IES.BALEARES DEPARTAMENTO DE EDUCACIÓN FÍSICA CONDICIÓN FÍSICA Y SALUD LA RESISTENCIA. 4º ESO 1. CONCEPTO Definimos la resistencia como la capacidad de soportar un esfuerzo durante el mayor tiempo posible retrasando la aparición de la fatiga. La importancia de la resistencia es doble: por un lado, para la mejora de los rendimientos deportivos en determinados deportes; y por otro para la mejora de la SALUD. Actualmente, los médicos recomiendan el trabajo de resistencia aeróbica (paseos, bicicleta, senderismo, carrera continua,...) como prevención de múltiples enfermedades de la vida moderna (infartos, colesterol, hipertensión, obesidad, etc.) 2. TIPOS En función de la intensidad del ejercicio y de su duración, podemos diferenciar entre: 1. 2. Resistencia aeróbica: son esfuerzos de intensidad media o baja y que por lo tanto se pueden mantener durante un largo período de tiempo. En este tipo de esfuerzos hay un equilibrio entre aporte y el gasto de oxígeno. Ejemplos: carrera continua, paseo en bicicleta, andar,... Resistencia anaeróbica: cuando realizamos esfuerzos de alta intensidad y de corta duración, el gasto de oxígeno es mayor que el aporte y se produce una deuda de oxígeno. Por eso, ante este tipo de esfuerzos nuestra frecuencia respiratoria es muy alta durante y después del ejercicio. A su vez, este tipo de esfuerzos los podemos dividir en: Anaeróbicos lácticos: a partir de 10 segundos hasta aproximadamente 3 minutos. Se acumula ácido láctico hasta un punto en el que se tiene que detener el ejercicio por la fatiga que produce su elevada concentración sanguínea. El ácido láctico es la sustancia de deshecho que se genera y se vierte a la sangre al conseguir energía sin oxígeno. Ejemplos: carreras de 400 y 800 metros. Anaeróbicos alácticos: hasta 10 segundos, tan cortos que no se acumula ácido láctico, ya que se toma la energía que hay acumulada en los depósitos del músculo. Ejemplos: carrera de 100m., lanzamientos, multisaltos, realizar pesas. 3. SISTEMAS DE ENTRENAMIENTO De forma general nos encontramos con dos sistemas: SISTEMAS CONTINUOS: se realiza un trabajo sin interrupciones durante un determinado tiempo, generalmente largo (carrera continua, aeróbic, salida en bicicleta, natación sin pausas, andar,...). Se utilizan sobretodo para mejorar la resistencia aeróbica. Dentro de estos podemos encontrarnos los siguientes: o Continuos uniformes: se mantiene la misma intensidad durante todo el tiempo que dura el ejercicio. Carrera continua: muy utilizada en atletismo y conocido popularmente como footing. Consisten en correr de forma continuada a un ritmo como y relajado. o Continuos variables: se producen cambios de ritmo o de intensidad durante un determinado tiempo o distancia. Ejemplos: Fartleck: consiste en realizar cambios de ritmo provocados por el relieve de o por nosotros mismos aumentando la intensidad y la zancada Entrenamiento total: entrenamiento en la naturaleza en los que se intercala la carrera con habilidades básicas como saltar, lanzar, trepar,... SISTEMAS FRACCIONADOS: se combina el trabajo con la recuperación. Ejemplo: Circuitos: se realiza el trabajo por estaciones durante 20 a 45 segundos y se descansan entre ellos unos 25 s. Métodos interválicos: Se fracciona el esfuerzo mediante pausas de recuperación incompletas a intensidades entre el 60% y el 70% Métodos de repeticiones: Se fracciona el esfuerzo mediante pausas de recuperación como el interválico, pero la diferencia es que la recuperación es completa y la intensidades son por encima del 85% IES.BALEARES DEPARTAMENTO DE EDUCACIÓN FÍSICA CONDICIÓN FÍSICA Y SALUD 4. RESISTENCIA Y ZONA DE ACTIVIDAD Mediante el control de las pulsaciones y de la frecuencia respiratoria podemos conocer la intensidad del ejercicio y determinar con ello qué tipo de resistencia estamos trabajando. La frecuencia cardiaca y respiratoria será mayor cuando realicemos ejercicios anaeróbicos de alta intensidad, y menor con ejercicios aeróbicos de baja o media intensidad. Por ejemplo, la posibilidad de que podamos hablar con un compañero mientras corremos indica que el esfuerzo que realizamos es aeróbico. Para mejorar tu salud debes realizar actividades aeróbicas. Estas actividades son las que sitúan las pulsaciones entre el 50 y el 85% de la frecuencia cardiaca máxima individual. A esta margen de pulsaciones se le denomina “ZONA DE ACTIVIDAD”. Para hallar la zona de actividad debemos realizar las siguientes operaciones: 1. Hallar nuestra Frecuencia Cardiaca Máxima (número de pulsaciones máximo que puede soportar un corazón sano): Para chicos: 220 – edad (ejemplo: Nacho tiene 14 años, por lo tanto, su frecuencia cardiaca máxima es de 220 – 14, es decir, 206 ppm.) Para chicas: 226 – edad (ejemplo: Marta tiene también 14 años, por lo tanto, su frecuencia cardiaca máxima es de 226 – 14, es decir 212 ppm.) 2. Calcular los límites superior (85%) e inferior (50%) en función de la frecuencia cardiaca máxima. Para Nacho: el índice superior (206x85/100=175) y el inferior (206x50/100=103). La zona de actividad está comprendida entre 103 y 175 ppm. 5. Para Marta: el índice superior (212x85/100=180) y el inferior (212x50/100=106). La zona de actividad está comprendida entre 106 y 180 ppm. Nacho deberá trabajar durante un periodo prolongado para mejorar su resistencia aeróbica entre: 103 y 175 ppm. Marta deberá trabajar durante un periodo prolongado para mejorar su resistencia aeróbica entre: 106 y 180 ppm. BENEFICIOS DEL TRABAJO DE RESISTENCIA AERÓBICA Mejora la función cardiovascular, tanto en personas sanas como en enfermos cardíacos: Aumento del tamaño y capacidad del corazón Aumento de la circulación capilar Aumento de los glóbulos rojos y hemoglobina en sangre Favorece el retorno venoso Aumento de las mitocondrias en el musculo Desciende la FC en reposo y la FCMAX Recuperación más rápida tras el esfuerzo Reduce la grasa corporal. En los ejercicios prolongados se utilizan las grasas acumuladas como principal fuente de energía. La única fórmula válida para el control del peso es una dieta supervisada por un especialista más ejercicio físico. Disminuye la presión sanguínea a medio plazo en los hipertensos (tensión arterial por encima de lo normal). Reduce los niveles de colesterol malo LDL (que provoca la arteriosclerosis u obstrucción de las arterias) y aumenta el del colesterol bueno HDL. Reduce los niveles sanguíneos de glucemia (azúcar en sangre) en los diabéticos. Mejora la capacidad pulmonar, y el aprovechamiento del oxígeno no solo por los músculos, sino por todos los órganos. Reduce la mortalidad por infarto de corazón. Aumenta la reabsorción de calcio por los huesos, fortaleciéndolos y disminuyendo el riesgo de fracturas. Disminuye los niveles de adrenalina (hormona del estrés) y aumenta los niveles de endorfina (hormona del bienestar) que se traduce en una sensación de bienestar físico y psíquico.