UNIVERSIDAD DE MAGALLANES

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UNIVERSIDAD DE MAGALLANES
FACULTAD DE HUMANIDADES, CIENCIAS SOCIALES Y DE LA SALUD
DEPARTAMENTO KINESIOLOGÍA
PREVALENCIA DEL RETRASO DEL DESARROLLO MOTOR EN
NIÑOS MENORES DE 2 AÑOS DE EDAD PERTENECIENTES A LAS SALAS
CUNAS DE LA JUNTA NACIONAL DE JARDINES INFANTILES DE LA
CIUDAD DE PUNTA ARENAS, REGIÓN DE MAGALLANES Y ANTÁRTICA
CHILENA.
Tesis para optar al grado de Licenciado en Kinesiología
Autores:
Carolina Alejandra Allendes Gondré
Miguel Ángel Díaz Mancilla
Pamela Rocío Oyarzo Groff
Profesor Guía:
Carolina Martínez Alarcón
Licenciada en Kinesiología
Punta Arenas, Chile
2010
AGRADECIMIENTOS
A los niños y sus padres que confiaron en nosotros para llevar a cabo este
estudio.
A la Junta Nacional de Jardines Infantiles, principalmente a la Sra. María Olvido
Bahamondez por su disposición y motivación para dar inicio a la investigación.
A cada uno de los jardines y sus educadoras, por abrirnos las puertas y
entregarnos su colaboración.
A nuestra profesora guía, Kinesióloga Carolina Martínez, por su apoyo y
dedicación durante todo el proceso del estudio.
A los profesores de nuestra carrera, que de una u otra forma colaboraron
desinteresadamente en la realización de nuestra tesis.
ii
A mis padres y mi hermanita, por su apoyo incondicional
y estar ahí cada vez que los necesité.
A mi hija y mi novio, Francita y Andrés, amores, es por ustedes que hago esto.
A Dios por estar a mi lado durante todo este proceso.
Y finalmente a mis amigos y compañeros de tesis, Pamela y Miguel por todos
los buenos y malos momentos vividos juntos durante este proceso.
Carolina
A cada uno de los que me acompañaron a través de este proceso.
A la mejor de todas, mi abuela.
A mis padres, Juan y Julie.
A mis hermanos, Juan Pablo y Carlos Javier.
Gracias por estar de una u otra forma presente.
A mi gran apoyo, Olga.
A mis dos grandes amigas, Caro y Pame
con las cuales llevé este gran proyecto a cabo.
Y especialmente a Dios.
Miguel
Agradezco el apoyo y paciencia de todos
los que estuvieron conmigo durante estos últimos meses.
A mis padres, por su amor incondicional.
A mi hermana, por su inmensa alegría.
Mi tía, por ser la mejor de todas las tías.
A ti Nicolás, por ser mi más fiel compañero y llenarme de felicidad.
A mis grandes amigos, en especial a la Caro y Miguel,
por enseñarme a luchar y aprender de mis errores.
Pamela
iii
TABLA DE CONTENIDOS
INTRODUCCIÓN
1
CAPÍTULO I
El problema
1.1 Área del problema
1.2 Delimitación del problema
1.3 Planteamiento del problema
1.4 Justificación del problema
1.5 Viabilidad
1.6 Limitaciones
3
4
4
4
4
4
5
6
CAPÍTULO II
Marco teórico
2.1 Antecedentes del desarrollo psicomotor en Chile
2.2 Psicomotricidad
2.2.1 Definición
2.2.2 Origen de la psicomotricidad
2.2.3 Fundamentos teóricos de la psicomotricidad
2.3 Bases del desarrollo psicomotor
2.3.1 El movimiento
2.3.2 Función del desarrollo motriz en la infancia
2.3.3 Función de la motricidad en la capacidad de aprendizaje
2.4 Desarrollo psicomotor
2.4.1 Definición
2.4.2 Aspectos biológicos del desarrollo psicomotor
2.4.3 Teorías del desarrollo psicomotor
2.4.4 Modelos de estudio del desarrollo psicomotor
2.5 Desarrollo psicomotor normal del lactante (0 – 24 meses)
2.5.1 Características generales
2.5.2 Esquemas evolutivos de las capacidades psicomotoras
2.6 Retraso psicomotor
2.6.1 Definición
2.6.2 Características
2.6.3 Factores de riesgo
2.7 Evaluación del desarrollo psicomotor
2.7.1 Historia de los test de evaluación del desarrollo psicomotor
2.7.2 Características de los test de evaluación del desarrollo
psicomotor a nivel mundial
2.7.3 Test de evaluación del desarrollo psicomotor
2.7.4 Situación en Chile
7
8
8
12
12
12
14
15
15
15
19
20
20
21
24
26
31
31
34
44
44
44
48
54
55
56
57
59
iv
CAPÍTULO III
Marco metodológico
3.1 Tipo de estudio
3.2 Objetivos
3.2.1 Objetivo General
3.2.2 Objetivos Específicos
3.3 Variables
3.3.1 Variable Dependiente
3.3.2 Variables Independientes
3.4 Universo
3.5 Muestra
3.5.1 Tamaño de la muestra
3.5.2 Selección de unidades muestrales
3.6 Criterios de inclusión
3.7 Criterios de exclusión
3.8 Material y método
3.8.1 Instrumentos de recolección de información
3.8.2 Procedimientos
3.8.3 Protocolo de Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor
3.9 Método de análisis estadístico
69
70
70
70
70
70
71
71
72
77
77
77
78
79
79
80
80
81
83
87
CAPÍTULO IV
Resultados
88
89
CAPÍTULO V
Conclusión
Discusión
102
103
106
CAPÍTULO VI
Bibliografía
Anexos
109
110
116
v
ABREVIATURAS
CD: Coeficiente de desarrollo.
Cols: Colaboradores.
CRI: Crecimiento intrauterino retardado.
DFDM: Diagnóstico funcional del desarrollo según el método de Munich.
DSM: Desarrollo psicomotor.
EC: Edad cronológica.
EDIN: Escala de desarrollo integral del niño.
EDIP: Examen del desarrollo de la población infantil.
EEDP: Escala de evaluación del desarrollo psicomotor.
EEDPI: Escala de desarrollo psicomotor de la primera infancia.
EKDM: Evaluación kinésica del desarrollo motor.
IC: Índice de confianza.
JUNJI: Junta nacional de jardines infantiles.
MMII: Miembros inferiores.
MMSS: Miembros superiores.
PB: Puntaje bruto.
RM: Retraso motor.
RNPT: Recién nacido de pretérmino.
s.f.: Sin fecha.
SN: Sistema nervioso.
SNC: Sistema nervioso central.
TEPSI: Test de evaluación psicomotriz.
TORCH: Toxoplama gondii, Rubéola, Citomegalovirus y Herpes.
VIH: Virus de inmunodeficiencia humana.
vi
RESUMEN
La detección precoz de las dificultades del desarrollo psicomotor (DSM) y
su tratamiento oportuno proporcionan grandes beneficios al niño y no solo a él,
sino también a la familia y a la sociedad en la cual se desenvuelve (Álvarez,
Salinas y Schonhaut, 2008). En este estudio no experimental, descriptivo, de
carácter cuantitativo y de corte transversal se realizó una evaluación de
desarrollo motor en 70 lactantes pertenecientes a las salas cunas de los 7
establecimientos de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) de la
ciudad de Punta Arenas en el mes de octubre del año 2010, que al momento de
la evaluación tenían entre 6 y 24 meses de edad, con el propósito de determinar
la prevalencia del retraso motor (RM). De la muestra evaluada 36 (51,4%)
fueron de sexo masculino y 34 (48,6%) de sexo femenino. A todos ellos se les
aplicó el test de Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor (EKDM). Los
resultados obtenidos se compararon según sexo, rango etáreo, áreas
específicas del desarrollo motor (mirada, prensión, sedestación, bipedestación y
marcha) y antecedentes biológicos y psicosociales, tales como prematurez,
edad de la madre al momento del parto, escolaridad de la madre y padre, tipo
de parto y clasificación socio-económica.
Los resultados mostraron una prevalencia de 45,7% de RM, todos
clasificados dentro de la categoría leve, encontrándose mayor porcentaje ligado
al sexo masculino (56,3%) y a los grupos etáreos de mayor edad,
específicamente de 20 a 24 meses (60,7%).
En relación a las áreas de
desarrollo, la más afectada fue la marcha con un 74,3% de retraso.
Palabras claves: DSM, Retraso del desarrollo motor, prevalencia, EKDM.
vii
ABSTRACT
The early detection of the psychomotor development (SMD) difficulties
and their appropriate treatment gives to the child great benefits, and not only to
him/her, but also to his/her family and the society in which he/she copes
(Álvarez, Salinas y Schonhaut, 2008). In this non experimental, descriptive, of
quantitative character and transversal cut study was realized an evaluation of
motor development in 70 infants belonging to the nurserys of the 7 kindergarten
of the Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) of the city of Punta Arenas
at the month of October of the year 2010, which at the moment of the evaluation
had between 6 and 24 months of age, with the purpose of determinate the
prevalence of motor delay (MD). Of the evaluate sample, 36 (51,4%) were
masculine and 34 (48,6%) were feminine. The test Evaluación Kinésica del
Desarrollo Motor (EKDM) was apply to all of them. The obtained results were
compared according to sex, age, specifics areas of motor development (vision,
grip, sitting, biped and walk) and biological and environmental antecedents as
age of birth, age of the mother at the moment of birth, education of the mother
and the father, type of birth and socio-economic classification.
The results show a prevalence of 45,7% of motor delay, all clasificated in
the slight category. The bigger percentage was found link to the masculine sex
(56,3%) and to the groups of bigger age, specifically of 20 to 24 months
(60,7%). In relation of the areas of development, the more affected was the walk
with a 74,3% of delay.
Key words: SMD, Delay of the motor development, prevalence, EKDM.
viii
INTRODUCCIÓN
El desarrollo psicomotor refiere a la progresiva adquisición de habilidades
en el niño y es en sí, la clara manifestación externa de la maduración del
sistema nervioso central. La proliferación dendrítica, la maduración del proceso
mielínico, entre muchos otros acontecimientos neurales son los responsables
fisiológicos de los progresos observados en el niño.
Esta maduración, la cual necesita estar provista de un ambiente
adecuado, tiene un orden preestablecido que se verá reflejado en un desarrollo
claro y predecible. A través de este patrón se han definido hitos básicos, fáciles
de medir, que nos permiten saber cuando un niño va progresando
adecuadamente en su desarrollo.
Hoy en día existe una mayor cantidad de evidencias que avalan la
importancia de un desarrollo psicomotor adecuado. Se ha visto que cada etapa
del desarrollo es requisito de la siguiente y que anomalías en alguna de estas
tendrán repercusiones a futuro.
La interacción de los niños y su medio ambiente es cada vez más
compleja, el estímulo durante la etapa preescolar y la integración de actividades
a nivel educativo apuntan a mejorar sus destrezas sociales, intelectuales,
cognitivas y motoras, siendo esta última particularmente importante dentro de
esta etapa de la vida.
Es por esto que, teniendo en cuenta las competencias del quehacer del
profesional kinesiólogo y la relevancia del desarrollo del área motriz en los
primeros dos años de vida, el presente estudio apunta a determinar la
prevalencia del RM en lactantes menores de 2 años, a través del test de
1
Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor; para ello se utilizó una muestra de 70
lactantes, todos pertenecientes a las salas cunas de los 7 establecimientos de
la Junta Nacional de Jardines Infantiles de la ciudad de Punta Arenas, región de
Magallanes y Antártica chilena.
Por ser un estudio no experimental, descriptivo y de carácter cuantitativo,
no se manipularon las variables a observar, sino que fueron consignadas a
medida que se obtenían naturalmente en la muestra.
Cabe destacar las implicancias ético – morales que conlleva a una
investigación en el área de la salud, más aún al trabajar con personas y
especialmente con preescolares. Esto hizo imprescindible el cuidar los
derechos, la intimidad y la necesidad de información de los sujetos de estudio.
2
CAPÍTULO I
3
EL PROBLEMA
1.1 Área del problema
Área Salud, Neurokinesiología pediátrica, Educación preescolar, Área
psicomotora.
1.2 Delimitación del problema
Lactantes menores de 2 años que asistieron durante el 2° semestre del
año 2010 a las salas cunas pertenecientes a la JUNJI en la zona urbana de la
comuna de Punta Arenas, con el fin de evaluar el nivel del desarrollo motor.
1.3 Planteamiento del problema
¿Cuál es la prevalencia de retraso del desarrollo motor en los lactantes
menores de 2 años en los jardines JUNJI de la zona urbana de la comuna de
Punta Arenas?
1.4 Justificación del problema
La falta de estudios en la región acerca del retraso del desarrollo motor
mediante la aplicación de un método diagnóstico fiable y objetivo, ha
determinado la escasa presencia de datos estadísticos sobre el tema.
La información anterior afecta de manera directa en el proceso de
obtención de un diagnóstico oportuno del retraso del desarrollo motor, lo cual
4
influye directamente en la prevención de éste y en el nivel de éxito del
tratamiento.
Además, es importante destacar que en la actualidad no se realiza una
evaluación y/o seguimiento del DSM a todos los lactantes ingresados a salas
cunas de los establecimientos JUNJI.
Existe una gran variedad de antecedentes, tanto biológicos como
psicosociales, que pueden predisponer al retraso del desarrollo motor en la
población infantil, por lo que nace la necesidad de describir estos antecedentes
en la muestra.
1.5 Viabilidad
Este estudio contó con la autorización de la JUNJI y de las directoras de
cada establecimiento, con el fin de ingresar a éstos.
A los padres y/o
apoderados, se les pidió su autorización por escrito a través de un
consentimiento informado; ambos permisos fueron solicitados para realizar
finalmente el proceso de evaluación del desarrollo motor de los niños
seleccionados.
Dentro del recurso físico se contó con las salas de amamantamiento o de
reuniones para realizar la evaluación del desarrollo motor de los lactantes. En
relación al recurso humano, cada jardín puso a nuestra disposición una
educadora que se encontraba presente en el lugar, con el fin de facilitar el
proceso de evaluación.
5
1.6 Limitaciones
• El consentimiento informado y/o ficha no llegaron en el plazo estipulado o
bien sean rechazados.
• La inasistencia de los párvulos autorizados a la realización de la
evaluación.
• Los establecimientos en donde se realizó la evaluación se encontraron
efectuando actividades que impedían la ejecución del proceso en las fechas
programadas.
6
CAPÍTULO II
7
MARCO TEÓRICO
2.1 Antecedentes del desarrollo psicomotor en Chile
En 1974 se inician en Chile los primeros estudios de evaluación del DSM
en lactantes y preescolares, realizados por Lira y Rodríguez, estudiando a 1400
infantes del área sur y sur oriente de Santiago, encontrando en ellos un 29% de
coeficiente de desarrollo (CD) subnormal a los 21 meses de vida (Fernández y
Riquelme, 2006).
Luego, Edwards y Cols. (1985) realizaron un estudio en la ciudad de
Santiago refiriendo un déficit del DSM en un 30% de la muestra estudiada. Más
tarde, Fernández y Brand (1990) en Temuco, describen un 29% en el mismo
grupo etáreo, con la evaluación de 1300 lactantes (Fernández y col., 2006).
Por otra parte Fernández y Franco – Viscarra (1995) tras la evaluación
de 650 lactantes en la novena región de la Araucanía, demostraron cifras
idénticas a los estudios precedentes, dictando que un 30% de la población
evaluada manifestó un desarrollo subnormal (Fernández y col., 2006).
En un estudio publicado por Arteaga, Dölz, Droguett, Molina y Yentzen
(2001) realizado en Los Andes, se obtuvo, tras la pesquisa de 487 niños sanos
entre 0 y 4 años, de ambos sexos y evaluados a través de la Escala de
Evaluación del Desarrollo Psicomotor (EEDP) y Test de evaluación Psicomotriz
(TEPSI), que existía un déficit del DSM de un 2,5% en la población menor a 2
años, valor inferior a lo encontrado en bibliografía; mientras que la población
sobre esta edad presentó un desarrollo subnormal de un 30,5%.
8
Según el Módulo infantil de la II Encuesta de Calidad de Vida y Salud
(Subsecretaría de Salud Pública División de Planificación Sanitaria, 2006), en
donde se realizaron 4.997 evaluaciones alrededor de Chile, a través de
preguntas dirigidas al cuidador del niño, se indicó una prevalencia de rezago del
29,9% en menores de 5 años, mientras que el retraso alcanzó cifras de un
8,2%. (Ver Cuadro 1 – Figura 1).
Dentro de esta encuesta, los más altos índices de rezago se detectaron
en el grupo etáreo de 3 años a 3 años 11 meses con un 34,2%, siendo este el
mismo grupo con las cifras más altas de retraso del DSM, con un 14%. (Ver
Cuadro 1 – Figura 1).
En relación al rango etáreo ocupado en este estudio, se demostró que
los niveles de riesgo del retraso psicomotor alcanzaron un 24,9% en el grupo de
2 a 11 meses y de 28% en el grupo de 1 año a 1 año 11 meses; mientras que el
retraso del DSM indicó cifras de 3% y 4% respectivamente. (Ver Cuadro 1 Figura 1).
Cuadro 1: Prevalencia de rezago según edad. Menores de 5 años
Edad
2 – 11 meses
1 año – 1 año 11 meses
2 año – 2 año 11 meses
3 año – 3 año 11 meses
4 año – 4 año 11 meses
Total
n
55.205
68.551
75.630
87.261
87.523
374.170
Prevalencia %
24,9
28,0
28,4
34,2
33,4
29,9
I.C. 95%
18,3 – 31,5
22,0 – 33,9
22,2 – 34,7
27,5 – 41,0
27,0 – 39,8
27,1 – 32,8
II Encuesta de Calidad de Vida y Salud, Chile 2006.
9
Figura 1: Desarrollo Infantil. Prevalencia total de retraso y rezago según
edad
Prevalencia
Retraso
Rezago
40%
35%
30%
25%
20%
15%
10%
5%
0%
6 - 11 meses 1 a - 1 a 11 ms 2 a - 2 a 11 ms 3 a - 3 a 11 ms 4 a - 4 a 11 ms
Edad
II Encuesta de Calidad de Vida y Salud, Chile 2006.
A su vez, según género existe una clara tendencia al aumento del rezago
hacia la población masculina, alcanzando cifras de un 32,8% en comparación a
la de la población femenina, que indicó una prevalencia de 26,9%. (Ver Cuadro
2).
Cuadro 2: Prevalencia total (%) con IC 95% de Rezago según sexo y edad.
Menores de 5 años
Hombres
Mujeres
n
Prev.%
I.C. 95%
n
Prev.%
I.C. 95%
2 meses – 11 meses
24.143
21,9
13,0 – 30,7
31.062
27,9
18,2 – 37,7
1 año – 1 año 11 meses
33.619
25,3
17,8 – 32,8
34.932
31,2
21,7 – 40,6
2 año – 2 año 11 meses
43.637
29,5
21,3 – 37,8
31.993
27,0
17,5 – 36,6
3 año – 3 año 11 meses
51.646
40,8
31,0 – 50,6
35.615
27,7
18,4 – 37,1
4 año – 4 año 11 meses
59.702
45,5
36,0 – 54,9
27.821
21,3
13,9 – 28,7
212.747
32,8
28,7 – 36,8
161.423 26,9
22,8 – 31,0
Total
II Encuesta de Calidad de Vida y Salud, Chile 2006.
10
Por último, Martínez y Urdangarín (2005) demostraron a través de tres
métodos de evaluación (EEDP; Escala de desarrollo psicomotor de la primera
infancia (EEDPI) y diagnóstico funcional del desarrollo según el método de
Munich, (DFDM)) que el área más afectada en niños institucionalizados
menores de un año fue el lenguaje, seguida por el área social y por último
coordinación y motricidad. (Ver Figura 2).
Figura 2: Porcentaje de niños con retraso por área evaluada.
100%
Porcentaje
80%
60%
Área Motora
Área Coordinación
40%
Área Lenguaje
20%
Área Social
0%
EEDP
EDPPI
DFDM
Test de Evaluación
Evaluación del desarrollo psicomotor de niños institucionalizados menores
de 1 año mediante tres herramientas distintas de evaluación, 2005.
11
2.2 Psicomotricidad
2.2.1 Definición
La definición del concepto “psicomotricidad” es amplia y variada, debido
a que diversas disciplinas se han referido al tema. Este concepto es aplicado en
diferentes áreas, por lo que cada profesión dedicada a este tema da una
definición orientada a su labor. Sin embargo, a modo de consenso, las
asociaciones españolas de psicomotricistas elaboraron la siguiente definición:
“…Basado en una visión global de la persona, el término psicomotricidad
integra las interacciones cognitivas, emocionales, simbólicas y sensoriomotrices
en la capacidad de ser y de expresarse en un contexto psicosocial. La
psicomotricidad, así definida, desempeña un papel fundamental en el desarrollo
armónico de la personalidad. Partiendo de esta concepción se desarrollan
distintas formas de intervención psicomotriz que encuentran su aplicación,
cualquiera que sea la edad, en los ámbitos preventivos, educativo, reeducativo
y terapéutico. Estas prácticas psicomotrices han de conducir a la formación, a la
titulación y al perfeccionamiento profesional y constituir cada vez más el objeto
de investigaciones científicas” 1 (Berruezo, 2001).
2.2.2 Origen de la psicomotricidad
Desde la antigüedad, los filósofos se veían interesados por las
dimensiones del ser humano, resaltando la importancia de la mente sobre el
cuerpo y relegando a este último ser sólo el vehículo que transporta el espíritu
(dualismo). En un intento por superar esta situación, surge en la época moderna
el concepto de psicomotricidad, que da un soporte globalizador del ser humano
1
Berruezo, 2001.
12
desde un ámbito interdisciplinario y se refiere a la interacción de la mente con la
materia por medio del movimiento (Valdés, 2005).
