la reforma tributaria en uruguay un proceso hacia la equidad

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LA REFORMA TRIBUTARIA EN URUGUAY
UN PROCESO HACIA LA EQUIDAD
ALVARO ROMANO
Diciembre de 2008
1
Introducción
A partir del 1º de julio de 2007 rige en Uruguay un Nuevo Sistema Tributario (NST).
La magnitud y amplitud de los cambios incorporados, así como la ocasión y el contexto
en que se decidieron implementar, determinan que se trate de una experiencia inédita en
la historia tributaria de nuestro país.
Respecto a la magnitud de los cambios, se verificaron modificaciones muy relevantes en
la tributación de las rentas, en la imposición al consumo, al capital y en las
contribuciones especiales a la seguridad social. Asimismo, también se introdujeron
modificaciones que implicaron un “aggiornamiento” en materia de fiscalidad
internacional, y avances en materia de transparentar el gasto tributario.
El hecho que esta reforma se haya concebido en un contexto fiscal y económico de
franco crecimiento y de tranquilidad fiscal, con el objetivo central de dotar al sistema de
mayor equidad, y no con la intención de obtener una mayor recaudación, constituye una
novedad para la historia fiscal del Uruguay1, y amerita que luego de transcurrido un año,
se analice el proceso de la reforma, y su estado actual.
A efectos de tener un marco de referencia inicial, se hará una breve descripción del
Sistema Tributario Anterior a la entrada en vigencia de la reforma.
Luego se describirá el proceso de implementación de la reforma.
Si bien se trata de un trabajo descriptivo, sin perjuicio de ello, para finalizar se
comentarán los resultados parciales obtenidos luego de los doce primeros meses de
vigencia del Nuevo Sistema Tributario.
1. El Sistema Tributario Anterior (STA). Un “archipiélago” tributario
Hasta julio de 2007 en Uruguay regía un sistema tributario atípico, donde una de sus
características mas notorias era la ausencia de un impuesto global que gravara las rentas
de las personas físicas.
No obstante, corresponde señalar que existía un impuesto (IRP) que gravaba las
remuneraciones de los trabajadores dependientes, de las jubilaciones y pensiones, con
una tasa proporcional (flat), dejando fuera del ámbito del gravamen a las rentas
obtenidas por trabajadores independientes, así como las rentas generadas por el factor
capital, violentando fuertemente el principio de equidad.
El STA basaba su recaudación fundamentalmente en impuestos indirectos, tal como se
observa en el cuadro siguiente.
1
Vallarino, Hugo – Breve Historia Fiscal del Uruguay 1990 – 2003 (Agosto de 2004)
2
Cuadro 1
Recaudación según materia gravada
Re caudación se gún Mate ria Gravada
Año 2006
Otros
0,7%
Sobre las rentas y
utilidades
16,6%
Sobre la propiedad
8,6%
Sobre bienes y
s ervicios
74,1%
Fuente: Boletín Estadístico DGI Año 2006
El sistema impositivo anterior estaba conformado por un excesivo número de impuestos
(28), producto de varias reformas que le fueron agregando complejidad al sistema.
Dichas reformas, que acumulativamente dieron forma al STA, se motivaron en el
intento de abatir un déficit fiscal endémico motivado por el aumento estructural del
gasto público, por situaciones de caída de ingresos (crisis económicas) o por aumentos
coyunturales del gasto2.
De este modo, ante las necesidades del momento, se fueron incorporando sucesivos
impuestos o incrementos de alícuotas de los existentes, frecuentemente sin considerar
como impactaba en el resto del sistema y en la economía en su conjunto.
Así fue que el “sistema” se convirtió en una mera sumatoria de impuestos sin ninguna
relación entre ellos, con una falta total de visión sistémica.
La mayoría de estos impuestos eran totalmente ineficientes, con muy baja recaudación y
un alto costo de administración y fiscalización.
Es por eso que decimos que el STA, más que un “sistema” constituía un verdadero
“archipiélago” tributario, con una cantidad irracional de pequeños impuestos totalmente
ineficientes.
2
EIBE, David – Revista Tributaria del Instituto Uruguayo de Estudios Tributarios Nº 180, Mayo Junio de
2004.
3
En el Cuadro 2 se detalla la estructura tributaria de referencia con detalle de impuestos y
su peso relativo en la recaudación total, donde se pueden observar sin mayor esfuerzo
las características descriptas.
