Revista Escolar de la Olimpíada Iberoamericana de Matemática Número 46 (julio - octubre 2012) ISSN – 1698-277X ÍNDICE Nota necrológica: Prof. José Javier Etayo Miqueo (1926‐2012), por F. Bellot Artículos, Notas y lecciones de preparación olímpica (46) F. Bellot: Primera lección de Combinatoria C. Guzner: El Desafío de enseñar Álgebra Lineal por Competencias D.M. Batinetu‐Giurgiu y N. Stanciu: Generalización de un problema propuesto en la 46ª OME y su relación con la desigualdad de Nesbitt Problemas para los más jóvenes (46) Cuatro problemas de la Olimpiada Juvenil de Matemática 2011 de Venezuela. Problemas de Nivel Medio y de Olimpiadas (46) E.Milesi y O. Rivero: La Batalla Matemática Solución al problema 1 de la Competición Mediterránea 2012, por Darío Nieuwenhuis Soluciones a los Problemas 2,3 y 4 de la CMM2012, por Daniel Lasaosa Problemas (46) Problemas propuestos 226‐230 Problemas resueltos Problema 221: Recibida solución de Daniel Lasaosa Medarde, Pamplona (España), que presentamos. Problema 222: Recibidas soluciones de Floro Damián Aranda Ballesteros, Córdoba (España); Daniel Lasaosa Medarde, Pamplona (España), y Cristóbal Sánchez‐Rubio, Benicassim (España). Presentamos la solución de Aranda. Problema 223: Recibidas soluciones de Floro Damián Aranda Ballesteros, Córdoba (España); Daniel Lasaosa Medarde, Pamplona (España), y Cristóbal Sánchez Rubio, Benicassim (España). Presentamos la solución de Sánchez‐Rubio. Problema 224: Recibidas soluciones (muy similares entre sí) de: Devis M. Alvarado, Mayagüez, Puerto Rico; Floro Damián Aranda Ballesteros, Córdoba (España); Daniel Lasaosa Medarde, Pamplona (España), y Cristóbal Sánchez‐Rubio, Benicassim (España). Presentamos la solución de Alvarado. Problema 225: Recibida solución de Daniel Lasaosa Medarde, Pamplona (España), que presentamos. Noticia de Congresos, reseña de libros y de páginas web 46 Posamentier, A.S. & Lehman, I: The secrets of triangles. Prometheus Books 2012. Comentario de F. Bellot. Divertimentos matemáticos 46 Capturado en Internet (3) In Memoriam: Prof. José Javier Etayo Miqueo (1926 – 2012) por Francisco Bellot Rosado El pasado 11 de septiembre falleció en Madrid el Profesor D. José Javier Etayo Miqueo, Etayo padre, como se le conocía entre los que fuimos sus alumnos, como cabeza de una saga de matemáticos. El número 93 del Boletín de la Sociedad Puig Adam de Profesores de Matemáticas será un número especial dedicado íntegramente a él, a su vida y su importante obra matemática. En la presente Nota Necrológica trataré de rememorar los recuerdos que yo tengo de quien fue mi profesor de Geometría Diferencial de 5º(1963), Presidente de mi Tribunal de Oposiciones a Cátedras de INEM (1966), y también, Presidente de la Real Sociedad Matemática Española entre 1976 y 1982. El segundo trimestre del curso 1962-63 en la Facultad de Ciencias Exactas de Madrid comenzó con un nuevo Catedrático de Geometría: el Prof. Etayo Miqueo, procedente de la Universidad de Zaragoza, que se encargó de la asignatura de Geometría 5º, que cursábamos los que, salvo imprevistos, terminaríamos la carrera en Junio de 1963. Éramos 31, que aparecemos en la orla tradicional fotografiados en el inevitable estudio de Beringola, en la calle del Pez: En las clases de Etayo aprendimos, entre otras muchas cosas importantes, (como claridad de exposición, exquisito trato a todos nosotros, rigor en los detalles técnicos), lo que era de verdad una variedad diferenciable, un concepto que aparecía definido de la siguiente manera en un libro presuntamente de texto, extranjero por cierto, de cuyo nombre no tengo la menor intención de acordarme: Una variedad diferenciable es un concepto muy complicado. Sea M una variedad diferenciable…. La última vez que tuve el placer de saludarle, después de muchos años sin verlo, fue el 24 de marzo de este año 2012, en Santander, durante la Olimpiada Matemática Española en un acto en el que se le entregó la medalla de Oro de la Olimpiada, en justo reconocimiento a una de las personas que más ha hecho por esta competición, creada por la RSME durante la presidencia de D. Pedro Abellanas en 1964. El Profesor Etayo fue un excelente profesor, pero además fue una persona generosa con sus estudiantes, justo en todo momento y un trabajador infatigable, si repasamos los numerosos cargos que sirvió, con dedicación y entrega: Vicedecano de la facultad de Ciencias de la Universidad Complutense (1971 – 1975), Secretario, Vicepresidente y Presidente de la Real Sociedad Matemática Española (entre 1960 y 1982), miembro del Comité Español de la Unión Internacional de Matemáticas (1970-1985), … Su ejemplo y su recuerdo permanecerá siempre entre quienes tuvimos el privilegio de conocerle. Descanse en Paz. Valladolid, 23 de noviembre de 2012. UNA PRIMERA LECCIÓN DE COMBINATORIA Francisco Bellot Rosado Seminario de Problemas, Valladolid, 16-17 de octubre de 2012 Algunas formas de explicar cuestiones de Matemáticas, expuestas por buenos profesores, te impresionan de tal forma que, desde que las ves, las utilizas de manera sistemática. Eso me ocurrió en octubre de 1964, cuando tuve el privilegio de seguir, siendo su alumno becario, el desarrollo de la Combinatoria presentado en el Instituto “Cervantes” por el Profesor D. José Ramón Pascual Ibarra. Para empezar, un problema… La figura sobre estas líneas representa idealizado el plano de una ciudad, con manzanas de casas exactamente iguales. Se pretende ir del vértice inferior izquierdo al superior derecho, por las calles, y de manera que el camino recorrido tenga longitud mínima. ¿Cuántos caminos de estas características hay? (La exigencia de ser de longitud mínima implica en este caso que solamente se pueda ir, horizontalmente, de izquierda a derecha; y verticalmente, de abajo a arriba). Se observa fácilmente que los caminos posibles tienen todos 4 tramos verticales y 9 horizontales. Pero llegar a saber cuántos son no parece demasiado sencillo (si no se conoce el problema, naturalmente). ¿Serán más o menos de 100 los caminos? (Podemos hacer una votación…) Al cabo de unos momentos, se puede sugerir a los alumnos que sigan el consejo de Pólya: Si un problema plantea una situación muy complicada, estúdiese el mismo problema en un contexto más sencillo… La figura siguiente está tomada de un libro de Pólya, Notes on Introductory Combinatorics. Por conveniencia hemos dispuesto la figura con otra orientación, y ahora se trata de hallar el número de caminos que van del vértice superior al inferior del cuadrado. ¿Cuántos caminos llevan al vértice marcado con un asterisco? ¿Y con dos? Compliquemos la figura un poco más: Hasta que, finalmente, la completamos : Si aplicamos el procedimiento descrito al problema original, obtendríamos 715 caminos: demasiados para dibujarlos todos y contarlos después. Este primer ejemplo pertenece a lo que se llama Combinatoria enumerativa, o si se quiere, al Arte de contar sin enumerar. A continuación trataremos de profundizar un poco más en lo que hay detrás del problema. Nomenclatura Imaginemos, como se indica en la figura siguiente, que se tiene de nuevo un rectángulo en su posición normal, con caminos que constan de n segmentos, de los que k de ellos van hacia arriba: Sería importante disponer de una fórmula que permitiera calcular el número de caminos, en función de k y de n, para no tener que repetir el procedimiento pedestre, pero eficaz, empleado para el cálculo en los casos particulares. Por lo de pronto vamos a utilizar el símbolo siguiente para representar ese número: n n C = . k k La C no es exactamente por “caminos”, pero viene bien en esta ocasión. El símbolo de la derecha lo leemos como “n sobre k”. Es evidente, según la figura anterior, que el número de caminos mínimos para ir de A a B es la suma de los que van desde A a B1 más los que van desde A a B2. Con la notación que hemos elegido, hemos llegado a n n − 1 n − 1 = + . k k k − 1 Esta igualdad es lo que se llama una fórmula de recurrencia; para calcular el valor del primer miembro necesitamos conocer todos los valores anteriores (es lo que hemos hecho antes para calcular el número de caminos). Si k=0, el rectángulo se reduce a un segmento horizontal de longitud n. Para ir de un extremo a otro solamente hay un camino, lo cual se puede expresar mediante n = 1. 0 Si el segmento fuera vertical con k=n también tendríamos un único camino, de modo que n = 1. n Estas dos son las condiciones iniciales de la recurrencia. Por otro lado, con la interpretación de los caminos que estamos haciendo, se ve que también se verifica n n = , k n−k porque eso es tanto como decir que giramos el rectángulo 90º alrededor de un vértice: los tramos horizontales antes, ahora son verticales. n Los números reciben el nombre de coeficientes binomiales o k números combinatorios. Si observamos los números que van apareciendo al calcular los caminos, pero sin la cuadrícula, obtenemos el llamado triángulo aritmético, triángulo de Tartaglia o triángulo de Pascal: Del que, naturalmente, sólo podemos mostrar una parte, porque tiene infinitas filas. El nombre coeficientes binomiales se debe a que son los coeficientes que se obtienen cuando se calcula el desarrollo de (1 + x ) n , para valores de n=0,1,2,3,… como se comprobará dentro de poco. Una expresión explícita para los coeficientes binomiales n es la de contar el número de k subconjuntos con k elementos de un conjunto que tiene n elementos (no se permiten repeticiones, por eso hablamos de conjuntos). No se considera, tampoco, el orden en que aparezcan los elementos. La definición clásica de El siguiente procedimiento para obtener explícitamente n sobre k en función de n y k está tomado de otro excelente libro: A First Course in Discrete Mathematics, de Ian Anderson (Springer, 2000). Supongamos que hemos de elegir un equipo de k jugadores de un grupo de n personas, uno de los cuales será el capitán. Esto se puede n hacer eligiendo primero el equipo – y hay formas de hacerlo – y k luego elegir el capitán – y hay k maneras de hacerlo. Luego en total n tenemos k maneras de conseguirlo. Pero, en vez de eso, podemos k primero elegir el capitán – y hay n formas de hacerlo – y después n − 1 elegir al resto del equipo – y hay formas, con lo que en k − 1 n − 1 definitiva tenemos de este otro modo n equipos posibles con su k − 1 capitán. Es decir, que se tendrá que cumplir n − 1 n n = k , k − 1 k con lo que n n n − 1 = . k k k − 1 Reiterando el procedimiento obtenemos n n n − 1 n n − 1 n − 2 ⋅ = = k k k − 1 k k − 1 k − 2 y continuando de este modo, llegaremos a n ( n − 1) ( n − ( k − 2 ) ) n − ( k − 1) n n n − 1 n n − 1 n − 2 ⋅ = = = = k ⋅ ( k − 1) ⋅ 2 1 k k k − 1 k k − 1 k − 2 m y como = m , se tiene la fórmula explícita que buscábamos: 1 n n ( n − 1) ( n − k + 2 )( n − k + 1) . = k ⋅ ( k − 1) ⋅ 2 ⋅1 k El razonamiento anterior es una buena muestra de lo fructífero que puede ser contar la misma cosa de dos maneras distintas. Esta fórmula se puede escribir de una manera más compacta si utilizamos el concepto de factorial y su correspondiente símbolo. Si n es un entero mayor que 0, se define el factorial de n y se representa por n! al producto de los n números enteros que van de 1 a n: n! = n(n-1)(n-2)…3.2.1 Si n = 0, para que las dos condiciones iniciales de la recurrencia anterior sigan valiendo, se admite por convenio que 0! = 1. Utilizando los factoriales, la fórmula para n sobre k se escribe como n n! . = k k !