27 E L M U N D O, J U E V E S 1 6 D E O C T U B R E D E 2 0 0 8 CIENCIA SALUD / El implante cerebral permitió a los primates mover sus brazos para controlar un videojuego / Si se aplicara en humanos, permitiría coger objetos o escribir en un teclado Una ‘neuroprótesis’ logra devolver la movilidad a monos paralíticos MARÍA SAINZ MADRID.– La posibilidad de que las personas paralíticas puedan recuperar al menos parte de su movilidad con ayuda de implantes cerebrales está hoy un poco más cerca. Un equipo de investigadores estadounidenses ha logrado este objetivo en un experimento realizado con monos, mediante una sofisticada neuroprótesis que conecta artificialmente el cerebro y los músculos. Hace cuatro meses, saltaba a la palestra el trabajo de un equipo de investigadores de la Universidad de Pittsburgh (EEUU), en el que dos monos fueron capaces de alimentarse moviendo un brazo biónico con la energía del pensamiento. Ahora, Nature, la misma revista que publicó aquella investigación, recoge en sus páginas una impactante investigación con distintos medios pero parecidos fines. «Los monos Macaca memestrina pueden controlar directamente la estimulación de los músculos empleando sólo la actividad de las neuronas de la corteza motora [una zona del cerebro implicada en el movimiento]», afirman sus autores, procedentes de la Universidad de Washington (EEUU). Para llegar a esa conclusión, primero se implantó un electrodo en el cerebro de dos monos, que permitió grabar su actividad neuronal. A continuación, con un programa informático, se transformaron estos datos en señales capaces de estimular la muñeca de los animales. Impulsos mentales Como han explicado Chet T. Moritz y Eberhard E. Fetz, dos de estos expertos, en una rueda de prensa, «pusimos dos electrodos por cada músculo que quisimos estimular», y no se necesitó emplear «complejos algoritmos de descodificación ni brazos robóticos». En el experimento se estudió la mente de los macacos mientras jugaban a un simple videojuego, en el que tuvieron que mover la mano en varios sentidos. Cuando ya habían adquirido cierta pericia en esta tarea, los científicos anestesiaron su antebrazo para eliminar su función motora y su sensibilidad. A pesar de esta parálisis temporal, los animales continuaron moviendo el cursor con el impulso de la mente. «Convertimos la actividad celular en una serie de estímulos proporcionales que se hicieron llegar a los músculos paralizados», explican los científicos estadounidenses. Como resultado, los monos no sólo fueron capaces de mover la extremidad paralizada, sino que también contrajeron y extendieron la mano. Su habilidad fue mejorando según se incrementó el tiempo de prácticas. Otro de los principales hallaz- El hallazgo que publica hoy ‘Nature’ se enmarca dentro de un innovador campo de investigación que está logrando éxitos cada vez más espectaculares en la búsqueda de ‘neuroprótesis’ que podrían devolver la movilidad a personas paralizadas. El objetivo es encontrar sistemas que consigan una comunicación eficaz entre las neuronas del cerebro y el ‘software’ de un ordenador. Hace ya cinco años, en octubre de 2003, el investigador Comunicación entre cerebros y máquinas español José Carmena demostró en la Universidad de Duke (EEUU) que los impulsos cerebrales de unos monos macacos eran capaces de mover un brazo robótico, hasta el punto de alcanzar y sujetar objetos. Tras varios entrenamientos con un sistema de electrodos implantados en su cerebro, los animales asimilaban los gos del trabajo tiene que ver con la naturaleza de las células implicadas en el proceso. En contra de lo que pudiera pensarse, «las neuronas pudieron controlar la estimulación funcional con igual destreza sin importar si previamente se habían asociado con el movimiento». «Este resultado pone en evidencia la enorme plasticidad del cerebro. A través del aprendizaje se puede variar la función de estas células y, en este caso, reclutarlas movimientos del brazo robótico como una parte más de su organismo. Más espectacular fue el caso del tetrapléjico estadounidense Matt Nagle, publicado por ‘Nature’ en julio de 2006. Este joven se convirtió en el primer usuario de un sistema llamado ‘BrainGate’ (Portal Cerebral), un sensor que