Cuadro 2
Recaudación por impuestos - Año 2006
CONCEPTO
TOTAL GENERAL
I - INGRESOS TRIBUTARIOS
IRIC
Retenciones sobre regalías, asistencia técnica,
derechos de autor, utilidades y dividendos de no
residentes (IRIC)
Reten. emp. de Seguridad, Vigilancia y Limpieza
Pequeñas Empresas
IRA
IMAGRO
IMEBA
IRP (art. 587 Ley 17296)
Impuesto a las sociedades financieras de inversión
Impuesto al patrimonio de personas jurídicas
Impuesto al Patrimonio Explotaciones Agropecuarias
Impuesto contralor y constitución soc. anónimas
Impuesto a Activos de Emp.s Bancarias (IMABA)
Impuesto Control Sistema Financiero (ICOSIFI)
Impuesto Patrimonio persona física
Compra venta bienes muebles en remate público
Impuesto cesiones o permutas derechos deportistas
Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales
Adicional Impuesto Trasmisiones Patrimoniales
IVA
COFIS
IMESI
Adicional IMEBA (MEVIR)
Adicional IMEBA (INIA)
Impuesto compra moneda extranjera (ICOME)
Fondo Inspección Sanitaria (FIS)
Impuesto a los sorteos
Impuesto específico a los servicios de salud
Ingresos sobre compañías de seguros
Impuesto a las Comisiones
Venta Forzada
Impuesto tarjetas de crédito
ITEL
Detracciones a la exportación
II- INGRESOS NO TRIBUTARIOS
TOTAL
86.806.216
86.224.747
12.398.960
%
100,000
99,330
14,283
458.016
31.287
474.145
32.251
6
998.638
36.212
208.956
4.476.516
206.412
1.067.831
143.271
317.380
8.770
67.474
976.181
15.295
46.625.436
3.266.797
11.184.641
81.265
191.837
607.599
298.021
2.687
669.820
330.618
454.629
27.853
98.907
416.339
50.694
581.469
0,527
0,036
0,546
0,037
0,000
1,150
0,042
0,241
5,157
0,238
1,230
0,165
0,366
0,010
0,078
1,125
53,712
3,763
12,885
0,094
0,221
0,700
0,343
0,003
0,772
0,381
0,524
0,032
0,114
0,480
0,058
0,670
Fuente: Boletín Estadístico DGI Año 2006
En materia de reformas tributarias, hay que remontarse hasta el año 1974 para
identificar una reforma integral realizada con una visión sistémica. Dicha reforma de
corte liberal, si bien dotó al sistema de mayor simplicidad, tuvo como objetivo principal
el obtener la mayor neutralidad posible, lo cual determinó que el sistema resultante
fuera claramente regresivo.
4
Fue en ese contexto que se eliminó el Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas,
situación que se mantuvo incambiada hasta la reforma del año 2007.
Todas las reformas posteriores fueron realizadas, como se dijo anteriormente, con un
carácter reactivo (por reacción) ante situaciones coyunturales o estructurales de déficit
fiscal.
Otra característica del STA era que producto de presiones de distintos grupos de interés
el sistema presentaba un número excesivo de exoneraciones de muy dudosa
justificación.
En efecto, dicho gasto tributario no tenía en principio una explicación racional
fundamentada en una determinada política promocional, sino que por el contrario,
obedecía exclusivamente a haber accedido a presiones y reclamos coyunturales de
ciertos sectores de actividad.
Esta realidad también afectaba notoriamente el principio de equidad, en particular la
equidad horizontal.
2. La equidad, una materia pendiente en América Latina
América Latina (AL) goza del triste privilegio de ser el continente que presenta los
peores indicadores distributivos del planeta.
Si bien Uruguay presenta el menor índice de Gini del continente (Cuadro 3), aún dista
mucho de los valores que registran los países desarrollados. Por lo tanto, concientes
que la situación está lejos del ideal, las autoridades económicas del País decidieron
extremar esfuerzos para mejorar la distribución del ingreso, a través de políticas activas.
Cuadro 3
Coeficiente de GINI por países de América Latina
Fuente: CENTRÁNGOLO y GÓMEZ SABAINI 2007
5
En este sentido, desde el punto de vista de la política fiscal se replanteó la polémica
respecto de si la política tributaria es un instrumento idóneo para actuar eficientemente
en términos de distribución.
Es sabido que la política tributaria puede incidir en la distribución del ingreso de dos
formas:
a) mediante la extracción de los recursos necesarios para solventar el gasto
público, adquiriendo en ese sentido particular relevancia el gasto social
(actuando de este modo en la distribución “primaria”).
b) a través de sistemas “progresivos” que actúen sobre la distribución
“secundaria”, en este aspecto el impuesto a la renta (fundamentalmente) y el
impuesto al patrimonio juegan un rol preponderante3.
Cabe señalar que durante las últimas décadas han primado en AL visiones que
descartaban absolutamente a la política tributaria como un instrumento apto para incidir
en la distribución del ingreso.
Por supuesto que estas opciones se derivan de una visión más general de cual debe ser
el rol que debe jugar el sector público en la economía.
Esta suerte de “minimalismo” tributario preponderante en las últimas décadas, era
convergente con una concepción liberal de la economía que propugnaba por un Estado
prescindente en materia económica, dedicado únicamente a cumplir las funciones
primarias (“juez y gendarme”).
En ese contexto, los esfuerzos se dirigían hacia la mayor neutralidad posible de los
tributos, de modo que distorsionaran lo menos posible la libre asignación de factores
que debía efectuar el mercado.
Durante estas últimas décadas se priorizó el crecimiento a la distribución, “primero
debe crecer la torta”, luego el mercado se encargará del resto, proclamaba la “Teoría
del Derrame”, y así AL llegó a niveles de desigualdad peores que los de África Sub –
Sahariana.
“El gasto es mas eficiente que el ingreso para actuar en la distribución” era otro
postulado “axiomático” que contribuyó a la consolidación de los regímenes vigentes.
Aún aceptando que el gasto sea más eficiente, no parece sensato considerando la
situación de desigualdad imperante en la región, que se resigne el uso del instrumento
de la política tributaria.
La situación de desigualdad en América Latina es de tal gravedad que no se debería
descartar el uso de ninguna herramienta que contribuya a revertir esta realidad.
3
Ver CETRÁNGOLO y GÓMEZ SABAINI, “La tributación directa en América Latina y los desafíos a
la imposición sobre la renta – CEPAL 2007.
6
Por otra parte, los hipotéticos sistemas tributarios “neutrales” que se implantaron y
consolidaron al influjo del Consenso de Washington, distaban mucho de serlo, en
puridad debe reconocerse que son claramente regresivos.
Por lo tanto, no solo no se utiliza a los tributos como herramienta para mejorar la
distribución del ingreso, sino que por el contrario, la aplicación de los sistemas
tributarios vigentes en varios países de AL exigen al gasto público social de un esfuerzo
mayor, debido a que la distribución del ingreso empeora sensiblemente luego de la
acción de la política tributaria.
