LKY HIPOTECAR 1Á KL IIXMO. GOBtéRÉ PRtMMRiÜ

LKY HIPOTECAR1Á
1>£ LA
PROMULGADA POH
KL IIXMO. GOBtéRÉ PRtMMRiÜ
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I8tí5,
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MOTIVOS
«»+!
•1.
PCUt/.O,
..Al.i.l
/wv,.,
LEY HIPOTECARIA
DE LA
REPÚBLICA ORIENTAL DELlíRUGUAF '
PROMULGADA
POR
EL EXUO. GOBIERNO PROVISORIO
EN 27 DE MAYO DE 1865,
COJ
UNA
BREVE
EX POSICION
DE
LOS
MOTIVOS
ESCRITA POR
151 iBv. D. 8rf*t*ts Karfcaja.
IMPRENTA DE
EL PUEBLO,
1 8
CALLE
6 7
ZAVALA
N.° 156.
ministerio
UK
Gobierno.
DECRETO.
Montevideo,
El
Gobierno
Mayo 2 6 de 1 8 6 5 .
Provisorio, en Consejo
de
M i n i st r o s ,
e n u s o d e s u s f a c u l t a d e s o r d i n a r i a s y e xt r a o r d i n a r i a s ,
ha a c o r d a d o y d e c r e t a con f u e r z a d e
S E C C I O N
Ley:
P R I M E R A .
De la Hipoteca.
A rt . 1 ?
L a h i p o t e c a es u n d e r e c h o d e p r e n d a c o n s ­
tituido por
convención y con
las f o r m a l i d a d e s d e
ley, sobre determinados bienes raices qué no por
la
eso
d ej a n d e p e r m a n e c e r e n p o d e r d e l d e u d o r .
2 ?
La hipoteca deben* otorgarse por escritura
blica, é inscribirse además, en el registro
c a s ; sin c u y o s requisitos,
pú­
de hipote­
no t e n d r á valor alguno,
ni
se contara s u fecha sino d e s d e la inscripción.
3 ? Los
contratos hipotecarios
estrangero, producirán hipoteca
celebrados en
sobre
pais
bienes situa­
d o s e n la R e p ú b l i c a , c o n tal q u e s e i n s c r i b a n e n e l c o m ­
petente registro.
4 ?
La
hipoteca podrá otorgarse baj o condición y
d e s d e ó hasta c i e r t o dia.
Otorgada
b aj o
condición
cierto, no v a l d r á sino d e s d e
suspensiva
6 desde
que se cumpla la
dia
condi­
c i ó n , ó d e s d e q u e l l e g u e el d i a ; p e r o c u m p l i d a l a c o n -
— 4 —
dicion, ó llegado el día, será la fecha ¡la misma de la
inscripción.
Podra asi mismo otorgarse en cualquier .tiempo
antes 6 después de los contratos a qué acceda y correrá
desde que se inscriba.
,
5 ? No podrá constituirse hipoteca si no por la per­
sona que sea capaz de enajenar ; ó eii caso de incapa­
cidad, con los requisitos necesarios para lá; enajena-,
cion. .
Pueden Obligarse hipotecariamente los bienes pro­
pios para la seguridad de una obligación agena ; pero
no habrá acción .personal contra el dueüo, si este no
sé ha sometido ¿sprésáménte á ella.;
G ? El dueño de los bienes hipotecados, podrá Siempreenajenarlos.haya; ó'^H)Í''p;ictb*étt'/cp'n"tEa'rio»'
7 ° Los (iue no tienen oír la cosa sino un derecho
eventual limitado ó rcscindíldéi soló* pueden consti­
tuir hipoteca sujeta a las mismas condiciones ó limi­
taciones á que lo estaba el derecho del constituyente.
8 ? La hipoteca no podrá tener lugar sino sobre
bienes raices, ó usufructo, ó sobre naves.
Las reglas particulares á las hipotecas de las naves,
pertenecen al derecho comercial.
9 ? Los bienes futuros no puede hipotecarse.
10. No pueden hipotecarse para segur idad de una
deuda, bienes, por mas valor que el del duplo del i m ­
porte conocido ó estimativo de la obligación, cuyo im­
porte se determinará en la escritura inequívocamente.
11. La inscripción de la hipoteca deberá contener :
1 ? El nombre, apellido y domicilio del acree­
dor, y las mismasdftsjgnaciones relativamente al
-
deudor y á los que en representación, del uno ó del
otro, requieran la inscripción.
,
2 ? La fecha y la naturaleza del contrato á que
acceda la hipoteca, y el archivo con que se en­
cuentre.
3 .° La situación de la fiiícá hipotecadas- sus lin­
deros (ó si es nave, las designaciones especificas de
ella).
4,° La suma determinada á quc?se estiende la
^hipoteca.:
M:¿siP'?&j&Z'J¿.
5 P La fecha de la inscripción y la firma del Es­
cribano encargado del rejistrp.de hipotecas.
Art. 12. La hipoteca de una cosa, se éstiende á to­
das las accesiones y mejoras que le sobrevengan ; tam­
bién sé éstiende á Ia: indemnización debida por Ips
aseguradores dé la cosa hipotecada.
Afecta asi mismo ios frutos>(lc cualquier espécié,
pendientes al tiempo de ejercer el acreedor sus de­
rechos hipotecarios.
13. La hipoteca es indivisible.
En consecuencia, cada una de las cosas hipoteca­
das á una deuda, y cada parte de ellas son obligadas
al pago de toda la deuda y de cada parte de ella.
11. El acreedor hipotecario, cuando haya llegado
el tiempo del pago, tiene derecho á hacer vender ju­
dicialmente la cosa hipotecada en subasta pública, ó á
que se le adjudique, á falta de postura legalmente ad­
misible, por el precio mismo en que un tercero habría
podido rematarla con arreglo á la ley.
15. S i la finca se perdiese ó se deteriorase en térmi­
nos de no ser suficiente para la seguridad de la deuda,
—
6
—
tendrá derecho el a creedor a que se mejore la hi­
poteca ; a no ser que consienta que se le dé otra se­
gurida d equiva lente; y en defecto de a mba s cosa s,
podra dema nda r el pa go inmedia to de la deuda , a un­
que no esté cumplido el pla zo.
1G. La hipoteca da el derecho a l acreedor dé per­
seguir la finca hipoteca da , sea quien fuese el que la
posee, y á cualquier titulo que la ha ya adquirido.
.
Sin embargo, esta disposición no tendrá lugar con­
tra el tercero que ha ya a dquirido los bienes hipote­
ca dos en subasta judicia l, practicada con citación personal de los a creedores qué tengan constituida s 1 íí—
potecas sobré la misma
finc
a .