Así, en Francia, en 1910, el doctor Ernest Dupré sostiene que los
trastornos motores no se deben a una lesión neurológica, sino que a una
detección en el desarrollo funcional, a la que denominó “debilidad motriz”
(Valdés, 2005).
Tiempo después surge la noción de trastorno motor, no por retardo o
detención del desarrollo, sino por difusión o desorganización de la realización
motriz. Entonces aparecen el cuerpo y el movimiento organizados en torno al
eje corporal, y éste como estructura temporal del espacio vinculado
directamente con la inteligencia. (Valdés, 2005).
Por otra parte, Wallon habla de la comprensión y los fenómenos tónicos
emocionales. Para él, la emoción es una forma de adaptarse al mundo y a los
demás. Esta adaptación emocional es de origen esencialmente postural y su
núcleo es el tono muscular. Por tanto, la relación con el otro se funda en el
diálogo tónico, de donde emerge la comunicación, y desde aquí se crean las
condiciones necesarias para el desarrollo del pensamiento, la simbolización y el
lenguaje verbal (Lleixá, 2001).
Luego, la práctica del psicoanálisis, permitió incorporar ideas sobre la
articulación de los procesos afectivos y cognitivos, abarcando de mejor manera,
la gran gama de áreas que inciden en el desarrollo del movimiento. (Valdés,
2005).
13
2.2.3 Fundamentos teóricos de la psicomotricidad
La psicomotricidad está fundada en dos conceptos claves: la globalidad y
la expresividad psicomotriz.
La globalidad está manifestada por la acción que liga emocionalmente al
niño con el mundo y que debe ser comprendida como el estrecho vínculo
existente entre su estructura somática, afectiva y cognitiva. Por lo tanto, hay
que considerar al niño como un ser de globalidad, que se expresa sin
“mutilación”, invistiendo de significado todos los parámetros de su entorno
(Calmels, 2004).
El niño descubre el mundo a través de la acción sobre su cuerpo, sobre
los objetos y sobre los otros, relacionándose en una forma particular con éstos,
por lo que su expresividad psicomotriz se ve cargada de ellos. El niño aprende
del mundo, toma de él los elementos significativos y elabora internamente las
estructuras cognitivas y motrices necesarias para sustentar los futuros
aprendizajes. El actuar, entonces, ya no es un acto puramente intelectual,
racional, sino que es una expresión directa de “algo” más significativo (Calmels,
2004).
14
2.3 Bases del Desarrollo Psicomotor
2.3.1 El movimiento
En la bibliografía del movimiento, se han utilizado numerosos vocablos
con un valor sinónimo; dos de ellos son motricidad y movimiento.
Paredes (2002) aclara la diferencia entre ambos: se entiende como
movimiento cualquier cambio de lugar externo y visible, mientras que motricidad
significa un impulso interno de arrastre. La actividad motora interna se
desarrolla constantemente, mientras que el movimiento visible, como la acción
de caminar o la manipulación de un objeto, no siempre se encuentran en acto.
Si se considera el movimiento como un propósito que habrá de
desarrollarse en el espacio, podrá clasificarse bien como estático, es decir, una
reacción comprobable efectuada por el cuerpo en una posición inmóvil, (como
el palmoteo) o bien como locomotor, es decir, unas reacciones observables del
cuerpo que se traslada en el espacio de un punto a otro, (como el salto). Ahora
bien, el movimiento desde el punto de vista muscular, podrá dividirse en tres
clases: 1°, flexión, que es el acto en que se contr aen los músculos originando
un movimiento de inflexión; 2°, extensión, que es e l movimiento de vuelta a la
posición normal tras la flexión; y 3ª, la rotación. A pesar de que estos
componentes se clasifican individualmente, casi todos los movimientos son una
combinación de los tres (Paredes, 2002).
2.3.2 Función del desarrollo motriz en la infancia
Según el Ministerio de Educación del Gobierno de Chile, en su
publicación “Experiencias de aprendizaje sobre corporalidad y movimiento,
15
Unidad de educación parvularia” (2006) refiere que en la primera infancia existe
una función recíproca entre el movimiento y la maduración del sistema nervioso
(SN). En la mayoría de los niños el desarrollo madurativo del SN los condiciona
a desarrollar y alcanzar distintas posturas, conocer el espacio y adquirir
diferentes movimientos y formas de desplazamiento. Sin embargo, la
maduración sin la oportunidad de “experiencias motrices”, deja a medio camino
el desarrollo y la capacidad de aprender del niño.
Cuando existen posibilidades para desarrollar y consolidar diferentes
tipos de movimientos como son los perceptivos, los movimientos finos y
gruesos y otros, es mayor la posibilidad de desarrollo del entramado de la
organización neurológica. El movimiento es un tipo de estimulación necesaria
para enraizar funciones complejas que facilitarán un mejor desarrollo del SN
(Experiencias de aprendizaje sobre corporalidad y movimiento, Unidad de
educación parvularia, Ministerio de Educación, Gobierno de Chile, 2006).
Por otro lado, el repertorio motriz se desarrolla paralelamente con el
funcionamiento emocional. Es decir, el cuerpo y sus manifestaciones, en
cualquiera de sus ámbitos, contiene en su base un componente emocional
(Experiencias de aprendizaje sobre corporalidad y movimiento, Unidad de
educación parvularia, Ministerio de Educación, Gobierno de Chile, 2006).
La emoción “afecta” el tono muscular del cuerpo. Al mismo tiempo, este
tono determina la posibilidad y el estilo de los movimientos de manipulación, las
distintas posturas del cuerpo y los desplazamientos; por lo tanto, el tono influye
en las formas de relación que se tienen con el mundo (Experiencias de
aprendizaje sobre corporalidad y movimiento, Unidad de educación parvularia,
Ministerio de Educación, Gobierno de Chile, 2006).
16
Paralelamente a estos desarrollos, y a partir de diferentes movimientos,
se va organizando el “esquema corporal”. Este es un concepto que intenta dar
cuenta de la integración de distintas funciones envueltas en la noción y
conciencia del cuerpo en el espacio (Experiencias de aprendizaje sobre
corporalidad y movimiento, Unidad de educación parvularia, Ministerio de
Educación,
La
Gobierno
organización
del
de
esquema
corporal
Chile,
articula
2006).
funciones
de
estructuración temporo – espacial, es decir, de conciencia del espacio que
ocupa el cuerpo y de ubicación en el tiempo; de control postural, manipulación,
de locomoción, de lateralidad y de imagen del cuerpo. Es la base de la
posibilidad de estructurar el mundo que percibimos y de estructurar las
funciones psicológicas y cognitivas del ser humano (Lleixá, 2001).
El esquema corporal consiste en una representación mental del propio
cuerpo, en una impresión sensorial que incorpora o graba el niño sobre su ser,
sobre sus segmentos, sus límites y sus posibilidades de acción (Lleixá, 2001).
En este concepto se intenta dar cuenta de una integración de funciones
que están envueltas en la noción del niño y como va desarrollando la
percepción de su cuerpo en el espacio (Lleixá, 2001).
A partir de esta combinación de funciones son posibles las acciones
motrices. El esquema corporal se construye en conjunto con los procesos de
maduración del desarrollo motor y en consonancia con el movimiento del
cuerpo. Esta noción del cuerpo en el espacio, no es innata ni permanente, si no
que se va consolidando con la calidad y consistencia de las experiencias
corporales. Por lo tanto, se transforma en la medida que crecemos o estamos
17
sometidos a cambios ocurridos en nuestro entorno y nuestro cuerpo (La Rivera
y Lira, 2003).
En la organización del esquema corporal se incluyen todas las
habilidades perceptivas involucradas en la noción del cuerpo en el espacio y,
por lo tanto, es un “ordenador” de la percepción que tienen los niños de su
propio cuerpo y de sí mismos. Este ordenador, será la plataforma sobre la cual
el niño sustentará su desarrollo corporal y donde se organizarán las funciones
mentales superiores (La Rivera y col., 2003).
La conciencia del cuerpo, estructurada en el “esquema corporal”, otorga
a los niños la sensación de límites, de ubicación, de volumen y de protección
(La Rivera y col., 2003).
La posibilidad de operar autónomamente con el cuerpo en un espacio
determinado y dominado por él, otorga al niño sensaciones de cohesión, de
seguridad y de competencia personal. Estas sensaciones se graban en el niño,
en lo profundo de su identidad y lo acompañan a lo largo de su existencia (La
Rivera y col., 2003).
A su vez Alfonso, Ibáñez y Mudarra (2004) declaran que el control
postural tiene un rol esencial en el DSM, ya que es la base biomecánica para
conseguir la estabilidad postural. La posición erecta, hito más importante del
primer año de edad, requiere de un ajuste postural que fortalece cuello, tronco y
extremidades inferiores, incitando al desarrollo muscular y facilitando la
maduración neuromotriz.
En
conclusión,
el
desarrollo
del
movimiento
tiene
diferentes
consecuencias para el aprendizaje. El movimiento, posteriormente trasformado
18
en acción, es la plataforma para cualquier proceso de aprendizaje. “Saber”,
entonces, es un “saber hacer” que, con el tiempo, se independiza de la acción y
pasa a formar parte del pensamiento abstracto. En los primeros años de vida el
niño resuelve operativamente sus dificultades; ensaya, anticipa y juega
organizando categorías.
2.3.3 Función de la motricidad en la capacidad de aprendizaje
En la infancia, el movimiento del cuerpo y las acciones motrices que
realizan los niños son la base de su relación con el mundo y a su vez
constituyen el medio a través del cual incorporan sus aprendizajes.
Calmels (2004) relata que si el niño está en relación consigo a través de
su cuerpo y es respetado en sus ritmos personales, significa que se encuentra
con sus sentidos presentes “aquí y ahora”, en las acciones que realiza y en el
contexto espacial donde se encuentra. Cuando esto ocurre, le será más fácil
poder avanzar hacia la apropiación de nuevas experiencias y conocimientos.
De esta manera, el proceso de aprendizaje se transforma en un proceso
activo y significativo, lo que facilitará que la incorporación e impresión de
nuevos aprendizajes se realice fluidamente, por ende, la organización de la
corporalidad a través del movimiento le otorga al niño un dominio del acto motor
y como consecuencia, una gran sensación de placer (Calmels, 2004).
Por otra parte, es importante tener presente que cuando en una
experiencia se involucra la emoción del placer del movimiento se generan en el
niño motivación y entusiasmo; estas emociones básicas permitirán la
incorporación y la impresión de aprendizajes sólidos y significativos (Calmels,
2004).
19
2.4 Desarrollo psicomotor
2.4.1 Definición
El DSM corresponde a una serie de cambios que ocurren en el tiempo,
con el fin de alcanzar la madurez de los sistemas sensoriales y músculoesqueléticos para lograr el movimiento. Estos sistemas serán la base para la
evolución de las demás áreas de desarrollo de un individuo, que incluyen el
área cognitiva, del lenguaje, el desarrollo social y emocional, de esta forma el
niño podrá adaptarse correctamente en el medio que se desenvuelve. Esta
secuencia de desarrollo es igual para todos los niños, sin embargo, el ritmo con
que cada niño logra las distintas etapas varía (Isaac, 2001).
El término “desarrollo psicomotor” fue acuñado por el neurólogo y
psiquiatra Alemán Karl Wernicke, y por consenso se limita a los dos primeros
años de vida (Iceta y Yoldi, 2002).
En relación a lo motor, este desarrollo se caracteriza por ser acelerado y
progresivo, siguiendo un orden de craneal a cefálico, y de proximal a distal,
produciéndose primero movimientos en bloque, seguidos de movimientos más
finos, además, en un inicio, predomina la actividad de la musculatura flexora
sobre la de la musculatura extensora (Cabezas y Rubio, 2000).
Coll, Marchesi y Palacios (2001) refieren que la meta del DSM es el
control del propio cuerpo hasta ser capaz de sacar de él, todas las posibilidades
de acción y expresión que a cada uno le sean posibles. Ese desarrollo implica
un componente externo (la acción), pero también un componente interno o
simbólico (la representación del cuerpo y sus posibilidades de acción). Esto da
como resultado la capacidad de controlar, dirigir e inhibir voluntariamente los
20
movimientos corporales para su adecuada utilización y para la adaptación de
actividades que requieren coordinación motora gruesa, fina y lateralidad, todo
esto emplazado y regido por la maduración del sistema nervioso central (SNC),
por lo cual es importante reconocer y definir el desarrollo de este sistema.
2.4.2 Aspectos biológicos del desarrollo psicomotor
Según Avaria (2005) el desarrollo del SN comienza alrededor de la
tercera semana de gestación y continúa, aunque a un ritmo decreciente, hasta
la adultez. Se caracteriza por la ocurrencia de dos eventos organizacionales
mayores. El primer período se inicia tempranamente e incluye los eventos de
neurulación, proliferación, migración y diferenciación, los cuales son controlados
por factores genéticos y epigenéticos que originan estructuras neurales
sensibles a influencias externas. El segundo período es de reorganización,
ocurriendo durante la gestación y continuando después del parto, el que se
caracteriza por crecimiento dendrítico y axonal, producción de sinapsis y
cambios en la sensibilidad a neurotransmisores.
Es importante conocer la evolución de este proceso, ya que cualquier
interferencia durante este dará origen a deficiencias del desarrollo psicomotor
en diferentes etapas de la vida.
•
Primer período:
a) Neurulación: se inicia con la formación de la notocorda, que ejerce un
papel inductor en la formación de la placa y luego del tubo neural. En los
extremos craneal y caudal se encuentran los neuroporos (llamados de la
misma manera) que comunican con la cavidad amniótica, los cuales se
cierran a los 24 y 27 días respectivamente. Alteraciones en esta etapa
del proceso originan espina o encéfalo bífido (Avaria 2005).
21
b) Proliferación: entre la segunda y cuarta semana de desarrollo fetal se
produce la proliferación celular en la matriz germinativa periventricular de
los ventrículos laterales y tercer ventrículo para las células cerebrales y
en el labio rómbico (cuarto ventrículo) para las del cerebelo. Después de
este proceso, las células que no serán “utilizadas” sobreviven por un
período de días a semanas, tras el cual sufren un proceso de muerte
celular programada debido a una cascada de cambios degenerativos
(Avaria 2005).
c) Migración: ocurre entre la tercera y quinta semana de edad gestacional,
guiada por procesos gliales en base a señales químicas, como moléculas
de adhesión celular y factores de crecimiento neural. Los objetivos de la
migración están relacionados con los procesos de maduración neuronal y
con
el
establecimiento
de
conexiones
neurales
que
imprimen
funcionalidad a la neurona (Avaria 2005).
d) Diferenciación: mecanismo por el cual cada neurona adquiere las
características
morfológicas
propias
y
los
contactos
sinápticos
específicos que las diferencian entre sí.
Uno de los factores que regula la diferenciación es el factor de
crecimiento nervioso, capaz de producir modificaciones en la morfología
celular y en la dirección que siguen estas prolongaciones, es decir, cómo
se forman los contactos, cómo se forman las sinapsis, qué neuronas se
unen con otras y cuáles no, etc. (Azócar y Sepúlveda, 2008).
22
•
Segundo período:
a) Organización: comprende la estructuración y arborización dendrítica,
axonogénesis y sinaptogénesis,
etapas en que las neuronas van
estableciendo circuitos neurales de complejidad creciente. El proceso de
organización, además de regulado genéticamente, es sensible a la
experiencia, y es la base más importante de la plasticidad del SN,
referida a los procesos de desarrollo normal, aprendizaje y recuperación
de lesiones. Existen conexiones muy fuertes, como las que se
establecen entre neuronas que controlan funciones autonómicas, las
cuales están dirigidas fundamentalmente por procesos genéticos. En las
áreas de asociación, las conexiones nerviosas son más flexibles
pudiendo ser modificadas hasta la edad adulta (Avaria 2005).
b) Mielinización: es un hecho fundamentalmente post – natal, que ocurre en
ciclos con una secuencia ordenada predeterminada, en dirección céfalo –
caudal. Al finalizar el segundo trimestre de la gestación se encuentran
mielinizadas las raíces nerviosas y la médula espinal, y se ha iniciado en
el troncoencéfalo. El haz corticoespinal termina con su mielinización a los
2 años, el cuerpo calloso lo hace en la adolescencia y la vía de
asociación entre la corteza pre-frontal ipsilateral y los lóbulos temporal y
parietal lo hace alrededor de los 30 años (Avaria 2005).
A partir del estudio del desarrollo del SN, y la influencia de este proceso
en la generación de conductas y habilidades motrices, se introdujo el término
“neuroplasticidad”, el cual se refiere a la capacidad de las células del SN para
regenerarse anatómica y funcionalmente, después de estar sujetas a influencias
patológicas,
ambientales
o
del
desarrollo,
incluyendo
traumatismos
y
23
enfermedades. Esto le permite una respuesta adaptativa a la demanda
funcional (Azócar y col., 2008).
La neuroplasticidad es máxima durante el desarrollo y desaparece en la
adultez. En esta etapa, la plasticidad se manifiesta como aprendizaje o como
respuesta a cambios internos o ambientales. En consecuencia, el cuerpo celular
representa un elemento relativamente estable, sin embargo, es posible una
modificación en las interrelaciones neuronales gracias al reemplazo sináptico.
Estos cambios significan, a la vez, una modificación de la función neural, lo que
invariablemente influye en las capacidades de integración del SN, tanto en sus
funciones orgánicas como en la personalidad del individuo. Es factible que las
células efectoras contribuyan a la plasticidad neuronal necesaria para
reponerse de lesiones encefálicas mediante la liberación de factor de
crecimiento neural (Azócar y col., 2008).
2.4.3 Teorías del desarrollo psicomotor
Los estudios realizados sobre el DSM se generan por la investigación del
desarrollo y crecimiento del SN, como este genera patrones tales que llegan a
producir un movimiento determinado y como la maduración del SN va
aumentando la complejidad de estos movimientos, además de determinar la
influencia del ambiente externo sobre los cambios en estos patrones (Morales,
2006).
Inicialmente se organizaron las investigaciones en razón de dos grandes
fuentes de estudio:
a) Fuente neurofisiológica: relacionada claramente con las ciencias
biológicas. Esta fuente tiene como principal característica que concibe el
movimiento como un factor del comportamiento humano; los autores de dicha
24
corriente han basado sus trabajos en técnicas electromiográficas que se
centraron en dar respuesta a las funciones del córtex cerebral sobre ciertos
movimientos (Morales, 2006).
Algunos de los autores más destacados de esta corriente son:
Sherrington, que clasificó las respuestas reflejas manifestadas frente a los
estímulos presentados en las extremidades. Herrick, que estudió la función del
cerebelo en el movimiento. Y Bernstein que en 1967 defendía la necesidad de
relacionar el ámbito psicológico, con el biomecánico y el fisiológico para
comprender el dinamismo motor humano (Morales, 2006).
b) Fuente psicológica: fundamentada en el estudio de ciertas habilidades
escolares y profesionales (escritura a máquina, telegrafía, tiro, etc.). Los autores
más destacados en esta área son: Woodworth, que estableció algunos de los
principios fundamentales de los movimientos rápidos de las manos. Los
trabajos de Thorndike, que pusieron de manifiesto las bases para el estudio del
desarrollo motor. Shirley, demostrando el interés de los educadores físicos por
estudio del desarrollo motor. Poulton, quien aportó importantes teorías como la
de la anticipación. Fitts, representando la relación entre extensión del
movimiento y precisión. Henry, que aportó teorías como la del programa motor y
la de mecanismos de procesamiento de ejecución motora. Es necesario
mencionar a Fleishman en esta corriente de estudio, debido a su esfuerzo por
determinar los factores motores de un conjunto de habilidades, usando técnicas
estadísticas como el análisis factorial, en la década del 60 (Morales, 2006).
A
partir
de
ésto,
se
generan
modelos
para
comprender
el
comportamiento infantil, los que han evolucionado ampliamente a través de los
años, tomando mayor importancia la influencia del medio ambiente en el que se
desenvuelve el niño.
25
Estos modelos serán desarrollados a continuación, en el siguiente
apartado.
2.4.4 Modelos de estudio del desarrollo psicomotor
•
Gesell:
Plantea que el niño no nace con su sistema de percepciones listo, sino
que se debe desarrollar y esto se consigue con la creciente madurez de las
células sensoriales, motrices, etc. (Avaria, 2005).
Además, concibe la personalidad del niño como una red organizada y
reorganizada
de
estructuras
de
comportamiento,
en
especial
de
comportamiento personal y social. Esta estructura de la conducta está
estrechamente ligada a la maduración nerviosa y empieza antes del nacimiento.
Las diferentes esferas del comportamiento se desarrollan conjuntamente y en
íntima relación. Gesell distingue cuatro áreas (Avaria, 2005):
a) Comportamiento motor: estudia la postura, la locomoción, la prensión y
los conjuntos posturales.
b) Comportamiento de adaptación: abarca la capacidad de percepción de
los elementos significativos de una situación, así como la capacidad de
utilizar la experiencia presente y pasada para adaptarse a nuevas
situaciones.
c) Comportamiento verbal: hace referencia a todas las formas de
comunicación y comprensión de los gestos, sonidos y palabras.
d) Comportamiento social: son las reacciones personales ante los demás y
la cultura social.
26
Los estudios de Gesell afirman que los cambios que se observan en los
niños se deben a la predisposición inherente del organismo para evolucionar y
que son fruto del desarrollo espontáneo de los sistemas neuronal, muscular y
hormonal que determinan las conductas motrices y psicológicas. Da importancia
capital a los procesos internos madurativos (Avaria, 2005).
El aporte fundamental de Gesell ha consistido en la popularización del
término maduración, que ayudó a explicar. Para Gesell, el desarrollo infantil
necesita importantes factores de regulación interna (Avaria, 2005).