Pero también es preciso señalar que pecaría de cierta candidez un análisis que
concluyera que la estructura regresiva de los sistemas tributarios obedece
exclusivamente a una concepción económica determinada, sino que en realidad hay que
reconocer que en la conformación de dichos sistemas también han incidido fuertemente
intereses de ciertos sectores sociales y económicos que lograron instalar una estructura
tributaria regresiva que ciertamente los favorece.
3. Objetivos buscados con la reforma
Tal como se decía en el capítulo anterior, si bien es cierto que Uruguay goza de una
situación privilegiada en el contexto latinoamericano en términos de equidad, de todos
modos se entendió necesario por parte de las autoridades competentes comenzar un
proceso de reforma tributaria que tenga como objetivo contribuir a superar la situación
descripta anteriormente.
Se consideró entonces que la política tributaria, como uno de los instrumentos de la
política económica, estaba llamada a cumplir un rol relevante en la tarea de lograr el
bienestar general.
Debe señalarse que en todo este proceso se le atribuyó a la política tributaria un rol
secundario a efectos de la obtención de mayores niveles de equidad.
No obstante, el hecho de reconocer que el gasto público es quien está llamado a cumplir
un rol protagónico en la lucha contra la desigualdad, esto no implica que se descarte a la
herramienta impositiva como un instrumento hábil a tales efectos.
Tomando en consideración lo anterior, al diseñar el Nuevo Sistema Tributario, en
particular se puso especial énfasis en los siguientes conceptos o principios:
a) Suficiencia
En rigor el objetivo primordial de todo sistema tributario debe ser el de obtener los
recursos necesarios para que el Estado pueda cumplir con los fines propuestos, en el
marco de unas finanzas públicas razonablemente equilibradas.
7
Por lo tanto todos los objetivos que se plantean deben estar subsumidos al principio de
suficiencia.
Es así que la Ley de Reforma Tributaria (LRT) consagró el concepto del “enfoque
dinámico de la responsabilidad fiscal”.
Este concepto implica conceptualizar a la reforma como un verdadero proceso gradual,
donde se pretende profundizar en los objetivos que se mencionan a continuación, donde
la reforma no es un acto que se agota en sí misma, sino que por el contrario presenta
distintas etapas o fases, en función de las posibilidades fiscales.
Dicho proceso estará regido por una visión estratégica que “tienda” hacia los objetivos
que se explicitarán, atendiendo siempre que el sistema provea de los recursos necesarios
para atender el gasto público.
b) Equidad
Se pretendió promover la equidad, tanto horizontal como vertical, relacionando la carga
tributaria con la capacidad contributiva.
De la comparación de la estructura del NST con su antecedente inmediato, se concluye
claramente que la reforma contribuye a promover la equidad.
Esto se logró básicamente con las modificaciones introducidas a nivel de la imposición
a las rentas y al consumo, tal como se verá más adelante.
También vinculado al concepto de equidad se encuentra el principio de “generalidad”
en el pago de los impuestos, es decir que todos los contribuyentes paguen efectivamente
sus tributos. En ese sentido la reforma amplió las bases imponibles (reduciendo
selectivamente el gasto tributario preexistente), y profundizó la lucha contra el fraude
fiscal.
La lucha contra la informalidad merece en este contexto una mención especial.
El NST modificó los regímenes de tributación simplificada (IVA mínimo, monotributo)
de modo tal que el sistema contribuya al pasaje a la formalidad de pequeñas unidades
productivas, pero sin permitir que estos regímenes de excepción “perforen” al resto del
sistema.
Se considera que las pequeñas y medianas empresas (PYMES) son fundamentales para
la economía del país, y por lo tanto se les diseñó un sistema que las aliente a incluirse en
la formalidad atendiendo lo señalado anteriormente.
Los regímenes simplificados de estas características deben servir de estímulo para que
los pequeños emprendimientos ingresen en el sector formal de la economía, logrando de
esta forma que los trabajadores de dichos sectores se incorporen a la cobertura de la
seguridad social, pero sin que ello se constituya en una forma de disminución de la base
tributaria del resto de los contribuyentes del sistema.
8
En el diseño del NST se ha tomado especial precaución en que los bienes o servicios
facturados por quienes se encuentran comprendidos en estos regímenes especiales, no
constituyan costos ni gastos deducibles del impuesto a la renta empresarial.
De este modo se pretende desestimular prácticas de “enanismo fiscal”, así como
también disminución de base tributable en el sistema general.
c) Eficiencia
Se entiende que el sistema es más eficiente si promueve que los agentes económicos
asignen los recursos de forma que implique un mejor aprovechamiento de los recursos
disponibles.
En aras de este objetivo se derogaron 14 impuestos, y se facultó al Poder Ejecutivo a
derogar tres impuestos más, cuando el enfoque dinámico de la responsabilidad fiscal así
lo permita4.
Los impuestos derogados fueron los siguientes:
-
Impuesto a las Retribuciones Personales (IRP).
Impuesto de Contribución al Financiamiento de la Seguridad Social (COFIS).
Impuesto a los Activos de las Empresas Bancarias (IMABA).
Impuesto de Control del Sistema Financiero (ICOSIFI).
Impuesto a los Específico a los Servicios de Salud (IMESSA).
Impuesto a las Pequeñas Empresas (IPEQUE).
Impuesto a las Comisiones (ICOM).
Impuesto a las Telecomunicaciones (ITEL).
Impuesto a las Tarjetas de Crédito.
Impuesto a las Ventas Forzadas.
Impuesto a las Rentas Agropecuarias.
Impuesto a las Cesiones de Derechos sobre Deportistas.
Impuesto a la Compraventa de Bienes Muebles en Remate Público.
Impuesto a los Concursos, Sorteos y Competencias.