- ,
•
17. El tercer poseedor, reconvenido pa ra el pa go
de la hipoteca constituida sobre la finca que después
pa só a sus ma nos con este, gra va men, no tendrá en
ningún ca so; él beneficio dé Cscusion.
- :••...,.<
Ha ciendo el pago el tercer poseedor, se subroga
plena mente en los derechos del a creedor.
Si fuese desposeído de la finca , sera plena mente
indemniza do por el deudor con inclusión de la s me­
jora s que haya hecho cu ella .
18. La hipoteca se estinguc con la obligación prin­
cipa l y por todos los otros medios con que se extin­
guen la s demás obliga ciones.
Se estingue a si mismo por la resolución del dere­
cho del constituyente; por la llegada del dia ha sta el
cual fué constituida ; y en el ca so escepciona l del a r­
ticulo 1G, inciso único.
Se estingue a dema s por la cha ncela ción que el
a creedor otorga se por escritura pública ; de que se
toma rá ra zón a l márgen de la inscripción hipoteca ria .
19. La prescripción pa ra que estinga la hipoteca ,
ha de ser de treinta a ños, en cualquier ma no que es­
tén los bienes hipoteca dos.
20. Ha brá dos oficina s para el registro de la s hipo­
teca s, una de la primera y otra de ta segunda sec­
ción, según la misma división territoria l de la 'juris­
dicción de los Tribunales.
La oficina de hipoteca s de la segunda sección re­
empla za rá á la que a ctua lmente sé denomina dé hipo­
tecas y privilegios lega les. .
%
SE C C I ON S E GU N D A .
•
D e los privilejíos.
21. Privilejio es un fa vor especia l con que la ley
mira ciertos créditos persona les en concursó de
a creedores, sin que por eso pa sen, en ca so a lguno,
contra terceros poseedores.
22. La primera cla se de créditos persona les privi­
legia dos, comprende los que nacen de la s ca usa s que
aquí se enumera n:
1 f8 La s costa s y costos judiciales en el interés
común de los acreedores, y los ga stos de a dminis­
tra ción dura nte el concurso.
2 f La s espensa s funera les necesa ria s del deu­
dor difunto.
3 f Los ga stos de la enfermeda d de que ha ya
fa llecido el deudor.
4 f Los sa la rios de los dependientes y cria dos,
por lo que se les a deuda del a ño corriente.
;
— 8 —
5 * Los artículos necesarios de sub sistencia, su­
ministrados al deudor y su famiiia, durante el últi­
3 ? Los gastos de salvamento en la cosa salvada,
ó su producto.
mo año.
El juez á petición de los acreedores tendrá la fa­
cultad de tasar este cargo, si le pareciese cxajérado.
' * , ' • > •
'
»f<>
4 ? El capitán y demás individuos de la tripula­
ción, por sus sueldos en el b uque y los fletes del
último viaje.
•
5 P Los que hayan contrib uido & Iá compra, re­
paración ó aprovisionamiento del b uque, en este, ó
su precio.
•• ••
•••
6 ? Los gastos de averia gruesa en los efectos
cargados. •
•
<
6 ? Los atrasos de impuestos púb licos ó muni­
cipales. y \ ;
.-i---:?. -Z^,..^:'..
,' , •
Art. 23. A la segunda clase de créditos personales
privilegiados, correspondeni
1 ? El precio del trasporte sob re los efectos
trasportados.
^ ^ ^ | V j ^ Í ^ ) l j ^ ^ ^ | | | ^ ^ o $ por razón de hos­
pedaje sob re los efectos existentes rn la posada.
3?• Las semillas y gastos de cultivo y recoleceion, anticipados al deudor sob re los frutos, de la
cosecha del último ano.
'í
4 ? Los alquileres y rentas de b ienes raices so­
b re los b ienes mueb les propios del arrendatario, y
que este tiene dentro de la finca arrendada; y tam­
b ién sob re la cosecha del año, tratándose de here­
dades.
Art. 24. A la misma clase pertenecen los privilejios especiales resultantes de los actos de comercio :
á sab er :
1 ? El precio de la venta, mientras la cosa ven­
dida está en poder del vendedor.
2 ? Los gastos hechos para la construcción, me­
jora ó conservación de una cosa, mientras exista to­
davía en poder de la persona por cuya cuenta se
hicieron los gastos.
7 ? El cargador por los efectos cargados, en los
animales, carruajes, barcas, aparejos y demás instru­
mentos principales y accesorios; del trasporté.
8 ? Los que han dado dinero á la gruesa, en la
cosa sob re que recayó el préstamo marítimo.
9 ? En todos los demás casos espresamente es­
tab lecidos por el Código de Comercio;
Art. 25. La tercera clase de créditos personales
privilejiados comprende :
1 ? Los del íisco contra los recaudadores y ad­
ministradores de b ienes fiscales.
2 ? Los de los estab lecimientos nacionales de ca­
ridad ó de educación y los de las municipalidades,
iglesias y comunidades religiosas, contra los re­
caudadores ó administradores de sus fondos.
3 ? Los de las mujeres casadas por los b ienes de
su propiedad, no existententcs eu especie, que ad­
ministró el marido, sob re los b ienes de este.
4 ? Los de los hijos de familia por los b ienes de
su propiedad, no existentes eu especie, que fueron
administrados por el padre, sobre los bienes de este.
—
5 ? Los de las personas que están bajo la tutela
2«. El s e g u n d o g r a d o c o m p r e n d e los créditos enu­
m e r a d o s e n el a r t i c u l o 23 d e
ó curaduría, contra los r e s p e c t i v o s tutores ó cura­
dores y fiadores de estos.
11 —
la m i s m a Sección 2 •
E s t o s c r é d i t o s son p a g a d o s c o n e l p r o d u c t o d e los
,..
L o s de todo p u p i l o contra el q u e se casa con
b i e n e s , en q u e t i e n e n su r e s p e c t i v o p r i v i l e g i o ; y e n
la madre ó abuela, tutora ó curadora, en caso de no
e l caso d e c o n c u r r i r a l g u n o s c o n t r a la misma especie,
haber esta d e n u n c i a d o p r é v i a m e n t e al
se pagarán á prorrata.
0 ?
majistrado,
;
guirán
las reglas prescritas p o r e l
mercio.- '
SECCION T ERCERA.
r
;'¿
^
v
:.
Código de
.
t%\
g r a d o y d e l s e g u n d o , esc luirán estos á aquellos ; p e r o
acreedora.
26. L o s b i e n e s t o d o s del
d e u d o r , son la
si f u e s e n insuficientes los d e m á s b i e n e s para c u b r i r l o s
c r é d i t o s d e l p r i m e r g r a d o , t e n d r á n estos la p r e f e r e n ­
garantía
cia e n c u a n t o al déficit; y c o n c u r r i r á n en dicha
c o m ú n d e sus a c r e e d o r e s , y el precio de ellos se d i s ­
c i e e n él o r d e n y f o r m a q u é se espresa ch
t r i b u y e e n t r e estos ;i prorata ; á lio ser qüe baya c a u ­
único d e l a r t i c u l o anterior (28).