(n − k )! Si esta expresión se toma como definición, es posible demostrar la relación de recurrencia de los coeficientes binomiales haciendo operaciones en el segundo miembro de dicha recurrencia. La fórmula del binomio de Newton Como decíamos antes, observando el desarrollo de las potencias sucesivas de x + y obtenemos 1 ( x + y) = 1 ( x + y ) =x + y 2 ( x + y ) =x 2 + 2 xy + y 2 3 ( x + y ) =x3 + 3x 2 y + 3xy 2 + y 3 0 y los coeficientes son los términos de las diferentes filas del triángulo de Tartaglia. Vamos a demostrar que ( x + y= ) n n n n n −1 n n − 2 2 n n y x + x y + x y + + = 0 1 2 n n n r =0 ∑ r x n−r y r , (*) que se conoce como fórmula del binomio de Newton. Demostración Es claro que (x+y)n = (x+y)(x+y)…(x+y), donde hay n paréntesis. Por lo tanto el coeficiente de xn-ryr en el desarrollo final es el número de formas de obtener xn-ryr cuando se multiplican los n paréntesis. Cada término del desarrollo es el producto de un sumando de cada paréntesis; por lo tanto xn-ryr se obtiene tantas veces como podamos elegir y de r de los n paréntesis (y x de los n-r restantes). Pero esto es precisamente el número de maneras de elegir r de los n n paréntesis, es decir, . r Identidades combinatorias mediante el desarrollo del binomio Entre la literatura matemática sobre Combinatoria está el casi exhaustivo Combinatorial Identities, de John Riordan (Krieger, 1968). En esta sección solamente veremos algunas identidades que se deducen con ayuda del binomio de Newton. Haciendo en (*) x = y = 1 obtenemos n n n 2n , + + + = n 0 1 identidad que tiene una interpretación conjuntista: Un conjunto de n elementos tiene 2n subconjuntos, incluyendo el conjunto vacío (que tiene 0 elementos) y el propio conjunto dado. Haciendo en (*) x = 1, y = -1 obtenemos n n n n − + + (−1) = 0 (n > 0) 0 1 n Consideremos la identidad algebraica (1 + x ) (1 + x ) n n =(1 + x ) 2n que escribimos desarrollando ambos miembros n n n n n n n n n 2n r + x + + x + x + + x = ∑ x . n 0 1 n r =0 r 0 1 Igualando los coeficientes de xn en cada miembro de la identidad tenemos n n n n n n 2n + + + = , 0 n 1 n − 1 n 0 n que se puede escribir, ya que cada sumando del primer miembro está formado por coeficientes binomiales iguales, en la forma (más sofisticada) 2 2 2 n n n 2n + + + = , 0 1 n n y que es un caso particular de la llamada identidad de Vandermonde. En otro libro clásico (y excelente) de Combinatoria, de Chen y Koh, Principles and Techniques in Combinatorics, (World Scientific, 1992) las identidades combinatorias ocupan buena parte de su capítulo 2. Como curiosidad, la portada de este libro muestra el triángulo aritmético en chino: El número de soluciones de algunas ecuaciones en enteros no negativos y su relación con la enumeración combinatoria ¿Cuál es el número de soluciones enteras no negativas, de la ecuación x1 + x2 + x3 + x4 = 6? ¿Y el de la ecuación x1 + x2 + + xk = n? De los varios métodos para resolver este problema elegimos buscar caminos en un retículo rectangular. Por razones que en seguida aparecerán, elegimos un retículo con 4 calles horizontales y seis movimientos hacia la derecha, como se ilustra en la figura siguiente: Si el número de movimientos en la fila i es xi, las dos imágenes ilustran dos de las soluciones de la primera ecuación. Claramente hay una correspondencia biunívoca entre los caminos mínimos y las soluciones de la ecuación, y por consiguiente el número de soluciones 9 coincide con el de caminos, que en nuestro caso es = 84 . 3 En el caso de la segunda ecuación, la cuadrícula debe tener k calles horizontales y n movimientos hacia la derecha. Un camino mínimo en este caso tiene n+k-1 movimientos, de los que cualesquiera k-1 deben ser hacia arriba. Por lo tanto el número de soluciones es n + k − 1 . k −1 La siguiente tabla muestra el número de formas de elegir k objetos de entre n, según que se permitan o no repeticiones y se considere o no el orden: Elegir k de entre n ordenados No ordenados Sin repeticiones n! = n(n − 1) ( n − k + 1) ( n − k )! n k Con repeticiones nk n + k − 1 k De izquierda a derecha, y de arriba abajo, las cuatro expresiones de la tabla cuentan el número de las variaciones sin repetición, combinaciones sin repetición, variaciones con repetición y combinaciones con repetición, de n elementos, tomados de k en k. Permutaciones con repetición y coeficientes multinomiales El ejemplo que sigue es del libro de Pólya, antes citado. Sean n casas iguales. Se van a pintar, r de ellas de rojo; s de ellas de amarillo y las restantes t, de verde. ¿De cuántas maneras se pueden asignar colores a las casas? n Primero elegimos las que serán pintadas de rojo: hay maneras de r elegirlas; quedan n – r casas, de las que s van a ser pintadas de n−r amarillo, para lo que hay formas de elegirlas; y ya no hay más s que una forma de elegir las que quedan, que serán verdes, ya que n n − r n = r + s + t . Por la regla del producto, en total tendremos r s formas de pintar las casas. Se tiene n n − r ( n − r )! =n ! n! ⋅ = r s r !( n − r ) ! s !( n − r − s ) ! r ! s !t ! que es simétrica con respecto a r, s y t, como no podía ser menos, pues el problema original lo es. Esta expresión cuenta el número de permutaciones con repetición de n elementos, de los que r son iguales entre sí, s son iguales entre sí y t son iguales entre sí, con r+s+t=n. Para ese número se utiliza la notación r n n! = s t r ! s !t ! que recibe el nombre de coeficiente multinomial. Un segundo ejemplo, tomado del libro de Victor Bryant Aspects of Combinatorics (Cambridge U.P. 1993): ¿Cuántos números de 10 cifras se pueden formar escribiendo, en algún orden, las cifras 4,4,4,4,3,3,3,2,2 y 1? Supongamos, por un momento, que las cifras fueran todas distintas, por ejemplo pintando los cuatros con 4 colores diferentes, los treses con tres colores diferentes y los doses con 2 colores diferentes. Entonces tendríamos 10! números, muchos de ellos repetidos si no se tuviera en cuenta los colores. Si los cuatros los barajamos entre sí, de todas las maneras posibles, hay 4! números que, cuando dejemos de imaginar los números coloreados, dan lugar al mismo número. Por 10! lo tanto después de esto hay números donde ya no es posible 4! distinguir los cuatros. Repitiendo el razonamiento con los treses 10! llegamos a números con los 4s y 3s indistinguibles. Y repitiéndolo 4!3! 10! con los doses hay números con 4s,3s y 2s indistinguibles. 4!3!2! 10! Como solamente hay una cifra 1, este número coincide con , 4!3!2!1! es decir, 12600 números en las condiciones del problema. Otra forma alternativa de resolver el problema es la siguiente: Se eligen 4 posiciones de entre las diez disponibles para colocar los 10 cuatros: esto se puede hacer de maneras; a continuación, las 4 tres posiciones para los treses de entre las seis que quedan: 6 maneras; luego las dos posiciones para los doses de entre las tres 3 3 que quedan, lo que da maneras; y finalmente, en la única 2 1 posición que todavía falta, se coloca el 1: manera. El principio de 1 la multiplicación (o de los pastores) da el resultado final: 10 6 3 1 = 12600 . 4 3 2 1 En general, si r ≥ 2 y k1 , k2 , , kr son enteros positivos cuya suma es n, entonces el número de formas de colocar n cosas en r cajas, con k1 cosas en la primera caja, k2 en la segunda, … , kr en la r-ésima se representa mediante k1 k2 n kr −1 n! = kr k1 !k2 ! kr ! que es el coeficiente multinomial. La justificación en este caso general de la fórmula anterior es la misma que la empleada antes en el ejemplo. Los coeficientes multinomiales aparecen en la llamada fórmula de Leibniz para la potencia de un polinomio: ( a1 + a2 + + ar ) n k1 ++ kr = n k1 =∑ k2 n kr −1 k1 kr a1 ar kr en donde la suma se extiende a todos los ki mayores o iguales que 0 cuya suma es n. El argumento para justificar la fórmula de Leibniz es el mismo que el empleado en la demostración de la fórmula de Newton, mutatis mutandis, y no lo repetimos. Bibliografía Anderson, I. A first Course in Discrete Mathematics (Springer, 2001) Briant, V. Aspects of Combinatorics introduction) (Cambridge U.P. 1993) Chen,C-C & Koh, K-M. Principles Combinatorics (World Scientific, 1992) (A and wide-ranging Techniques in Pólya, G. & Tarjan,R. & Woods,D. Notes on Introductory Combinatorics (Birkháuser, 2010) EL DESAFÍO DE ENSEÑAR ÁLGEBRA LINEAL POR COMPETENCIAS Claudia GUZNER 1 Resumen: La idea central es que el aprendizaje y la enseñanza de la Matemática no se limita a una absorción individual y memorizada de un cuerpo fijo de conceptos descontextualizados y de habilidades procedimentales transmitidas por el profesor, sino que es una construcción colaborativa, de conocimiento significativo y útil, que incluye habilidades de resolución de problemas, que articulan los ambientes cercanos al alumno. A la luz de esta reflexión, este trabajo tiene por finalidad mostrar cómo presentar los contenidos secuencialmente, con el objeto de orientar su profundización, ampliación y aprendizaje; a la vez que contemplar las posibilidades cognoscitivas y afectivas de los estudiantes; atendiendo a la articulación horizontal y vertical para un tratamiento de temáticas que requieren la integración de conceptos provenientes de diversas áreas. Palabras claves: competencia, aprendizaje, enseñanza. Si se conviene que la enseñanza es una práctica social que consiste en la mediación entre un sujeto que aprende y un contenido a aprender, queda claro que tanto alumnos como docentes son actores del proceso, cada uno con roles propios y complementarios. Juntos procurarán llegar a una construcción colaborativa de conocimiento significativo, para lo cual habrá que articular ambientes cercanos a los sujetos, enfrentándolos a situaciones nuevas en escenarios auténticos de la vida real, permitiéndoles caracterizar aquello que saben hacer en realidades simuladas o auténticas. Enseñar/ aprender no es identificar aquello que los estudiantes aún no han logrado o les falta sino más bien es conectar entre sí los “saberes” construidos en un sistema jerárquico de interrelaciones o red de significaciones que favorezca un uso creativo y flexible de aquello que se conoce. Así es que toda propuesta pedagógica deberá enfatizar el saber y el saber hacer en el mismo acto de enseñanza y aprendizaje (Dolz, J. & Ollagnier 2000). Todo esto en un marco de formación integral, en el cual cada individuo se comprometa y responsabilice por su propio aprendizaje y el de sus pares, a partir del intercambio y confrontación de ideas, opiniones, experiencias, en un marco de mutuo respeto. Queda claro que la oferta educativa tradicional, centrada en la teoría y el saber técnicoconceptual, que sólo propicia una desarticulación entre aquella, la prospección y la práctica, no responde a la mencionada concepción, que persigue que las personas se relacionen con el cómo es o cómo se hace algo a la vez que con el querer hacerlo. En este contexto, si la competencia es un conocimiento que se expresa en un saber hacer o actuar frente a tareas que plantean exigencias específicas (Thierry García, 2001), que supone 1 Mgter.; Universidad nacional de Cuyo, Argentina; [email protected] conocimientos, saberes y habilidades que emergen en la interacción que se establece entre el individuo y una determinada situación, se propone el aprendizaje basado en competencias como un paradigma que promueve más de una estrategia, sin prescribir, sugerir o recomendar, a fin de que el aprendiz no pierda ese espacio de libertad fundamental que permite la acción y su involucramiento profundo en la experiencia educativa planteada. La educación superior en general, y la matemática en particular, no es ajena a estos planteos. A la luz de las reflexiones previas, este escrito pretende mostrar cómo presentar -en esos ámbitos- los contenidos del Álgebra Lineal, con el objeto de orientar su profundización, ampliación y aprendizaje, a la vez que contemplar las posibilidades cognoscitivas y afectivas de los estudiantes, atendiendo a la articulación horizontal y vertical para el tratamiento de temáticas que requieren la integración de conceptos provenientes de diversas áreas. El escrito ha sido organizado en dos partes. La primera – Introducción – es un espacio de análisis y reflexión en el cual se delimita qué se entiende por competencia y por competencia matemática en el contexto de la presente investigación. La segunda – Resultados - describe algunas de las actividades que se llevan a cabo en un curso de Álgebra Lineal a nivel universitario en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Cuyo – Mendoza, Argentina-. Finalmente se ofrecen las conclusiones. 