La recaudación agregada de estos catorce impuestos derogados apenas alcanzó en el año
2006 a representar el 7.8% de la recaudación total de la D.G.I.
Es importante señalar que durante el mes de setiembre de 2007 el Poder Ejecutivo ya
hizo uso de la facultad que le confirió la Ley, y derogó el Impuesto a la Compra de
Moneda Extranjera (ICOM)5.
Con esta reducción significativa de tributos se logró en primer lugar simplificar el
sistema, eliminando impuestos totalmente ineficientes, cuyo costo de recaudación y de
cumplimiento era muy elevado, produciendo un costo social mayor al beneficio de la
recaudación misma.
4
Se facultó a derogar los impuestos a la Compra de Moneda Extranjera, a los Ingresos de las Entidades
Aseguradoras y para el Fondo de Inspección Sanitaria.
5
Decreto 340/007 de 16 de setiembre de 2007
9
Por otra parte, la derogación de estos impuestos manifiestamente distorsivos e
ineficientes, permitió una mejor asignación de recursos de la Administración Tributaria,
orientándolos hacia los impuestos de mayor “rendimiento”, disminuyendo de este modo
su costo de oportunidad.
Corresponde señalar que tal como puede verse en el cuadro siguiente, aún permanecen
vigentes algunos impuestos que presentan una participación relativa muy baja en la
recaudación total, pero su permanencia se justifica porque se trata de impuestos que
cumplen funciones de control del resto del sistema.
Cuadro 4
Impuestos de baja recaudación mantenidos o modificados
Impuesto a la Enajenación de Bienes Agropecuarios (IMEBA)
Impuesto a las Sociedades Anónimas Financieras de Inversión (ISAFI)
Impuesto de Contralor y Constitución de Sociedades Anónimas (ICOSA)
Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales (ITP)
Detracción a la Exportación
Otros ingresos no tributarios
TOTAL (5 impuestos + resto)
participación en
la recaudación
DGI 2006
1,47%
0,24%
0,24%
1,14%
0,06%
0,67%
3,81%
Asimismo, la propia ley que crea el NST previó la eliminación del Impuesto a las
Sociedades Anónimas Financieras de Inversión (ISAFI) a partir del año 2011.
Una vez concluido el proceso de reforma del sistema tributario, seis impuestos (los
impuestos al consumo - IVA e IMESI -, más los impuestos a la renta - IRAE, IRNR,
IRPF-IASS - sumados al impuesto al patrimonio) concentrarán más del 95% de la
recaudación total.
Otro aspecto a considerar vinculado a la derogación de estos impuestos es que se trataba
de impuestos muy poco “transparentes” en la medida que los efectos económicos y la
incidencia de los mismos resultaba de muy difícil comprensión.
Es así que se trataba de impuestos que no solo no se sabía con certeza quien los
terminaba pagando, sino que además no contribuían a la formación de una cultura
tributaria ciudadana como consecuencia de su “opacidad”.
d) Estímulo a la inversión productiva y el empleo
Uruguay ha tenido un nivel de inversión extremadamente bajo durante las últimas
décadas tal como puede verse en el cuadro 5
10
Cuadro 5
Evolución de la tasa de inversión en Uruguay
Fuente: elaboración propia en base a datos del Banco Central del Uruguay
Huelga señalar la relevancia de la inversión en el desarrollo económico, por lo cuál se
entendió importante prever algunas medidas tributarias que resultaran atractivas para la
inversión, con el objetivo de modificar al alza el guarismo de la tasa de inversión
estructural del país.
Aquí corresponde indicar – al igual que lo hacíamos al referirnos a la equidad – que se
tuvo total conciencia de la relativa incidencia que la variable tributaria tiene sobre las
decisiones de inversión – sobretodo extranjera -, en el entendido que existen otras
variables que inciden significativamente más en esta materia6.
En lo que concierne al empleo, parece totalmente congruente y complementario con el
resto de los objetivos trazados la promoción de mayor cantidad de puestos de trabajo en
el sector formal de la economía.
En este sentido se promovió a través de distintos instrumentos – que se verán al analizar
la estructura tributaria7 – la inversión productiva y el fomento del empleo.
6
En general se puede afirmar que otras variables tales como: acceso a mercados, infraestructura,
ambiente general (estabilidad de las instituciones, seguridad, transparencia, existencia de tratados de libre
comercio o para evitar la doble imposición, etc. son más relevantes que eventuales franquicias tributarias
al momento de decidir el lugar de localización de una inversión.
7
Algunos de los instrumentos implantados son: exoneración por inversiones, disminución de alícuota del
impuesto a la renta empresarial del 30% al 25%, posibilidad de mayorización de gastos de sueldos para
quienes aumenten la masa salarial concomitantemente con los puestos de trabajo, reducción de alícuotas
de las CESS en sectores como el comercio y los servicios, eliminación de impuestos distorsivos – señal
clara a los mercados que contribuye con decisiones de inversión -, en general se podría afirmar que la
Reforma en si misma genera condiciones que mejoran el clima general de negocios, lo que redunda
también a favor de la inversión
11
4. Las sucesivas reformas en AL. Una experiencia que debe ser considerada
La experiencia de AL en materia de reformas tributarias durante las últimas décadas
dista mucho de ser la ideal.
En el Cuadro 6 se puede observar la cantidad de reformas tributarias que se han
ensayado en la región durante los últimos años.
