la combustión.
“Los senos frontales son las huellas dactilares del cráneo. Lo
mismo
podemos decir de las radiografías de la cavidad
bucal parciales o totales”. (REVERTE COMA, José M. 1999:
749)
41
También en caso de cadáver reciente, para determinar la edad es
necesario aplicar la identificación radiológica que describimos en la
pagina 90.
5.3. Identificación de esqueleto y restos cadavéricos
Según CASAS SÁNCHEZ (2000), en el estudio de los restos
cadavéricos no son de utilidad las técnicas usadas en los grupos
mencionados anteriormente, ya que las partes blandas han
desaparecido, y, en este caso, hay que utilizar las técnicas propias de
la Antropología Forense.
5.3.1. Diagnóstico de especie
Cuando puede disponerse de cantidades considerables de huesos
completos caben pocas dudas sobre su origen humano o de otra
clase; basta el sentido común y un conocimiento de la anatomía
humana elemental.
“El largo de una tráquea, desde la laringe a los pulmones,
con saco pericardio adherido, pero sin lengua, ni corazón,
fue encontrado en una cuneta dentro de una caja de
hojalata, en un distrito del condado de Surrey. El médico de
la policía lo consideró sospechoso y fue remitido para
examen especializado como restos posibles de la víctima de
un crimen. La tráquea tenía 25 cm de largo, unas dos veces
la longitud de una traquea humana. La ausencia de la
lengua y corazón podía haber sugerido que era un despojo
de carnicería. No podía ser humano”. (KEITH SIMPSON
1981:39)
Los fragmentos más pequeños de órganos o del esqueleto pueden
requerir la atención de un anatomista especializado que pueda
identificar con precisión fragmentos de huesos humanos.
La confusión es de lo más común entre los
huesos infantiles
humanos y huesos de mono recién nacido y también la confusión
puede ser considerable en los casos de restos óseos fragmentarios
recubiertos por partes carnosas en estado de putrefacción.
Hay varias técnicas, que nos permite distinguir el hueso animal del
hueso humano.
42
EL PESO
El hueso animal pesa proporcionalmente más que el hueso
humano. Si sopesamos en cada mano un fémur animal (de
un mamífero relativamente grande) y uno humano,
inmediatamente apreciamos el mayor peso del hueso animal,
aunque sea de menor tamaño.
LA DENSIDAD
El hueso animal es más denso, más compacto. El tejido
compacto del hueso animal es <más compacto> que el
tejido equivalente humano y el tejido esponjoso animal tiene
trabéculas más grandes, densas y compactas que el tejido
trabecular esponjoso humano.
EL SONIDO
Para el habituado a manejar huesos humanos y animales de
distintas especies, el sonido es una excelente guía. Si
golpeamos suavemente un hueso animal con otro, se
produce un sonido casi <metálico>. Por el contrario, si
golpeamos suavemente un hueso humano contra otro
humano, el sonido es más apagado, mate, sin brillo.
Es la relación matemática que existe entre el diámetro
mínimo del conducto o cavidad medular y el de la diáfisis de
los huesos largos por su cara externa. La fórmula expresada
es:
ÍNDICE
Diámetro mínimo conducto medular
Diámetro mínimo de la diáfisis
MEDULAR
En el hombre el resultado será de 0,45. En los animales en
cambio, el índice estará por encima de 0,50 llegando hasta
0,77. En el feto humano los valores están comprendidos 0,15
y 0,48.
Tabla 3. (REVERTE COMA, José M. 1999: 103)
a) Método Histológico
Este método permite observar rasgos histológicos del hueso. Por lo
general, los conductos de Havers humanos son de sección ovalada,
con los bordes rectilíneos, anastomosados unos con otros y tienen
diámetros de 30 a 150 micras con una densidad de 8-10 por mm2.
En el hueso animal, el diámetro es inferior a 100 micras y se
encuentran en mayor densidad por mm2 (13 a 55 por mm2), también
es muy importante saber que en el hueso humano los conductos son
paralelos al eje longitudinal del hueso y en los animales son
inclinados.
43
micras
Número de conductos
de Havers por mm2
EL HOMBRE
30-150
8-10
LOS ANIMALES
20-25 (siempre menor de
100)
13-55
Tabla 4. (REVERTE COMA, José M. 1999: 105)
b) Estudio Radiológico
Con el estudio radiológico y microradiológico es posible comprobar la
densidad de la trama ósea. Su espesor es de 13,4 micras en el
hombre y 12,5 micras en los animales. Para más detalles nos
remitimos al subítem 5.3.10. (Pág. 90)
c) Estudio Inmunológico
Los fragmentos de tejido a los que faltan datos suficientes para
permitir la identificación anatómica, como humanos o no, pueden
identificarse por medio de:
1. Test de la precipitina: El líquido de prueba es el suero de
un conejo que ha sido inyectado con sangre humana
desfibrinada y ha creado precipitinas para las proteínas
humanas. Se añaden diluciones adecuadas de extracto de
tejido limpio al suero anti-humano estándar, y cuando el
tejido es humano, aparece una fina bruma de floculación
en la unión de los líquidos. De este modo puede
analizarse la más minúscula mancha de sangre o un
pequeño fragmento de tejido, ya que un suero de prueba
bueno es sumamente sensible.
2. La prueba de inhibición de la anti-globina: Esta se basa
en el poder de la globulina humana para proteger de la
aglutinación a células humanas sensibilizadas, y es una
prueba aún más altamente sensible, pero requiere una
mayor pericia técnica, y debe dejarse sólo a un experto.
44
5.3.2. Sexo
La naturaleza de los vestidos, la tendencia del útero a resistir la
descomposición como el último de los órganos blandos, y como
último recurso, las diferencias del esqueleto, proporcionan pruebas
que suprimen dificultades en el establecimiento del sexo.
En el esqueleto humano se observa un “dimorfismo sexual” que
diferencia el hombre y mujer en tamaño, forma o ambos. Cuando el
dimorfismo sexual en una especie es grande, la simple observación
macroscópica permite establecer el sexo sin grandes errores.
“HOOTON (1946) decía que: la determinación del sexo a
partir del esqueleto post-craneal de adultos es fácil y segura
en ±80% de los casos, difícil pero posible en el ±10% de los
casos y dudosas absolutamente en el resto”. (REVERTE
COMA, José M. 1999: 556)
Después de muchos intentos de determinar el sexo químicamente en
los huesos, LENGYEL (1969) y KISZELY (1974) realizaron análisis
químicos de fragmentos óseos y observaron que desde el comienzo
de la pubertad hasta el comienzo del climaterio, el citrato contenido
en los tejidos esponjosos del esqueleto femenino es más elevado que
en los varones. Este método podría ser útil en la determinación del
sexo en
pequeños fragmentos del hueso en los que no hay
características sexuales morfológicas ni métricas.
De entre los huesos, los de la pelvis conformados con respecto a los
requerimientos sexuales, son lo más informativos, y un sacro o
también un fémur aportarán pruebas amplias del sexo. La forma más
grácil y las marcas musculares comparativamente menos
pronunciadas de otros huesos, pueden permitir la determinación del
sexo de manera razonable y segura. También se han ideado métodos
matemáticos para determinar el sexo a partir de las cabezas de los
húmeros y los fémures. Por ejemplo: El cuerpo del esternón es dos
veces más largo que la longitud del manubrio en el varón y menos de
dos veces en la mujer.
En el adulto existen numerosos signos para determinar el sexo, que
exponemos en las siguientes tablas:
45
DIFERENCIAS SEXUALES
(POSTCRÁNEO)
VARONES
MUJERES
El coxal es mayor y más pesado.
El coxal es más pequeño y menos
pesado.
El ángulo de la escotadura ciática tiende
a ser cerrado (en forma de V)
El ángulo de la escotadura ciática tiende
a ser abierto (en forma de L)
Pubis de forma triangular.
Pubis de forma trapezoidal.
Ángulo subpúbico agudo(65º-70º)
Ángulo subpúbico es abierto (90º o más)
Carilla auricular más larga (60 mm)
Carilla auricular más corta (50-55 mm)
Surco preauricular raro.
Surco preauricular muy frecuente y
profundo.
Pelvis alargada (DOLICOPELICA)
Pelvis tiende a ser corta
(BRAQUIPELICA)
Diámetro vertical de la cabeza femoral y
humeral mide entre 47-48 mm.
Diámetro vertical de la cabeza femoral y
humeral mide entre 40-42 mm.
La cabeza del radio suele medir más de
20 mm.
La cabeza del radio suele medir menos
de 20 mm.
Tabla 5. (CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:1263)
46
DIFERENCIAS SEXUALES
(CRÁNEO)
VARONES
MUJERES
La frente es huidiza en el varón.
La frente es vertical en la mujer.
Las protuberancias supraorbitarias son
más pronunciadas.
Las protuberancias supraorbitarias son
menos marcadas.
La glabela es más marcada.
La glabela es menos marcada.
El borde orbitario es romo y grueso.
El borde orbitario es fino y agudo.
Las apófisis mastoides son grandes,
robustas.
Las apófisis mastoides son pequeñas.
Surco digástrico profundo y ancho.
Surco digástrico poco profundo y
estrecho.
Protuberancias frontales y parietales
están poco marcadas.
Protuberancias frontales y parietales son
salientes y acentuadas.
El arco zigomático es más robusto,
ancho y alto.
El arco zigomático es más fino, débil y
delgado.
Marcas musculares en temporal y
occipital marcadas.
Marcas musculares en temporal y
occipital poco marcadas.
Los tubérculos geni son más gruesos y
prominentes.
Los tubérculos geni son más planos o no
existen.
El paladar es mas ancho y profundo.
Paladar más estrecho y menos
profundo.
Tabla 6. (CASAS SÁNCHEZ, Juan de Dios 2000:1262)
La distribución del pelo, especialmente en la región púbica, y la
probabilidad del cabello largo en la cabeza de la mujer puede ayudar
a corroborar otros signos importantes. También puede aclarar en la
identificación el tejido mamario, pero no alcanza la confirmación
proporcional el útero o un testículo, próstata o pene.
Hay un método relatado por KEITH SIMPSON (1980) que es la
Determinación del Sexo Celular. Este método es para determinar el
sexo celular basado en su cromatina nuclear. En células que no están
en división, la femenina muestra uno o más nódulos minúsculos de
47
cromatina fijada a la superficie interna de la membrana nuclear, las
células masculinas no tienen este cuerpo de “Barr”.
“Un rasgo importante y característico femenino es que los
leucocitos muestran una delgada proyección en palillo del
tambor, el denominado cuerpo de “Davidson”. En células
que están en división, un recuento cromosómico bien
realizado también
puede identificar el sexo (XY o XX)
mediante los cuerpos cromáticos sexuales. El cromosoma Y
(en el varón) es fluorescente a la quinacrina”. (KEITH
SIMPSON 1981:44)
5.3.3. Estatura
Cuando existe la posibilidad de reconstruir el cuerpo o cuando puede
disponerse de restos esqueléticos suficientes, consiguiendo una
autorización para arrancar y determinar el grosor del cuero cabelludo
y de la piel de la planta del talón, la altura puede medirse
directamente.
También puede obtenerse un cálculo aproximado de la altura a partir
de la medición tomada con los brazos extendidos, desde la punta de
los dedos de un lado hasta los dedos de la otra mano, o su mitad en
un cuerpo descuartizado. El resultado viene a ser aproximadamente
su altura. La talla, o mejor, la longitud total del cuerpo, es definitiva
al término de la osificación, entre 22 y 25 años. Ulteriormente puede
disminuir de 2 a 3 cm, entre 40 y 60 años, o momentáneamente bajo
la influencia de la fatiga o incluso tras una larga marcha. Aumenta 16
mm, a veces 20 a 30 mm, en decúbito dorsal.
Los trabajos de los antropólogos han mostrado la existencia de una
correlación constante entre la longitud de los huesos largos y la del
cuerpo. Estas relaciones naturales son utilizadas para reconstituir
rápidamente la talla de un sujeto desconocido, según la longitud de
los huesos. Hay que tener en cuenta variaciones ligadas al sexo o
debidas a la asimetría de los huesos largos de los miembros, que se
traduce por diferencias de 8mm, a veces de 20mm, a favor del brazo
derecho (en un maní dextro) y de 3 mm, a veces de 10 mm entre los
fémures derecho e izquierdo.
Cuando solo puede disponerse de restos más pequeños, un solo
hueso largo puede proporcionar pruebas suficientemente fidedignas
de la estatura.
48
TOPINARD (1888) ideó su forma de determinar la estatura con base
matemática (estudiando 141 esqueletos), basándose en los restos
hallados por ORFILA y en las medidas obtenidas por HUMPHREY
(1820 a 1896) en Inglaterra. Los porcentajes hallados por TOPINARD
utilizando la longitud máxima de los huesos fueron:
HÚMERO
20,0
RADIO
14,3
FÉMUR
27,3
TIBIA
22,1
La forma de determinar la estatura será:
R
L
ņņņņ = ņņņ
100
X
R = relación longitud del hueso/estatura
L = longitud del hueso medido
X = estatura buscada
A estas fórmulas TOPINARD añadía 35 mm y obtenía la estatura.
Años más tarde ROLLET (1888) elaboró unas nuevas y más precisas
tablas de correlaciones, que siguen en la página siguiente.
49
Determinación de la talla por la longitud de los huesos largos
(Tabla de E. ROLLET,1888)
Talla en cm. (5)
(1) Fémur (2)
152
154
156
158
160
162
164
166
168
170
172
174
176
178
180
41,5
42,1
42,6
43,1
43,7
44,2
44,8
45,3
45,8
46,2
46,7
47,2
47,7
48,1
48,6
Miembro inferior
Tibia (3)
33,4
33,8
34,3
34,8
35,2
35,7
36,1
36,6
36,9
37,3
37,6
38,0
38,3
38,6
39
Peroné
HOMBRES
32,9
33,3
33,8
34,3
34,8
35,2
35,7
36,2
36,6
36,9
37,3
37,7
38,0
38,4
38,8
Miembro superior
Húmero (3) Radio (4)
Cúbito
29,8
30,2
30,7
31,1
31,5
31,9
32,4
32,8
33,1
33,5
33,8
34,2
34,5
34,8
35,2
22,3
22,6
22,8
23,1
23,4
23,6
23,9
24,2
24,4
24,6
24,9
25,1
25,3
25,5
25,8
23,3
23,7
24,0
24,4
24,8
25,2
25,5
25,9
26,1
26,4
26,6
26,9
27,1
27,3
27,6
27,1
27,5
27,8
28,1
28,5
28,8
29,2
29,5
29,9
30,3
30,7
31,1
31,5
31,9
32,3
32,7
33,1
20,0
20,2
20,4
20,6
20,8
21,1
21,3
21,5
21,7
21,9
22,2
22,4
22,6
22,8
23,0
23,2
23,5
21,4
21,7
21,9
22,1
22,4
22,6
22,9
23,1
23,4
23,6
23,9
24,2
24,4
24,7
25,0
25,3
25,6
MUJERES
140
142
144
146
148
150
152
154
156
158
160
162
164
166
168
170
172
37,3
37,9
38,5
39,1
39,7
40,3
40,9
41,5
42,0
42,4
42,9
43,4
43,9
44,4
44,8
45,3
45,8
29,9
30,4
30,9
31,4
31,9
32,4
32,9
33,4
33,8
34,3
34,7
35,2
35,6
36,0
36,5
36,9
37,4
29,4
29,9
30,5
31,0
31,5
32,0
32,5
33,0
33,4
33,9
34,3
34,8
35,2
35,7
36,1
36,5
37,0
Tabla 7. (SIMONIN C. 1973:849)
(1) Longitud máxima. Si los fémures han sido medidos en posición oblicua, añadir
0,32 cm para los hombres y 0,33 cm para las mujeres.
(2) , (3), (4). Si los huesos son secos, sin cartílagos, añadir 7mm. (2), 5mm. (3),
3mm. (4).
(5) disminuir 2 cm. para obtener la talla del sujeto de pie.
50
Otras autores como FULLY y PINEAU (1960) desarrollan sus propias
fórmulas que combinan la longitud fisiológica de huesos largos con la
altura de un reducido número de piezas vertebrales:
Estatura (cm)=2,09 (long.fisiolog.fémur+L1-L5)+42,67±2,35k
Otra fórmula (esta vez con la tibia):
Estatura (cm)=2,32 (Longitud tibia+L1-L5)+48,63±2,54k
(Si k=1, abarcan 2/3 de la muestra pero con un margen de error que
es la mitad que si k=2, pero en este caso el porcentaje de casos
abarcados es del 95%)
ROLLET (1888) no ha tenido en cuenta la edad, raza y la muestra es
muy pequeña, por eso las deficiencias saltan inmediatamente a la
vista.
TROTTER y GLESSER (1958) establecen fórmulas para distintas razas
a partir de cálculos hechos sobre restos esqueléticos de soldados y
personal militar fallecido en la guerra de Corea, cuyos datos físicos
eran conocidos en el momento del alistamiento, y de la colección
TERRY (1871-1966). Las tablas han sido calculadas sobre un total de
5.027 esqueletos de estatura, raza y edad conocida.
51
Tabla de TROTTER y GLESSER
BLANCOS
NEGROS
VARONES
HEMBRAS
1,30(Fem.+Tib.)+63,29±2,99
1,39(Fem.+Tib.)+53,20±3,55
2,38 Fem.+ 61,41±3,27
2,47 Fem.+ 54,10±3,72
2,68 Per. + 71,78±3,29
2,93 Per. + 59,61±3,57
2,52 Tib. + 78,62±3,37
2,90 Tib. + 61,53±3,66
3,08 Hum.+ 70,45±4,05
3,36 Hum.+ 57,97±4,45
3,78 Rad + 79,01±4,32
4,74 Rad + 54,93±4,24
3,70 Cub. + 74,05±4,32
4,27 Cub. + 57,76±4,45
1,15(Fem.+Tib.)+71,04±3,53
1,26(Fem.+Tib.)+59,72±3,28
2,19 Tib. + 86,02±3,78
2,45 Tib. + 72,65±3,70
2,11 Fem.+ 70,35±3,94
2,28 Fem.+ 59,76±3,41
2,19 Per. + 85,65±4,08
2,49 Per. + 70,90±3,80
3,42 Rad + 81,56±4,30
3,67 Rad + 71,79±4,59
3,26 Cub. + 79,29±4,42
3,31 Cub. + 75,38±4,83
3,26Hum.+ 62,10±4,43
3,08Hum.+ 64,67±4,25
1,22(Fem.+Tib.)+70,37±3,24
2,40 Per. + 80,56±3,24
2,39 Tib. + 81,45±3,27
MONGOLOIDES 2,15 Fem.+ 72,57±3,80
2,68Hum.+ 83,19±4,25
3,54 Rad + 82,00±4,60
3,48 Cub. + 77,45±4,66
2,44 Fem.+ 58,67±2,99
2,50 Per. + 75,44±3,52
2,36 Tib. + 80,62±3,73
MEJICANOS
3,55 Rad + 80,71±4,04
3,56 Cub. + 74,56±4,05
2,92Hum.+ 73,94±4,24
Tabla 8. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 186-187)
52
™ Siempre es importante saber cual es el sexo del
individuo cuyos restos esqueléticos se están
estudiando. A igualdad de longitud de huesos
largos, las mujeres tienen siempre una talla
más pequeña.
™ Igualmente, es necesario hacer una atribución
racial, pues la relación de la longitud entre los
distintos huesos largos es distinta según la raza
estudiada.
™ Es necesario incluir el dato de que hueso se
mide, cuanto mide, y de que lado es.
™ No es aceptable ningún resultado numérico sin
tener en cuenta el margen o error estándar.
5.3.4. Edad
En todo estudio antropológico-forense, junto con el sexo y la
estatura, es muy importante la determinación de la edad del sujeto
que estudiamos. Las características especiales de los huesos
estudiados dependen según el grupo de edad que se trate:
Fetal (prenatal)
Post-nacimiento (post-natal)
Infantil
} subadulto
Adolescente
Adulto joven
Madurez
Vejez (senil)
Como la anatomía del individuo, en cada momento, es evolutiva, es
preciso conocer bien la fisiología del crecimiento de acuerdo con la
edad.
53
“El hueso es un elemento vivo del organismo que no cesa
de sufrir modificaciones, remodelándose continuamente. El
crecimiento óseo se detiene en longitud a los 23-25 años”.
(REVERTE COMA, José M. 1999: 457)
En el proceso evolutivo del esqueleto, señalando las características
más particulares de cada edad, podemos hacer una estimación de la
edad en el esqueleto.
“Existe sin embargo una gran variabilidad individual en las
transformaciones que sufre el hueso debidas a la edad. Por
eso siempre la determinación de la edad está sometida a
unos márgenes de error en más o menos”. (REVERTE COMA,
José M. 1999: 458)
La determinación de la edad será mas precisa y segura cuanto mayor
sea el número de huesos de que disponemos, también el estado de
conservación deficitario es un escollo a esta determinación. Lo
primero que hay que determinar es si los huesos son de recién
nacido, de niño, adolescente, adulto o joven, ya que para cada caso
habrá que utilizar criterios diferentes. El diagnóstico más exacto es en
personas infantiles y jóvenes de 20 años.
Se puede fijar, con exactitud casi matemática, la edad del feto por la
medición directa y el aspecto de los centros de osificación.
Primer a cuarto mes:
Primer Mes
1,25 de largo, estando el embrión envuelto
en el corion velloso. Solo están presentes
rudimentos de las extremidades.
Segundo Mes
2,5 cm de largo. Cabeza formada. Orejas y
manos ya bien formadas.
Tercer Mes
9 cm de largo. Placenta formada. Aparecen
las uñas.
Cuarto Mes
15 cm de longitud. Sexo
Aparecen cabellos en la cabeza.
aparente.
Tabla 9. (KEITH SIMPSON 1981:44)
54
Quinto a noveno mes:
Longitud *
Mes
Peso
25
30
35
40
5
6
7
8
50 cm
(vértex a
talón)
9
350-400g 700-900g 1,2-1,4 kg 1,5-2kg 2,53,5kg
(menos
cordón,
etc.)
Tabla 10. (KEITH SIMPSON 1981:45)
* La longitud en centímetros equivale a cinco veces el número de
meses de gestación (a partir de los 4 meses).
BALTHAZARD Y DERVIEUX sabiendo la relación que existe entre la
talla y la edad fetal, calcularon la siguiente ecuación que permite
hacer una primera aproximación a la edad cuando disponemos del
feto entero, en cuyo caso se mide del vértex al talón.
Edad en días = Talla en cm x 5,6
En el caso de disponer solo de fragmentos o huesos sueltos, entonces
la fórmula varia así:
Talla en cm = 5,6 x long. en cm del Fémur + 8
Talla en cm = 6,5 x long. en cm del Húmero + 8
Talla en cm = 6,5 x long. en cm de la Tibia + 8
En el feto, la determinación de la edad es posible también a partir de
la osificación, que se divide en tres modalidades:
™ La osificación encondral: el tejido cartilaginoso
es reemplazado por tejido óseo que va fundiendo
los diversos centros de osificación.
™ La perióstica o pericondral: se trata de una
capa osteógena llena de osteoblastos que van
produciendo capa y láminas óseas paralelas
sobrepuestas.
™ La osificación endoconjuntiva: se presenta en
huesos planos a partir de sus correspondientes
puntos de osificación.
55
“Ya durante la 11ª
semana de desarrollo fetal hay 806
centros de osificación o centros de crecimiento óseo, que se
reducen en el momento del nacimiento a 450”. (REVERTE
COMA, José M 1999: 459)
Según REVERTE COMA, J. M. (1999), los autores OLIVER y PINEAU
(1960) modifican la fórmula
de BALTHAZARD-DERVIEUX con la
siguiente ecuación regresiva para determinar la edad fetal:
EDAD FETAL
Formula de OLIVER-PINEAU
Edad
Edad
Edad
Edad
Edad
fetal
fetal
fetal
fetal
fetal
=
=
=
=
=
7,92
13,8
8,73
7,85
7,39
Long.
Long.
Long.
Long.
Long.
Humero – 0,32 ± 1,8 cm
Radio
– 2,85 ± 1,62 cm
Cúbito – 1,07 ± 1,59 cm
Peroné – 2,78 ± 1,65 cm
Tibia
– 3,55 ± 1,92 cm
Tabla 11. (REVERTE COMA, José M. 1999: 460)
Inmediatamente después del nacimiento hay cambios funcionales en
la circulación, pero el ductus arterioso tarda en cerrarse algunas
semanas más. La hemoglobina de forma “fetal” desaparece
gradualmente en el transcurso de los primeros meses.
Entre 24-36 horas se seca el cordón umbilical. A las 36-48 horas
empieza a formarse un anillo de demarcación alrededor de su raíz de
origen. A los 5-6 días se desprende y en unos 10 días, la cicatriz ha
curado.
El incisivo inferior central hace su erupción hacia el sexto mes. El
variable aumento de peso (0,5 kg por mes) proporciona la única base
para la estimación de la edad durante los primeros 6 meses.
Según REVERTE COMA (1999) en el feto a término, las medidas
cefálicas son:
56
Diámetro antero-posterior……………….100 a 120
Diámetro transverso ………………………..90 a 95
Diámetro occípito-mentoniano ……….125 a 135
Diámetro bimastoideo ………………......74 a 83
Circunferencia cefálica máxima ……… 34 a 37
mm
mm
mm
mm
mm
Se toma también el diámetro biacromial
(anchura máxima de los hombros) 120 a 125
mm
Tabla 12. (REVERTE COMA, José M. 1999: 475)
En niños recién nacidos las fontanelas están ampliamente abiertas y
en el 97% de los niños a término, ya desde las dos últimas semanas
de gestación se presenta el punto de osificación de BECLARD, de 4-7
mm de diámetro, de aspecto lenticular, de color rojizo o achocolatado
que aparece en la epífisis cartilaginosa inferior del fémur. El ala
mayor y el esfenoides se funden antes de los 9 meses. En los dos
primeros años se suele cerrar la fontanela mayor o bregmatica y la
sutura metódica. A los 3 años el axis consta de cuatro piezas, las dos
porciones laterales que constituyen el arco del cuerpo y la apófisis
odontoides, y hasta el 4º año no se unen los arcos vertebrales con el
cuerpo vertebral.
En niños hasta 14 años se determina la edad por el grado de
evolución de los dientes, erupción y grado de mineralización. Si
encontramos los dientes y sus gérmenes dentro de los alvéolos, será
necesario realizar las radiografías. Si disponemos un solo diente
podemos evaluar la edad con bastante seguridad, pero en caso de
no disponer ni de maxilares ni de dientes, es precisó recurrir a otros
criterios, tales como el estado de osificación del cráneo y del
esqueleto post-craneal: aparición de centros de osificación y fusión
epífiso-diafisaria.
Siempre se ha tener en cuenta que estos criterios de estimación son
aproximados, ya que enfermedades antiguas o recientes influyen en
la maduración ósea (se adelanta o se atrasa).
En la persona joven, la edad puede calcularse con bastante exactitud
a partir de la erupción de los dientes y el desarrollo de los centros de
osificación. La erupción de los dientes va de los 6 meses hasta los 25
años.
57
CRONOLOGÍA DE LOS DIENTES DE LECHE
Incisivos medios inferiores ……………………..6-7 meses
Incisivos medios superiores…………………….. 8 meses
Incisivos laterales………………………………………11 meses
Primeros molares……………………………...…12-16 meses
Caninos ……………………………………………………..18 meses
Segundos Molares ……………………………...24-30 meses
CRONOLOGÍA DENTICIÓN PERMANENTE
Primeros molares………………………………….....6 años
Incisivos ………………………………………........7-9 años
Primeros premolares ………………………….10-11 años
Segundos premolares ……………………………..12 años
Caninos …………………………………………..........12 años
Segundos molares……………………………...13-14 años
Terceros molares………………………………..19-25 años
Tabla 13. (REVERTE COMA, José M. 1999: 479)
Diversos autores han podido determinar el momento de aparición de
los diversos centros
de osificación que escalonadamente van
surgiendo en el esqueleto desde el nacimiento hasta la pubertad y la
edad adulta.
Hay tres tipos de centros de osificación:
™ Primarios:
aparecen en las diáfisis.
™ Secundarios: dan lugar a las epífisis y
superficies articulares.
™ Gérmenes dentarios: aparecen en los
alvéolos maxilares y formaran los
dientes de leche y permanentes.
Abajo sigue un resumen de los centros más fidedignos que nos
proporciona una guía inicial sobre la edad y que es sugerido por
KEITH SIMPSON (1981). Como regla, las mujeres van un año por
delante de los varones en la maduración de su esqueleto.
58
Centros de osificación y de fusión ósea (entre 1 y 25 años)
Años
Osificación Ósea
Hacia el 1
Cabeza del fémur, húmero y tibia
Hacia el 2
Parte inferior de la tibia y radio
Hacia el 3
Rótula
Hacia el 4
Epífisis superior del peroné, trocánter mayor del fémur
Hacia el 5
Epífisis inferior del peroné
Hacia el 6
Cabeza del radio, epífisis inferior del cúbito
Hacia el 7
Escafoides de la mano, ramas del ísquion y pubis
Hacia el 8
Epicóndilo interno del húmero, olecranon
Hacia el 10
Trocánter menor del fémur, epífisis del calcáneo
Hacia el 11
Tróclea del húmero
Hacia el 12
Cartílago de unión en “Y” acetabular
Hacia el 13
Aparición y fusión del epicóndilo externo de húmero
Hacia el 14
La apófisis coracoides se une a la escápula
Hacia el 16
Olécranon unido al cúbito
Hacia el 18
La cabeza del radio y del fémur se unen a las diáfisis
Hacia el 20
La extremidad inferior del radio, del cúbito y del fémur se unen
a las diáfisis. La cresta ilíaca al cuerpo
Hacia el 22-24
Fusión de las epífisis secundarias del extremo interno de la
clavícula y carilla articular de las costillas.
Tabla 14. (KEITH SIMPSON 1981:46-47)
En el proceso de envejecimiento del hueso, intervienen múltiples
factores, además la edad como son: caracteres hereditarios, tipo de
alimentación que haya llevado el sujeto, diferencias sociales,
59
enfermedades que haya padecido a lo largo de su vida, tipo de
trabajo que haya realizado y diversos factores ambientales.
Después de los 25 años la exactitud en la estimación de la edad es
más difícil. De los 25 hasta los 40 años de edad, hay pocos datos
salvo los aspectos generales para proporcionar alguna orientación.
Diversos autores coinciden que al rededor de los 40 años, las suturas
de la bóveda craneal comienzan a cerrarse, empezando en el extremo
frontal de la sutura interpariental y aproximadamente por el mismo
tiempo la apófisis xifoides del esternón se une con el cuerpo. Los
dientes presentan una transparencia apical progresiva (raíz)
prescindiendo de su desgaste por el uso.
Después de los 60-65 años, el ángulo de la mandíbula empieza a
abrirse y sus bordes alveolares a descender hasta que, a una edad
muy avanzada adquiere de nuevo el ángulo obtuso y la falta de
dientes. Gradualmente, también los huesos van rarificándose y los
órganos sufren la atrofia senil. Estos cambios generales, considerados
conjuntamente con la imprecisión de la edad recogida a partir del
aspecto de la cara, los dientes, el cabello y textura de la piel,
permitirán un cálculo aproximado de la edad.
Para la determinación de la edad, también podemos utilizar la
evolución de la arquitectura interna del hueso que cambia con la
edad.
Entre otros métodos utilizados para la determinación de la edad en
los adultos, es bastante informativo el estudio de la estructura
esponjosa de la cabeza del húmero (Véase fig. 7).
60
Figura 7. (REVERTE COMA, José M. 1999: 513)
5.3.5. Coloración de la piel, ojos, y cabello
El color natural de la piel en su estado fresco, puede proporcionar una
clave respecto a la raza, y las mediciones antropométricas, o sea, los
denominados índices craneales pueden estrechar el campo a
determinados tipos mundiales. Hay que tener cuidado en no
equivocarse al determinar el color de los ojos. Cuando la
descomposición comienza en el ojo, el iris adquiere un color verdoso
pardo cualquiera que sea su color original. También en ocasiones, se
ha tomado el color de un ojo artificial que no había sido reconocido
61
como tal. Los defectos oculares tales como estrabismo y operaciones
de cristalino son importantes y deben anotarse, ya que muchos casos
se han podido reconocer gracias a estos datos.
El cabello proporciona claves importantes en la investigación de un
crimen, dado que continúan siendo identificables tanto en el cuerpo,
incluso en los estados de gran descomposición, como sobre las armas
causantes de crímenes cometidos incluso mucho tiempo antes. A
menudo proporcionan la única conexión entre un arma, o un acusado,
y la víctima. La explotación más minuciosa del cuerpo en el lugar del
crimen en busca de cabellos extraños adheridos, proporciona claves
importantes, o al menos circunstancias, para influir fuertemente
sobre un jurado en circunstancias que el caso depende de tal prueba.
Color, textura, forma, edad aproximada no capacitan al científico para
decidir a quien pertenece el pelo. Éste puede determinar
inmediatamente si el pelo no es humano, o quizás, si es alguna fibra
animal o vegetal confundida con cabello humano. También puede ser
capaz de afirmar firmemente que un pelo es o no similar al de una
muestra del difunto acusado, y señalar el lugar de origen del cuerpo.
El cabello puede estar teñido, rizado, decolorado, o chamuscado y
estos datos ayudan a los detalles de identificación. Las células en su
raíz pueden ser sexuales.
Una prueba más fidedigna consiste en determinar a que región del
cuerpo corresponden los pelos hallados. Los pelos de la cabeza son
comúnmente cuadrados en su extremo distal cuando han sido
cortados. Transcurrido un tiempo cicatrizan en forma de disco. Todos
los pelos del cuerpo está afilados de forma roma, y los pelos de las
cejas disminuyen de calibre y están más agudamente afilados. Los
pelos del pubis, a menudo encontrados en la investigación de
víctimas de violación, o de asesinato durante la violación, son curvos
o tensos. El microscopio diferenciará las fibras de las diversas clases
de los pelos humanos.
5.3.6. Datos Dentales
Según VILLALAÍN BLANCO (2000), el estudio de la cavidad bucal
desde un punto de vista forense posee tres aplicaciones:
individualización, identificación en caso de mordeduras y resolución
de casos de lesiones. Se puede decir que la identificación es el
objetivo más importante, principalmente cuando se trata de
cadáveres sumergidos durante mucho tiempo, en avanzado estado de
putrefacción, esqueletizados, carbonizados o fragmentados. En estas
situaciones citadas arriba, la identificación por medio de las huellas
62
dactilares será difícil, por lo que la odontología forense aparece como
una especialidad esencial.
De esta manera, se estudia tanto los tejidos blandos de la cavidad
bucal (paladar, mucosa y labios) como los duros (huesos maxilares y
dientes). Estas estructuras resisten la destrucción por la putrefacción,
a elementos adversos ambientales, incluyendo el fuego, factores
físicos y traumáticos, etc. Se pueden estudiar los maxilares (forma y
dimensiones, distribución de las trabéculas óseas, etc), las huellas del
paladar mucoso (rugoscopia) y las huellas de los labios
(queiloscopia). De otra manera, el análisis de los dientes ofrece un
número de posibilidades casi infinito, por lo que solo con el estudio
dental es posible la identificación.
REVERTE COMA (1999) llama a la cavidad bucal, la caja negra del
organismo. En este mismo sentido es famosa la frase del naturalista
Cuvier:
“Dadme un diente y os diré como es el individuo entero,
humano o animal”. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 222)
La principal aplicación de la Odontoantropología forense es la
identificación de restos óseos.
a) Los Dientes
“La importancia del diente como elemento identificador
viene determinada, entre otros datos, por su persistencia,
por las variaciones anatómicas, por el número de dientes,
por la erupción, por el color y las marcas que orientan hacia
determinados hábitos, por las posibles patologías dentales,
por la posibilidad de hallazgos protésicos o de cualquier
manipulación, etc. Su aplicación en la identificación también
se fundamenta en que el diente y sus dimensiones guardan
relación proporcional con las medidas craneofaciales, e
incluso con todo el esqueleto”. (VILLALAÍN BLANCO, J. D.