. •-. /.».•••....•::•>. >••'.-. 5
;
L a l e y no r e c o n o c e otras causas d e p r e f e r e n c i a q u e
la p r e n d a , la b i p o t e c a y los p r i v i l e g i o s
Co­
A f e c t a n d o á una misma e s p e c i e créditos d e l p r i m e r
¿
( raduacioii de
sas l e g i t i m a s d e p r e f e r e n c i a .
-<
P a r a el p a g o d é los créditos contra la nave, se s e -
el m a t r i m o n i o q u e ib:i a contraer, para q u e se nom­
b r a s e la persona q u é l a debía suceder en el cargo.
•
espe­
el inciso
30. Están en t e r c e r g r a d o los a c r e e d o r e s h i p o t e c a ­
rios.
enumerados
Asi m i s m o l o está el a c r e e d o r p r e n d a r i o respecto
d e la p r e n d a d e q u e se e n c u e n t r a e n posesión y con
27. L o s d i v e r s o s créditos contra un m i s m o d e u d o r
tal q u e conste d e l contrato p o r escritura pública ó p o r
se p a g a r á u s e g ú n el ó r d e u de p r e c e d e n c i a j s o b r e l o s
d o c u m e n t o p r i v a d o , c u j a f e c h a r e s u l t e comprobada.
e n la s e c c i ó n p r e c e d e n t e .
b i e n e s q u e se l e s asiguau en los grados siguientes.
28.
El p r i m e r grado
A cada finca g r a v a d a con hipoteca, p o d r á abrirse, á
c o m p r e n d e los créditos e n u ­
m e r a d o s en el articulo v e i n t e y dos d e la Sección 2 ?
E s t o s c r é d i t o s a f e c t a n todos los bienes d e l d e u d o r ;
y no h a b i e n d o l o necesario
para c u b r i r l o s
íntegra­
p e t i c i ó n d e los r e s p e c t i v o s a c r e e d o r e s ó d e c u a l q u i e ­
ra de ellos, u n concurso particular, para q u e se les pa­
g u e i n m e d i a t a m e n t e con ella , s e g ú n el o r d e n d e las
r e s p e c t i v a s inscripciones. E n este c o n c u r s o , se paga­
n u m e r a c i ó n en el citado artículo 2 2 , cualquiera q u e
rán p r i m e r a m e n t e las costas y costos judiciales cau­
sados e n él.
sea su fecba, y los c o m p r e n d i d o s en cada n ú m e r o , c o n ­
31. L o s c r é d i t o s del p r i m e r grado, según los artí­
m e n t e , p r e f e r i r á n unos á otros en el o r d e n de
c u r r i r á n á prorata.
su
culos 22 y 28, no se e s t e n d e r ú u á Jas fincas hipotecat
— 12 —
das ó cosas dadas en prenda sino en caso de no po­
der cubrirse en su totalidad con los otros bienes del
deudor.
El déficit se dividirá, entonces entre las fincas hi­
potecadas y cosas empeñadas á proporción de los va­
lores de estas, y lo que a cada una quepa, se cubrirá
con ella en el orden y forma que se espresa en el in­
ciso único del articulo 28.
32. Los acreedores hipotecarios no estarán oblig a­
dos áag uardar las resultas del concurso g eneral para
proceder A ejercer sus acciones contra las respectivas
fincas, bastará que consig nan Ó afianzen una cantidad
prudencial para el pag o, de J o s créditos del primer
g rado, en la parte que sobre ellas recaig an, y que res­
tituyan á la masa lo qué sobrare después de cubiertas
sus acciones,
.' '
33. Para los efectos de la.prelacion, los censos de­
bidamente inscriptos, serán considerados como hipote­
cas.
Concurrirán indistintamente entre si y con las hipo­
tecas, seg ún las fechas de las respectivas inscripcio­
nes.
34. El cuarto g rado comprende los privileg ios enu­
merados en el articulo veiute y cinco de la 2 f sec­
ción.
Estos créditos prefieren indistintamente unos á
otros, seg ún las fechas de sus causas, es á saber:
La fecha del nombramiento de administradores, y
y recaudadores, respecto de los créditos de los núme­
ros primero y seg undo del citado artículo veinte y
cinco, sección seg unda.
— 13 —
La del respectivo matrimonio, en los créditos de los
números 3.° y 6 ,° del mismo articulo.
• X a del nacimiento del hijo, en los del númoro 4 ?
del referido articulo:
La del discernimiento de la tutela ó cúratela en los
del número 50 del mismo articulo.
35. Las preferencias dé los créditos del cuarto g ra­
do, afectan todos los bienes del deudor, aunque no
dan derecho contra terceros poseedores ; y solo tie­
nen lug ar después de cubiertos los créditos de los
tres primeros g rados, de cualquier fecha que estos
sean.
., .'"'r- '"¡•'•¿•.¿•í36. Las preferencias del primer g rado á qué esta­
ban afectos los bienés del deudor difunto; afectarán
de la misma manera los bienes del heredero, salvo que
éste haya aceptado la herencia con beneficio de i n ­
ventario.
La misma reg la se aplicará á los créditos de cuarto
g rado ; los cuales conservarán su fecha sobre todos
los bienes del heredero, cuando no teng a lug ar el
beneficio del inventario.
37. El quinto y último g rado comprende los c r é ­
ditos que no g ozan de preferencia. Estos créditos s e
pag arán a prorala sobre el sobrante de la ntasa con­
cursada, sin consideración á su fecha.
38. Los créditos preferentes que no puedan cubrirse
en su totalidad por los medios indicados en los artícu­
los anteriores, pasarán por el déficit á la lista de los
créditos del quinto g rado con los cuales concurrirán
á prorata.
— 15 —
39. Los intereses correrán hasta la cstincion de la
deuda y se cubrirán con la preferencia que corres­
ponda i sus respectivos capitales.
40. Quedan derogadas, en lo que fueren contra­
rias á esta, las leyes prexistentes sobre la materia.
ADICIONALES.
ejecución; pero sin que por eso deje de quedar firme
y subsistente la venta del inmueble, hecha en almo­
neda a favor de un tercero.
4 í. Comuniqúese, pubjíquese y desc aí rejistro com­
petente.
FLORES.
FRANCISCO A .
41. ' Es facultativo de las partes contratantes estable­
cer en la escritura de hipoteca, el precio del inmue­
ble hipotecado, para el caso de la ejecución, y la re­
nuncia de los trámites del juicio ejecuti vo. En tal
caso, el juez á quien la escritura hipotecaria se pre­
sente, decretará inmediatamente la almoneda en la
forma de estilo. La almoneda podrá verificarse por
las dos terceras partes del precio fijado en la escri­
tura , aun cuándo el inmueble hipotecado haya adqui­
rido mayor valor con el tiempo.