Cuadro 6
País
Argentina
México
Chile
Costa Rica
Panamá
Uruguay
Brasil
Colombia
Rep. Dominicana
Ecuador
Gutemala
Perú
Bolivia
Venezuela
Paraguay
El Salvador
Honduras
Nicaragua
Promedio LA
Número de
años de
reformas
1977 - 1989
7
5
3
3
3
3
2
2
2
2
2
2
1
1
0
4
Número de
años de
reformas
1990 2002
5
6
4
4
2
6
0
6
2
6
5
3
4
1
4
6
5
4,3333333
Fuente: María Raquel de Ayala. Encuentro de Policy Makers – Antigua, Julio de 2008
El hecho de que las reformas sean “tantas” llama a la reflexión acerca de dos ideas:
-
-
en primer lugar se puede señalar como un indicador del fracaso de las mismas,
en la medida que si alguna de ellas hubiera tenido éxito no se hubiesen
producido las posteriores.
por otra parte, la circunstancia de “permanente” reforma no contribuye a un
clima de negocios propicio para la inversión incidiendo negativamente sobre
dicha variable.
La realidad uruguaya no escapa a los parámetros generales verificados en AL, por lo
tanto corresponde analizar porque fallaron estos intentos reformistas a efectos de evitar
errores ya cometidos.
En términos generales, en la experiencia uruguaya se pueden identificar las siguientes
causas de los mencionados fracasos:
12
a) Se consideró a las sucesivas reformas como actos aislados que se agotaban en si
mismo, es decir, se modificaba el marco normativo, definiéndose una nueva estructura
tributaria, con la creencia que esta mera modificación implicaría por sí sola, que el
nuevo sistema funcionaría mejor a partir de ese acto.
No se consideraba que era necesario modificar otros aspectos del Sistema Tributario
creyendo que lo único relevante era el texto legal.
b) Ausencia de consenso social respecto de la necesidad de los cambios propuestos
Dos ejemplos extremos de modificaciones de tributos que generaron rechazo social
generalizado en la realidad de AL (entre otros) son los casos de Bolivia y el más
reciente de Argentina (2008) con el aumento de las detracciones a las exportaciones.
c) Ausencia de consensos políticos que permitiesen que las reformas trasciendan a los
partidos que circunstancialmente se encontraban en el gobierno.
d) No se consideraba en absoluto si la AT estaba en condiciones para poder administrar
y fiscalizar el nuevo régimen que se estaba creando.
e) En términos generales, más que reformas integrales del sistema lo que los
parlamentos aprobaban eran meros “parches” a la estructura tributaria, atendiendo las
necesidades fiscales del momento.
5. La reforma como proceso
Considerando – entre otros aspectos – las causas reseñadas anteriormente, se llegó al
convencimiento que la reforma del sistema tributario no se podía concebir como un acto
aislado, que se agote en si mismo, sino que por el contrario se debía conceptualizar
como un proceso gradual, pautado por una visión estratégica que “tienda” a profundizar
cada vez más los objetivos propuestos.
De este modo, se intentó no reiterar los errores cometidos en el pasado.
En esa planificación del proceso se identifican los siguientes sucesos como los hitos
más relevantes (puestos sobre una línea temporal):
13
Publicación de
Reforma de “Señales” a Comisión los lineamientos Aprobación Campaña de Evaluación y Creación del
CEF
la A.T. (DGI) la Sociedad De trabajo
de la Ley información y Eventuales
básicos
Expertos (opinión pública)
sensibilización correctivos
civil
Revisión del
nivel del MNI
Sentencia
SCJ
IASS
Aumento de
cargas familiares
Opción
núcleo Familiar
a) Primera fase: la reforma de la Administración Tributaria
Musgrave decía que un sistema tributario vale lo que valga la organización encargada
de aplicarlo.
Con esta frase, a esta altura axiomática, se denota la relevancia que tiene la AT en el
funcionamiento adecuado del sistema.
Fue por eso que tal como se visualiza en la gráfica temporal, la primer medida tomada
en el proceso de reforma del sistema consistió en una reforma radical de la AT.
Cabe señalar que en lo que concierne a esta reforma puntual se contó con un amplio
consenso político, dado que la reforma de la AT tuvo apoyo de todos los partidos
políticos con representación parlamentaria, quienes votaron por unanimidad la ley que
confirió los fondos para financiar la mencionada reforma.
Asimismo, también se consideró que los cambios en la AT no podían realizarse de un
día para otro, constituyendo entonces un sub proceso dentro del proceso general.
En titulares, los aspectos más significativos de esta reforma fueron:
- Se modificó sustancialmente el estatuto del funcionario de la AT, mejorando
notoriamente la remuneración, e incrementando la carga horaria y la dedicación.
- Se dotó a la Administración de instalaciones y equipamiento acordes a sus
requerimientos, y se informatizó totalmente al organismo.
b) Segunda fase: “señales” a la sociedad civil
Luego de implementada la reforma de la AT, se entendió necesario que la sociedad civil
tomara conciencia respecto a que un nuevo tiempo estaba comenzando.
14
En ese sentido se tomaron dos medidas en forma paralela:
i) Educación Tributaria
Se perfeccionó y extendió el proceso de educación tributaria a nivel de la educación
primaria, explicándole a los niños los conceptos elementales vinculados a los impuestos,
pero fundamentalmente transmitiéndole valores básicos de solidaridad ciudadana.
En este proceso educativo se contó con el apoyo de sicólogos y pedagogos que
articularon una estrategia de capacitación acorde al público objetivo, donde las
actividades lúdicas adquieren una importancia relevante.
Mediante esta acción se pretende introducir cambios en la escala de valores ciudadana
de modo que en el largo plazo, la ciudadanía denote un comportamiento tributario más
adecuado a parámetros de equidad y solidaridad deseados.
ii) Incremento de la percepción del riesgo por no cumplimiento
Concomitantemente con lo anterior, la AT comenzó a realizar actuaciones en empresas
de gran importancia en la economía del país, y en aquellos casos en los que se
detectaron incumplimientos significativos se llegó a la clausura de los establecimientos
y hasta en algunos casos a la denuncia penal y procesamiento con prisión de los
titulares.