1. Introducción: Competencias y competencias matemáticas 1.a Competencias Se ha dicho que el conocimiento Figura 1. - es el resultado de una movilización de recursos de índole diversa, asociados a la aparición de esquemas organizados de "saber, saber hacer y saber ser". Esta visión, que adhiere a la idea del conocimiento no sólo como sinónimo de la aprehensión de un Figura 1. Construcción del conocimiento cuerpo rígido de contenidos disciplinares (Delors, 1996), es lo que se conoce como “aprendizaje por competencias”. El enfoque tiene una visión global de la situación de aprendizaje y, por tanto, del acto de aprendizaje, el cual, en este contexto, se manifiesta en términos de una combinación de atributos (conocimientos, aplicaciones, capacidades y responsabilidades) que describen el nivel o grado de competencia con que una persona es capaz de utilizarlos (González y Wagenaar, 2003). Desde una perspectiva estrictamente conceptual (Guzner, 2010), hablar de competencias supone referirse a la capacidad del sujeto que aprende a fin de movilizar los recursos que ha adquirido para afrontar y resolver una situación problema –intra o inter disciplinar-. Involucra, en principio, la selección, movilización y combinación de un conjunto de: • “conocimientos teóricos”, asociados a criterios de ejecución o desempeño (niveles de dominio) - con los cuales se puede reproducir, decir el qué es, el cómo es, el cuándo acerca de un objeto, • “habilidades”, como resultado de un proceso de integración que habilita contestar para qué es, cómo se usa ese objeto. Estas dos cuestiones refieren tanto a la naturaleza específica de un campo disciplinar - o a elementos comunes a cualquier outro-, así como a las capacidades de aprender, de pensar de forma creativa, de tomar decisiones, de resolver problemas, de usar la imaginación, por mencionar algunos. Todo esto sin dejar de lado a cualidades personales como la responsabilidad, la autoestima, la sociabilidad, el autocontrol y la integridad (Goody, 2001). Estas características delimitan las diferentes dimensiones de la competencia -Figura 2. -. conocimiento SABER de un campo disciplinar independientemente de la estructura cognitiva, ⇒ abstracción o conceptualización para obtener nuevos conocimientos a partir de los conocimientos previos; movilizar el saber y la experiencia en un SABER HACER contexto particular, ⇒ integrar o combinar saberes múltiples y heterogéneos, analizar, sintetizar, inferir; afrontar la vida con ciertas actitudes y valores, dando sentido a las otras dos dimensiones de la SABER SER ⇒ competencia, aprender, aprender a aprender, comprometerse. Figura 2. Dimensiones de la competencia. Así es que la educación basada en competencias se concibe como un modelo abierto que incluye diferentes campos semánticos de los conceptos y procedimientos, así como la reelaboración del conocimiento aprendido en situaciones nuevas, que conduce, a diferencia de los regímenes que promueven una estrategia única, a nuevos significados y a nuevas interpretaciones. Hacia el interior de las instituciones educativas, la incorporación de este tipo de aprendizaje conlleva considerar implicancias curriculares, didácticas y evaluativas: a) curriculares, ya que el diseño del currículo no ha de estar orientado sólo al contenido entendido como una cuestión disciplinar - como tradicionalmente se hace -, sino que implica una profunda refuncionalización de lo que se enseña CONCEPTOS Conceptos y teorías, sistemáticas y organizadas, que constituyen el campo de una disciplina PROCEDIMIENTOS Estrategias cognitivas generales, habilidades, reglas y métodos utilizados para producir conocimiento o para operar con objetos y conceptos ACTITUDES Valores y disposiciones significativas para el desarrollo personal y colectivo o se espera que se les enseñe a los sujetos, de forma explícita e implícita -Figura 3 -.; Figura 3. Clasificación de contenidos. b) didácticas, porque la escolarización no se reduce ya más al contacto con "contenidos de aprendizaje", sino que es la integración significativa de esos contenidos lo que le da sentido; c) evaluativas, porque el proceso de evaluación transita desde una evaluación por logros hacia una evaluación por procesos, en la cual no se evalúa un resultado aislado, circunstancial, sino todo el proceso de aprendizaje, en un contexto, con determinados sistemas simbólicos, atento a la motivación y desarrollo cognitivo propios de cada sujeto. Esta concepción provoca cuestionar la formación docente actual, la cual, a la luz de este nuevo paradigma, debería centrarse en lograr una mayor conexión entre los contenidos del currículo escolar y las prácticas docentes que revaloricen la gestión del saber. La educación basada en competencias - que está estrechamente vinculada con el principio de la comprensión empleada por la escuela de Gardner, en el que la prueba de comprensión no implica ni la repetición de la información aprendida, sino que incluye una aplicación adecuada de los conceptos y principios a problemas que se presentan por primera vez apunta, como se dijo, a integrar al estudiante en un ambiente de aprendizaje situado en campos acordes a su desarrollo integral como persona. 1.b Competencias matemáticas Las consideraciones anteriores no son ajenas a la educación matemática. Una sociedad tan cambiante como el actual exige que los ciudadanos posean una cultura matemática básica que les permita, entre otras cosas, abordar exhaustivamente la evolución de la ciencia y las nuevas tecnologías. Esta nueva realidad hace que, hacia el interior de la comunidad de educación matemática, se comience a tomar consenso que el aprendizaje de la disciplina es un proceso dinámico que tiene lugar en diferentes niveles: cada saber se basa en un saber anterior, los individuos, sobre núcleos problemáticos que integran su experiencia y su propia reflexión, construyen los nuevos conceptos y las vinculaciones que le dan sentido y aplicabilidad. En consonancia la enseñanza –de la disciplina- también comienza a revisarse. Se pasa de metodologías transmisionistas, centradas en la figura del profesor como presentador de contenidos en compartimentos estancos, a metodologías centradas en el alumno, que privilegian la solución de problemas por ellos vivenciados, tanto al interior de la matemática misma, como en otras disciplinas (Guzner, Schilardi et. al, 2010). En este sentido, varios son los autores que dan cuenta que la formación por competencias es un tema coyuntural en el debate académico. El enfoque conceptual y teórico subyacente en el paradigma marca la diferencia entre el contenido enseñado o transmitido: como se dijo, es un modelo abierto que incluye, por un lado, distintos campos semánticos de los conceptos, procedimientos y objetos matemáticos, y, por el otro, la reelaboración del uso aprendido en nuevas situaciones, que conducen a nuevos sentidos y nuevas interpretaciones. Así es que las tres dimensiones nucleares mencionadas para la competencia en general –SABER, SABER HACER, SABER SER -, podrían identificarse reconocimiento con el significativo del objeto matemático, la potencia para su modelación en contextos diversos y su comunicación, entendida ésta como la interacción social desde la que se construye su significado. •usar diferentes representaciones (lenguaje simbólico, coloquial, técnico) •comprender la relación entre COMPETENCIA diferentes representaciones MATEMÁTICA •operar •encontrar regularidades y patrones •reconocer isomorfismos con problemas ya conocidos •argumentar y generalizar •plantear interrogantes •enunciar problemas •explicar y justificar los resultados •comunicar el proceso y la solución •criticar el modelo y sus límites. •refinar y ajustar modelos •combinar e integrar modelos •traducir un problema a un modelo interpretar los resultados con actitud crítica •validar procesos Tienen sentido sólo en función del conjunto, aunque se puedan explicitar por separado Su puesta en acto simultánea muestra que Figura 4. Operacionalización de la competencia matemática un sujeto es competente en matemáticas, son expresión de su competencia matemática. Aunque no explícitamente dicho, la operacionalización incluye dimensiones metacognitivas – deseo de explorar, investigar, profundizar- ligadas a la reelaboración de significados. Esta nueva cultura del aprendizaje depende en gran medida del modelo pedagógico que la escuela ofrece a sus alumnos, de los que se requiere, como se ha dicho, construir su propio conocimiento, rechazando actividades mecánicas basadas en esquemas rígidos. Pero también requiere que el docente, en su tarea diaria en el aula, realice importantes esfuerzos de forma tal de hacer este cambio posible. 2. RESULTADOS 2.a Propósito general Teóricamente, adherir al enfoque en educación matemática, presupone abordar experiencias donde el alumno desarrolla su competencia desde la memoria comprensiva, la potencia matemática y la funcionalidad del contenido en sentido amplio. Prácticamente, la implantación del modelo implica la discusión del qué, el cómo, el cuándo. Conocimientos? Para qué C uá nd o é Qu Capacidades? Por conceptos? ⇒ Por problemas? Cóm o En qué dominios? Qué comportamientos se espera provocar? ⇒ Con qué medios? Individualmente? Grupalmente? Figura 5. Momentos de la competencia matemática. Si lo que se espera es promover no sólo la actividad sino la reflexión sobre la actividad, queda absolutamente claro que la separación que se suele hacer entre “teoría y práctica” consecuencia metodológica de la tradición axiomática – deductiva en la enseñanza de la Matemática - la teoría se memoriza y la práctica se aplica-, de ninguna manera se ajusta al objetivo que se plantea. Desde la perspectiva docente, la puesta en acto de estas ideas conlleva reflexionar sobre cuestiones relacionadas tanto con la propia praxis como con los procesos que activará un alumno para dar respuesta a la cuestión o cuestiones planteadas. De hecho, aunque estos dos asuntos puedan explicitarse separadamente, las especulaciones teóricas que al respecto se hagan tendrán sentido sólo en función del conjunto. En cuanto a la primera –la praxis-, fundamentalmente, habrá que analizar, a nivel macro, si las acciones que se emprenden ubican al alumno en el centro de la escena didáctica, si a partir de las situaciones que se ponen en juego el alumno moviliza sus propias acciones simbólicas y concretas y analiza sus producciones en un proceso individual o colectivo. El docente deberá responder, entre otras, las siguientes preguntas: ⇒ se facilita la apropiación de las propiedades de los saberes involucrados?, ⇒ se ponen en juego criterios de ejecución?, ⇒ se promueve la ejecución de algoritmos?, ⇒ se impulsa la reorganización de datos y relación de estos con saberes previos?, ⇒ se potencia la capacidad de reconocer patrones que aportan a la resolución de un problema dado?, ⇒ se realiza tratamiento y traducción entre diferentes registros de representación semiótica?, ⇒ se analiza un enunciado, se comunican sus resultados?, ⇒ se conjetura, se argumenta, se valida?, ⇒ se escucha, se debate? Respecto de las segundas –procesos que activan los estudiantes-, a nivel micro, habrá que observar qué posibilidades se ofrecen a los sujetos para ejecutar cuestiones relacionadas con el contenido conceptual abordado, el contexto al que se refiere y la forma en que se socializa. Producir material educativo bajo esta nueva concepción de la educación es ciertamente un desafío. Por varias décadas, un número razonable de textos se han ofrecido que siguen la línea clásica del pensamiento matemático, donde la disciplina se enseña, secuencialmente, por medio de definiciones rigurosas, teoremas y demostraciones cuidadosamente detalladas y exhaustivas. Esta modalidad no es acorde con la educación matemática del siglo XXI, donde el interés reposa en las formas de ser y hacer y en la cual, en consecuencia, los procedimientos deben ser desarrollados de forma tal que promuevan la autonomía de los sujetos, su pensamiento crítico y la cooperación entre ellos. De acuerdo con las ideas anteriores, se puede decir que el diseño del material innovador para la enseñanza de matemáticas y el aprendizaje de la matemáticas implica dos aspectos: el didáctico y el tecnológico. Para el primero – el segundo de los aspectos está más allá del alcance del presente trabajo-, debe realizarse un sondeo preliminar que tenga en cuenta un análisis: • epistemológico de los objetos matemáticos, • de la educación tradicional y sus efectos, • de las concepciones de los estudiantes, las dificultades y limitaciones que determinan su evolución, • de las restricciones del campo de la efectiva realización, • de la especificación de objetivos. Una propuesta que privilegie el desarrollo de la competencia matemática de una manera significativa del concepto por aprender intentará que, a partir de una situación problema, el estudiante logre, por medio de la utilización de un concepto no formal, la idea de concepto. 