2000: 231)
De todas las características listadas arriba, la resistencia de los
dientes a la destrucción es la más fundamental, sobre todo en los
casos de grandes catástrofes, o cuando se encuentran restos
esqueletizados, etc. Esta resistencia se explica por el alto contenido
63
en sales minerales, sobre todo apatita, en los tejidos dentales. El
esmalte constituye la parte más dura del esqueleto.
Los adultos tienen 32 dientes y los niños 20. Cada diente dispone de
cinco caras, o sea un total de 160 superficies en los adultos y 100 en
los niños sobre las que puede haber actuado un dentista para curar,
restaurar o rellenar caries o que pueden presentar patología,
variaciones morfológicas, pigmentaciones, etc. Por tanto, se puede
partir perfectamente de que no existen dos denticiones iguales,
premisa básica en identificación dental y que permite considerar los
dientes como huellas dactilares del cráneo.
Otro principio muy importante en la identificación dental, según
VILLALAÍN BLANCO 2000, es la necesidad de cotejar los datos
procedentes del examen postmortem con los que se disponen del
sujeto en vida para establecer la identificación positiva. Si la
comparación no puede ser hecha, se establece una identificación
relativa. Esta puede pasar a positiva cuando se obtenga información
antemortem y se compare.
Uno de los problemas vendrá dado por esa necesidad de encontrar
información anterior a la muerte del sujeto. Puede ser una ficha
dental de su odontólogo, una radiografía realizada en un
reconocimiento laboral, de un seguro privado, entre otros. Otra
dificultad en concreto es la interpretación de las anotaciones en estas
fichas. Existen múltiples sistemas de anotación de los dientes y de los
tratamientos, incluso puede ser un sistema propio del odontólogo.
También es importante tener en cuenta las posibles modificaciones de
la cavidad bucal en el tiempo transcurrido desde que se elaboró la
ficha hasta la muerte (puede haber consultado a otro profesional y
presentar otros tratamientos o mostrar otras patologías, etc). Todos
estos factores deberán ser valorados antes de concluir si se trata de
un cotejo positivo o negativo.
a.1. Identificación de los Dientes
La especie humana tiene dos denticiones: de leche, también llamada
decidual o temporaria, y permanente.
En la dentición decidua existen 20 piezas dentales y en la
permanente, 32. Cada una de dichas piezas presenta unos caracteres
que permiten identificarla y distinguirla del resto. En la tabla se
explica mejor:
64
Grupo
Incisivos
Caninos
Premolares
Molares
Corona
Forma de cuña.
Borde libre cortante, de
una sola dirección
Forma de cuña, pero
evoluciona al cono.
La cara incisal no es una
arista, sino que tiene dos
vertientes y un vértice,
con forma de V.
Forma cuboidea.
Superficie oclusal simple:
dos
cúspides,
surcos,
fosas.
Forma cuboidea.
Cara oclusal compleja:
tres o más cúspides,
surcos y fosas.
raíz
Única,
con
forma
pirámide cuadrangular.
de
Igual que los incisivos, pero
de mayor longitud
Única,
con
forma
de
pirámide cuadrangular.
El primer premolar superior
puede tener dos raíces.
Más de una raíz.
Los molares inferiores tienen
dos, orientadas en mesialdistal.
Los
molares
superiores
tienen tres: mesial, distal y
palatina.
Tabla 15. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 237)
El reconocimiento de cada diente no es muy difícil cuando se halla
implantado en su correspondiente alveolo o es posible reconstruir los
maxilares y reimplantar la pieza. La dificultad surge cuando se trata
de dientes aislados y aumenta ante fragmentos dentales.
Para identificar las piezas aisladas se debe proceder del siguiente
modo:
1. Determinar si es un diente de leche o permanente; Los
primeros son de menor tamaño, tanto en la corona como en
la raíz. Tienen un color blanco-azulado.
2. Encuadrase el diente en uno de los grupos: incisivos,
caninos, premolares o molares.
3. Intentar averiguar si es superior o inferior. Para ello se
observa el grupo, el número de raíces y de cúspides. Por
ejemplo: Los molares superiores tienen tres raíces frente a los
inferiores que sólo presentan dos. Los incisivos superiores,
tanto centrales como laterales, son mucho más anchos que
los inferiores. Los premolares superiores se caracterizan por
ser tricúspides.
65
4. Hay que ver si se trata de un diente del lado derecho o
izquierdo. Se mira la orientación de las raíces, pues éstas se
dirigen hacia la parte distal. También puede servirnos la
corona; se estrecha hacia la cara lingual y también hacia la
cara distal. Salvo en los caninos, el restante de los dientes
habrá que determinar su posición.
a.1.1. Técnicas en Identificación Dental
Los estudios de identificación a partir de una dentadura requieren de
una buena observación, dentro de una sistemática rigurosa, aunque
muchas veces la observación se apoya en medios instrumentales.
La odontoestomatología forense, en cuanto a identificación se apoya
en los análisis químico-físicos de restos dentarios y en los análisis
biológicos de los mismos.
Para VILLALAÍN BLANCO (2000) las técnicas necesarias para llegar a
una identificación personal a partir de los dientes son:
1. Observación y dentometría.
2. Estudio microscópico – Resulta especialmente útil cuando se
dispone de fragmentos dentales, por ejemplo cuando se ha intentado
destruir el cadáver.
3. Radiología – Es esencial en un protocolo de estudio dental,
permitiendo observar el grado de erupción y calcificación, tomar
medidas sobre las placas, valorar el estadio restitutivo en las
fracturas y en las pérdidas dentales.
4. Fotografía – Permite tener en todo momento un registro gráfico del
estado en que se hallan las piezas objeto de la pericia.
5. Técnicas de superposición craneofotográfica
6. Técnicas de detección química – Permite aislar tóxicos en los
tejidos dentales y analizar la composición de los mismos.
7. Técnicas inmunológicas - Para establecer el diagnóstico de la
especie.
8. Técnicas de ADN – Si la muestra es válida se puede identificar la
persona.
9. Informática – Hay algunos programas informáticos que permiten
reconstrucciones a partir de imágenes radiográficas, procesar datos
66
métricos, analíticos, etc. Actualmente
investigación sin el apoyo informático.
no
se
concibe
ninguna
b) Los distintos métodos sistemáticos de identificación personal a
partir de los dientes
1) Diagnóstico genérico;
2) Diagnóstico específico;
3) Establecimientos de la data de la muerte;
4) Determinación del número mínimo de individuos;
5) Diagnóstico individual: Características físicas generales – edad,
sexo, etnia, talla; rasgos individuales propiamente dichos. Señas
particulares.
1) Diagnóstico Genérico – Es el estudio que trata de establecer si es o
no un diente. La observación macroscópica con lupa muchas veces
ya permitirá establecer el diagnóstico diferencial. En otros casos la
pieza se someterá a análisis químicos e inmunológicos que fácilmente
revelarán su naturaleza.
2) Diagnóstico de la Especie
Después de determinar que se trata de un diente, el siguiente paso
consiste en establecer el diagnóstico de especie, o sea, ver si un
diente es humano o de otra especie animal.
Existen diversos métodos para determinar la especie en los dientes.
De manera similar a lo comentado para los restos óseos, cuando las
piezas están completas la morfología macroscópica puede ser
suficiente. En caso contrario, utilizan los siguientes estudios:
2.1.
2.2.
2.3.
Estudio morfológico
Estudio microscópico
Estudio Inmunológico
3) Cronotanatodiagnóstico
La determinación de la data de la muerte es el primer paso para
seguir adelante con la investigación de un crimen o cesar en la misma
si un delito ha prescrito. A partir de restos dentales se puede
establecer el cronotanatodiagnóstico. Los estudios realizados en
restos dentales más importantes se centran en las modificaciones de
la materia inorgánica, cambios en la proporción de formas levógiras y
dextrógiras de los aminoácidos, etc.
67
4) Número mínimo de individuos
Cuando los restos llegan al laboratorio, realizados ya los estudios
genérico y específico, se debe cuantificar el número de sujetos para
poder analizar cada uno de ellos, si así es posible.
Lo que debe ser hecho primero es identificar las piezas que, si están
en el correspondiente alveolo, no plantean ningún problema.
Los métodos que se aplican en los dientes son similares a los
expuestos para el estudio de restos óseos, con algunas adaptaciones:
4.1. Repetición anatómica – Después de la identificación de las
piezas, la repetición de un diente (por ejemplo dos caninos superiores
derechos) significa que son de dos sujetos diferentes.
4.2. Tamaño – Las dimensiones guardan relación en un mismo
individuo. Dos incisivos superiores centrales, uno derecho y uno
izquierdo, con gran desproporción de tamaño, pertenecen a dos
sujetos distintos.
4.3. Edad – Encontrar un diente de leche junto a piezas permanentes
con el ápice cerrado, permite separar al menos dos individuos, como
principio general y con determinadas salvedades, por ejemplo, que se
trate de un sujeto con retención de piezas de leche.
4.4. Sexo – Muchas veces no se puede recurrir a este parámetro para
calcular el número de sujetos, salvo que se valoren los hallazgos
sexuales mandibulares. El diagnóstico sexual a partir de los dientes
exige unas piezas concretas del mismo sujeto, para lo cual
necesariamente se debe haber realizado la individualización y, con
ella, la determinación del número mínimo.
4.5. Patología – Este método tendrá carácter orientativo en
determinadas patologías (caries y sarro) que pueden afectar a una
sola pieza. Tienen más interés el hallazgo de patología sistémica que
se exprese en el diente, o de alteraciones profesionales o de lesiones
producidas en fases de formación dental, pues afectan a varios
dientes.
4.6. Otros datos que se pueden valorar son la coloración, los cambios
tafonómicos, la data de la muerte y la presencia de prótesis.
68
La sistemática aplicada en laboratorio para dientes aislados es:
™ Identificación de cada pieza según lo propuesto en el apartado
correspondiente.
™ Intentar reconstruir las arcadas dentales en función de los
parámetros indicados: repetición anatómica, tamaño, edad, etc.
V.
Individual
™Diagnóstico
Si se dispone de
restos óseos, se deberán valorar los hallazgos
de los antropólogos, ya que la individualización necesariamente
ha de ser labor de un equipo multidisciplinar.
Después de los pasos anteriores, tras separar los sujetos si ha sido
posible, se procede al estudio de las características físicas generales,
se tomará nota de los hallazgos que por su naturaleza se constituyen
en señas particulares, que son propios de ese individuo y que
permiten establecer su identidad.
5) Diagnostico individual
En el diagnóstico individual se requiere un tratamiento específico tal
como:
5.1. Determinación de la Edad
La dentición de los seres humanos es uno de los principales
elementos que posee el antropólogo forense para establecer la edad.
La observación macroscópica es común, pero es habitual radiografiar
las piezas para conocer el grado de calcificación de las mismas.
El estudio morfológico, donde encontramos la erupción y la evolución
en la formación de cada diente, es el método más difundido.
Como es lógico, el desarrollo dental no puede aplicarse para
determinar la edad en sujetos, pues en ellos dicho proceso ya ha
finalizado. De ahí la necesidad de abordar el tema por grupos de
edad.
5.1.1. Edad en fetos
La determinación de la edad en el período fetal, necesita de la
valoración conjunta del desarrollo esquelético dental. Es muy difícil
69
que el desarrollo dental pueda ser aplicado de forma aislada en un
caso de restos fetales esqueléticos.
Para VILLALAÍN BLANCO (2000), el diente crece a partir del germen
dentario en cuya base se van depositando capas de dentina. La raíz
se va alargando y crece la corona, que va comprimiendo la mucosa
gingival.
La odontogénesis comienza en el embrión de seis o siete semanas. A
los cuatro meses inicia la calcificación con la aposición de sales
minerales, esmalte y dentina. A esta edad ya se observan los
vestigios de los incisivos centrales superiores y de los caninos. Desde
la 16ª semana es posible medir el espesor de la dentina (1 a 1,5
mm). En el feto a término ya se ha formado la mitad de la corona de
los incisivos y caninos y el tercio oclusal de la corona de los molares y
hay ya observables cuatro huecos labrados en la mandíbula.
Existen modelos experimentales para correlacionar el peso de los
brotes y tamaños dentales con la edad gestacional.
5.1.2. Edad en niños y adultos jóvenes
El estudio de las modificaciones de los dientes en formación es el
primer método para establecer la edad desde el nacimiento hasta los
14 años. Desde esta edad hasta los 20 años, se observará la erupción
del tercer molar y el grado de desarrollo de la raíz del segundo molar.
A partir de los 30 años la dificultad es mayor y la fiabilidad del
método mucho menor (SOPHER, 1980). La determinación de la edad
hasta principios de la tercera década de la vida se establece a partir
de dos hechos principalmente: la erupción y la calificación de la
corona y la raíz (CLEMENT, 1998).
En los niños y adolescentes se observa primero la erupción de las
piezas temporales, después, la combinación de dientes de leche y
permanentes y por último, la progresiva sustitución de los dientes
deciduos. La tabla siguiente sirve como orientación:
70
DENTICIÓN
Decidua
Permanente
PIEZA
Incisivos centrales
Incisivos laterales
Primeros molares
Caninos
Segundos molares
Primer molar
Incisivo central
Incisivo lateral
Primer premolar
Caninos
Segundo premolar
Segundo molar
Tercer molar
EDAD
6-9 meses
8-11 meses
12-16 meses
16-20 meses
20-26 meses
6 años
7-8 años
8-9 años
9-11 años
11-13 años
11-13 años
12-14 años
18-30 años
Tabla 16. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 256)
Es importante destacar que el proceso de dentición está sujeto a
numerosas variaciones. Los premolares por ejemplo, requieren más
tiempo que los molares para alcanzar el plano oclusal. La erupción no
es simétrica en ambos maxilares, ni tampoco en cada uno de ellos.
También existen diferencias sexuales: en las niñas, la erupción y la
calcificación es más avanzada que los niños. Hay también un detalle
importante que es la influencia climática, pues la calcificación es más
rápida en climas tropicales.
La edad de erupción por sí solo no es un parámetro que deba
aplicarse en odontología forense, ya que está sometida a múltiples
variaciones individuales. Se afecta por diversos factores que pueden
ser externos (clima, dieta, caries) o internos (sexo, raza, de tipo
fisiológico o patológico como el síndrome de Down). La calcificación
del diente es un proceso más constante que la erupción. La influencia
de los factores señalados antes es mucho menor sobre el grado de
mineralización dental, y la formación de la corona y de la raíz que
sobre la edad de erupción de los dientes (GUSTAFSON, 1966). A
pesar de ello se debe dar valor relativo a la cronología de la
calcificación cuando se aplica a un caso judicial (RICARDI, 1949).
Todos los estudios vienen a demostrar que no hay un patrón
universal de crecimiento y desarrollo dental. Existen pequeñas
discrepancias cuando se valoran sujetos de una población (por
ejemplo europeos) con patrones de una población distinta (la
americana por ejemplo). Pero se trata de unos márgenes de error
que pueden asumirse.
71
5.1.3. Edad en adultos
Los tejidos dentales también sufren con los cambios morfológicos y
anatomopatológicos
debidos
a
degeneración
propia
del
envejecimiento. El principal problema es la influencia de factores
externos como la higiene.
5.1.3.1.
Desgaste Dental
El progresivo desgaste del borde incisal o de la superficie oclusal de
los dientes en contacto con su antagonista, con el pasar de los años,
es un método eficaz y sencillo para establecer la edad. Hay que
diferenciar esta atrición de la abrasión y de la erosión. Se habla de
abrasión cuando hay una patología y de erosión, cuando el desgaste
se da por factores de tipo químico.
Para VILLALAÍN BLANCO (2000), el análisis de GUSTAFSON (1947) es
el método más conocido que se debe usar para determinar la edad en
adultos, a pesar de requerir experiencia. En el se valoran los
siguientes parámetros: 1. Atrición; 2. Periodontitis; 3. Dentina
secundaria 4. Aposición de cemento; 5. Reabsorción de la raíz; 6.
Transparencia de la raíz.
Este autor ideó un sistema matemático, regresivo, que combina los
parámetros anteriores y que permite establecer la edad en función de
los cambios regresivos que sufre cada uno de ellos. Según la
intensidad de la alteración se puntúa cada uno de 0 a 3, se suman
todos los puntos obtenidos y el total se traslada a la fórmula (Véase
fig. 8):
Edad estimada = 11,43 + 4,56 x puntuación total
72
Los criterios de GUSTAFSON y las puntuaciones son las siguientes:
0
Atrición
Desgaste
de
la corona (A)
Paradentosis
o
recesión
gingival (P)
Dentina
Secundaria
(D)
1
No
existe
Afecta al esmalte
No
existe
Empieza
recesión
2
Afecta la dentina
3
Llega a la pulpa
la Afecta el primer Afecta más de
tercio de la nariz dos tercios de la
raíz
No
Empieza
a La cavidad pulpar La cavidad pulpar
existe
formarse en la está
llena
de está completaparte superior de dentina
mente llena
la cavidad pulpar
secundaria hasta
la mitad
Aposición
No
Aposición
algo Existe aun gran La
capa
de
cemento (c)
existe
mayor
que
lo capa de cemento cemento es de
normal
gran
consistencia.
Reabsorción
No
En
pequeños Mayor pérdida de Afectación
de
de la raíz (R) existe
puntos aislados
sustancia
gran área dentina
y cemento
Transparencia No
se Se
empieza
a Supera el tercio Alcanza los dos
de la raíz (T)
detecta notar
apical
tercios de la raíz
Tabla 17. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 262)
Figura 8. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 261)
Para VILLALAÍN BLANCO (2000) las principales críticas al método se
fundan en la gran cantidad de factores que pueden alterar cada uno
de los parámetros, acelerando o retrasando los procesos.
73
Algunos
factores
que
modifican la evolución
Atrición. Desgaste de la Corona La dieta y el bruxismo la aceleran
(A)
Paradentosis o recesión gingival Higiene
personal
y
factores
(P)
familiares
Dentina Secundaria (D)
Depende de la capacidad
de
regeneración y defensa frente a
agresiones individuales.
Aposición de Cemento (C)
Puede variar en función de un
trauma oclusal.
Reabsorción de la Raíz (R)
Se puede alterar por procesos
como abscesos o flemones.
Tabla 18. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 262)
La edad obtenida de este modo tiene un error de 3 a 6 años. El
parámetro más fiable es la transparencia de la raíz por estar menos
afectado por las influencias externas.
5.2. Determinación del Sexo
Determinar el sexo a partir de los dientes puede realizarse por
métodos morfológicos y métricos o beneficiarse de modernas técnicas
de investigación biológica. Todos los métodos morfométricos en la
actualidad necesariamente deben acompañarse de un adecuado
tratamiento estadístico de datos.
5.2.1. Morfometría
Hay muchos estudios sobre la determinación del sexo a partir de la
morfología del diente.
Con relación al tamaño, como regla general, asumiendo la
variabilidad existente, se puede afirmar que los dientes de las
mujeres son más pequeños y más uniformes que los del sexo
masculino.
Sobre esta regla general hay numerosos estudios tales como:
ROLDAN (1989) llega a la conclusión de que los caninos permiten
una mayor aproximación, pues en los hombres tienen mayor longitud
y volumen que en la mujer; para AMÖEDO y AITCHINSON los datos
más fiables proceden de los incisivos superiores, pues son los que
tienen mayor dimorfismo sexual; AMÖEDO (1898) observó valores
mayores en el hombre en los estudios de los diámetros transversales
de los incisivos centrales y laterales; GRAN (1964) señaló que en
74
valor absoluto en el diámetro mesiodistal del primer molar es el que
presenta una mayor diferencia (0,52 mm), seguido del segundo
molar (0,45 mm) y a continuación los caninos superiores e inferiores
(0,44 mm y 0,42 mm respectivamente); NAGESHKUMAR basó sus
estudios en el llamado índice mandibular del canino:
Diámetro mesiodistal de la corona del canino
IMC =ņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņ
Anchura del arco mandibular entre los caninos
IMC > 0,274: masculino
IMC < 0,274: femenino
Figura 9. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 240)
El índice de AITCHINSON estudia la relación entre los diámetros
mesiodistales de los incisivos centrales y laterales, que son más
desproporcionados en la mujer que en el hombre:
Diámetro mesio – distal del incisivo central superior
Diámetro mesio – distal del incisivo superior
X 100
En condiciones normales, valores superiores a 150 corresponden al
sexo femenino; si el índice es inferior a 150, al masculino.
FRONTY afirma que es posible determinar el sexo de un sujeto X si se
conocen sus medidas odontológicas.
BEQUAIN y BOUTONNET (1980) estudiaron la morfología de las raíces
de los incisivos y caninos superiores. Tomaron la longitud radicular y
75
los diámetros mesiodistal y vestibulopalatino máximo en el cuello y
calcularon el módulo radicular:
Diente
Incisivo lateral
Incisivo central
Canino
Valor
del
radicular
> 11,6
> 13,8
> 13,8
Tabla 19.
módulo Sexo probable
Masculino
Masculino
Masculino
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 266)
Hubo la investigación del dimorfismo de los caninos en una población
india, SHERFUDHIN (1996) y en el fueron comparados dos métodos
estadísticos (método de N.G. RAO y colaboradores y el análisis
discriminante cuadrático) para la correcta clasificación del sexo. De
ellos el que ofrece mejores resultados es el análisis discriminante
cuadrático. Se observó que las anchuras de los caninos mandibulares
y maxilares eran bilateralmente iguales en ambos sexos, mostrando
asimismo un dimorfismo sexual significativo.
PIERA (1996) aplica el análisis de regresión logística y análisis
discriminante y obtiene un buen diagnóstico sexual en el 82,61 % de
los casos con ambos métodos. Sin embargo, el análisis discriminante
es más sensible a la existencia de exodoncias y la regresión logística
no. En este mismo estudio se aprecia una mayor diferencia sexual en
los valores odontométricos de los primeros y segundos molares tanto
superiores como inferiores.
La aplicación de funciones discriminantes a varios valores
odontométricos permite determinar el sexo en más del 95% de los
casos (KROGMAN e ISCAN, 1986; FIGUN y GARINO, 1988).
El dimorfismo sexual no es únicamente métrico, ya que se observa
diferencias en la forma. Unos dientes cuboideos, de ángulos
marcados y caras vestibulares planas son propios de los hombres.
Las mujeres presentan redondez en la forma, especialmente en los
dientes anteriores (incisivos y caninos), también en las superficies
vestibulares y en los ángulos dentales. Los dientes femeninos se
caracterizan por la armoniosa relación de sus caras (FIGÚN y
GARINO, 1988).
Existen asimismo diferencias sexuales en el desarrollo dental así
como en la frecuencia y tipo de anomalías. En cuanto a la
mineralización, ésta es posterior en los hombres, sobre todo en el
canino mandibular. Por lo que respecta a las anomalías, SCHRANZ y
BARTHA
(1963)
observaron
mayor
frecuencia
de
dientes
supernumerarios en los hombres y de agenesias en las mujeres.
76
Es importante resaltar que el diagnóstico sexual morfológico es
mucho más sencillo y fiable cuando se dispone de todo el maxilar,
pues las características dentales se suman a las óseas, especialmente
la morfología y las medidas mandibulares.
5.2.2. Otros Métodos
VARGAS ALVARADO (1991) aplicó la espectropenetración del esmalte.
La proporción de sustancia orgánica contenida en el esmalte es de 24%. Dentro del mismo es más elevada en la unión esmalte-dentina,
indica que la calcificación es menor en esta zona. En este método se
observan diferencias sexuales.
El método químico de BERNADSKIJ se basa en la cantidad de ácido
necesario para neutralizar la dentina alcalinizada en polvo. La
cantidad es distinta en el hombre y en la mujer.
Sólo el canino presenta diferencias sexuales importantes en cuanto a
la composición mineral de los dientes. En el hombre hay más calcio y
magnesio, mientras que en la mujer predomina el fósforo
(BERENHOLC, 1972).
5.3. Estudio del grupo étnico
No existe ningún método preciso para poder determinar el grupo
étnico en el diente, aunque ciertamente existen diferencias raciales
sobre todo en los molares. Además es importante tener en cuenta
que los estudios raciales en dientes, no tienen valor individual, sino
estadístico-poblacional.
La primera clasificación de las razas a partir de estudios dentales fue
propuesta por FLOWER, que se basó en las coronas de cinco molares
superiores y en lo que él denominó largo dentario. Calculaba el
llamado índice dentario según la fórmula:
Largo dentario
ID =ņņņņņņņņņņņņņņņņņņņ X 100
Diámetro nasion – basion
Largo dentario: Es la distancia entre la cara proximal del primer
premolar y la distal del tercer molar.
El valor de este índice oscila de 40 a 48 en las razas humanas y en
función del mismo se establecen tres tipos correspondientes a los tres
grandes grupos raciales (caucasoides, negroides y mongoloides). En
la tabla abajo se expresan los valores en el maxilar superior. Los
correspondientes al maxilar inferior fueron propuestos por S. De
FÉLICE.
77
Microdontes
(dientes pequeños)
Mesodontes
(dientes medianos)
Maxilar superior
< 42
Mandíbula
< 45
42 – 43,9
45 – 47,9
Mongoloide o amarilla.
Negra y amarilla (S
FÉLICE)
44 –45,9
> 48
>46
-
Negra y australiana.
Australiana (S FÉLICE)
-
Macrodontes
(dientes grandes)
Hipermacrodontes
(dientes muy grandes
Tabla 20.
Raza
Caucasiana o blanca
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 269)
Se han estudiado las diferentes formas de las arcadas en distintos
grupos raciales y se han observado algunas diferencias entre ellos, a
pesar de la gran variabilidad de dicha forma en una misma raza.
Los antropólogos diferencian cuatro tipos de arcadas: hiperbólica,
parabólica divergente, elíptica convergente, cuadrangular o con
ramas paralelas.
Figura 10.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 270)
Los caucasoides poseen, generalmente, arcadas parabólicas
divergentes; los mongoloides presentan arcadas en forma de
herradura; los negroides suelen tener arcadas cuadrangulares.
Para los odontólogos sólo existen tres tipos de arcada, en función de
la forma geométrica que adopten: elipse, parábola o hipérbola.
ancho de la arcada
Índice de la arcada =ņņņņņņņņņņņņņņņ
Largo de la arcada
78
El índice de la arcada dentaria también ofrece diferencias raciales,
pues nos informa de la morfología de la maxila.
Largo de la arcada: Distancia entre la tangente a la cara vestibular
de los incisivos centrales y línea imaginaria que une los puntos
centrales de la superficie lingual de los terceros molares;
Ancho de la arcada: Distancia entre el punto central de la cara
mesiopalatina del tercer molar derecho al punto contralateral en el
tercer molar izquierdo.
KRAUS (1957) estudia la variabilidad racial y encuentra que en
negroides el número de cúspides del primer premolar inferior es de
tres frente a las dos cúspides que se observan en las otras razas.
5.4. Determinación de la Talla
CARREA propuso un método matemático para calcular la talla de un
organismo a partir de los dientes. Para ello mide el arco determinado
por la suma de los diámetros mesiodistales del incisivo central,
incisivo lateral y canino inferiores. También mide lo que denomina
radiocuerda inferior que es la cuerda del arco. Establece la talla
máxima y la talla mínima:
Figura 11.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 274)
arco x 6 x 10 x Ⱥ
Talla máxima =ņņņņņņņņņņņņņņņņņ
2
radiocuerda x 6 x 10 x ʌ
Talla mínima =ņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņņ
2
79
Los valores de la talla se obtienen en milímetros. En los hombres los
valores están más cerca de la talla máxima y en las mujeres de la
mínima. Estas fórmulas se aplicarán cuando no exista otro método
más fiable para calcular la talla del sujeto.
5.5. Particularidades en los dientes
La individualización es el proceso donde se recogen y agrupan
diferentes caracteres de una persona. En la dentadura existen
muchas peculiaridades para establecer dicha individualidad, incluso
con sólo un diente si este tiene una particularidad muy significativa.
Cuando se estudian ambos maxilares con sus correspondientes
dientes, la identificación está prácticamente asegurada, pero si
disminuye el número de piezas o estas están muy deterioradas, las
dificultades aumentan. Por último, la identificación de prótesis
completa de dientes plantea un problema distinto, pues depende de
la existencia de marcas en dichas prótesis, que permitan identificar
bien a la persona por el odontólogo que ha realizado el trabajo.
Es importante resaltar algunas particularidades visibles: datos
procedentes del examen postmortal, y de otras no visibles que
requieren el uso de técnicas de laboratorio para ponerlas de
manifiesto.
5.5.1. Datos del examen postmortal
5.5.1.1. Parámetros generales
™ Número de dientes
Puede ser mayor o menor de lo normal.
¾ Mayor de lo normal – Los dientes resultantes pueden tener
morfología normal o ser rudimentarios. Esta anomalía es más
frecuente en los hombres.
¾ Menor de lo normal – La ausencia de piezas en la arcada puede
deberse a extracciones o caídas, ausencia del germen dental o
a retención. La agenesia es más frecuente en las mujeres.
80
™ Forma
Grupo dental
Incisivos
Caninos
Premolares
Molares
Variantes más importantes en la forma
ƒ Diente conoide o en clavo, que aparece sobre todo en
el incisivo lateral superior y suele asociar diastema del
segmento superior;
ƒ Diente en pala: se caracteriza por el aumento de los
bordes mesial y distal que delimitan una fosa lingual.
Tiene marcado carácter racial (mongoloides);
ƒ Hipertrofia del círculo.
ƒ Premolarización: Existe un gran desarrollo del tubérculo
palatino, por lo que el canino adopta forma de
premolar.
ƒ Molarización: de forma similar a lo comentado en los
caninos, el aumento del número de cúspides en los
premolares hace que éstos adopten la forma de
molares.
ƒ Tubérculo de Carabelli. Suele ser bilateral, aunque no
simétrico en cuanto al grado de desarrollo. Además
tiene gran valor racial;
ƒ El segundo molar es el de mayor variabilidad: en
ocasiones presenta una cúspide supernumeraria en la
superficie
vestibular
(tubérculo
paramolar),
generalmente asociadas a una formación radicular
independiente;
ƒ Otra variante es la presencia del llamado próstilido
(tubérculo de la parte anterior del tercio oclusal de la
superficie vestibular de los molares inferiores);
ƒ En los terceros molares es muy frecuente la reducción
del número de cúspides, y a veces se denomina con el
término premolarización.
Tabla 21.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 277)
™ Tamaño
Menor
(microdoncia)
d) Generalizada verdadera cuando todos los dientes
son homogéneamente más pequeños (síndrome de
Down).
e) Generalizada
relativa.
Cuando
existe
una
desproporción entre el tamaño de los dientes y el de
los maxilares.
f) Localizada. Es la más frecuente y suele afectar a los
incisivos laterales superiores y a los terceros molares;
también se da en los dientes supernumerarios
81
Mayor
(macrodoncia)
Asocia
apiñamiento
x
x
x
Generalizada verdadera. Muy rara, se ha visto en
determinadas patologías (hipersecreción de hormona
del crecimiento, anginotas con hipertrofia hemifacial,
entre otros).
Generalizada
relativa.
Cuando
existe
una
discrepancia osteodentaria
Localizada. Es rara, de etiología desconocida y suele
afectar a dos dientes simétricos, sobre todo los
incisivos centrales superiores.
Tabla 22.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 278)
™ Parámetros generales
postmortem
que
se
deben
valorar
en
el
estudio
¾ Disposición en la arcada – Malrotaciones, malposiciones,
apiñamiento, separación dental (diastema). Se puede añadir la
forma de la arcada (hipérbola, elíptica, cuadrangular y
parabólica).
Con los tratamientos de ortodoncia, este tipo de alteraciones
tiende a desaparecer.
¾ Tipo de mordida – Se anotará la existencia de profusión
mandibular o del maxilar y el grado.
¾ Patrón óseo – La capa esponjosa de los maxilares posee unas
características propias y persistentes durante mucho tiempo,
luego con un estudio radiográfico se puede establecer la
identidad del sujeto.
¾ Torus – Proliferación ósea que se puede estar localizada en la
cara lingual de la mandíbula, de forma simétrica o no. En el
maxilar superior puede aparecer tanto en el borde palatino del
hueso alveolar como en la bóveda palatina.
¾ Paladar hendido – Es una malformación que se caracteriza por
un defecto de fusión entre los maxilares. Suele asociarse a
otros defectos del cierre en partes blandas (labio leporino)
Estos tres últimos detalles no son dentales, pero su gran valor como
seña particular justifica su inclusión en este apartado. Constituyen
parámetros que no deben escapar al examen del perito. Para valorar
el patrón óseo se deberá radiografiar la pieza y cotejar con alguna
radiografía antemortem.
82
5.5.1.2.
dientes
Estigmas profesionales y hábitos relacionados con los
Algunos hábitos y oficios pueden dejar signos en los dientes; su
análisis puede incluso identificar tanto la profesión como el nivel
socioeconómico del sujeto. Constituye un tema ampliamente tratado
en odontología forense, por lo que se indican sólo algunas de las
modificaciones.
5.5.1.3. Patología
La existencia de patología puede manifestarse como una alteración
la forma o el tamaño de los dientes, incluso con aumento
pérdidas, con lo que también se altera el número. El hecho de que
se trate propiamente de una variación anatómica, justifica que
aborden estas manifestaciones por separado.
en
de
no
se
5.5.2. Tratamientos odontológicos
La obturación de caries con los distintos materiales disponibles en la
actualidad, así como las técnicas de endodoncia supone múltiples
puntos característicos. Se toma nota de la situación, tamaño y tipo de
material empleado; si es necesario se pedirá la colaboración de un
odontólogo. Hay que añadir las prótesis (coronas, puentes,
implantaciones) que constituyen un abanico de posibilidades.
5.5.3. Técnicas de Laboratorio
El estudio de los grupos eritrocitarios ha resultado útil en odontología
forense, ya que el diente persiste más que los tejidos blandos. Las
técnicas aplicadas se basan en la reacción antígeno-anticuerpo, que
se pondrá en evidencia mediante técnicas indirectas de las cuales dos
han resultado especialmente útiles: método de inhibición de la
aglutinina y la prueba absorción-elución.
La determinación del grupo ABO en dientes tiene el inconveniente de
que no se puede aplicar si existe sarro. Éste es rico en bacterias
cuyas enzimas pueden degradar el grupo ABO, o bien pueden poseer
mucopolisacáridos análogos.
Por último, la individualización a partir de restos dentales en la
actualidad se puede establecer por medio de las técnicas de ADN,
tanto nuclear como mitocondrial.
Es importante señalar también que la identificación dental puede
llegar a ser imposible si hay existencia de datos anteriores a la
peritación y la colaboración de otros profesionales.
83
5.3.7. Estigmas profesionales, cicatrices, tatuajes, etc.
No hay clasificación determinada de los estigmas profesionales,
debido a su variedad, pero su estudio encierra la fascinación de la
historia de Sherlock Holmes de Conan Doyle, y sin duda deben ser
retenidos en la mente cuando se observan, ya que en el momento de
la identificación de un cadáver pueden ser determinantes.
Las cicatrices tienen muchas formas, desde la línea marcada con
puntos de una cicatriz de quirúrgica hasta la ancha expansión
deformante de una cicatriz de quemadura. Las cicatrices recientes
son rojizas, se blanquean gradualmente con el tiempo y muchas
veces se retraen. El estiramiento continuado, en el abdomen, puede
dar lugar a determinadas deformidades.
Las tatuajes proporcionan una historia muy particular, reflejando
viajes, guerras, temas sexuales, historias y formas de expresar el
amor de anteriores generaciones. Presentan una gran variedad, que
va desde los dragones y serpientes temibles, hasta las formas de
mujeres indecorosas e incitaciones sexuales descaradas. Las iniciales
y fechas, los detalles del regimiento o del cuerpo de marina y algunas
veces las cifras de identidad proporcionan las bases científicas para la
identificación. Los pigmentos más utilizados son el carbón, el índigo y
el bermellón, y como son inyectados debajo de la dermis son más o
menos permanentes.
5.3.8.
Estudio de las huellas de enfermedad y de lateralidad
como elementos de identificación
a) Huellas de Lateralidad
Según VILLALAÍN BLANCO (2000), las particularidades esqueléticas
debidas al desarrollo asimétrico del esqueleto, debidas al hecho de
que un individuo es diestro o zurdo, junto a las alteraciones por
algunas enfermedades presentes en el tejido esquelético, son detalles
importantes en la identificación de restos óseos.