Estas acciones fueron acompañadas de gran difusión en los medios de prensa.
De este modo, se explicitó a la opinión pública en general y a los agentes económicos
en particular que el no cumplimiento iba a ser castigado con el máximo rigor.
c) Terecera fase: creación de una Comisión de Trabajo integrada por
expertos en la materia
Con la creación de este grupo, integrado por expertos con dilatada trayectoria en
distintas disciplinas vinculadas a la materia tributaria se pretendió darle a la propuesta
de reforma una solidez y consistencia técnica que quedara fuera de dudas.
Esta Comisión tuvo como cometido definir los aspectos básicos que conformarían una
propuesta que sería puesta a consideración de la ciudadanía.
d) Cuarta fase: publicación de los lineamientos básicos
Un aspecto por cierto novedoso de este proceso de reforma, consistió en hacer conocer
en forma previa a la sociedad civil los lineamientos básicos que iban a sustentar la
reforma, permitiendo que emitieran sus opiniones al respecto.
De este modo todos los sectores de actividad – gremiales empresariales, sindicatos
obreros, organizaciones diversas, ciudadanos en general – luego de conocer los
15
lineamientos básicos, hicieron llegar al Ministerio de Economía y Finanzas sus
opiniones y propuestas.
En un arduo trabajo se analizaron los planteamientos emanados de la sociedad civil, y se
recogieron aquellas sugerencias que se consideraron congruentes con el interés general
y compatibles con el estado de avance de la AT.
Con esta actividad, sumado a que la reforma tributaria había sido objeto de un arduo
debate (centro de la campaña electoral anterior), se pretendió que la misma tuviese el
consenso social del que carecieron las reformas anteriores.
e) Quinta fase: Aprobación de la Ley.
Luego de las etapas descriptas, finalmente se envió al Parlamento el Proyecto de Ley.
El Proyecto fue redactado por técnicos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF),
en consulta con la AT, en especial en lo que concierne a la viabilidad de administración
de determinadas soluciones.
El Parlamento, luego de un período de 10 meses aprobó la Ley Nº 18.083 con una serie
de modificaciones y aportes respecto del proyecto original.
En dicha norma legal se definieron los aspectos básicos de la estructura tributaria
propuesta.
Dentro de esta fase se puede identificar también a otra tarea de suma importancia: la
reglamentación.
El proceso de reglamentación de los distintos impuestos requirió de sucesivas reuniones
entre distintos actores del sector público (MEF, AT, Banco de Previsión Social, otras
entidades previsionales, etc.), y también con agentes privados.
En este caso también el liderazgo le correspondió al MEF, con una estrecha
colaboración de la AT.
f) Sexta fase: Campaña de información y sensibilización
Una vez aprobada la norma legal y los distintos decretos reglamentarios, se dispuso una
campaña de información y sensibilización a la población en general.
Se trató de una campaña que comprendió a todos los medios de comunicación, pero
además se programó una gira que abarcó a todas las capitales departamentales, así como
las ciudades más importantes de todo el país, donde se informó personalmente a toda la
ciudadanía en verdaderas asambleas ciudadanas.
16
Asimismo, en todas las capitales departamentales se instalaron oficinas especiales con la
finalidad de informar a los ciudadanos de los alcances de los cambios realizados al
sistema tributario.
Para lograr cumplir con estas actividades fue necesario implementar una campaña
publicitaria en todos los medios de comunicación, la contratación de un número muy
importante de funcionarios temporales, y una estrecha colaboración interinstitucional
básicamente entre la Administración Tributaria y el Banco de Previsión Social.
Con esta campaña se pretendió en primer lugar que la ciudadanía conociera los alcances
del NST tanto en su estructura como en sus efectos económicos, pero además se la
visualizó como una actividad que podía contribuir a la formación del consenso social
necesario para la implantación de la reforma.
e) Séptima fase: Evaluación y eventuales correctivos.
Desde el mismo momento de aprobación de la Ley, se anunció que luego de
transcurrido un año se iba a realizar un balance y eventualmente se iban a formalizar
algunos ajustes al NST.
Como consecuencia de dicho balance, el Parlamento aprobó la Ley Nº 18.341 por la
cual se le realizaron al NST una serie de “ajustes”.
Las modificaciones aprobadas fueron básicamente dirigidas a mejorar el diseño del
IRPF, en el contexto del enfoque dinámico de la responsabilidad fiscal.
Es así que se permitió liquidar el impuesto en forma opcional por núcleo familiar (en el
diseño original solo se preveía la posibilidad de liquidar en base a persona física
individual), se revisó (al alza) el nivel del mínimo no imponible, así como también se
duplicaron ciertas deducciones fictas por concepto de cargas familiares.
f) Octava fase: Creación del Centro de Estudios Fiscales.
La creación del Centro de Estudios Fiscales fue concebida en forma concomitante con
la propia reforma de la AT, pero la búsqueda de los consensos políticos necesarios llevó
a que su concreción se retrase respecto de las fases anteriores, concretándose recién con
la aprobación de la Ley Nº 18.362, de 6 de octubre de 2008 (art. 173).
Se trata de una entidad pública dependiente del Ministerio de Economía y Finanzas,
cuyo objetivo central sea la capacitación de los funcionarios de la Administración
Tributaria.
No es necesario señalar la importancia de esta medida, dado que a través de la
capacitación se logrará una mayor capacidad de gestión por parte de la AT, lo cual
permitirá (en el marco de la visión estratégica ya definida) que el NST vaya
evolucionando hacia etapas superiores.