•
Wallon:
Henry Wallon en el año 1979 presenta una orientación psicobiológica
para explicar el desarrollo psicológico del niño. En sus investigaciones
determinó que el ser humano atraviesa por los siguientes estadíos (Granda y
Alemany, 2002):
a) Estadío de impulsivilidad motriz: abarca desde el nacimiento hasta los 6
meses. La motricidad es puramente fisiológica, se entremezcla lo tónico
y lo cinético y se produce bajo la influencia de las necesidades de tipo
orgánico. El comportamiento motriz corresponde a simples descargas de
reflejos o de automatismos.
b) Estadío emotivo: abarca desde los 6 hasta los 12 meses. Las primeras
emociones se manifiestan por el tono muscular y la función postural. Las
situaciones se reconocen por las agitaciones que producen.
c) Estadío sensomotor: abarca desde los 12 hasta los 24 meses; a partir de
este momento se organiza el movimiento hacia el exterior. Hay
coordinación mutua de las diversas percepciones. Aparecen las ganas
de explorar o investigar.
27
d) Estadío proyectivo: abarca desde los 2 hasta los 3 años. Aparece la
movilidad intencional dirigida hacia un objeto. Por esto, la motricidad es
una forma de acción en el mundo. En esta etapa surgen la ideación y la
representación.
e) Estadío personalístico: abarca desde los 3 hasta los 4 años. Los “otros”
son significativos para el niño en su proceso de adquisición de
experiencia. Esta es la etapa de la conciencia y la posterior afirmación y
utilización del yo. Etapa de búsqueda de la independencia y de
enriquecimiento de su propio yo.
En todos estos estadíos, el dinamismo motor está estrechamente
vinculado a la actividad mental. Wallon se preocupó más de captar la
significación del conjunto de los comportamientos que de la descripción
detallada y minuciosa del desarrollo (Granda y col., 2002).
Para Wallon, la motricidad participa en los primeros años en la
elaboración de todas
las funciones psicológicas,
para posteriormente
acompañar y sostener los procesos mentales. Al analizar la motricidad,
determinó la existencia de dos componentes (Granda y col., 2002):
a) Función clónica
b) Función tónica, la que tiene un importante papel en el desarrollo infantil,
porque tanto las aptitudes perceptivas, como las motrices tienen un
denominador común, que es la función tónica. El tono relaciona la
percepción, la motricidad y el conocimiento; de ahí la relación entre
motricidad y conocimiento.
28
•
Da Fonseca:
En sus trabajos, Da Fonseca afirma que la ontogénesis de la motricidad
es el espejo de la filogénesis humana. El crecimiento, como aumento
cuantitativo y el desarrollo, como aumento cualitativo, son manifestaciones del
mismo fenómeno. “...Por ello se demuestra que los músculos (como órganos
efectores por excelencia) son los instrumentos privilegiados por los cuales los
seres humanos comunican sus pensamientos. El movimiento voluntario y el
ajuste postural son las claves de la inteligencia y de la comunicación humana.
El pensamiento es la culminación de la acción, ambos son las dos caras
sublimes de la actividad psíquica superior. Así evolucionó la conciencia humana
a nivel histórico (aspecto filogenético) y así se da la información de la
inteligencia del niño (aspecto ontogenético)” 2 (Da Fonseca, 2000).
Da Fonseca distingue cuatro fases en el desarrollo motor:
a) Fase neuromotora (0 - 2 años): predominan las conductas innatas y la
organización motriz es tónico – emocional.
b) Fase sensomotriz (2 - 6 años): en esta etapa se adquieren las
habilidades motrices básicas de locomoción, de prensión y de
suspensión.
c) Fase perceptivomotriz (6 - 12 años): relacionada con la noción de
esquema corporal, conceptos de lateralidad y la orientación del cuerpo
en el espacio. Se empiezan a producir una estructuración rítmica y
disociaciones segmentarias.
d) Fase psicomotriz (a partir de 12 años): es la culminación de todas las
fases anteriores y permite al individuo desarrollarse en la sociedad.
2
Da Fonseca, 2000.
29
El DSM humano manifiesta para Da Fonseca la progresiva evolución
humana hacia una mayor y mejor integración, planificación y regulación de sus
propias acciones (Da Fonseca, 2000).
Desde otro punto de vista, actualmente se considera el modelo
transaccional que destaca por igual, la importancia de la plasticidad del niño en
desarrollo y del medio ambiente en que se desenvuelve, en continua interacción
y modificación, asignando igual importancia a los factores genéticos y al
ambiente que va a rodear a ese niño en desarrollo. El niño, biología y ambiente
están continuamente interactuando y provocando cambios el uno en el otro. Por
esto, la predicción a largo plazo es más difícil que en los modelos anteriores
(Da Fonseca, 2000).
Así, Doussoulin (2003) refiere que el DSM y la motricidad en particular,
es un proceso multidimensional, que incluye el plano físico o motor, intelectual,
emocional, social y sensorial. Cada niño posee su propia secuencia de
desarrollo que está en directa relación con su maduración, por lo cual puede
variar en características y calidad de un niño u otro. Estas variaciones
individuales se refieren a factores como la configuración biológica de cada niño
y el ambiente en el que se desarrollan.
Concerniente a esto es importante conocer la evolución del DSM normal,
entregando así las bases para determinar y diferenciar cuando se está frente a
un retraso en el desarrollo.
30
2.5 Desarrollo psicomotor normal del lactante (0 – 24 meses)
2.5.1 Características generales
Entre las características de la motricidad dentro de esta etapa nos
encontramos con las siguientes generalidades (Field, 2004):
a) Gran rapidez en los cambios que se producen en el lactante, si los
comparamos con etapas posteriores.
b) Superioridad de lo sensorial y lo motor sobre otras áreas de la conducta.
c) Manifestación de características que reflejan que están en la base de la
evolución, entre ellas: falta de control de los movimientos, dependencia
total del adulto, egocentrismo radical, labilidad emocional e incapacidad
atencional.
Dada la velocidad de los cambios que se producen en esta etapa, es
necesaria dividirla en seis subestadíos (Field, 2004):
a) Subestadío I (de 0 a 1 mes): también se conoce como etapa del reflejo.
Las características de esta etapa son:
-
Toda actividad es guiada por reflejos.
-
No existe intencionalidad en la conducta, el bebé responde a
necesidades básicas que le producen placer o displacer.
-
La relación con el mundo es difusa, sólo le interesa la figura con la que
se apegará.
-
La emocionalidad es polar; sólo existe placer – displacer.
31
b) Subestadío II (de 1 mes a 4 meses): también conocida como etapa de
las reacciones circulares primarias. Las características de esta etapa
son:
-
Ingresan a su repertorio comportamental las conductas voluntarias,
aunque siguen presentes las conductas reflejas.
-
Empieza a existir cierta coordinación.
-
Todas las acciones de este subestadío son referidas a su cuerpo.
-
Aparecen las conductas primitivas, pero debe ser otra persona la que
inicie el gesto y luego el bebé lo imitará.
-
Se inicia la conducta de juego.
c) Subestadío III (de 4 a 8 meses): también conocida como etapa de las
reacciones circulares secundarias. Las características de esta etapa
son:
- Lleva a cabo actividades guiadas visualmente. Como consecuencia de
esta experimentación, se favorece el desarrollo cognitivo.
- Existe mayor control en el plano motor y voluntariedad en las acciones
que ejecuta.
- Estas mismas acciones ejecutadas despiertan gran interés en el niño, lo
que favorece el conocimiento del mundo.
- Sus emociones se enriquecen, aparece alegría ante los conocidos,
llantos frente a los desconocidos.
- Se inicia la imitación de partes del cuerpo que puede ver y comienza la
captación de la permanencia del objeto.
32
d) Subestadío IV (de 8 a 12 meses): también conocida como etapa de
desplazamientos autónomos. Las características de esta etapa son:
- Aparece el gateo como el inicio de la marcha.
- Comienza la imitación de conductas que el niño no ve, como por
ejemplo, imitar expresiones faciales.
- Aparece la conducta intencional medio – fin.
- Se tiene la idea de permanencia del objeto.
e) Subestadío V (de 12 a 18 meses): también se conoce como etapa de
experimentación. Las características de esta etapa son:
- Se incrementa el dominio del mundo gracias a la capacidad de
desplazamiento, lo cual potencia el desarrollo cognitivo.
- Emplea, de forma sistemática, nuevos medios para resolver problemas.
- La imitación y el juego se perfeccionan.
- Se continúa perfeccionando la permanencia del objeto, aunque no es
capaz de tener en cuenta los desplazamientos invisibles.
f) Subestadío VI (de 18 a 24 meses): también se conoce como etapa del
simbolismo. Las características de esta etapa son:
-
Aparición de la función simbólica, lo que indica que existen
representaciones mentales.
-
El niño se hace más reflexivo, fruto de su mayor capacidad de
planificación.
-
Aparece la imitación diferida (Es capaz de imitar un modelo sin que éste
se halle presente).
-
Juego simbólico y se consolida la permanencia del objeto.
33
2.5.2 Esquemas evolutivos de las capacidades psicomotoras
•
Evolución de la motricidad gruesa
Para que el acto motor voluntario evolucione con normalidad hace falta
que se produzca por una parte, una progresiva diferenciación de los actos
amplios e indiferenciados a otros precisos y concretos, que haya una
proyección céfalo - caudal y que además suceda de axial a distal (Conejeros,
2002).
Todo ello es posible porque el tono muscular evoluciona disminuyendo la
hipertonía flexora de las extremidades y aumentando el tono del tronco, lo cual
facilita los movimientos. También sirve de ayuda la disolución de los reflejos
arcaicos y la aparición de las reacciones de equilibrio (Conejeros, 2002).
A continuación, se desglosa el desarrollo de los actos motores, más
destacable de los primeros dos años de vida:
a) Desarrollo de la mirada
Latash (2008) refiere que al nacer, la mayor parte del mundo visual del
lactante es borrosa. El motivo de esto es que los músculos que se insertan en el
cristalino, que hacen que converjan en la retina los rayos de luz que penetran
en el ojo, no se encuentran plenamente activos. Este desarrollo se produce
durante las primeras cuatro semanas de vida, haciéndose lo suficientemente
fuertes como para deformar al cristalino, por lo que pueden ser enfocados
objetos situados a distancias variables, favoreciendo la fijación de la mirada. A
pesar de esto, el lactante no es capaz de seguir los objetos con la mirada, sino
hasta los tres meses de edad, momento en el cual comienza el desarrollo del
34
“concepto de objeto”, lo cual favorece el interés del niño por las cosas que se
encuentran dentro de su campo visual, el que a esta edad ya es de 180°.
b) Control de cabeza
1 mes:
Supino: predomina posición asimétrica de cabeza.
Prono: eleva brevemente y gira la cabeza para protección.
Sedente: cae la cabeza sobre el pecho.
2 meses:
Supino: gira la cabeza lado a lado.
Prono: levanta y gira 45º la cabeza.
Sedente: persiste bamboleo de cabeza.
3 meses:
Supino: cabeza línea media.
Prono: levanta cabeza 45º a 90º y parte del tronco.
Sedente: cabeza erguida por breves momentos.
4 meses:
Supino: mantiene predominantemente en línea media la cabeza.
Prono: levanta y sostiene la cabeza.
Sedente: cabeza erguida por breves momentos.
5 meses:
Supino: levanta con facilidad la cabeza.
Prono: cabeza erguida.
Sedente: mantiene la cabeza proyectada hacia delante.
35
6 meses:
Supino: levanta la cabeza del plano.
Prono: cabeza erguida y puede rotarla.
Sedente: mantiene la cabeza rotada hacia delante.
7 meses:
Supino: postura simétrica, tiende a levantar la cabeza.
Prono: mantiene la cabeza erguida.
Sedente: cabeza casi totalmente erguida.
8 meses:
Supino: levanta la cabeza.
Prono: mantiene la cabeza erguida.
Sedente: flecta activamente la cabeza.
9 meses:
Supino: control total de la cabeza.
Prono: se levanta firmemente.
Sedente: es capaz de controlar la postura.
c) Desarrollo para lograr la postura sedente
Recién nacido a 4 meses: período de silencio.
5 meses: sentado inclina lateralmente el tronco al mantenerlo de caderas.
Cifosis dorso- lumbar.
6 meses: sentado, al flexionar el tronco, apoya las manos.
36
8 meses: comienza a apoyar un codo para enderezarse desde supino. Se
mantiene alrededor de 5 minutos solo con apoyo anterior.
9 meses: mantiene la postura sedente solo más de 1 minuto aproximadamente.
Flexiona tronco hacia delante y se incorpora solo.
10 meses: se mantiene libremente sentado con la columna erecta, las piernas
semiflectadas. Tiene apoyo posterior.
11 meses: sentado, es capaz de apoyarse de lado con una mano mientras gira
la cabeza hacia un objeto y extiende la mano.
12 meses: la postura sedente es correcta, abre las piernas y juega con objetos
entre ambas. Gira el tronco para tomar objetos distantes.
18 meses: postura se encuentra consolidada, la mantiene sobre una silla o base
inestable, pudiendo realizar actividades que incluyan gran capacidad de
concentración.
d) Desarrollo del gateo
Recién nacido al mes: en prono permanece con flexión de los 4 miembros.
3 meses: en prono levanta la cabeza entre 45º a 90º, progresivamente se apoya
sobre codos. En caderas predomina la extensión.
4 meses: apoyo seguro de antebrazos. Movimientos voluntarios de cabeza y
miembros superiores (MMSS).
37
5 meses: se balancea sobre el abdomen sin apoyarse. Extensión de miembros
inferiores (MMII) por encima del plano de apoyo, movimiento de natación.
6 meses: se apoya sobre las manos con codos extendidos hacia fuera, media o
totalmente abierta. Gira de supino a prono.
7 meses: gira de prono a supino. Arrastre a expensas de MMSS.
8 meses: adopta posición de cuatro pies.
9 meses: gatea. En ocasiones apoya el abdomen sobre el suelo.
10 meses: gateo coordinado y maduro.
11 meses: gateo cruzado en MMSS y MMII.
12 meses: desplaza el centro de gravedad hacia el tren superior. Sube
escaleras en cuatro pies. Adopta posición bípeda.
e) Desarrollo para lograr la bipedestación y marcha
Recién nacido: marcha automática
1 – 2 meses: flecta y extiende las piernas.
3 – 4 meses: flecta y extiende piernas alternadamente.
4 – 5 meses: sostiene peso corporal levemente.
38
6 – 7 meses: soporta peso, si se le da apoyo, salta.
8 – 9 meses: tomado de una baranda, soporta peso corporal.
9 – 10 meses: tomado de una baranda se para.
10 – 11 meses: sostenido de una baranda levanta un pie.
12 -13 meses: camina con y sin apoyo.
13 – 15 meses: camina independiente.
18 meses: comienza a correr, dando claros indicios de la consolidación de la
bipedestación, disminuye la base de sustentación en la marcha.
24 meses: afina la marcha, tiende a correr como juego.
•
Evolución de la motricidad fina
En cuanto al desarrollo de las actividades motrices finas, que implican
pequeños movimientos de los brazos, las manos y los dedos, se desarrollan de
la siguiente manera: durante los dos primeros meses los niños miran fijamente
el objeto y agitan sus brazos cuando éste se mueve ante sus ojos. A los 3
meses consiguen tocarlo, pero no pueden ni agarrarlo ni sostenerlo a menos
que se les coloque el objeto en las manos. A los 4 meses sujetan el objeto, pero
durante un corto período de tiempo. A los 6 meses ya pueden coger los objetos
si estos tienen un tamaño adecuado. A partir de ahora se abre un mundo rico
en experiencias, porque pueden manipular los objetos y aprender acerca de
ellos. De los 4 a los 8 meses la mayoría de los niños puede pasar los objetos de
39
una mano a otra. A los 9 meses pueden coger las cosas con mayor precisión y
atrapar los objetos que se les lanza (Granda y col., 2002).
Al mismo tiempo se desarrolla la habilidad de agarre y de manipulación
de pequeños objetos. Al principio los niños utilizan toda la mano, concretamente
la palma, así como los dedos anular y meñique. Más adelante el dedo medio y
el centro de la palma de la mano o también el dedo índice y la región lateral de
la palma. Luego utilizan el pulgar y el índice juntos, en forma de pinza, habilidad
que se domina entre los 9 y 14 meses de edad y que es muy importante para el
uso de herramientas. Finalmente consolidan la pinza fina entre los 18 a 24
meses (Granda y col., 2002).
a) Desarrollo para alcanzar la prensión
Recién nacido: reflejo de prensión.
1 -2 meses: período de transición.
3 meses: dirige la mano semiabierta hacia un objeto, pero suele estar cerrada la
otra. No es capaz de coger con una mano. Si se le coloca un objeto en la línea
media, lo toma con ambas manos.
4 meses: las manos están predominantemente abiertas, se encuentra y juega
con ellas. Toma objetos, flexiona el brazo y lo lleva a la boca. Inicia
coordinación mano – boca, investiga los objetos con la boca.
5 meses: toma un juguete intencionalmente cuando se le ofrece. La prensión es
digitopalmar de los cuatro dedos, pero el pulgar extendido, no integrado a la
prensa. Pasa juguetes de una mano a otra mano.
40
7 -8 meses: toma con ambas manos un cubo en cada una o toma pequeños
discos con los dedos y el pulgar extendido sin tocar con la palma de la mano.
Iniciación de la pinza digital (rastrillo).
9 – 10 meses: toma objetos distantes y los deja caer voluntariamente, dirige la
mirada hacia él. Golpea dos objetos.
13 – 15 meses: la prensión se perfecciona, hace pinza en tenazas, toma
pequeños objetos con el dedo medio flexionado y el pulgar en oposición.
Recoge pequeñas migas.
18 – 24 meses: comienza a manipular objetos, que puede colocar uno encima
de otros, consolidando el proceso de manipulación fina.
•
Desarrollo social
Durante su desarrollo, el niño irá adquiriendo unos patrones de conducta
que le servirán para su interacción con el medio, porque por naturaleza es un
ser social. La variabilidad en este campo es muy amplia, ya que además del
temperamento individual y de la maduración del SN, existen gran cantidad de
factores ambientales y educacionales que influyen en su desarrollo (Granda y
col., 2002).
Se
hallan
diferentes
sistemas
relacionales
presentes
desde
el
nacimiento, los que son (Granda y col., 2002):
a) Sistema exploratorio: tendencia que tiene el niño por interesarse en el
mundo físico y social y a conocerlo.
41
b) Sistema afiliativo: tendencia a relacionarse con las personas y establecer
relaciones amigables con ellas. En los primeros meses de vida, los niños
no manifiestan preferencias por unas u otras personas y tampoco les
producen ningún temor los desconocidos.
Los sistemas relacionales que aparecen hacia la mitad del primer año de
vida son (Granda y col., 2002):
a) Sistema interrelacional básico: vínculo de apego con una o varias
personas con las que el lactante procura mantener una proximidad y un
interacción privilegiada.
b) Miedo ante los desconocidos: tendencia a relacionarse con cautela o
incluso a rechazar a personas desconocidas.
•
Desarrollo del lenguaje
Lenguaje y comunicación no son lo mismo; la utilización del lenguaje
supone un canal de comunicación exclusivo de la especie humana que se pone
en marcha en el primer año de vida. El lactante tiene muchas formas de
comunicación pre-verbal: riendo, gritando y por rabietas; extendiendo los brazos
para que lo cojan, cerrando la boca al ofrecerle comida, etc. Alrededor de dos
semanas después de comenzar a sonreír a su madre, empieza a modular las
vocales a, u, e, además de sonreír. En 3 a 4 semanas añade consonantes m, p,
b, j, k y logra los balbuceos. A los 6 meses escuchamos bisílabos inespecíficos
y a los 11 meses como media, un niño puede decir “papá” o “mamá” de manera
específica (Granda y col., 2002).
42
A los 13 meses sabe 3 palabras distintas de “papá/mamá”, hacia el año y
medio de vida es capaz de utilizar el “no” y combina 2 palabras a los 21 meses
y 3 a los 27 meses (Granda y col., 2002).
43
2.6 Retraso Psicomotor
2.6.1 Definición
Definiciones de retraso psicomotor hay muchas, pero todas se refieren a
un solo punto específico, la adquisición tardía de habilidades psicomotoras.
Esta puede ser por una aparición lenta para su edad o porque los hitos están
presentes, pero cualitativamente alterados, todo esto causado por una
alteración en la maduración del SNC del niño(a). Estos hitos son los
encontrados desde el nacimiento hasta aproximadamente 30 a 36 meses de
desarrollo del infante. Normalmente se destaca más que nada el aspecto motor
de este retraso, pero se deben tomar en cuenta también los aspectos
sensoriales, cognitivos e interactivos (Aicardi, 2009).
Igualmente, la Federación estatal de asociaciones de profesionales de
atención temprana (2001) define el retraso del desarrollo como “…una
desviación significativa del “curso” del desarrollo normal, como consecuencia de
acontecimientos de salud o de relación que comprometen la evolución
biológica, psicológica y social” 3.
2.6.2 Características
Este retraso psicomotor puede tener diferentes causas, entre ellas se
puede nombrar (Casas y Narbona, 2008):
a) Una “variante normal” del desarrollo del niño con normalización
espontánea antes de la edad preescolar (Fernández y Fejerman, 2007).
3
Libro Blanco de estimulación temprana, 2001.
44
b) Un retraso real causado por ausencia de estímulos externos, que puede
ser regularizado fácilmente al cambiar la situación del niño.
c) Retraso
causado
por
agentes
extraneurológicos
(desnutrición,
cardiopatías, hipotiroidismo congénito, etc.).
d) Déficit sensorial aislado que no permite la conexión adecuada de todos
los componentes del desarrollo, tal como la sordera neurosensorial
profunda congénita.
e) La antesala de una deficiencia mental a futuro.
f) Señal de alguna enfermedad neurológica que puede o no ser progresiva.
g) Manifestación temprana de algún trastorno de la atención.
Iceta y col. (2002) hacen mención a que existen ciertas banderas rojas
que pueden alertar a los padres, médicos o encargados del cuidado de los
niños, de que existe presencia de alguna anomalía en el desarrollo psicomotriz.
Entre estas alertas se pueden encontrar según la edad:
•
1 mes de edad
- Irritabilidad persistente.