En los procesos de identificación, es importante saber si el individuo
era zurdo o diestro. Como casi toda la población es diestra, el dato de
ser zurdo ayuda, por su escasez relativa entre los humanos, como
importante dato a la hora de los estudios de identificación sobre los
restos de un individuo.
Los sujetos a través de movimientos repetitivos hechos con los
miembros superiores todos los días, desde comer a coger objetos,
escribir e incluso, apoyar asertos mediante la acción de las manos,
contribuye a un desarrollo muscular más acusado de un miembro
84
superior sobre el otro. Un ejemplo inverso lo tenemos en los
amputados en los que por falta de utilidad y movimiento, sufren de
atrofia en el muñón restante, incluyendo esta atrofia a su segmento
escapulo – clavicular correspondiente.
En el estudio comparativo de las clavículas, se verifica que el
desarrollo es mayor en la que pertenece al conjunto del miembro
superior dominante. Se identifica a que lado pertenece la clavícula, y
se coloca una debajo de la otra, entonces se percibe que siempre una
está más desarrollada que la otra. Sólo en caso de deterioro completo
de una de las piezas claviculares acudiríamos al estudio de otras
piezas esqueléticas.
No se pueden usar todos los huesos, como por ejemplo las vértebras,
ni cualquier clase de mediciones. Los posibles errores debidos a
actuaciones laborales forzadas deben ser tenidos también en cuenta
para disminuirlos.
El médico se encuentra en una situación particularmente favorable
para ayudar a la policía en lo que respecta a la posible existencia de
signos o síntomas de enfermedad descubierta en la exploración de un
cadáver, y la probabilidad de la existencia de antecedentes de
asistencia médica y tratamiento, los cuales pueden estar registrados.
No existe ningún detalle que sea demasiado trivial para no estar
anotado entre los datos que servirán para la identificación. Mucho de
lo anotado puede resultar de poca utilidad, pero es mejor hacerlo que
no tener ningún registro de algún detalle vital obtenido después que
el cuerpo haya sido destruido.
b) Huellas de Enfermedad
“No hay dos maneras iguales de enfermar, aunque tengan el
mismo
diagnóstico,
ni
las
secuelas
que
dejan
en
el
organismo son siempre las mismas, aún tratándose de la
misma enfermedad. No hay enfermedades sino enfermos”.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 287)
La enfermedad, y los procesos de reacción frente a ella, pueden dejar
rastros en el tejido esquelético. El tejido óseo, crece a la par que los
demás tejidos, se nutre como los demás tejidos, y una alteración en
el estado de salud del organismo repercute sobre él, como en los
demás tejidos.
85
Las huellas de enfermedad en el tejido esquelético son datos muy
importantes en los procesos de identificación de restos esqueléticos.
Ellas pueden dar datos muy útiles para la determinación de la edad,
como la existencia de artrosis generalizada o la enfermedad de
FORESTIER. Otros vestigios de enfermedad pueden aproximarnos a la
identificación total de sujeto.
La información previa recogida sobre las personas desaparecidas es la
ayuda que complementa esta técnica.
Si no existe, la única
aportación que se puede hacer es la de establecer un cuadro
patológico de una persona desaparecida, a la espera de una recogida
de datos más amplia por parte de las autoridades judiciales y de
investigación, o de un confrontamiento de datos en archivos lejanos
de personas desaparecidas.
Alteraciones no patológicas, pero visibles en una radiografía, pueden
dar datos importantes, como la existencia de un sacro en reloj de
arena, que incluye a los individuos con sacro perfectamente cerrado,
o la existencia de un espolón plantar, que casi siempre aparece en el
organismo sin dar clínica perceptible, pero visible en una radiografía
de pie.
¿Como hacer un estudio de estas características? La respuesta es, en
un laboratorio con disponibilidad de rayos X con personas dotadas de
experiencia en esta área. Los conocimientos precisos para esto, son
establecidos por la paciencia y buen hacer, por los conocimientos de
los procesos de enfermar, curar y morir, y su reflejo en el tejido
esquelético, y por los recursos que se tengan para disponer de
documentación y estudios sobre estas materias.
No es posible, tampoco fácil, hacer una exposición sobre todos y cada
uno de los vestigios de enfermedad. Es un acervo intelectual del
investigador que se va acrecentando con la experiencia y el estudio
casi diario.
5.3.9. Identificación por las Uñas
La vulnerabilidad de las uñas explica la frecuencia, en las profesiones
manuales, de ataques traumáticos o químicos. De esto resultan
particularidades
morfológicas
y
deformaciones
patológicas
caracterizadas de acuerdo con cada oficio.
ƒ
“Estigmas de origen mecánico – El desgaste ungueal se
observa en los joyeros, en el borde radial del pulgar
derecho; en los violinistas, en la mano izquierda; en los
pianistas, en las dos manos. Las erosiones por picaduras o
86
cortes se encuentran en los zapateros; en las costureras, en
el índice derecho, etc.
Coloración de las uñas – Es morena en los fotógrafos,
ƒ
negra acentuada en los trabajadores del plomo, ebanistas;
etc.
ƒ
Estigmas patológicos – Las uñas de los confiteros están
afectadas en la mano derecha de onix y de perionixis; los
tintoreros tienen las uñas cortadas, encarnadas, mates y
coloreadas en la base, atravesadas por estrías verticales o
transversales onduladas; etc.
ƒ
Incrustaciones subungueadas – El polvillo profesional de
productos manipulados se infiltra e incrusta en el repliegue
subungueal
donde se hallan, tras raspado de las uñas”.
(SIMONIN C. 1973:882)
En algunas enfermedades metabólicas y endocrinas, las uñas son
frágiles. Hay hipotrofia ungueal en la enfermedad de Raynaud y en
varias afecciones nerviosas.
En caso de intoxicación por arsénico aparecen alteraciones
hipotróficas de las uñas y en la intoxicación por oro hay exfoliación
ungueal. En la acromegalia se presentan uñas hipertroficas. Puede
haber uñas cóncavas o uñas en cuchara en casos de caquexia por
enfermedades consuntivas como el cáncer.
Hay otras alteraciones de las uñas, de origen patológico: mordeduras
en los neurópatas que se las muerden (onicofagia); desgaste por
rascado en los pruriginosos; albugo ungueal señalado por pequeñas
manchas blancas; onicogriposis o transformación en gancho de la uña
del dedo gordo en los viejos; distrofias congénitas: cronificación,
rugosidades, estriación; estriaciones longitudinales consecutivas a
trastornos circulatorios o tróficos: arteritis obliterante, varices,
neuritis, trastornos simpáticos, esclerodermia, etc., localizaciones
ungueales de las dermatosis: surcos longitudinales o transversales,
engrosamiento,
desprendimiento,
etc.;
onixix
sifilítica;
resquebrajadura; onicomicosis, etc.
Hay algunas particularidades que están ligadas a la raza, tales como:
uñas largas de los chinos y de los cochinchinos, tinte azulado de los
mulatos, igualmente las uñas pulidas o lacadas de un gran número de
mujeres, pero también hay hombres que se barnizan o hacen
barnizar sus uñas con lacas o esmaltes transparentes.
87
Como identificativo de sexo, la uña femenina suele ser más estrecha
por sus dedos más finos y más alargados, mientras que las del varón
suelen ser más anchas por el mayor desarrollo y tamaño de los
dedos. Estrías transversales aparecen en algunas mujeres durante la
menstruación y el embarazo.
El estudio de la uña con luz WOOD, permite apreciar una intensa
fluorescencia azul con punteado amarillento en las malformaciones
cornéales, lo que no aparece en la infancia y edades juveniles. En la
Enfermedad de Addison hay una especial decoloración de las uñas.
C. SIMONIN afirma que la matriz ungueal es muy sensible a las
perturbaciones que afectan el organismo. Toda alteración importante
del estado general es traducida por un trastorno del crecimiento de la
uña, que se vuelve más delgada y más fiable. El mismo fenómeno se
observa en los cabellos.
En el supuesto de que el trastorno sea momentáneo, la placa ungueal
se encuentra dividida en dos partes con una depresión transversal,
ligeramente curvilínea: surco de Beau (Véase fig. 12) cuya
profundidad y anchura corresponden a la intensidad y duración del
ataque distrófico de la matriz ungueal, supeditado a la gravedad de la
enfermedad.
Figura 12. (REVERTE COMA, José M. 1999: 308)
88
Aplicaciones Medicolegales en las uñas
Para SIMONIN los surcos transversales de Beau son utilizados por el
médico legista:
9 Para fijar retrospectivamente la época de una
enfermedad grave o de un agotamiento intensivo, con
atención a la rapidez de crecimiento y al hecho de que
la altura de la porción de uña hundida bajo el repliegue
ungueal es de 3 a 4 milímetros.
9 Como elemento de identificación de una persona que se
sabe haber estado afecto de una enfermedad grave
algunos meses antes.
9 Como elemento diagnóstico psiquiátrico retrospectivo
para confirmar que un delito o crimen ha sido
verosímilmente cumplido bajo influjo de una crisis
psicológica grave.
9 Como elemento de prueba de sevicias hacia un niño,
afirmando que ha sido alimentado deficientemente en
una época dada.
A veces aparecen acanaladuras longitudinales
trastornos circulatorios o tróficos locales.
consecutivas
a
Figura 13. (REVERTE COMA, José M. 1999: 308)
89
Como armas naturales, las uñas pueden inscribir sobre la piel de las
partes descubiertas del cuerpo de la víctima o del agresor huellas
traumáticas bien conocidas (arañazos lineares, rascados, estigmas
ungueales) que tienen gran significado como indicio de
estrangulamiento o agresión. Las uñas juegan un papel activo en un
crimen, porque las retienen en el subungueal, en el que se
encuentran por raspado de las uñas, tales como: sangre y restos
orgánicos; polvillo comprometedor característico de objetos robados o
indicadores del camino recorrido; pelos; colgajos dermoepidérmicos
ensangrentados. En este último ocurre el arrancamiento de
fragmentos de epidermis y dermis por los arañazos hechos por la
víctima a su agresor durante la lucha generalmente precedente al
crimen.
Según REVERTE COMA (1999) con la técnica de tipaje ABO en uñas
seguida por Ruiz de la Cuesta es posible Determinar el Grupo ABO-AB
sanguíneo, incluso en las muy antiguas como las de cadáveres
momificados de hace miles de años, puede estudiarse con bastante
precisión.
5.3.10. Identificación Radiológica
“Un avance fundamental lo constituyó la Roentgenología
judicial, creada por LEVINSOHN, en Berlín, en 1899, esto es
aplicación de los Rayos X a la Antropología Judicial, a la
investigación y pesquisas policiales, rama que mantiene en
la actualidad todo su interés y posibilidades”. (VILLALAÍN
BLANCO, J. D. 2000: 23)
El estudio de senos frontales, de fracturas o deformaciones
radiografiadas pueden ser de gran ayuda en identificación siempre
que poseamos el correspondiente registro obtenido en vida con el que
comparar; el mayor o menor grado de fiabilidad dependerá del tipo
de particularísimos detalles coincidentes entre ambas radiografías. En
ocasiones mediante RX pueden ser detectadas piezas de joyería o
trozos de ellas incrustadas en cadáveres, como consecuencia del
accidente, así como tornillos, alfileres u otras prótesis con valor
identificativo o que pueden servir de ayuda para orientar una
identificación.
Los rayos X son considerados uno de los sistemas más simples y
eficaces en el campo de la identificación personal. El
perfeccionamiento de los sistemas y aparatos radiológicos cubre un
extenso abanico de aplicaciones, con mucha eficiencia y rapidez. La
aplicación de los rayos X a la investigación judicial y policial ha
90
evolucionado
mucho.
Exploración
radioscópica,
radiografías
convencionales, tomografía, estereorradiografía, xerorradiografía, etc,
con todas las posibilidades que ofrece el tratamiento de imagen,
hacen de este sistema exploratorio un elemento imprescindible en el
trabajo medicoforense.
Según VILLALAÍN BLANCO (2000), la práctica demuestra que los
rayos X son aplicables a la identificación de:
a) Sujetos vivos: amnésicos, dementes, simuladores, etc.
b) Valoración de lesiones recientes
valoración del daño corporal.
y
antiguas,
secuelas
y
c) Tanatología: cadáveres recientes, antiguos momificados,
descuartizados, quemados, fragmentados, esqueletizados, etc.
d) Osteoantropometría general - Antropometría radiográfica, etc.
e) Estomatología medicolegal y forense convencional, panorámica,
etc.
f) En investigación criminal y en el análisis de los indicios
biológicos del delito: Dactiloscopia radiológica, pelo, insectos,
polen, documentos escritos, etc.
g) Investigación químico-toxicológica.
h) En arqueología: aplicada a restos antiguos, mobiliario,
investigación de piezas varias, valoración de elementos-traza,
etc.
i) En policiología, búsqueda de restos óseos, de
desactivación de explosivos, estudio de pinturas, etc.
drogas,
Para VILLALAÍN BLANCO (2000), el problema de la identificación de
restos óseos puede plantearse desde tres puntos de vista distintos:
91
1. Estudiando las características personales individualizadoras
como son sexo, edad, raza, talla, variaciones morfológicas o
signos patológicos, existencia de prótesis, cicatrices óseas,
etc. Esta valoración puede hacerse directamente sobre el
hueso, como se estudia en otros capítulos, o mediante el
estudio radiográfico pertinente de los restos óseos
encontrados o comparativamente con registros radiográficos
realizados en vida.
2. Evaluación de la congruencia entre la morfología del cráneo
o su radiografía y fotografías tomadas en vida por
superposición de las imágenes correspondientes.
3. Reconstrucción plástica de los rasgos fisonómicos del sujeto.
La primera persona en estudiar la historia de la Antropometría
Radiográfica fue Israel CASTELLANOS. En el año 1929 alcanzó un
grado de desarrollo suficiente para ser estudiada de forma
monográfica. Esta técnica fue creada por LEVINSOHN (1899),
buscando eliminar los inconvenientes que ofrecían las mediciones
antropométricas óseas a través de los tejidos blandos aunque,
previamente, Arthur SHSTER había aplicado la técnica radiográfica en
un caso de asesinato en MANCHESTER (1896) demostrando, con uno
de los primeros tubos de Crooks, cuatro proyectiles de pistola en el
interior del cráneo del fallecido. KRONECKER (1914) propuso la
radiografía de ambas manos para completar la identificación
dactiloscópica; NELKEN (1920) cambió la radiografía con la
dactiloscopia y BECLERE creó la radiografía dactiloscópica o
dactiloscopia radiográfica, técnica mejorada por D'ARCY POWER.
CUBERT y LAW (1927) propusieron la identificación mediante
radiografía de los senos frontales, procedimiento que fue muy
valorado por MYERS (1928) y que fue motivo de tesis doctoral de
DELCLÓS (1935). VOLUTER (1959) recomendó realizar también la
identificación radiológica a partir del seno esfenoidal y la base del
cráneo. Resumiendo, las posibilidades que nos ofrece hoy la
radiología son tales que SANDERS y COLS (1972) identificaran a un
individuo utilizando el único hueso que quedó de él después de un
accidente: la clavícula izquierda.
92
"Es la radiología que va a resolver en buena medida la
identificación cuando en la muerte, la víctima se ha
fragmentado (accidentes aéreos, de ferrocarril, explosiones,
incendios, catástrofes, etc.), porque aún tratándose de
restos destruidos por el calor o por agentes químicos, suelen
persistir
partes
óseas
y
en
ellas
señas
particulares
perfectamente identificables por métodos radiológicos. Un
estudio radiológico minucioso permite no sólo detectar los
fragmentos
de
hueso
y
sus
peculiaridades
individualizadoras, sino también ciertas lesiones originadas
antes del siniestro o en el mismo". (VILLALAÍN BLANCO, J.
D. 2000: 343)
Esta técnica es tan valiosa en caso de siniestro que fue propuesta por
RUBIO (1976), como elemento de la ficha general identificadora del
personal del vuelo de las Fuerzas Aéreas españolas. También es
importante resaltar que se recomienda el estudio con rayos X de
todas las piezas en el protocolo de la ONU, oficina de Viena, para el
estudio de restos de personas desaparecidas por medios ilegales y
ejecuciones sumarias. En este protocolo se recomiendan radiografías,
antes de abrir la bolsa que contenga los restos humanos.
Cualquier aparato es suficiente para el examen radiográfico de restos
óseos, y lo mismo se puede decir respecto a la película o papel
radiográfico. Generalmente es preferible el papel porque la imagen
radiográfica aparece en blanco sobre fondo negro y permite trazar en
color negro las líneas necesarias y medir éstas con precisión y
comodidad. Pero si utilizan placas, se recomiendan placas
industriales.
Muchas veces, por la escasa densidad de los huesos, no debe
utilizarse una radiación dura. El investigador debe limitarse a indicar
al radiólogo cuál es la finalidad que se persigue para que el
especialista le proporcione las placas más adecuadas. Es
recomendable así mismo, evitar el uso de pantallas o placas de
refuerzo.
En la sistemática de estudios de restos óseos, VILLALAÍN BLANCO
(2000) resalta que las técnicas fundamentales son: la identificación
radiológica general del esqueleto, el análisis de la trabeculación ósea,
la detección de defectos personales, como la lacunación ósea,
craneal, calcificaciones, cálculos, etc, como el estudio de los senos
craneales o la silla turca.
93
Él afirma que poseyendo una imagen radiográfica en la que se vea el
hueso y su estructura interna es imposible confundirlo con otro que
no sea el mismo porque el tipo arquitectónico suele prestarse
maravillosamente a la comparación entre dos piezas óseas.
"PIGA PASCUAL, ideó una fórmula para la identificación
radiográfica de los restos óseos:
D + E + M + 0'10 =1, o una cantidad mayor que la unidad
Donde D es la diáfisis; E, la epífisis y M el conducto medular,
concediendo a cada valor comparativo el de 0'30. Para
cumplir
con
las
exigencias
de
la
fórmula
es
preciso
determinar seis puntos de comparación y dar a cada uno un
valor discrecional con arreglo a la semejanza de las medidas
resultantes. Cuando las radiografías corresponden a la
misma persona, las medidas serán idénticas con un error
máximo de uno por veinte, esto es, 1mm. Por cada 20mm.;
en caso de sujetos distintos, las diferencias son tan
extraordinarias que podemos afirmar inmediatamente su
desemejanza". (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 345)
Para hacer el estudio comparativo de dos huesos o segmentos de
huesos, se trazan líneas que relacionen entre sí puntos perfectamente
delimitados sobre la radiografía. Si los huesos están completos se
hará sobre una epífisis, luego la otra y, por último, la diáfisis. En
ésta, que no tiene zonas tan características, tomaremos una zona
identificable en ambas radiografías y se trazan líneas paralelas a igual
distancia a lo largo de ella. A continuación, con una regla graduada,
se hacen las mediciones.
ORTEGA LECHUGA (1933) recomienda dar un valor de 0'05 a cada
una de las medidas, ya que la suma supone el 0'30 de la fórmula. Si
la diferencia es menor al 1 por 20, se le asignan los valores de 0'06 y
0'07 cuando la identidad es completa. Si la diferencia de las
longitudes de las líneas que unen los mismos puntos de referencia
sobrepasa el 1 por 20, no es atribuido valor, y figurará como cero.
Partiendo de estas valoraciones, la determinación de la talla, sexo y
edad se realizan siguiendo las mismas pautas y consideraciones que
si existiese el hueso completo delante, incluso, como en los trabajos
de SASSOUNI (1959) y KROGMAN (1978), hoy es posible reconstruir
el cráneo en su totalidad a partir de fragmentos del mismo, utilizando
radiografías.
94
Según VILLALAÍN BLANCO (2000) tratándose de identificación debe
tenerse en cuenta la denominación "ficha craneal" del profesor PIGA
PASCUAL (1928). Recibe este nombre la que, obtenida de los restos
óseos dubitados mediante una radiografía, sirve de comparación a las
radiografías que existen del sujeto en vida.
RUBIO FUENTES (1985) propone para el diagnóstico radiológico, en
función del grupo étnico, estudiar los siete parámetros:
™ Espesor de las paredes del cráneo (superior en el
negroide que en el caucasoide);
™ Hueso nasal (corto y vertical en el negroide);
™ Espina nasal (corta en el negroide);
™ Posición de los dientes (vertical en el caucasoide);
™ Espesor del cuerpo mandibular (superior en el negroide
que en el caucasoide);
™ Escama occipital (mayor espesor en el negroide);
™ Prognatismo facial.
Posteriormente, REVERTE COMA (1999) recomienda el uso de las
radiografías antero-posteriores y laterales del cráneo, midiendo la
anchura máxima o diámetro transverso máximo, el diámetro anteroposterior y la altura auricular o la altura total. Utiliza para esto la
fórmula de MANOUVRIER (1892):
Longitud X Anchura x Altura
2
El resultado es dividido por 1'14 en los hombres y 1'08 en las
mujeres, sin necesitar de ajustes por edad. Él también recomienda
fórmulas como las de LEE-PEARSON o las de FLORIEP.
VILLALAÍN BLANCO (2000) resalta el trabajo de CALICÓ. Este
académico de Medicina de Barcelona publicó un libro en 1941 donde
proponía un sistema o ficha de identificación radiológica. Propuso que
los Institutos de Identificación deberían ampliar su trabajo a los datos
persistentes tras la muerte y aquellas que la mutilación del cadáver
no lograse o que fuera difícil hacer desaparecer, cuando el sujeto ha
sucumbido a consecuencia de un crimen, en un hecho glorioso de
armas, en un accidente automovilista o de aviación. Un estudio
95
minucioso del esqueleto registrado y archivado puede servirnos para
obtener con precisión la identificación de un cadáver.
CALICÓ (1941) propone varias mediciones y si la radiografía se
obtiene siempre con chasis y foco a la misma distancia no hay
errores:
™ Talla
™ Distancia en centímetros desde el apéndice xifoides al
borde superior del pubis
™ Distancia entre el apéndice xifoides y la espina ilíaca
anterosuperior izquierda
™ Distancia entre la espina ilíaca anteroposterior y el pubis
™ Distancia entre las dos espinas ilíacas anteroposteriores.
De esta forma se obtienen mediciones de puntos óseos en una región
donde es sumamente difícil una mutilación.
BONNET (1980) independiza como métodos específicos, el estudio, en
caso de restos torácicos del reborde costal de ambos hemitórax
teniendo como vértice el apéndice xifoides (CALICÓ, 1933), o el
procedimiento de PRELLER de comparación y superposición de las
imágenes torácicas. El mismo autor aporta un estudio comparativo de
la columna vertebral, estudiando las características y anomalías de
las regiones, cervical, dorsal y lumbar.
PONSOLD (1955) recomienda el estudio de la estructura del húmero
cuando existe. La determinación de la edad, para él, puede ser hecha
radiograficamente. Se realiza una radiografía de la epífisis superior
frontalmente y se procede al examen de la estructura ósea. En el
capitulo Determinación de la Edad a través del Esqueleto, hemos
mencionado e ilustrado la determinación de la edad a través del
estudio de la radiografía del humero (Pág. 61).
"LEVINSHON, con la aprobación del célebre Hans GROSS,
propuso la identificación de los reincidentes por medio de
mediciones practicas sobre radiografías de las falanges del
metacarpo y del metatarso. Con este sistema radiográfico la
precisión
es
casi
absoluta
superando
claramente
el
bertillonaje. Sus inconvenientes principales son la necesidad
de disponer de estos huesos, que se pierden con facilidad,
96
radiografía de comparación, dificultad de personal, coste de
material y que solo es aplicable en adultos. Con todo, es un
sistema que, aunque no se utiliza, prestó excelentes
servicios,
según
refiere
MEERSCHEIDT-HULLESSEM".
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 356)
ANFOSSO, al final del siglo XIX, intentó solucionar el problema de la
identificación que no concluía el bertillonaje. Inicialmente inventó el
llamado taquiantropómetro, que reducía el tiempo necesario, pero
que aseguraba la exactitud antropométrica. Posteriormente ideó su
propio procedimiento identificativo basado en la reproducción de los
perfiles craneales. La técnica ideada para el sujeto vivo es aplicable a
la identificación craneal directa o la radiográfica.
SCHULLER (1921) planteó la posible utilización de la radiografía de
los senos frontales como un elemento identificativo. En 1927
CULBERT y LAW presentaron un caso de identificación basado en los
senos frontales, con apoyo de las características radiográficas de la
mastoides. En 1934 Luís DELCLOS, de Tarragona, presentó su tesis
doctoral titulada "Ensayo de un método radiográfico de
identificación". En el año de 1942, TURPIN y TISSERAND, presentaron
un método identificador por los senos frontales. SCHULLER (1943),
publicó
varias normas en relación a la orientación del cráneo.
THORME y THYBERG en 1953 propusieron la radiografía de senos en
serie como un sistema de identificación preventiva. DESOILLE y
MICHON, en Francia, compartieron este valor. NEISS (1962) volvió a
proponer este método. En el año 1965, ASHERSON publicó una
monografía sistematizando el procedimiento. ZUBIZARRETA (1966)
en Argentina estudió el procedimiento en su tesis doctoral. MANN y
FETTEH, (1968) aplicaron este método a la identificación en un caso
homicida. OKSANEN y KORMANO propusieron como complemento a la
investigación el estudio de los surcos vasculares en 1978. Hoy, es
considerado un sistema de identificación rutinario por MARLIN y COLS
(1991).
Los senos frontales son dos divertículos de las fosas nasales, de
formas muy variables, ubicados en las dos tablas del hueso frontal, a
cada lado de la línea media. Ellos se encuentran separados por un
tabique anteroposterior, también llamado tabique intersinusal, de
grosor variable. Es importante destacar que la dimensión de estas
cavidades son muy variables, frecuentemente asimétricas y presentes
desde épocas fetales precoces. Son mayores en el adulto que en el
adolescente y en el hombre que en la mujer, y sin cambios
significativos en el anciano. Las medidas medias son: 20-23 mm de
altura, 25-27 mm de anchura y 10-15 mm de profundidad.
97
Las posiciones radiológicas son muchas y variadas pero, la mejor
disposición es la placa postero-anterior, frontal, occisito-nasal o
sagital.
DELCLÓS trabaja con un cuadro dividido en ocho casillas, en las
cuales va colocando cada una de las modalidades observadas, del
siguiente modo:
™ Compañía: Único, simétricos, asimétricos.
™ Diámetro mayor, vertical u horizontal.
™ Dimensiones: Grandes (superior a 3cm); medianos (1 a 3 cm):
pequeños (menos de 1 cm).
™ Contorno de los senos: 1,2,3,4 o más lóbulos, considerando
como lóbulo la más pequeña interrupción que sufra la curva en
el trazado.
™ Desviación del tabique intersinusual: A la derecha, a la
izquierda y en casos raros, perpendicular a la tangente de los
arcos orbitarios.
™ Contorno de los arcos orbitarios: aplanados y lisos, arqueados,
crestas o festones.
™ Anomalías: Carencia, senos emigrados, sinusitis osteomas,
senos policavitarios.
™ Talla del sujeto.
Al terminar se adjuntan estos detalles pormenorizados con su
nomenclatura. En este sistema se puede elaborar fácilmente el
diagrama radiológico, representada cada variedad por una letra con
un exponente que indica el lado derecho, izquierdo o los dos.
En este tema, tenemos aun el método craneo-selar de VOLUNTER
(1953,1959). VILLALAÍN BLANCO (2000) sitúa este método como:
“La silla turca constituye una cavidad que aumenta de
tamaño rápidamente hasta los cinco años y luego lo hace
más lentamente, de tal modo que se establece una relación
entre la edad y las dimensiones de la silla turca. Sus
características son igualmente identificadoras.
A estos
efectos, se realiza una radiografía lateral, a 1,5 m de
98
distancia con placas de 24 X 30; luego, sobre papel
milimetrado se miden los diámetros vertical y horizontal de
la silla y se calcula su volumen en milímetros cúbicos”.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 360)
TABLA DE VOLUTER
Edad Nac.
Diámetro
Vertical
1 mes
1mes – 1 año
1-5 años
5-8 años
8-12 años
16-20 años
20-60 años
3-3’9
3’1-6’1
5-7’5
5’2-8’1
6’8-8’9
8-12’5
8’9-12’4
Diámetro
horizontal en
mm.
4’8-7
5-9’2
5’5-11’8
6’9-13’4
8’2-14,6
9’9-15’2
11’8-16’2
Volumen en
mm³ en mm
9’18
10-14
35-94
46-98
58-110
86-116
90-130
Tabla 23. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 361)
El método de VERGEHOF, llamado método goniométrico es usado
para la medición de la silla turca. A través de el se conoce el grado de
desarrollo, forma de la silla turca, circular o elíptica y con relación a
ello, la edad del individuo, la posible patología y la identidad del
sujeto si disponemos de imágenes de comparación.
VILLALAÍN BLANCO (2000) destaca que en los casos en que existe
una destrucción cadavérica que llega a la esqueletización, la
radiografía del cráneo y del resto del esqueleto, complementadas con
la información procedente de los bancos de datos por ordenador
referentes a otros materiales del mismo género, pueden ofrecer
elementos estadísticos suficientes como para determinar la edad
probable del sujeto, su sexo, su raza y otros datos significativos.
También habla de que si aplicamos técnicas xerorradiográficas que
permiten estudiar y percibir las partes blandas, haciendo posible
establecer las medidas de estos tejidos, elaborando datos estadísticos
para conocer el posible perfil más exacto, proporcionan un adecuado
diagnóstico antropológico.
Por debajo de los 25 años, el sistema aporta datos muy exactos
acerca de las etapas de erupción de las piezas dentarias. También es
posible analizar los procesos de sinostosis de las suturas craneales
como ya hemos mencionado en el capitulo – Determinación de la
Edad según Erupción de los Dientes y Centro de Osificación y Fusión
99
Ósea en el subítem 5.3.4. El tamaño y forma de los huesos faciales,
la robustez de las paredes del cráneo y el desarrollo de las
inserciones musculares, permiten determinar el sexo con el 70% de
seguridad; el origen racial dificultado por el alto porcentaje de
mestizajes, permite operar con un porcentaje de posibilidades del
50%, etc.
5.3.11.
Manchas de Sangre
a) Investigación de Manchas de Sangre
“Por manchas se entiende toda modificación de color, toda
suciedad o toda adición de una materia extraña, visible o no,
en la superficie del cuerpo humano, sobre instrumentos o
sobre un objeto cualquiera”. (VILLANUEVA CAÑADAS, E.
2004:1257)
El estudio de las manchas de sangre aporta a la identificación datos
muy importantes.
Demostrando que se ha derramado sangre humana se fortalece la
hipótesis de una muerte criminal. Las condiciones de la muerte, las
fases de la lucha, el mecanismo del crimen se encuentran precisadas
por las particularidades del derramamiento de sangre, por la situación
y forma de las manchas, por su posición en relación a la víctima, por
su presencia sobre el vehículo que ha servido para transportar el
muerto, y en los sitios donde ha sido depositado.
El tipo de muerte puede ser deducido por la presencia de las manchas
sanguíneas de cabellos, pelos, materia cerebral, grasa, hueso, células
vaginales, que pueden ofrecer informaciones sobre la naturaleza y
origen de la hemorragia.
La búsqueda de culpabilidad aumenta mucho si la sangre es
identificada en las armas recogidas o en las vestimentas de los
sospechosos.
La investigación de las manchas de sangre implica diversas
operaciones que tienen por objeto el descubrimiento de las manchas,
su identificación y su estudio morfológico.
100
1. Hallazgo de Las Manchas
Las manchas de sangre se encuentran en la víctima, en sus vestidos
(anverso, reverso, puños, bolsillos, chalecos), o sobre su cuerpo, o en
las cavidades naturales (nariz, boca, orejas, órganos genitales).
Figura 14. (SIMONIN C. 1973:885)
Situación de las huellas de sangre para su búsqueda e identificación.
Según A. BRÜNING en SIMONIN C. (1973) deben buscarse también
alrededor de la víctima: suelo, pared, lacas y picaportes de puertas y
ventanas, barandilla de escalera, bordes de las mesas, agua de
lavado, armas, etc.
En el criminal, en sus vestidos, en sus manos y bajo sus uñas. El
examen de su nariz y de su boca es indispensable para eliminar su
origen natural.
El descubrimiento de las manchas de sangre no es fácil cuando son
muy pequeñas, o cuando están en vestidos de tinte oscuro o sobre
telas u objetos lavados. La antigüedad y la naturaleza del soporte en
el que se encuentran, modifican el color de las manchas. Como
medios de investigación, podemos señalar la iluminación oblicua, la
luz artificial, el examen con cristal amarillo, o incluso la fotografía con
pantalla azul con rayos infrarrojos para descubrir las manchas
lavadas, localizarlas, extraerlas con objeto de someterlas a las
pruebas de identificación.
2. Examen Morfológico
“La
situación
y
la
forma
de
las
manchas
vienen
condicionadas por la naturaleza y localización de la herida,
101
posición
de
la
víctima,
movimientos,
desplazamientos,
gestos del criminal. Estos diferentes factores hacen variar la
cantidad de sangre esparcida y el ángulo de caída de
sangre, de donde resulta la configuración de las manchas.
Según el mecanismo de su formación, conviene distinguir:
las
manchas
por
derramamiento
de
sangre
(charco,
derramada, lineal, babeo), manchas por contacto (huellas
sanguinolentas), manchas por impregnación, cuando un
paño está embebido, las manchas por secado”. (SIMONIN C.
1973:886)
Figura 15.
(SIMONIN C. 1973:886)
Los elementos que indican las condiciones en que se han producido
estas manchas son:
¾ una hemorragia venosa se desliza y sale babeando.
¾ una hemorragia abundante da lugar a un charco de
sangre de contornos irregulares y variables según las
condiciones del derramamiento; la presencia, alrededor
del charco, de gotitas secundarias, con formas ovales
más o menos alargadas, indica un derrame de cierta
altura.
102
¾ la sangre arterial se proyecta en chorro, por sacudidas,
para formar gotitas, salpicaduras, manchas en globitos.
¾ el contacto de los dedos ensangrentados deja
impresiones sanguinolentas, señales con contornos
imprecisos, irregulares; en los tejidos, la sangre se
deposita en coágulos superficiales.
¾ el secado se traduce por estrías paralelas.
¾ una mancha lavada incompletamente se presenta con
un centro más obscuro que la periferia, donde el tinte
está disminuido; la sangre embebe las fibras del tejido.
¾ la caída de una gota de sangre sobre un plano
horizontal forma una mancha circular rodeada de
dientes, de puntas cuyo número depende de la altura de
la caída y del volumen de la gota (Véase fig. 15).
¾ sobre un plano vertical u oblicuo la proyección de sangre
da lugar a manchas ovales, en globito, terminadas por
salpicaduras situadas, como el eje, en la dirección del
movimiento; las manchas son tanto más alargadas
cuanto más agudo es el ángulo de llegada.
¾ la naturaleza del soporte, liso o rugoso, compacto o
esponjoso, interviene también para modificar el aspecto
de las manchas.
3. Identificación de Las Manchas
Los caracteres macroscópicos de las manchas de sangre no son
suficientes para diferenciarlos de falsas manchas que tienen una
semejanza parecida: manchas de frutas, jugos vegetales, jugos de
aceitunas frescas, de vino, mancha de tinta roja, de pintura, de rojo
de labios, excrementos de pulgas, etc. Es, necesario someterlas a
reacciones de identificación tras haberlas disuelto por maceración, en
algunas gotas de agua destilada. Para las manchas antiguas es
fundamental emplear el ácido acético glacial, o de preferencia
amoníaco puro.
Las reacciones de identificación de la sangre utilizadas en medicina
legal no tienen todas el mismo valor desde el punto de vista de su
especificidad y de su sensibilidad. De aquí la necesidad de clasificarlas
según su categoría probatoria en tres grupos: reacciones de
orientación, reacciones de probabilidad, reacciones de certeza.
103
3.1. Reacciones de orientación - Una gota de agua oxigenada o de
hipobromito sódico, depositada sobre una mancha de sangre, hace
aparecer gran número de pequeñas burbujas gaseosas visibles a la
lupa; pero es importante resaltar que ciertas materias orgánicas,
herrumbre, etc., producen el mismo fenómeno.