17
6. Inconstitucionalidad del IRPF que grava las jubilaciones y pensiones. Situación
no prevista en el proceso de reforma.
El 26 de marzo de 2008 sucedió un hecho totalmente imprevisto por el policy maker: la
Suprema Corte de Justicia declaró8 la inconstitucionalidad del IRPF que gravaba las
jubilaciones y pensiones9.
De acuerdo al régimen constitucional uruguayo, un pronunciamiento de este tipo es
vinculante solamente para los accionantes, es decir, la inconstitucionalidad solo aplica a
quienes recurrieron y obtuvieron un fallo favorable.
Cabe señalar que a las pocas semanas la Suprema Corte de Justicia cambió su
integración (debido a que se jubiló uno de sus integrantes), y con la nueva integración el
cuerpo ante otros recursos similares interpuestos, se pronunció a favor de la
constitucionalidad del impuesto.
Por lo tanto, la situación era que aquellos jubilados que hubiesen recurrido y obtenido
fallos favorables (algo más de 1.000 pasivos) con la integración anterior de la Suprema
Corte de Justicia, no estarían gravados por el IRPF, mientras que el resto de los
jubilados si quedaban gravados por el impuesto.
Se trataba de una situación totalmente reñida con la equidad.
Este suceso fue un acontecimiento totalmente inesperado, que implicó que se introduzca
alguna modificación en la estructura tributaria, de forma de reestablecer la equidad,
creando un nuevo impuesto que grave las pasividades, eliminando dichas rentas del
ámbito del IRPF, tal como se verá más adelante.
7. Estado actual del proceso
De lo anterior se deduce que la estructura tributaria aprobada en la Ley Nº 18.083 no
constituye en absoluto la fase final del proceso, sino que por el contrario representa una
etapa intermedia, funcional a determinadas circunstancias de tiempo y lugar vigentes, y
que seguramente será revisada y modificada en forma periódica de acuerdo a la visión
estratégica definida, en el contexto del enfoque dinámico de la responsabilidad fiscal.
Se podría señalar como una debilidad del proceso de reforma, que el mismo nunca
contó con el consenso político necesario que asegure su perdurabilidad en el tiempo.
En efecto, en la medida que el partido de gobierno contaba con mayoría parlamentaria
al momento de aprobarse la ley, significó en los hechos que se aprobó solamente con el
respaldo oficialista, votando todos los partidos de oposición en forma contraria.
8
Sentencia 43/2008. El fallo fue por mayoría (de cinco miembros, tres integrantes opinaron a favor de la
inconstitucionalidad, mientras que los dos restantes votaron por la constitucionalidad)
9
Por exceder el objeto del presente documento no nos vamos a referir respecto de los fundamentos
jurídicos - que no compartimos - que sustentaron el fallo de la Suprema Corte de Justicia.
18
Esta circunstancia implica que ante un cambio de partido de gobierno, el proceso de
reforma podría quedar truncado o incluso abortar.
8. Estructura tributaria propuesta
La estructura tributaria que surge como consecuencia de la aprobación del NST resulta
bastante más sencilla que la preexistente.
Ya se señaló que se derogaron 14 impuestos con la aprobación de la Ley y otro más en
forma posterior.
Además está previsto la derogación de otros dos impuestos, y la desaparición de otro en
el año 2011.
Los cambios más significativos se verificaron a nivel de la imposición a las rentas y al
consumo.
A continuación se resumen los aspectos más relevantes de la nueva estructura
a) Imposición al Consumo
Respecto a la imposición al consumo, el NST cuenta con un impuesto de tipo valor
agregado (IVA) y un impuesto selectivo al consumo de ciertos bienes (IMESI).
La reforma derogó el COFIS (impuesto de tipo valor agregado que gravaba solamente la
circulación interna y la importación de bienes).
Este impuesto coexistía con el IVA, donde este último asimismo gravaba al propio
COFIS, por lo cual su derogación tiene impacto también en el IVA.
En lo que respecta al IVA, se redujeron las alícuotas del impuesto de acuerdo al
siguiente detalle:
STA NST
Tasa básica 23% 22%
Tasa mínima 14% 10%
Si se considera además de las reducciones en las alícuotas del IVA, la derogación del
COFIS, podemos resumir que para las circulaciones de bienes los efectos en la
tributación al valor agregado fueron los siguientes:
STA
NST Var
Tasa básica 26,7% 22% -4,7%
Tasa mínima 17,4% 10% -7,4%
Asimismo, se eliminaron ciertos gastos tributarios (exoneraciones de bienes y servicios
tales como tabacos y cigarrillos, agua corriente, servicios de salud, entre otros) de modo
de ampliar la base del impuesto.
19
Por último en el contexto del enfoque dinámico de la responsabilidad fiscal el P.E. se
obligó a continuar reduciendo la alícuota básica del IVA hasta llegar al 20%.
De este modo se pretende continuar en avanzando en la tendencia de reducir la
importancia relativa de los impuestos indirectos en la estructura tributaria.
b) Imposición a las Rentas
El STA tenía un número muy alto de impuestos que gravaban las rentas, y
concomitantemente con esto, presentaba múltiples rentas sin gravar por tributo alguno.
Es así que las rentas derivadas del factor trabajo solamente estaban gravadas si eran
percibidas por trabajadores dependientes, pero no se gravaban si se obtenían fuera de la
relación de dependencia.
Por otra parte, tampoco se gravaban las rentas derivadas del factor capital10.
En síntesis, era un sistema con muchos impuestos que gravaban las rentas, pero con
muchas rentas sin gravar.
Tal situación paradojal violentaba los principios de eficiencia y de equidad.
El NST se propuso reducir la cantidad de impuestos que graven las rentas, y en forma
paralela lograr que todas las rentas queden gravadas por algún tipo de imposición.