- Trastornos de succión.
- No fija la mirada momentáneamente.
- No reacciona con los ruidos.
•
2 meses de edad
- Persistencia de irritabilidad.
- Sobresalto exagerado ante ruido.
- Aducción del pulgar.
- Ausencia de sonrisa social.
45
•
3 meses de edad
- Asimetría de actividad con las manos.
- No sigue con la mirada.
- No presenta respuesta a los sonidos.
- No realiza sostén cefálico.
•
4 meses de edad
- Pasividad excesiva.
- Manos cerradas.
- No emite risas sonoras.
- Hipertonía de aductores (ángulo inferior a 90º).
- No orienta la mirada hacia la voz.
•
6 meses de edad
- Presencia de hipertonía en miembros e hipotonía de cuello y tronco.
- No se rota sobre sí mismo.
- Persistencia de reacción de Moro.
- No realiza sedestación con apoyo.
- Ausencia de prensión voluntaria.
- No balbucea ni hace “gorgoritos”.
•
9 meses de edad
- No es capaz de realizar desplazamiento autónomo.
- Hipotonía de tronco.
- No se mantiene sentado.
- Ausencia de pinza manipulativa.
- No emite bisílabos.
46
•
12 meses de edad
- Ausencia de bipedestación.
- Presencia de reflejos anormales.
- No tiene vocabulario de dos palabras con/sin significado.
- No entiende órdenes sencillas.
•
15 meses de edad
- No camina solo.
- Ausencia de pinza superior.
- No arroja objetos.
- No tiene un vocabulario de tres o cuatro palabras.
- Pasa ininterrumpidamente de una actividad a otra
•
18 meses de edad
- No sube escaleras.
- No tiene un vocabulario de 7 - 10 palabras.
- No conoce partes del cuerpo.
- No garabatea espontáneamente.
- No bebe de un vaso.
- No hace una torre de dos cubos.
•
24 meses de edad
- No corre.
- No construye torres de 3 ó 6 cubos
- No asocia dos palabras.
- No utiliza la palabra “NO”.
- Presencia de estereotipias verbales.
- Es incapaz de realizar un juego simbólico.
47
•
Signos de alarma a cualquier edad
- Movilidad, tono o postura anormal.
- Movimientos
involuntarios
(actitud
distónica
de
manos
o
extremidades).
- Movimientos oculares anormales.
- Retraso en la adquisición de los ítems madurativos.
- Macrocefalia, microcefalia, estancamiento del perímetro craneal.
Es importante destacar que la literatura identifica un período de real
importancia en el crecimiento del niño, el cual se denomina período vulnerable y
corresponde a aquella etapa de crecimiento y desarrollo acelerado del SNC en
el cual el proceso madurativo de este sistema es particularmente susceptible a
distintas noxas, este período abarca hasta los 7 años aproximadamente. Dentro
de este tiempo se encuentran los intervalos críticos que refieren a los
momentos en que se establecen las condiciones para lograr una determinada
función, estos se encuentran, en su mayoría durante los primeros 2 años de
vida, por lo que si durante esta etapa el niño(a) no tiene la oportunidad de vivir
la experiencia correspondiente, sin importar como o porque razón esta haya
sido privada, no se desarrollará normalmente la actitud o actividad en cuestión,
incluso si es expuesto a los estímulos necesarios más adelante en su desarrollo
(Avaria, 2005).
2.6.3 Factores de riesgo
Los factores de riesgo son aquellos agentes que aumentan las
probabilidades de que un niño padezca de algún nivel de retraso del DSM.
Estos no aseguran la presencia de retraso, pero requieren que los profesionales
48
a cargo observen con mayor cuidado y realicen un seguimiento más exhaustivo
de su paciente (Cunha y Melo, 2005).
Existen variadas clasificaciones para éstos, Pérez – Olarte (2003) hace
mención de una de las más universales, la cual los clasifica en biológicos y
ambientales o psicosociales:
• Factores de riesgo biológicos
Ocurre cuando el niño presenta un daño establecido en su SNC o
condiciones biológicas que a futuro impedirán el normal desarrollo de éste.
Causas como daño cerebral por hipoxia perinatal severa, meningitis o causas
hereditarias como malformaciones congénitas o Síndrome de Down, pueden
provocar retrasos profundos (Espejo y Salas, 2004).
Dentro de los factores más comunes resalta el bajo peso al nacer. Según
el Instituto de nutrición y tecnología de los alimentos de la Universidad de Chile
se considera factor de riesgo como tal sí el niño pesa menos de 2.500 gramos
(Espejo y col., 2004).
Una prueba fehaciente de lo anterior se refleja en el estudio de
Fernández, García, Labarta, Mayayo y Puga (2003) que al realizar el
seguimiento de niños nacidos con crecimiento intrauterino retardado (CRI)
desde los 3 meses hasta los 16 años de edad, se encontró una relación directa
con la presencia de retraso del DSM y deficiencias intelectuales.
49
A continuación se especifica una lista con los factores incluidos dentro de
esta categoría, entregados a través de las Guías diagnósticas de medicina
física y rehabilitación: retraso psicomotor, publicadas por el Hospital General de
México [s.f.]
a) Peso al nacimiento de 2500 gramos o menos.
b) Edad gestacional de 32 semanas o menos.
c) Asfixia con apgar menor de 4 a los 5 minutos.
d) Bajo peso para edad gestacional (por debajo del percentil 10).
e) Asistencia a ventilación mecánica por 36 horas o más.
f) Hemorragia intracraneana grado III o IV.
g) Anormalidades en el tono muscular (hipotonía, hipertonía, asimetría de
tono o movimiento).
h) Crisis convulsivas (3 o más).
i) Disfunción para la alimentación.
j) Infección sintomática por TORCH.
k) Meningitis.
l) Desnutrición o mal nutrición (carencia de un micronutriente como el
fierro).
m) Antecedentes familiares de hipoacusia.
n) Hidrocefalia.
o) Microcefalia.
p) Anormalidades cromosómicas.
q) Nacimientos múltiples.
r) Mielodisplasias.
s) Miopatías congénitas y distrofias miotónicas.
t) Errores innatos del metabolismo.
u) Lesiones de plexo braquial.
v) Infecciones por VIH.
50
w) Hiperbilirrubinemia que haya requerido exanguinotransfusión.
x) Síndrome malformativo con compromiso visual o auditivo.
•
Factores de riesgo ambientales o psicosociales
El niño que no presenta riesgo biológico, tiene las posibilidades de
desarrollar su potencial psicomotor e intelectual, el que lo haga o no, dependerá
de su medio ambiente. Un medio favorable donde se le entregue cariño,
alimentación adecuada, seguridad y una estimulación sensoriomotora de
calidad, permitirá el desarrollo de un niño adaptado para enfrentar con éxito el
futuro. Cuando estas condiciones no se presentan, hablamos de riesgo
ambiental, denominativo proporcionado por Brand (1993) hace ya dos décadas
(Espejo y col., 2004).
Según Doussoulin (2003) uno de los factores de riesgo ambiental más
importantes es el nivel socio - económico de la familia del niño, ya que la
intensidad, calidad y oportunidades de estimulación que se le entreguen a éste,
varían en la población según este factor. Ciertos autores explican que son un
conjunto de variables asociadas al nivel socioeconómico las que podrían ir en
desmedro del desarrollo del niño, como la constitución de la familia, escolaridad
de los padres, situación de la vivienda, trabajo del sostenedor del hogar, entre
otros.
Asociado a lo anterior, Espejo y col. (2004) relatan que existe una gran
relación entre nivel socio-económico, escolaridad de los padres y retraso en el
DSM. Los padres que exhiben mayor frecuencia de fallas iniciales en la
lectoescritura,
menos
años
de
escolaridad
e
índices
elevados
de
semianalfabetismo tienden a poseer hijos con presencia de retraso en su
desarrollo. Tomando en cuenta el extremo contrario, se ha señalado que la
51
forma en que los padres con mayor escolaridad influirían sobre el desarrollo de
sus hijos sería:
a) Que los padres con mayor nivel de instrucción son más interesados en el
desarrollo y rendimiento de sus hijos, siendo mayor esta preocupación a
menor edad del niño.
b) Los padres estimularían al niño a través del ambiente que le brindan.
c) Los padres estimularían la competitividad de su hijo, dándole la
oportunidad de asumir su propio aprendizaje.
Se confirma la importancia de la escolaridad de los padres,
especialmente la del padre, ya que posiblemente un mayor nivel de instrucción
formal implicaría acceder a trabajos mejor remunerados, y por esta vía otorgar
al hijo mejores condiciones para su desarrollo, tales como establecimientos
preescolares de mejor calidad. No obstante, la mejor competencia laboral del
padre se asocia también a mayor ausentismo en el hogar, que puede influenciar
en el desarrollo de las relaciones interpersonales con su hijo (Espejo y col.,
2004).
A continuación se especifica una lista con los factores incluidos dentro de
esta categoría (Pérez – Olarte, 2003).
a) Padre/Madre único.
b) Padres adolescentes.
c) Drogadicción materna y paterna.
d) Alcoholismo materno.
e) Exposición a materiales tóxicos.
f) Psicológico (deprivación ambiental).
g) Pobreza.
52
h) Nula escolaridad de los padres.
i) Falta de controles médicos.
j) Maltrato físico.
k) Familia numerosa.
l) Múltiples cuidadores.
m) Asistencia extensa a instituciones.
n) Inmovilidad mantenida.
53
2.7 Evaluación del desarrollo psicomotor
La vigilancia del DSM es considerada una labor de suma importancia en
la supervisión de salud del lactante y preescolar. La detección precoz de
trastornos del desarrollo ofrece la posibilidad de una intervención oportuna, lo
cual permite corregir muchas de las alteraciones y atenuar otras, siendo los
grandes beneficiados el niño, la familia y la sociedad. Además, existe suficiente
evidencia para demostrar que esta manera de abordar el problema es una
estrategia altamente costo - efectiva. Es por ello que diversas sociedades
científicas como la Academia Americana de Pediatría (2006), recomiendan
llevar a cabo una vigilancia sistemática del DSM aplicando pruebas
estandarizadas (Álvarez y cols., 2008).
Como fue señalado anteriormente, los niños siguen un patrón de
desarrollo de habilidades marcado por hitos claramente determinados, en base
a esto y con la necesidad de evaluar este desarrollo, se han elaborado pruebas
objetivas, que consideran diversas áreas como motricidad fina, motricidad
gruesa, área cognitiva, del lenguaje, social, entre otras.
Las pruebas de evaluación de DSM se puede dividir en dos grupos: las
que se realizan a través de un screening, que son efectuadas principalmente
por los pediatras, son rápidas de aplicar, con una duración de entre 10 y 15
minutos y diferencian a los niños de riesgo o con retraso psicomotor, pero no
especifican el área afectada o la magnitud de su retraso, y por otra parte los test
o pruebas de áreas específicas, de duración prolongada y en las cuales la
dificultad de ejecución es mayor, por lo que requieren de una práctica y
entrenamiento adecuada del profesional que las realiza. Cada test toma en
cuenta diferentes etapas y áreas del DSM de los niños y por supuesto cada uno
tiene su propia metodología de ejecución (Álvarez y cols., 2008).
54
2.7.1 Historia de los test de evaluación del desarrollo psicomotor
Los precursores de los test de DSM fueron los franceses Alfred Binet y
Theodore Simon, que a petición del gobierno francés en 1905, crearon una
escala de evaluación mental con el fin de separar a los niños sanos de los que
necesitaban educación especial, esta fue llamada Escala de Inteligencia BinetSimon y era utilizada en el primer año de vida. Esta escala se convirtió en el
estímulo y modelo de futuros tests (Aiken, 2004).
A continuación Arnold Gesell desde 1925 en adelante y dentro de la
clínica de desarrollo infantil de Yale, creó el Baby-Test de Gesell, donde
evaluaba desarrollo motor, verbal, adaptaciones y reacciones sociales y
personales. Este test lo realizó con bases de datos obtenidas de distintos
métodos como observación en el hogar, historial médico, observaciones diarias,
medidas antropométricas, reportes de la actividad de los niños en la clínica y
examinación básica. Luego de esto, en 1983, Lezine y Brunet le realizan
adaptaciones y modificaciones para crear su propio test de DSM (Aiken, 2004).
A finales de los años 20, Shirley en Minessota y Bayley en California
comienzan a recolectar datos y a construir sus propias escalas de desarrollo
motor. Durante los años ‘30 la escala creada por Shirley no fue ampliamente
utilizada, pero la Escala Mental creada por Bayley, en 1933, se transformó en la
precursora del test de desarrollo infantil más cuidadosamente diseñado y más
representativo de todos los tiempos (Aiken, 2004).
A partir de ese momento se comenzaron a crear múltiples test de
desarrollo alrededor de todo el mundo, adaptados para cada país y su
población, incluido Chile, con la creación del EEDP y el TEPSI, en 1974 y 1985,
respectivamente.
55
2.7.2 Características de los test de evaluación del desarrollo psicomotor a nivel
mundial
Zamora (2007) indica que los test de evaluación del DSM, sin importar su
origen, presentan características comunes en su desarrollo.
En primer lugar encontramos las condiciones básicas que deben seguir:
a) Las personas que lo realizan deben mantener las condiciones y aptitudes
necesarias para realizar el test.
b) La calidad de los materiales y el tiempo en el que se entregan debe ser
igual para cada uno de los individuos evaluados.
c) Los ruidos externos e interrupciones deben ser los mínimos.
d) La hora del día en el que se realice la evaluación debe ser similar para
toda la muestra evaluada.
e) La edad de los evaluados debe considerarse importante en relación al
tiempo de atención de estos.
Los objetivos de los test de evaluación son transversales para todos y se
presentan en los siguientes ítems (Ruiz, [200-]):
a) Conocer la situación actual de un sujeto o una población específica en un
momento determinado.
b) Determinar los procesos que actúan y definir sus respuestas para poder
actuar de cierta manera.
c) Establecer que hacer en base a los resultados de la evaluación.
d) Organizar la ayuda profesional en base a las características y
necesidades de cada individuo.
56
Al seleccionar un test se debe tener en consideración ciertos criterios
básicos que permitan su correcto uso, los cuales se presentan a continuación
(Monge y Meneses, 2002):
a) La consistencia del instrumento; confiabilidad y precisión que este posee.
b) Objetividad del instrumento evaluador.
c) Estandarización.
d) Pautas o normas que sirvan para reflejar o comparar los resultados
obtenidos.
e) Costo económico y de tiempo.
f) Conocimiento del evaluador sobre el test, saber presentarlo e
interpretarlo.
2.7.3 Test de evaluación del desarrollo psicomotor
A continuación se presentan diferentes test, que evalúan distintas áreas
del desarrollo, al igual que variados grupos etáreos.
a) Escala de Bayley de desarrollo infantil: Es una de las más utilizadas a nivel
mundial en la evaluación de la primera infancia. Fue creada por Nancy Bayley
en 1933 y ha sido revisada, adaptada y modificada en 1969 y 1993. Fue creada
para evaluar a niños desde 1 mes a 3 años y medio. Se evalúan 3 secciones
principales, la primera corresponde a la escala mental, la cual mide percepción,
memoria, aprendizaje y vocalización. La segunda es el área motora que evalúa
motricidad gruesa y fina en conjunto con la coordinación sensorio - motora y
finalmente el registro de comportamiento, donde observa y calcula las
conductas sociales del niño, sus actitudes, intereses, emociones, nivel de
actividad y relación con su madre y extraños (evaluador). El tiempo de
57
aplicación de la prueba es de 35 a 40 minutos, sin complicaciones (Cabrera,
Calderón, Faas, Ibarra, Moya, Rodríguez, 2005).
b) Test de Denver: También llamado Examen del desarrollo de la población
infantil (EDIP), fue creado en 1967 y su aplicación es hasta los 6 años. Este test
evalúa a los niños en 4 áreas diferentes, las que corresponden a: personal
social (observará las cualidades del niño para seguir órdenes y conectarse con
el medio), motor adaptativo (identificará la capacidad del niño de ver y de utilizar
sus manos para tomar objetos y para dibujar), lenguaje (oír, seguir órdenes y
hablar) y motor grueso (sentarse, caminar, saltar y correr). Este test se aplica
en un rango de tiempo de entre 10 a 20 minutos por subtema. El Test de
Denver se considera con resultados negativos cuando en 2 o más áreas existen
2 o más ítems fallidos y se considera fallo total cuando un niño no realiza un
ítem que es realizado por más del 90% de la muestra. Un beneficio de este test
es que es constantemente revisado y actualizado por los profesionales que lo
utilizan (Bueso, [s.f.]).
c) Escala de desarrollo motor de Haizea-Llevant: Esta escala nace en el año
1991 en España, de la unión del programa Haizea y del estudio Llevant (1989) y
está basado en el Test de Denver. Permite evaluar el nivel de desarrollo de los
niños en 3 áreas específicas: motora, cognitiva y social en niños de 0 a 5 años.
El beneficio del test es que incluye signos de alerta que permiten indicar
posibles alteraciones en cualquiera de las áreas de la evaluación (Aznar, 2001).
d) Escala de desarrollo motor Peabody: Esta escala fue desarrollada por Folio y
Fewell en 1983 y actualizada el año 2000, es administrada durante 45 a 60
minutos y los resultados se pueden mostrar de variadas formas. Se divide en 2
áreas básicas, motora gruesa y motora fina. La primera evalúa reflejos,
equilibrio, aspectos de no locomoción y de locomoción, recepción y lanzamiento
58
de objetos y por otra parte el área motora fina evalúa agarre, uso de las manos,
coordinación oculomanual y destreza manual. La escala motora gruesa evalúa
diez ítems por edad y la fina de 6 a 8. En cada ítem se puede obtener un
puntaje de 0 a 2, siendo 1 cuando se indica un logro parcial (Palisano, 2000).
e) Escala de Mullen de aprendizaje temprano: Creada por Eileen M. Mullen y
mide habilidades cognitivas y desarrollo motor en niños de 0 a 68 meses.
Presenta un tiempo determinado para realizarlo en base a la edad del niño,
siendo estos: en niños de 0 meses a 1 año, 15 minutos; de 1 a 3 años, 25 a 35
minutos y de 3 años a 5 años 8 meses, 60 minutos. Las áreas a evaluar son
motricidad gruesa, recepción visual, motricidad fina y expresión y recepción del
lenguaje (Calderón, Peña y Vera, 2010).
f) Escala de desarrollo integral del niño (EDIN): Es un instrumento eficaz para
evaluar el desarrollo del niño de 0 a 6 años en sus diferentes áreas. Fue creado
por Atkin, Superville, Sawyer y Cantón en 1987. Presenta 6 formas de
realización distintas para cada rango de edad. Las conductas que se espera
que el niño ejecute se presentan en categorías que son: motora gruesa, motora
fina, senso - cognitiva, lenguaje, socio - afectivo y hábitos, siendo en algunos
casos necesaria la ayuda de la madre para completar la prueba (Calderón y
cols., 2010).
2.7.4 Situación en Chile
En Chile, la primera escala incorporada al control de salud durante la
década de los setenta, fue la Pauta Breve de Desarrollo Psicomotor, pero
resultó ser una herramienta poco específica y definitoria, por lo que a finales de
los ’80 se incorporó en la atención de control de salud de niños menores de dos
años una evaluación mediante un instrumento de tamizaje validado en Chile, el
59
llamado EEDP. Pero este no era bien utilizado y no se obtenían los datos
necesarios, ya que se realizaba una sola vez a los niños y sólo en un 50% de
los consultorios de Chile (Bedregal, 2007, 2008).
Luego, a inicios de los años 90, se instaló el “Programa de Estimulación y
Evaluación del Desarrollo Psicomotor para niños menores de 6 años” en la
atención pública, donde se comenzó a utilizar el EEDP para niños menores de 2
años y el TEPSI para niños de 2 a 5 años (Bedregal, 2007, 2008).
Dentro de este mismo marco, en el año 2004 se crea por parte del
Ministerio de Salud del Gobierno de Chile, las “Normas técnicas de estimulación
y evaluación del desarrollo psicomotor del niño y niña menor de 6 años”, la cual
es aplicada a nivel primario de salud.
El objetivo general de esta norma es desarrollar actividades de
promoción del desarrollo biopsicosocial de los niños, de prevención primaria de
sus déficit y de prevención secundaria de otros tipos de déficit de origen
cognitivo y/o biológico en los menores de 6 años (Azócar y col., 2008).
Según las estadísticas de atención en salud, el 90% de los niños, hasta
los 15 meses de edad rinden a un nivel normal en las pruebas de DSM, sin
embargo, a partir de los 18 meses se observa un aumento del déficit en niños
de nivel socio – económico bajo. Debido a esto se han instaurado las siguientes
recomendaciones técnicas (Azócar y col., 2008):
a)
Educación y capacitación a familias y comunidad: a embarazadas y
puérperas para fortalecer el vínculo y preparación para un parto y
lactancia exitosa; a padres de niños menores de 2 años y de
preescolares, priorizando a los niños que no asisten a jardines infantiles
60
o escuelas; a embarazadas jóvenes en situación de alto riesgo social y
con escaso apoyo de la pareja.
b) Aplicación de pauta breve: se aplica durante el primer año de vida y
hasta los 18 meses de edad, ya que estandariza la observación del
desarrollo del niño y prioriza la prevención a través de la educación a los
padres o personas a cargo de los niños. Esta pauta es aplicada por un
auxiliar de enfermería o técnicos paramédicos, e incluso los propios
padres y/o cuidadores, previa capacitación. Durante los 18 meses y 4
años se debe continuar con la aplicación de la Pauta Breve y las
acciones educativas de tipo preventivas.
c) Aplicación de escalas de evaluación:
-
A los 2 meses de vida: realizar una evaluación masiva del DSM, a través
de la pauta breve, la que permite orientar la pesquisa de niños con
problemas neurosensoriales que afectarán su desarrollo, para intervenir
lo más apropiada y oportunamente en ellos en conjunto con sus familias.