3.2. Reacciones de probabilidad - Ciertas materias colorantes poseen
la propiedad de ser incoloras si son reducidas (leucoderivados) y de
recuperar su coloración original por oxidación en presencia de una
peroxidasa y de un peróxido tal como el agua oxigenada y la esencia
de terebentina ozonizada.
Estas reacciones tintoriales se esquematizan:
leucoderivado + peroxidasa + peróxido
coloración
catalizador
(H²O²)
La sangre, por su pigmento ferruginoso tetrapirrólico, es una de las
peroxidasas más activas, y las reacciones colorantes se observan
incluso cuando está desecada o putrefacta. Aparte de la sangre, otras
peroxidasas (leche, jugo de frutas, etc.), ciertos catalizadores
minerales (sales de cobre, de níquel, de cobalto, de hierro, etc.), la
mayor parte de los oxidantes (permanganatos, bicromatos, etc.)
pueden igualmente dar reacciones de coloración positivas; estas
reacciones no son pues específicas de la sangre; son reacciones de
probabilidad, muy útiles por su gran sensibilidad.
Las reacciones colorantes más favorables son las siguientes:
3.2.1. la reacción de Adler, a la bencidina, que conviene utilizar en
solución saturada en ácido acético al 3 %; en presencia de sangre y
de agua oxigenada (a 10 volúmenes) se obtiene una intensa
coloración azul. Sensibilidad: 1/2.000.000 de c. c. de sangre.
3.2.2. la reacción de Kastle-Meyer, que utiliza una solución alcalina
de fenoiftaleína (fenolftaleína, 2 g.; KOH anhidra, 20 g.; agua, q. s.
p.,100 c. c.) reducida en caliente por el polvo de cinc (20 g.). La
sangre y el agua oxigenada fresca y diluida a N/10 resulta una bella
coloración roja de la fenolftaleína alcalina. Sensibilidad: 1/1.000.000
de c. e. de sangre.
3.3
Reacciones de certeza
La investigación directa, al epimicroscopio Ultropak, de los glóbulos
rojos sobre los objetos, es rara.
La sangre es identificada con certeza, ya sea por los cristales que
forman, en ciertas condiciones, ciertos derivados de la hemoglobina,
ya sea por las propiedades espectrales, muy características de éstos.
104
3.3.1. Prueba cristalográfica. — Entre los derivados de la
hemoglobina que se presentan bajo una forma cristalina específica, el
médico legista recuerda los que permiten fácilmente y con seguridad
microrreacciones positivas, incluso con sangre desecada, alterada o
putrefacta; tal es el clorhidrato de hematina y los cristales de
hemocromógeno.
3.3.2. Cristales de Teichmann. — En presencia de cloruro sódico, el
ácido acético transforma, en caliente, la hemoglobina en hemina o
clorhidrato de hematina que se presenta al microscopio bajo el
aspecto de pequeños cristales, muy característicos, en forma de
prismas alargados, romboides, de bordes netos y de ángulos agudos
(52°), de coloración amarilla rojiza o amarilla morena: son los
cristales de Teichmann.
“Depositar en un porta objetos algunas costritas o algunas
fibras de la mancha; recubrir con un cubre, bajo el cual se
introduce, en varias veces, ácido acético glacial, mientras el
portaobjetos
es
calentado
suavemente,
durante
cierto
tiempo hasta proximidad de ebullición del líquido.
Utilizar la pequeña llama de un Bunsen y colocar el
portaobjetos a una altura suficiente para evitar explosión.
Examinar en seguida la preparación al microscopio. Si
procede, calentar de nuevo suavemente.
Utilizar de preferencia, con la misma técnica, el reactivo de
Gabriel
Bertrand
—mezcla
de
cloruro
de
magnesio
cristalizado (1 g.) disuelto en agua destilada (1 e. c.),
glicerina a 30° (5 g.), ácido acético cristalizable (20 g.)—
que da los mejores resultados: puede detectar media
milésima de miligramo de sangre, salvo si ésta está
putrefacta.
Los cristales no se forman: si la sangre ha sido calentada
por encima de 142°, si ha sido expuesta largo tiempo a la
luz solar, si la putrefacción de la sangre data de 4 a 6
meses,
si
existe
hemocromógeno,
hematoporfirina
o
hematina ácida, tras un contacto prolongado de la sangre
con hierro metálico, herrumbre, acetato básico de hierro,
cloruro de hierro, acetato de plomo, sublimado, nitrato
argéntico,
carbón
animal,
arena,
etc.”.
(SIMONIN
C.
1973:890)
105
La búsqueda de cristales de bromhidrato o de yodhidrato de hematina
no da mejores resultados.
Los cristales de hemocrornógeno se preparan como sigue:
Algunas partículas de la mancha son disueltas, en caliente, en piridina
sobre un portaobjetos; añadir una gota de solución yodoyodurada,
compuesta de yodo (2,5 g.), yoduro de potasio (0,5 g.), alcohol
etílico a 95° (25 g.); evaporar completamente con calor suave;
añadir una gota de piridina, después una gota de una solución
reciente de hidrosulfito de sosa ligeramente amoniacal o carbonatada
al 2 %; recubrir con un cubreobjetos y examinar al microscopio.
Los cristales de hemocromógeno son de forma variable (rómbicos o
rectangulares, largas agujas) y de color (rojo moreno en general);
conviene compararlos con los de una preparación testigo.
Aparecen incluso
putrefacta.
con
sangre
antigua,
calentada,
alterada
o
3.3.3. Prueba espectroscópica. — La hemoglobina y la mayor parte
de sus derivados poseen la propiedad de absorber los rayos
luminosos de ciertas partes del espectro; el número, la situación, es
decir, la longitud de onda, y la intensidad de las bandas de absorción
caracterizan cada substancia.
La búsqueda del hemocromógeno es preferida para la prueba
espectroscópica a causa de la rapidez de la preparación y sobre todo
por la intensidad y limpieza de las dos bandas de absorción.
La identificación espectral de esta substancia necesita un tiempo
preliminar, que tiene por objeto transformar la oxihemoglobina en
hematina alcalina; después, por reducción de ésta, se obtiene el
hemocromógeno.
3.3.4.
La identificación microespectroscópica, de ejecución muy
simple y muy rápida, es particularmente recomendable. Puede
hacerse sobre algunas gotas de líquido de maceración, evaporadas
sobre un porta objetos, sobre un hilo previamente disociado, sobre
una minúscula partícula de la mancha sospechosa. Tras contacto de
1/4 de hora con una gota de ClH a pH=2, se añade un pequeño
fragmento de sosa, y después, con la punta del bisturí, una cantidad
como una cabeza de alfiler de hidrosulfito de sosa activo.
La preparación es llevada al microscopio, cuyo ocular ha sido
simplemente reemplazado por un pequeño espectroscopio de visión
directa que gira alrededor de su eje para explorar el campo
microscópico, encima de una zona rojiza de la preparación, que ha
sido previamente localizada con un objetivo 6 u 8.
106
3.3.5.
La espectrofotografía en el ultravioleta
identificación de una solución sanguínea al 1 por 750.
permite
la
Las reacciones de certeza poseen especificidad y sensibilidad. No
obstante, pueden resultar negativas en presencia de sangre, en
particular, cuando la mancha es antigua o cuando se encuentra
mezclada, durante algunas semanas, con herrumbre, con potasa o
con ciertas tinturas, con tierra.
Las huellas de sangre halladas sobre objetos de hierro, piedras,
madera lisa, pueden ser identificadas tras algunos días, sobre madera
porosa tras algunas semanas, sobre cobre amarillo, sobre cinc, tras
algunos meses.
b) Origen Humano de la Sangre
La medicina legal llama en su ayuda a los métodos serológicos de los
anticuerpos que descansan en la siguiente ley biológica: un cuerpo
extraño (bacterias, hematíes, albúmina) inoculado a un animal,
provoca, en el organismo de este último, reacciones que determinan
en el suero modificaciones y la formación de nuevas substancias,
llamadas anticuerpos específicos, las cuales serán productos de
defensa del organismo, capaces de destruir o modificar los elementos
extraños por aglutinación, precipitación, disolución:
antígeno + anticuerpo específico o sensibilizante + complemento =
reacción de aglutinación, de citolisis, de disolución o de precipitación.
1. Prueba de las Precipitinas
1.1 Método directo: suero precipitante. La experiencia demuestra
(UHLENHUTH) que se forma en la sangre del conejo anti suero
humano tras inyecciones sucesivas de suero humano. Puesto en
presencia, in vitro, de una disolución de sangre humana, este
antisuero
produce
un
precipitado
blanquecino
visible
macroscópicamente:
antisuero H + suero H = precipitación
(precipitina)
La especificidad es zoológica, pues la precipitación no se produce con
la misma proteína procedente de otra especie animal.
Por lo tanto, la sangre de mono es capaz de resistir al suero
antihumano.
107
1.2. Método indirecto: desviación del complemento. — Aquí deben
existir dos sistemas reactivos:
Primer sistema: antígeno X + antisuero humano + complemento;
Segundo sistema, hemolítico:
Sensibilizador
Hemolítico
Anticarnero
+
glóbulos
rojos
de carnero
El 2.° sistema indica, por una lectura biológica, lo que pasa en el 1.°.
Si el antígeno X, es decir, la sangre a identificar, es de origen
humano, el antisuero humano y el complemento se fijan sobre este
antígeno. Privado del complemento, el suero hemolítico anticarnero
no puede hemolizar los glóbulos de carnero: la reacción es positiva.
Inversamente, si X no es sangre humana, el complemento no
utilizado en el primer sistema entra en juego en el 2.° para provocar
la hemolisis: la reacción es negativa; la sangre examinada no es de
origen humano. Es el principio, aplicado a la medicina legal, de la
reacción de Bordet-Wassermann, con la diferencia de que para el
diagnóstico de la sífilis, lo desconocido, X de la reacción, es el
anticuerpo y no el antígeno.
Este método es de gran sensibilidad; su especificidad es mayor que la
del suero precipitante; está indicado sobre todo en las soluciones
sanguíneas turbias, inutilizables para una reacción de precipitación.
Por el contrario, es reacción compleja, delicada, que no está a
cubierto de error.
1.3. Método anafiláctico. — Las condiciones de sensibilización a una
substancia determinada son bien conocidas. Aplicadas a la medicina
legal, permiten determinar el origen humano de un producto
orgánico: sangre, maceración de músculos o de polvo óseo, incluso
cuando estas substancias están desecadas, envejecidas, alteradas.
Las operaciones suponen:
1° Una inyección preparante, intracardíaca, a varios cobayas, de 1 c.
c. de la solución X a 1 por 50.
2° Observación de un periodo de incubación de 15-20 días.
3° Una inyección desencadenante, intracardíaca, de 1 c. c. de sangre
humana. Si la solución X contenía sangre humana, los accidentes
fulminantes aparecen rápidamente (caída, temblores, convulsiones,
paresia del cuarto trasero, emisión de orina y de materias fecales,
disnea), y el animal sucumbe en menos de 5 minutos.
108
Cobayas testigos controlan los resultados. La autopsia de los cobayas
muertos por el shock anafiláctico no debe revelar ninguna causa
orgánica de muerte. La hemorragia cardíaca debida a la inyección
debe evitarse. Por esto, es preferible inyectar en la vena yugular la
inyección desencadenante, desgraciadamente más difícil de practicar.
El método anafiláctico interesa sobre todo para identificar los
productos orgánicos y la sangre alterada por los agentes físicos o
químicos.
1.4. El método microscópico se emplea
alteraciones que sufre la sangre desecada.
raramente
por
las
Consiste en regenerar, por una solución de potasa cáustica al 30 por
100, los glóbulos rojos, para estudiar su forma y medir su diámetro.
Los hematíes del hombre tienen, en general, un diámetro superior al
de los hematíes de mamíferos; se distinguen también los glóbulos
mayores, elípticos y nucleados de los pájaros, de los peces de los
anfibios y de los reptiles.
c) Naturaleza de la Sangre Derramada
La sangre procedente de una herida puede contener elementos
indicativos de su origen: cabellos, pelos, materia cerebral, células
superficiales de la epidermis, grasa. Igualmente es posible demostrar
que la sangre derramada ha atravesado las vías genitales o
respiratorias.
“La
técnica
de
identificación
comprende
los
tiempos
siguientes: macerar, durante 30 minutos, a la estufa a 37°,
en algunas gotas de agua destilada, sobre un portaobjetos
bien limpio con jabón y alcohol y pasado por la llama, un
fragmento de la mancha de sangre con su soporte; colocar
el líquido sobre el porta; fijar, colorear con azul de metileno
al 1 por 1.000, o mejor con tionina al 1 por 1.000; examinar
la preparación al microscopio. Si es necesario, hemolizar
previamente los glóbulos rojos pegajosos con una gota de
ácido acético”. (SIMONIN C. 1973:896)
En la sangre menstrual, se distinguen células epiteliales vaginales,
basófilas, de forma poligonal, de bordes con frecuencia replegados
(en tarjeta de visita), aisladas o agrupadas en placas; el núcleo
109
pequeño y redondo corresponde a las células superficiales; es mayor
en las células intermediarias. Estas células vaginales se colorean
fácilmente, pero la coloración diferencial de Isaac y Wurch es de
aconsejar. Contienen inclusiones de glicógeno, que son puestas en
evidencia procediendo de la forma siguiente:
“Tratar la mancha con una solución saturada de bicarbonato
sódico; centrifugar, practicar extensión del sedimento y
colorear
con
una
solución
yodoyodurada
(lugol);
las
inclusiones de glicógeno aparecen coloreadas en moreno
caoba en las células epiteliales”. (SIMONIN C. 1973:897)
Las células epiteliales vaginales no son características de sangre
menstrual.
Las manchas de sangre procedentes de una violación contienen sobre
todo células epiteliales vaginales, así como elementos vulvares
(células queratinizadas anucleadas); es importante resaltar que la
sangre puede estar mezclada con esperma.
En las manchas obstétricas se halla sangre, meconio, restos
placentarios, unte sebáceo, pelos fetales, materias fecales.
d) Antigüedad de las Manchas de Sangre
“Las
múltiples
investigaciones
emprendidas
sobre
esta
cuestión son decepcionantes. Numerosos factores (calor,
luz, humedad, putrefacción, soporte, etc.) influyen sobre las
variaciones del tinte de las manchas; lo mismo sucede con
las
modificaciones
químicas
y
la
sensibilidad
de
los
reactivos. Todo lo más, se puede precisar si una mancha de
sangre es anterior o posterior a otra”. (SIMONIN C.
1973:898)
L. T0MELLINI (1907), en condiciones experimentales bien
determinadas ha observado una duración de un año para obtener el
paso del tinte rojo natural al tinte extremo gris moreno, de una
mancha de sangre sobre una tela blanca, expuesta a la luz solar
difusa.
Observaciones más precisas han sido hechas por E. WEIL y T.
MALYNIAK (1955) sobre manchas de sangre. del mismo volumen
110
(0,05 c. c.) depositadas sobre un tejido de algodón cruzado, de hilos
muy apretados, conservados en un cajón, a la temperatura ambiente
y grado higrométrico normal (60 %).
Los cambios de tinte observados durante un año han sido
comparados a los números correspondientes del Código universal de
los colores, por E. SEGUY (1936); los resultados registrados se
resumen como sigue:
Antigüedad de
la mancha
Número de
Código
Antigüedad
de la mancha
Número de
Código
0 horas
136, Pl X
5,8,15 días
126, Pl IX
(laca geranio)
1 hora
121, Pl IX
(pálido)
3,4 semanas
(rojo grosella)
2 horas
141, Pl X
(sanguíneo)
2 meses
(sangre de
buey)
3 horas
101, Pl VII
102, Pl VII
6 meses
701, Pl XLVII
(tierra de
sombra)
1 año
(moreno rojo)
2,3,4 días
696, Pl XLVII
(acacia)
(púrpura
granate)
4 horas
691, Pl XLVII
702, Pl XLVII
(?)
81, Pl VI
(laca quemada)
Tabla 24. (SIMONIN C. 1973:899)
Los cambios de tinte de las manchas gruesas son más lentos, pero la
evolución es la misma.
Modificaciones de solubilidad se observan con diversos disolventes:
con agua destilada, las manchas de sangre no son casi solubles tras 6
meses; entre 1 y 6 meses, el ClH normal disuelve el pigmento dejado
por el agua destilada; entre 6 meses y 1 año, el disolvente del
pigmento restante es KOH al 3 %.
111
e) Origen Individual de la Sangre
Existen en la especie humana 4 grupos sanguíneos fundamentales
basados en las propiedades aglutinógenas de los glóbulos rojos y en
el poder aglutinante del plasma.
Para que haya aglutinación es preciso que sobre la substancia
aglutinógena de los glóbulos se fije la aglutinina correspondiente.
En 1901, LANDSTEINER demostró la existencia de dos propiedades
aglutinógenas A y B, existentes en los glóbulos rojos, a las cuales
corresponden las aglutininas específicas (isoanticuerpos), Į o anti A y
ǃ o anti ǃ, contenidas en el plasma: estas últimas tienen, pues, el
poder de aglutinar los hematíes A o B (isohemaglutinación), pero no
tienen acción sobre los hematíes O, cuyo aglutinógeno es
excepcionalmente identificable por la aglutinina anti O, muy rara.
Hematíes A + suero Į o anti A = aglutinación,
Hematíes B + suero ǃ o anti B = aglutinación,
Hematíes O + suero Į o ǃ= ausencia de aglutinación.
La observación indica también que el aglutinógeno y la aglutinina
correspondiente no se hallan en la sangre de un mismo individuo; su
coexistencia tendría por efecto provocar una autoaglutinación.
La isohemaglutinación es considerada como una reacción de
inmunidad destinada a la protección de la raza. Los aglutinógenos son
comparables a los antígenos y las aglutininas a los anticuerpos. Se les
halla en los humores y tejidos del organismo ricos en proteínas.
Las isoaglutininas están presentes, en cantidad inferior a la del suero
sanguíneo, en la leche, linfa, exudados y trasudados, en el líquido de
quistes, orina muy albuminosa; la saliva, las lágrimas, el líquido
espermático, no contienen más que vestigios; no existen en el líquido
cefalorraquídeo, orina normal, líquido amniótico.
Los aglutinógenos del grupo específico se encuentran en cantidad
variable, tal como las indicadas por PUTKONEM:
Saliva 128-1.024
Hematíes 8-32
Esperma 128-1.024
Lágrimas 2-8
Líquido amniótico 64-256
Orina 2-4
Líquido cefalorraquídeo O
Se las encuentra igualmente en la leche, sudor, bilis, líquido pleural,
pericárdico o peritoneal, líquido amniótico, líquido de hidrocele o de
quiste. Los antígenos tisulares se encuentran también en las
suspensiones de órganos (riñón, hígado, pulmón, bazo, cerebro,
112
medula ósea) permitiendo así una determinación post mortem del
grupo (en particular del recién nacido).
En clínica, los grupos sanguíneos son fácilmente identificados a
condición de disponer de suero anti A y suero anti B, titulados e
inactivados a 560, procedentes de individuos seleccionados cuya
sangre ha permanecido en nevera, durante 24 horas, para arrastrar
las aglutininas antes de la decantación del suero.
Sobre un portaobjetos, mezclar una gota de cada suero con una
fracción (1/5) de gota de sangre retirada con el borde de un
portaobjetos, tras pinchazo del dedo o del lóbulo de la oreja del
paciente. Agitar continuamente la preparación durante unos minutos
y observar a simple vista si la mezcla permanece homogénea o se
forman grumos cada vez mayores (aglutinación). La principal causa
de error es la seudoaglutinación, fenómeno físico que da lugar a la
reunión de los hematíes en forma de pilas de monedas; se evita
diluyendo los sueros a 1/4.
Para evitar “la aglutinación por el frío”, otra causa de error, se opera
a la temperatura del laboratorio.
Los resultados obtenidos son interpretados como sigue:
Sueros Test
Į o anti A
B
Grupo Sanguíneo
correspondiente
ǃ o anti
Hematíes a identificar
+
+
AB
Hematíes a identificar
o
o
O
Hematíes a identificar
+
o
A
Hematíes a identificar
o
+
B
Tabla 25. (SIMONIN C. 1973:901)
+ u 0, representa aglutinación o ausencia de aglutinación.
En medicina legal, la destrucción de los glóbulos rojos por hemolisis o
su alteración por la desecación no permite el empleo de pruebas
directas de aglutinación.
Las aglutininas, frágiles, desaparecen progresivamente bajo la
influencia de la desecación, de la oxidación, de la putrefacción. Los
aglutinógenos, más resistentes, soportan la desecación, la cocción, la
acción de agentes químicos enérgicos (formol, sublimado, ácido); es
posible encontrarlos en una mancha de sangre, ya que conservan el
poder de fijar los anticuerpos correspondientes.
113
e.1. Grupos de Manchas de Sangre Seca
Como para la sangre reciente, debe procederse a la doble búsqueda
de aglutinógenos y aglutininas. Solamente los resultados positivos
tienen un valor; las reacciones negativas no prueban nada
(desnaturalización de la sangre, insolubilidad, etc.). Estas
investigaciones medicolegales serán reservadas actualmente al
sistema O, A, B (con exclusión de la diferenciación entre A1 y A2 si la
sangre es reciente y no está sucia (bacilos, sudor, etc.), se referirán
al A, B, O, M, N, Rh y Hr (WIENER, 1952)
5.3.12. Manchas de Esperma
a) Identificación de las Manchas de Esperma
Se concibe la importancia judicial que presentan las manchas de
esperma en los casos de atentados a las costumbres.
Los signos de orientación derivan del aspecto macroscópico de las
manchas y de su fluorescencia bajo la acción de la luz de Wood.
Sobre los tejidos absorbentes, el esperma deja manchas grises, de
contornos rectos, irregulares, que acartonan la tela. Sobre los objetos
y tejidos no absorbentes, forman, al desecarse, películas, escamas, o
trazos brillantes.
Los rayos utravioletas filtrados (luz de Wood) excitan la fluorescencia
del esperma, que adquiere una coloración blanco-azulada muy
apreciable en cámara obscura; esta fluorescencia, debida a la
espermina, se vuelve más viva y amarilla en las manchas antiguas.
Esta propiedad no es específica, pues ciertos líquidos desecados
(orina, moco nasal o vaginal) tienen una fluorescencia idéntica o
parecida.
1. Reacciones de probabilidad
Se basa en el hecho de que una gota de solución yodoyodurada
reciente y fría (reactivo de Florence) o de una solución saturada de
ácido pícrico (reacción de Barberio), puesta en presencia, en un
portaobjetos, de una gota de maceración de esperma da lugar, en el
primer caso, a cristales de peryoduro de colina, de coloración moreno
caoba, lanceolados, pero de formas y dimensiones muy variables; en
el segundo caso, aparecen cristales de picrato de espermina en forma
de agujas, de conos unidos por su base, de laminillas losángicas.
114
Estos cristales, visibles al microscopio, carecen de especificidad, ya
que en las mismas condiciones se forman con saliva, secreciones
vaginales, moco uterino, bilis, leche, pus blenorrágico, ciertos jugos
vegetales, etc., líquidos que contienen colina normalmente.
La reacción microquímica de Niederland está basada en el hecho de
que el esperma es rico en calcio (30 % de residuo seco); la adición de
algunas gotas de ácido sulfúrico, diluido al 3 %, forma cristales de
sulfato ácido de calcio, que se hallan en otros humores; también los
resultados negativos únicamente son de tener en consideración.
1.1. Test de la Fosfatasa ácida
El descubrimiento de la intensa actividad fosfatásica de la secreción
prostática —73 unidades de fosfatasa ácida por mg. contra 0,07 para
la secreción vaginal, 0,03 aproximadamente para la saliva, la orina, la
secreción nasal, la expectoración bronquial (STROIER RAS
MUSSEM)— encuentra aplicación en la identificación del esperma
basada en el método histoquímico de SELIGMAN y MANHEIMER.
La mancha sospechosa, observada a la luz de Wood, es recortada y
sumergida en un baño de pH 5 (*), que encierra una suspensión de
30 mg. de cloruro de antraquinona-1-diazonio y 50 mg. de z-naftil
fosfato de calcio en 1 c. e, de aerosol (**), La fosfatasa ácida actúa
sobre el éster fosfórico y libera el naftol a que actúa inmediatamente
sobre la sal de diazonio formando un colorante diazo rojo anaranjado,
insoluble y adherente al soporte. La coloración aparece tras 30
segundos y se completa en 2 minutos: es más intensa en la periferia
de la mancha.
Si el esperma está mezclado con sangre ésta da, al contacto del
baño, un tinte moreno gris sucio, gradualmente reemplazado por la
coloración rojo anaranjada del diazoico.
Cuando el soporte es rojo, se recomienda practicar una huella
humedeciendo papel de filtro que es presionada sobre la mancha
sospechosa y después sumergido en el baño; la difusión de la
fosfatasa es suficiente para dar una reacción positiva.
El reactivo no colorea los espermatozoides que
identificables por la investigación microscópica clásica.
permanecen
Especificidad: El examen de 2.000 manchas ha permitido a F.
LUNDQUIST observar que el test de la fosfatasa ácida es negativo 8
veces entre 50, mientras que los espermatozoides están presentes.
Prueba de certeza consiste en descubrir in situ la presencia de
espermatozoides coloreados electivamente por una solución al 1 por
200 de eritrosina en amoníaco (C0RIN y STOCKIS).
Mejores resultados serán obtenidos sometiendo la mancha a la
centrifugación tras una maceración prolongada durante 24 horas para
115
rehidratar los espermatozoides
HADENGUE, LE BRETON).
(C0RIN,
STOCKIS,
DÉROBERT,
2. Determinación Individual
En el esperma, y en una mancha de líquido seminal, se encuentran
las mismas propiedades de grupo que en la sangre del individuo.
(subitem 5.3.11.)
5.3.13. Manchas Diversas
a) Las manchas de orina toman a la luz de Wood una fluorescencia
azul clara bastante intensa, pero no característica. La presencia de la
urea debe buscarse con el xantidrol, la del ácido úrico por el reactivo
de Folin y Denis y la de los fosfatos y cloruros por los reactivos
habituales. No existe mucho interés medicolegal en estas manchas.
b) Las manchas de saliva son identificables. La presencia de moco
hace aparecer una fluorescencia azulada a la luz de Wood.
Como el 70 % de los individuos son «secretores», las reacciones de
aglutinación permitirán hallar SA o SB o SAB o SO. Este método se
muestra positivo en las manchas de saliva situadas en un sello de
correos, boquilla de los cigarrillos, etc. La búsqueda de la tialina por
hidrólisis del almidón cocido es muy delicada.
c) Manchas de materiales fecales – Los elementos de identificación
son bastante numerosos.
Figura 16. (SIMONIN C. 1973:908)
Mancha de materiais fecales- Elementos caracteristicos: 1. fibra muscular no
digerida, 2. fibras musculares completamente digeridas, 3. fibra vegetal, 4. células
vegetales, 5. pelos vegetales, 6. cristales, 7. fibras elásticas, 8. materia granulosa y
gotitas de grasa. Examen del líquido de maceración entre porta y cubre y coloración
al lugol.
116
5.3.14. Identificación de Cabellos y Pelos
Cabellos y pelos sirven de índices materiales interesantes en cierto
número de circunstancias judiciales: para contribuir a identificar un
cadáver desconocido o despedazado comparando sus cabellos a los
recogidos en el cepillo de una persona desaparecida; para demostrar
a un culpado que los cabellos o los pelos descubiertos en las manos,
en los vestidos o al lado de la víctima o incluso pegados al arma
mortífera corresponden a los suyos, o inversamente, que él es
portador en sus vestidos o en sus órganos genitales de cabellos o
pelos comparables a los de la víctima.
Figura 17. (SIMONIN C. 1973:909)
Cabellos y pelos (aspecto microscópico). A, cabellos masculinos: a, cabello castafio
desprovisto de conducto medular; b, cabello castafio de medula discontinua; e,
cabello blanco de medula continua. El índice medular de los cabellos humanos es
inferior a 0,50. B, cabellos de mujer desprovistos de medula: a, rubio; b, castaño.
C, pelos de gato blanco: medula reticular de mallas irregulares y aplanadas. Índice
medular superior a 0,50.
Identificar un pelo es probar que es de origen humano, que procede
de una determinada región del cuerpo, que ha pertenecido a tal
individuo, que ha caído espontáneamente o bien que ha sido
arrancado, cortado o quemado.
Estos son los caracteres morfológicos, macroscópicos o microscópicos
de los pelos que ayudan a resolver estos diferentes problemas en las
identificaciones.
Los pelos de origen humano se reconocen fácilmente por sus
particularidades histológicas: conducto medular estrecho, con rosario
aéreo finamente granuloso, sin diferenciación celular; substancia
cortical engrosada, con granulaciones muy finas y homogéneas;
cutícula con escamas fuertemente imbricadas, poco salientes. La
117
relación del diámetro del conducto medular al diámetro total del tallo,
o índice medular, es inferior a 0,30, mientras que es superior a 0,50
en los animales.
La naturaleza de los pelos es determinada por su longitud, grosor,
aspecto morfológico, coloración, forma de la extremidad libre. El
grosor es un dato diferencial importante: el diámetro medio es
inferior a 80 micras para los cabellos y pestañas masculinos, superior
a 80 micras para las pestañas femeninas, inferior a 100 micras para
los pelos del escroto o de los grandes labios, superior a 100 micras
para la barba y el bigote.
Figura 18. (SIMONIN C. 1973:910)
Pelos humanos (aspecto microscópico). A, pelo de bigote (tallo y punta); B, pelo de
pubis masculino; C, pelo de pubis femenino; D, pelo de grandes labios (extremidad
hinchada);E, pelos de feto: a, cabello; b, pestaña; c, vello de las mejillas; d, vello
de las piernas.
Los pelos presentan caracteres particulares y ciertas diferencias
sexuales perfectamente estudiadas por M. LAMBERT y W.
BALTHAZARD, que permiten establecer el lugar de implantación y su
origen masculino o femenino.
El sexo no puede ser establecido en nuestra época por la longitud de
los cabellos; no queda más que diferenciarlo apoyándose en el grosor
de las pestañas.
Cabellos y pelos no aportan más que datos vagos sobre la edad.
Particularidades morfológicas de los pelos
Pelos cortados:
Diámetro medio inferior a 80 ȝ
Cabellos
Ausencia frecuente de medula
118
Diámetro medio superior a 100 ȝ
-
Barba
Pelos no cortados:
Longitud superior a 8 cm - Cabellos femeninos
Longitud comprendida entre 3 y 8 cm.:
x
Pelos rodeados de manguito grasoso - Axila
x
Pelos crespados
Raíz nudosa - Pubis masculino
Raíz delgada - Pubis femenino
x
Pelos lisos
Espesor superior a 100 Nj - Bigote
Espesor inferior a 100 Nj
Cutícula intacta- escroto
Cutícula muy irregular –
- grandes labios.
Longitud inferior a 3 cm.:
Extremidad desgas- Diámetro superior a 60 Nj - Pelos del tronco
tada o en pincel
Extremidad
fem.
.
masc…
Diámetro inferior a 60 Nj - Pelos de los miembros
Forma arqueada Diám. superior a 80 Nj -Pestaña
Diam. inf, a 80 Nj - Pestana
afilada o aguda
Forma sinuosa - Cejas, vibrisas
Longitud inferior a 1 cm.:
Diámetro de 5 a 40 Nj.: Ausencia del conducto medular y de
pigmento:
Pelos de vello.
Los cabellos arrancados se reconocen por la forma de su bulbo, en
botón, en cuchara o en abanico, por su raíz frecuentemente curvada
o torcida, con vaina o fracción de vaina que forma un manguito, un
collarete o dedo de guante en la parte inferior del cabello. Un mechón
de cabellos arrancados puede contener cabellos que estaban
próximos a caer espontáneamente.
Los cabellos caídos espontáneamente tienen una raíz recta con bulbo
lleno; la raíz está hinchada como una cachiporra o una punta de
espárrago; no hay vaina alrededor.
119
Los pelos cadavéricos se reconocen difícilmente; el color natural se
aclara y después se vuelve rosado.
Los cabellos postizos no poseen bulbo; son quebradizos.
El examen de la extremidad libre informa sobre si los pelos han sido
cortados recientemente (sección transversal u oblicua limpia); si no
han sido cortados nunca, la punta presenta un cono muy definido; es
afilada si el pelo o el cabello ha sido desgastado por el frotamiento
del cuello, del sombrero, de los vestidos. Es posible saber también si
los cabellos han sido aplastados o torcidos, si han sido quemados con
tenacillas para rizar (degeneración en burbujas de la substancia
medular a los 175 posteriormente deformación o carbonización con
temperaturas más elevadas).
La individualización de los cabellos no puede ser más que relativa.
Consiste en establecer, por el mayor número posible de medidas, la
concordancia entre el diámetro medio de los cabellos hallados en el
lugar del suceso y el de los cabellos del inculpado; pero es preciso
tener en cuenta diferencias, según las regiones, del grosor de los
cabellos, que pasa de 56 micras en la nuca, a 66 en las sienes, a 69
en la frente y a 75 en el vertex. A lo largo de su tallo el cabello tiene
diámetros que varían sensiblemente.
Sirven también, como elementos de comparación, la coloración o
decoloración natural o artificial, las particularidades del conducto
medular,
las
distrofias
(dilataciones,
estrecheces,
bifidez,
adelgazamiento, etc.), aplicación de tinturas, de pomadas, presencia
de liendres o de polvos profesionales (blanco en los panaderos y
molineros; negro en los mineros y carboneros; polvillo de azúcar en
los refinadores, coaltar en los pulidores, etc.), el grado de desgaste
de las puntas.
La coloración de los cabellos no aporta ninguna certeza, pues sobre la
misma cabeza pueden encontrarse tonalidades diversas y las mismas
tonalidades sobre otras cabezas.
Técnica. — Para reunir todos los datos útiles, los pelos, cuya longitud
es primeramente medida, son sometidos a un examen microscópico
directo, que permite observar la coloración y la presencia, a lo largo
de la cutícula, de cuerpos extraños (huevos de parásitos, polvillo,
vestigios de sangre, de esperma, etc.). A continuación son
seccionados en tres partes (raíz, punta, parte media) y montados en
bálsamo del Canadá, tras deshidratación en alcohol absoluto, después
desengrasado en éter o en una solución de ácido nítrico diluido, o en
una solución de carbonato sódico al 15 %, y si ha lugar, tras
decoloración, durante 3 horas en agua oxigenada o durante algunos
minutos en ácido nítrico o incluso mejor en el lactofenol de Amann.
Los grosores son determinados con el micrómetro y apreciados en
micras o milésimas de milímetro.
120
Los cortes histológicos de cabellos y pelos perpendiculares al tallo son
utilizados raramente, aunque muy instructivos, debido a las
dificultades técnicas de su ejecución.
5.3.15.
Determinación del Grupo Étnico
Las diferencias étnicas se han intentado explicar mediante teorías
bioquímicas, hormonales y ambientales, en función de la naturaleza
de los factores.
Ningún otro tema asociado a la antropología ha estado envuelto en
tanta polémica como éste. Las tendencias políticas, sociales y
religiosos de cada época han marcado su destino. Todavía hoy se
confunde el concepto biológico de raza con los conceptos político,
social y religioso de raza.
“Nuestra lengua define las razas humanas como los grupos
de seres humanos que por el color de su piel y otros
caracteres se distinguen en raza blanca, amarilla, cobriza y
negra”. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 192)
Según RIQUET (1986) la raza es una población seminatural que tiene
en común ciertos caracteres hereditarios, de los cuáles los más
importantes son los más inmediatamente visibles.
El concepto de Riquet es aplicable en los campos social y en el
biológico. El concepto biológico de raza está más centrado en la
expresión morfológica del genotipo, que son los caracteres
hereditarios y que constituyen el llamado fenotipo.
STEWART (1979) considera la raza dentro de un punto de vista
zoológico significando la subdivisión de la especie basada en la
apariencia (fenotipo).
GILES (1986) considera que la raza es una respuesta adaptativa a los
acontecimientos, con variaciones físicas.