2.b El caso particular Como respuesta a esta descripción general, para el caso particular de la enseñanza del Álgebra Lineal a nivel universitario, MATRICES ECUACIONES LINEALES se desarrolla un material (Guzner, 2011) especialmente orientado a las titulaciones en Ciencias Económicas. El texto toma como unidades de análisis VECTORES ESPACIOS VECTORIALES DIAGONALIZACION los contenidos conceptuales mínimos que para esas carreras establece Facultad de Ciencias Económicas, Universidad TRANSFORMACIONES LINEALES Figura 6. Contenidos conceptuales Álgebra Lineal. Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina. Los contenidos, en sentido amplio, se gestionan a la manera de módulos de aprendizaje (Guzner, Del Vecchio, 2012), entendidos éstos como “… la unidad de enseñanza y aprendizaje con sentido completo, que integra los conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes requeridas para el logro de una capacidad, a través del desarrollo de diversas experiencias y actividades complejas, que se relacionan con el contexto real del campo laboral”. Cada uno de los módulos contempla cada una de las tres dimensiones de la competencia matemática, integradas en desempeños prácticos que muestran determinados niveles de logro en el desempeño. La organización macro es por capítulos y la micro, por secciones. Hacia el interior de cada uno de ellas se recurre a diferentes registros de representación semiótica – lenguaje coloquial, lenguaje simbólico, lenguaje computacional, tablas-. Asimismo, a medida que se avanza en el desarrollo, se retrotrae a saberes abordados en capítulos anteriores y se los trabaja a partir de los nuevos que se están aprendiendo, a fin de mostrar la coherencia interna del Álgebra Lineal. Cabe mencionar que cada sección finaliza con una serie de Ejercicios y Problemas, el primero de la lista una reflexión “algebraica” sobre la apertura de comienzo de Figura 7. Estructura de cada capítulo capítulo. Los ejercicios, al igual que los ejemplos, se organizan en torno a las tres dimensiones de la competencia matemática. Al finalizar completamente el abordaje, el usuario deberá estar en condiciones de extender el dominio y responder las siguientes preguntas: ⇒ ¿Estoy en condiciones de resolver el ejercicio? ⇒ ¿Estoy en condiciones de definir el concepto? ⇒ ¿Estoy en condiciones de distinguir entre... y ....? ⇒ ¿Estoy en condiciones de dar una conclusión? ⇒ ¿Estoy en condiciones de discutir las conclusiones? ⇒ ¿Estoy en condiciones de explicar el procedimiento? ⇒ ¿Estoy en condiciones retener la información adquirida? A continuación se ejemplifica la reseña anterior en el caso particular del abordaje del contenido conceptual Vectores en el Plano y en el Espacio. La propuesta corresponde al Capítulo 3 de la mencionada obra (Guzner, 2012). A fin de dejar claro qué se quiere significar con la reelaboración del conocimiento aprendido en nuevas situaciones, se muestran en primer lugar las actividades de apertura de los capítulos previos – Matrices y Sistemas de Ecuaciones Lineales, Figuras 8. y 9. respectivamente-. Al consultar http://mip.cba.gov.ar encontrará los sectores y subsectores en que se divide la economía de la provincia de Córdoba y las transacciones intersectoriales en miles de pesos corrientes a precios de mercado en un año dado. ………………………………………………………………………………………………………. Si los sectores de la mencionada economía se agrupan sólo en tres: Sector I o PRIMARIO DE ACTIVOS EXTRACTIVOS, Sector II o MANUFACTURERO y Sector III o de SERVICIOS no stockeable, responda: i. a qué sector de estos tres pertenecen los subsectores de 2.? ii. el subsector ELECTRICIDAD, pertenece al Sector MANUFACTURERO? iii. cómo se interpreta el siguiente cuadro de transacciones intersectoriales? SECTOR I 2.392.169,32 4 290.720,717 577.262,452 SECTOR I SECTOR II SECTOR III SECTOR II 2.758.564,737 SECTOR III 284.330,6231 2.414.017,046 1.188.497,866 1.350.511,12 4.666.116,526 También se obtienen los siguientes datos, que representan, respectivamente, las demandas internas de cada uno de los Sectores I, II y III : 11.396.905,7; 17.278.884,7 y 25.221.688,7. iv. Construya un nuevo cuadro que incorpore estas cantidades. v. Diga qué representan los valores: 16.831.970,4; 21.334.133,6 y 31.653.565,5; 290.720,717 16.831.970,4 . vi. Responda qué representa el siguiente cuadro llamado matriz de coeficientes técnicos. 0,142120576 0,129302872 0,008982578 0,017271936 0,034295596 0,113152805 0,055708748 0,042665371 0,147412035 Si se supone que los coeficientes técnicos se mantienen constantes durante dos años consecutivos, y xi es la compra total que subsector i realiza en esos años, responda qué representa: 0,142120576 vii. x1 0,017271936 0,034295596 viii. 0,142120576 x1 0,017271936 x1 0,034295596 x1 + 0,129302872 x2 + 0,113152805 x2 + 0,055708748 x2 + 0,008982578 x3 + 0,042665371 x3 + 0,147412035 x3 Figura 8. Actividad inicial Matrices Si los sectores y subsectores en que se divide la Economía de la provincia de Córdoba se agrupan sólo en tres y se consideran las demandas internas y los valores agregados correspondientes, se obtiene la siguiente matriz: valor agregado valor producción • demanda directa yj valor de producción xi 2392169 2758565 284331 1139690 1683197 290721 2414017 1350511 1727888 2133413 577262 1188498 4666117 2522168 31653566 3260152 6361080 6300958 13571818 16831970 14973054 21334134 25352607 31653566 Para cada uno de los tres sectores, escriba una expresión que represente el valor de producción xi i = 1, 2, 3 en función de las transacciones xij que realiza cada sector i para i = 1, 2, 3 con cada sector j para j = 1, 2, 3. ……………………………………………………………………………..………………………… • Verifique que − 0,0089 (1 − 0,1421) − 0,1293 − 0,0172 (1 − 0,1131) − 0,0426 − 0,0557 (1 − 0,1474) − 0,0342 x1 12536596,3 x = 19006773,1 2 x 3 27743857,6 representa lo expresado en i. ………………………………………….…………………………………………………………… • Interprete la igualdad matricial X = AX + Y si se considera que las matrices: x1 ... X= , ... x n a11 ... A= ... a n1 ... a1n ... ... y1 ... eY= ... ... ... ... a nn y n son respectivamente la matriz de valores de producción esperados de una economía divida en n sectores, la de coeficientes técnicos y la demandas internas. Figura 9. Actividad inicial Sistemas de Ecuaciones Lineales Los vectores en R2 y R3 se “inducen” a partir de un modelo hipotético – Figura 10.-: Suponga un modelo hipotético de una economía sencilla sin demanda externa de los sectores PESCA y PESCADO de la Provincia de Córdoba. Considere el problema de determinar las precios por unidad pA y pB de cada uno de los subsectores PESCA y PESCADO de la Provincia de Córdoba de forma tal que el intercambio encuentre un estado de equilibrio. i. Responda si estado de equilibrio se alcanzará si el precio unitario que paga el sector PESCA es 2,28861×1011 y el que paga el sector PESCADO es 3 en las unidades de $ correspondientes? Diga si los siguientes pares de números representan los precios que cada uno de los sectores puede imponer en las unidades de $ correspondientes a fin de alcanzar el equilibrio: (-6,48439×1011; -8.5), (1,1443×1011; 1.5), (8,39157×1011; 11), (5,72152×1011; 7.5), (0, 0) ii. por qué los precios que cada uno de los sectores puede imponer a fin de alcanzar el equilibrio pertenecen al conjunto de puntos cuya gráfica es: iii. En relación a i., si se supone que la matriz de intercambio se mantiene constante por cuatro años, y que los siguientes pares de números representan los precios unitarios en las unidades correspondientes de $ que cada uno de los subsectores PESCA y PESCADO en ese orden pagan a lo largo de esos cuatro años respectivamente: (4,19578×1011; 5.5), (4,57722×1011; 6), (4,95865×1011; 6.5), (5,34009×1011; 7) ………………………………………………………………………………………………………. Suponga un modelo hipotético de una economía sencilla sin demanda externa de los sectores CULTIVOS DE CEREALES, OLEAGINOSAS Y PASTOS FORRAJEROS; CULTIVO DE HORTALIZAS, LEGUMBRES, FLORES Y PLANTAS ORNAMENTALES; PRODUCCION DE SEMILLAS iv. Responda si estado de equilibrio se alcanzará si: los precios unitarios son respectivamente pA = 32.3978, pB = 1.61327 y pC = 1 en las unidades de $ correspondientes? los precios unitarios son respectivamente pA = 1, pB = 1.61327 y pC = 32.3978 en las unidades de $ correspondientes? los precios unitarios son respectivamente pA = 145.79, pB = 7.25974 y pC = 4.5 en las unidades de $ correspondientes? los precios unitarios son respectivamente pA = 0, pB = 7.25974 y pC = 4.5 en las unidades de $ correspondientes? ………………………………………………………………..……………………………………… v. Diga si las siguientes ternas de números representan los precios unitarios que cada uno de los sectores puede imponer en las unidades de $ correspondientes a fin de alcanzar el equilibrio: o (-64.7956; -3.22655; -2) o (0, 0, 0) o (16.1989; 0.806637; 0.5) o (161.989; 8.06637; 5) vi. Diga por qué los precios que cada uno de los sectores puede imponer a fin de alcanzar el equilibrio pertenecen al conjunto de puntos: P = {(x, y, z) / 0,8x -10 y -10z = 0 x, y, z ∈ R} cuya gráfica es Figura 10. Actividad inicial Vectores en R2 y R3 En síntesis, la apertura del módulo coincide con la modelación de dos problemas con dos sistemas, respectivamente, con dos y tres incógnitas. Se analizan pares y ternas de números reales y se los asocia con soluciones a los problemas. También se trabaja en registro gráfico. Se hacen suposiciones sobre las soluciones y se “opera” con ellas. El cuerpo del capítulo se compone de definiciones, propiedades, ejemplificación y ejercitación, como de manera sucinta se detalla a continuación. La descripción discurre sobre las distintas estrategias y registros que, a lo largo del módulo, se utilizan como recurso didáctico. Definición • Un segmento de recta dirigido es toda porción de recta entre dos puntos dados, llamados respectivamente punto inicial y punto final del segmento. En símbolos, se anota PQ , si P es el punto inicial y Q el punto final del segmento de recta PQ . • Gráficamente PQ se representa sobre un sistema de ejes ortogonales. • Se llama: o ejes coordenados al sistema de ejes ortogonales; o o o • • • • dirección de PQ a la recta que contiene a PQ El sentido de PQ queda implícito al hablar respectivamente de un punto inicial y un punto final de PQ . Usualmente se anota con la letra L. origen de coordenadas al punto de intersección de los ejes coordenados. Usualmente se anota con el símbolo 0; coordenadas de un punto a las proyecciones del punto sobre cada uno de los ejes coordenados. Cuando los ejes coordenados son dos, PQ es un segmento de recta dirigido en el PLANO o Espacio Bidimensional.Usualmente, se denomina abcisa y ordenada a las coordenadas de un punto en el PLANO. Las coordenadas del origen de coordenadas en el PLANO son 0 y 0 –. Cuando los ejes coordenados son tres, PQ es un segmento de recta dirigido en el ESPACIO o Espacio Tridimensional Las coordenadas del origen de coordenadas en el ESPACIO son 0, 0 y 0 ………………………………………………………………………………………….. Ejemplo La Figura muestra una colección de vectores de R2. v ∈ R2, v = (-3, 2). w ∈ R 2, w = (2,-3). Los vectores v y w son distintos. ………………………………………………………………………………………… Ejemplo La Figura muestra una colección de vectores de R3. v ∈ R3, v = (-1, 1, 1). w ∈ R3, w = (1, -1, 1). Los vectores v y w son distintos. ……………………………………………………………………………………………… Ejemplo − 1 4 a13 i. Con la sola información que A = 3 2 a23 , es suficiente que 0 1 a33 a13 a sea el vector nulo de 23 a33 R3 para afirmar que A es una matriz no inversible cuyas dos primeras columnas son los vectores u − 1 4 = 3 y v = 2 . det A = 0; 0 1 − 1 4 a13 ii. Con la sola información que A = 3 2 a23 , es necesario que 14a33 + a23 + 3a13≠ 0 para 0 1 a33 que A sea una matriz inversible. Si 14a33 + a23 + 3a13= 0, la matriz A tiene sólo 2 pivotes. ………………………………………………………………………………………………………… Definición • • La suma de dos vectores u, v de R2 es otro vector de R2 que se obtiene sumando a u un vector equivalente a v con extremo inicial en el extremo final de u. Se anota u + v a la suma de los vectores u, v. Usando componentes – Figura 44.