42. Si el mayor valor proviene de mejoras hechas
por el deudor ó su causa habiente, con anuencia del
acreedor, el importe de las mejoras se unirá al precio
fijado en la escritura, al celebrarse la almoneda. Si
las mejoras se han hecho sin anuencia del acreedor,
no tendrá derecho el deudor ó su causa habiente áque
el importe de las mejoras se tome en cuenta para la
almoneda.
43. Realizada la almoneda , en el caso de renuncia
de los trámites del juicio ejecutivo, según los artícu­
los anteriores, el deudor podrá hacer valer en juicio
ordinario los derechos que le asistan á causa de la
V IDAL
CARLOS: j ) E CASTRÓ;.
LORENZO
BÁTLLE.
Jí-'AN R . G O M E Z .
— 17 —
comple me nto de
LEY
la especialidad
HIPOTECARIA
ó
romano y,de
n o daba e l carácte r
GRADUACION D E ACREEDORES.
acción
re a l
que
otras
;r ; ; ; - • y ,
La
185G q u e
d é la c x - m e t r ó p o l i e se
que jarnos ? Cre e mos
de
nos rijé ?
q ue
con
E n justicia ¿ podíamos
no. P o s e e d o r e s á lo m e n o s
las base s para la m e j o r le jislacion e n
n o nos que daba sino
He re n c i a
s i s te m a , l e r e c i b i é r a m o s
sus ve ntajas 6 inconve nie nte s.
la fácil
t a re a
de
de
la
m a te r i a ,
c o m p le t a r
re a le s c é d u l a s q u e c r e a r o n y s i s t e m a r o n e l
la
Re g i s t r o
Hipote cas. H a s t a ahora n o se ha d i s p u t a d o á E s p a ñ a
e n t a b l a r se
h i p o te c a e r a s i e m p r e
c a s ycnrrtitrs,
concurso de
fué nue stra m e t r ó p o l i , la csce le ncia d e sus l e y e s
las d e los d e m á s paise s e n e ste r a m o d e
admi­
nistración pública.
q ue
h i c ie r o n
las l e y e s 3,
t i t . 15, l i b . 5, a u t o 2 1 , t i t . 9 , l i b . 3 , R . C , R e a l
para Indias
de
25 de
Se t ie m b re
de
Cédula
1802 y sus c o n ­
que
circunstancia abria un
v a l o r , se
no
de
h i p o te ­
significaban
las
.conve nie n­
e s c a n d a l o s a , sin
q ue
e n
y e sta
a n c h o camino a la mala fé
como
b ie ne s
de ante mano habian gravado por
q ue
pre staban sobre
los t e r c e r o s
e sas
fincas
de
nin­
l i b re s ,
masde su
p o se e d o re s ó
su
tan
m o n a r c a s e s p a ñ o le s , d e s d e
Cárlos T
e s f ue r z o s a d e s t e r r a r e l se cre to d e
los
dine ro, pudie se n
c u l p a b le s
de s . H i z o s e p u e s , n e c e s a r i o o t r o o r d e n d e
pe nsión á trasformarse de
frau­
cosas ; y los
c o n t r a je r o n s u s
la h i p o t e c a , c o m o
con e l carácte r d e trasmisibilidad y pro­
la p r o p i e d a d m o d e r n a .
3
•
cré­
.créditos d ios que
m u l t i p l i c a r o n las e ste lionatos d e una m a n e r a
e n la adopción
como
ctc.v
h a b l a m o s e r a oculta,
ve n de r ó hipote car,
inconciliable
p r i n c i p i o d e l a publicidad,
y. s i e m p r e
a c re e d o re s .
cordante s re lativas al He jistro de Hipote cas, consistió
de l
de
e vitar los e fe ctos de sastrosos de
E n e fe cto, la i n n o v a c i ó n
i n m ue b le
los propie tarios : no e ncontrando e stos obstáculo
q ue
c i e r t o s e s c r i t o re s ,
convencional,
judiciales
Pe r o l a h i p o t e c a d e
fincas
sobre
bie n
le ye s , p o r c o n s i d e r a c i o n e s p a r t i c u l a r e s d e
que , contra la d o c t r i n a e n v o g a de
que
contra un te rce r
un
cia y d é j u s t i c i a , c o n c e d e n una pre lae ion re lativa
para
a me r i c a n o s , v i n d i q u e m o s p a r a l a
Jcrjafei,
ditos; p/;¡v¡lrr/ia</<¡*; e s t o e s ,
guno
como
de
e n E s p a ñ a y s u s I n d i a s , sitio o t r o s t a n t o s casos d e
l a g l o r i a d e e sta i n v e n c i ó n ; p e r o acaso p a r e z c a e s t r a ñ o
asi e spañole s
de l
h i p o t e c a , e l jus piynoris, e s a
p ue de
e s p e c i a l : y las rutinarias d e n o m i n a c i o n e s
sabia r e f o r m a i n t r o d u c i d a p o r las l e v e s r e c o p i l a d a s y
de
p o r las
de te r m i n a d o p o r c o n v e n i o e s p r e s o d e s u d u e ñ o , .
sistema hip otecario antes d é la
18 d e J u n i o d e
convencionali-
l e g i s l a c i o n e s e u r o pe a s ,
p o s e e d o r , s i n o a la a f e c t a c i ó n
Le y de
la
S a b i d o e s, q u e e l d e r e c h o e s p a ñ o l , s e p a r á n d o s e
común
¿ Cual era nuestro
y de
dad, c u a l i d a de s e s e n c i a l e s d e l v e r d a d e r o peño
antiguas le ye s.
Hé
—
18
—
—
• qui e l e s p í r i t u d e las L e y e s y R e a l e s C é d u l a s c i t a d a s
19
H a c í a n mas p e l i g r o s a
—
esta c o m p e t e n c i a la falta d e
r e g l a s p r e c i s a s y c l a r a s s o b r e la g r a d u a c i ó n d e a c r e e ­
. o b r e el oficio d e h i p o t e c a s .