se le implantó en la para que cumplan un papel motor», afirma Eberhard E. Fetz. «Es la primera demostración de que las conexiones artificiales y directas entre las células corticales y los músculos pueden compensar los caminos fisiológicos interrumpidos y restaurar el movimiento voluntario de las extremidades paralizadas», subrayan los autores. De aplicarse en humanos, podría restaurar acciones tan cotidianas como coger una taza o corteza motora, el área cerebral responsable de los movimientos. El sensor capta la actividad de las neuronas, y sus órdenes son transmitidas a unos procesadores que descifran y ejecutan las necesidades del paciente. Gracias a este dispositivo, Matt es capaz de mover el cursor de un ordenador, abrir el correo electrónico, controlar un televisor, jugar a los videojuegos e incluso abrir y cerrar una mano robótica. presionar una tecla. «El mayor desarrollo de este tipo de estrategias directas podría devolver los movimientos voluntarios a las personas con parálisis», concluye el documento. Eso sí, antes de poder emplear esta técnica en personas, se deberá allanar el terreno para, entre otros objetivos, lograr electrodos que no provoquen rechazo o conseguir una tecnología wireless que evite tener que introducir cables en el organismo humano. El Vaticano tilda el ‘bebe medicamento’ de «acto condenable de eugenesia» MADRID.– «No se trata de un acto altruista, sino de un acto de eugenesia, y como tal es condenable». Así de rotundo reaccionó ayer L’Osservatore Romano, el diario oficial del Vaticano, ante la noticia del nacimiento en Sevilla del primer bebé medicamento de España. «Desde hace tiempo, España está a la vanguardia de todas las decisiones más discutibles en el terreno de la bioética», afirmaba el periódico de la Santa Sede. Para lograr el nacimiento de Javier, el bebé concebido a partir de una selección genética para salvar a su hermano enfermo, L’Osservatore Romano denuncia que los padres «han sacrificado a otros posibles niños», en alusión a los embriones desechados durante el proceso, y considera indignante que «muchos consideren esto como algo éticamente aceptable», según informa France Presse. La misma opinión fue lanzada ayer contra el nacimiento de este niño por el director del Instituto de Ciencias de la Vida de la Universidad Católica de Valencia (UCV), Justo Aznar, quien calificó de «pura eugenesia, es decir, permitir vivir por razones de salud, condición física, de belleza, altura o de raza» la técnica de diagnóstico genético preimplantacional. Aznar, que mostró el «máximo respeto» a los padres del bebé nacido por su deseo de obtener un sistema para curar al otro hijo enfermo, afirmó que la técnica empleada reviste una «dificultad ética de gran calibre que hay que explicar muy bien a las familias». En este sentido, indicó que para conseguir un bebé-medicamento, «hay que producir una cantidad determinada de embriones, en el caso de Sevilla 16, para encontrar uno que pueda estar sano, y además, compatible con su hermano, lo que implica la destrucción de embriones enfermos y sanos, en definitiva, la destrucción de vidas humanas», informa Europa Press. Defensa bioética En defensa de la técnica, el presidente del Comité Científico de la Sociedad Internacional de Bioética (SIBI), Marcelo Palacios, señaló por su parte que el nacimiento del bebé medicamento «no plantea ninguna duda desde el punto de vista ético». «Lo ético es que ni siquiera nos planteemos dudas éticas», dijo. «Aporta la posibilidad a un niño de salir de la enfermedad y tener otra calidad de vida y además afecta al estricto ámbito de la familia», puntualizó. En este sentido, Palacios considera que tener un hijo, «que además va a ser útil, es una aspiración humana y llenará de orgullo a toda la familia cuando sepan lo sucedido». Por ello, el presidente del SIBI concluyó que, «con independencia de que los padres tienen derecho a tener un hijo sano, si contribuye a curar al hermano, cualquier planteamiento en contra es una injerencia inadmisible». Según fuentes del Ministerio de Sanidad, otros siete casos de diagnóstico preimplantacional ya han sido autorizados por la Comisión Nacional de Reproducción Asistida para que nazcan niños compatibles con sus hermanos enfermos.