-
A los 18 meses, realizar una nueva evaluación masiva, a través del
EEDP, ya que es en esta edad en la que se comienza a observar un
aumento en la prevalencia del déficit del DSM por falta de estímulos,
para trabajar con estrategias y metodologías distintas según sean niños
bien estimulados o no.
-
En el preescolar se debe efectuar a lo menos una evaluación a los 4
años a través de TEPSI. A esta edad el niño ha alcanzado una madurez
en su desarrollo, lo que permite detectar trastornos e iniciar acciones de
recuperación antes del ingreso a la educación formal. Se debe priorizar
en aquellos niños que no asisten a jardines infantiles o escuelas.
61
Si en algunas de estas evaluaciones (a los 2 meses, 18 meses o 4 años)
el niño(a) ha sido detectado con déficit, ya sea riesgo o retraso en su desarrollo,
deben ser citados a consulta del niño con déficit psicomotor y/o derivado a
especialista según se requiera, posteriormente son reevaluados con el test
correspondiente a su edad, para medir eficacia de las acciones de recuperación
realizadas. Los niños de 2 meses son reevaluados en el control de salud de los
6 meses, lo que deja un período adecuado para efectuar acciones de
diagnóstico y de recuperación; los de 18 meses son reevaluados a los 21
meses de edad, mientras que los niños de 4 años son reevaluados a los 4 años
6 meses o 4 años 8 meses (Azócar y col., 2008).
Si el niño presenta un CD normal se da de alta y continúa con sus
controles normales, sin dejar de aplicar la pauta breve. En cambio si el niño
continúa con un CD deficiente, debe derivarse a un médico y luego si es
necesario a un especialista (Neurólogo, Psicólogo, Fonoaudiólogo, Fisiatra u
otro profesional), incluso se puede planificar una visita domiciliaria (Azócar y
col., 2008).
Finalmente y continuando con la búsqueda de un mejor desarrollo
integral de los niños, en el año 2006 se anuncia la creación del Sistema de
Protección Integral a la Infancia “Chile Crece Contigo”, dirigido a todos los niños
y niñas del país, para apoyarlos en su desarrollo, desde la gestación hasta que
ingresen a primer nivel de transición en el sistema escolar. Así, desde el año
2009 y según lo dictado por la ley 20.379 se crea el Sistema Intersectorial de
Protección Social y se institucionaliza “Chile Crece Contigo”, transformándose
así en una política pública estable (Propuesta del consejo asesor presidencial
para las reformas políticas de la infancia, Ministerio de Salud, Gobierno de
Chile, 2006).
62
El programa Chile Crece Contigo incluye:
a) Fortalecimiento de los cuidados prenatales.
b) Atención integral a familias en situación de vulnerabilidad psicosocial.
c) Atención personalizada del proceso de nacimiento.
d) Atención integral al niño o niña hospitalizada, que enfatiza los cuidados
para el desarrollo.
e) Fortalecimiento del control de salud del niño con énfasis en el logro de un
desarrollo integral; cabe decir que es en esta área donde se realizarán
evaluaciones periódicas con la aplicación de los tests EEDP y TEPSI
según corresponda.
f) Fortalecimiento de la intervenciones en la población infantil en situación
de vulnerabilidad, rezago y déficit en su desarrollo integral; aquí se
integran los programas de estimulación.
g) Prestaciones garantizadas al 100% a niños y niñas de hogares del 60%
más vulnerable.
h) Prestaciones de acceso preferente a niños y niñas de hogares del 40%
más vulnerable.
Por otro lado y habiendo revisado la historia de la evaluación del DSM en
Chile, se detallarán 2 escalas de evaluación utilizadas en nuestro país para el
grupo de niños de 0 a 2 años. En primer lugar, el EEDP, el cual es el más
utilizada en Chile y la segunda una herramienta de evaluación creada en los
años 90 para ser utilizada por kinesiólogos, ya que envuelve específicamente el
área motora, la Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor (EKDM).
63
•
EEDP
En Chile se creó la Escala de Evaluación de Desarrollo Psicomotor o
EEDP, en base a la creciente necesidad de integrar al país en los constantes
avances de los conocimientos del desarrollo infantil. Este fue elaborado por las
psicólogas S. Rodríguez, V. Arancibia y C. Undurraga, y publicado en el año
1974. En esta escala se recogieron ítems de las ya existentes, pero que no
estaban creadas para la realidad chilena, ya fuese en función, duración o
resultados. Entre los test utilizados encontramos la escala de Lezine-Brunet de
la cual tomaron la integración de un adulto en el test que pudiese contestar
aspectos externos a la evaluación, ya fuese su madre, padre o encargado(a) del
niño(a), de la escala de Bayley ocuparon la precisión de las indicaciones y la
forma de tomar el test, por último emplearon la simplicidad de los materiales y la
mínima necesidad de capacitación que requería el Test de Denver. El EEDP
presenta 75 ítems, los cuales corresponden a 5 para cada edad, los que se
basan en las áreas del desarrollo de coordinación, motora, lenguaje y social.
Cada prueba es evaluada con logro o fracaso sin existir valores medios
(Rodríguez, Arancibia, Undurraga, 2008).
Para poder realizarlo se necesita la batería específica (1 campanilla de
metal, 1 argolla roja de 12 cms. de diámetro con cordel de 50 cms., 1 cuchara
de plástico de 19 cms. de largo, 10 cubos rojos de madera de 2.5 cm. por lado,
1 pastilla rosada polivitamínica formulario nacional, 1 pañal, 1 botella entre 4 y 4
½ cms. de alto y 2 cms. de diámetro, 1 hoja de papel de tamaño oficio sin
líneas, 1 lápiz de cera, 1 palo de 41 cms. de largo y 1 cm. de diámetro, 1
muñeca), el protocolo y hoja de registro. Los resultados se pueden entregar de
dos formas, como dato general en el cual se puede clasificar el nivel de DSM en
riesgo, normalidad o retraso y en áreas específicas donde se puede observar el
perfil completo del niño detalladamente por área. Al final se calcula el resultado
64
en base a un CD, donde un puntaje de 0.85 en adelante corresponde a
normalidad, entre 0.84 hasta 0.70 es riesgo y un puntaje de 0.69 o menor es
retraso (Rodríguez y cols., 2008).
Para finalizar, es importante destacar que esta escala fue estandarizada
con una muestra de 600 niños, es de una alta objetividad ya que los criterios a
evaluar son simples y bien establecidos y presenta validez de contenido, pues
fue creada en base a 3 tests internacionalmente utilizados y validados (Martínez
y col., 2005).
•
EKDM
Finalmente, el último test creado en Chile es la Evaluación Kinésica del
Desarrollo Motor de 0 a 24 meses o EKDM, este fue confeccionado por la
Kinesióloga de la Universidad de la Frontera, Patricia Conejeros. Este test es
una recopilación de varias evaluaciones extranjeras y nacionales. En la
actualidad es el único test que se puede encontrar, enfocado en la realidad
chilena, que evalúe puramente el área motriz del desarrollo del niño en base a 5
diferentes conductas, las cuales son (Conejeros, 2002):
a) Desarrollo de la mirada
b) Desarrollo de la prensión
c) Desarrollo de la sedestación
d) Desarrollo de la bipedestación
e) Desarrollo de la marcha
La escala definitiva consta de 65 ítems, 5 por cada grupo de edad de 0 a
3 meses, luego sólo 4 por cada grupo de 4 – 18 meses y sólo 2 ítem para los 24
meses. La puntuación de los ítems no admite graduaciones, existiendo sólo dos
65
posibilidades: éxito o fracaso frente a la tarea propuesta. Se consideran 16
grupos de edades entre los 0 a 24 meses; a saber 1 – 2 – 3 – 4 – 5 – 6 – 7 – 8 –
9 -10 – 11 – 12 – 13 – 15 – 18 – 24 meses, los cuales están seleccionados en
base a las adquisiciones de nuevas conductas del desarrollo motor de un niño.
Dicha selección no significa que a sólo los niños de estos grupos de edad se les
pueda administrar la escala. Esta prueba sirve para evaluar un niño a cualquier
edad entre 0 y 24 meses, pudiendo evaluar a los 2 años a aquellos niños que
tengan hasta 732 días de edad cronológica (EC) (Camaño, Carrasco, Morales,
Saavedra, Sáez, 1996).
En relación a las áreas evaluadas, este test se enfoca en la motricidad
gruesa y fina, coordinación corporal general y específica: reacciones posturales
y locomoción (Camaño y cols., 1996).
Además de contar con los materiales estandarizados requeridos, deberá
disponerse de una mesa o colchoneta para acostar al niño(a) y una silla para la
madre o acompañante (Camaño y cols., 1996).
•
Material estandarizado
a) Batería de prueba:
La batería de prueba (Anexo 1) consta de 8 objetos simples, de bajo
costo y de fácil adquisición, que serán descritos en detalle a continuación
(Camaño y cols., 1996):
-
1 Campanilla de metal (cascabel).
-
1 Argolla de 12 cms. de diámetro con cordel de 50 cms.
-
10 Cubos rojos de madera de 2,5 cms. por lado.
66
-
10 Pastillas rosadas polivitamínicas formulario nacional.
-
1 Botella entre 4 y 4 ½ cms. de alto y 2 cms. de diámetro,
transparente.
-
1 Juguete.
-
Láminas de colores llamativos.
-
Silla sala cuna.
b) Protocolo de evaluación (Anexo 2):
Este contiene los ítem a evaluar por cada mes, además de la
respuesta a esperar, la ubicación del evaluador y evaluado, y el material
necesario para cada prueba (Camaño y cols., 1996).
c) Ficha Kinésica del desarrollo motor:
En esta se específica nombre, residencia, fecha de nacimiento,
fecha de evaluación y diagnóstico obtenido. Además, contiene un cuadro
resumen de los ítems evaluados, divididos por mes y conducta y su
respectivo puntaje (Anexo 3) (Camaño y cols., 1996).
Adjunto a esta ficha se incluye la presentación de un gráfico
(Anexo 4), que proporciona en forma rápida una visualización general del
desarrollo de las áreas evaluadas (Camaño y cols., 1996).
Finalmente, es importante aclarar que todo este material y el test
en sí, fue estandarizado por Camaño, Carrasco, Morales, Proust y Sáez
(1996) a través de la tesis de grado “Estandarización de la Escala de
Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor de 0 a 24 meses” realizada en la
Universidad de la Frontera y guiada por la Kinesióloga Patricia Conejeros
67
Álvarez. Además, cabe destacar que desde el año 2009 a la fecha el test se
encuentra en proceso de validación de tipo fachada; todo esto encabezado
por la misma autora del test.
68
CAPÍTULO III
69
MARCO METODOLÓGICO
3.1 Tipo de estudio
Es
una
investigación
no
experimental,
descriptiva,
de
carácter
cuantitativo y de corte transversal.
3.2 Objetivos
3.2.1 Objetivo General
Determinar la prevalencia de retraso del desarrollo motor en lactantes
menores de 2 años pertenecientes a las salas cunas de la JUNJI de la zona
urbana de la ciudad de Punta Arenas.
3.2.2 Objetivos Específicos
• Determinar el nivel de retraso del desarrollo motor general en lactantes
menores de 2 años de las salas cunas de la JUNJI de la ciudad de Punta
Arenas.
• Determinar el nivel de retraso del desarrollo motor por áreas en lactantes
menores de 2 años de las salas cunas de la JUNJI de la ciudad de Punta
Arenas.
• Determinar el área más afectada del desarrollo motor en lactantes
menores de 2 años de las salas cunas de la JUNJI de la ciudad de Punta
Arenas.
70
• Identificar antecedentes biológicos y psicosociales de los lactantes
menores de 2 años de las salas cunas de la JUNJI de la ciudad de Punta
Arenas.
3.3 Variables
3.3.1 Variable Dependiente
•
Retraso Motor
- Definición: Refiere a que el alcance de los logros del desarrollo motor de
un determinado niño aparezcan con una secuencia lenta para su edad y/o
cuantitativamente alterada.
- Operacionalización: Se expresa en porcentajes del RM.
Retraso
Porcentaje
Indicador
Sin retraso
0% - 10%
1
Leve
11% - 40%
2
Moderado
41% - 70%
3
Grave
70% - 100%
4
71
3.3.2. Variables Independientes
•
Desarrollo de la mirada
- Definición: Refiere al proceso madurativo de la mirada asociado a la EC del
niño(a), teniendo en cuenta que el desarrollo máximo normal de esta
conducta se adquiere a los 3 meses.
- Operacionalización: Determinada en relación a sí el desarrollo de la mirada
se encuentra normal o en retraso.
Desarrollo Indicador
•
Normal
1
Retraso
2
Desarrollo de la prensión:
- Definición: Refiere al proceso madurativo de la prensión asociado a la EC
del niño(a), teniendo en cuenta que la consolidación de esta conducta se
adquiere a los 24 meses.
- Operacionalización: Determinada en relación a sí el desarrollo de la
prensión se encuentra normal o en retraso.
Desarrollo Indicador
Normal
1
Retraso
2
72
•
Desarrollo de la sedestación:
- Definición: Refiere al proceso madurativo de la postura sedente asociado
a la EC del niño(a), teniendo en cuenta que la consolidación de esta postura
se adquiere a los 18 meses.
- Operacionalización: Determinada en relación a sí el desarrollo de la
postura sedente se encuentra normal o en retraso.
Desarrollo Indicador
•
Normal
1
Retraso
2
Desarrollo de la bipedestación:
- Definición: Refiere al proceso madurativo de la postura bípeda asociado a
la EC del niño(a), teniendo en cuenta que la consolidación de esta postura
se adquiere a los 18 meses.
- Operacionalización: Determinada en relación a sí el desarrollo de la
postura bípeda se encuentre normal o en retraso.
Desarrollo Indicador
Normal
1
Retraso
2
73
•
Desarrollo marcha:
- Definición: Refiere al proceso madurativo de la marcha asociado a la EC
del niño(a), teniendo en cuenta que el test evalúa el desarrollo hasta los 2
años, pero la consolidación de esta conducta no se adquiere, sino hasta los
5 a 7 años.
- Operacionalización: Determinada en relación a sí el desarrollo de la
marcha se encuentre normal o en retraso.
Desarrollo Indicador
•
Normal
1
Retraso
2
Edad
- Definición: Tiempo transcurrido desde el nacimiento del niño(a) hasta el
momento de realización del test.
- Operacionalización: Será medida en meses y estratificada en intervalos.
•
Intervalos
Indicador
0 – 10 meses
1
11 – 20 meses
2
21 – 24 meses
3
Sexo
- Definición: Condición orgánica que distingue al hombre de la mujer.
- Operacionalización:
Sexo
Indicador
Masculino
1
Femenino
2
74
•
Prematurez
- Definición: Niño(a) nacido antes de completar las 37 semanas de gestación
(Según Organización Mundial de la Salud).
- Operacionalización:
Prematurez Indicador
•
Si
1
No
2
Edad de la madre al momento del parto
- Definición: Tiempo transcurrido desde el nacimiento de la madre hasta el
momento del parto del niño(a) a evaluar.
- Operacionalización: Será medida en años y estratificada en intervalos.
•
Intervalos
Indicador
Edad < 20 años
1
20 – 35 años
2
Edad > 35 años
3
Escolaridad de la madre
- Definición: Nivel de escolaridad aprobado por la madre del niño(a)
evaluado.
- Operacionalización:
Escolaridad Aprobada
Indicador
Básica
1
Media
2
Superior
3
75
•
Escolaridad del padre
- Definición: Nivel de escolaridad aprobado por el padre del niño(a)
evaluado.
- Operacionalización:
•
Escolaridad Aprobada
Indicador
Básica
1
Media
2
Superior
3
Tipo de parto
- Definición: Características del proceso de nacimiento del niño(a) a evaluar.
- Operacionalización:
•
Parto
Indicador
Normal
1
Cesárea programada
2
Cesárea de urgencia
3
Focalización socio-económica
- Definición: Estratificación socio-económica en quintiles, determinada a
través del puntaje de la ficha de protección social.
- Operacionalización:
Ficha de protección social (Puntaje) Quintil Indicador
2.072 a 8.500
I
1
8.501 a 11.734
II
2
11.735 a 13.484
III
3
13.485 a 14.557
IV
4
14.558 a 16.316
V
5
76
3.4 Universo
El universo está conformado por 384 lactantes de 6 a 24 meses de edad
pertenecientes a las salas cunas de los jardines infantiles de la JUNJI de la
ciudad de Punta Arenas, Región de Magallanes y Antártica Chilena, Chile.
3.5 Muestra
3.5.1 Tamaño de la muestra
Al no existir datos anteriores de prevalencia en el retraso del desarrollo
motor en la región, para calcular el tamaño de la muestra se utilizó el criterio de
máxima variabilidad, que consiste en asumir una prevalencia máxima del 50%.
Esto fue realizado a través de la fórmula de muestreo aleatorio simple:
nₒ =
z² · p · q
d²
En donde nₒ es valor inicial de la muestra sin corrección; z es el valor de
la distribución normal para un 90% de confianza; p = 0,5 que es igual a la
probabilidad de obtener un lactante con desarrollo motor normal, y q = 0,5 que
establece la probabilidad de obtener un lactante con retraso del desarrollo
motor, con un margen de error (d) de 0,09.
Luego para determinar la muestra:
nₒ
n = 1 + nₒ
N
En donde “n” = 68, es tamaño de la muestra final corregida.
77
Para la distribución de la muestra en los jardines infantiles se utilizará un
criterio de distribución proporcional según matrícula. Posteriormente por
aproximación decimal se tomó 70 niños(as).
La muestra de 70 lactantes fue seleccionada desde los jardines infantiles:
Jardín infantil “Caperucita roja”, Jardín infantil “Bambi”, Jardín infantil “Peter
pan”, Jardín infantil “Continente blanco”, Jardín infantil “Laguna azul”, Jardín
infantil “Villa austral” y Jardín infantil “Las charitas”; abarcando el 100% de los
establecimientos pertenecientes a JUNJI de la zona urbana de la ciudad de
Punta Arenas, región de Magallanes y Antártica chilena (Ver Tabla 1).
Tabla 1. Estratificación de la población según el número total de alumnos
por establecimiento y muestra extraída por cada jardín.
Jardín Infantil
Nº total de alumnos Porcentaje Muestra extraída
Caperucita roja
40
10,4%
7
Bambi
54
14,1%
10
Peter pan
54
14,1%
10
Continente blanco
54
14,1%
10
Laguna azul
74
19,2%
13
Villa austral
54
14,1%
10
Las charitas
54
14,1%
10
TOTAL
384
100%
70
3.5.2 Selección de unidades muestrales
Para la selección de la muestra en cada jardín infantil se utilizó un
muestreo sistemático, para lo cual se solicitó a la dirección de JUNJI la lista de
alumnos correspondiente a cada sala cuna, a partir de ésta, se utilizó la
siguiente ecuación para determinar en forma aleatoria el niño a evaluar.
78
K= N
n
En donde N es el número total de niños correspondiente a cada jardín y n
es la cantidad de niños a evaluar necesaria para dicho jardín. K corresponde al
intervalo constante de selección a partir de un número de arranque elegido al
azar entre 1 y K. A través de esta selección aleatoria la muestra incluyó niños
de 6 y de 9 a 24 meses.
3.6 Criterios de inclusión
-
Lactantes de 0 a 24 meses de edad.
-
Lactantes que tengan la autorización de sus padres y/o apoderados
mediante consentimiento informado.
-
Devolución del cuestionario solicitado con toda la información
requerida dentro de los plazos establecidos.
-
Lactante matriculado y registrado en las bases de datos de JUNJI.
3.7 Criterios de exclusión
-
Enfermedad actual que altere el estado general del sujeto el día de la
evaluación.
-
Lactante mayor a 24 meses de edad que se encuentre en sala cuna.
79
3.8 Material y método
3.8.1 Instrumentos de recolección de información
Dentro de los instrumentos utilizados para obtener la información
necesaria para el estudio, se contó con la información registrada en JUNJI
sobre niños(as) matriculados en sala cuna, ficha dirigida a los padres y/o
apoderados y la evaluación del desarrollo motor propiamente tal.
a) Registros de niños(as) matriculados, según JUNJI.
De los registros de información de JUNJI, se rescató:
-
Número de matrículas en sala cuna pertenecientes a la ciudad de
Punta Arenas.
-
Número de niños(as) registrados como integrantes de sala cuna por
cada uno de los establecimientos pertenecientes a la ciudad de Punta
Arenas.
-
Antecedentes de fecha de nacimiento y puntaje de ficha de protección
social de cada uno de los integrantes de la muestra en estudio.
-
Previsión de salud de cada uno de los integrantes de la muestra.
b) Ficha de recolección de datos
Adjunto al consentimiento informado (Anexo 5), se entregó una ficha
(Anexo 6) a los padres y/o apoderados de los niños(as), consistente en una
serie de preguntas que tienen como objetivo recolectar datos pre, peri y post
natales del niño(a) evaluado(a). Esta ficha consta de dos ítems; el ítem I
corresponde a 5 preguntas referidas a antecedentes personales sociales y
80
familiares del niño(a) evaluado(a), mientras que el ítem II se relaciona con
información específica del embarazo, proceso de parto y situación de salud
actual del niño(a), esta sección consta de 4 preguntas.
c) Test de Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor (EKDM)
Consiste en un test de evaluación de rendimiento motor del niño(a) de 0
a 24 meses, que evalúa el grado de desarrollo motor general y a su vez en las
diferentes conductas motoras propias de la edad, incluyendo:
-
Desarrollo mirada.
-
Desarrollo prensión.
-
Desarrollo sedestación.
-
Desarrollo bipedestación.
-
Desarrollo marcha.
3.8.2 Procedimientos
a) Proceso de recolección de información
- En la primera etapa se solicitó autorización a la JUNJI (Anexo 7) de la región
de Magallanes y Antártica chilena para ingresar a los establecimientos
dependientes de esta y realizar la investigación en los 7 jardines, la solicitud fue
aceptada el 6 de Septiembre del presente año (Anexo 8).
- Posteriormente, se realizó una reunión con la educadora encargada de la
unidad de profesionales de apoyo equipo técnico, para organizar los horarios de
visitas a los diferentes jardines infantiles en los que se llevó a cabo la
investigación.
81
- Luego se acudió a los establecimientos para realizar una reunión de
coordinación con directores y educadoras con el fin de determinar fechas y
horarios de evaluación (Anexo 9), conjuntamente a esto, se entregó
consentimiento informado y ficha para que se les haga llegar a los padres y/o
apoderados.
- Con la devolución de los consentimientos informados y fichas, fueron
evaluados aquellos niños(as) que cumplieron con los criterios de inclusión.
b) Aplicación de la Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor
- Las 70 evaluaciones fueron realizadas por uno de los integrantes del estudio,
el cual poseía la autorización de la autora, para aplicar el test. Además, se
realizó un entrenamiento en la aplicación de éste en uno de los centros de
práctica clínica de la Carrera de Kinesiología de la Universidad de Magallanes,
específicamente la sala cuna del jardín infantil Padre Alberto Hurtado,
perteneciente al Hogar de Cristo de la ciudad de Punta Arenas, debido a que
este establecimiento presenta una población de condiciones similares a las
observadas en este estudio. Dicha actividad contó con la asesoría permanente
de un docente de la carrera de Kinesiología de la Universidad de Magallanes.
- Por otra parte, el evaluador fue asesorado por la autora del test, Kinesióloga
Patricia Conejeros.
- La evaluación se realizó en cada una de las fechas acordadas con los
jardines, siempre en horario a.m., alrededor de una hora después de la comida
de los niños(as).
- En cada evaluación se utilizó sala de reuniones o amamantamiento del jardín,
la cual contaba con una silla de sala cuna y una colchoneta de 1 cm. de
espesor con dimensiones de 0,50 por 2 metros.
- Durante la exploración el niño(a) debió permanecer despierto. El ambiente
debió ser tranquilo, sin circunstancias molestas y en condiciones óptimas de
82
iluminación y calefacción (25° C). La exploración s e realizó en presencia de su
educadora.
El
evaluador
tuvo
que
permanecer
tranquilo,
realizando
movimientos suaves, controlados, manteniendo sus manos templadas. La
evaluación para cada niño(a) duró entre 15 a 20 minutos.
3.8.3 Protocolo de Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor
A continuación se especifica el proceso por el cual se realizó cada una
de las evaluaciones mediante el protocolo estandarizado:
1. La EC del niño debió expresarse:
a) En días, multiplicando los meses por 30. Por ejemplo, si el niño
tiene 10 meses y 5 días, la EC en días será igual a 305 días.
b) En meses, cabe hacer notar que un niño debe considerarse de 10
meses, por ejemplo, desde que tiene 9 meses y 16 días hasta que
tiene 10 meses y 15 días. Este rango de 15 días en ambos
sentidos, vale para todos los meses.
La EC en días sirvió para determinar el rendimiento del niño en la
prueba. A su vez, la EC en meses permitió determinar el mes de
iniciación de la prueba y la utilización del gráfico del perfil de desarrollo
motor.
2. Al tener estos datos se pudo comenzar el test, desde un mes debajo de
la EC del niño.
3. Al fallar en alguno de los ítems del mes inicial, se debió retroceder de
mes hasta llegar a uno donde realizara todas las pruebas de ese mes,
tomándolo como mes base.
83
4. Luego se realizaron todos los ítems de cada mes, a partir del mes base
en adelante, hasta que el niño(a) fracasó en todos los ítems de un
determinado mes.
5. Posteriormente, se entregaron los puntajes correspondientes a cada ítem
realizado positivamente:
• Del 1° al 3° mes corresponde a 6 puntos.
• Del 4° al 13° mes corresponde a 7,5 puntos.
• 15° mes corresponde a 15 puntos.
• 18° mes corresponde a 22,5 puntos.
• 24° mes corresponde a 90 puntos.
Es decir, cada mes respondido positivamente equivale a 30 días de
desarrollo motor. Así, el puntaje total de los 24 meses, equivale a un total de
720 puntos.
6. Los datos estadísticos que se obtuvieron son (anexo 10):
a) Mes base: Mes en el que se encontraron todas las pruebas positivas.
Mes de desarrollo homogéneo.
b) Edad motora: Suma de los puntajes hasta el mes base, más los puntos
de los ítems respondidos positivamente sobre este mes.
Ejemplo: un niño de 10 meses respondió positivamente hasta el
mes 6, 2 ítems positivos en el mes 7 y 1 en el mes 8.
Mes base: 30 · 6 = 180
+ 7,5 · 3 = 22,5
202,5 días de desarrollo
84
c) Puntaje bruto (PB): Para determinar este puntaje se debió dividir el
puntaje de la edad motora, por la EC del niño en días de desarrollo.
Ejemplo: Edad motora
Edad cronológica
202,5 = 0,607
300
El puntaje debe obtenerse con tres decimales a objeto de
aproximar el segundo decimal hacia arriba, cuando el tercero es 5 o más.
De esta forma el puntaje se expresa con dos decimales.
Por la tanto, el PB = 0,61, considerando 1,0 como parámetro
normal de desarrollo.
d) Retraso motor: Para establecer el RM, a la EC se le restó la edad
motora.
Ejemplo: 300 – 202,5 = 97,5
RM = 97,5
e) Porcentaje de retraso motor: Porcentaje de este resultado con respecto a
la EC.
EC = 100
RM
X
Ejemplo: 300 = 100, entonces X = 32,5% de RM
97,5 X
7. A través del gráfico del perfil del desarrollo motor, se puede determinar
qué áreas específicas del desarrollo motor se encuentran afectadas.
85
Para utilizar este gráfico se marcó una línea horizontal
correspondiente a la EC, paralela al eje de las conductas. Sobre o bajo
este nivel se encontraron los logros, marcándose con un punto el último
acierto para cada conducta.
Luego se unieron los puntos obtenidos en las diferentes conductas
motoras, conformando así el perfil motor o curva de desarrollo real del
niño(a) que se comparó con la curva ideal correspondiente a la EC.
Esta línea indicó que todas las conductas bajo ella estaban
logradas y sugiere el punto de partida desde donde debería iniciarse una
intervención.
Para realizarse el diagnóstico motor se considera:
Desarrollo motor:
Normal:
0% - 10%
Retraso motor:
Leve:
11% - 40%
Moderado: 41% - 70%
Grave:
70% - 100%
Para hacer el diagnóstico y observar el perfil, se debió considerar
el desarrollo máximo normal de cada conducta hasta los 2 años:
Desarrollo mirada: 3 meses
Desarrollo prensión: 24 meses
Desarrollo sedente: 18 meses
Desarrollo bipedestación: 18 meses
Desarrollo marcha: 24 meses
86
3.9 Método de análisis estadístico
Entre los datos recopilados en el estudio que se consideraron
importantes de asociar al RM, determinamos:
- Áreas del desarrollo motor (Desarrollo mirada, pr
ensión, sedestación,
bipedestación y marcha).
- Edad.
- Sexo.
- Prematurez.
- Edad de la madre al momento del parto.
- Escolaridad de la madre y/o cuidador principal.
- Escolaridad del padre.
- Tipo de parto.
- Nivel Socio-económico.
Todas estas variables fueron almacenadas en una base de datos creada
en el programa Microsoft Excel 2007, para su posterior análisis a través del
software estadístico Intercooled Stata 11.1.
87
CAPÍTULO IV
88
RESULTADOS
La siguiente figura representa el resumen de los resultados obtenidos en
la evaluación del desarrollo motor. De acuerdo a ésta, la muestra consistió en
un total de 70 lactantes, de los cuales 36 fueron hombres, cuyas edades
presentaron un promedio de 17,6 meses y 34 mujeres que promediaron 17,9
meses de edad. En cuanto al desarrollo motor general 32 de ellos presentaron
retraso, de los cuales 18 de ellos fueron de sexo masculino y 14 de sexo
femenino.
Figura 3: Esquema resumen de resultados
TOTAL
MUESTRA
70
Hombres
Mujeres
Desarrollo
Motor
51,4%
48,6%
Normal 54.3%
Retraso
Motor
Retraso
motor
por área
Edad
Promedio
17.6
56,3%
Retraso 45.7%
43,7%
Mirada 0%
Mirada 0%
Prensión 43.5%
Prensión 56.5%
Sedente 42.1%
Sedente 57.9%
Bípedo 46.2%
Bípedo 53.8%
Marcha 51.9%
Marcha 48.1%
Retraso
Motor
Retraso
motor
por área
Edad
Promedio
17.9
89
Tabla 2: Frecuencia y distribución porcentual de individuos según sexo
Sexo
Frecuencia (n)
Porcentaje (%)
Masculino
36
51,4
Femenino
34
48,6
Total
70
100
La muestra en estudio constó de un total de 70 individuos, de los cuales
un 51,4% correspondió al sexo masculino, y un 48,6% al sexo femenino.
Tabla 3: Frecuencia y distribución porcentual de individuos según
intervalo de edad
Sexo
Frecuencia (n)
Porcentaje (%)
0 – 10 meses
8
11,4
11 – 20 meses
34
48,6
21 – 24 meses
28
40
Total
70
100
Según la edad de los integrantes de la muestra, esta se clasificó en
intervalos de 0 – 10 meses, 11 – 20 meses y 21 – 24 meses, encontrándose la
mayor cantidad de población en el segundo intervalo con un 48,6% del total de
la muestra.
Tabla 4: Frecuencia retraso motor
Desarrollo motor
Frecuencia (n)
Normal
38
Retraso
32
Total
70
En base a los resultados de la evaluación del desarrollo motor aplicados
a la muestra, se obtuvo un resultado de 32 niños(as) con presencia de RM.
90
Gráfico 1: Distribución porcentual según desarrollo motor
54,30%
Normal
Retraso Motor
45,70%
En relación a la distribución porcentual, esta entregó una prevalencia del
RM de un 45,7%.
Tabla 5. Distribución porcentual del retraso motor según sexo
Sexo
Retraso motor
Hombre Mujer
56,3%
43,7%
Gráfico 2: Distribución porcentual del retraso motor según sexo
60%
50%
40%
30%
Retraso
motor
20%
10%
0%
Hombres
Mujeres
En la tabla 5 y gráfico 2, se observa que existió mayor cantidad de RM en
el sexo masculino con un 56,3%.
91
Tabla 6: Distribución porcentual del desarrollo motor por áreas
Área
Normal
Retraso
Desarrollo mirada
100%
0%
Desarrollo prensión
67,2%
32,8%
Desarrollo sedestación
72,9%
27,1%
Desarrollo bipedestación
62,9%
37,1%
Desarrollo marcha
25,7%
74,3%
Gráfico 3: Distribución porcentual retraso motor por áreas de
desarrollo motor
80%
60%
40%
Retraso motor
20%
Marcha
Bipedestación
Sedestación
Prensión
Mirada
0%
De acuerdo a la tabla 6 y gráfico 3 de las áreas específicas del desarrollo
motor evaluadas en EKDM, la más afectada fue el desarrollo de la marcha con
un 74,3% de retraso, mientras que la menos comprometida fue el desarrollo de
la mirada entregando un 0% de retraso.
92
Tabla 7: Distribución porcentual del retraso motor por área según sexo
Área
Masculino Femenino
Desarrollo mirada
0%
0%
Desarrollo prensión
43,5%
56,5%
Desarrollo sedestación
42,1%
57,9%
Desarrollo Bipedestación
46,2%
53,8%
Desarrollo Marcha
51,9%
48,1%
Gráfico 4: Distribución porcentual del retraso motor por área según sexo
Masculino
Femenino
Marcha
Bipedestación
Sedestación
Prensión
Mirada
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
En la tabla y gráfico anterior se puede observar como las mujeres
obtuvieron mayores porcentajes de retraso del desarrollo motor siendo el más
alto el encontrado en el desarrollo del sedente con un 57,9%. Los hombres sólo
sobrepasaron a las mujeres en porcentaje de retraso en el desarrollo de la
marcha con un 51,9% sobre un 48,1% correspondiente a las mujeres.
93
Tabla 8: Distribución porcentual del desarrollo motor por intervalo de edad
Desarrollo motor 0 -10 meses 11 – 20 meses 21- 24 meses
Normal
50%
67,6%
39,3%
Retraso
50%
32,4%
60,7%
Gráfico 5: Distribución porcentual del desarrollo motor por intervalo de
edad
100%
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
39,3%
50,0%
67,6%
Normal
60,7%
50,0%
Retraso motor
32,4%
0 - 10
meses
11 - 20
meses
21 - 24
meses
Según tabla 8 y gráfico 5, el grupo más afectado fue el de 21 a 24 meses
con un 60,7% de sus integrantes con RM, mientras que el que presentó la
menor cantidad de retraso fue el grupo de 11 a 20 meses con sólo un 32,4%.
94
Tabla 9: Distribución porcentual del retraso motor por área según
intervalo de edad
Área
0 – 10 meses
11 – 20 meses
21 – 24 meses
Desarrollo mirada
0%
0%
0%
Desarrollo prensión
8,7%
65,2%
26,1%
Desarrollo sedestación
15,8%
84,2%
0%
Desarrollo bipedestación
26,9
57,7%
15,4%
Desarrollo marcha
5,7%
42,3%
51,9%
Gráfico 6: Distribución porcentual del retraso motor por área según
intervalo de edad
0 - 10 meses
11 - 20 meses
21 - 24 meses
Marcha
Bipedestación
Sedestación
Prensión
Mirada
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
Según tabla y gráfico anterior, se demostró que el área que presentó
mayor RM fue el desarrollo de la sedestación en el intervalo de edad de 11 a 20
meses, con un 84,2%, seguido por el desarrollo de la prensión, con un 65,2%
de retraso en el intervalo de edad de 11 a 20 meses. Por otra parte, además del
desarrollo de la mirada, el área de desarrollo de la marcha presentó la segunda
minoría en RM, con un 5,7% en el intervalo de 0 a 10 meses de edad.
95
Antecedentes biológicos y contextuales de los lactantes
Gráfico 7: Desarrollo motor en los RN de pretérmino
100%
80%
60%
40%
Normal
Retraso
20%
0%
RNPT
En los recién nacidos de pretérmino (RNPT), el 80% presentó retraso en
el desarrollo motor, mientras que el 20 % se encontró normal.
96
Gráfico 8: Desarrollo motor del niño(a) según intervalo de edad de la
madre al momento del parto
60%
50%
40%
30%
20%
Normal
10%
Retraso
0%
Menor a 20
20 - 35
Mayor a 35
Edad de la madre
En base a los resultados del antecedente de la edad de la madre al
momento del parto, se observó que un 50% de los niños(as) nacidos de madres
mayores de 35 años presentó RM, mientras que en las madres entre 20 y 35
años se observó un 44,5%.
97
Gráfico 9: Desarrollo motor del niño(a) según escolaridad de la madre
60%
50%
40%
30%
20%
Normal
10%
Retraso
0%
Básica
Media
Superior
Educación
Los resultados arrojados en base al antecedente educación de la madre
y/o cuidador principal, indicaron que el 50% del total de niños con madres que
completaron sólo la educación básica presentó retraso del desarrollo motor,
mientras que los niños(as) hijos(as) de madres y/o cuidadores con enseñanza
superior alcanzaron un 40%.
98
Gráfico 10: Desarrollo motor del niño(a) según escolaridad del padre
60%
50%
40%
30%
20%
Normal
10%
Retraso
0%
Básica
Media
Superior
Educación
Del gráfico expuesto se obtuvo que un 37,5% del total de hijos(as) de
padre con escolaridad básica completa presentó retraso del desarrollo motor.
Mientras que los hijos(as) de padres con educación superior obtuvieron un 62%
de retraso del desarrollo motor.
99
Gráfico 11: Desarrollo motor del niño(a) según tipo de parto
70%
60%
50%
40%
30%
20%
Normal
10%
Retraso
0%
Normal
Cesárea
programada
Cesárea
urgencia
Tipo de parto
Los resultados obtenidos referente al antecedente tipo de parto indicaron
que del total de niños correspondientes a la categoría de parto a través de
cesárea programada un 57% obtuvo retraso del desarrollo motor, mientras que
en el parto normal solo se observó un 39,5%.
100
Gráfico 12: Desarrollo motor del niño(a) según quintil socio-económico
30
Frecuencia
25
20
15
Normal
10
Retraso
5
0
I
II
III
IV
V
Quintil
En el gráfico del nivel socioeconómico y desarrollo motor se puede
observar que dentro del quintil I, de los 48 niños(as) pertenecientes a esta
fracción, 22 presentaron retraso del desarrollo motor, referente al quintil II se
mostró que 5 de los 13 lactantes de este grupo tenían retraso en su desarrollo.
Se obtuvo, además, un RM de sólo 1 niño(a) en relación al total de niños
pertenecientes al quintil III. Finalmente sólo 2 niños(as) se ubicaron en el IV
quintil y 2 en el V quintil, presentando los cuatro retraso del desarrollo motor.
101
CAPÍTULO V
102
CONCLUSIONES
La prevalencia de retraso del desarrollo motor de los 7 jardines
pertenecientes a JUNJI de la ciudad de Punta Arenas registrada en la muestra
fue de 45,7%, valor superior al encontrado en los estudios nacionales
revisados, los cuales refieren una prevalencia de retraso de aproximadamente
un 30%.
Al asociar la variable retraso del desarrollo motor con sexo, se observó,
al igual que en los estudios revisados, una mayor prevalencia ligada al sexo
masculino, obteniendo un porcentaje de 56,3%, sin encontrarse gran diferencia
con la proporción de RM registrado en los individuos de sexo femenino de
43,7%.
Por otro lado, estudios nacionales refieren que a mayor edad existe una
mayor pesquisa de retraso en el desarrollo motor, lo cual fue comprobado a
través de los datos conseguidos, en donde se compararon los resultados del
test EKDM con los distintos intervalos de edad convenidos para este estudio,
obteniéndose en los niños mayores de 20 meses de edad, la mayor proporción
de retraso en el desarrollo motor con un 60,7%.
Referente a las áreas de desarrollo motor evaluadas por el test EKDM,
se observó en base al total de la muestra mayor presencia de retraso en el
desarrollo de la marcha, con un 74,3%, muy por encima de la segunda mayoría,
que correspondió al desarrollo de la bipedestación, con sólo un 37,10%.
Al establecer una relación entre las áreas de desarrollo motor y sexo de
los individuos evaluados, se demostró que las mujeres obtuvieron mayor
103
porcentaje de retraso del desarrollo motor por área, siendo el más elevado el
retraso encontrado en el desarrollo de la sedestación con un 57,9%. La única
área en la que los individuos de sexo masculino superaron los valores
alcanzados por las mujeres, fue en el área de marcha, con un 51,9% sobre un
48,1%.
Por otra parte, al vincular estas áreas con los intervalos de edad
establecidos, se determinó que el área de prensión, sedestación y
bipedestación estuvieron más afectadas en el grupo de 11 a 20 meses,
mientras que el retraso en el desarrollo de la marcha se presentó en mayor
proporción en el último intervalo, correspondiente a los mayores de 20 meses,
alcanzando un 51,9%. En relación al desarrollo de las distintas áreas por cada
mes, puede ser revisado en el anexo 11.
Desde el punto vista de los antecedentes biológicos, se pudo observar
que en la variable prematurez, los recién nacidos de pretérmino presentaron un
80% de retraso del desarrollo motor.
Conjuntamente, en base al antecedente edad de la madre al momento
del parto, se vio reflejado que los intervalos de edad extremos (menor a 20 años
y mayor a 35 años) presentaron mayor porcentaje de retraso del desarrollo
motor en el niño(a) evaluado, alcanzando un 50% en las madres sobre 35 años
y un 47,6% en las menores de 20 años.
Según el tipo de parto se obtuvieron los resultados más importantes de
retraso en la cesárea programada con un 57% y el menor porcentaje en el parto
normal con un 39,5%.
104
En cuanto a los antecedentes psicosociales, en la clasificación realizada
por escolaridad de la madre se observó que a menor nivel educacional mayor
presencia de retraso del desarrollo motor, entregando cifras de un 50% de
retraso en las madres con escolaridad básica, muy por el contrario a lo que
ocurrió con la escolaridad del padre en la cual los más altos índices de retraso
se observaron en los hijos(as) de padres con educación superior, alcanzado un
60%.
Finalmente, se observó el desarrollo motor según el quintil socioeconómico de la familia, mostrando que 22 niños (45,8%) presentaron retraso
del desarrollo motor en el quintil I, disminuyendo abruptamente la proporción de
acuerdo aumenta el nivel socioeconómico.
105
DISCUSIÓN
De acuerdo a los resultados entregados por la evaluación, que
determinaron que casi la mitad de la población en estudio presentó algún grado
de retraso motor, queda en evidencia la necesidad de realizar una intervención
terapéutica en este grupo, ya sea directamente a nivel institucional o bien a
través de las redes asistenciales de salud donde es atendida dicha población, la
cual pertenece, casi en un 100% al sistema público de salud, según datos
obtenidos en la JUNJI. Referente a esto último y considerando el conocimiento
y la acabada formación que tiene el profesional kinesiólogo en el ámbito del
movimiento humano y el desarrollo motor, es importante incluirlo dentro de las
normas de salud a nivel nacional, tanto en promoción, realizando educación a
los padres e instituciones educativas; prevención, a través de las evaluaciones
de los niños con mayor riesgo y realizando intervención terapéutica en aquellos
casos en los que sea necesario.
Por otra parte, las Normas Técnicas de Estimulación y Evaluación del
Desarrollo Psicomotor del Niño y la Niña menores de 6 años del Ministerio de
Salud de nuestro país, refieren que la evaluación del desarrollo psicomotor
debe realizarse a los 2 meses, 18 meses y 4 años de edad. De acuerdo a esto,
y enfocándolo al área motriz, se detectan varias falencias en este sistema. Se
tiene conocimiento que el desarrollo motor presenta sus cambios más
importantes en los primeros 18 meses de vida, etapa en la cual se alcanza el
hito de mayor importancia de la primera infancia, que corresponde a la marcha.