Y q u e p o r esta f e l i z i n n o v a c i ó n , no q u i z o
el
legis­
d o r e s y la p r o d i g a l i d a d , p o r
decir
a s i , con
que
las
l a d o r a b a n d o n a r el a n t i g u o p r i n c i p i o d e la ú n i c a h i p o ­
l e y e s de Partida
teca,
j i o s , e s t e n d i e n d o e s t o s á los i n t e r e s e s m a s c o m u n e s y
la c o n v e n c i o n a l
especial — pruébase
y e n t c m e n t e por el h ech o de
aquellas
en
señalada d e
menciona­
p r i v a d o s ; sin q u e n e c e s i t e m o s
traer a consideración
escrituras» sino
l a uíala f é d e los d e u d o r e s q u e
figuraban
proh ibir
das l e y e s q u e s e « r c j i s t r a s e n otras
que « haya h ipoteca
conclu­
las
espresa, especial y
bienes raices ó tenidos
por
tales; »
al
m i s m o t i e m p o q u e se d e c l a r a b a e s e n c i a l ó i n d i s p e n ­
s a b l e la c i r c u n s t a n c i a d e l r e j i s t r o , al e f e c t o
seguir
los bienes- h i p o t e c a d o s e n m a n o s
de
de
per-;
tercer
E s t o s u p u e s t o , e l q u e tratase d e a d q u i r i r u n a
de eyieciones y
tinca,
responsabilida­
d e s f u t u r a s , n o t e n i a sino q u e a v e r i g u a r e n el r e j i s t r o
d e h i p o t e c a s , las c a r g a s d e e s t e
inmueble.
P e r o ¿ s e h a l l a b a e n el m i s m o caso el
D e ninguna manera. L a
c e s c r é d i t o s p r i v i l e j i a d o s , a n t e l o s q u e c e d i e s e n las
obligaciones; mas s o l e m n e m e u t e contraidas.
P o r c o n s i g u i e n t e , a p e s a r d e su m é r i t o
ble, f u é incompleta la r e f o r m a
leyes d é España qué
crearon
p r e s t a m i s t a i"
h a-
g a r a n t i r la eficacia
de
las
bienes se a f e c t a n . E l p r e s t a ­
m i s t a n o p o d i a s a b e r , si e n caso d e q u i e b r a d e l
deu­
d o r , s u h i p o t e c a s o l e m n e seria g r a d u a d a , a n t e s ó d e s ­
imprevistos y privilegiados,
q u e , a u n q u e m e r e p e r s o n a l e s , d e c o r a d o s con los n o m ­
z a b a n la c x h o i b i t a u t e
en
sas, e r a p u n t o m e n o s q u e i m p o s i b l e , e n t r e n o s o t r o s , e l
desarrollo
del crédito
que
debia
auxiliar
Sentíase
de
la
el
de
la
generalmente
ley
h ipotecaria
q u e n o s l e g a r a la E s p a ñ a ; p e r o no e s t a n d o el mal q u e
se d e p l o r a b a , sino e n la c o m p e t e n c i a d e
gios c o n la h i p o t e c a , s e g ú n acaba
t e n c i a q u e no e r a f u n d a d a
en
los
de v e r s e ,
privile­
compe­
r a z ó n y antes b i e n e r a
contra la naturaleza d e las cosas, es c l a r o c o m o la luz,
etc., go­
q u e el r e m e d i o v e r d a d e r o y ú n i c o
dependía
de concurrir con
tituir a la h i p o t e c a ( s e e n t i e n d e la
convencional, es­
legales, judiciales,
prerogativa
triste
En semejante estado de co­
la n e c e s i d a d d e una r e v i s i ó n
b r e s d e h i p o t e c a s generales,
Rejistro de Hipote­
las P a r t i d a s : esto es , sin g a r a n t í a s a l g u n a s r e a l e s
concurso de acreedores.
m a n o d e la r e f o r m a q u e
créditos
las
r e d u c i d o la l e g i s l a c i ó n d e
a g r i c u l t u r a y d e la i n d u s t r i a .
otros
el
por
p r e s t a m i s t a s h i p o t e c a r i o s en l a
c o n d i c i ó n á q u e los h abía
r a i c e s , d e s c u i d a r á á la v e z
pués, d e
incontesta­
introducida
natos y a s e g u r a r á l o s c o m p r a d o r e s d e b i e n e s r a i c e s ,
q u e d a b a n los
b i a l o g r a d o afianzar la l i b r e t r a s m i s i ó n d e l o s b i e n e s
o b l i g a c i o n e s i q u e esos
m u ch a s v e ­
cas ; p u e s q u e , c o n t e n t á n d o s e c o n i m p e d i r l o s e s t e l i o ­
p o s e e d o r (art. 20, 21 y 2 3 , R. C . d e 1802).
si q u e r i a a s e g u r a r s e
procedieron, en materia d e p r i v i l e -
de res­
la v e r d a d e r a h i p o t e c a , v e n c i e n d o much as v e c e s á e s t a
pecial y rejistrada) su p r i m i t i v a e n e r j i a , su c l a s e p r e ­
en la d i s t r i b u c i ó n d e los b i e n e s d e l c o n c u r s a d o .
f e r e n t e en c o n c u r s o d e
acreedores.
—
20
—
—
D i g á m o s l o d e una v e z : la l e g i s l a c i ó n d e
trópoli que nos
rejia en
la
ex-me-
la m a t e r i a , necesitaba
completada, perfeccionada; pero
sin
—
« hipotecas especiales. Abolida
ser
renunciar
21
« el a r t í c u l o
cie­
esta
prerogativa por
15 d e l a l e y d e 2 5 d e O c t u b r e
de
« la d e n o m i n a c i ó n e r a d e l t o d o i m p r o p i a ; h a
1854»
parecido
g a m e n t e a u n a d e las a d q u i s i c i o n e s m a s p r e c i o s a s , n o
« pues, conveniente suprimirla.
podriamos tocar
« p r o y e c t o o t r a e s p e c i e d e h i p o t e c a , q u e la a n t e s 1 l a ­
a
« las
tres »
bases
fundamentales
d e l sistema : la c o n v e n c i o n a l i d a d , la
. '' •. ",J'
Podemos
especialidad
en
esta á la
confirmación
Americana.
vanguardia
dé
La ley del 25 de
Octubre
p a s o e n la r e f o r m a
« las hipotecas
dé la
lo
dicho
•
« ban
beneficio
hipotecaria
Sud-
dió
el
e l o g i o s d e l o s j u r i s c o n s u l t o s y; é n c ó n o m i s t a s m a s c é ­
primer
%
lebres de Europa.
que
debida-
Desgraciadamente nuestros
no
principios
« solo prefieren á los quirografarios. » D e suerte
ción vulgar, que fué
suprimida
en
el
Chileno sancionado y promulgado en
que
denomina­
Código
Civil
1855.
del derecho Hispano
los de
d e l a única Hipoteca
sido acojido en
el p r o y e c t o
c o n el p a s a d o , se
l a s q u e h a s t a e n t o n c e s , n o e r a n s i n ó créditos
« d o r enajenar parte alguna de sus b i e n e s ; ni era d a d o
« p e r s e g u i r l a contra t e r c e r o s p o s e e d o r e s , d e j ó d e ser
« verdaderamente
« hipoteca.