- , si u = (a, b) y v = (c, d) entonces u + v = (a+c, b+d). • Debe quedar claro que la notación u + v hace referencia a la suma de dos vectores, en tanto que las notaciones a + c y b + d hacen referencia a la suma de números reales. Habrá que diferenciarlos según el contexto en el cual aparezcan ………………………………………………………………………………………………………… Propiedad • • i. ii. iii. iv. La suma de vectores de R2 es conmutativa. La suma de vectores de R2 es asociativa. La suma de vectores de R2 admite elemento neutro. Los vectores de R2 admiten opuesto respecto de la suma de vectores. Para i, en símbolos: u, v ∈ R2 → u + v = v + u Demostración: o Algebraica: como cada vector de R2 se puede identificar con una matriz 2x1, la demostración algebraica es análoga a la de la conmutatividad de la suma en ese caso. o Gráfica: es suficiente analizar qué sucede al realizar las sumas “u + v” y “v + u”. ……………………………………………………………………………………………………… Propiedad Es suficiente que el producto de un escalar por un vector sea el vector nulo para que el escalar sea cero o el vector nulo. • • • La condición es trivialmente necesaria. Las demostraciones geométricas son análogas al caso R2. Como cada vector de R3 se puede identificar con matriz de orden 3x1, las demostraciones algebraicas son análogas a las de ese caso. ………………………………………………………………………………….…………………… Ejemplo Se sabe que un agente de bolsa registra los valores máximos y mínimos semanales del precio de las acciones de tres compañías I, II y III. i. El vector M = (M1 ,M2 ,M3 ) representa los valores máximos semanales de las acciones de tres compañías I, II y III. ii. El vector m = (m1 , m2 , m3 ) representa los valores mínimos semanales de las acciones de las mismas tres compañías I, II y III. iii. Los vectores que tienen su extremo final sobre la recta L representan los valores máximos de las tres compañías en una semana dada, si los mismos cambiaran su valor en la misma proporción. 1 iv. El vector (M + m) representa los valores semanales promedio del precio de las acciones de las 2 tres compañías mencionadas. v. El vector ( (0.15 M + 0.05 m) representa los valores semanales promedio del precio de las acciones de las tres compañías mencionadas, si se espera que, en una semana dada, los valores máximos se incrementen por igual en un 30% y los mínimos, en un 10%. ………………………………………………………..…………………………………….. Propiedad Si u no es el vector nulo de R3, v = ( unitario. • Tácito, v es un vector unitario en la dirección y sentido de u. • En símbolos: u ∈ R3 ∧ u ≠ O → 1 u u =1. 1 u u ) es un vector Demostración: 1. u ∈ R3 ∧ u ≠ O 2. u = (a, b, c) con a ≠ 0 3. u = + a +b +c 4. u ≠0 2 1 5. De 2., por definición de norma De 2. y 3. De 4. u= u b a c , , 2 2 2 2 2 2 2 2 2 + a +b +c + a +b +c + a +b +c 1 u 7. a2 ( 1 u De 2. y 5. u = ( a2 + b 2 + c 2 )2 8. 2 ∈R u 1 6. 2 De 1., sin pérdida de generalidad + b2 ( a2 + b 2 + c 2 )2 + c2 De 6., por definición de norma ( a2 + b 2 + c 2 )2 u =1 De 7., operando ……………………………………………………………………………………………… Ejercicios y Problemas 1. Identifique las tareas que en los ítemes 1/8 de comienzo de capítulo corresponden a los conceptos de: o vector; o vector en el PLANO; o vector en el ESPACIO; o componentes. ………………………………………………………………………………………………………………………………………… 2. Dados los vectores u = (-1, 3, 4) y v = (5, 0, -1), construya, de ser posible: i la matriz de coeficientes de un sistema de ecuaciones homogéneo compatible determinado; ii la matriz de coeficientes de un sistema de ecuaciones compatible indeterminado; iii la matriz de coeficientes de un sistema de ecuaciones a veces incompatible. ………………………………………………………………………………………………………………………………………… 3. Dado el vector u = (1, ….) en el PLANO, indique en cada caso si es posible completar la segunda componente de u de forma tal que se cumplan las condiciones que se listan a continuación. Si su respuesta es afirmativa, muestre u. i. u = 1 ; ii. u = 2 y la dirección del vector u es la recta de ecuación y = 2x; iii. u = (0, 1); iv. la dirección del vector u es la recta de ecuación y = 3x; v. Los vectores u y v = (-1, -1) tienen la misma dirección. ………………………………………………………………………………………………………… 4. Escriba, de ser posible, una condición: i. suficiente pero no necesaria para que el producto de un escalar por un vector de R2 sea el vector nulo de R2; ii. necesaria para que un vector de R2 sea combinación lineal de un conjunto de vectores de R2 dados; iii. necesaria para que el vector nulo de R2 se pueda escribir como combinación lineal de un conjunto de vectores de R2; iv. necesaria pero no suficiente para que un vector de R2 sea unitario. ………………………………………………………………………………………………………………………………………………………. 5. Con la sola información que proporciona la siguiente lista Input/Output en referencia a dos matrices M1 y M2, responda Sí, NO, NO SE SABE. i. Las columnas de M1 son vectores de R3; ii. Si las columnas de M1 son vectores de R3, las filas también lo son; iii. Las columnas de M2 son vectores de R3; iv. M2 es una matriz inversible; v. Las columnas de M2 son vectores de R3 de igual dirección. 3. DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN El surgimiento de un nuevo modelo productivo, basado en un uso intensivo del conocimiento, requiere evaluar la gestión del saber y la información. Sin perder de vista el horizonte de la calidad en educación formal o informal, o el interés y los efectos que aquella tiene sobre aspectos personales o colectivos de los sujetos, una adaptación a la realidad actual aparece como esencial y se considera que el enfoque por competencias responde a estas nuevas exigencias del contexto. Bajo este marco es que se reportan algunos resultados de una investigación educativa, llevada a cabo durante los últimos años, acerca de la enseñanza y aprendizaje de la Matemática de manera experimental, con aplicaciones en el mundo real, usando el mencionado enfoque. Como resultado, se ha desarrollado un texto completo de Álgebra Lineal cuya validación fue llevada a cabo por profesores y estudiantes universitarios, así como por profesores de enseñanza media. La retroalimentación de esos cotejos ha sido incorporada al texto, pudiéndose afirmar que tanto unos como otros han sido asimilado y aceptado el enfoque. Se cree que de esta forma se ha realizado una contribución a las acciones que deberían llevarse a cabo en la educación matemática en el siglo XXI, a modo de potenciar en los estudiantes habilidades en saber, saber hacer y saber ser. Se sostiene que con este aporte los estudiantes tendrán una visión más "viva", "realista" y "accesible" del Álgebra Lineal. No obstante, una real reconversión en la enseñanza de la Matemática todavía está muy distante. Muchos textos del tipo del que aquí se ha presentado deberían ser escritos y diseminados a gran escala, a la vez que privilegiar una profesionalización de la carrera docente. En cuanto a los logros, no se puede decir que sean representativos de todos los alumnos, o de todas las instituciones, o del plan de estudios completo, pero en nuestra opinión es una buena aproximación a las cuestiones planteadas. La reforma que se propone deberá ampliarse a otros actores del sistema educativo, así como a la enseñanza de otras áreas de la misma disciplina. Referencias Barnett, R. (2001) Los límites de la competencia. El conocimiento, la educación superior y la sociedad. Gedisa. Delors, J. (1996) La educación encierra un tesoro. Santillana Unesco. Dolz, J. & Ollagnier, E. (2000). La notion de compétence: nécessité ou vogue éducative. Raisons éducatives, vol.1-2(2). De Boeck Université. Gonczi, A. 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(2010) Un estudio descriptivo explortorio en relación a las competencias y la teoría curricular de la enseñanza de la Matemática. En EDIUNC (çed.) Educación basada en competencias. Cap. 3. Guzner, C. (2011) Álgebra Lineal para estudiantes de Ciencias Económicas. Talleres gráficos FCE- UNCuyo Guzner, C. y Del Vecchio, S. (2012) La concreción del enfoque basado en competencias. EAE. IBERFOP-OEI, (1998) Metodología para definir competencias. CINTER/OIT. Le Boterf, G. (2000) Ingeniería de las competencias. Gestión. Morin, E. (2000) Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Paidós. Perrenoud, P. (1999) Construir competencias desde la escuela. Dolmen. Rue, J. (2002) Qué enseñar y por qué. Elaboración y desarrollo de proyectos de formación. Paidós. Thierry García, D. (2001) La educación y capacitación basadas en competencias. Modelos y metodologías. Revista Iberoamericana de Educación. GENERALIZACIÓN DE UN PROBLEMA PROPUESTO EN LA XLVI OME Y SU RELACIÓN CON LA DESIGUALDAD DE NESBITT D.M. BĂTINEŢU-GIURGIU1 y NECULAI STANCIU2 Abstract. This note presents a generalization for a problem given to the XLVI th National Mathematics Olympiad of Spain (OME). Keywords: Cauchy-Buniakovski-Schwarz’s inequality, Bergström’s inequality, Jensen’s inequality, the AM-QM inequality, Nesbitt’s inequality, Olympiad. MSC : 26D15 En la XLVI Olimpiafa Matemática Española, Fase Nacional (Valladolid), el segundo día (27de marzo de 2010) se propuso el siguiente Problema. Sean a, b, c numerous reales positivos. Probar que: 3a + b + c 15 a + b + 3c a + 3b + c (1) + + ≥ 3a + 3b + 2c 3a + 2b + 3c 2a + 3b + 3c 8 Si llamamos a = x1 , b = x 2 , c = x3 , y X 3 = a + b + c , entonces la (1) se convierte en: X 3 + 2 x1 X 3 + 2 x 2 X 3 + 2 x3 15 (2) + + ≥ 3 X 3 − x1 3 X 3 − x 2 3 X 3 − x3 8 Nos proponemos generalizar esta desigualdad y dar varias demostraciones de su generalización. Una Generalización. Si n ∈ N * − {1,2} , a ∈ R+ , b, c, d , x k ∈ R+* , ∀k = 1, n , n X n = ∑ x k and k =1 cX n > d max xk 1≤ k ≤ n entonces: aX n + bx k (an + b )n ≥ ∑ cn − d k =1 cX n − dx k Demostración 1. Tenemos: n n n (an + b ) X = ∑ (aX n + bxk ) = ∑ aX n + bxk ⋅ (aX n + bxk )(cX n − dxk ) k =1 k =1 cX n − dx k ( C − B − S ) n aX + bx k n ∑ (aX n + bx k )(cX n − dx k ) ⇔ ≤ ∑ n k =1 cX n − dx k k =1 2 2 1 2 2 n Department of Mathematics, “Matei Basarab” National College, Bucharest, Romania Department of Mathematics, “George Emil Palade” General School, Buzău, Romania (3) 2 (C − B − S ) ≤ (an + b )2 X n2 aX + bx k ⇔∑ n ≥ k =1 cX n − dx k n n ∑ (aX k =1 n + bx k )(cX n − dx k ) = (an + b )2 X n2 n = (an + b ) k =1 2 (acn + bc − ad )X X k =1 2 n − bd ∑ x k =1 2 k . n 2 n = n acnX + (bc − ad )X n ∑ x k − bd ∑ x 2 n 2 k Por la desigualdad de las medias aritmética y geométrica deducimos que: n ∑ xk2 ≥ k =1 Entonces obtenemos: n aX n + bx k ≥ ∑ k =1 cX n − dx k 2 X2 1 n ∑ xk = n n k =1 n (an + b )2 X n2 (acn + bc − ad )X n2 − bd X n2 (4) = (an + b )2 n acn 2 + (bc − ad )n − bd = (an + b )n . cn − d n Demostración 2. Se tiene: n n (aX n + bxk )2 aX + bx k , Un = ∑ n =∑ k =1 cX n − dx k k =1 (aX n + bx k )(cX n − dx k ) Y por la desigualdad de Bergström deducimos que: Un ≥ n ∑ (aX n + bx k ) k =1 ∑ (acX n k =1 2 n 2 + (bc − ad )X n x k − bdx 2 k ) = (an + b )2 X n2 , n acnX + (bc − ad )X − bd ∑ x 2 n 2 n k =1 2 k Donde hemos tenido en cuenta (4), y se obtiene la conclusión. Demostración 3. Consideremos el trinomio: 2 aX n + bx k Tn = ⋅ X − (aX n + bx k )(cX n − dx k ) = cX − dx n k n n n aX + bx k 2 X − 2 ∑ (aX n + bx k ) X + ∑ (aX n + bx k )(cX n − dx k ) = = ∑ n k =1 k =1 k =1 cX n − dx k n n aX + bx k 2 n X − 2 ∑ (aX n + bx k ) X + ∑ acX n2 + (bc − ad )X n x k − bdx k2 . = ∑ n k =1 k =1 k =1 cX n − dx k Ya que los valores del trinomio cuadrático Tn ( x) ≥ 0 , ∀x ∈ R resulta: ( ) n aX + bx k n n ∑ acX n2 + (bc − ad )X n x k − bdx k2 = ∑ (aX n + bx k ) ≤ ∑ n k =1 k =1 cX n − dx k k =1 n n aX + bx k acnX n2 + (bc − ad )X n2 − bd ∑ x k2 . = ∑ n k =1 k =1 cX n − dx k Entonces, por (4) se obtiene que: n n aX n + bx k bd 2 2 ∑ acn + bc − ad − ( ) + ≤ aX bx X n ⇔ ∑ n k n k =1 k =1 cX n − dx k 2 ( ) (an + b ) X n2 aX n + bx k ⇔∑ ≥ bd 2 k =1 cX n − dx k X n acn + bc − ad − n 2 n aX + bx k n(an + b ) ≥ ⇔∑ n = acn 2 + (bc − ad )n − bd k =1 cX n − dx k 2 n n(an + b ) n(an + b ) , q.e.d. = (an + b )(cn − d ) cn − d * Demostración 4. Consideremos R n = R × R × ... × R , n ∈ N , donde para cualesquiera 2 = n x, y ∈ R , n x = (x1 , x 2 ,..., x n ) , y = ( y1 , y 2 ,..., y n ) y para todo λ ∈ R , definimos: x + y = ( x1 + y1 , x 2 + y 2 ,..., x n + y n ) ∈ R n y λx = (λx1 , λx 2 ,..., λx n ) ∈ R n . Así R n es un espacio vectorial sobre el cuerpo R .Definimos también n , : R n × R n → R , x, y = ∑ x k y k ( producto escalar de los vectores x e y ) y entonces R n se k =1 convierte en un espacio de Hilbert en el que una base ortogonal es el sistema de vectores 1, if i = j , y ek = (δ 1k , δ 2 k ,..., δ nk ) , donde k = 1, n y δ : An × An → R , δ (i, j ) = δ ij = 0, if i ≠ j An = {1,2,..., n}. La función δ es el símbolo de Kroneker. Es obvio que ei , e j = δ ij , ∀(i, j ) ∈ An × An .Así, ek = 1, ∀k = 1, n y entonces el sistema {ek }1≤k ≤n es un sistema ortonormal de vectores del espacio de Hilbert Rn . Para cualquier vector x ∈ R n , consideremos la función ϕ : An → R , ϕ (k ) = x, ek = ϕ k o sea, x = (ϕ1 , ϕ 2 ,..., ϕ n ) , donde ϕ k , k = 1, n son los coeficientes de Fouriers de x del espacio de Hilbert R n con respecto al sistema ortonormal {ek }1≤ k ≤ n . n Por lo tanto para todo x ∈ R n , x = (x1 , x 2 ,..., x n ) se tiene x = ∑ ϕ k ek = (ϕ1 , ϕ 2 ,..., ϕ n ) , es decir k =1 x k = ϕ k = x, ek , ∀k = 1, n . También tenemos: x 2 n = x, x = ∑ x k2 , y entonces se verifica la k =1 desigualdad de Cauchy-Schwarz x, y ≤ x ⋅ y , ∀x, y ∈ R n , O sea 2 n n n ⇔ ∑ x k y k ≤ ∑ x k2 ∑ y k2 . k =1 k =1 k =1 n Considerando los vectores x, y ∈ R , con: ( x, y ) 2 ≤ x ⋅ y 2 2 aX n + bx1 aX n + bx 2 aX n + bx n e x= , ,..., cX − dx cX dx cX dx − − 1 2 n n n n y = (aX n + bx1 )(cX n − dx1 ), (aX n + bx 2 )(cX n − dx 2 ),..., ( (aX n + bxn )(cX n − dxn ) ) . Por la desigualdad de Cauchy-Schwarz: 2 n n ( x, y )2 = ∑ (aX n + bxk ) ≤ ∑ aX n + bxk k =1 k =1 cX n − dx k n ∑ acX n2 + (bc − ad ) X n x k − bdx k2 ⇔ k =1 2 n (an + b ) X n2 aX + bx k (5) ⇔∑ n ≥ n 2 2 k =1 cX n − dx k (acn + bc − ad )X n − bd ∑ xk ( ) k =1 Como la función f : R → R , f (t ) = t es convexa en R , por la desigualdad de Jensen se deduce que: 2 X2 x1 + x 2 + ... + x n Xn f ( x1 ) + f ( x 2 ) + ... + f ( x n ) ≥ nf = n = n , n n n Y entonces de (5) resulta que: 2 n (an + b )2 X n2 aX n + bx k ( (an + b )n , an + b ) n = = Un = ∑ ≥ bd 2 (an + b )(cn − d ) cn − d k =1 cX n − dx k X n acn + bc − ad − n q.e.d. Aplicaciones. * + * + 2 * + A.1. Si a = 0, b = c = d = 1 , entonces la relación (3) se escribe como: n xk n , ≥ ∑ n −1 k =1 X n − x k y para n = 3 obtenemos la desigualdad de Nesbitt, i.e.: x3 x1 x2 3 + + ≥ . x 2 + x3 x3 + x1 x1 + x 2 2 A.2. Si a = 1 , b = 2 , c = 3 y d = 1 , entonces la (3) resulta ser: n X n + 2 x k (n + 2 )n , ≥ ∑ 3n − 1 k =1 3 X n − x k de la que para n = 3 se obtiene la (2) y después se deduce (1). Problemas para los más Jóvenes 46 Cuatro problemas de la Prueba Final de la Olimpiada Juvenil de Matemáticas de Venezuela 2011(Primer Año) PMJ46-1 Sea n un entero positivo y k el entero que resulta al borrar la cifra de las unidades de n: (por ejemplo, si n = 7492; k = 749): Si n k = 2011; ¿cuál es el valor de n? PMJ46-2 d = ABCD es un cuadrado y P es un punto exterior tal que AP = AC y BCP o d 17 : Calcular la medida del ángulo BAP : PMJ46-3 Se forma una larga lista de dígitos escribiendo los enteros del 1 al 2011 uno a continuación de otro: 1234567891011121314:::::::200920102011 ¿Cuántas veces aparece la secuencia 12 en esta lista? PMJ46-4 En cierto pueblo, 32 del total de hombres está casado con 35 del total de mujeres. Si nunca se casan con forasteros, ¿cuál es la proporción de personas solteras respecto a la población total del pueblo? 1 La Batalla Matemática Eric Milesi, Óscar Rivero 1 Introducción La extinta Unión Soviética era un lugar donde las competiciones de matemáticas gozaban de gran importancia y prestigio dentro del sistema educativo, y hoy en dı́a aún perviven diversos torneos y olimpiadas oriundos de dicho paı́s. El profesor Francisco Bellot Rosado introdujo el curso pasado en España las denominadas ”batallas matemáticas”, formato originario de San Petersburgo que permite desarrollar la capacidad expositiva y la claridad a la hora de presentar los razonamientos, a la par que potencia el trabajo colectivo y, obviamente, la habilidad para resolver problemas. En las batallas matemáticas, los contendientes son divididos en dos equipos y llevados a aulas separadas donde se les entregan copias de los enunciados y se les deja un tiempo razonable para su resolución (en nuestro caso hora y media). Posteriormente, ya reunidos los equipos bajo la presidencia del jurado, se procede al inicio de la batalla; primero, cada uno de los bandos designa a un capitán, que deberá salir al estrado para batirse con su oponente en el denominado torneo de capitanes, que consta sólo de un problema, generalmente de baja dificultad. El primero en encontrar la respuesta correcta lo indica y procede a su explicación, y en caso de ser ésta aceptada, es declarado ganador, mientras que en caso contrario puede optarse por automáticamente declarar al oponente ganador o esperar a que éste encuentre la solución. El equipo que gana este torneo inicial será el que tome la iniciativa, y decidirá si quiere empezar retando o siendo retado; este proceso se mantendrá a lo largo de toda la contienda, y se basa en que un equipo (digamos A), desafı́a al oponente a la resolución de uno de los problemas, pudiendo el equipo contrario (digamos B) aceptar o rehusar la propuesta. En el primer caso, uno de los miembros debe salir a la pizarra a exponer la solución, actuando uno de los integrantes del otro bando como oponente, pudiendo refutar o criticar sus argumentos. Si el equipo B rechaza el reto, entonces alguien del equipo A deberá explicar la solución, teniendo entonces a un miembro de B como oponente; si A también rechazase el salir a explicar la solución, se considera ”reto incorrecto”. Finalmente, tras cada turno, el 1 jurado reparte y distribuye los 12 puntos que vale cada problma, teniendo en cuenta la claridad en la exposición del ponente y la labor crı́tica del oponente, pudiendo también atribuirse puntos a sı́ mismo. En caso de reto incorrecto, el equipo B (el que fue retado), recibe 6 puntos y el jurado otros 6 puntos. Después de que el equipo ganador del torneo de capitanes decida si quiere empezar retando o siendo retado, se va alternando el equipo que lanza el desafı́o, hasta que uno de los bandos en contienda ya no tenga más problemas resueltos, momento a partir del cual el otro equipo presenta el resto de soluciones que haya obtenido. Concluida la batalla, se suman los puntos y el equipo que tenga mayor cantidad es proclamado ganador por el jurado. 2 Problemas y soluciones A continuación presentamos los enunciados y soluciones de la batalla matemática celebrada el pasado verano en las sesiones de preparación del equipo que representó a España en la IMO 2012. Problema 1. Un número de 6 cifras (todas distintas y no nulas) es divisible por 37. Demostrar que, por permutación de sus cifras, se pueden obtener al menos 23 números más, igualmente divisibles por 37. Solución. El número de 6 cifras distintas lo podemos escribir en la forma A = a6 a5 a4 a3 a2 a1 , que en notación decimal es a6 a5 a4 a3 a2 a1 = a6 105 + a5 104 + a4 103 + a3 102 + a2 10 + a1 Ahora construimos una tabla donde figuran los restos de las potencias de 10n , (0 ≤ n ≤ 5) módulo 37: n 0 1 2 3 4 5 Dado que A ≡ 0 10n (mod 37) 1 10 −11 1 10 −11 (mod 37), entonces se tiene que a6 105 + a5 104 + a4 103 + a3 102 + a2 10 + a1 ≡ −11a6 + 10a5 + a4 − 11a3 + 10a2 + a1 ≡ 0 (mod 37) De donde se deduce que permutando a6 con a3 , a5 con a2 y a4 con a1 en a6 a5 a4 a3 a2 a1 el número que resulte seguirá siendo congruente con 0 2 (mod 37). Si procedemos de esta forma obtenemos 8 permutaciones que corresponden a números multiplos de 37 que son la inicial y 7 más. Multiplicando −11a6 + 10a5 + a4 − 11a3 + 10a2 + a1 por 10, se obtiene 10 × (−11a6 + 10a5 + a4 − 11a3 + 10a2 + a1 ) ≡ 1a6 − 11a5 + 10a4 + a3 − 11a2 + 10a1 ≡ 0 (mod 37) De lo que se deduce que el número a5 a4 a6 a2 a1 a3 es múltiplo de 37 porque a5 105 + a4 104 + a6 103 + a2 102 + a1 10 + a3 ≡ 1a6 − 11a5 + 10a4 + a3 − 11a2 + 10a1 ≡ 0 (mod 37) Permutando nuevamente a6 con a3 , a5 con a2 y a4 con a1 en a5 a4 a6 a2 a1 a3 se obtienen 8 nuevas permutaciones que no han sido contadas antes porque ahora la primera cifra o bien es a5 o bien es a2 y antes era a6 o a3 . Nuevamente multiplicando por 10 10 × (1a6 − 11a5 + 10a4 + a3 − 11a2 + 10a1 ) ≡ 10a6 + 1a5 − 11a4 + 10a3 + 10a2 − 11a1 ≡ 0 (mod 37) se obtiene que el número a4 a6 a5 a1 a3 a2 es múltiplo de 37 porque a4 105 + a6 104 + a5 103 + a1 102 + a3 10 + a2 ≡ 10a6 + 1a5 − 11a4 + 10a3 + 10a2 − 11a1 ≡ 0 (mod 37) Permutando a6 con a3 , a5 con a2 y a4 con a1 en a4 a6 a5 a2 a3 a2 se obtienen 8 nuevas permutaciones que son distintas de las anteriores porque la primera cifra es o a4 o a1 . En total tenemos 7 + 8 + 8 = 23 permutaciones que son múltiplos de 37, y hemos terminado. Problema 2. En un torneo de patinaje hay 10 participantes. Cada uno de los tres jueces asigna a cada participante un rango (de 1 a 10, indicando el puesto que según él merece cada uno). Javi suma sus tres rangos y esa suma es menor que la de los demás participantes. ¿Cuál es el mayor valor de esa suma, que puede obtener Javi? Solución. Denotamos A, B, C, . . . , J a los participantes, siendo Javi la J. A continuación vamos a mostrar un caso en el que se observa que es posible que la puntuación de Javi sea 15 y se cumplan las condiciones del enunciado. Esto se puede ver con la siguiente distribución de puntos: 3 Part. A B C D E F G H I J Juez 1 2 10 4 1 9 7 3 8 6 5 Juez 2 4 2 10 7 1 9 6 3 8 5 Juez 3 10 4 2 9 7 1 8 6 3 5 Total 16 16 16 17 17 17 19 19 19 15 Como se observa en la tabla, la puntuación de Javi es 15, cada participante tiene puntuación mayor que 15 y cada juez ha atribuido todos los posibles rangos entre 1 y 10. Una vez constatado que es posible que Javi tenga 15 puntos vamos a ver que no es posible que tenga 16. Procederemos por reducción al absurdo. En efecto, supongamos que la puntación de Javi fuese p = 16 y sea S la suma de las puntuaciones totales. Por las condiciones del enunciado la puntuación de cada particpante distinto de Javi tiene que ser como mı́nimo p+1. Entonces tenemos: S ≥ p+9(p+1) ⇒ S ≥ 16+9×17 = 169. Luego la suma de las puntuacions totales es como mı́nimo 169. Pero por otro lado tenemos que la suma de puntuaciones totales es S = (1 + 2 + . . . + 10) × 3 = 10(10 + 1) × 3 = 165 2 Luego no puede ser que S ≥ 169, y por lo tanto Javi no puede tener 16 puntos. Problema 3. Probar que la ecuación √ √ √ (a + b 3)4 + (c + d 3)4 = 1 + 3 no tiene solución en números racionales a, b, c, d. Solución. En lo que sigue vamos a necesitar el siguiente resultado. √ √ Lema 1. Si x, y, z, t ∈ Q+ entonces x + y 3 = z + t 3 si y sólo si x = z e y = t. √ Demostración. Supongamos que y 6= t . Tenemos que x − z = (t − y) 3 √ √ x−z y como t − y 6= 0 entonces 3 = con lo que 3 ∈ Q+ lo cual es t−y falso. Ahora desarrollamos las potencias de ambos binomios √ √ y agrupamos los términos con 3 por un lado y aquellos que no tengan 3 por otro. Según 4 el lema anterior tenemos que 29 = 1 a4√ + 6a2 b2 3 +√9b4 + c4 +√6c2 d2 3 + d√ √ 3 3 3 3 4a b 3 + 4ab 3 3 + 4c d 3 + 4cd 3 3 = 3 Restando de la primera la segunda ecuación se obtiene √ √ √ √ √ a4 −4a3 b 3+6a2 b2 3−4ab3 3 3+9b4 +c4 −4c3 d 3+6c2 d2 3−4cd3 3 3+d2 9 = 1− 3 Factorizando resulta √ √ √ (a − b 3)4 + (c − d 3)4 = 1 − 3 Como la parte izquierda es suma de cuadrados, entonces √ √ (a − b 3)4 + (c − d 3)4 ≥ 0 √ y resulta claro que 1 − 3 < 0. Por tanto, el término izquierdo es no negativo y el derecho estrictamente negativo entonces la igualdad no se alcanza y por consiguiente la ecuación no tiene soluciones con a, b, c, d ∈ Q+ . Problema 4. La regla infinita con dos puntos marcados en ella, a distancia L entre sı́, es un instrumento de dibujo para trazar la recta que pasa por dos puntos, y también para marcar el punto de la recta ya dibujada, a distancia L de uno de los puntos dados. No se puede usar el otro lado de la regla ni girarla alrededor de un punto fijo (si la giras, la regla se cae). Usando solamente esta regla y un lápiz, construir una recta paralela a una dada. Solución. Tenemos una recta dada en el plano a la cual llamaremos r. En r fijamos un punto cualquiera al cual llamaremos B. Con nuestra regla podemos encontrar dos nuevos puntos A y C sobre r tal que estén a distancia L de B y a distancia 2L entre ellos. 5 Podemos marcar un punto cualquiera H en el plano, y al unirlo con B utilizando nuestra regla, tendremos una recta arbitraria que pasa por B. Sobre esta recta BH que llamaremos s, con la regla trazamos D y E a distancia L de B. Llamamos a las rectas AD y CE, t y t0 respectivamente. Se forman ası́ dos triángulos congruentes ABD y BCE. Tienen dos lados iguales (los que miden L), y el ángulo ABD es igual a CBE y por ser isósceles, BAD = BCE = α. Como comparten el punto B entonces las rectas t y t0 son paralelas porque los triángulos son homotéticos. Desde A y C se mide sobre t y t0 respectivamente, una distancia L obteniéndose ası́ los puntos F y G y la recta F G, paralela a r porque la distancia de F a r es d = L sin α y es la misma que la que hay desde G a r, d = L sin α. Problema 5. Con la notación [x] representamos el mayor entero que es menor o igual que x (es decir, es la parte entera de x). Hallar todos los h n2 i números primos que son de la forma , siendo n un número natural. 