CHURCH (1995), con los estudios de marcadores de nuestro ADN,
sugiere que no tiene sentido hablar de diferencias raciales en el
patrimonio genético, pues esas diferencias son muy pequeñas e
insignificantes.
MARQUER, también habla de tres grupos etnicos, en este caso en
función de la relación entre índices dentarios medios y la talla media
del individuo: microdontes, mesodontes y megadontes.
Ya para VALOIS, habría 4 grupos primarios según el color de la piel:
leucodermos, melanodermos y xantodermos, a los que añade el
121
grupo de australoides. Estos grupos estarían subdivididos en 27 razas
secundarias.
De todos los conceptos, el más clasico es el de KROGMAN, que
diferencia tres grandes grupos raciales en función del color de la piel:
caucasoides, negroides y mongoloides.
Desde el punto de vista antropológico, centrado en la actual sociedad
y asumiendo que los grupos raciales no son puros, la clasificación
más útil es la de KROGMAN. Así pues, hablamos de una raza
mongoloide o amarilla, una raza negroide o negra y una caucasoide o
blanca. En el grupo caucasoide se pueden diferenciar los subgrupos
alpino, mediterraneo y nórdico.
Aunque un antropólogo forense disponga de un esqueleto completo,
es difícil determinar la raza de un individuo porque en la actualidad
no se puede hablar de raza pura, entendida ésta como grupo de
individuos con características radicalmente opuestas a los demás.
Por otro lado, el estudio étnico de restos óseos está limitado, pues se
han perdido las partes blandas, que son las características más
visibles de acuerdo con los estudios de RIQUET.
STEWART (1979) Resalta que las diferencias raciales entre los
individuos se establecen principalmente por el color de la piel, las
características del cabello, la distribución de la grasa y la forma de la
nariz. La ausencia de estos rasgos en el esqueleto dificulta el trabajo,
ya que únicamente se cuenta con las diferencias morfológicas y
métricas en los huesos. Los rasgos fenotípicos observados en vida y
que deben ser valorados en el esqueleto son: forma de la cabeza, de
la nariz,
y de la cara, la estatura y las proporciones de las
extremidades. De las anteriores citadas, las partes óseas de mayor
interés son la región nasal y la mandíbula.
Es importante destacar que para poder realizar un diagnóstico racial
es necesario conocer el sexo. Además es muy difícil encontrar en un
individuo todas las características propias de una raza específica. De
ahí que la determinación de la raza en Antropología forense no se
establezca con total seguridad.
A pesar de lo que decimos anteriormente, existen grupos raciales
definidos por rasgos genéticos, métricos, morfológicos, etc.
Semejantes en los integrantes del grupo y diferentes respecto a los
otros.
a) Cráneo
El cráneo es la parte del esqueleto de mayor valor racial, primero
porque es la más estudiada, segundo por que se ha coleccionado con
gran frecuencia y por fin porque se conserva mejor que otras partes
anatómicas.
122
1. Caracteristicas Morfologicas
TABLA - CARACTERÍSTICAS MORFOLÓGICAS
Grupos Raciales
Caucasoides
Mongoloides
Negroides
Rasgos Generales
Tienen un cráneo redondeado u ovoide. Su cara es
estrecha (la anchura disminuye hacia la mandíbula) y
alta, lo que le da un aspecto afilado. Contribuye a dar
esta imagen la nariz
que es muy estrecha y
prominente. El paladar también es estrecho con
forma triangular. Su perfil es vertical.
Se caracterizan por tener un cráneo largo, grande,
moderadamente alto y de contorno redondeado. Los
malares que sobresalen, determinan una cara muy
ancha en relación a lo plano de su perfil. Las órbitas
son más redondeadas que en los otros grupos. La
nariz es estrecha como en los caucasoides, aunque
no tan prominente. El paladar es moderadamente
ancho.
Presentan un cráneo largo, ovalado, estrecho y bajo.
Los malares sobresalen un poco en la cara, aunque
ésta es estrecha y baja. Las órbitas son más bien
rectangulares, con una considerable separación entre
ellas. La nariz es muy ancha al igual que el paladar,
que suele tener la forma cuadrangular. Lo más
llamativo del cráneo es el acusado prognatismo de
los maxilares, es decir, éstos se proyectan hacia
delante en el perfil de la cara.
Tabla 26.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 197)
Figura 19. (VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 197)
123
KROGMAN (1963) hace un resumen de las principales características
craneofaciales de los grandes grupos raciales en el cuadro siguiente.
TABLA – CARACTERÍSITCAS CRANEO-FACIALES DE LOS
GRUPOS RACIALES SECÚN KROGMAN
Caucasoides
Long.
cráneo
Nórdicos
largo
Alpinos
Corto
Mediterráneos
largo
Negroides
Mongoloides
largo
largo
Anchura
cráneo
estrecha
Ancha
estrecha
estrecha
ancha
Altura
cráneo
alto
Alto
Moderadamente
alto
bajo
mediano
Contorno
sagital
redondeado
Arqueado
redondeado
aplanado
arqueado
Anchura
cara
estrecha
Ancha
estrecha
estrecha
Muy ancha
Altura cara
alta
Alta
Moderadamente
alta
baja
alta
Abertura
orbitaria
angular
Redondeada
angular
rectangular
redondeada
Abertura
nasal
estrecha
Moderadamente
ancha
estrecha
ancha
estrecha
Margen
nasal
inferior
agudo
Agudo
agudo
En gotera
agudo
Perfil facial
derecho
Derecho
derecho
Oblicuo
hacia
abajo
derecho
Forma
paladar
estrecho
Moderadamente
ancho
estrecho
ancho
Moderadamente
ancho
Impresión
general del
cráneo
Macizo,
áspero,
alargado,
ovoide
Grande,
moderadamente
áspero,
redondeado
Pequeño, liso,
alargado,
pentagonoide u
ovoide
Macizo,
liso,
alargado,
ovalado
Grande liso
redondeado
Prognatismo
no
No
no
marcado
marcado
Tabla 27.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 198)
La medicina legal recurre a la antropología para determinar los
caracteres étnicos de la cabeza ósea, entre los cuales recordaremos:
los 3 índices cefálicos, el índice superior, el índice nasal y el
prognatismo.
124
Índices cefálicos – Se definen de la siguiente manera:
Vista por la parte superior - la conformación del cráneo es función de
su longitud (Véase fig. 21a); la relación:
Diámetro transverso máximo (EE)
Diámetro ant. Post. Máx (Gsi)
X 100
* O índice cefálico horizontal, llamado simplemente índice cefálico.
Permite distinguir 3 categorías étnicas: cráneos doliocéfalos, ovales y
largados, cuya mayor longitud sobrepasa un cuarto, a la mayor
anchura (europeos nórdicos, ingleses, suecos, negros africanos,
bereberes, australianos); cráneos mesaticefálos o medios (amarillos);
cráneos branquicéfalos, redondeados y cortos (europeos del centro,
alsacianos, bávaros). El índice cefálico indica la anchura que tendría
la cabeza si la longitud fuera igual a 100; es interesante porque es
muy hereditario.
Vista de perfil - la altura se compara a la longitud. Los valores de la
relación (Véase fig. 21b)
Altura del cráneo (B Br)
Diámetro anteroposterior (G Si)
X 100
* O índice vertical
Se reparten también en 3 clases: cráneos hipsicefálicos, altos
(amarillos, negros); cráneos ortocéfalos, medios (europeos); craneos
platicéfalos, bajos (raros, razas fósiles).
Vistos por detrás - la anchura y la altura proporcionan los elementos
de ralación (Véase fig. 21c)
Altura del cráneo (B Br)
Diámetro transverso máximo (EE)
X 100
* O índice transverso vertical o índice de anchura
De donde resultan 3 grupos étnicos: cráneos tapinocéfalos, anchos
(europeos del centro, franceses); cráneos metriocéfalos, medios
(amarillos); cráneos estenocéfalos, estrechos (europeos del norte y
del sur, negros).
125
Figura 20. (SIMONIN C. 1973:841)
Craneometría. Br, bregma; B, basion (borde anterior del agujero occipital); L,
lambda; G, punto glabelar; Sí, punto opistocraneano; N, nasion; Ns, punto
naseoespinal; Pr, punto alveolar o prostion. PrH, línea horizontal de Broca (plano
alvéolo-condílleo); BBr, altura del cráneo; GSI, diámetro anteroposterior máximo;
EE, diámetro transveerso máximo; ZZ, diámetro facial transverso máximo; NNs,
altura nasal; Nm Nm, anchura nasal; NPrH, ángulo del peerfil facial.
Índice cefálico
EE
Gsi
X 100
(Figura 21 a)
Índice vertical
BBr X 100
Gsi
(figura 21 b)
Índice de anchura
BBr X 100
EE
(figura 21 c)
Figura 21 (a.b.c.) (SIMONIN C. 1973:841)
126
(Figura 22 a)
(figura 22 b)
Figura 22 (a.b.) (SIMONIN C. 1973:842)
La combinación de los 3 índices cefálicos conduce a deducciones
étnicas: los auverneses y los bávaros tienen un cráneo redondeado
alto y ancho; es redondeado, medio y estrecho en los suizos;
alargado, medio y estrecho en los australianos; medio en los chinos y
japoneses; alargado, alto y estrecho en los negros.
Índice facial superior - viene determinado por la relación de la altura
de la cara con su anchura (Véase fig. 22a):
Altura nasoalveolar (N Pr)
Diámetro bicigomático máximo (ZZ)
X 100
Permite distinguir 3 aspectos étnicos: forma braquifacial (cara baja y
ancha de los auverneses, de los australianos, de los lapones, de los
neocaledonianos); forma mesatifacial, media, de los negros
africanos; forma dolicofacial (cara alta y estrecha de los europeos
nórdicos, árabes, escandinavos, polinesios). La asociación dolicocefálo
y dolicofacial da el tipo escandinavo y la combinación branquicéfalobranquifacial, el tipo celta-eslavo. Los craneos fósiles son
branquifaciales.
127
Índice nasal (Véase fig. 22a) – Está representado por la relación que
define 3 caracteres: nariz leptorrínica, estrecha y larga de las razas
blancas; nariz mesorrínica, media, de las razas amarillas; nariz
platirrínica, plana y corta, de los negros africanos y de los
australianos, cráneos fósiles.
Anchura nasal máxima (Nm Nm)
Altura nasal (N NS)
X 100
Otros caracteres negroides: el reborde inferior del orificio nasal, en
lugar de ser cortante y delgado como en los blancos, es de bordes
romos; arcos superciliares y apofísis mastoides poco desarrollados;
huesos nasales aplanados y soldados.
Perfil facial superior - o perfil de la cara es medido por el ángulo (N Pr
H) (Véase fig. 22b) que forma la línea nasion-prostion con el plano
horizontal de Broca (alvéolo condíleo) Existen 3 agrupaciones
definidas: los prognatos (negros afrianos, australianos); los
mesognatos (amarillos de Asia meridional); los ortognatos (razas
blancas).
1.1. Visibilidad de la Ventana Oval
La ventana oval se localiza en la pared interna de la cavidad
timpánica y es responsable por comunicar el oído medio con el
interno.
NAPOLI y BIRKY (1990) han observado diferencias raciales referidas
a la visibilidad de la ventana oval a través del orificio auditivo externo
y a su tamaño.
1.2. La Mandíbula
La mandíbula requiere un estudio aparte por sus características y su
importancia.
1.2.1. Morfologías raciales de la Mandibula
En el cuadro siguiente resumimos las características morfológicas
raciales propias de la mandíbula de negros y blancos, de acuerdo con
los estudios de REVERTE (1991).
128
TABLA - CARACTERÍSTICAS MORFOLÓGICAS RACIALES
Caucasoides
Negroides
Más ancha.
Menos ancha.
Rama más alta y estrecha con las
caras más paralelas en el plano
medio sagital.
Rama mandibular más baja, ancha
y vertical.
Ángulo goníaco mayor, con más
eversión.
Mentón
más
saliente,
tubérculos
mentonianos
laterales.
con
más
Mentón menos prominente, con los
tubérculos más centrales y más
pequeños.
Cuerpo más alto, pero es bajo en
relación con la anchura bigoníaca.
Fuertes inserciones para maseteros
y pterigoideos.
Arco dental en U, mayor y más
largo.
Apófisis coronoides más fuertes que
los
cóndilos,
con
escotadura
sigmoidea profunda.
Tabla 28.
Apófisis coronoides más bajas que
los
cóndilos,
con
escotadura
sigmoidea profunda.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 203)
1.2.2. Diferencias Métricas Mandibulares
Las diferencias métricas raciales en la mandíbula se expresan en la
tabla abajo:
TABLA - DIFERENCIAS METRICAS RACIALES EN LA
MANDÍBULA
MEDIDAS E ÍNDICES
Diastema postmolar
caucasoides
<4 mm
Ángulo mandibular
Ángulo mentoniano
Anchura bicondílea
Índice mandibular
Índice goniocondíleo
Índice de rama
Tabla 29.
RAZA
mongoloides
negroides
> 4 mm
120º
(mediterráneos)
65º-71º
>125 mm en
varones
< 105 mm en
mujeres
94º
(esquimales)
75º
120º
(africanos)
80º-85º
90
84
48-52
85
81
50-60
90
81
56-58
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 203)
129
2. Características Métricas y Estudios Estadísticos
Los estudios iniciales métricos se basaran en el cálculo de índices a
partir de distintas medidas. A la medida que fueron generados
avances estadísticos e informático se aplicaron estas técnicas
matemáticas a los datos métricos.
2.1. Aplanamiento del Esqueleto Facial
WOO y MORANT (1934) citados por RODRIGUEZ (1994), después de
estudiar 4266 cráneos masculinos y 1630 femeninos procedentes de
Europa, África, América, Oceanía y Asia, concluyeron que el grado de
aplanamiento del esqueleto facial ofrece muy buenos resultados.
Las medidas propuestas por estos autores son:
1. Índice frontal del aplanamiento facial (IF)=
=
x
x
Subtensa de la anchura biorbital interna
X 100
Anchura biorbital interna
Anchura biorbital interna: corresponde a la distancia desde el
punto donde la sutura frontomalar corta con los bordes
externos de la órbita de un lado hasta el mismo punto del lado
opuesto.
Subtensa corresponde a la anchura sobre el Nasion.
2. Índice simótico= Subtensa simótica
Cuerda simótica
X 100
x
Cuerda simótica: mínima anchura horizontal de los huesos
nasales. Se toma sobre las suturas nasomaxilares.
x
Subtensa. Se señala la cresta de los huesos nasales y después
se localiza la distancia mínima desde esta línea hasta la cuerda
simótica.
3. Índice rhinal =
x
subtensa de la cuerda midorbital
cuerda midorbital
X 100
Cuerda midorbital: distancia desde el punto donde intersectan
la sutura maxilofrontal y la órbita de un lado hasta el punto
contralateral.
x Subtensa desde Riñón hasta la cuerda midorbital.
130
4. Índice premaxilar del aplanamiento facial=
=
Subtensa del punto alveolar
Cuerda cigo maxilar
X 100
x
Cuerda cigomaxilar que está entre el punto más inferior
(respecto al plano Francfort) de la sutura cigomaxilar de un
lado y el mismo punto del lado opuesto.
x
Subtensa (término geométrico que designa la distancia recta de
un arco determinado) del punto alveolar sobre la cuerda
definida antes. El punto alveolar no corresponde al punto
prostion, sino al punto más inferior entre los tabiques
alveolares de los incisivos centrales.
Caucasoides
Hombres
Mujeres
19,2±0,8 18,6±0,9
Mongoloides
Hombres
Mujeres
16,7±0,8 16,5±0,9
Negroides
Hombres
Mujeres
17,8±1,3 17,7±1,0
Índice
Sicótico
Índice
Rhinal
48,6±4,3
42,1±4,5
36,6±4,5
30,3±4,1
33,1±6,8
28,2±6,6
42,9±3,7
38,8±4,1
33,2±3,3
30,9±3,8
30,9±4,9
29,7±4,7
Índice
Premaxilar
35,7±1,1
35,5±1,4
34,8±1,6
35,3±1,6
37,1±2,5
37,0±1,9
Índice
Frontal
Tabla 30.
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 205)
En la tabla de arriba se han señalado en negrita los valores más
representativos en cada raza; así el índice frontal distingue bien los
mongoloides del resto de razas, lo mismo ocurre con los índices rhinal
y sicótico en los caucásicos y con el índice premaxilar en los
negroides.
Esto es lógico, pues los mongoloides se caracterizan por tener una
cara muy aplanada; los caucasoides por su nariz estrecha y
prominente y los negroides por el marcado prognatismo.
b) Esqueleto Poscraneal
Evaluando las características morfológicas de esqueleto postcraneal,
podemos decir que el estudio del mismo, más que para determinar la
raza sirve para corroborar el diagnóstico establecido a partir de los
hallazgos craneofaciales. Ya se ha comentado anteriormente que el
esqueleto postcraneal tiene gran valor cuando se encuentran en él
huellas de alguna práctica cultural, ritual, etc.
131
1. Pelvis, Fémur y Tibia
En las tablas siguientes exponemos las funciones discriminantes que
pueden aplicarse para establecer la raza en cada uno de los sexos, a
partir de la pelvis, el fémur, la tibia o combinación de éstas. Se
consigue una mayor fiabilidad cuando se conserva la pelvis.
Coeficientes y grado de certeza de las funciones discriminantes no estandarizadas
para determinar la raza en pelvis, fémur y tibia masculinas
Pelvis
Constante
Fémur
Constante
Tibia
Constante
Porcentaje
de certeza
Variables
Pelvis +
Fémur +
Tibia +
Pelvis o
Fémur o
Tibia
Pelvis +
Fémur
Pelvis +
Tibia
Anchura biiliaca
Diámetro
transverso
Longitud
anterioposterior
Anchura
isquiopública
Longitud de ilion
-0,02978638
-0,03851971
-0,02401147
-0,02483145
-0,09033262
-0,02512998
-0,02999086
-0,04706068
-0,02049437
-0,04271974
-0,03503142
-0,05620039
-0,07786652
-0,03525313
-0,03927115
-0,05877165
-0,06306601
-0,08663778
-0,04752680
Fémur +
Tibia
13,92409000
Longitud
Longitud
bicondilar
Diámetro
anteroposterior
Diámetro
transverso
Anchura de la
epífisis distal
Perímetro a nivel
medio diafisario
Diámetro de la
cabeza
Longitud
Diámetro
transverso
Anchura de la
epífisis proximal
Anchura de la
epífisis distal
Perímetro en el
agujero nutricio
Perímetro en la
mitad
de
la
diáfisis
0,04990413
0,04345227
-0,02165001
0,016775940
0,10412800
0,12899130
0,08249423
-0,06266954
0,1358881
-0,06430072
0,5386101
0,12266100
-0,09894327
-0,12500940
-0,22412480
-0,15981070
-6,53728600
5,37981700
0,05343540
0,05056249
0,1208607
0,06294315
0,13559940
0,08405210
0,065832214
-0,09308883
-0,08117219
-0,08137693
0,09099263
4,23663500
94,9
Tabla 31.
-11,23612000
80,2 (pelvis)
77,4 (fémur)
82,9 (tibia)
2,28482700
93,0
93,9
-6,71339800
87,5
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 216)
132
Coeficientes y grado de certeza de las funciones discriminantes no estandarizadas
para determinar la raza en pelvis, fémur y tibia femeninas
Variables
Pelvis +
Fémur +
Tibia +
Pelvis o
Fémur o
Tibia
Pelvis +
Fémur
Pelvis +
Tibia
Diámetro
transverso
Longitud
anterioposterior
Longitud de ilion
Anchura iliaca
-0,05714166
0,12701030
-0,06984539
-0,05781593
0,01978165
-0,02079786
0,01667620
0,01769865
-0,04903466
-0,06580186
-0,06120747
-0,05325227
-0,06156737
-0,04924235
Constante
Fémur
-13,71472000
Longitud
Longitud
bicondilar
Diámetro
anteroposterior
Diámetro
transverso
Anchura de la
epífisis distal
Perímetro a nivel
medio diafisario
Diámetro de la
cabeza
Constante
0,03314700
0,02352210
0,14509370
0,24875630
0,03795900
0,12204940
0,22115100
-0,11076730
-0,24670730
-0,18791270
0,09076933
-0,10187190
-0,17151780
Constante
Tibia
Fémur +
Tibia
-8,55713100
Longitud
0,03981776
0,04753136
Diámetro
anteroposterior
Anchura de la
epífisis proximal
Anchura de la
epífisis distal
Perímetro en el
agujero nutricio
-0,05917451
-0,11774900
-0,13333740
1,28662900
0,04017946
-0,15402670
0,12227440
-0,10824140
0,06171713
0,13076620
0,09595671
0,08261725
0,16448920
0,07255529
-0,72537240
-17,14047000
90,7
76,5 (pelvis)
67,0 (fémur)
70,5 (tibia)
Porcentaje
de certeza
Tabla 32.
0,01681537
84,2
90,8
-7,86855600
79,5
(VILLALAÍN BLANCO, J. D. 2000: 217)
133
134
6. RECONSTRUCCIÓN DEL CRÁNEO PARA LA IDENTIFICACIÓN
Una de las técnicas auxiliares más importantes y que destaca
especialmente
en
los
últimos
tiempos
para
alcanzar
la
IDENTIFICACIÓN de un individuo del que sólo disponemos del
esqueleto, ha sido la reconstrucción de las partes blandas de la cara
en un intento de reproducir lo más aproximadamente posible el
aspecto que tuvo en vida. El procedimiento se basa en el hecho de
que el cráneo es la matriz de la cara en el vivo.
6.1. Principales técnicas de reconstrucción del cráneo
Hay dos técnicas fundamentales para reconstrucción del cráneo:
Técnicas Bidimensionales.
Técnicas Tridimensionales.
Entre las técnicas bidimensionales tenemos la comparación por
superposición del cráneo con fotografías, retratos o bustos de la
victima y el dibujo o retrato-robot, basado en las medidas y rasgos
especiales de la cara y el cráneo que estudiamos.
La comparación fotográfica por medio de videocámaras se utiliza hoy
mucho en identificaciones en casos de robos de bancos, control de
pasaportes en casos de inmigrantes ilegales, y otros. La comparación
por medio de video y fotos es la más utilizada en estos casos
Las técnicas de superposición de fotos y retratos fueron utilizadas por
primera vez en reconstrucción de casos históricos. El primero en
intentarlo fue WELCKER (1867) para estudiar el cráneo del poeta
DANTE ALIGGHIERI. WELCKER disponía de una mascarilla funeraria
que TOREEGIANI hizo sobre el rostro de DANTE recién muerto. Pudo
constatar que ambas coincidían e incluso presentaban una asimetría
entre el lado derecho y el izquierdo de la cara.
WELCKER (1980) realizó más tarde una serie de estudios de dos
cráneos de SCHILLER y de KANT, comparándolos con los bustos
respectivos existentes de los dos escritores.
El primer caso en que se utilizó la composición fotográfica con la
intención de identificación aplicada al campo de la Antropología
forense fue el caso RUXTON, un médico que descuartizó a su mujer y
su enfermera (Mary Rogerson) desfigurándolas para que no se las
pudiera reconocer. Sin embargo, el hallazgo de los restos
descuartizados y el cotejo por superposición con fotografías
ampliadas de las dos mujeres, posibilitó llegar a la identificación de
135
ambas (BLUNDELL Y WILSON, 1937, y GLAISTER Y BRASH, 1937). Al
verse acorralado, Ruxton acabó confesando su crimen.
Uno de estos estudios históricos, ya en época moderna fue realizado
por HENSCHEN (1960) sobre EMANUEL SWEDENBORG y los dos
cráneos que eran reclamados como auténticos, uno procedente de
Inglaterra y otro de Suecia.
En esta ocasión se realizaron análisis muy diversos, químicos,
antropométricos, hasta de los sarcófagos que contenían los restos,
además de la superposición. Se pudo así comprobar que el auténtico
era el cráneo hallado en Inglaterra y no el sueco.
HIS ideó un sistema buscando la concordancia cráneo-facial mediante
modelos con plastilina. Así identificó el cráneo de Bach y realizó los
retratos de las distintas razas, abriendo una vía que siguieron
ulteriores criminalistas.
6.1.1. Técnicas bidimensionales
Los métodos de superposición de imágenes son:
Métodos estáticos.
Métodos dinámicos.
Métodos digitalizados.
6.1.1.1. Métodos estáticos.
Los procedimientos estáticos consisten básicamente en la obtención
de un negativo de la fotografía antemorten y compararla
fotográficamente con el cráneo, superponiendo los puntos
craneométricos.
La diferencia entre los métodos estáticos conocidos está en relación
con los puntos de referencia tomados en el cráneo.
a) Método de Glaister y Bash
Obtiene una fotografía de la superposición del negativo del cráneo y
la positiva del antemortem.
136
La fotografía antemortem debe ser ampliada al tamaño real,
pudiendo emplear algún objeto conocido.
b)
Método de Basauri
Utiliza una cámara de 4 x 4, aunque recomienda el empleo de otra de
mayor visión.
El negativo de la fotografía antemortem lo sitúa sobre un cristal
esmerilado del visor, donde marca los puntos craneométricos que le
servirán de referencia: basión, espinal, prostión, mentoniano, gonión,
línea nasofrontal (plano vertical) y línea supraorbitaria (plano
horizontal).
Luego coloca el cráneo sobre un trípode con cabeza giratoria y lo
desplaza hasta conseguir que coincidan los puntos y líneas referidos.
Figura 23.
(The University of Sheffield, Edición de internet, 15 de abril de 2002:1)
La ilustración nos muestra la colocación del negativo sobre el visor
de la cámara profesional, a través de cuyo objetivo se compara la
imagen del cráneo estudiado.
El problema que se suele plantear, es hasta dónde ampliar la
fotografía, es decir, llegar al tamaño natural de la cara. BASTIAAN
(1986) Y SEKHARAN (1971) estudiaron la forma de determinar el
factor de ampliación de la fotografía, que es un elemento muy
importante en este tipo de investigaciones. Este factor se basa en
137
elementos existentes en las fotografías cuyo tamaño es conocido:
objetos, joyas, pendientes, corbatas y otros atavíos que lleve la
persona sobre sí misma, o bien objetos que hayan en la fotografía y
que estén en un plano similar, tales como un cuadro colocado en la
pared cerca de la cara de la persona, la altura de una puerta u otros
elementos parecidos. También pueden ser muy útiles las radiografías
de la cara o cráneo tomadas durante toda la vida.
c) Método de Sekharan
Sitúa cualquier objeto que aparezca en la fotografía antemortem:
gafas, camisa, etc. Deben ser objetos que puedan aparecer enfocados
en un mismo plano que la cara del individuo.
Cuando no se encuentran los objetos antemortem, utiliza la distancia
interpupilar estándar. Este método puede inducir a errores, puesto
que esta distancia, estimada en seis centímetros, puede no ser
correcta.
d)
Método estático de Dorion
Emplea espejos que reflejan las imágenes antemortem, situadas en
un negatoscopio, sobre las que se obtienen del cráneo.
e)
Método de Chai
Obtiene líneas de referencia a partir de puntos cefalométricos. Estas
líneas nos ofrecen la angulación correcta del cráneo para la obtención
de la fotografía postmortem.
f) Método estático de McKenna
Utiliza fotografías antemortem, en las cuales aparecen los dientes del
individuo, con lo que logra solucionar los problemas de la
magnificación.
McKenna busca el factor de magnificación mediante características
anatómicas del sujeto, evitando la búsqueda de objetos que
aparecían en la fotografía obtenida en vida.
Señala que la medida estándar resultante de la distancia interpupilar
es inaceptable, por la inseguridad de su localización en la fotografía.
También rechaza los márgenes laterales de la órbita como punto de
referencia en las mediciones.
Sin embargo, los dientes son válidos para sus estudios, por la
permanencia de las medidas en condiciones ante y postmortem.
Este método de McKenna no es efectivo en sujetos desdentados o
dentados parciales, en los que las piezas que les falten sean del
sector anterior de la boca.
138
CASO HISTORICO (MÉTODO ESTÁTICO – JOSEF MENGELE)
El 20 de junio de 1949, con pasaporte de la Cruz Roja Internacional
(CRI) a nombre de Helmut Gregor, inmigra a Argentina el Dr. Josef
Mengele, médico del campo de concentración de Auschwitz, famoso
por sus experimentos con los prisioneros.
“ Josef Mengele nació en 1911; fue el criminal nazi que
envió a la muerte aproximadamente a 400.000 prisioneros
de campos de concentración durante la Segunda Guerra
Mundial”. (CORREA RAMÍREZ, Alberto Isaac 1990:62)
Ese mismo año con la documentación concedida por la CRI a nombre
de Helmut Gregor, Josef Mengele, obtiene Cédula de Identidad de la
Policía Federal Argentina. Años más tarde, en noviembre de 1956, se
presenta nuevamente ante la policía para solicitar la rectificación de
su nombre y apellido. Inicia el trámite presentando partida de
nacimiento legalizada y certificada por la embajada de la República
Federal de Alemania en Buenos Aires. Mediante esta presentación
obtiene una nueva Cédula de Identidad con el mismo número de la
anterior, pero a nombre de Josef Mengele, nacido el 16 de marzo de
1911 en la localidad de Günsburg, provincia de Baviera.
El 29 de septiembre de 1958 requiere la intervención de un notario
de la ciudad de Buenos Aires para iniciar un cuestionamento a la
Universidad Johann-Wolfgang Goeth que había privado a Mengele de
su doctorado y del derecho de ejercer la medicina por su conducta
criminal durante la Segunda Guerra Mundial.
El 09 de febrero de 1959 la ex Republica Federal de Alemania por
intermedio de su embajada en Buenos Aires requirió que se ordene la
captura de Mengele a fines de su extradición.
Las autoridades argentinas, de acuerdo con el procedimiento
entonces en vigor, deciden conferir vista del pedido al Procurador
General de la Nación. Este trámite recién fue ejecutado el 06 de
noviembre de 1959. El 18 de junio de 1960 se requirió su extradición.
El 09 de enero de 1968 se informa desde Brasil que Josef Mengele
había sido identificado en este país con el nombre de Helmut Gregor.
Después de varias décadas de trámites, el 05 de marzo de 1985 se
informa que las diligencias practicadas para detenerlo arrojaron
resultados negativos.
Después de su fallecimiento, durante un largo período hubo varios
intentos de identificación del Dr. Josef Mengele por parte de los
médicos forenses, con diferentes técnicas. Uno de ellos fue el médico
139
W. TEIXEIRA que realizó la superposición a partir de dibujos
transparentes de la fotografía del cráneo y de la fotografía antemortem. El resultado fue positivo. (Véase fig. 24 a.b.c.)
Superposición (Método estático - Josef Mengele)
(Figura 24 a)
(Figura 24 b)
140
(Figura 24 c)
Figura 24. (a.b.c.) (CORREA RAMÍREZ, Alberto Isaac 1990:63)
6.1.1.2. Métodos dinámicos
Utilizan videocámaras que acortan el tiempo empleado en la
angulación, puesto que el cráneo se va moviendo sobre su soporte
hasta conseguir que coincida con la fotografía antemortem.
Los métodos posibles son con una o dos videocámaras.
a) Métodos con una sola videocámara
a.1. Dinámico de Dorion
Coloca una transparencia de la fotografía antemortem. Detrás suyo
sitúa el cráneo, que ilumina con cuatro focos situados en un cuadrado
teórico, en cuyo centro está el cráneo. Se visualiza la imagen
superpuesta a través de un monitor que facilita las rotaciones
necesarias hasta alcanzar la angulación deseada.
a.2. Método de Loh
Es parecido al anterior. Utiliza la medida interpupilar, sirviéndose de
otra persona que aparezca en la fotografía. Se mide la distancia
interpupilar real de esta persona, se determina su dimensión en la
fotografía y se puede calcular el factor de magnificación que permite
la situación correcta del cráneo.
141
b) Métodos con dos videocámaras
LOH (1989) estudió este factor de ampliación y considera como
BASTIAAN y McKENNA (1984) que el mejor factor de comparación
para saber cuál ha de ser la ampliación de la fotografía para darle el
tamaño que tuvo en vida personal, son los dientes, la medida de los
dientes. Mc Kenna lamenta que las fotografías de los carnets y
pasaportes tengan que ser siempre tomadas con el rostro serio. Si
estas fotos se hicieran con la cara en actitud de sonreír, enseñando
los dientes, serían de tanta importancia como la huella dactilar.
b.1. Método de Bastian
Realiza un procedimiento similar al de McKenna, del que más
adelante se hablará. Monta el cráneo en un soporte con movimiento
en los tres planos del espacio. Interesa localizar fotografías
antemortem con visión de los dientes.
Se alinea esta fotografía con la primera videocámara. Luego se coloca
el cráneo alineándolo con una segunda cámara de vídeo, similar a la
anterior. Se ajustan ambas cámaras en blanco según la fuente de
iluminación. Se deben evitar los reflejos.
Ambas cámaras deben ser compatibles y con posibilidades de mezclar
imágenes.
Cuando hay dientes presentes, la mezcla se hace de forma que se
solapen los de la fotografía antemortem y los que aparecen en el
cráneo.
Cuando no existen dientes, se hace emparejando las marcas
anatómicas más importantes: conducto auditivo externo, órbitas,
espinal nasal anterior, mentón, ángulos mandibulares y procesos
cigomáticos.
b.2. Método de Iten
Utiliza tres monitores de televisión. Con una de las cámaras filma el
cráneo y lo reproduce en un monitor. Con la segunda cámara hace lo
mismo respecto a la fotografía antemortem. Se sirve de un mezclador
de imágenes para crear secciones horizontales y verticales al nivel
deseado. Las secciones y la mezcla de imágenes las presenta en el
tercer monitor.
Para facilitar la inclinación del cráneo, se basa en la distancia que
existe entre los ejes interpupilar y el que une los conductos auditivos.
Para determinar la orientación del cráneo combina con estas
distancias la obtenida entre los ojos.
142
b. 3. Método dinámico de McKenna
Realiza mediciones comparativas, superponiendo las denticiones
respectivas del cráneo y de la fotografía. La posición correcta del
cráneo respecto a la fotografía se logra rotando la cámara mientras
está focalizada en el punto anatómico de referencia elegido.
Su sistema permite obtener transparencias a partir de los negativos
fotográficos, para que se presenten ante un tribunal si fuera
necesario.
b.4. Método dinámico de Sekharan
Es un método similar a los anteriores, utilizando dos videocámaras.
Incorpora escalas al lado de la fotografía antemortem y del cráneo
para evitar magnificaciones.
En la utilización del método dinámico también podemos incluir el caso
histórico de identificación del médico Josef Mengele mencionado
anteriormente. El profesor Richard Elmer superpuso imágenes del
cráneo y de cinco fotografías mediante dos cámaras de televisión
sobrepuestas en un monitor, con vistas parciales y completas, en
cortes verticales y horizontales. El resultado fue la identificación
positiva.
6.1.1.3. Métodos digitalizados
Estos métodos digitalizan la fotografía antemortem y el cráneo, bien
de modo directo o haciéndolo sobre fotografías obtenidas de los
restos cadavéricos.
a) Procedimiento de Majundar
Obtiene previamente una fotografía del cráneo con una angulación
similar a la de la fotografía antemortem. Posteriormente aparecen las
imágenes en un monitor, donde se seleccionan varios puntos de
referencia, que deben ser al menos cuatro, de los cuales, tres no
deben ser colineales y susceptibles de ser localizados con facilidad.
Se recomiendan, entre otros, los cantos internos y externos de los
ojos, comisuras labiales y punto subnasal.
Luego, el ordenador crea una imagen compuesta, tomando puntos
alternativos de la cara y del cráneo, disponiéndolos como los cuadros
blancos y negros de ajedrez, de forma que las individualidades de
cada fotografía estén presentes en la imagen superpuesta. El
ordenador construye las superposiciones en bloques o en franjas del
ancho deseado, para hacer las comparaciones más precisas.
143
b) Método de Nickerson
Realiza una transformación por ordenador:
1.
2.
3.
4.
5.
6.
Digitalización bidimensional de la fotografía antemortem.
Digitalización tridimensional del cráneo.
Filtración de los modelos para reducir errores.
Selección de cuatro puntos sobre las imágenes.