Lo
un
peño,
y por
único que, en cierto
consiguiente
una
modo, justificaba
« este título, era la circunstancia d e c o n c u r r i r con las
propiamente
tales ó e n
aunque p r i v i l e j i a d o s en c o n c u r s o d e
Pero, el sistema hipotecario
bía sido j u z g a d o allí d o n d e
L o s muchos vicios de
gar a
toma-
sistema
habia
del Dr. A c e v e d o , sancio­
en
« nosotros, d i c e , la h i p o t e c a l e g a l no i m p e d i a al d e u -
los
J u n i o d e l r e f e r i d o a ñ o , e n la q u e ?
rompiendo bruscamente
hipotecas
1850,
; y s e d u c i d o s p o r la i m p o n e n t e a u ­
s i d e n t e d e a q u e l l a R e p ú b l i c a , a] s o m e t e r al C o n g r e s o
entre
del
toridad del Código Civil Francés, c u y o sistema
N a c i o n a l el p r o y e c t o d e l C ó d i g o : « D e s d e
que
de
Chile,
A m e r i c a n o , ni
las i n a p r e c i a b l e s v e n t a j a s
n a r o n la l e y 12 d e
N o p o d e m o s o m i t i r las h e r m o s a s palabras d e l P r e ­
legisladores
interrogaron, como,lo hicieron
rou en c u e n t a
la
hipote-
d e , C h i l e , , c u y o . C ó d i g o C i v i l ha m e r e c i d o l o s m a y o r e s
« c u a l q u i e r f e c h a , las q u é é s c l u y é n d o s e m u t u a m e n t e ,
sino
en
ley
especiales,
quedaba
hipótécá legal (privilejio en
« l a s i t u a c i ó n e n q u e l o s c o l o c ó la c i t a d a
« m e n t e r e g i s t r a d a s , son p r e f e r e n t e s a las legales d e
de la hipoteca legal, no
dé
« caria d e 25 d e O c t u b r e . » T a l es la l e y
hipotecaria, «estableciendo
convencionales,
del
goza-
el
civilización
1854
ahora
« c o n c u r s o d e a c r e e d o r e s ) , se hallan e x a c t a m e n t e
,:.
de
(convencional y rejiütrada) y
este
Chile, q u é sin
1"-"''^':
';••'<•*?'
n\5
'
ejemplo elocuente d e la R epública d e
duda
ce m a d a . e s p e c i a l
« simplemente hipoteca. P o r lo d e m á s , los que
" -' , 'n."
traer
y
• 'V, s ''"' ,
la p u b l i c i d a d d e la h i p o t e c a .
No se conoce en
convierte
acciones
reales,
personales,
acreedores.
f r a n c é s á esa hora ha­
nació.
que adolece, habian d a d o lu­
v a r i o s p r o y e c t o s d e l e y , d i r i j i d o s íí s u r e f o r m a -
E n efecto, m e d i o siglo de espericneia bastaba para d e -
m o s t r a r la i n e f i c a c i a d e l s i s t e m a q u e
llamaremos
23
-
P e r o , l o s t é r m i u o s d e la c u e s t i ó n s o n d i f e r e n t e s ; d e
Na­
poleón ; s i n q u e p o r e s o l e a v e n t a j e e n m u c h o e l d e n o ­
u n l a d o e s t á n l o s i n c a p a c e s , d e o t r o l a d o e s t a la c a u s a
m i n a d o Alemán,
p ú b l i c a ; no es, c o m o
ni o t r o a l g u n o q u e
t e n g a p o r base la
h i p o t e c a Múltiple.
,
Estamos perfectamente de acuerdo
;
legio d e a q u e l l o s
c o n la o p i n i ó n
d e l c é l e b r e e c o n o m i s t a Mr. W a l e w s k i : la h i p o t e c a
quiere
suponerse el ínteres
de
u n particular el q u e se p r e s e r v a , r e d u c i e n d o el p r i v i ­
a la clase
de
acciones
personales,
p r e f e r e n t e s solo á l o s quirografarios, sino q u e se p r o ­
le­
g a l e s p e r j u d i c i a l , c o n ó s i n la i n s c r i p c i ó n o b l i g a t o r i a ;
c u r a q u e , g a r a n t i d a la e f i c a c i a d e la c o n v e n c i ó n
h ipo­
sin c o n t a r c o n q u e , t o d a v e z q u e se t o m e , p o r p u n t o d e
tecaria, no tenga nadie m o t i v o para retraerse, de c o n ­
p a r t i d a la h i p o t e c a m ú l t i p l e , s e a c u a l f u e r e l a c o m b i ­
t r a t a r «con e l p r o p i e t a r i o ;
nación,
aMcausa
necesitará,
juego, de formas
para desarrollarse y
complicadas
páticas á los capitales.
ponerse
en
ese r e t r a i m i e n t o q u e
daña
lo q u e la l e j i s l a c i o h C h i l e n a y
el
y p o r d e c i r l o así, a n t i .
supremo decreto de nuestro Gobierno Provisorio, d e
a c u e r d o cún los p r i n c i p i o s d e n u e s t r o a n t i g u o d e r e c h o ,
se p r o p o n e n
transacion
d e l C ó d i g o f r a n c é s ? E n t o n c e s la h i p o t e c a l e g a l d e
El
dad a l i n t e r é s d e Io> p r i v i l e g i a d o s . P o r
el
Gene­
ral d e C ó d i g o s , h a , d i c h o estas n o t a b l e s p a l a b r a s ¿ « S é
publici­
quiere un
contrario
un m o d o a b s o l u t o ,
superior Tribunal de Justicia, en España, á p r o ­
p ó s i t o d e l s i s t e m a q u e d e b í a s e g u i r la C o m i s i ó n
independientemente del re-
j i s t r o ; y e s s a c r i f i c a d o el g r a n p r i n c i p i o d e la
evitar; no es él daño a i s l a d o d e uña p e r ­
sona privada.
la
m u j e r casada, d e los m e n o r e s y d e m á s i n c a p a c e s , s u r ­
i se sigue d i c h o p r i n c i p i o d e
es
'.
P o r o t r a p a r t e ¿ se a d o p t a el s i s t e m a d e
te efecto contra tercero
pública^
el q u e
como
sistema
h ipotecario ?
sea c o m p l e t o .