5 Solución. Como n es un entero consideraremos 5 casos distintos que corresponden a los restos de n módulo 5. Es decir, 0, 1, 2, 3, 4. Caso 1 : n ≡ 0 (mod 5) Entonces n = 5k con k ∈ Z y n2 = 25k 2 , por tanto 2 25k 2 n = = 5k 2 5 5 que es primo si y solo si k = 1 y entonces h n2 i 5 = 5. Caso 2 : n ≡ 1 (mod 5) Entonces n = 5k + 1 ⇒ n2 = 25k 2 + 10k + 1 luego 2 n 25k 2 + 10k + 1 = = 5k 2 + 2k = k(5k + 2) 5 5 Para que sea primo uno de los dos factores tiene que ser 1 pero como h n2 i 5k + 2 > 1 entonces k = 1 y = 1(5 × 1 + 2) = 7 5 Caso 3 : n ≡ 2 (mod 5) Entonces n = 5k + 2 ⇒ n2 = 25k 2 + 20k + 4 luego 2 n 25k 2 + 20k + 4 = = 5k 2 + 4k = k(5k + 4) 5 5 Ahora para que sea primo k = 1 pero con k = 1 obtenemos 1(5 × 1 + 4) = 9, que no es primo. Caso 4 : n ≡ 3 (mod 5) Entonces n = 5k + 3 ⇒ n2 = 25k 2 + 30k + 9 luego 2 n 25k 2 + 30k + 9 = = 5k 2 + 6k + 1 = (k + 1)(5k + 1) 5 5 6 Para que sea primo uno de los dos factores tiene que ser 1, pero ambos factores son 1 cuando k = 0 y entonces tenemos (0 + 1)(5 × 0 + 1) = 1 que no es primo Caso 5 : n ≡ 4 (mod 5) Entonces n = 5k + 4 ⇒ n2 = 25k 2 + 40k + 16 luego 2 n 25k 2 + 40k + 16 = = 5k 2 + 8k + 3 = (k + 1)(5k + 3) 5 5 Para que sea primo o 5k + 3 = 1 ⇒ k = −2 lo cual es imposible porque h n2 i5 = (0 + 1)(5 × 0 + 3) = 3 que k ∈ Z o si k + 1 = 1 ⇒ k = 0 y resulta 5 sı́ es primo. h n2 i Por tanto todos los posibles valores primos que toma son: 3, 5, 7. 5 Problema 6. El dragón es una pieza de ajedrez situada en una casilla de un tablero infinito (con las casillas coloreadas de blanco y negro alternativamente). Se mueve de la manera siguiente: salta a una casilla contigua (horizantal o verticalmente) y a continuación salta N casillas en la dirección perpendicular a la de la primera parte de su movimiento. Es decir, para N = 2 el movimiento del dragón es el de caballo de ajedrez. ¿Para qué valores de N el dragón puede alcanzar cualquier casilla del tablero? Solución. Vamos a distinguir dos casos: N par y N impar. Con N impar no se puede porque el dragón se va a mover sólo sobre las casillas de un mismo color, dado que en cada salto se produce un cambio de color y en total hará N + 1 saltos, que será un número par. Es decir, cambiará de color un número par de veces y como sólo hay dos colores es lo mismo que no cambiar, luego o sólo se mueve por casillas blancas o sólo por negras. Procedamos ahora con el caso en que N sea par. Vamos a demostrar que el dragón sı́ que puede ir a todas las casillas. En efecto, vamos a describir un algoritmo que nos permita llegar a una casilla contigua a la que se parte. Ası́ por simetrı́a podrı́amos ir a cualquiera de las 4 direcciones y en consecuencia podremos ir a todas las casillas del tablero. Supongamos que partimos de la posición (x, y) y queremos llegar a (x, y + 1). Entonces el dragón puede moverse de 8 maneras distintas que corresponden a los siguientes vectores: (1, N ) (1, −N ) (−1, N ) (−1, −N ) (N, 1) (N, −1) (−N, 1) (−N, −1) 7 Ahora, partiendo de (x, y) y mediante combinaciones lineales de los vectores anteriores queremos llegar a (x, y + 1). Empezamos con (x, y) + (1, N ) + (1, −N ) = (x + 2, y), y en dos pasos podemos ir a (x + 2, y). Ahora como N es par si repetimos este procedimiento N2 veces llegaremos a la casilla (x + N, y), y si ahora nos movemos (−N, 1) iremos a (x + N, y) + (−N, 1) = (x, y + 1). Análogamente podemos ir a (x + 1, y), (x − 1, y) y (x, y − 1) y ası́ el dragón puede ir a todas las casillas del tablero. Centro de Formación Interdisciplinaria Superior (CFIS) BARCELONA TECH, Barcelona, España. [email protected], [email protected] 8 Solución al problema 1 de la Competición Mediterránea 2012, dada por el concursante Darío Nieuwenhuis durante la prueba. Sea S la suma de todos los elementos de la matriz. Entonces, f X F (i) = i=1 c X C(j) = S; j=1 ya que estamos sumando todos los elementos de la matriz, por …las o por columnasExiste un i tal que S ; f F (i) porque si todas las F (i) fueran menores, f X F (i) < S; lo cual no puede ser. i=1 Análogamente, existe un j tal que C(j) S c Entonces f F (i) S c C(j); como queríamos demostrar, para algún par (i; j): 1 SOLUCIÓN A TRES PROBLEMAS PROPUESTOS EN LA COMPETICIÓN MATEMÁTICA MEDITERRÁNEA 2012 PROBLEMA 1 Dado el número α > 0, se considera la sucesión infinita definida por x1 = 1, y para todo n ≥ 1, αxn = x1 + x2 + · · · + xn+1 . Determinar el menor α para el cual todos los términos de esta sucesión son números reales positivos. Solución por Daniel Lasaosa Medarde, Universidad Pública de Navarra, Pamplona, España Claramente, x2 = α − 1, mientras que para todo n ≥ 2, xn+1 = α(xn − xn−1 ). La sucesión tiene entonces ecuación caracterı́stica √ α ± α2 − 4α . ρ2 − αρ + α = 0, con raı́ces ρ± = 2 Si ambas raı́ces son iguales, es decir, α = 4, tenemos que ρ = 2, y entonces xn = (A + Bn)2n para ciertas constantes A, B, y para que x1 = 1 y x2 = α − 1 = 3, tras algo de álgebra se obtiene A = B = 14 , es decir, xn = (n + 1)2n−2 . Esta expresión es claramente positiva para todo entero positivo n. Si ambas raı́ces son distintas, entonces xn = Aρ+ n + Bρ− n . Para que x1 = 1 = Aρ+ + Bρ− y x2 = α − 1 = Aρ+ 2 + Bρ− 2 , se obtiene tras algo de álgebra que ρ− + A = ρ+ 2ρ−ρ 2 , B = − ρ 2 −ρ 2 , es decir, − + − xn−1 = ρ+ n − ρ− n ρ+ n − ρ− n √ = . ρ+ 2 − ρ− 2 2α α2 − 4α √ Si α > 4, entonces ρ+ , ρ− son reales con ρ+ > ρ− > 0 por ser α2 − 4α < α, luego ρ+ n − ρ− n es real positivo para todo entero positivo n, en particular también para n = 2, con lo que xn−1 es el cociente de dos reales positivos, luego real positivo. Nos resta entonces analizar sólo el caso α < 4. Pero en ese caso, nótese que ρ+ , ρ− son complejos conjugados con módulo p α2 + (4α − α2 ) √ |ρ| = = α, 2 √ es decir, podemos escribir ρ± = α (cos β ± i sin β), donde i es la unidad imag√ inaria, y 0 < β < 90◦ es un ángulo del primer cuadrante tal que cos β = 2α y √ sin β = 4−α 2 . Tenemos entonces, por la fórmula de De Moivre, que √ n−3 sin(nβ) xn−1 = α . sin β Luego para que todos los términos de la sucesión fueran positivos, sin(nβ) tendrı́a que ser siempre positivo, es decir, el ángulo nβ deberı́a permanecer siempre en el primer y segundo cuadrante. Pero como 0 < β < 90◦ , existe un N mı́nimo tal que N β > 180◦ , siendo además (N − 1)β < 180◦ , luego N β < 180◦ + β < 270◦ , y N β está en el tercer cuadrante. Luego para este N , se tiene xN −1 < 0. Concluimos entonces que xn es real positivo para todo entero positivo n, si y sólo si α ≥ 4, y el valor buscado es α = 4. 1 PROBLEMA 2 Sean α, β, γ los ángulos de un triángulo acutángulo ABC. Probar que 23 tan2 α 1 1 X +3 ≥ 2. 3 tan β tan γ tan α + tan β + tan γ cı́clica Solución por Daniel Lasaosa Medarde, Universidad Pública de Navarra, Pamplona, España Denotemos por comodidad u = tan α, v = tan β y w = tan γ, donde u, v, w son reales positivos por ser ABC acutángulo. Es conocido (o fácilmente demostrable) que u + v + w = uvw por ser las tangentes de un triángulo, con lo que llamando respectivamente A, G a las medias aritmética y geométrica de u, v, w, tenemos por la desigualdad entre ambas, que √ G3 = uvw = u + v + w = 3A ≥ 3G, A ≥ G ≥ 3, √ √ con igualdad si y sólo si ABC es equilátero con u = v = w = 3. Como A ≥ 3, claramente la siguiente desigualdad es más fuerte que la inicialmente propuesta: 2 tan2 α 1 1 X ≥ 2. + 27 3 tan β tan γ tan α + tan β + tan γ cı́clica Demostraremos esta desigualdad. Para ello, notemos en primer lugar que se puede reescribir como u3 + v 3 + w 3 27 + 6 ≥ 2. 3 3G G Pero por la desigualdad entre medias aritmética y cúbica aplicada a u, v, w, tenemos que 3 G9 u3 + v 3 + w3 u+v+w uvw 3 = ≥ = , 3 3 3 27 con lo que nos basta con demostrar que G6 27 + 6 ≥ 2, 27 G claramente cierto en virtud de la desigualdad entre medias, y con igualdad si y sólo √ si G6 = 27, o G = 3. Queda pues demostrada la desigualdad más fuerte que la inicialmente propuesta, y dándose la igualdad en ambas claramente si y sólo si ABC es equilátero. PROBLEMA 4 Sea O el circuncentro y R el radio de la circunferencia circunscrita de un triángulo ABC, y denotemos por (O; R) a esta circunferencia. Sea k1 una circunferencia tangente a las semirrectas (AB y (AC y también tangente internamente a (O; R). Sea k2 una circunferencia tangente a las semirrectas (AB y (AC y además tangente exteriormente a (O; R). Llamamos A1 , A2 a los centros respectivos de k1 , k2 . Demostrar que (OA1 + OA2 )2 − A1 A2 2 = 4R2 . Solución por Daniel Lasaosa Medarde, Universidad Pública de Navarra, Pamplona, España Claramente, el incentro I de ABC, A1 y A2 , están sobre la bisectriz del ángulo ∠BAC. Al mismo tiempo, O y A1 están alineados con el punto de tangencia de (O; R) y k1 , con lo que OA1 = R − ρ1 , siendo ρ1 el radio de k1 , y de forma análoga OA2 = R + ρ2 . Finalmente, como k1 , k2 son resultado de aplicar una homotecia ρ1 1 a la circunferencia inscrita a ABC, con centro en A, tenemos que AA AI = r , y ρ2 AA2 AI = r , donde r es el inradio de ABC. Con todo lo anterior, el resultado a demostrar es equivalente a IA2 (ρ2 − ρ1 )2 = 4R2 , r2 o tras algunas simplificaciones, y usando que ρ2 − ρ1 6= 0, el problema se reduce a demostrar que 4Rr · IA = (IA2 − r2 )(AA2 − AA1 ). (2R + ρ2 − ρ1 )2 − Consideremos ahora los triángulos OAI, OAA1 , OAA2 . Claramente ∠OAI = ∠OAA1 = ∠OAA2 por estar I, A1 , A2 en la bisectriz de ∠BAC. Se tiene entonces por el teorema del coseno que OA2 + AI 2 − OI 2 OA2 + AA21 − OA21 OA2 + AA22 − OA22 = = , 2OA · AI 2OA · AA1 2OA · AA2 con lo que usando OI 2 = R2 − 2Rr, llegamos a (4Rr + AI 2 )AI AI 3 , AA = , 2 AI 2 − r2 AI 2 − r2 de donde se sigue tras sustitución el resultado deseado. AA1 = Nota: El cı́rculo k1 se suele llamar incı́rculo mixtilı́neo (mixtilinear incircle), y como corolario de uno de los pasos intermedios de esta solución, hemos hallado por métodos elementales la relación de proporcionalidad entre éste y el incı́rculo: AA1 ρ1 AI 2 1 = = = AI r AI 2 − r2 cos2 A 2 . A partir de esta relación, es sencillo comprobar que la perpendicular a la bisectriz del ángulo ∠BAC por I, corta a los lados AB, AC en los puntos de tangencia de k1 , quedando además establecido un método de construcción del incı́rculo mixtilı́neo. Problemas propuestos 226-230 Problema 226 (propuesto por Marcel Chirita, Bucarest, Rumania) Se considera la sucesión (xn )n 0 tal que xn = 73xn con x0 = 4a + 3; x1 = 256a + 27; a 2 Z: 256xn 1 para todo n 2 N; En lo que sigue se considerará el resto de la división de xn por 11, para todo n 2 N: a) Determinar los valores del parámetro a para los que (xn ) es convergente, y en tales casos calcular su límite. b) Si a 1 es múltiplo de 11, determinar la sucesión (xn ) : Problema 227 (propuesto por Marcel Chirita, Bucarest, Rumania) En el plano del cuadrado ABCD, M es un punto cualquiera. Encontrar el conjunto de valores de la expresión R(M ) = MA + MC : MB + MD Problema 228 (propuesto por Roberto Bosch Cabrera, Florida, Estados Unidos) Se divide un cuadrado en n2 cuadrados más pequeños, iguales entre si, mediante paralelas a los lados del inicial (la cursiva es del editor).Se trazan algunas diagonales de los cuadrados pequeños, de modo tal que no haya dos diagonales con un punto común. Sea D(n) el número máximo de diagonales que es posible trazar en esas condicones. Probar que: a)D(1) = 1; D(2) = 3; D(3) = 6; D(4) = 10; D(5) = 16 2 b) Si n es impar, entonces D(n) c) Si n es par, entonces D(n) (n + 1) 2 $ 2 % 2 (n + 1) = 1 2 d) Encontrar una expresión para D(n) (Nota del editor: como es habitual, se marca con * un apartado propuesto sin solución) Problema 229 (propuesto por Marcel Chirita, Bucarest, Rumania) Sea ABC un triángulo y AA1 ; BB1 ; CC1 tres cevianas concurrentes en un punto O interior al triángulo. Sean 1 = [AOC1 ] [COA1 ] ; = [BOA1 ] [AOB1 ] ; = [COB1 ] [BOC1 ] : Probar que si + + = 0; entonces = 0: Nota: [P QR] es el área del triángulo PQR. Problema 230 (Propuesto por Marcel Chirita, Bucarest, Rumania) Demostrar que