Transformaciones necesarias para reducir a dos dimensiones
la
superficie trabecular del cráneo.
Combinación de los resultados obtenidos.
Un problema que se presenta con frecuencia en este caso es que las
fotografías estén tomadas en planos no frontales, con la cabeza
ladeada, en escorzo o movida en sentido vertical si es de frente,
hacia arriba o hacia abajo. El cráneo habrá que orientarlo para
fotografiarlo en la misma posición lo que no suele ser fácil.
Otro detalle que hay que tener en cuenta es el espesor de las partes
blandas por lo que la foto del cráneo será siempre un poco menor que
la que consiga ampliar el rostro o la cara de la fotografía que se
quiere cotejar.
6.1.2. Técnicas tridimensionales
Las
técnicas
tridimensionales
comprenden
dos
reconstrucción: el esculpido facial y reconstrucción 3 D.
tipos
de
Las técnicas tridimensionales comprenden la restauración de las
partes blandas, aprovechando las que quedan sobre el cráneo,
adheridas aún o semiarrancadas y la reconstrucción total por medio
del modelado con arcilla, plastilina, cera o yeso-escayola, utilizando
una tabla de espesores medios de los puntos más relevantes de la
cara y del cráneo.
STEWART (1960) menciona a W.W.WILDER del Smith College como
uno de los pioneros de la antropología Forense en Estados Unidos y
que fue quien llevó allá las técnicas tridimensionales de
reconstrucción de las partes blandas del rostro aprendidas en
Alemania. En 1912 comenzó a aplicar en Estados Unidos el método
sobre cráneos de indios, y más tarde, 1918, con B. WENTWORTH,
recomendó el procedimiento con fines forenses en su libro “Personal
Identification in Mass Disasters”.
144
“Los métodos tridimensionales comprenden dos escuelas de
investigadores:
la
escuela
rusa,
representada
por
su
iniciador M. M. GERASIMOV, Director del Laboratorio de
Reconstrucción de Plásticas del Instituto de Etnografía de
Moscú. Tras la muerte de este investigador en 1970, le
sucedió
en
la
dirección
del
centro,
la
doctora
G.
LEBERDINSKAYA”. (REVERTE COMA, José M. 1999:770)
“La
Escuela
germano-americana que comienza con los
trabajos de WELCKER sobre los cráneos de SCHILLER y
RAFAEL, no utiliza la reconstrucción de los músculos como
hacen los rusos, sino se basa en los espesores de las partes
blandas de la cara, diferentes según los puntos que se
tomen en cuenta. Para determinar estas profundidades o
espesores y hallar las cifras medias, se han tomado en
cuenta tres tipos de individuos, varones y hembras: los
obesos,
los
medianos
y
los
delgados
o
emaciados”.
(REVERTE COMA, José M. 1999:776)
6.1.2.1.
Esculpido facial
En el esculpido facial se hace el uso del cráneo, o una replica del
cráneo, a la cual se adhieren materiales de modelado para producir
una cara.
Imprecisiones en la Reconstrucción Facial
Muchos factores contribuyen a la imprecisión en la reconstrucción
facial (GEORGE 1993)
x
El tejido suave no se ajusta a la cara como un guante.
x
Numero interminable de variaciones faciales.
x
Depende de la edad en diferentes rangos e intensidades.
x
El estado nutricional de la cara es impredecible.
x
Las variaciones en los ojos, nariz y oídos no pueden ser deducidas
del cráneo.
x
El tejido suave de los labios y
independientemente de su forma dental.
la
barbilla
varían
145
x
El vello facial es impredecible.
x
Las condiciones dermatológicas y patológicas son impredecibles.
A esta lista podría ser adherida la variación en la habilidad e
interpretación de la persona realizando la reconstrucción.
Prerrequisitos para una Reconstrucción Precisa
Para ser capaz de realizar la mejor posible reconstrucción, el artista
debe (GEORGE 1993):
x
Conocer como lucía y se sentía la cara del individuo vivo.
x
Debe entender la geometría idealizada del rostro.
x
Debe conocer la anatomía facial.
Algunos problemas que surgen de lo anterior:
1. Las habilidades artísticas varían mucho. Si otras fuentes de
imprecisión pueden ser minimizadas, esto podría ser un factor no
muy importante. Artistas diferentes que dibujen a la misma
persona, seguirán produciendo una imagen reconocible.
2. No existen mediciones o métodos de medición estándares. Algunas
o varias de las tablas han sido hechas cada una, usando el método
disponible para el investigador.
3. La utilización de métodos diferentes para producir
reconstrucción, también lleva a resultados diferentes.
una
Pasos en la Reconstrucción
x
Obtener una copia del cráneo.
x
Establecer edad, sexo y raza.
x
Trazar las marcas para el grosor de tejido.
x
Trazar los puntos de origen y de inserción para los músculos.
x
Trazar marcas para los rasgos faciales.
x
Seleccionar un conjunto de datos y montar las marcas de grosor
de tejido.
146
x
Colocar los ojos.
x
Modelar los músculos sobre el cráneo.
x
Adherir tejido graso alrededor de los ojos y glándula lagrimal.
x
Adherir párpados.
x
Adherir nariz.
x
Adherir glándula parótida.
x
Adherir orejas.
x
Cubrir todo con capas de piel.
x
Detallar la cara.
El famoso caso de Josef Mengele, ya mencionado anteriormente,
también fue identificado a través del Esculpido Facial por el Fortunato
Antonio BADAN PALHARES, médico forense brasileño.
En 27 de agosto de 1985 el BADAN PALHARES fue designado por el
Superintendente de la Policía Federal de Sao Paulo en Brasil, para ser
el anatomo-patólogo oficial del caso y poder, a su criterio, realizar los
estudios solicitados.
Con la ayuda del artista plástico, también brasileño, Marcos Antonio
Cavalari, ha desarrollado la técnica que mostramos a continuación:
147
Figura 25.
(BADAN PALHARES, F.A. Edición de internet, 27 de febrero de 2005:1)
6.1.2.2. Reconstrucción facial computadorizada 3D
En el mundo de hoy la informática es un recurso imprescindible en
nuestras vidas. Con la informática ha surgido una serie de nuevas
técnicas ligadas a la Reconstrucción y una de ellas es el Sistema
Gráfico Tridimensional.
La Reconstrucción Facial Computadorizada 3D, hace uso de la imagen
computarizada del cráneo, a la cual se adhiere el rostro en la pantalla
del ordenador.
Con un Rayo láser, se escanea el cráneo, y la imagen tridimensional
obtenida, se guarda en la memoria del ordenador. Sobre esa imagen,
ya en pantalla, se puede reconstruir la cara utilizando las medidas del
148
espesor promedio registradas en las tablas ya mencionadas para los
diversos tipos de caras: delgadas, medianas y gruesas.
El propósito de la reconstrucción facial en técnicas forenses es
obtener una imagen de un cráneo que sea tan precisa que por medio
de su semejanza con el rostro de un individuo vivo pueda permitir la
identificación de los restos esqueléticos, especialmente si no existe
ninguna otra posibilidad.
Sin embargo, como ya es tradicional, persiste la dificultad en
reproducir los rasgos del contorno del cráneo (nariz, ojos, boca,
labios y mentón).
Aún con los actuales programas de VRML (realidad virtual) se
consiguen mejores resultados, más reales.
Según REVERTE COMA estas técnicas siempre serán un arte y no se
pueden usar en términos absolutos como medio de identificación.
Siempre serán una interpretación más o menos artística de la
realidad.
Investigadores japoneses desarrollan un prototipo de un sistema de
simulación de expresiones faciales (CAFES). Lo anterior lo hacen con
el objetivo de desarrollar un soporte computacional para cirugías, ya
sea para realizar planes o para simulaciones de cirugías. Este grupo,
a pesar de que hasta el momento sólo cuentan con un prototipo,
tiene varios tipos de funciones para deformar la estructura facial y
generar expresiones faciales. También permite deformaciones
dinámicas de la piel en respuesta a acciones musculares, control
elástico de la piel parte por parte, operaciones de corte en músculos
seleccionados, entre otras utilidades de efectos visuales.
Este grupo también realiza la reconstrucción facial a partir de
imágenes tridimensionales del cráneo obtenidas mediante el uso de
un escáner 3-D de rayo láser. A partir de esta imagen 3-D del cráneo
obtienen, mediante Procesamiento Digital de Imágenes, una
estructura poligonal de malla. Con esta estructura realizan
proyecciones que permiten obtener, mediante acoplamientos y unión
de puntos, un modelo que cuenta con la capa que representa los
tejidos del rostro.
Otro trabajo esta siendo desarrollado en el Departamento de
Patología Forense de la Universidad de Sheffield, este trabajo es
llamado Reconstrucción Facial Tridimensional Computarizada.
Este equipo se basa también en el uso de un escáner láser para
capturar imágenes tridimensionales de cualquier objeto.
149
Su investigación toma dos vertientes principales:
Primeramente, desarrollan métodos para importar directamente datos
no modificados de topografías computarizadas (CT) y resonancias
magnéticas (MR), ideando un equipo para obtener numerosas y
precisas mediciones acerca de características en profundidad de
individuos vivos.
La otra vertiente consiste en el desarrollo de programas para generar
aproximaciones tridimensionales muy cercanas de la apariencia facial
de individuos durante la vida, las cuales pueden ser interactivamente
vistas y modificadas de acuerdo a la edad o constitución.
También trabajan en reconstrucción
fragmentos en "realidad virtual".
de
cráneos
a
partir
de
Hay un Programa llamado “Age Progression System” que se aplica a
la búsqueda de niños perdidos. Con una foto de 15 años atrás se
consigue modificar los rasgos y predecir los que tendrá actualmente
el sujeto si es que vive. En dos minutos y medio se consiguen
resultados y cómo ha de ser la cara actual, lo que sirve para la
búsqueda del individuo por los familiares o la policía.
En la Reconstrucción Facial, hay además dos técnicas muy útiles
empleadas en la creación de imágenes animadas. Se trata de
conseguir, a partir de una imagen inicial una serie de transiciones o
variaciones hasta llegar a un modelo final. Estas dos técnicas se
conocen en inglés con los nombres de: WARPING y MORPHING.
WARPING es un método de distorsión que permite cambiar una
imagen, parcial o totalmente. Así es posible cambiar la expresión
facial. MORPHING es una técnica de transición por medio de la cual se
transforma un objeto en otro, un rostro en otro. Se pueden mezclar
los rasgos de un ser humano con los de un tigre o un perro por medio
de este sistema.
Estos trabajos de reconstrucción facial a partir de cráneos tienen gran
aplicación en aspectos como: casos forenses, arqueología,
paleontología, personajes históricos, etc.
150
6.2. Ventajas y desventajas de las técnicas bidimensionales y
tridimensionales
- Con el método tridimensional y bidimensional hay la facilidad de
rotar, mover, medir, cortar, fotografiar la imagen, en resumen,
modelar al gusto de quien manipula, sin mancharse las manos,
basándose en términos matemáticos, geométricos, coordenadas
cartesianas x, y, z, algoritmos y todo cuanto nos proporciona la
geometría vectorial y espacial.
- Con el método 3D también podemos obtener una enorme cantidad
de informaciones sobre la morfología endocraneal o de las estructuras
más escondidas como son los senos o el oído interno, cosa que no
podemos hacer con los métodos tradicionales, a menos que
destrocemos la pieza que estudiamos.
- La comparación de imágenes tridimensionales, obtenidas del
cráneo, con las existentes antemortem de dos dimensiones, tiene
como resultado la existencia de errores derivados de la magnificación
de las imágenes, con falsos positivos.
- Una de las ventajas de la reconstrucción bidimensional es permitir
cambiar imágenes varias veces hasta que se encuentre una posición
precisa, siendo más difícil cambiar el aspecto cuando es un método
tridimensional.
- Algunos autores como VON EGGELING (1913), SUK (1935),
Krogman (1946) MONTAGU (1947) criticaron los métodos
tridimensionales, considerándolos inseguros, imprecisos y erróneos.
Sin embargo, hay muchas técnicas avanzadas de Reconstrucción
Facial, así como hay también opiniones diversas de diferentes
autores, por esto Reverte Coma afirma que ninguna técnica es
perfecta y aunque mejoran muchas cosas no han podido desplazar las
técnicas tradicionales.
151
152
7. MATERIAL Y MÉTODO
7.1. Materiales
Los materiales utilizados para la realización de este trabajo han sido:
- Ordenador (Procesador Intel) Pentium 4, 1.7 GHz, 256 MB de
memoria SDRAM, disco duro de 20 GB, pantalla TFT de 14.1”;
- Máquina Fotográfica digital Sony, cyber-shot, 3.2 mega pixels (Sony
lens/optical 3x);
- Scanner Epson Perfection 660;
- Programa Adobphotoshop 5.5;
- Aparato Teleradiográfico: Orthoralix 9200/Orthoralix 9200 Plus
- 16 radiografías (negativas) frontales de la cara en la posición
Francfort;
- 50 fotografías de diferentes personas.
- 16 fotografías de las personas radiografiadas, todas ellas obtenidas
en el plano frontal de la cara (posición Francfort);
- Tabla digital - WACOM;
7.2. Método
- El método utilizado está basado en el hecho de que no hay dos
cráneos iguales, nuestro primer procedimiento fue realizar las
radiografías frontales de la cara de los sujetos participantes en la
posición Francfort;
- La radiación de RX utilizada fue de 50 kv, 100 mA, 1,5 m de la
distancia focal y una exposición de 0’2 segundos. En proyección
frontal con factor de magnificación: 1,64 y en proyección lateral con
factor de magnificación: 1,25;
- En la secuencia, tomamos las fotografías de los sujetos estudiados
en el plano frontal, orientadas en la misma posición de la radiografía,
o sea, con la orientación y ángulos precisos (posición francfort);
153
Foto 1
Foto 2
Vista General Aparato Teleradiográfico
Posición Lateral
Foto 3
Foto 4
Reproductor Rayos X
Receptor Rayos X
con cabezal giratorio
Foto 5
Vista Lateral
Posición Frankfort
(Postero-anterior)
Foto 6
Vista detrás Posición Frankfort
(Postero-anterior)
154
Foto 7
Aproximación del Reproductor
Rayos X
Foto 8
Placa Receptora de Rayos X
- En el paso siguiente, escaneamos las radiografías y las fotos para la
superposición
de imágenes
con
la
ayuda
del
programa
AdobePhotoshop;
- En el proceso de superposición, determinamos el coeficiente o factor
de ampliación, con la ayuda de una serie de puntos anatómicos de
referencia tomados en las radiografías y en las fotos, que nos
permitió llegar a las proporciones faciales y las distancias entre los
rasgos. Utilizamos la definición de los puntos anatómicos y medidas,
unidos en el vivo (cara) y en el cráneo de los siguientes autores:
REVERTE COMA, J. M., RODRIGUEZ CUENCA, J. V., y VILLALAÍN
BLANCO, J. D.
Los puntos anatómicos utilizados han sido:
1. SUPRAORBITAL (so). Se localiza en la intersección del plano medio
con la línea que une los bordes superiores orbitales. (RODRIGUEZ
CUENCA, J. V. 1994:5)
2. ORBITAL (or). Punto más bajo del borde inferior de la órbita.
(REVERTE COMA, J. M. 1999:163)
3. MAXILO-FRONTAL (mxf). Punto donde se unen la sutura
máxilofrontal con el borde orbitario interno. (REVERTE COMA, J. M.
1999:163)
4. ECTOCONQUIO (ec). Punto lateral del borde de la órbita, en el eje
trazado desde el maxilofrontal paralelo al borde superior de la órbita,
que la divide en dos mitades iguales. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. 1994:1)
155
5. NASION (n). Intersección de la sutura frontonasal con el plano
medio. No siempre coincide con la intersección de la sutura
internasal. Si en el hueso se presentan irregularidades cerca de la
línea media se rectifica la curva de la sutura frontonasal mediante
una línea imaginada. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. 1994:3)
6. SUBNASAL o ACANTION (sn). Es el punto inferior o posterior del
tabique nasal o punto más bajo del borde inferior de la abertura
piriforme, en la base de la espina nasal. Es el punto de intersección
del plano medio con la línea que une los bordes inferiores de la
abertura piriforme. En caso de presencia de surcos prenasales se
determina en el borde superior de los mismos. Si la espina nasal
anterior se encuentra muy desarrollada el punto se ubica dentro del
hueso, pero las puntas del instrumento se colocan paralelas al plano
medio. (REVERTE COMA, J. M. 1999:156 y RODRIGUEZ CUENCA, J. V. 1994:3)
7. ZIGION (zy). Es el punto más externo de la cara externa del arco
zigomático, el más saliente lateralmente. (REVERTE COMA, J. M. 1999:163)
8. NASOLATERAL (ns). El punto más profundo (posterior) en el borde
externo lateral de la apertura piriforme. Generalmente se ubica en su
mayor anchura. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. 1994:3)
9. DACRYON (d). Punto en la cresta lacrimal posterior, en la
intersección del frontal, maxilar y lacrimal. Generalmente se localiza
más profundo que el maxilofrontal. En los casos de buena
preservación de la región orbital, el dacryon se ubica en la
intersección de las suturas lacrimomaxilar, frontolacrimal y
frontomaxilar, conformando un pequeño promontorio en la
intersección de las suturas. En caso
de rotura del lacrimal se
reconstruye el curso de las suturas teniendo como base el
promontorio de la cresta lacrimal. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. 1994:1)
10. CENTRO PUPILAR (cp). El centro de la pupila está en el cruce de
dos líneas, una que conecta los bordes orbitarios superior e inferior
en su parte media y otra línea que une el punto máxilo-facial y el
ectoconquio. (REVERTE COMA, J. M. 1999:779)
11. GLOBO OCULAR (go). El globo ocular está centrado en la órbita
con la pupila en el centro. (REVERTE COMA, J. M. 1999:780)
12. DISPOSICIÓN DE LOS OJOS Y PUPILA. La ubicación del globo
ocular es el centro de la órbita y las pupilas se sitúan en el punto
central. Se parte de la ubicación de la pupila en el rostro como el
punto de cruce en la vertical que une la parte media de los márgenes
orbitarios superior e inferior y la horizontal del ángulo maxilofrontal al
ectoconquio. La distancia entre los ángulos internos de ambos ojos
156
equivale a la longitud horizontal de un ojo. (VILLALAÍN BLANCO, J. D.
2000:382)
13. CEJAS (c). Según J. L. Angel y W. M. Krogman (en Caldwell,
1981) continúan la línea de los arcos superficiales, aproximadamente
3-5 mm por encima del borde superior de las órbitas; Fedosyutkin y
Nainys (1993) sugieren que las cejas se encuentran 1-2 mm debajo
del borde orbital cuando éste está fuertemente desarrollado. En caso
de presentarse un borde supraorbitario débilmente desarrollado el
tercio interno de la ceja se localiza en la proyección de la órbita, a lo
largo del borde; entretanto, los tercios medio y lateral se elevan
gradualmente continuando su contorno. Si la parte orbital externa se
engruesa, las cejas sobresalen lateralmente conformando un ángulo.
(RODRIGUEZ CUENCA, J. V. Edición de Internet, 15 de noviembre 2003:7)
14. ANGULO OCULAR MEDIAL. Es más complicado de localizar.
Recientes investigaciones (Lebedinskaya, 1982) sugieren la existencia
de dos clases de forma del borde interno de la órbita: 1. Forma recta
de la cresta lagrimal anterior, típica en las poblaciones mongoloides;
2. Forma de gancho, relacionado con caucasoides. El ligamento
palpebral medial se inicia en el proceso frontal del maxilar a nivel del
tercio superior de la fosa lagrimal; al presionar sobre el hueso
conforma en la cresta lagrimal posterior una pequeña plataforma
donde se ubica el ángulo ocular interno. Según Angel (1986) el
pliegue medial se ubica aproximadamente a 2mm de las crestas
laterales, en su punto medio (a 4-5 mm debajo del dakryon o del
lagrimal) con el ángulo incrustado en la caráncula, a 2 mm lateral del
pliegue. El lateral se localiza a 3-4mm del pequeño tubérculo del
borde lateral de la órbita; el párpado superior sobresale del borde
atrás. La existencia de unas crestas lagrimales posteriores fuertes
sugiere una amplia comisura palpebral; las órbitas caídas configuran
una apertura más horizontal que usual; el ángulo lateral se localiza
normalmente a 2mm o más por encima del medial. (RODRIGUEZ
CUENCA, J. V. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. Edición de Internet, 15 de noviembre
2003:8)
15. ANGULO ORBITAL LATERAL. En general, la distancia entre el
borde orbital y el ángulo orbital lateral es de 5,4 mm. Según
Fedosyutkin y Nainys la longitud de la abertura de los ojos equivale a
un 60-80% de la anchura orbital. En las poblaciones contemporáneas
es muy difícil ubicar el tuberculum orbital, por tal razón, se sugiere
palpar cuidadosamente el borde lateral de las órbitas. (RODRIGUEZ
CUENCA, J. V. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. Edición de Internet, 15 de noviembre
2003:8)
157
Las medidas faciales que se han utilizado han sido:
1. ANCHURA MAXILOFRONTAL. (interorbital) Distancia entre los
puntos maxilofrontal. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V. 1994:3)
2. ALTURA ORBITAL. Distancia entre el punto medio superior al
inferior de los bordes orbitales izquierdos, cuya línea es perpendicular
a la anchura maxilofrontal. La órbita derecha es generalmente más
baja que la izquierda. La correlación entre la órbita izquierda en
comparación con la derecha es de 1: 0,992. (RODRIGUEZ CUENCA, J. V.
1994:3)
158
-
Análisis Radiográfica– programa Adobe Photoshop;
a)
b)
d)
c)
e)
1. Abrir el archivo de la radiografía;
2. Recortar los márgenes de la radiografía eliminando las partes
superfluas, dejando aproximadamente 0,5 cm en los márgenes:
laterales, superior e inferior. Con esto disminuimos el tamaño del
archivo de la imagen, facilitando el manejo;
3. Ajustamos el nivel de resolución de la imagen, hasta que estén
óptimamente visible las suturas, puntos anatómicos y márgenes
óseos del cráneo;
159
4. Marcamos en la radiografía los siguientes puntos de referencia:
supraorbitários,
orbitários,
zigomáticos,
nasion,
subnasal,
maxilofrontales, ectoconquios, dacriones y nasolaterales;
5. Dibujamos
líneas continuas de desarrollo progresivo en la
horizontal y vertical, a partir de los puntos anatómicos de referencia;
6. Las primeras líneas de desarrollo continuas se fijan entre los dos
puntos supraorbitarios, entre los dos orbitarios y los dos zigiones.
Después, con la selección de la imagen, hacemos rotación, hasta que
los puntos supraorbitários estén exactamente en la misma línea
horizontal. Seguidamente, fijamos otra línea horizontal tomando
como referencia el punto subnasal. Trazamos una línea vertical entre
los puntos nasion y subnasal que divide la cara, generalmente en
partes simétricas, ya que tenemos que considerar que hay caras
asimétricas. Seguimos trazando líneas obedeciendo el siguiente
orden: ectoconquios derecho e izquierdo (líneas verticales);
maxilofrontales derecho e izquierdo (líneas verticales); nasolaterales
derecho e izquierdo (líneas verticales); dacryons derecho e izquierdo
(líneas verticales).
7. Sabiendo que los centros pupilares están en el cruce de dos líneas,
una que conecta los bordes orbitarios superior e inferior en su parte
media y otra línea que une el punto máximo-facial y el ectoconquio,
trazamos dos líneas verticales, correspondiendo a los centros
pupilares derecho e izquierdo.
8. Con los trazados de las líneas guías: supraorbitarias (horizontal),
subnasal (horizontal) y los centros pupilares derecho e izquierdo
(verticales), se forma un cuadrado.
9. En este cuadrado trazamos dos líneas diagonales de color rojo, que
nos facilita determinar con precisión el punto central del cuadrado y
consecuentemente de la cara.
10. Utilizamos marcadores, del programa Adobe Photoshop de
diámetro 3 mm de color rojo (aunque intentemos marcar los puntos
anatómicos con mucha exactitud, siempre suele ocurrir algún error.
No se puede eliminar el grado de subjetividad por parte del operador
de la técnica, principalmente cuando este analiza la fotografía que
contiene las partes blandas del sujeto. Por esto hemos utilizado en la
radiografía marcadores con el diámetro de 3 mm, para cubrir los
márgenes de errores) para señalar cada esquina y el punto central
del cuadrado, juntamente con los siguientes puntos anatómicos de
referencia:
zigiones,
subnasal,
nasion,
centros
pupilares,
nasolaterales. En la tabla Nº 33 mostramos las distancias entre los
diez puntos comparativos (reales) de las radiografías estudiadas.
160
DATOS DE LOS DIEZ PUNTOS COMPARATIVOS (REALES)
ANÁLISIS RADIOGRAFICA
SUBNASAL
SUBNAZALY ZIGUION SUPRAORBITAL
CENTROS
PUPILARES
Y
SUPRAORBI
ALTURA
SUJETOS ZIGUIONES TARIOS
DIAGONAL CUADRADO IZQUIERDA DERECHA
14,18
6,63
9,50
6,81
7,64
7,56
1
2
15,20
7,36
10,30
7,21
7,81
8,00
14,67
7,31
10,61
7,69
8,16
7,93
3
12,67
6,07
8,71
6,26
6,65
7,21
4
14,64
6,95
9,64
6,69
7,88
7,77
5
13,23
6,45
9,35
6,77
6,89
7,35
6
14,53
6,25
9,26
6,83
7,61
7,93
7
14,81
6,86
9,52
6,60
7,71
7,98
8
14,71
6,76
9,94
7,28
7,65
7,96
9
14,50
6,63
9,48
6,77
7,86
7,61
10
14,44
7,24
9,87
6,71
7,73
7,81
11
14,74
7,01
9,81
6,86
7,99
7,96
12
12,86
6,41
9,12
6,48
6,78
6,89
13
13,66
6,66
9,30
6,49
7,13
7,13
14
14,59
7,03
9,84
6,89
8,04
7,72
15
19,61
9,70
14,23
10,41
10,40
10,40
16
IZQUIERDA DERECHA
7,56
7,58
8,09
8,09
8,49
8,55
6,95
6,95
7,53
7,53
7,51
7,49
7,51
7,51
7,43
7,45
8,03
8,03
7,55
7,54
7,60
7,65
7,70
7,70
7,23
7,23
7,29
7,29
7,73
7,74
11,49
11,47
Y
NASOLATE NASION Y
RAL
SUBNASAL
3,90
5,64
4,31
5,79
3,81
6,70
3,38
5,35
3,85
5,18
3,39
5,53
3,47
5,73
3,93
5,47
3,99
6,37
3,62
5,41
3,85
5,56
3,94
5,70
3,94
5,25
3,50
5,10
3,91
5,82
6,40
9,14
Tabla 33.
(Los datos reflejados en la tabla están calculados en cm)
161
-
Análisis fotográfica- programa Adobe Photoshop:
a)
b)
d)
c)
e)
1. Seguimos los mismos pasos descritos anteriormente del análisis de
la radiografía, hasta el número 4.
2. Trazamos una línea vertical entre los puntos nasion y subnasal que
divide la cara generalmente en dos partes simétricas, ya que hay
caras asimétricas.
3. Después trazamos una línea entre los centros pupilares.
Seguidamente, seleccionamos la imagen y realizamos la rotación de
la fotografía hasta que los centros pupilares estén exactamente en la
misma línea horizontal. En el siguiente paso trazamos una línea
horizontal entre los puntos supraorbitários.
4. Luego, en las pupilas (derecha e izquierda) trazamos dos líneas
verticales (paralelas una con la otra) y perpendiculares a la línea
162
entre los puntos supraorbitarios. También trazamos una línea
horizontal teniendo como referencia el punto subnasal.
5. Con los trazados de estas líneas guías, horizontales entre los
puntos supraorbitarios y subnasal, verticales entre los centros
pupilares se forma un cuadrado.
6. Con este cuadrado, seguimos el mismo procedimiento del análisis
de la radiografía. Trazamos dos líneas diagonales (de color amarillo),
que nos facilita el determinar con precisión el punto central del
cuadrado y consecuentemente de la cara.
7. Utilizamos marcadores del programa Adobe Photoshop, de
diámetro 1mm, de color amarillo, para señalar cada esquina y el
punto central del cuadrado, juntamente con los siguientes puntos
anatómicos de referencia: subnasal, zigiones, nasion, centros
pupilares, supraorbitários y nasolaterales. También marcamos el
ángulo ocular medial.
A continuación en la tabla Nº 34 mostramos las distancias entre los
diez puntos comparativos (reales) de las fotografías estudiadas.
En el proceso de superposición siempre superponemos las fotografías
sobre las radiografías, por este motivo los datos de las radiografías
siempre son reales, en cambio, los datos de las fotografías (reales)
siempre hay que ajustarse proporcionalmente al tamaño real de la
radiografía. En la tabla Nº 35 mostramos los datos estadísticos de las
fotografías con los ajustes de las dimensiones de acuerdo con los
porcentajes. Las letras F y R que aparecen en la columna porcentaje
de ajuste de la tabla Nº 35 significan: en caso de ser F hay que
desminuir el tamaño de la fotografía; en caso de ser R hay que
aumentar el tamaño de la fotografía.
163
DATOS DE LOS DIEZ PUNTOS COMPARATIVOS (REALES)
ANÁLISIS FOTOGRAFÍCA
SUBNASAL
SUBNAZALY ZIGUION SUPRAORBITAL
Y
CENTROS
PUPILARES
Y
SUPRAORBI
ALTURA
NASION Y
DIAGONAL CUADRADO IZQUIERDA DERECHA IZQUIERDA DERECHA NASOLATERAL SUBNASAL
SUJETOS ZIGUIONES TARIOS
7,78
7,78
7,86
7,86
14,51
6,95
9,90
7,05
3,99
5,85
1
7,26
7,26
7,53
7,45
14,01
6,77
9,52
6,68
3,99
5,38
2
8,22
8,10
8,63
8,68
14,84
7,43
10,79
7,82
3,91
6,88
3
7,08
7,60
7,36
7,44
13,36
6,48
9,29
6,66
3,62
5,73
4
8,52
8,36
8,22
8,22
15,75
7,59
10,52
7,29
4,17
5,73
5
7,03
7,65
7,76
7,84
13,58
6,63
9,69
7,06
3,67
5,79
6
8,00
8,35
7,91
7,91
15,31
6,66
9,79
7,18
4,43
6,14
7
8,07
8,25
7,65
7,63
15,39
6,98
9,75
6,80
4,09
5,64
8
7,45
7,97
7,96
8,02
14,56
6,73
9,89
7,25
4,02
6,30
9
8,27
8,39
8,16
8,28
15,61
7,18
10,30
7,38
3,85
5,99
10
7,95
8,13
7,96
7,99
15,01
7,56
10,32
7,02
4,13
5,79
11
8,49
8,46
8,37
8,34
15,63
7,56
10,59
7,41
4,59
6,21
12
7,17
7,20
7,62
7,61
13,47
6,83
9,66
6,80
4,25
5,56
13
7,28
7,31
7,50
7,50
13,98
6,89
9,58
6,66
3,79
5,33
14
8,27
8,06
8,03
8,02
15,16
7,41
10,27
7,07
4,11
5,96
15
8,10
8,26
9,06
9,06
15,50
7,72
11,26
8,20
5,00
7,38
16
Tabla 34.
(Los datos reflejados en la tabla están calculados en cm)
Los datos de la tabla Nº 35 fueron conseguidos a través de ajustes
de los datos reales del análisis de las fotografías (tabla Nº 34), con
los datos de las radiografías (tabla Nº 33), teniendo como referencia
los puntos mas alejados de la cara “ziguiones” sin cambios de
proporciones entre ellos, calculando el porcentaje de ajuste para cada
sujeto.
EJEMPLO - CÁLCULO DEL PORCENTAJE DE AJUSTE: Sujeto Nº 1
14,51(Fot.Zy-Zy)----------------------100%
14,18(Rad.Zy-Zy)-----------------------X %
X=
14,18 x 100
=
14,51
97,72
El porcentaje de ajuste = 100%-97,72%=2,27%
¾ (Fot.Zy-Zy) Es la distancia entre los puntos ziguiones en la
fotografía;
¾ (Rad.Zy-Zy) Es la distancia entre los puntos ziguiones en la
radiografía;
164
DATOS ESTADÍSTICOS DE LAS FOTOGRAFÍAS CON AJUSTES DE
LAS DIMENSIONES DE ACUERDO CON LOS PORCENTAJES
SUBNASAL
SUBNAZALY ZIGUION SUPRAORBITAL
Y
CENTROS
PUPILARES
Y
SUPRAORBI
ALTURA
NASION Y PORCENTAJE
DIAGONAL CUADRADO IZQUIERDA DERECHA IZQUIERDA DERECHA NASOLATERAL SUBNASAL AJUSTE
SUJETOS ZIGUIONES TARIOS
2,27-F
14,18
6,79
9,68
6,89
7,60
7,60
7,68
7,68
3,90
5,72
1
8,50-R
15,20
7,35
10,33
7,25
7,88
7,88
8,17
8,08
4,33
5,84
2
1,14-F
14,67
7,35
10,67
7,73
8,13
8,01
8,53
8,58
3,87
6,80
3
5,16-F
12,67
6,15
8,81
6,32
6,71
7,21
6,98
7,06
3,43
5,43
4
7,04-F
14,64
7,06
9,78
6,78
7,92
7,77
7,64
7,64
3,88
5,33
5
2,57-F
13,23
6,46
9,44
6,88
6,85
7,45
7,56
7,64
3,58
5,64
6
5,09-F
14,53
6,32
9,29
6,81
7,59
7,92
7,51
7,51
4,20
5,83
7
3,76-F
14,81
6,72
9,38
6,54
7,77
7,94
7,36
7,34
3,94
5,43
8
1,03-R
14,71
6,80
9,99
7,32
7,53
8,05
8,04
8,10
4,06
6,36
9
7,11-F
14,50
6,67
9,57
6,86
7,68
7,79
7,58
7,69
3,58
5,56
10
3,79-F
14,44
7,27
9,93
6,75
7,65
7,82
7,66
7,69
3,97
5,57
11
5,69-F
14,74
7,13
9,99
6,99
8,01
7,98
7,89
7,87
4,33
5,86
12
4,52-F
12,86
6,52
9,22
6,49
6,85
6,87
7,28
7,27
4,06
5,31
13
2,28-F
13,66
6,73
9,36
6,51
7,11
7,14
7,33
7,33
3,70
5,21
14
3,75-F
14,59
7,13
9,88
6,80
7,96
7,76
7,73
7,72
3,96
5,74
15
26,50-R
19,61
9,77
14,24
10,37
10,25
10,45
11,46
11,46
6,33
9,34
16
Tabla 35.
(Los datos reflejados en la tabla están calculados en cm).
165
-
Superposición - programa Adobe Photoshop
a)
d)
b)
e)
c)
f)
1. Con las posibilidades del programa Adobe photoshop, ajustamos la
resolución y el tamaño de las imágenes de la radiografía y de la foto,
utilizando las dimensiones en píxeles y la resolución en
píxeles/pulgadas.
2. Para definir el coeficiente o factor de ampliación, utilizamos los
cuadrados y sus centros, tanto de la radiografía, como de la foto.
166
3. Superponemos la imagen de la foto sobre la radiografía, ajustando
el centro de la foto con el centro del cuadrado de la radiografía,
ampliando el tamaño de la foto, hasta que el cuadrado de la foto
coincida con el cuadrado de la radiografía. Con este procedimiento,
constatamos que el factor de ampliación es 100%.
4. Colocando la foto sobre la radiografía correspondiente a la misma
persona, las medidas serán idénticas, en caso de pertenecer a sujetos
distintos, las diferencias son tan extraordinarias que podemos afirmar
inmediatamente su desemejanza.
- Finalmente llegamos a la conclusión de que de las 66 fotos de los
sujetos investigados, solo 16 fotos coincidían con las radiografías
correspondientes, coincidiendo todos los marcadores-guía, lo que
quiere decir que habíamos conseguido llegar a la identificación.