Pues
acéptese
E l q u e no lo es, p u e d e
c o n la mala fé, en d a ñ o de los
s u c e d e en los E s t a d o s d e la C o n f e d e r a c i ó n G e r m á n i c a ?
q u e se a u n a
S e i n c u r r e e n la i n c o n s e c u e n c i a d e s o s t e n e r l a h i p o t e ­
l e j i t i m o s de los acreedores á
ca l e g a l d e los i n c a p a c e s , y sin e m b a r g o , h a c e r d e p e n ­
c i e n d o u n a s e g u r i d a d que no les p r o p o r c i o n a .
quienes
intereses
engaña, ol're.
malo que un sistema incompleto,
la d e j a s i n e f e c t o ; l o
g u n o . » Y á fé, q u e esto es una g r a n v e r d a d . El p r i m o r ­
equivale á crear con
una
Los defensores de uno y otro sistema no h an
t e a d o l a c u e s t i ó n c o n la d e b i d a e x a c t i t u d .
ces y el
interés de
el i n t e r é s
las p e r s o n a s
tener nin­
dial o b j e t o d e la l e y h i p o t e c a r i a , es a s e g u r a r la l i b r e
m a n o l o q u e s e d e s t r u y e c o n la o t r a .
sado, q u e esta p e n d e e n t r e
no
3Ienos
der esta h ipoteca de un acto supletorio, cuya o m i s i ó n
cual
seria
solo
decirse
c i r c u l a c i ó n d e los b i e n e s raices y dar u n a s i e n t o
plan­
al c r é d i t o t e r r i t o r i a l . P a r a o b t e n e r tan feliz
Se h a p e n ­
resultado
e s p r e c i s o q u e el a c r e e d o r e s t é c o m p l e t a m e n t e s e g u r o
d e los incapa­
qne tratan con
firme
d e que su h ipoteca no podrá traicionarle ;
los
m a r i d o s ó t u t o r e s , y d e c o n s i g u i e n t e la s o l u c i ó n t e n i a
ademas que
q u e s e r el s a c r i f i c i o d e u n o s ú o t r o s .
uinguu protesto,
I
el c o m p r a d o r
no tenga que
evicciones inesperadas.
es preciso
temer
por
¿ Cual sera
— 24 —
—
e s e s i s t e m a c o m p l e t o q u e o f r e c e i g u a l s e g u r i d a d á los
a c r e e d o r e s y a los c o m p r a d o r e s ? N i n g ú n o t r o p o r c i e r ­
t o , sino el que se f u n d a e n el p r i n c i p i o d e la
convenciona-
d e la h i p o t e c a , c o m o c o m p l e m e n t o d e la e s p e c i a ­
lidad
25
-
drian efecto entre acreedores de un deudor
común.
L o s a c r e e d o r e s p r i v i l e j i a d o s no p r e f e r i r í a n s i n o á l o s
quirografarios, pero serian vencidos
res hipotecarios.
p o r los a c r e e d o ­
( T h e m i s t o m o 9 p a g . 53 y sig.)
Des­
l i d a d y la p u b l i c i d a d ; p o r q u e sin a q u e l p r i n c i p i o , q u e ­
p u é s d e s e p a r a d a la B é l g i c a
dan estos c o m o
a h o g a d o s p o r las
d e a q u e l p r o y e c t o s i r v i e r o n p a r a la l e y q u e , esta ú l t i ­
legales,
judiciales,
generales,
llamadas
hipoteca»
e t c . , y el a t e r r a d o r
séqui­
to d e sus f o r m a s , q u e son la m u e r t e d e la i n s t i t u c i ó n
hipotecaria.
... .. . .
A s i las s e c c i o n e s
verse
precisadas
« .
< ' ,' ,
, -, .-:' • •
:
leyes
hipotecarias
Francia
ó d e A l e m a n i a , son mas. b i e n
las q u e
ganarían
estas
Infinito, m o d i f i c a n d o
bases
m a s e d i o e n 1834.
Ahora
p r e g u n t a m o s : ¿que s i s t e m a
es e s t e s i n o el
hispano.americano, completado y perfeccionado, según
Hispano-Americánas, tan lejos d e
a c o p i a r las
d e la H o l a n d a , las
dé
naciones
l o s p r i n c i p i o s q u e d e f e n d e m o s e n el p r e s e n t e a r t i c u l o
y q u e son los
mismos
del
Supremo Decreto
del G o ­
bierno Provisorio?
fundamental­
m e n t e sus r e s p c c t i v o s y i y d e c a n t a d o s , s i s t e m a s ,
sobre
la g r a n b a s e d e la ú n i c a e s p e c i e d e > h i p o t e c a d e l d e r e ­
cho español; sin la q u e , e n v a n o , s e
zar el o b j e t o d e tan i m p o r t a n t e
(¡ve la cosa ofrezca
Podemos
?nas seguridad
procuraría
institución, a saber :
que la
persona.
proyecto
abolían
de
tocada.
De
todos
m o d o s , la i n e f i c a c i a
d e la
ley
de
J u n i o d e e s e aüo, está r e c o n o c i d a aun p o r los h o m b r e s
e s t r a ñ o s á la c i e n c i a . E n e f e c t o , v e m o s q u e la p r o p i e ­
los m e n o r e s y d e la
para s i e m p r e la h i p o t e c a
rasgos
prin­
de
m u g e r casada.
j u d i c i a l y la
Se
gene­
ral.
d a d d e l s u e l o continúa en
i n c e r t i d u m b r e , q u e el c r é ­
d i t o t e r r i t o r i a l marcha á su a n i q u i l a m i e n t o , q u e la i n ­
dustria
encuentra
capitales á interés
mas
bajo
que
la m e j o r finca, y q u e bastaría d e j a r e u pié la e s p r e s a ­
d a l e y para v o l v e r
i n e f i c a c e s los c o n a t o s d e a l g u n o s ,
p a r a la c r e a c i ó n d e b a n c o s h i p o t e c a r i o s .
Se declaraba
cial y pública.
sido acertado
nuestros legisla­
á l o s E s t a d o s G e n e r a l e s d e la B é l g i c a u n
sentar. E n el , se p r o p o n í a abolir las h i p o t e c a s l e g a l e s
fisco,
que hicieron
1824
d e r e f o r m a hipotecaria, c u y o s
En
c i p a l e s c o n d i c e n c o n la p r o p o s i c i ó n q u e a c a b a m o s
del
Véase por q u e dijimos que no había
el c a m b i o d e sistema,
d o r e s d e 1856, e u una m a t e r i a q u e s o l o p e d i a s e r r e ­
citar, c o m p l a c i d o s , el e j e m p l o d e u n a d e
las n a c i o n e s m a s a v e n t a j a d a s e n c i v i l i z a c i ó n .
se p r e s e n t ó
reali­
que toda hipoteca
E n cuanto
sar d e atribuir
u n jus
seria convencional,
á los p r i v i l e g i o s ,
in re;
no
darian
espe­
debían ce­
ya
el
dere­
cho d e p e r s e g u i r la cosa contra un t e r c e r o , y s o l o t e n -
C o n v i e n e e s p o n e r , a u n q u e á g r a n d e s r a s g o s , los v i ­
cios principales de dicha l e y .
1 ?