se veri…ca la siguiente desigualdad triangular: max 1+ a b 1+ a b ; 1+ c a 1+ 2 b c ; 1+ c a 1+ c b 4 PROBLEMA 221, propuesto por D.M. Batinetzu-Giurgiu, Bucarest, y Neculai Stanciu, Buzau Sea ABCD un tetraedro y M un punto del espacio, distinto de los vértices del tetraedro. Demostrar que MB MC MD MA + + + ≥ MB + MC + MD MC + MD + MA MD + MA + MB MA + MB + MC R+r 4r ≥ , R R donde R y r son, respectivamente, el radio de la esfera circunscrita y el de la esfera inscrita en el tetraedro. ≥ Solución por Daniel Lasaosa Medarde, Universidad Pública de Navarra, Pamplona, España Lema 1: Sea ABCD un tetraedro inscrito en una esfera de radio R. Entonces 3 √ , con igualdad si y sólo si el tetraedro es regular. su volumen es V ≤ 98R 3 Demostración 1: Siendo O el circuncentro del tetraedro, podemos elegir sin pérdida de generalidad un sistema de coordenadas XY Z con centro O, tal que el plano XY sea paralelo al triángulo ABC, y que los ángulos formados por el eje X con respecto a las rectas OB 0 , OC 0 sean iguales, donde B 0 , C 0 son las proyecciones respectivas de B, C sobre el plano XY . Entonces, A ≡ (ρ cos δ, ρ sin δ, h), B ≡ (ρ cos α, ρ sin α, h), C ≡ (ρ cos α, −ρ sin α, h) y D ≡ (ρ0 cos β, ρ0 sin β, h0 ), donde ρ2 + h2 = ρ02 + h02 = R2 , y sin pérdida de generalidad h > h0 . Se tiene entonces que el volumen V del tetraedro cumple 3V = ρ2 (h − h0 ) |sin α (cos δ − cos α)| . Nótese que esta cantidad es una función periódica e infinitamente derivable respecto de α, δ salvo en los puntos en los que V = 0, con lo que podemos ignorar el valor absoluto, derivar respecto a las variables, e igualar a 0 para obtener todos los extremos. Derivando respecto a δ, tenemos que sin pérdida de generalidad por simetrı́a, ha de darse cos δ = 1, y sustituyendo y derivando respecto a α, ha de darse además 0 = 2 cos2 α − cos α − 1 = (2 cos α + 1)(cos α − 1). Claramente cos α = 1 resulta en un tetraedro con volumen 0 (mı́nimo absoluto), luego cos α = − 21 resulta en el máximo absoluto, a la vez que V es claramente máximo cuando h0 es mı́nimo, es decir, para h0 = −R. Luego √ √ √ 3 3 2 3 3 2(R + h) + (2R − 2h) 8R3 2 V ≤ ρ (R+h) = (R+h) (2R−2h) ≤ = √ , 4 8 8 3 9 3 como querı́amos demostrar, y con igualdad en la última desigualdad si y sólo si R + h = 2(R − h), es decir R = 3h. Las condiciones δ = 0, cos α = − 12 , h = −R y h = R3 son claramente equivalentes a que ABCD sea regular. Lema 2: Sea un tetraedro ABCD de volumen V , inradio r y suma de áreas de p √ 3 sus caras S. Entonces, S ≥ 6 3V 2 . Se√da la igualdad si y sólo si ABCD es regular. Como consecuencia, se tiene V ≥ 8 3r3 , con igualdad si y sólo si ABCD es regular. 1 Demostración 2: Sean a, b las longitudes respectivas de AD, BC, d la distancia entre las rectas AD, BC, y θ el ángulo formado por ambas rectas. Se puede completar ABCD añadiendo rectas paralelas a sus lados, hasta formar un paralelepı́pedo con base de área ab sin θ, y altura d, luego 6V = abd sin θ. Al mismo tiempo, existen puntos P ∈ AD, Q ∈ BC, tales que P Q ⊥ √AD, BC y P Q = d. Se tiene entonces que la altura del triángulo DAB desde B es BP 2 + d2 , luego el área [DAB] del triángulo DAB es AD 2 veces esta altura. Se tiene entonces que r r √ √ CP 2 + d2 + BP 2 + d2 BC 2 b2 2 [CDA] + [DAB] = a ≥a d + = a d2 + . 2 4 4 Esta última desigualdad es consecuencia de la desigualdad entre medias aritmética y geométrica para BP 2 , CP 2 , y de la desigualdad triangular BC ≤ BP + CP . Se da la igualdad entonces si y sólo si BP = CP estando P en el interior del segmento q 2 BC. De forma similar, [ABC] + [BCD] ≥ b d2 + a4 , con igualdad si y sólo si AQ = DQ. Usando las anteriores desigualdades, aplicando la desigualdad entre medias, usando la expresión de V y que sin θ ≤ 1, se obtiene s !2 r r 2 2 b a a2 b2 2 2 2 2 2 d + +b d + ≥ 4ab d + ≥ 4abd2 +a2 b2 = S ≥ a d + 4 4 4 4 √ d3 + d3 + 3V 36V 2 24dV 3 + 2 2 ≥ 12V ≥ 36V 3V , 2 sin θ d d sin θ equivalente a la primera parte del Lema 2. Se da la igualdad en esta desigualdad si y sólo si, simultáneamente, a = b, sin θ = 1, 3V = d3 , BP = CP , AQ = DQ, o equivalentemente, si y sólo si ABCD es regular. Como consecuencia de lo anterior, y al ser 3V = Sr, tenemos que √ √ 3 9V 2 = S 2 r2 ≥ 36V 3V r2 , V ≥ 8 3r3 , = con igualdad claramente si y sólo si ABCD es regular. Lema 3: En todo tetraedro ABCD, se da R ≥ 3r, con igualdad si y sólo si ABCD es regular. Demostración 3: Consecuencia inmediata de los Lemas 1 y 2. Usando el Lema 3, es claro que nos basta con demostrar que, para cualesquiera reales no negativos a, b, c, d (que representan respectivamente a M A, M B, M C, M D), y siendo s = a + b + c + d, se cumple a b c d 4 + + + ≥ . s−a s−b s−c s−d 3 Esto es consecuencia trivial de la desigualdad de Jensen aplicada a la función f (x) = x 2s 00 s−x , con derivada segunda estrictamente positiva f (x) = (s−x)3 para 0 < x < s, y con igualdad si y sólo si a = b = c = d. Se sigue entonces el resultado pedido, dándose la igualdad en la segunda desigualdad si y sólo si ABCD es regular, y en la primera si y sólo si ABCD es regular y además M es su centro. Problema 222 (propuesto por el editor) ABC es un triángulo; P es un punto variable tal que m.BP.sen APB n.CP.sen APC , donde m y n son constantes. Determinar el lugar geométrico del punto P. Solución de Floro Damián Aranda Ballesteros, profesor del IES Blas Infante de Córdoba (España). Sea P un punto del plano ( P A ) y consideramos el segmento AP. 1 2 De la expresión dada, m.BP.sen APB n.CP.sen APC . AP.m.BP.sen APB 1 . AP.n.CP.sen APC 2 1 1 m.( . AP.BP.sen APB) n.( . AP.CP.sen APC ) m. Area( APB) n. Area( APC) 2 2 En definitiva, Area( APB) Area( APC ) n . m Es decir, Area( APB) Area( APC ) c.hc n h n.b . c b.hb m hb m.c Esta última condición equivale a decir que un punto P del plano distinto de A pertenecerá a nuestro L.G. si y solo si d ( P, AB) hc n.b . d ( P, AC ) hb m.c Ahora bien, esta última condición algebraica es fácil de construir geométricamente. Los puntos que la verifican están situados en un par de rectas que, pasando por el punto A, cumplen la condición exigida. Podemos visualizar dicha construcción para un caso concreto. Sean los valores m=2 y n=3. Como podemos observar, el L.G. reside en las rectas que pasan por las dos diagonales de cualquier paralelogramo centrado en el punto A y de lados paralelos a los lados AB=c y AC=b, respectivamente y cuyos lados distan del centro A unos valores que en proporción coincide con d ( P, AB) n.b . d ( P, AC ) m.c Problema 223 Demostrar que si los lados de un cuadrilátero son las raíces de la ecuación x 4 − 4 x3 + 6qx 2 + ( 8 − 12q ) x + s = 0 entonces el cuadrilátero tiene un círculo inscrito. Solución Es sabido que la condición necesaria y suficiente para que un cuadrilátero admita círculo inscrito es que los pares de lados opuesto sumen lo mismo. Vamos a caracterizar los polinomios mónicos de grado cuatro para que los dos pares de raíces sumen lo mismo. Sea el polinomio x 4 + a3 x3 + a2 x 2 + a1 x + a0 = 0 y sean sus raíces α , β , γ , δ Por las fórmulas de Cardano-Vieta tenemos α + β + γ + δ = −a3 αβ + αγ + αδ + βγ + βδ + δγ = a2 αβγ + αβδ + αγδ + βγδ = −a1 αβγδ = a0 Imponiendo la condición α + β = γ + δ (pondremos α + β = γ + δ = m ) y operando, queda 2m = − a3 αβ + δγ + m2 = a2 (αβ + γδ ) m = −a1 αβγδ = a0 Eliminado αβ + γδ y m de las tres primeras, resulta a2 − a32 2a1 = (1) 4 a3 que es la condición para que dos pares de raíces sumen lo mismo. Sólo queda verificar que los coeficientes de nuestra ecuación cumplen (1): ( a3 = −4, a2 = 6q, a1 = 8 − 12q ) a32 16 a2 − = 6 q − = 6 q − 4 4 4 2a1 −24q + 16 = = 6q − 4 a3 −4 Cristóbal Sánchez-Rubio Benicasim Problema 224 3 de noviembre de 2012 Problem No. 224. Si n es un entero impar, y a, b, c, · · · son las n − 1 raı́ces n−ésimas complejas de la unidad, probar que: (ar − 1)(br − 1)(cr − 1) · · · = n (ar + 1)(br + 1)(cr + 1) · · · = 1 si r es cualquier nÃo mero primo con n. Demostración. (Devis M. Alvarado, University of Puerto Rico Mayaguez) Pn−1 (I) Consideremos el polinomio: P (z) = i=0 z i con n impar, y sean ωi las n − 1 raı́ces complejas. Si ω es una de i n−1 estas raı́ces, se tiene que {ωi }n−1 i=1 = {ω }i=0 . Tambien como n y r son primos relativos, y sean r1 , r2 , · · · , rn−1 tal que ir ≡ ri mod(n) entonces {r1 , r2 , · · · , rn−1 } es una permutación de {1, 2, 3, · · · , n − 1} P (z) = n−1 Y n−1 Y n−1 Y n−1 Y i=1 i=1 i=1 i=1 (z − ωi ) = (z − ω i ) = (z − ω ri ) = (z − ω ir−kn ) = n−1 Y i=1 esta última igualdad por que ω n = 1. n−1 Y n−1 Y n−1 Y n−1 Y n−1 Y i=1 i=1 i=1 i=1 i=1 (z − ω ir ) = (z − ωir ) = (−1) (ωir − z) = Evaluando P (z) en z = 1 se obtiene n−1 Y n−1 X i=1 i=0 (ωir − 1) = (1) = n (II) Evaluando P (z) en z = −1 se obtiene n−1 Y i=1 (ωir + 1) = n−1 X (−1)i = i=0 que era lo que se querı́a. 1 1 − (−1)n =1 2 (ωir − z) (z − ω ir ) PROBLEMA 225, propuesto por el Editor XAY B es una cuaterna armónica; P es un punto que no está en la recta XY , tal que XP = p, Y P = q, y el ∠XP Y = θ. Si x, y son las longitudes de las perpendiculares desde X e Y a la tangente común a los dos circulos de centros respectivos A y B, y que pasan por P , demostrar que xy = pq · cos θ. Observación del editor: se utiliza la notación inglesa para la cuaterna armónica: los puntos X, A, Y, B estan en ese orden sobre la recta. Solución por Daniel Lasaosa Medarde, Universidad Pública de Navarra, Pamplona, España Sean a, b los radios de los cı́rculos de centros A, B por P . Aplicando el teorema de Stewart a las cevianas P A, P Y en los triángulos P XY, P XB respectivamente, y tras reorganizar términos, se llega a AY 2 XA 2 Y B 2 XB 2 XY 2 XY 2 a2 − p − q = p + q − b2 . XA · AY XA AY XB YB Y B · XB YB AY = XB , luego Ahora bien, por ser XAY B cuaterna armónica, se tiene que XA 2 2 2 sumando ambas expresiones para p + q − XY , y aplicando el teorema del coseno, se tiene XY 2 XY 2 XB · Y B · a2 − XA · AY · b2 4pq cos θ = a2 − b2 = XY 2 . XA · AY Y B · XB AY 2 · XB 2 XB Por ser ABCD una cuaterna armónica, existe k = XA AY = Y B , con lo que podemos escribir XY = AY (k + 1) = (k − 1)Y B donde claramente k no puede tomar los valores −1, 0, 1 porque los puntos X, A, Y, B son distintos. Usando k, la anterior expresión se puede escribir como p2 + q 2 − XY 2 = 4pq cos θ = (k + 1)2 a2 − (k − 1)2 b2 . k Consideramos ahora dos casos: Caso 1: La recta tangente a ambos cı́rculos es paralela a la recta XB, o equivalentemente, a = b = x = y, con lo que pq cos θ = (k + 1)2 − (k − 1)2 xy = xy, 4k como querı́amos demostrar. Caso 2: La recta tangente a ambos cı́rculos no es paralela a la recta XB, o equivalentemente x, a, y, b son todos distintos y están en orden bien estrictamente creciente, bien estrictamente decreciente. Por el teorema de Thales, a−x y−x b−x y−a b−y = = = = , XA XY XB AY YB donde los numeradores en la anterior cadena de igualdades son, o todos positivos, o todos negativos. Se comprueba fácilmente que (k +1)a = ky +x y (k −1)b = ky −x, luego (ky + x)2 − (ky − x)2 pq cos θ = = xy, 4k como querı́amos demostrar. 1 Noticia de Congresos, reseña de libros y de páginas web 46 Posamentier, A.S. & Lehman, I: The secrets of triangles. Prometheus Books 2012 Alfred S. Posamentier es un viejo conocido de los aficionados a la resolución de problemas, no solamente de Geometría, sino también de Álgebra. Decano de la school of Education en el Mercy College de Nueva York, es autor, con Charles T. Salkind, de dos buenos ejemplos de libros de resolución de problemas de estas dos áreas de las Matemáticas. Por su parte, Ingmar Lehmann, de la Universidad Humboldt de Berlin, preside la Sociedad de Estudiantes de Matemáticas de Berlin y es coautor de otros varios libros con Posamentier. The Secrets of Triangles, subtitulado A mathematical Journey, es recorrido muy complete por las propiedades del triángulo, muchas de cuales son completamente desconocidas por un buen número estudiantes actuales y – lo que es peor – por buena parte también profesores, al menos en mi país. El décimo capítulo del libro, dedicado a fractales, es una colaboración especial de Robert A. Chaffer, de Universidad Central de Michigan. un las de de los la Los autores ponen énfasis en las propiedades que pueden resultar inesperadas (es lo que ellos llaman secretos del triángulo, y de ahí el título) y no debería faltar en la biblioteca de ningún centro escolar. Valladolid, noviembre de 2012. Francisco Bellot Rosado