Debido a esto es necesario realizar una más acabada evaluación del desarrollo
motor, con el fin de detectar déficit que puedan aparecer en esta etapa,
promoviendo así a través de la intervención a desarrollar apropiadamente las
demás
áreas,
debido
a
que
el
movimiento
favorece
un
óptimo
106
autoconocimiento, basado en la comunicación interpersonal, el dominio del
lenguaje gestual y el autocontrol, a través de los cuales interpreta el mundo que
le rodea.
Es así como el test de Evaluación Kinésica del Desarrollo Motor cobra
importancia, ya que es una herramienta específica y objetiva para el
cumplimiento de este propósito.
Enfocándose netamente en la población evaluada y considerando que en
las dependencias de los jardines infantiles se desarrollan la mayor parte de las
conductas motoras de lactantes y niños, es justificable y necesaria la presencia
de un kinesiólogo(a), el cual abarque simultáneamente distintas estrategias de
abordaje en el niño menor de 2 años.
Anexo a esto, en los niños con presencia de retraso se encontró un alto
porcentaje de los antecedentes biológicos y psicosociales observados en este
estudio, tales como prematurez, edades extremas de la madre al momento del
parto, escolaridad incompleta de esta y el bajo nivel socioeconómico familiar.
Escapa a esto la relación de escolaridad del padre y retraso del desarrollo
motor, ya que a mayor escolaridad de este se presenta mayor retraso,
posiblemente debido a que su campo laboral exige mayores tiempos fuera del
hogar, afectando la relación de este con su hijo y favoreciendo el apego del niño
con su madre, lo que la hace la principal encargada de la estimulación de su
hijo.
107
Finalmente, se determina que la herramienta de evaluación utilizada en
esta investigación permitió determinar el retraso del desarrollo de la actividad
motriz en cada uno de los individuos de la muestra, tanto de manera general,
como por cada área motora específica, entregando a través de este estudio las
bases para crear instancias de investigación, evaluación y/o actividad
terapéutica en niños menores de 2 años, basándose en la evaluación kinésica
estandarizada del desarrollo motor.
108
CAPÍTULO VI
109
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Morales, J. (2006) Motricidad y cognición. Un estudio empírico. Tesis doctoral.
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Normas Técnicas de Estimulación y Evaluación del Desarrollo Psicomotor del
Niño y la Niña Menor de 6 años. (2004). Programa de Salud del Niño. Ministerio
de Salud, Gobierno de Chile. Santiago, Chile.
114
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Paredes, J. (2002). El deporte como juego: Un análisis cultural. Tesis de
doctorado. Universidad de Alicante, Alicante, España.
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Palisano, R. (2000). Concurrent and predictive validities of the Bayley motor
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66(11), 1714-1719.
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Pérez-Olarte, P. (2003). Evaluación y manejo del niño con retraso psicomotor.
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Editorial Médica Panamericana.
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Ediciones Gymnos.
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Valdés, M. (2005) Psicomotricidad,
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Chile: Bibliográfica Internacional.
•
Zamora, D. (2007). La evaluación del niño y la niña en edad preescolar. (6°.
Ed.). Costa Rica: Ediciones EUNED.
115
ANEXOS
116
ANEXO 1
Batería de prueba
117
ANEXO 2
PROTOCOLO DE EVALUACIÓ KIÉSICA DEL DESARROLLO MOTOR
M
P
PB
PS
DM
: Mirada
: Prensión
: Progresión a la bipedestación
: Progresión a la sedestación
: Desarrollo a la marcha
P
PK
E
R
MT
: Posición del niño
: Posición del Kinesiólogo
: Ejecución
: Respuesta
: Material
R – 1 MES
M
P
PK
E
R
MT
Mirada 45° - 90°
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo presenta argolla que se desplaza desde línea media hasta 90° de
izquierda y derecha
Niño(a) realiza seguimiento visual del objeto entre 45° - 90°
Argolla con cordel
P Mantiene puños cerrados constantemente
Se evalúa a través de la observación durante ejecución del test
DM De pie extiende las piernas
P En decúbito supino
PK Por detrás del niño(a), afrontándolo a nivel de la cabeza
Kinesiólogo toma al niño(a) de la región axilar y se apoya la planta del pie sobre
E
una superficie dura
R Niño(a) realiza extensión brusca de rodillas inmediata al apoyo plantar
PB
P
PK
E
R
MT
En prono levanta levemente la cabeza
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
La posición en si; sino efectúa la posición, kinesiólogo realiza estimulación
visual por delante del niño(a)
Niño(a) levanta sólo la cabeza y/o la traslada sin despegar hombros
Juguete A y/o lámina visual
118
PS
P
PK
E
R
De supino a sedente cae la cabeza
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo tracciona al niño(a) tomándolo de las manos, para sentarlo,
formando un ángulo de 45° con la superficie
Cabeza del niño(a) cae hacia atrás
2 MESES
M
P
PK
E
R
MT
Mirada 180°
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo presenta argolla que se desplaza desde línea media hasta 90° de
izquierda y derecha
Niño(a) realiza seguimiento visual del objeto en 180°
Argolla con cordel
P Abre un poco las manos
Se evalúa a través de la observación durante ejecución del test
DM De pie débil extensión de piernas
P En decúbito supino
PK Por detrás del niño(a), afrontándolo a nivel de la cabeza
Kinesiólogo toma al niño(a) de la región axilar y se apoya la planta del pie sobre
E
una superficie dura
Niño(a) realiza extensión menos evidente o con menos fuerza y rapidez que en
R
la prueba del primer mes
PB
P
PK
E
R
MT
PS
P
PK
E
R
En prono levanta la cabeza
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
Kinesiólogo presenta un juguete por delante y por arriba
Niño(a) levanta la cabeza e inicia el despegue de hombros, siguiendo con la
vista el objeto presentado
Juguete A y/o lámina visual
De supino a sedente intenta control de cabeza
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo tracciona al niño(a) tomándolo de las manos para sentarlo formando
un ángulo de 45° con la superficie
Niño(a) levanta la cabeza del plano de apoyo no mas de un ángulo de 45°
119
3 MESES
M
P
PK
E
R
MT
Dirige la vista en toda las direcciones
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo presenta argolla que se desplaza en distintas trayectorias
Niño(a) realiza seguimiento visual del objeto en distintas direcciones
Argolla con cordel
P
P
PK
Toma objetos que se le ponen en la mano
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo pasa la argolla al niño(a) en la línea media sobre la palma de la
mano
Niño(a) realiza cierre palmar
Argolla
E
R
MT
DM De pie dobla las piernas
P En decúbito supino
PK Por detrás del niño(a), afrontándolo a nivel de la cabeza
Kinesiólogo toma al niño(a) de la región axilar y se apoya la planta del pie sobre
E
una superficie dura
R Niño(a) realiza flexión de rodilla e incluso caderas
PB
P
PK
E
R
MT
PS
P
PK
E
R
En prono despega tronco con apoyo anterior de brazos
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
La posición en sí; sino efectúa la posición, kinesiólogo realiza estimulación
visual por delante del niño(a)
Niño(a) levanta la cabeza con apoyo de antebrazos y codos.
Juguete A y/o lámina visual
De supino a sedente mantiene la cabeza erguida
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo tracciona al niño(a) tomándolo de las manos para sentarlo formando
un ángulo de 90° con la superficie
Niño(a) mantiene la cabeza en línea con el tronco desde que se inicia hasta que
termina el movimiento
120
4 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Junta las manos o se lleva objetos a la boca
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo presenta juguetes en la línea media
Niño(a) junta las manos, se las lleva a la boca, intenta tomar objetos o se lleva
objetos a la boca
Juguete A y B
DM Intenta soportar peso en miembros inferiores
P En decúbito supino
PK Por detrás del niño(a), afrontándolo a nivel de la cabeza
Kinesiólogo toma al niño(a) de la región axilar y se apoya la planta del pie sobre
E
una superficie dura
R Niño(a) mantiene la posición 1 segundo, luego sobreviene el quiebre del tono
PB
P
PK
E
R
MT
En prono eleva tren superior con apoyo en brazos extendidos
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
Kinesiólogo presenta un juguete por delante y por arriba
Niño(a) realiza extensión de tronco y brazos con apoyo anterior de manos
Juguete A y/o lámina visual
PS
P
PK
Levanta cabeza al llevar a sedente
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo tracciona al niño(a) tomándolo de las manos para sentarlo formando
un ángulo de 90° con la superficie
Niño(a) inicia el movimiento levantando la cabeza y luego continúa con cabeza
erguida y alineada con el tronco
E
R
5 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Toca un juguete
En decúbito supino o en posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo presenta 2 cubos en la línea media
Niño(a) toca un cubo
2 Cubos
121
DM Se mantiene de pie unos instantes con apoyo axilar
P En decúbito supino
PK Por detrás del niño(a), afrontándolo a nivel de la cabeza
Kinesiólogo toma al niño(a) de la región axilar y se apoya la planta del pie sobre
E
una superficie dura
R Niño(a) mantiene la posición por más de 2 segundos
PB
P
PK
R
MT
Gira de prono a supino
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
Kinesiólogo presenta un juguete por delante y se desplaza hacia el lado en que
se quiere que realice el giro
Niño(a) gira de prono a supino
Juguete A y/o lámina visual
PS
P
PK
E
R
Se mantiene sentado con apoyo leve de caderas
En posición sedente con apoyo de caderas
Por detrás del niño, tomando las caderas
Kinesiólogo entrega leve apoyo a nivel de caderas
Niño(a) mantiene el tronco equilibrado por más de 2 segundos
E
6 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Utiliza toda la mano para tomar objeto
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta 2 cubos por delante del niño
Niño(a) toma los dos cubos uno en cada mano con participación de palma y
dedos
2 Cubos
DM Se mantiene de pie por periodos mas largos con apoyo axilar
P En decúbito supino
PK Por detrás del niño, afrontándolo a nivel de la cabeza
Kinesiólogo toma al niño(a) de la región axilar y se apoya la planta del pie sobre
E
una superficie dura
R Niño(a) mantiene la posición por más de 10 segundos
122
PB
P
PK
R
MT
Gira de supino a prono
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
Kinesiólogo presenta un juguete por delante y se desplaza hacia el lado en que
se quiere que realice el giro
Niño(a) gira de supino a prono
Juguete A y/o lámina visual
PS
P
PK
E
R
Se mantiene sentado solo momentáneamente
En posición sedente con apoyo de caderas
Por detrás del niño, tomando las caderas
Kinesiólogo quita apoyo de caderas
Niño(a) se mantiene sentado solo por más de 3 segundos
E
7 MESES
P
P
PK
E
MT
Toma objetos con ambas manos y los manipula
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta juguetes por delante del niño
Niño(a) toma los juguetes, cruza la línea media y los pasa de una mano a otra;
hasta 3 intentos. Si una de ellas resulta positiva la prueba se considera correcta
Cubo, campanilla, juguete A
DM
P
PK
E
R
Se para con apoyo de la posición cuclillas
En posición cuclillas con apoyo posterior
Por detrás del niño, dándole apoyo en rodillas
Kinesiólogo realiza con sus manos presión caudal sobre las rodillas del niño(a)
Niño(a) se pone de pie por la presión de la rodilla
PB
P
PK
E
R
MT
Arrastre
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) a nivel de pies o lateralmente
Kinesiólogo coloca juguetes a 50 cms. por delante del niño(a)
Niño(a) se arrastra o repta hacia adelante o hacia atrás
Juguete A y B
PS
P
PK
E
R
Se mantiene solo y con mayor equilibrio por mas tiempo
En posición sedente sin apoyo
Por detrás del niño
Niño(a) mantiene la posición
Niño(a) permanece sentado por más de 10 segundos
R
123
8 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Pinza burda
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta juguetes por delante del niño
Niño(a) toma objetos con pinza burda, opone pulgar a los demás dedos
2 Cubos
DM
P
PK
E
R
Ayuda a ponerse de pie tomado de las manos
En decúbito supino o sentado
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo tracciona al niño hacia la bipedestación con tomada de asimiento
Niño(a) ayuda a ponerse de pie
PB
P
PK
E
Intenta posición de 4 pies
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
Kinesiólogo presenta juguete por delante y por arriba del niño(a)
Niño(a) despega el abdomen de la superficie de apoyo, intentando 4 pies o
desplazamiento hacia atrás con apoyo en talones y apoyo de antebrazos y muslos
Juguete A y/o lámina visual
R
MT
PS
P
PK
E
R
MT
Se sienta y se mantiene solo con ayuda de manos
En decúbito supino
Enfrentando al niño(a) a nivel de los pies
Kinesiólogo presenta juguete, orden verbal
Niño(a) se sienta utilizando apoyo de codo y mano en una sentada diagonal o
lateral
Juguete A y/o lámina visual
9 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Deja caer objetos voluntariamente
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta dos cubos delante del niño, luego presenta un tercer cubo
Niño(a) suelta los objetos en forma repentina
Cubos, campanilla
124
DM Se mantiene de pie tomado de las manos por mas tiempo
P En decúbito supino o sentado
PK Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo dirige orden verbal y tracciona al niño(a) hacia la bipedestación con
E
tomada de asimiento
R Niño(a) se mantiene de pie por más de 5 segundos
PB
P
PK
E
R
MT
Comienza gateo
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) a nivel de pies o lateralmente
Kinesiólogo presenta juguete por delante del niño(a)
Niño(a) genera posición de 4 pies y logra desplazamiento
Juguete A y/o lámina visual
PS
P
PK
E
R
Permanece sentado por mayor tiempo
En posición sedente sin apoyo
Por detrás del niño(a)
Niño(a) mantiene la posición
El niño permanece sentado sin apoyo por más de 60 segundos
10 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Inicia pinza fina
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta pastillas por delante del niño
Niño(a) toma las pastillas con pulgar e índice, con pinza lateral o pinza tridigital
Pastillas
DM
P
PK
E
R
MT
Se toma de muebles para ponerse de pie
Indiferente, por delante de apoyo (silla)
Por detrás del niño(a) o lateralmente
Kinesiólogo presenta juguete sobre la superficie de apoyo
Niño(a) se pone de pie y mantiene posición por más de 30 segundos
Silla, Juguete A y/o lámina visual
125
PB
P
PK
E
MT
Gatea
En posición de 4 pies
Por detrás del niño(a) o lateralmente
Kinesiólogo presenta juguetes por delante del niño
Niño(a) realiza desplazamientos hacia adelante o atrás y/o realiza gateo en forma
asimétrica o heterolateral.
Juguete A y B
PS
P
PK
E
R
MT
Se sienta solo desde la posición prono
En decúbito prono
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo pide al niño(a) la posición ayudándose de un juguete
Niño(a) adopta la posición en forma voluntaria e independiente
Juguete A y/o lámina visual
R
11 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Ejercita la pinza fina
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta pastillas por delante del niño
Niño(a) toma las pastillas con pinza fina y ocasionalmente con pinza lateral y/o
tridigital
Pastillas
DM Comienza deambulación tomado de las manos
P En posición bípeda
PK Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente tomándole las manos
Kinesiólogo presenta un objeto a 50 cms. del niño(a) y se le da la orden verbal
E
de iniciar la marcha
R Niño(a) inicia el desplazamiento
MT Juguete A y lámina visual
PB
P
PK
E
R
MT
Gatea coordinadamente
En posición de 4 pies
Por detrás del niño(a) o lateralmente
Kinesiólogo presenta juguetes por delante del niño
Niño(a) gatea con patrón recíproco
Juguete A y B
126
PS
P
PK
E
R
Se sienta solo, estable y equilibrado
En decúbito supino, prono o posición 4 pies
Indiferente
Kinesiólogo le pide que adopte la posición al niño(a)
Niño(a) se sienta solo y mantiene equilibrio
12 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Deja caer objetos por pequeños orificios
En posición sedente con apoyo lateral y posterior
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta las pastillas y botella delante del niño y se da la orden
verbal de introducir los objetos, puede realizarse demostración
Niño(a) introduce 2 a 3 pastillas con pinza lateral o tridigital
Botella y pastillas
DM Camina tomado de una mano brevemente
P En posición bípeda
PK Lateral al niño(a) tomándole una mano
Kinesiólogo presenta un objeto a 50 cms. del niño(a) y se le da la orden verbal
E
de iniciar la marcha
R Niño(a) se desplaza dando 2 a 3 pasos
MT Juguete A y lámina visual
PB
P
PK
E
R
MT
PS
P
PK
E
R
Sube escaleras gateando
En posición de 4 pies frente a una escalera
Por detrás o enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo presenta juguete sobre escalera y le da la orden verbal de subir la
escalera
Niño(a) sube escalera 2 – 3 escalones gateando
Escalera, juguete A y/o lámina visual
Se completa la fase de sedestación
En posición sedente
Indiferente
Kinesiólogo pide que mantenga la posición e interactúa con el niño(a)
Niño(a) mantiene equilibrio en sedente por mas de 1 minuto y es capaz de
realizar rotaciones de tronco sin perder equilibrio
127
13 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Pinza fina establecida
En posición sedente con apoyo posterior y lateral
Enfrentando al niño(a) a nivel de pies
Kinesiólogo presenta pastillas para que manipule
Niño(a) toma los objetos con pinza fina
Pastillas
DM
P
PK
E
R
Camina solo con amplia base de sustentación por poco tiempo
En posición bípeda
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de que se desplace
Niño(a) se desplaza con base de sustentación amplia y recorre más de 50 cm.
PB
P
PK
E
R
Se pone de pie solo
En decúbito supino, prono o posición sedente
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de que se ponga de pie
Niño(a) se pone de pie
PS
P
PK
E
R
Paso de pie a sedente
En posición bípeda
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de que se siente
Niño(a) desde posición bípeda pasa a sedente
15 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Introduce pastillas en una botella con pinza fina
En posición sedente con apoyo posterior y lateral
Enfrentando al niño(a) a nivel de pies
Kinesiólogo presenta las pastillas y botella delante del niño y se da la orden
verbal de introducir los objetos, puede realizarse demostración.
Niño(a) introduce 2 o más pastillas con pinza fina
Botella y pastillas
128
DM
P
PK
E
MT
Camina solo hacia adelante
En posición bípeda
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de que camine hacia un objeto o persona
Niño(a) se desplaza hacia adelante y recorre mas de un metro de distancia con
una base de sustentación estable
Juguete A y lámina visual
PB
P
PK
E
R
Movimientos complejos, se detiene y sigue caminando
En posición bípeda, realizando marcha
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da una orden verbal de detención y luego que camine de nuevo
Niño(a) sigue caminando sin perder el equilibrio en una sola dirección
PS
P
PK
Se sienta en una silla baja con ayuda manual
En posición bípeda por delante de la silla
Enfrentando al niño(a) por delante y tomándolo de las manos
Kinesiólogo tomando las manos del niño (a), da una orden verbal de que se
siente
Niño(a) se sienta con ayuda del kinesiólogo
Silla
R
E
R
MT
18 MESES
P
P
PK
E
R
MT
DM
P
PK
E
R
Saca la pastilla de la botella
En posición sedente con apoyo posterior y lateral
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de retirar la pastilla de la botella, si no efectúa la
actividad, realizar demostración
Niño(a) da vuelta la botella para sacar la pastilla o introduce la mano y la saca
Botella y pastilla
Camina en distintas direcciones, comienza el desarrollo del paso, empieza a
correr
En posición bípeda
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de caminar en varias direcciones, si no efectúa la
actividad, realizar demostración
Niño(a) camina con buen desarrollo del paso en varias direcciones. Es capaz de
trotar o correr. El braceo es reciproco
129
PB
P
PK
E
R
MT
PS
P
PK
E
R
MT
Sube escaleras con ayuda
En posición bípeda por delante de una escalera tomado de la mano por
kinesiólogo
Enfrentando al niño(a) por delante o lateralmente
Kinesiólogo da la orden verbal de subir escalera, si no efectúa la actividad,
realizar demostración
Niño(a) sube la escalera, 2 a 3 peldaños tomado de la mano del kinesiólogo; de a
un escalón a la vez
Escalera
Se sienta en silla baja sin ayuda
En posición bípeda por delante de la silla
Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo da la orden verbal de que se siente, si no efectúa la actividad,
realizar demostración
Niño(a) se sienta sin ayuda
Silla
24 MESES
P
P
PK
E
R
MT
Construye una torre con 3 cubos
En posición sedente con apoyo posterior y lateral
Enfrentando al niño(a) a nivel de pies
Kinesiólogo da la orden verbal de realizar torre, si no efectúa la actividad,
realizar demostración
Niño(a) construye una torre con pinza fina al mismo tiempo o después del
kinesiólogo
10 cubos
DM Se para en un pie
P En posición bípeda
PK Enfrentando al niño(a) por delante
Kinesiólogo levanta un pie y da la orden verbal al niño(a) que realice la misma
E
acción
R Niño(a) despega el pie sin llevar la rodilla a la flexión de 90°
130
ANEXO 3
FICHA KIÉSICA DEL DESARROLLO MOTOR
Nombre: _______________________________________________________
Residencia (Jardín): ______________________________________________
F. de evaluación: __/__/____ F. de Nac.__/__/____
Edad Cronológica: ___M ___D Edad Motora: ____ Retraso Motor ____
EDAD
0-1
MES
2
MESES
3
MESES
4
MESES
5
MESES
6
MESES
7
MESES
°
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
ITEM
M
P
DM
PB
PS
M
P
DM
PB
PS
M
P
DM
14
PB
15
16
17
PS
P
DM
18
PB
19
20
PS
P
21
DM
22
23
24
PB
PS
P
25
DM
26
27
28
29
30
PB
PS
P
DM
PB
31
PS
ACTIVIDAD MOTORA
Mirada 45° - 90°
Mantiene puños cerrados constantemente
De pie extiende las piernas
En prono levanta levemente la cabeza
De supino a sedente cae la cabeza
Mirada 180°
Abre un poco las manos
De pie débil extensión de piernas
En prono levanta la cabeza
De supino a sedente intenta control de cabeza
Dirige la vista en toda las direcciones
Toma objetos que se le ponen en la mano
De pie dobla las piernas
En prono despega tronco con apoyo anterior de
brazos
De supino a sedente mantiene la cabeza erguida
Junta las manos o se lleva objetos a la boca
Intenta soportar peso en miembros inferiores
En prono eleva tren superior con apoyo en
brazos extendidos
Levanta cabeza al llevar a sedente
Toca un juguete
Se mantiene de pie unos instantes con apoyo
axilar
Gira de prono a supino
Se mantiene sentado con apoyo leve de caderas
Utiliza toda la mano para tomar objeto
Se mantiene de pie por periodos mas largos con
apoyo axilar
Gira de supino a prono
Se mantiene sentado solo momentáneamente
Toma objetos con ambas manos y los manipula
Se para con apoyo axilar de la posición cuclillas
Arrastre
Se mantiene solo y con mayor equilibrio por
mas tiempo
PTJE.