- En el estudio realizado se han comparado TODAS las fotografías
con TODAS las radiografías. Como se usaron 66 fotografías y 16
radiografías, en total son 66 x 16 = 1056 comparaciones. Aunque se
han realizado todas las comparaciones, por razones obvias solo se
han incluido en el trabajo imágenes de los 16 casos de superposición
con resultado positivo (de la Pág. 171 a la Pág. 202) que aportan
información relevante y
también datos estadísticos de análisis
comparativos de estas superposiciones reflejados en la tabla Nº 36.
Los símbolos de la tabla Nº 36: F-1, F-2, R y M-ER
en la primera columna significan:
que aparecen
F-1: datos reales de la fotografía;
F-2: datos de las fotografías con ajustes de las dimensiones de
acuerdo con las proporciones en porcentajes;
R: datos reales de las radiografías;
M-ER: márgenes de errores calculados por la diferencia de F-2 y R.
167
DATOS ESTADÍSTICOS DEL ANALISIS COMPARATIVOS DE LAS
SUPERPOSICIONES POSITIVAS
SUBNAZALY ZIGUION SUBNASAL Y SUPRAORBITAL
CENTROS
PUPILARES
Y
SUPRAORBI
ALTURA
NASOLATE NASION Y PORCENTAJE
SUJETOS ZIGUIONES TARIOS
SUBNASAL AJUSTE
DIAGONAL CUADRADO IZQUIERDA DERECHA IZQUIERDA
DERECHA RAL
7,78
7,78
7,86
7,86
2,27-F
14,51
6,95
9,90
9,90
3,99
5,85
Nº1
F-1
7,60
7,60
7,68
7,68
14,18
6,79
9,68
6,89
3,90
5,72
F-2
14,18
6,63
9,5
6,81
7,64
7,56
7,56
7,58
3,9
5,64
R
M-ER
0,00
0,16
0,18
0,08
-0,04
0,04
0,12
0,10
0,00
0,08
Nº2
F-1
F-2
R
M-ER
14,01
15,20
15,20
0,00
6,77
7,35
7,36
-0,01
9,52
10,33
10,30
0,03
6,68
7,25
7,21
0,04
7,26
7,88
7,81
0,07
7,26
7,88
8,00
-0,12
7,53
8,17
8,09
0,08
7,45
8,08
8,09
-0,01
3,99
4,33
4,31
0,02
5,38
5,84
5,79
0,05
8,50-R
Nº3
F-1
F-2
R
M-ER
14,84
14,67
14,67
0,00
7,43
7,35
7,31
0,04
10,79
10,67
10,61
0,06
7,82
7,73
7,69
0,04
8,22
8,13
8,16
-0,03
8,10
8,01
7,93
0,08
8,63
8,53
8,49
0,04
8,68
8,58
8,55
0,03
3,91
3,87
3,81
0,06
6,88
6,80
6,7
0,10
1,14-F
Nº4
F-1
F-2
R
M-ER
13,36
12,67
12,67
0,00
6,48
6,15
6,07
0,08
9,29
8,81
8,71
0,10
6,66
6,32
6,26
0,06
7,08
6,71
6,65
0,06
7,60
7,21
7,21
0,00
7,36
6,98
6,95
0,03
7,44
7,06
6,95
0,11
3,62
3,43
3,38
0,05
5,73
5,43
5,35
0,08
5,16-F
Nº5
F-1
F-2
R
M-ER
15,75
14,64
14,64
0,00
7,59
7,06
6,95
0,11
10,52
9,78
9,64
0,14
7,29
6,78
6,69
0,09
8,52
7,92
7,88
0,04
8,36
7,77
7,77
0,00
8,22
7,64
7,53
0,11
8,22
7,64
7,53
0,11
4,17
3,88
3,85
0,03
5,73
5,33
5,18
0,15
7,04-F
Nº6
F-1
F-2
R
M-ER
13,58
13,23
13,23
0,00
6,63
6,46
6,45
0,01
9,69
9,44
9,35
0,09
7,06
6,88
6,77
0,11
7,03
6,85
6,89
-0,04
7,65
7,45
7,35
0,10
7,76
7,56
7,51
0,05
7,84
7,64
7,49
0,15
3,67
3,58
3,39
0,19
5,79
5,64
5,53
0,11
2,57-F
Nº7
F-1
F-2
R
M-ER
15,31
14,53
14,53
0,00
6,66
6,32
6,25
0,07
9,79
9,29
9,26
0,03
7,18
6,81
6,83
-0,02
8,00
7,59
7,61
-0,02
8,35
7,92
7,93
-0,01
7,91
7,51
7,51
0,00
7,91
7,51
7,51
0,00
4,43
4,20
3,47
0,73
6,14
5,83
5,73
0,10
5,09-F
Nº8
F-1
F-2
R
M-ER
15,39
14,81
14,81
0,00
6,98
6,72
6,86
-0,14
9,75
9,38
9,52
-0,14
6,80
6,54
6,6
-0,06
8,07
7,77
7,71
0,06
8,25
7,94
7,98
-0,04
7,65
7,36
7,43
-0,07
7,63
7,34
7,45
-0,11
4,09
3,94
3,93
0,01
5,64
5,43
5,47
-0,04
3,76-F
Nº9
F-1
F-2
R
M-ER
14,56
14,71
14,71
0,00
6,73
6,80
6,76
0,04
9,89
9,99
9,94
0,05
7,25
7,32
7,28
0,04
7,45
7,53
7,65
-0,12
7,97
8,05
7,96
0,09
7,96
8,04
8,03
0,01
8,02
8,10
8,03
0,07
4,02
4,06
3,99
0,07
6,30
6,36
6,37
-0,01
1,03-R
Nº10
F-1
F-2
R
M-ER
15,61
14,50
14,50
0,00
7,18
6,67
6,63
0,04
10,30
9,57
9,48
0,09
7,38
6,86
6,77
0,09
8,27
7,68
7,86
-0,18
8,39
7,79
7,61
0,18
8,16
7,58
7,55
0,03
8,28
7,69
7,54
0,15
3,85
3,58
3,62
-0,04
5,99
5,56
5,41
0,15
7,11-F
Nº11
F-1
F-2
R
M-ER
15,01
14,44
14,44
0,00
7,56
7,27
7,24
0,03
10,32
9,93
9,87
0,06
7,02
6,75
6,71
0,04
7,95
7,65
7,73
-0,08
8,13
7,82
7,81
0,01
7,96
7,66
7,6
0,06
7,99
7,69
7,65
0,04
4,13
3,97
3,85
0,12
5,79
5,57
5,56
0,01
3,79-F
Nº12
F-1
F-2
R
M-ER
15,63
14,74
14,74
0,00
7,56
7,13
7,01
0,12
10,59
9,99
9,81
0,18
7,41
6,99
6,86
0,13
8,49
8,01
7,99
0,02
8,46
7,98
7,96
0,02
8,37
7,89
7,70
0,19
8,34
7,87
7,70
0,17
4,59
4,33
3,94
0,39
6,21
5,86
5,70
0,16
5,69-F
168
Nº13
F-1
F-2
R
M-ER
13,47
12,86
12,86
0,00
6,83
6,52
6,41
0,11
9,66
9,22
9,12
0,10
6,80
6,49
6,48
0,01
7,17
6,85
6,78
0,07
7,20
6,87
6,89
-0,02
7,62
7,28
7,23
0,05
7,61
7,27
7,23
0,04
4,25
4,06
3,94
0,12
5,56
5,31
5,25
0,06
4,52-F
Nº14
F-1
F-2
R
M-ER
13,98
13,66
13,66
0,00
6,89
6,73
6,66
0,07
9,58
9,36
9,30
0,06
6,66
6,51
6,49
0,02
7,28
7,11
7,13
-0,02
7,31
7,14
7,13
0,01
7,50
7,33
7,29
0,04
7,50
7,33
7,29
0,04
3,79
3,70
3,50
0,20
5,33
5,21
5,10
0,11
2,28-F
Nº15
F-1
F-2
R
M-ER
15,16
14,59
14,59
0,00
7,41
7,13
7,03
0,10
10,27
9,88
9,84
0,04
7,07
6,80
6,89
-0,09
8,27
7,96
8,04
-0,08
8,06
7,76
7,72
0,04
8,03
7,73
7,73
0,00
8,02
7,72
7,74
-0,02
4,11
3,96
3,91
0,05
5,96
5,74
5,82
-0,08
3,75-F
Nº16
F-1
F-2
R
M-ER
15,50
19,61
19,61
0,00
7,72
9,77
9,7
0,07
11,26
14,24
14,23
0,01
8,20
10,37
10,41
-0,04
8,10
10,25
10,4
-0,15
8,26
10,45
10,4
0,05
9,06
11,46
11,49
-0,03
9,06
11,46
11,47
-0,01
5,00
6,33
6,4
-0,08
7,38
9,34
9,14
0,20
26,50-R
Tabla 36.
(Los datos reflejados en la tabla están calculados en cm).
169
170
Superposición—nº1
171
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot.sujeto1
8,00
Rad.sujeto1
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 1.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 1
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto1
6,00
Rad. sujeto1
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto1
6
7
8
Fot. sujeto1
9
10
Grafico 2.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 1
172
Superposición— nº2
173
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto2
8,00
Rad. sujeto2
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 3.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 2
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto2
6,00
Rad. sujeto2
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto2
6
7
8
Fot. sujeto2
9
10
Grafico 4.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 2
174
Superposición— nº3
175
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto3
8,00
Rad. sujeto3
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 5.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 3
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto3
6,00
Rad. sujeto3
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto3
6
7
8
Fot. sujeto3
9
10
Grafico 6.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 3
176
Superposición— nº4
177
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
Fot. sujeto4
Rad. sujeto4
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 7.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 4
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
6,00
Fot. sujeto4
Rad. sujeto4
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto4
6
7
8
Fot. sujeto4
9
10
Grafico 8.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 4
178
Superposición— nº5
179
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto5
8,00
Rad. sujeto5
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 9.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 5
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto5
6,00
Rad. sujeto5
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto5
6
7
8
Fot. sujeto5
9
10
Grafico 10.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 5
180
Superposición— nº6
181
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
Fot. sujeto6
Rad. sujeto6
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 11.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 6
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
6,00
Fot. sujeto6
Rad. sujeto6
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto6
6
7
8
Fot. sujeto6
9
10
Grafico 12.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 6
182
Superposición— nº7
183
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto7
8,00
Rad. sujeto7
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 13.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 7
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto7
6,00
Rad. sujeto7
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto7
6
7
8
Fot. sujeto7
9
10
Grafico 14.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 7
184
Superposición— nº8
185
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto8
8,00
Rad. sujeto8
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 15.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 8
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto8
6,00
Rad. sujeto8
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto8
6
7
8
Fot. sujeto8
9
10
Grafico 16.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 8
186
Superposición— nº9
187
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto9
8,00
Rad. sujeto9
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 17.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 9
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto9
6,00
Rad. sujeto9
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto9
6
7
8
Fot. sujeto9
9
10
Grafico 18.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 9
188
Superposición— nº10
189
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot.sujeto10
8,00
Rad.sujeto10
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 19.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 10
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot.sujeto10
6,00
Rad.sujeto10
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad.sujeto10
6
7
8
Fot.sujeto10
9
10
Grafico 20.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 10
190
Superposición— nº11
191
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto11
8,00
Rad. sujeto11
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 21.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 11
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto11
6,00
Rad. sujeto11
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto11
6
7
8
Fot. sujeto11
9
10
Grafico 22.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 11
192
Superposición— nº12
193
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto12
8,00
Rad. sujeto12
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 23.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 12
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto12
6,00
Rad. sujeto12
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto12
6
7
8
Fot. sujeto12
9
10
Grafico 24.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 12
194
Superposición— nº13
195
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
Fot. sujeto13
Rad. sujeto13
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 25.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 13
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
6,00
Fot. sujeto13
Rad. sujeto13
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto13
6
7
8
Fot. sujeto13
9
10
Grafico 26.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 13
196
Superposición— nº14
197
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto14
8,00
Rad. sujeto14
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 27.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 14
14,00
12,00
10,00
8,00
(CM)
6,00
Fot. sujeto14
Rad. sujeto14
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto14
6
7
8
Fot. sujeto14
9
10
Grafico 28.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 14
198
Superposición— nº15
199
16,00
14,00
12,00
(CM)
10,00
Fot. sujeto15
8,00
Rad. sujeto15
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 29.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 15
16,00
14,00
12,00
10,00
(CM)
8,00
Fot. sujeto15
6,00
Rad. sujeto15
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto15
6
7
8
Fot. sujeto15
9
10
Grafico 30.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 15
200
Superposición— nº16
201
25,00
20,00
15,00
(CM)
Fot. sujeto16
Rad. sujeto16
10,00
5,00
0,00
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
PUNTOS
Grafico 31.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 16
20,00
18,00
16,00
14,00
12,00
(CM) 10,00
Fot. sujeto16
8,00
Rad. sujeto16
6,00
4,00
2,00
0,00
1
2
3
4
5
PUNTOS
Rad. sujeto16
6
7
8
Fot. sujeto16
9
10
Grafico 32.
Comparación puntos: radiografía-fotografía sujeto 16
202
- De acuerdo con los datos estadísticos obtenidos en nuestra
investigación (tabla Nº 36) podemos afirmar que los resultados
conseguidos de la comparación entre los puntos definidos en la cara y
radiografía de cada sujeto y la correlación entre los mismos (en total
160 pares de puntos), están dentro del margen de error, inicialmente
propuesta por nosotros en la metodología de nuestro trabajo (
margen de error 3 mm) y posteriormente definida como 2 mm por
cálculos estadísticos realizados a través de la curva ROC (Receiver
Operator Characteristic Curve) considerando como punto de corte
universal, salvo en dos pares de puntos, que corresponden a dos
sujetos: sujeto nº 7 (puntos nasolaterales) y sujeto nº 12 (puntos
nasolaterales). La explicación es que los dos sujetos investigados
presentan deformación de la nariz. Estos son los dos únicos puntos
(nasolaterales) que tienen la probabilidad de variar el margen de
error en el momento de la comparación radiografía/fotografía, incluso
sobrepasar este margen, por alguna deformación en la nariz del
sujeto obtenida por factores externos y no genéticos. Además es un
factor positivo para el diagnóstico preciso en el momento de
superposición, ya que en la foto aparentemente se ve la deformación
de la nariz y tiene el mismo valor de evaluación como ocurre en los
estudios de superposición de caras asimétricas. La cara asimétrica es
considerada un signo fidedigno en el proceso de superposición para el
diagnóstico negativo o positivo.
7.2.1. Método estadístico
Antes de todo haremos un breve resumen del método descrito
anteriormente sobre el análisis de la radiografía y fotografía, así como
también del proceso de superposición.
Es importante resaltar que para hacer las superposiciones de las
radiografías con las fotografías hay que seguir algunos pasos
preliminares tales como:
-
La marcación precisa de los puntos anatómicos de referencia en
la fotografía y radiografía;
Hacer los debidos ajustes dimensionales de la radiografía y
fotografía (definir el coeficiente del factor de ampliación);
Buscar la correlación precisa entre las distancias de los puntos
anatómicos en la radiografía y fotografía.
Para evitar cualquier equivocación no nos hemos basado solamente
en un caso en concreto sí no hemos estudiado varios superposiciones
con el propósito de describir exactamente las distancias entre
radiografía y fotografía, calculando la media y la desviación típica.
Como hemos mencionado anteriormente en la metodología, por
razones obvias, solo hemos incluido en el trabajo 16 casos de
203
superposiciones positivas y por esta razón, para los casos de
identificación no correcta, en el trabajo hemos utilizado los datos
comparativos entre estos 16 casos que en total son 136
comparaciones de la cual 16 eran identificaciones correctas y 120
identificaciones no correctas. (Tabla 37).
La explicación de los
ajustes proporcionales de las medidas radiográficas con las
correspondientes medidas fotográficas descritas anteriormente en la
metodología la hemos utilizado para definir el margen de error (Puno
de Corte Universal) para cada par de puntos de los sujetos
estudiados.
Para evaluar la capacidad de asignación de cada una de las 9/10
medidas hemos superpuesto la radiografía y la fotografía ampliada
de la cara de varios individuos y en para cada uno se han medido las
diferencias observadas entre las marcas de la radiografía y de la
fotografía ampliada correspondiente. Este proceso se ha repetido
para pares de radiografía-fotografía ampliada que corresponden a
individuos diferentes.
Los datos reflejados en la tabla Nº 37 están calculados en cm; los
primeros 16 casos son comparaciones de los 16 sujetos, las
radiografías
con sus fotografías correspondientes
denominadas
como “identificación correcta”, los casos siguientes son las
comparaciones de cada sujeto, las radiografías con las fotografías de
diferentes personas, denominadas como “identificación no correcta”.
204
SUBNAZALY ZIGUION
CENTROS
PUPILARES
Y
SUPRAORBI
ALTURA
DIAGONAL CUADRADO IZQUIERDA DERECHA
ZIGUIONES TARIOS
0,00
0,16
0,18
0,08
0,04
0,04
0,00
0,01
0,03
0,04
0,07
0,12
0,00
0,04
0,06
0,04
0,03
0,08
0,00
0,08
0,10
0,06
0,06
0,00
0,00
0,11
0,14
0,09
0,04
0,00
0,00
0,01
0,09
0,11
0,04
0,10
0,00
0,07
0,03
0,02
0,02
0,01
0,00
0,14
0,14
0,06
0,06
0,04
0,00
0,04
0,05
0,04
0,12
0,09
0,00
0,04
0,09
0,09
0,18
0,18
0,00
0,03
0,06
0,04
0,08
0,01
0,00
0,12
0,18
0,13
0,02
0,02
0,00
0,11
0,10
0,01
0,07
0,02
0,00
0,07
0,06
0,02
0,02
0,01
0,00
0,10
0,04
0,09
0,08
0,04
0,00
0,07
0,01
0,04
0,15
0,05
0,00
0,22
0,14
0,05
0,29
0,21
0,00
0,47
0,81
0,66
0,22
0,18
0,00
0,25
0,36
0,26
0,12
0,51
0,00
0,20
0,03
0,25
0,03
0,03
0,00
0,29
0,62
0,56
0,30
0,43
0,00
0,46
0,43
0,16
0,23
0,17
0,00
0,20
0,52
0,54
0,20
0,04
0,00
0,07
0,13
0,25
0,38
0,20
0,00
0,11
0,14
0,11
0,13
0,06
0,00
0,51
0,25
0,18
0,13
0,12
0,00
0,23
0,11
0,09
0,06
0,11
0,00
0,56
0,67
0,35
0,09
0,02
0,00
0,36
0,22
0,06
0,26
0,15
0,00
0,30
0,11
0,20
0,10
0,02
0,00
0,43
0,80
0,69
0,23
0,00
0,00
0,25
0,75
0,80
0,61
0,29
0,00
0,01
0,27
0,37
0,24
0,65
0,00
0,03
0,15
0,17
0,41
0,07
0,00
0,06
0,55
0,69
0,06
0,56
0,00
0,75
0,58
0,08
0,13
0,29
0,00
0,47
0,67
0,49
0,16
0,15
0,00
0,33
0,02
0,36
0,03
0,32
0,00
0,37
0,27
0,02
0,24
0,17
0,00
0,29
0,15
0,10
0,24
0,23
0,00
0,01
0,00
0,00
0,45
0,23
0,00
0,35
0,60
0,46
0,28
0,13
0,00
0,13
0,12
0,03
0,11
0,05
0,00
0,07
0,00
0,12
0,48
0,08
0,00
0,21
0,74
0,83
0,13
0,10
0,00
0,20
0,41
0,38
0,39
0,41
0,00
0,24
0,81
0,90
0,22
0,14
0,00
0,15
0,14
0,07
0,57
0,33
0,00
0,93
1,23
0,81
0,49
0,07
0,00
0,66
1,32
1,21
0,47
0,07
0,00
0,53
0,65
0,39
0,65
0,10
0,00
0,56
0,93
0,75
0,39
0,05
0,00
0,08
0,52
0,83
0,39
0,02
0,00
0,21
0,67
0,73
0,19
0,01
0,00
0,13
0,09
0,28
0,35
0,09
0,00
0,08
0,56
0,70
0,52
0,26
0,00
0,14
0,67
0,85
0,16
0,13
0,00
0,00
0,05
0,07
0,49
0,11
0,00
0,04
0,25
0,40
0,20
0,48
0,00
0,12
0,33
0,33
0,09
0,07
0,00
0,56
0,61
0,32
0,03
0,30
0,00
0,32
0,68
0,66
0,01
0,42
0,00
0,21
0,10
0,05
0,17
0,27
0,00
0,24
0,35
0,27
0,06
0,40
0,00
0,31
0,00
0,33
0,06
0,35
0,00
0,06
0,12
0,25
0,23
0,35
0,00
0,35
0,38
0,14
0,09
0,44
0,00
0,17
0,03
0,22
0,05
0,58
0,00
0,12
0,13
0,35
0,26
0,48
0,00
0,24
0,50
0,44
0,03
0,46
SUBNASAL Y SUPRAORBITAL
IZQUIERDA
0,12
0,08
0,04
0,03
0,11
0,05
0,00
0,07
0,01
0,03
0,06
0,19
0,05
0,04
0,00
0,03
0,06
0,69
0,25
0,16
0,54
0,23
0,51
0,19
0,15
0,04
0,03
0,46
0,05
0,05
0,73
0,75
0,28
0,16
0,60
0,24
0,53
0,22
0,14
0,03
0,05
0,51
0,07
0,04
0,80
0,41
0,83
0,11
0,91
1,20
0,47
0,82
0,71
0,63
0,19
0,62
0,72
0,09
0,34
0,29
0,40
0,65
0,02
0,33
0,23
0,16
0,22
0,15
0,24
0,46
DERECHA
0,10
0,01
0,03
0,11
0,11
0,15
0,00
0,11
0,07
0,15
0,04
0,17
0,04
0,04
0,02
0,01
0,04
0,71
0,32
0,18
0,61
0,25
0,55
0,23
0,06
0,03
0,02
0,43
0,03
0,08
0,71
0,80
0,37
0,16
0,69
0,24
0,55
0,28
0,03
0,00
0,02
0,50
0,07
0,05
0,80
0,38
0,89
0,08
0,97
1,28
0,47
0,77
0,74
0,72
0,26
0,68
0,79
0,03
0,34
0,36
0,40
0,67
0,03
0,23
0,20
0,19
0,21
0,15
0,25
0,46
NASOLATE NASION Y
RAL
SUBNASAL
0,00
0,08
sujeto-1
0,02
0,05
sujeto-2
0,06
0,10
sujeto-3
0,05
0,08
sujeto-4
0,03
0,15
sujeto-5
0,19
0,11
sujeto-6
0,73
0,10
sujeto-7
0,01
0,04
sujeto-8
0,07
0,01
sujeto-9
0,04
0,15
sujeto-10
0,12
0,01
sujeto-11
0,39
0,16
sujeto-12
0,12
0,06
sujeto-13
0,20
0,11
sujeto-14
0,05
0,08
sujeto-15
0,08
0,20
sujeto-16
0,14
0,19
RA-sujeto-1
0,16
0,93
0,06
0,44
0,15
0,48
0,07
0,41
0,20
0,05
0,13
0,44
0,02
0,50
0,40
0,20
0,00
0,17
0,26
0,01
0,58
0,21
0,06
0,23
0,06
0,07
0,67
1,11
0,31
1,26
RA-sujeto-2
0,19
0,73
0,29
0,26
0,20
0,69
0,09
0,31
0,27
0,22
0,11
0,79
0,56
0,04
0,13
0,07
0,15
0,25
0,49
0,49
0,19
0,01
0,19
0,19
0,59
1,45
0,16
0,41
RA-sujeto-3
0,07
1,36
0,15
0,45
0,43
0,82
0,09
1,32
0,24
0,35
0,19
1,07
0,23
1,04
0,50
0,87
0,82
0,65
0,17
1,11
0,17
0,93
0,92
0,29
0,03
0,74
RA-sujeto-4
0,04
0,05
0,29
0,27
0,01
0,71
0,12
0,13
0,25
0,49
0,11
0,46
0,34
0,32
0,62
0,12
0,05
0,52
0,05
0,37
0,71
0,68
205
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,00
0,20
0,58
0,31
0,18
0,22
0,42
0,13
0,47
0,26
0,21
0,34
0,69
0,45
0,33
0,36
0,21
0,05
0,26
0,07
0,02
0,14
0,34
0,47
0,43
1,07
0,78
1,12
0,91
0,85
0,99
0,02
0,05
0,60
0,30
0,65
0,44
0,38
0,52
0,01
0,65
0,36
0,70
0,49
0,43
0,57
0,67
0,38
0,72
0,52
0,46
0,59
0,26
0,08
0,12
0,18
0,05
0,46
0,25
0,19
0,33
0,07
0,12
0,00
0,02
0,14
0,24
0,81
0,28
0,36
0,30
0,02
0,43
0,28
0,86
0,39
0,28
1,00
0,89
0,97
0,36
0,62
0,25
0,39
0,14
0,28
0,39
0,26
0,05
0,61
0,33
0,73
0,59
1,16
0,69
0,58
1,30
0,54
0,25
0,66
0,52
1,10
0,63
0,51
1,24
0,23
0,17
0,03
0,61
0,14
0,03
0,75
0,49
0,35
0,92
0,46
0,34
1,05
0,09
0,49
0,03
0,09
0,62
0,76
0,29
0,18
0,90
0,31
0,41
0,22
0,05
0,62
0,76
0,92
0,18
0,22
0,60
0,23
0,16
0,25
0,70
0,28
0,14
1,06
0,57
0,92
0,18
0,51
0,58
0,50
0,09
0,47
0,60
0,23
0,41
0,41
0,04
0,03
0,06
0,50
0,09
0,05
0,86
0,77
0,40
0,33
0,42
0,88
0,46
0,31
1,24
0,33
0,40
0,31
0,15
0,27
0,42
0,50
0,01
0,10
0,55
0,14
0,01
0,90
0,14
0,58
0,17
0,02
0,93
0,58
0,16
0,01
0,94
0,35
0,48
0,32
0,12
0,74
0,83
0,30
0,23
0,20
0,39
0,12
0,13
0,07
0,09
0,26
0,11
0,23
0,02
0,05
0,12
0,12
0,12
0,30
0,15
0,00
0,33
0,02
0,01
0,17
0,09
0,09
0,28
0,12
0,05
0,32
0,02
0,13
0,14
0,13
0,34
0,17
0,00
0,37
0,03
0,14
0,14
0,34
0,18
0,01
0,38
0,04
0,18
0,02
0,14
0,31
0,05
0,28
0,11
0,04
0,21
0,15
0,18
0,14
0,31
0,05
0,29
0,08
0,24
0,06
0,32
0,01
0,42
0,48
0,22
0,08
0,24
0,10
0,16
0,15
0,06
0,12
0,01
0,03
0,13
0,26
0,11
0,24
0,18
0,19
0,28
0,43
0,32
0,30
0,14
0,02
0,12
0,06
0,06
0,16
0,33
0,20
0,19
0,13
0,02
0,04
0,04
0,06
0,24
0,11
0,09
0,05
0,01
0,00
0,10
0,27
0,14
0,12
0,24
0,24
0,14
0,03
0,10
0,12
0,01
0,09
0,26
0,13
0,11
0,08
0,25
0,12
0,10
0,17
0,05
0,04
0,13
0,15
0,06
0,84
0,03
0,25
0,47
0,12
0,23
0,31
0,75
0,32
0,22
1,03
0,67
0,93
0,28
0,59
0,49
0,42
0,03
0,41
0,50
0,22
0,29
0,43
0,09
0,20
0,27
0,71
0,28
0,19
0,98
0,67
0,31
0,42
0,50
0,95
0,52
0,42
1,23
0,34
0,23
0,15
0,29
0,14
0,24
0,57
0,14
0,22
0,65
0,23
0,13
0,93
0,13
0,57
0,15
0,05
0,84
0,64
0,21
0,11
0,92
0,33
0,42
0,29
0,05
0,69
0,80
0,92
0,03
0,27
0,53
0,24
0,26
0,28
0,74
0,32
0,21
1,03
0,65
0,93
0,20
0,47
0,45
0,43
0,02
0,39
0,49
0,24
0,31
0,49
0,20
0,23
0,24
0,70
0,28
0,18
0,98
0,71
0,41
0,43
0,45
0,92
0,50
0,39
1,21
0,23
0,20
0,18
0,28
0,14
0,25
0,57
0,18
0,20
0,65
0,24
0,13
0,94
0,06
0,51
0,10
0,01
0,79
0,63
0,21
0,10
0,92
0,33
0,43
0,29
0,06
0,69
0,79
0,11
0,39
0,04
0,19
0,24
0,18
0,45
0,77
0,12
0,12
0,87
0,44
0,13
0,26
0,13
0,25
0,50
0,78
0,20
0,20
0,88
0,39
0,54
0,11
0,53
0,80
1,11
0,47
0,47
1,22
0,16
0,28
0,15
0,42
0,74
0,09
0,09
0,85
0,36
0,06
0,33
0,65
0,00
0,00
0,76
0,37
0,64
0,95
0,31
0,31
1,06
0,39
0,71
0,06
0,07
0,81
0,71
0,06
0,06
0,82
0,45
0,45
0,21
0,20
0,91
0,80
1,06
0,69
0,19
1,15
0,44
0,47
0,64
0,86
0,40
0,58
1,79
0,22
0,68
0,19
0,45
0,43
0,27
0,07
0,49
0,33
0,77
0,40
0,56
0,15
0,12
0,04
0,27
0,19
0,02
1,19
0,94
0,21
0,24
0,41
0,64
0,18
0,35
1,58
0,73
0,70
0,53
0,30
0,76
0,59
0,63
0,18
0,35
0,57
0,12
0,29
1,49
0,18
0,40
0,05
0,12
1,32
0,38
0,08
0,09
1,32
0,35
0,19
0,87
0,27
1,40
1,13
RA-sujeto-5
RA-sujeto-6
RA-sujeto-7
RA-sujeto-8
RA-sujeto-9
RA-sujeto-10
RA-sujeto-11
RA-sujeto-12
RA-sujeto-13
RA-sujeto-14
RA-sujeto-15
RA-sujeto-16
Tabla 37.
(Los datos reflejados en la tabla están calculados en cm).
Como hemos mencionado anteriormente a los pares de radiografíafotografía ampliada correspondientes a la misma persona le
206
denominamos “identificación correcta” y a los pares de individuos
diferentes “identificación no correcta”.
Para medir la capacidad de cada medida para identificar
correctamente la fotografía ampliada se calcula la sensibilidad y la
especificidad para cada uno de los valores que toma la variable
distancia entre pares o marcas semejantes de la radiografía y la
fotografía ampliada. Se define sensibilidad como el % de pares en
que radiografía y las fotografías son de la misma persona que se
identifican correctamente si la distancia medida es menor de un
valor dado. Se define especificidad como el % de pares en que
radiografía y las fotografías son de distintas personas que se
identifican no correctamente si la distancia medida es mayor de
un valor dado. La generalización a estas situaciones se consigue
mediante la elección de distintos valores de corte, en nuestro caso
como hemos observado o medido, que permitan una clasificación
dicotómica de los valores de la prueba según sean superiores o
inferiores al valor elegido. Con la serie de valores de sensibilidad y
especificidad calculados para cada punto de corte se construye la
curva ROC (Receiver Operator Characteristic Curve).
Con estos valores se puede dibujar la curva ROC (Receiver Operating
Characteristic) que permite representar las repercusiones de la
selección del umbral (punto de corte) respecto la sensibilidad y la
especificidad. En las abscisas del gráfico se pone para cada valor
especificidad (1- Especificidad) y en las ordenadas la sensibilidad. Si
la curva ROC es la diagonal, la herramienta o el protocolo no es
informativo (el área bajo la curva es ½). Un umbral es ideal si
permite separar totalmente los pares de los mismos individuos y los
de distintos individuos, es decir, si la sensibilidad y la especificidad
es 1. En general el criterio para saber si la curva ROC encontrada
permite separar satisfactoriamente las observaciones 1 y 0 es el
siguiente (Tabla 38):
Área bajo la curva
0.90-1.00
0.80-0.90
0.70-0.80
0.60-0.70
0.50-0.60
Capacidad predictiva del
modelo
Excelente
Buena
Media
Mala
Muy mala
Tabla 38. Criterio de satisfacción de la curva ROC
La mayor exactitud diagnóstica de una prueba se traduce en un
desplazamiento "hacia arriba y a la izquierda" de la curva ROC.
207
Esto sugiere que el área bajo la curva ROC (ABC) se puede emplear
como un índice conveniente de la exactitud global de la prueba: la
exactitud máxima correspondería a un valor de ABC de 1 y la mínima
a uno de 0.5 (si fuera menor de 0.5 debería invertirse el criterio de
positividad de la prueba).
En nuestro caso hemos evaluado la capacidad de discriminar entre los
dos grupos de cada variable y posteriormente hemos usado el mismo
procedimiento para identificar el número de medidas que se debe
tener en cuenta para maximizar el acierto de la asignación de la
ampliación de fotografía a la radiografía.
VALIDACIÓN DE LOS PUNTOS ANATÓMICOS DE REFERENCIA
Validación de la capacidad de las diferentes medidas para signar
correctamente las radiografías a las fotografías de las caras
correspondientes.
ZIGUIONES
CENTROS PUPILARES Y SUPRAORBITARIOS
DIAGONAL
ALTURA CUADRADO
SUBNASALY ZIGUION IZQUIERDA
SUBNASALY ZIGUION DERECHA
SUBNASAL Y SUPRAORBITAL IZQUIERDA
SUBNASAL Y SUPRAORBITAL DERECHA
NASOLATERAL
NASION Y SUBNASAL
208
Coordenadas de la curva: ZIGUIONES
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
,0000
,0000
,0000
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0001
,0002
,0002
,0002
,0002
,0002
,0002
,0003
,0003
,0003
,0003
,0003
,0003
,0003
,0004
,0004
,0005
,0005
,0005
,0006
,0006
,0006
,0006
,0006
,0006
,0006
,0006
,0006
,0007
,0007
,0007
,0007
,0007
,0007
,0008
,0008
,0008
,0008
,063
,063
,125
,125
,125
,125
,125
,125
,125
,125
,125
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,250
,313
,313
,375
,375
,375
,375
,375
,438
,438
,438
,438
,438
1 - Especificidad
,000
,008
,008
,017
,025
,033
,042
,050
,058
,067
,075
,075
,083
,092
,108
,117
,125
,133
,142
,150
,167
,175
,183
,192
,200
,208
,217
,225
,233
,242
,250
,258
,267
,275
,283
,292
,300
,308
,308
,308
,317
,317
,325
,342
,350
,358
,358
,367
,375
,383
,392
209
,0008
,0008
,0008
,0008
,0008
,0009
,0009
,0009
,0009
,0009
,0009
,0009
,0009
,0010
,0010
,0010
,0010
,0010
,0010
,0010
,0011
,0011
,0011
,0011
,0011
,0011
,0012
,0012
,0012
,0012
,0012
,0012
,0012
,0012
,0012
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0013
,0014
,0014
,0014
,0014
,0014
,0015
,0015
,0016
,438
,438
,438
,438
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,563
,563
,563
,563
,563
,625
,625
,625
,625
,688
,688
,688
,688
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
,400
,408
,417
,425
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,475
,483
,492
,500
,508
,517
,525
,525
,533
,542
,550
,558
,558
,567
,575
,583
,583
,592
,600
,608
,608
,617
,625
,633
,642
,658
,658
,667
,675
,683
,700
,708
,717
,725
,725
,733
,742
,750
,758
,767
,775
,783
,792
,792
,800
210
,0017
,0019
,0019
,0021
,0022
,0023
,0023
,0024
,0025
,0026
,0027
,0029
,0030
,0032
,0035
,0036
,0037
,0038
,0039
,0039
,0043
,0047
,0047
,0049
1,0050
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,858
,867
,875
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 39.