Consiste
el p r i m e r o
eu su b a s e f u n d a m e n t a l ;
p o r q u e , r o m p i e n d o ella i n m o t i v a d a m e n t e c o n n u e s t r o
—
d e r e c h o d e siglos,
tema
26
—
—
ha s e g u i d o ú io q u e p a r e c e , el sis­
del Código Civil Francés, que
c o n d i c i o n e s d e publicidad
si b i e n e \ i j e l a s
y especialidad
e n la h i p o t e c a ,
27
—
6<f? N o e s d e e s t r a u a r , q u e l a r e f e r i d a l e y
compren­
d a c o m o cien a r t í c u l o s , y c a d a u n o d e e s t o s , s e p u e d e
decir, porción de
incisos; y esto,
á pesar de
vacios
n o e s s i n o c o n l a e s c e p c i o n d e l a l e g a l e n f a v o r d e la
tan m a n i f i e s t o s , c o m o el y a i n d i c a d o r e l a t i v a m e n t e á
muger
lo* p r i v i l e j i o s y el n o
casada, del
menor y demás incapaces ; lo que
menos
considerable
sobre
la
equivale a dejar en pie g r a v á m e n e s ocultos, o r i g e n f e ­
graduación de acreedores
cundo de pleitos 6 injusticias, y medio
c o n c u r s o . ¡ Kn una ley q u e por su e s t e n c i o n p a r e c e u n
pósito para
mantener á los
prestamistas
á pro"
en 'perpetua
* : ''* 4 f^
desconfianza.
"2?
el mas
;
d e l o s privilegios
c ó d i g o , tantos vacios !
6 ^ T o d o el c a p i t u l o r e l a t i v o & la c s t i n c i o n del
*-:M>
No es fácil esplicar el s i l e n c i o q u e g u a r d a d i c h a
ley á cerca
ó> í á c o n f u s i ó n q u e
ó prelaciou de créditos en
hace
d e e s t o s c o u las h i p o t e c a s ; e n l o q u e n o e s t á c o n f o r m e
recho de hipoteca,
la jurisprudencia. L a s p r e s c r i p c i o n e s q u e
c e i í d é s ¿ o , de dos/de
de­
es a r b i t r a r i o , sin a n t e c e d e n t e s e n
ochó'y
d/ez afios,
se
estable-
como también
c o n el C ó d i g o C i v i l F r a n c é s , n i c o n el p r o y e c t o d e l D o c ­
la i m p r e s c r i p t i b i l i d a d d e la h i p o t e c a j u d i c i a l , d e este
tor Acevedo,
premio
ni c o n r é j i m e n a l g u n o
conozcamos.'
•\?
v?^*
C o m o si n o
hipotecario ¿ que
",vy-" • ' . ' -y.--
bastase
ocupa, es p r ó d i g a
del derecho
ó
patria.que-
hipotecario,
créditos considerados aun sin
En
el sistema
de
según le llaman los autores V és­
sea
J 8 5 f i d i s t a n i n f i n i t o d e a r m o n i z a r s e c o n l a j u s t i c i a .ni l a
nos
e q u i d a d , á mas d e estar en oposición con los p r i n c i ­
acordán­
privilejio
por la lejislaeion antigua.
4?
de la dilljcncia,
t a s y o t r a s d i s p o s i c i o n e s d e l c a p i t u l e ) í) ® d e l a l e y d e
l a ' h i p o t e c a múltiple
l a s v a r i a s e s p e c i e s d é hipotecas,••la l e y
dole á varios
-vv \~
,;
pios recibidos
umversalmente.
N o es de nuestro p r o p ó s i t o o c u p a r n o s d e los vicios
d e d e t a l ; p o r q u e n o e s e n la r e f o r m a d e l a l e y d e
la m i s m a
ley, el
capitalista
s i n o en la sustitución d e ella p o r otra n u e v a , y
1850,
basada
q u e dá su d i n e r o á interés, c o m o el q u e lo e m p l e a e n
en mejores
l a c o m p r a d e u n a finca, si q u i e r e n a s e g u r a r s u
dinero
males que presenciamos; ó mejor dicho, ese r e m e d i o
minucio­
está e n e l D e c r e t o p r o m u l g a d o , c o m o l e y d e la R e p ú ­
ó su adquisición, tienen
s o s , á la v e z q u e
la h i p o t e c a , y a p a r a
m i s m a , y a e n fin para
gios
que seguir trámites
dispendiosos,
ya para el
rejistro de
la c a n c e l a c i ó n ó r e d u c c i ó n d e
purgar
el i n m u e b l e de
é hipotecas ; y después de todo, no
la
privile­
pedrá lison-
g e a r s e d e q u e s u fiel o b s e r v a n c i a d e l a s f o r m a l i d a d e s
p r e s c r i t a s p o r la
cesos.
ley,
lo
garanta
de
uno ó
mas p r o ­
principios, d o n d e está el r e m e d i o d e
los
b l i c a , p o r e l E i m o . G o b i e r n o P r o v i s o r i o e n 2 7 d e 31ay o (18G 5).
Basta
interés
l e e r esa l e y p a r a c o n v e n c e r s e q u e , s i n h e r i r
ninguno
lejitimo,
prevalece
en
ella u n
es­
píritu protector de las transaciones y conservador de
la p r e p i e d a d . P o r l o d e m á s , e n s o l o c u a r e n t a
de una
II
redacción
clara, precisa
artículos
y previsora,
la l e y
—
28
—
n o v í s i m a a b r a z a t o d a s las r e g l a s c o n c e r n i e n t e s
hipoteca,
losprlvilejios
y la graduación
de
á
la
acreedores.
A s i p u e s , n o d u d a m o s q u e e l pais a c o j e r á c o n e n t u ­
siasmo
una l e y
cuyos
efectos van á hacerse
sentir
d e s d e l u e g o e n pró d e l d e s a r r o l l o d e l c r é d i t o , d e l p r o ­
PROYECT O DE ORGANIZACION
\
g r e s o d e l o s c a p i t a l e s , y d e la i g u a l d a d , c o m o b a s e d e
*
\
'
REGLAMENT O
los c o n t r a t o s t r a n s m i s i v o s d e la p r o p i e d a d .
P o r l o d e m á s , el p o r v e n i r
q u e c i e r t a m e n t e es d e b i d a
se e n c a r g a
d e la
DEL.
gloria
al E t m o . G o b i e r n o P r o v i ­
sorio p o r su D e c r e t o d e 27 d e M a y o d e
V *
18G5.
CUERPO DIPLOMÁTICO ARGENTINO
?OEN D E L M I N H r p r , , , n r
.» „
• o j c n u i ut. Ki L A i I O N E S R X T E R I O R I
T R I ST A N
NARVAJA.
pR. p . pÁMASOpENTENQ
BUENOS AIRES
^ Á B # » n É I O
•.'•'¡•««toco.
7t>-Calle d e
1bb0
J..BMAR.O
Cuyo-7e
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