PODERACIO
6 C/U
6 C/U
6 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
131
8 MESES
9 MESES
10
MESES
11
MESES
12
MESES
13
MESES
15
MESES
18
MESES
24
MESES
32
33
34
35
36
P
DM
PB
PS
P
37
DM
38
39
40
41
42
43
44
45
46
47
48
49
50
51
52
PB
PS
P
DM
PB
PS
P
DM
PB
PS
P
DM
PB
PS
P
53
DM
55
56
57
58
PB
PS
P
DM
59
PB
60
61
PS
P
62
DM
63
64
65
66
PB
PS
P
DM
Pinza burda
Ayuda a ponerse de pie tomado de las manos
Intenta posición de 4 pies
Se sienta y se mantiene solo con ayuda de manos
Deja caer objetos voluntariamente
Se mantiene de pie tomado de las manos por mas
tiempo
Comienza gateo
Permanece sentado por mayor tiempo
Inicia pinza fina
Se toma de muebles para ponerse de pie
Gatea
Se sienta solo desde la posición prono
Ejercita la pinza fina
Comienza deambulación tomado de las manos
Gatea coordinadamente
Se sienta solo, estable y equilibrado
Deja caer objetos por pequeños orificios
Camina tomado de una mano brevemente
Sube escaleras gateando
Se completa la fase de sedestación
Pinza fina establecida
Camina solo con amplia base de sustentación por
poco tiempo
Se pone de pie solo
Paso de pie a sedente
Introduce pastillas en una botella con pinza fina
Camina solo hacia adelante
Movimientos complejos, se detiene y sigue
caminando
Se sienta en una silla baja con ayuda manual
Saca la pastilla de la botella
Camina en distintas direcciones, comienza el
desarrollo del paso, empieza a correr
Sube escaleras con ayuda
Se sienta en silla baja sin ayuda
Construye una torre con 3 cubos
Se para en un pie
7,5 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
7,5 C/U
15 C/U
22,5 C/U
90 C/U
132
ANEXO 4
FICHA DE EVALUACIÓN KINÉSICA DEL DESARROLLO MOTOR
NOMBRE: ______________________________________________________
RESIDENCIA (JARDÍN): ___________________________________________
FECHA DE NACIMIENTO: ___/___/____ FECHA EVALUACION: ___/___/___
EDAD CRONOLOGICA: ___________________________________________
RETRASO MOTOR: ________ PORCENTAJE RETRASO MOTOR _________
GRÁFICO DEL PERFIL DEL DESARROLLO MOTOR
EC
24
23
22
21
20
19
18
17
16
15
14
13
12
11
10
09
08
07
06
05
04
03
02
01
0
M
P
DM
PB
PS
CONDUCTAS MOTORAS
133
ANEXO 5
Consentimiento Informado
Estimados Padres y Apoderados:
Somos alumnos de 4° año de la carrera de kinesiolo gía pertenecientes a la Universidad de
Magallanes y nos encontramos realizando nuestra tesis para alcanzar el grado de Licenciado en
Kinesiología, para lo cual realizaremos una investigación sobre el desarrollo motor en lactantes de 0
a 24 meses, por lo que necesitaremos su consentimiento.
Durante esta actividad se realizará a su hijo/a una serie de pruebas simples, que consistirán
en lograr que el niño/a ejecute una serie de movimientos y actividades propias de su edad, las cuales
tendrán como fin establecer su nivel de desarrollo motor.
Esta actividad se realizará en las dependencias del propio jardín durante el horario normal
de asistencia del niño/a a la sala cuna y en presencia de las educadoras.
Cabe destacar que ninguna de estas pruebas representará un riesgo para su hijo/a, ya que
contamos con la experiencia necesaria, las medidas de seguridad y protección adecuadas.
La realización de este proyecto esta supervisado por nuestra profesora guía kinesióloga
Carolina Martínez Alarcón, del departamento de la Carrera de Kinesiología de nuestra universidad;
por la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) y por supuesto los respectivos directores(as) del
establecimiento al cual asiste su hijo(a).
La información entregada y recolectada será confidencial y sólo será conocida por el
equipo de investigación a cargo, quedando consignada en una ficha individual e independiente de
otros registros que Ud. podrá solicitar si así lo desea.
Es importante destacar que estas actividades no conllevan ningún costo para usted.
Consentimiento informado:
Yo……………………………………………………………………….. C.I. ……………………..
(Nombre y Apellido)
responsable legal del menor ……………………………………………………………………….
(Nombre y Apellido)
autorizo que participe del estudio solicitado.
Relación con el niño/a: Padre……….. Madre………. Otro (especificar)………..…………
Fecha:……………………………………….
…………………….........
Firma
Agradece y saluda atentamente a usted:
- Carolina Allendes Gondrè
- Miguel Díaz Mancilla
- Pamela Oyarzo Groff
134
ANEXO 6
Estimadas Madres y Apoderados:
Junto con el consentimiento informado, le hacemos entrega de una pequeña ficha que
completará los datos que requerimos para continuar con nuestro trabajo de investigación. Esta
deberá ser contestada y entregada junto al consentimiento informado, lo antes posible a las
parvularias de la Sala Cuna de su hijo/a. Agradeciendo su disposición, desde ya, muchas
gracias.
Datos personales
1. Nombre del niño: ____________________________________________________
2. Fecha de nacimiento del niño: __ día ____________ mes _____año
3. Edad de la madre al momento del parto: _____ años
4. Escolaridad de la madre: 8° Básico _____ 4° Medio _____ Superior______
5. Escolaridad del padre: 8° Básico _____ 4° Medio __ ___ Superior______
Antecedentes de salud
6. El embarazo duró _____ semanas.
7. El parto fue: Normal _____
Cesárea de urgencia _____
Cesárea programada _____
7.
Actualmente el niño presenta alguna enfermedad que afecte su vida normal:
Si _______ No _______
8.
Si contesto SI en la
______________________
pregunta
anterior;
¿Cuál
es
la
enfermedad?
_____________________________
Firma de la madre o apoderado
135
ANEXO 7
PUNTA ARENAS, agosto 17 de 2010
Sra.
Sterlina Fuentealba Illesca
Directora Regional
Junta Nacional de Jardines Infantiles
Punta Arenas, Chile
Presente
De mi consideración:
Junto con saludarle cordialmente solicito a usted, tenga a bien, autorizar
el ingreso a las dependencias de Salas Cuna de “Junta Nacional de Jardines
Infantiles” de la ciudad de Punta Arenas, durante el segundo semestre del
presente año, a estudiantes de cuarto año de la Carrera de Kinesiología de
Universidad de Magallanes, con motivo de realizar un test evaluativo del
desarrollo motor de los lactantes de dicho nivel, en el marco de un trabajo de
tesis para optar al grado de Licenciado en Kinesiología.
El tema a investigar es “Prevalencia del Retraso del Desarrollo
Psicomotor en niños menores de 2 años de edad pertenecientes a las Sala
Cuna de la “Junta Nacional de Jardines Infantiles” de la ciudad de Punta
Arenas, región de Magallanes y Antártica Chilena”
El propósito es determinar la cantidad de niños con algún tipo de retraso
motor, para así crear un registro detallado de dichas alteraciones a nivel de los
jardines que integran esta institución.
La investigación se justifica en la inexistencia de datos estadísticos
sobre la cantidad de párvulos con retraso del desarrollo psicomotor en este
grupo etario, ya que en la actualidad no se realiza una evaluación o seguimiento
a todos los niños ingresados a Salas Cuna; referido a lo anterior es importante
determinar el grupo que posee un déficit en su desarrollo, en pos de la
realización de un programa de estimulación temprana a futuro, a través de un
profesional adecuadamente capacitado para esto, buscando así la prevención
136
de patologías que tengan como base el deficiente desarrollo de lo anteriormente
nombrado.
Esta investigación será realizada a través del test “Evaluación Kinésica
del Desarrollo Motor (EKDM)”, creado por la Klga. Patricia Conejeros, docente
de la Universidad de la Frontera especializada en esta área. El test se realiza
de manera individual a cada párvulo y la duración varía de acuerdo a la edad
del evaluado, con un tiempo aproximado de 15 minutos.
En relación a la muestra a evaluar; está dependerá exclusivamente del
tamaño del universo (párvulos integrantes de todas las salas cunas
pertenecientes a la Junta Nacional de Jardines Infantiles de la comuna de Punta
arenas), determinada por un coeficiente de confianza del 95% y un margen de
error al 5%.
Es importante destacar que además del permiso formal solicitado a
través de esta petición, se tiene presente el consentimiento que deben aceptar
los padres y apoderados para llevar a cabo esta evaluación, en relación a esto
se adjunta a esta carta consentimiento informado que se entregará a cada
padre con el fin de regularizar los permisos en cada jardín.
Para finalizar, es importante para los alumnos tesistas determinar los
modos de contacto con cada uno de los establecimientos, con el objetivo de
hacer más expedita y ordenada esta intervención en la institución.
Los integrantes del grupo investigador son:
•
•
•
C.I. N° 17.237.481-6 Srta. Pamela Oyarzo Groff.
C.I. N° 17.237.828-5 Sr. Miguel Díaz Mancilla.
C.I. N° 16.812.697-2 Srta. Carolina Allendes Gondr è.
A cargo de la profesional Licenciada en Kinesiología:
• C.I. N° 13.816.349-0 Sra. Carolina Martínez Alarcó n.
Sin otro particular y esperando una pronta y gratificante respuesta
Se despide atentamente,
CARLOS CÁRCAMO ALVARADO
Jefe (S) Carrera de Kinesiología
137
ANEXO 8
138
ANEXO 9
Carta informativa
Estimadas Educadoras:
Somos alumnos de 4° año de la carrera de Kinesiolo gía pertenecientes a la Universidad de
Magallanes y nos encontramos realizando nuestra tesis para alcanzar el grado de Licenciado en
Kinesiología, para la que realizaremos una investigación en la cual buscamos determinar la
prevalencia del retraso en el desarrollo motor en lactantes de 0 a 24 meses, por lo que
necesitaremos su cooperación.
Para ello solicitamos a usted(es) el informar a los padres y apoderados acerca de esta
iniciativa, enfatizando en los beneficios que esto traerá a ellos y a los/las niños/as, para así obtener
su aprobación para la realización de este estudio.
Para lo cual a cada sala cuna se le entregará un stock de consentimientos informados que
esperamos puedan entregar a los padres. Luego de esto requerimos que el consentimiento
informado sea devuelto lo antes posible a usted(es), dentro de la misma semana en que se entregó,
para así comenzar rápidamente con el trabajo en la sala cuna.
La actividad consiste en una serie de pruebas simples realizadas a los lactantes, que
consistirán en lograr que el/la niño/a ejecute una serie de movimientos y actividades propias de su
edad, muy similar a la conocida Escala de Evaluación del Desarrollo Psicomotor (EEDP), cuyo fin
será pesquisar cualquier tipo de retraso o alteración en el desarrollo motor del niño/a. Cabe destacar
que ninguna de las pruebas representará un riesgo para el/la niño/a, ya que contamos con la
experiencia necesaria, las medidas de seguridad y protecciones adecuadas, por tanto esperamos
puedan enfatizar en esto cuando entreguen el consentimiento informado a los padres.
Esta investigación es sin fines de lucro, por lo que no tendrá costo para los padres ni para la
institución, al contrario, será ampliamente beneficioso, ya que cualquier tipo de alteración o retraso
en el desarrollo motor pesquisada será informada y se entregarán las sugerencias pertinentes para la
corrección de esta.
Las fechas estimativas de las evaluaciones en su jardín se adjuntan a esta carta.
Esperando su colaboración y agradeciendo de antemano su apoyo.
Saluda atte. a usted:
- Carolina Allendes Gondré
- Miguel Díaz Mancilla
- Pamela Oyarzo Groff
139
ANEXO 10
MUESTRA
EVALUADA
EDAD
CRONOLOGICA
MES
BASE
EDAD
MOTORA
PUNTAJE
BRUTO
RETRASO
MOTOR
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
42
43
44
45
16
18
17
23
24
23
23
22
13
10
6
23
12
24
14
13
6
20
22
18
12
6
11
14
22
22
23
18
19
18
23
16
17
21
13
20
9
16
22
23
17
9
16
17
24
13
18
15
18
18
18
18
18
12
8
13
13
13
13
13
13
13
13
13
13
9
4
7
9
18
12
15
15
13
13
18
15
15
18
9
18
5
16
18
18
12
8
11
13
18
420
540
465
540
540
630
540
540
382.5
300
157.5
585
345
630
397.5
382.5
135
517.5
495
540
322.5
180
315
330
540
472.5
517.5
495
480
480
630
450
495
540
322.5
540
232.5
472.5
540
630
472.5
262.5
390
457.5
630
0,84
0,97
0,90
0,77
0,76
0,90
0,77
0,81
0,98
0,98
0,89
0,85
0,93
0,88
0,92
0,97
0,81
0,86
0,75
0,99
0,87
0,93
0,93
0,80
0,81
0,73
0,75
0,93
0,85
0,90
0,93
0,95
0,96
0,88
0,85
0,88
0,88
1,00
0,83
0,91
0,94
0,99
0,83
0,91
0,88
81
17
52
162
175
71
165
125
6.5
6
18.5
102
27
90
32.5
12.5
31
84.5
166
8
48.5
14
25
80
128
178.5
175.5
36
85
54
51
26
21
76
57.5
75
30.5
0.5
110
62
28.5
2.5
82
47.5
90
PORCENTAJE
RETRASO
MOTOR
16,2
3,1
10,1
23,1
24,5
10,1
23,4
18,8
1,7
2,0
10,5
14,8
7,3
12,5
7,6
3,2
18,7
14,0
25,1
1,5
13,1
7,2
7,4
19,5
19,2
27,4
25,3
6,8
15,0
10,1
7,5
5,5
4,1
12,3
15,1
12,2
11,6
0,1
16,9
9,0
5,7
0,9
17,4
9,4
12,5
DESARROLLO
MOTOR
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
RM LEVE
140
46
47
48
49
50
51
52
53
54
55
56
57
58
59
60
61
62
63
64
65
66
67
68
69
70
24
6
20
22
19
20
22
23
24
23
23
23
24
14
17
18
14
14
22
9
13
14
15
21
23
15
1
18
18
18
18
18
18
18
24
18
18
18
11
18
12
8
11
15
8
11
12
11
18
18
607.5
109.5
540
630
540
540
630
630
630
630
630
630
630
337.5
517.5
487.5
307.5
412.5
585
2625
352.5
420
435
630
630
0,88
0,64
0,92
0,95
0,96
0,92
0,95
0,89
0,88
0,90
0,93
0,91
0,88
0,79
1,00
0,92
0,73
0,99
0,90
0,98
0,87
0,97
0,95
0,99
0,93
86.5
61.5
48
31
25
49
33
75
90
68
47
65
90
89.5
0.5
41.5
111.5
3.5
63
6.5
50.5
12
22
7
48
12,5
36,0
8,2
4,7
4,4
8,3
5,0
10,6
12,5
9,7
6,9
9,4
12,5
21,0
0,1
7,8
26,6
0,8
9,7
2,4
12,5
2,8
4,8
1,1
7,1
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
NORMAL
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
NORMAL
RM LEVE
NORMAL
NORMAL
NORMAL
NORMAL
141
ANEXO 11
Gráfico perfil de desarrollo motor por edad
A continuación se presenta el gráfico del perfil del desarrollo motor, los
cuales se obtuvieron agrupando a todos los individuos de igual edad por gráfico,
determinando así una curva de desarrollo motor promedio para ese mes en
particular, basado en la muestra del estudio.
Por otra parte cada uno de ellos entrega una línea horizontal, la cual
indica el desarrollo motor ideal y homogéneo que cada individuo debería poseer
acorde a su edad.
Es importante recordar, que el desarrollo máximo de la mirada ocurre a
los 3 meses, por lo cual, que esta conducta se encuentre bajo el nivel de
desarrollo motor ideal no indica retraso en esta área, a menos que esta
conducta puntúe una edad cronológica menor a 3 meses.
A su vez el desarrollo máximo de la sedestación y bipedestación ocurre a
los 18 meses, por ende, que estas áreas se encuentren bajo la línea horizontal
de desarrollo motor ideal desde el perfil de desarrollo motor de los 19 meses en
adelante, no indica retraso, a menos que una de las conductas puntúe una edad
cronológica menor a 18 meses.
142
Edad cronológica
Gráfico A: Perfil promedio desarrollo motor – 6 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A los 6 meses, se encontraron afectadas las áreas de prensión, sedente,
bipedestación y marcha, siendo el desarrollo del bípedo el área que presentó
mayor retraso, con un promedio de 3,8 meses.
Edad cronológica
Gráfico B: Perfil promedio desarrollo motor – 9 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
De acuerdo al gráfico, a los 9 meses de edad la única área afectada fue
el desarrollo de la bipedestación, con un promedio de 7 meses.
143
Edad cronológica
Gráfico C: Perfil promedio desarrollo motor – 10 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
Con respecto al gráfico, a los 10 meses de edad se encontró retrasada el
área de desarrollo de la bipedestación, con un promedio de 8 meses.
Edad cronológica
Gráfico D: Perfil promedio desarrollo motor – 11 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A la edad de 11 meses, el área en la que se manifestó retraso fue el
desarrollo de la bipedestación, con un promedio de 10 meses.
144
Edad cronológica
Gráfico E: Perfil promedio desarrollo motor – 12 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
Según el gráfico, a los 12 meses de edad, las áreas que presentaron
retraso fueron prensión, bipedestación y marcha, siendo el área más retrasada
el desarrollo de la prensión, con un promedio de 10 meses de edad.
Edad cronológica
Gráfico F: Perfil promedio desarrollo motor – 13 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
De acuerdo a lo anterior, a la edad de 13 meses se mostraron retrasadas
las áreas de sedente y marcha, ambas con un promedio de 12,8 meses.
145
Edad cronológica
Gráfico G: Perfil promedio desarrollo motor – 14 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A los 14 meses se hallaron afectadas las áreas de desarrollo del
sedente, bipedestación y marcha, siendo el desarrollo del bípedo el área con
mayor retraso, con un promedio de 11,5 meses.
Edad cronológica
Gráfico H: Perfil promedio desarrollo motor – 15 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
De acuerdo al gráfico, a los 15 meses de edad la única área afectada
fue el desarrollo del bípedo, con un promedio de 11 meses.
146
Edad cronológica
Gráfico I: Perfil promedio desarrollo motor – 16 meses
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A los 16 meses de edad se hallaron retrasadas las áreas de prensión y
sedente, siendo esta última la que tuvo mayor retraso, con 14,5 meses de
promedio.
Edad cronológica
Gráfico J: Perfil promedio desarrollo motor – 17 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A los 17 meses de edad se halló retraso en todas las áreas de desarrollo motor,
exceptuando el desarrollo de la mirada, encontrándose más afectada el área de
desarrollo de bipedestación con 16,4 meses.
147
Edad cronológica
Gráfico K: Perfil promedio desarrollo motor – 18 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
Según el gráfico, a los 18 meses de edad las áreas que mostraron
retraso fueron sedente, bipedestación y marcha, siendo esta última el área más
retrasada, con un promedio de 16,2 meses de edad.
Edad cronológica
Gráfico L: Perfil promedio desarrollo motor – 19 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A la edad de 19 meses, las áreas retrasadas fueron el desarrollo del
sedente, de la bipedestación y marcha, hallándose con mayor afectación el
desarrollo del sedente, promediando 15,5 meses.
148
Edad cronológica
Gráfico M: Perfil promedio desarrollo motor – 20 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
Según el gráfico, a los 20 meses de edad, las áreas que presentaron
retraso fueron desarrollo del sedente, bipedestación y marcha, mostrándose
más retrasada el área de desarrollo de la sedestación, con un promedio de
17,25 meses de edad.
Edad cronológica
Gráfico N: Perfil promedio desarrollo motor – 21 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
A los 21 meses, se encontraron afectadas las áreas de desarrollo de
sedestación, bipedestación y marcha, todas con un promedio de 18 meses.
149
Edad cronológica
Gráfico Ñ: Perfil promedio desarrollo motor – 22 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
En el desarrollo motor de los 22 meses de edad, se encontraron
retrasadas las áreas de sedente, bipedestación y marcha, estando levemente
más afectado el desarrollo de la bipedestación, con 17,25 meses de promedio.
Edad cronológica
Gráfico O: Perfil promedio desarrollo motor – 23 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
En el desarrollo de los 23 meses de edad, se detectó retraso en el
desarrollo del sedente, bipedestación y marcha, con mayor afectación en
desarrollo de la bipedestación, promediando 17,5 meses.
150
Edad cronológica
Gráfico P: Perfil promedio desarrollo motor – 24 meses
24
22
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Curva de
desarrollo
Desarrollo
motor ideal
M
DP
DS
DB
DM
Áreas del desarrollo motor
En el desarrollo de los 24 meses de edad, se manifestó retraso en el
desarrollo del sedente, bipedestación y marcha, con mayor afectación en
desarrollo de la bipedestación, promediando 17,5 meses.
151
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