211
Coordenadas de la curva: CENTROS PUPILARES Y
SUPRAORBITARIOS
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
,0039
,0056
,0072
,0088
,0103
,0128
,0151
,0161
,0169
,0253
,0342
,0351
,0357
,0377
,0394
,0434
,0478
,0494
,0547
,0599
,0634
,0675
,0700
,0709
,0714
,0724
,0739
,0753
,0774
,0805
,0821
,0923
,1039
,1067
,1095
,1135
,1178
,1204
,1222
,1237
,1260
,1297
,1325
,1365
,1396
,1411
,1430
,1466
,1559
,1683
,000
,000
,000
,000
,063
,063
,125
,125
,125
,125
,188
,188
,250
,250
,313
,375
,375
,375
,375
,375
,375
,438
,438
,438
,500
,500
,563
,563
,625
,625
,625
,625
,688
,750
,750
,813
,813
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
,938
1,000
1 - Especificidad
,008
,017
,025
,033
,033
,042
,042
,050
,058
,067
,067
,075
,075
,083
,083
,083
,092
,100
,108
,117
,125
,125
,133
,142
,142
,150
,150
,158
,158
,167
,175
,183
,183
,183
,192
,192
,200
,200
,208
,217
,225
,233
,242
,250
,258
,267
,267
,275
,283
,283
212
,1778
,1824
,1892
,1955
,1974
,1992
,2019
,2049
,2084
,2123
,2138
,2142
,2150
,2196
,2251
,2319
,2384
,2405
,2415
,2452
,2484
,2513
,2547
,2569
,2611
,2781
,2934
,2979
,3026
,3069
,3110
,3178
,3275
,3331
,3345
,3375
,3414
,3453
,3517
,3552
,3563
,3607
,3662
,3738
,3819
,4041
,4273
,4318
,4334
,4369
,4446
,4535
,4596
,4624
,4646
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,292
,300
,308
,317
,325
,333
,342
,350
,358
,367
,375
,383
,392
,400
,408
,417
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,475
,483
,492
,500
,508
,517
,525
,533
,542
,550
,558
,567
,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
213
,4662
,4683
,4722
,4830
,5022
,5142
,5160
,5233
,5442
,5601
,5621
,5646
,5740
,5866
,5958
,6245
,6496
,6528
,6648
,6841
,6971
,7108
,7345
,7629
,8155
,8806
,9185
,9579
1,0282
1,0925
2,1162
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,750
,758
,767
,775
,783
,792
,800
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,858
,867
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 40.
214
Coordenadas de la curva: DIAGONAL
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
,0017
,0027
,0086
,0171
,0223
,0247
,0256
,0267
,0275
,0277
,0285
,0304
,0383
,0453
,0466
,0497
,0530
,0555
,0579
,0602
,0737
,0863
,0872
,0890
,0906
,0958
,1020
,1035
,1044
,1058
,1129
,1219
,1271
,1311
,1347
,1368
,1376
,1387
,1412
,1432
,1441
,1460
,1481
,1618
,1750
,1754
,1765
,1963
,2188
,2279
,2400
,000
,000
,000
,063
,063
,063
,063
,063
,063
,063
,063
,125
,188
,250
,250
,250
,313
,313
,375
,438
,500
,500
,500
,563
,563
,625
,688
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,813
,813
,813
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
1,000
1,000
1,000
1,000
1 - Especificidad
,008
,017
,025
,025
,033
,042
,050
,058
,067
,075
,083
,083
,083
,083
,092
,100
,100
,108
,108
,108
,108
,117
,125
,125
,133
,133
,133
,133
,142
,150
,158
,167
,175
,183
,192
,192
,200
,208
,208
,217
,225
,233
,242
,250
,258
,258
,267
,267
,275
,283
,292
215
,2485
,2510
,2523
,2572
,2645
,2686
,2738
,2778
,2787
,2816
,2868
,2968
,3054
,3178
,3295
,3370
,3443
,3474
,3554
,3621
,3639
,3710
,3814
,3865
,3888
,3991
,4097
,4188
,4293
,4440
,4705
,4878
,4926
,5044
,5144
,5157
,5198
,5307
,5421
,5533
,5700
,5817
,5847
,5939
,6050
,6090
,6104
,6140
,6185
,6203
,6222
,6267
,6384
,6548
,6663
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,300
,308
,317
,325
,333
,342
,350
,358
,367
,375
,383
,392
,400
,408
,417
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,475
,483
,492
,500
,508
,517
,525
,533
,542
,550
,558
,567
,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
,750
216
,6701
,6710
,6719
,6774
,6882
,7122
,7367
,7448
,7479
,7540
,7595
,7809
,8057
,8102
,8108
,8357
,8750
,8939
,9081
,9240
,9490
,9821
1,0250
1,0775
1,1297
1,1938
1,2341
1,2676
1,3058
2,3153
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,758
,767
,775
,783
,792
,800
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,858
,867
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 41.
217
Coordenadas de la curva: ALTURA CUADRADO
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
-,9962
,0057
,0098
,0123
,0134
,0148
,0168
,0208
,0241
,0291
,0337
,0355
,0374
,0389
,0404
,0424
,0443
,0463
,0484
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,0577
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,0805
,0831
,0852
,0860
,0880
,0894
,0904
,0966
,1036
,1055
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,1139
,1204
,1250
,1322
,1364
,1369
,1373
,1422
,1521
,1586
,1608
,1654
,1718
,000
,000
,000
,000
,063
,063
,125
,188
,188
,188
,188
,188
,250
,313
,313
,375
,438
,500
,500
,500
,500
,563
,563
,625
,625
,625
,625
,688
,688
,750
,813
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
,938
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1 - Especificidad
,000
,008
,017
,025
,025
,033
,033
,033
,042
,050
,058
,067
,067
,067
,075
,075
,075
,075
,083
,092
,100
,100
,108
,108
,117
,125
,133
,133
,142
,142
,142
,142
,150
,158
,167
,175
,183
,192
,192
,200
,208
,208
,217
,225
,233
,242
,250
,258
,267
,275
,283
218
,1753
,1769
,1797
,1893
,2089
,2226
,2268
,2306
,2389
,2485
,2512
,2521
,2562
,2646
,2700
,2767
,2839
,2953
,3065
,3126
,3207
,3243
,3259
,3268
,3303
,3421
,3517
,3532
,3559
,3620
,3722
,3825
,3908
,3974
,4006
,4035
,4075
,4144
,4205
,4326
,4499
,4604
,4657
,4747
,4881
,4955
,5000
,5032
,5093
,5296
,5470
,5554
,5632
,5723
,5801
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,292
,300
,308
,317
,325
,333
,342
,350
,358
,367
,375
,383
,392
,400
,408
,417
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,475
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,492
,500
,508
,517
,525
,533
,542
,550
,558
,567
,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
219
,5812
,5905
,5996
,6308
,6622
,6775
,6922
,6969
,7026
,7193
,7358
,7455
,7638
,7855
,8039
,8194
,8287
,8302
,8401
,8529
,8671
,8880
,9002
,9123
,9238
,9270
,9341
,9970
1,1316
1,2213
2,2351
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,750
,758
,767
,775
,783
,792
,800
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,858
,867
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 42.
220
Coordenadas de la curva: SUBNAZALY ZIGUION IZQUIERDA
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
,0000
,0017
,0046
,0072
,0091
,0109
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,0161
,0166
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,0171
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,0239
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,0953
,1010
,1070
,000
,000
,000
,000
,000
,000
,000
,063
,063
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,125
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,188
,250
,313
,313
,375
,438
,438
,438
,438
,438
,438
,438
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,563
,625
,688
,688
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,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
1 - Especificidad
,000
,008
,017
,025
,033
,042
,050
,050
,058
,058
,067
,067
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,083
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,125
,125
,133
,133
,133
,142
,150
,158
,167
,175
,183
,183
,192
,200
,208
,217
,225
,225
,225
,225
,233
,233
,233
,242
,250
,258
,267
,275
,283
,292
,300
,308
221
,1108
,1159
,1188
,1199
,1215
,1231
,1234
,1241
,1251
,1266
,1282
,1310
,1333
,1335
,1340
,1350
,1388
,1420
,1429
,1441
,1463
,1502
,1529
,1553
,1589
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,1702
,1742
,1764
,1788
,1803
,1822
,1873
,1971
,2037
,2043
,2074
,2128
,2193
,2262
,2290
,2295
,2300
,2316
,2341
,2374
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,2434
,2504
,2576
,2587
,2708
,2823
,2828
,2850
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
,938
,938
,938
,938
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,317
,325
,333
,342
,350
,358
,358
,367
,375
,383
,392
,400
,408
,417
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,475
,483
,492
,492
,500
,508
,517
,525
,533
,533
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,550
,558
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,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
222
,2888
,2937
,2978
,2994
,3049
,3123
,3157
,3194
,3247
,3312
,3380
,3463
,3608
,3725
,3795
,3856
,3877
,3888
,3897
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1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,750
,758
,767
,775
,783
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,808
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,858
,867
,875
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,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 43.
223
Coordenadas de la curva: SUBNAZALY ZIGUION DERECHA
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
,0018
,0024
,0027
,0040
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,125
,125
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,188
,188
,188
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,313
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,375
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,438
,438
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,438
,438
,438
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,688
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,750
,750
,750
,750
,750
,750
,813
1 - Especificidad
,000
,000
,008
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,017
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,042
,042
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,133
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,150
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,158
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,267
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,308
,317
,317
224
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,0992
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,1020
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,813
,813
,813
,813
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,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
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,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
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1,000
1,000
1,000
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1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,325
,333
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,358
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,708
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225
,2585
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,2640
,2704
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1,000
1,000
1,000
1,000
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1,000
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1,000
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1,000
1,000
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1,000
1,000
,758
,767
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,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 44.
226
Coordenadas de la curva: SUBNASAL Y SUPRAORBITAL
IZQUIERDA
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
-,9989
,0019
,0073
,0176
,0244
,0274
,0295
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,0304
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,938
1 - Especificidad
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,000
,000
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227
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,908
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,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 45.
229
Coordenadas de la curva: SUBNASAL Y SUPRAORBITAL
DERECHA
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
-,9999
,0014
,0047
,0079
,0096
,0128
,0155
,0181
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1 - Especificidad
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,008
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,542
,550
,558
,567
,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
,750
,758
231
,6612
,6754
,6839
,6899
,6960
,7019
,7077
,7118
,7183
,7313
,7413
,7553
,7783
,7886
,7901
,7932
,7967
,8457
,9046
,9166
,9209
,9276
,9331
,9531
,9772
1,0059
1,1175
1,2416
2,2763
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,767
,775
,783
,792
,800
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,858
,867
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 46.
232
Coordenadas de la curva: NASOLATERAL
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
-,9994
,0008
,0013
,0018
,0041
,0095
,0141
,0173
,0222
,0258
,0336
,0423
,0439
,0450
,0495
,0536
,0544
,0552
,0555
,0557
,0560
,0564
,0570
,0576
,0613
,0649
,0667
,0698
,0729
,0747
,0802
,0855
,0870
,0888
,0978
,1071
,1106
,1137
,1159
,1180
,1182
,1186
,1213
,1248
,1265
,1276
,1299
,1353
,1421
,1452
,1495
,000
,063
,063
,063
,063
,125
,125
,125
,188
,188
,250
,250
,313
,313
,375
,438
,438
,438
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,500
,563
,563
,625
,625
,625
,625
,625
,625
,625
,625
,625
,688
,688
,688
,688
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,750
1 - Especificidad
,000
,000
,008
,017
,025
,025
,033
,042
,042
,050
,050
,058
,058
,067
,067
,067
,075
,083
,083
,092
,100
,108
,117
,125
,133
,142
,150
,158
,158
,167
,167
,175
,183
,192
,200
,208
,217
,225
,233
,233
,242
,250
,258
,258
,267
,275
,283
,292
,300
,308
,317
233
,1537
,1561
,1610
,1638
,1649
,1665
,1728
,1820
,1868
,1887
,1905
,1917
,1920
,1945
,1968
,1995
,2026
,2033
,2036
,2060
,2176
,2329
,2394
,2452
,2528
,2590
,2631
,2667
,2739
,2815
,2859
,2962
,3084
,3109
,3207
,3356
,3514
,3659
,3782
,3876
,3898
,3912
,3972
,4111
,4272
,4366
,4439
,4515
,4535
,4607
,4686
,4780
,4910
,4968
,5132
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,813
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,875
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,325
,333
,342
,350
,358
,367
,375
,383
,383
,392
,400
,408
,417
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,467
,475
,483
,492
,500
,508
,517
,525
,533
,542
,550
,558
,567
,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
,750
234
,5351
,5514
,5681
,5844
,6057
,6283
,6452
,6632
,6903
,7068
,7089
,7224
,7387
,7492
,7626
,7771
,7904
,7969
,8029
,8118
,8166
,8329
,8603
,8755
,8923
,9145
,9386
1,0061
1,0856
1,1656
2,2175
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,758
,767
,775
,783
,792
,800
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,850
,858
,867
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 47.
235
Coordenadas de la curva: NASION Y SUBNASAL
Positivo si es menor o igual que Sensibilidad
-,9949
,0060
,0072
,0090
,0139
,0297
,0426
,0432
,0452
,0471
,0497
,0534
,0567
,0619
,0670
,0707
,0748
,0789
,0820
,0839
,0896
,0962
,0995
,1050
,1098
,1143
,1176
,1187
,1222
,1285
,1394
,1503
,1540
,1554
,1631
,1734
,1773
,1806
,1845
,1854
,1888
,1930
,1940
,1945
,1953
,1972
,2057
,2137
,2170
,2216
,2293
,000
,063
,063
,063
,125
,125
,188
,188
,188
,188
,250
,250
,250
,313
,313
,313
,313
,375
,375
,438
,500
,500
,563
,625
,688
,750
,750
,750
,750
,750
,750
,813
,813
,875
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
,938
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1 - Especificidad
,000
,000
,008
,017
,017
,025
,025
,033
,042
,050
,050
,058
,067
,067
,075
,083
,092
,092
,100
,100
,100
,108
,108
,108
,108
,108
,117
,125
,133
,142
,150
,150
,158
,158
,158
,167
,175
,183
,192
,200
,208
,217
,225
,233
,242
,242
,250
,258
,267
,275
,283
236
,2389
,2461
,2546
,2632
,2675
,2695
,2719
,2792
,2880
,2941
,3019
,3110
,3221
,3378
,3493
,3523
,3532
,3619
,3771
,3920
,4004
,4026
,4050
,4075
,4121
,4204
,4321
,4402
,4428
,4451
,4498
,4575
,4648
,4741
,4829
,4854
,4868
,4921
,5078
,5223
,5413
,5661
,5752
,5810
,6104
,6356
,6401
,6442
,6632
,6822
,6869
,6912
,6935
,7009
,7158
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,292
,300
,308
,317
,325
,333
,342
,350
,358
,367
,375
,383
,392
,400
,408
,417
,425
,433
,442
,450
,458
,467
,475
,483
,492
,500
,508
,517
,525
,533
,542
,550
,558
,567
,575
,583
,592
,600
,608
,617
,625
,633
,642
,650
,658
,667
,675
,683
,692
,700
,708
,717
,725
,733
,742
237
,7264
,7340
,7502
,7649
,7781
,8016
,8402
,8675
,8722
,9028
,9335
,9358
,9890
1,0524
1,0673
1,0897
1,1104
1,1194
1,1404
1,1714
1,2219
1,2855
1,3172
1,3209
1,3429
1,3832
1,4258
1,4708
1,5378
1,6864
2,7912
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,750
,758
,767
,775
,783
,792
,800
,808
,817
,825
,833
,842
,850
,858
,867
,875
,883
,892
,900
,908
,917
,925
,933
,942
,950
,958
,967
,975
,983
,992
1,000
Tabla 48.
238
RESULTADOS
Grafico 33.
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
ZIGUIONES
CENTROS PUPILARES Y SUPRAORBITARIOS
DIAGONAL
ALTURA CUADRADO
SUBNASALY ZIGUION IZQUIERDA
SUBNASALY ZIGUION DERECHA
SUBNASAL Y SUPRAORBITAL IZQUIERDA
SUBNASAL Y SUPRAORBITAL DERECHA
NASOLATERAL
NASION Y SUBNASAL
239
Área bajo la curva
Intervalo de confianza
Asintotico al 95%
Variables resultado de
contraste
Área
ZIGUIONES
,555
,071
CENTROS PUPILARES Y
SUPRAORBITARIOS
DIAGONAL
,858
Error típ.
Sig.
b
asintotica
Limite
inferior
Limite
superior
,478
,415
,695
,032
,000
,796
,921
,866
,031
,000
,805
,926
ALTURA CUADRADO
,899
,026
,000
,847
,951
SUBNASALY ZIGUION
IZQUIERDA
SUBNASALY ZIGUION
DERECHA
SUBNASAL Y
SUPRAORBITAL
IZQUIERDA
SUBNASAL Y
SUPRAORBITAL
DERECHA
NASOLATERAL
,788
,045
,000
,700
,875
,824
,049
,000
,728
,921
,924
,025
,000
,875
,973
,884
,029
,000
,826
,941
,779
,063
,000
,655
,902
NASION Y SUBNASAL
,901
,027
,000
,848
,953
b.
Hipótesis nula: área verdadera= 0,5
Tabla 49.
Los resultados demostrados en el gráfico Nº 33 y reflejados en la
tabla Nº 49 revelan que:
-
Un (01) valor del área bajo la curva está entre 0,50 – 0,60;
Dos (02) valores del área bajo la curva están entre 0,70 – 0,80;
Cinco (05) valores del área bajo la curva están entre 0,80 – 0,90;
Dos (02) valores del área bajo la curva están entre 0,90 – 1,00.
Estos datos comparados con la capacidad predictiva del modelo (tabla
Nº 38), confirman la fiabilidad de nuestra técnica de identificación
como una herramienta válida.
Luego hemos analizado los datos de las tablas de Nº 39 a Nº 48 con
el objetivo de elegir el punto de corte universal para cada par de
puntos,
teniendo como referencia los valores predefinidos y
aceptables de la sensibilidad y la especificidad.
240
A continuación siguen los gráficos donde se puede visualizar que el
margen de error (el punto de corte universal) no asciende a 0,2 cm
para cada par de puntos, en total 16 casos (160 pares). Salvo en dos
pares de puntos, que corresponden a dos sujetos: sujeto nº 7
(puntos nasolaterales) y sujeto nº 12 (puntos nasolaterales). La
explicación sigue en la Pág. 203.
0,20
0,15
1
0,10
2
3
4
0,05
5
(CM)
6
7
0,00
8
9
10
-0,05
11
12
-0,10
13
14
15
-0,15
1
16
2
3
4
5
6
7
8
SUJETOS
9
10
11
12
13
14
C1
15
16
Grafico 34.
Margen de error entre los puntos supraorbitarios y centros pupilares
241
0,20
0,15
1
0,10
2
3
4
0,05
5
( CM )
6
7
0,00
8
9
10
-0,05
11
12
-0,10
13
14
15
-0,15
16
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
SU J E T OS
12
13
C1
14
15
16
Grafico 35.
Margen de error entre diagonales
0,15
0,10
1
2
3
4
0,05
5
6
(CM)
7
8
0,00
9
10
11
-0,05
12
13
14
15
-0,10
1
16
2
3
4
5
6
7
8
SUJETOS
9
10
11
12
13
14
C1
15
16
Grafico 36.
Margen de error entre las alturas del cuadrado
242
0,10
0,05
1
2
0,00
3
4
5
(CM)
-0,05
6
7
8
9
-0,10
10
11
12
-0,15
13
14
15
-0,20
16
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
SUJETOS
11
12
13
C1
14
15
16
Grafico 37.
Margen de error entre los puntos subnazales y ziguiones
(izquierdos)
0,20
0,15
1
2
0,10
3
4
0,05
5
6
(CM)
7
0,00
8
9
10
-0,05
11
12
-0,10
13
14
15
-0,15
1
16
2
3
4
5
6
7
8
SUJETOS
9
10
11
12
13
14
C1
15
16
Grafico 38.
Margen de error entre los puntos subnazales y ziguiones
(derechos)
243
0,20
0,15
1
2
0,10
3
4
5
(CM)
0,05
6
7
8
9
0,00
10
11
12
-0,05
13
14
15
-0,10
16
1
2
3
4
5
6
7
8
9
SUJETOS
10
11
12
13
C1
14
15
16
Grafico 39.
Margen de error entre los puntos subnasales y supraorbitarios
(izquierdos)
0,20
0,15
1
0,10
2
3
4
0,05
5
(CM)
6
7
0,00
8
9
10
-0,05
11
12
13
-0,10
14
15
-0,15
16
1
2
3
4
5
6
7
8
SUJETOS
9
10
11
12
13
14
C1
15
16
Grafico 40.
Margen de error entre los puntos subnasales y supraorbitarios
(derechos)
244
0,80
0,70
1
0,60
2
0,50
3
4
0,40
5
( CM )
6
0,30
7
8
0,20
9
10
0,10
11
12
0,00
13
14
-0,10
15
1
2
3
4
16
5
6
7
8
9
10
SU J E T OS
11
12
13
C1
14
15
16
Grafico 41.
Margen de error entre los puntos nasolaterales
0,20
0,15
1
2
0,10
3
4
5
(CM)
0,05
6
7
8
9
0,00
10
11
12
-0,05
13
14
15
-0,10
16
1
2
3
4
5
6
7
8
SUJETOS
9
10
11
12
13
14
C1
15
16
Grafico 42.
Margen de error entre los puntos nasiones y subnasales
245
Evaluación final
Consideramos punto de corte universal 0,20 (cm).
Resumen del proceso de casos
GRUPO_01
N válido (según lista)
Positivo
16
Negativo
120
Tabla 50.
Grafico 43.
246
Área bajo la curva
Variables resultado de contraste: TEST_20
Área
,983
Error típ.
,010
b
Sig. asintótica
,000
Intervalo de confianza
asintótico al 95%
Límite
superior
Límite inferior
,963
1,002
b. Hipótesis nula: área verdadera = 0,5
Tabla 51.
Coordenadas de la curva
Variables resultado de contraste: TEST_20
Positivo si
es mayor o
igual que
,0000
1,5000
2,5000
3,5000
4,5000
5,5000
6,5000
7,5000
8,5000
9,5000
Sensibilidad
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
1,000
,813
1Especificidad
1,000
,992
,883
,583
,342
,250
,183
,100
,050
,025
Tabla 52.
Según estos resultados teniendo en cuenta 9 medidas de las 10
disponible, una la usamos para encajar la radiografía y la fotografía
se podría asignar bien una cara a una radiografía.
Con 9 +1 tenemos una sensibilidad de 100% y una especificidad
de 95%.
247
En nuestro estudio nos podremos encontrar con las tres siguientes
situaciones:
a) Situación 1 - (es la situación considerada ideal):
-
Fotografía en el plano frontal y fotografía de perfil;
Radiografía en la posición (Frankfurt) y radiografía de perfil;
b) Situación 2:
-
Fotografía en el plano no frontal (intermedio entre frontal y
perfil);
Radiografía
( en caso de disponer del cráneo del sujeto
investigado, habrá que orientarla en la misma posición de la
fotografía);
c) Situación 3 ( situación en la cual el cráneo no esta preservado):
-
Como la identificación debe ser un proceso de alta probabilidad,
si el cráneo no esta suficientemente preservado no existe la
seguridad y el rigor necesario en medicina legal y por tanto no
es conveniente utilizarlo.
7.3. Consideraciones y discusión
La identificación de personas fallecidas no suele plantear grandes
dificultades en supuestos de cadáveres aislados y de fallecimiento
reciente, pero puede resultar complicada, problemática y llena de
dificultades cuando hay que identificar a las víctimas múltiples en una
catástrofe; sobre todo si se actúa con falta de previsión, con
precipitación en los momentos iniciales (cuando es fácil cometer
errores que difícilmente se podrán enmendar), sin sujeción a ninguna
metodología establecida, o cuando determinados trabajos se realizan
por personas inexpertas, que ignoran la importancia que debe darse a
un tema de tal trascendencia.
Es importante subrayar el papel de la investigación científica en
España como base del progreso de la criminalística y de las Ciencias
Forenses al servicio de la Justicia. La reconstrucción facial busca
encontrar un nombre, un parecido a alguien, a partir del cual enfocar
la posterior investigación que conduzca a la plena identificación de la
víctima, mediante pruebas obtenidas a partir del cotejo dental,
patológico, rasgos individuales, prendas de vestir y otros elementos
asociados. Afirmar que se ha podido identificar a alguien a partir de la
sola reconstrucción, divulgando esta noticia por medios masivos de
comunicación, no solamente es arriesgado e inoportuno, sino que una
inadecuada reconstrucción puede conducir a caricaturizar el papel de
248
las ciencias forenses, pues se le resta seriedad y credibilidad al
proceso científico a favor de un protagonismo individual o
institucional.
Dada la necesidad del rigor, meticulosidad, planificación, coordinación
entre los médicos forenses, especialistas en la identificación de
cadáveres, así como también de la alta incidencia de casos de
identificación que se presenta en el mundo, este trabajo pretende
cerrar algunos huecos, haciendo una pequeña revisión teórica de los
aspectos forenses históricos y metodológicos de la identificación,
exponiéndolos con el objetivo de facilitar el proceso de identificación
que desarrollamos en nuestra investigación, y que la utilización de
este método se nos revela como muy útil en los casos en que esté
indicado.
En este método de superposición bidimensional, con el auxilio del
ordenador, tenemos la facilidad de girar, mover, medir, cortar,
fotografiar la imagen sin manipulación manual, basándonos en
términos empíricos exactos.
Uno de los principales problemas de este método es la inconsistencia
en la selección de los puntos anatómicos de referencia en la cara.
Debido a que la mayoría de los estudiosos suelen describir sobre la
marcha de la secuencia del proceso de superposición, omitiendo la
precaución de señalar permanentemente el sitio elegido para cada
una de las referencias, además de la fugacidad intrínseca que implica
este criterio.
En esta técnica, como en cualquier otra de superposición
(cráneo/fotografía, etc.) un problema que se presenta con frecuencia
es que las fotografías no siempre están tomadas en planos frontales y
se presentan generalmente con la cabeza ladeada, en escorzo o
movida en sentido vertical si es de frente, hacia arriba o hacia abajo.
La radiografía, en caso de disponer del cráneo del sujeto investigado,
habrá que orientarla en la misma posición de la fotografía, lo que no
suele ser fácil.
Un detalle importante que consideramos en el proceso de
superposición, fue el espesor de las partes blandas. Por este motivo,
la radiografía del cráneo, fue un poco menor que la fotografía que
cotejamos, adaptada al tamaño y escala adecuada para su correlación
precisa.
En la práctica no siempre es posible encontrar las fotografías de los
sujetos investigados exactamente en la posición Frankfort, por lo que
hemos tenido en cuenta el margen de error en el proceso de
determinación de los puntos anatómicos. Por ejemplo, si la fotografía
fue obtenida con la cabeza hacia abajo y mirando al foco de la
249
máquina, la distancia entre los puntos pupilares y orbitarios,
pupilares y supraorbitarios, pupilares y maxilofrontales, pupilares y
ectoconquios se cambiará, dependiendo del grado de giro de la
cabeza.
Es fundamental destacar que en la proyección Postero-Anterior, con
un rayo central perpendicular, las órbitas están ocupadas por las
sombras de los peñascos. Otras estructuras que aparecen en la
radiografía son las celdillas aéreas etmoidales y los senos frontales.
La lámina cuadrilátera aparece como una línea curva que se extiende
entre las órbitas, inmediatamente por encima de las celdillas aéreas
etmoidales. Cuando el rayo central se dirige en un ángulo caudal de
15 grados, en relación al nasión, los peñascos se proyectan en el
tercio inferior de las órbitas y así evaluando el nivel de los peñascos
en relación con las órbitas, se puede definir aproximadamente la
angulación caudal de los rayos centrales en relación al nasión.
Podemos citar aquí algunos criterios de evaluación, tales como que:
la distancia entre el borde lateral del cráneo y el borde lateral de las
órbitas, deben ser iguales en ambos lados; los bordes del peñasco
deben ser simétricos; los peñascos en el tercio inferior de la órbita si
se ha utilizado una angulación caudal de 15 grados en el rayo central
y ocupando las órbitas si no se ha utilizado angulación en el rayo
central; la totalidad del vértice craneal.
En el estudio de la radiografía las estructuras en la proyección
Antero- Posterior son las mismas que las que se observan en la
proyección Postero Anterior. En la proyección Antero-Posterior, las
órbitas aparecen considerablemente aumentadas de tamaño debido al
incremento de la distancia entre la órbita y el receptor de imagen. De
igual forma, la distancia desde el margen lateral de la órbita al borde
lateral del hueso temporal mide menos en la proyección AnteroPosterior que en la Postero-Anterior, debido al aumento.
En todas las técnicas de Reconstrucción del cráneo hay un aspecto de
mucha importancia que es el grosor de las partes blandas.
Generalmente el proceso de reconstrucción empieza evaluando el
grosor de las partes blandas, mientras que en este método primero
se hace la superposición para luego considerar este criterio.
Cuando los peñascos se proyectan en el tercio inferior de la órbita,
con una angulación caudal de 0º a 15° grados con los rayos
centrales, los puntos auditivos, la mayoría de las veces, en un
intervalo determinado, coincide con los puntos zigomáticos.
Muchos autores se han preocupado por resolver las dificultades que
se encuentran en relación a la orientación exacta de la radiografía y
la ampliación precisa de la imagen del rostro con respecto a las
250
dimensiones del cráneo. Se propone resolver este problema
determinando las dimensiones dentales (CHAl, 1989) para determinar
el factor de magnificación, aunque no siempre es posible, por ejemplo
en desdentados. En ocasiones se ha recurrido a la distancia
interpupilar de una segunda persona.
El grado de subjetividad de esta técnica, así como la de otros
procedimientos y formas de identificación, no se puede eliminar y por
lo tanto tampoco algunos errores por parte de quien realiza la
técnica. Todas estas técnicas siempre serán consideradas un arte y
por tanto no se pueden usar en términos absolutos. Siempre será una
interpretación más o menos artística de la realidad.
7.4.
A propósito de un caso práctico resuelto
El Departamento de Medicina Legal del Ministerio de Justicia e
Interior de Andorra, solicitó al Departamento de Salud Publica de la
Universidad de Barcelona, la resolución de un caso de identificación a
través del método de Identificación Bidimensional Superposición de
Imágenes (radiografía/fotografía).
Al recibir esta solicitud de identificación, hicimos un listado del
material que era imprescindible para la realización precisa de esta
superposición.
Los materiales que recibimos fueron: fotografía frontal de la cara del
sujeto a ser identificado; radiografías frontales de la cara del mismo
en diversas posiciones, cada una de ellas realizada lo más
aproximadamente posible de la posición de la fotografía.
En el proceso de superposición hemos seguido el mismo
procedimiento ya citado anteriormente en los casos retratados aquí
en este trabajo. El resultado alcanzado fue la perfecta identificación
del sujeto investigado. La fiabilidad de este método fue demostrada,
a parte de nuestro estudio, algunos meses después con la
confirmación positiva de la identificación por el ADN.
Este caso fue presentado en la 1ª Jornada de Medicina Legal i
Forense del Principat de Andorra en febrero de 2004. Fue dirigido por
el profesor Dr. Emili Huguet Ràmia (Catedrático de Medicina Legal y
Forense de la Facultad de Medicina – Universidad de Barcelona) y
presentado por la Dra. Margarida Luna Descalzo (Profesora titular de
Medicina Legal y Forense de la Facultad de Medicina – Universidad de
Barcelona) y por el Médico forense de Georgia Gela Merabishvili.
251
SUPERPOSICIÓN CASO PRÁCTICO
Superposición— nº17
252
8. CONCLUSIONES
1. Esta técnica es una técnica de identificación no destructiva y de
gran importancia en el estudio de los cadáveres carbonizados y/o,
que tienen el estado de los huesos frágil y quebradizo.
2. Una ventaja de esta técnica es que no es necesario esqueletizar el
cráneo para la identificación en casos de grandes catástrofes, cuando
los cadáveres son irreconocibles por la destrucción de las partes
blandas, manteniendo así la integridad del cráneo y todos los signos
que pueden ser utilizados en otro tipo de identificación.
3. La utilización de la superposición de las imágenes bidimensionales
radiografía/fotografía puede ser un recurso muy utilizable gracias al
bajo costo de estos estudios.
4. Todos los estudios de identificación desarrollados en este método,
pueden permanecer archivados como registros informáticos (en PC o
CD), donde permanecerán los contornos y puntos designados para la
elaboración de la identificación, sin la necesidad de dañar los
originales de las fotografías o deteriorar la emulsión de la película
radiográfica con los dibujos en grafito o lápiz de las líneas y trazos
continuos que se hacían antes, en algunos estudios de identificación.
Una ventaja importante de este método bidimensional es que permite
borrar los trazos de referencia cuantas veces sea necesario, siendo
más difícil cuando usamos el método tridimensional.
5. Con la introducción del ordenador, la superposición radiografíafotografía se agiliza y se llega a conclusiones de certeza sobre la
identificación individual. Los avances tecnológicos, fundamentalmente
en el campo de la informática, permiten que hoy en día se puedan
realizar la identificación de forma muy rápida. Esta metodología
informática de identificación del rostro, presenta la ventaja de ser
muy precisa y obtener la imagen de la cara con mayor rapidez, lo que
agiliza la identificación médico-legal en la Antropología Forense y
Criminalística.
6. Con esta técnica es posible comparar las radiografías del cadáver
con las fotografías de la víctima, tomadas con anterioridad, ya que se
adaptan al tamaño o escala adecuados de las fotografías de los
pasaportes o documentos que se encuentren en el lugar del siniestro,
o fotografías procedentes de los archivos policiales.
7. Hemos de destacar, que lo que facilitó nuestra definición sobre el
centro de la cara, fundamental en el proceso de superposición, fue el
cuadrado formado por los puntos (subnasal, centros pupilares y
253
supraorbitarios) fácilmente identificables en la cara y en la radiografía
y definidos por los autores: Rodríguez Cuenca y Reverte Coma.
8. En el proceso de identificación superposición de imágenes, el
estudio de una cara asimétrica, es un signo altamente fidedigno para
el diagnóstico negativo o positivo.
9. Existen muchas técnicas de identificación que se basan en métodos
bioquímicos y términos científicos, que no son comprensibles por
personas que no forman parte de la medicina; mientras que este
método podemos afirmar que es fácilmente comprensible, por la
posibilidad de demostrar (por ejemplo en una sala de juicio) todas las
etapas de la superposición, hasta conseguir llegar a la identificación,
sea ella positiva o negativa. Con esta técnica de superposición de
imágenes fotografía/radiografía constatamos que se puede llegar a un
diagnóstico negativo de superposición, es decir, señalamos que la
fotografía y la radiografía no son coincidentes, siendo más difícil
conseguir la identificación positiva, siendo siempre, en todo caso,
necesario corroborarlo con otros datos que nos confirmen dicha
identificación. La coincidencia de más de 12 puntos anatómicos
utilizados en el estudio, hace que la probabilidad de pertenecer al
mismo individuo es infinitamente superior a que pertenezca a
cualquier otra persona, por la cual cosa la identificación se ha de
considerar positiva. En el proceso de superposición se consigue un
ajuste de las estructuras óseas de la radiografía sobre la cara del
individuo. La coincidencia de todos los puntos anatómicos de
referencia que se utilizan para el factor de ampliación permite llegar a
la total correlación. Se considera que existe una evidencia apreciable
cuando coinciden de 10 o 12 puntos. Esta cifra está determinada
empíricamente. Establece una situación de certeza racional basada en
la casi-imposibilidad (probabilidad bajísima de que dos personas
escogidas al azar tengan tal grado de coincidencia). Podemos decir,
que el grado de certeza al que llegamos es el mismo que el de otros
procedimientos que llegan a una cifra de probabilidad muy alta, y que
es el que en medicina legal se conoce como certeza racional, pues la
hipótesis contraria es casi imposible.
10. Los estudios estadísticos realizados a través de la curva ROC
(Receiver Operador characteristic Curve) determinan que el margen
de error (Punto de Corte Universal) en la valoración de los puntos
está en 0,20 cm.
11. De los 16 puntos anatómicos utilizados
en el estudio, 14
obtienen una fiabilidad estadística semejante. Los dos restantes, los
nasolaterales quedan por debajo de ese valor probablemente por ser
los más vulnerables a los traumatismos. Esto no contraindica su
utilización porque son dos puntos muy individualizadores en caso de
anomalía.
254
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