Luego de la reforma la imposición a las rentas quedo conformada por tres grandes
impuestos11:
- Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas (IRPF)
Tal como ya se señaló, en Uruguay desde el año 1974 no existía un impuesto que
gravara en forma global las rentas obtenidas por las personas físicas.
En efecto, solamente pagaban impuesto a la renta personal (IRP) los trabajadores
dependientes y los jubilados, en una situación totalmente inequitativa.
Una de las consignas principales de la reforma era la implantación del IRPF, por
considerarlo como una de las herramientas que mejor contribuye a una mejor
distribución del ingreso, y por lo tanto constituye uno de los mayores desafíos de la
reforma.
De hecho desde el punto de vista simbólico constituyó el “buque insignia” de la
reforma.
10
Salvo las obtenidas bajo determinadas formas jurídicas: Sociedades Anónimas, en Comandita por
Acciones, entre otras.
11
En rigor, luego de la aprobación del IASS (como consecuencia de la sentencia de la SCJ, ya
comentada) el sistema de impuestos que gravan las rentas son cuatro. No obstante, en lo que tiene que ver
con el diseño del sistema, conceptualmente podemos manejar la idea de tres grandes impuestos que
gravan rentas, con un derivado.
20
Por ello, en el diseño del mismo se consideraron especialmente una serie de
circunstancias que podían afectar la correcta aplicación del mismo en tanto condicionan
la aplicación de un impuesto de esta naturaleza.
En primer lugar, se definió mantener el principio de fuente territorial como criterio de
asignación de potestad tributaria, por lo cual solamente las rentas de fuente uruguaya
quedarían comprendidas en el impuesto.
En segundo lugar, el gobierno en una decisión que excede el ámbito tributario, se
pronunció a favor del mantenimiento del secreto bancario, situación que por cierto
dificulta el accionar de la AT y en particular la aplicación del IRPF.
Por otra parte es importante señalar que se mantenía presente aun en la memoria de
quienes lo vivieron, la experiencia del IRPF anterior que si bien era desde el punto de
vista de la técnica tributaria muy bueno, había sido imposible de administrar por parte
de la AT por la complejidad del mismo.
Con el firme propósito que el impuesto tenga una presencia “significativa” en el sistema
y que pudiera “cohabitar” con las restricciones señaladas, se diseñó un impuesto
sencillo y de tipo “dual”.
La opción por un impuesto de este tipo se realizó con plena conciencia que se trataba de
un instrumento que en teoría contribuía menos a la equidad que un impuesto tradicional
sintético, pero también con la convicción que se trataba del único impuesto que podía
aplicarse satisfactoriamente en las actuales circunstancias.
Desde el propio documento de consulta pública se manifestó que se trataba de una
“gradual introducción del IRPF”, o de “un proceso de incorporación” del impuesto. Se
priorizó en el diseño la búsqueda de la equidad “efectiva” y no de una mera equidad
“teórica” que se derive de instrumentos técnicamente perfectos, pero que no reconocen
los límites que la realidad impone, y por lo tanto no trascienden al ámbito de la realidad,
tal como ocurre en muchos países de AL.
Al presentarse la reforma a la opinión pública, en particular sobre el IRPF se
manifestaba: “La incorporación del IRPF debe ser concebida como un proceso
gradual, que requerirá cambios profundos en la Administración Tributaria y también
en la propia sociedad, la que habrá de asumir una nueva cultura tributaria basada en
12
la solidaridad vinculada a la capacidad contributiva”.
Conforme a dicha línea estratégica, se consideró además que esta modalidad (dual) es
totalmente funcional al mantenimiento del secreto bancario, solucionándose
perfectamente su compatibilidad con dicho instituto con una simple retención en la
fuente (institución financiera) en la medida que las rentas financieras no están sujetas a
la progresividad de alícuotas.
12
“LINEAMIENTOS BÁSICOS PARA LA REFORMA TRIBUTARIA – DOCUMENTO DE
CONSULTA PÚBLICA”. Ministerio de Economía y Finanzas. ROU.
21
Por otra parte, esta modalidad de impuesto también permite una mayor sencillez y un
régimen de retenciones en la fuente productora de la renta, liberatorias para el
contribuyente, lo cual también fue especialmente considerado al momento de la
elección. De este modo se logró que quienes percibieran rentas de capital
exclusivamente y hubiesen sido retenidos, no tuvieran la obligación de presentar
declaración jurada del impuesto.
Por último, en el contexto de un impuesto que grava exclusivamente las rentas de fuente
uruguaya, con las posibilidades que los avances tecnológicos y de las comunicaciones
confieren, un gravamen progresivo de los rendimientos del capital podría llevar a una
rápida deslocalización de ciertas inversiones, situándolas en países que no graven este
tipo de rentas. Por eso también se entendió que el modelo dual con una tasa flat
razonable era apropiado en esta etapa para asegurar que no habría una “corrida” de
inversiones financieras al exterior del país.
Respecto al modelo dual adoptado, Uruguay se apartó en el diseño del modelo
tradicional dual (nórdico), donde la alícuota marginal inferior de las rentas del trabajo se
alinea con la alícuota proporcional (flat) que grava las rentas del capital y la que grava
las rentas empresariales.
Uruguay, a diferencia de los países nórdicos, alineó13 la alícuota marginal inferior de las
rentas del trabajo con la alícuota proporcional del capital, mientras que la alícuota que
grava las rentas empresariales se encuentra alineada con la alícuota marginal superior de
las rentas del trabajo.
De este modo, tal como lo explican Barreix y Roca14 se evitan arbitrajes por parte de los
perceptores de rentas de capital pretendiendo re categorizar sus rentas como
empresariales.
- Impuesto a las Rentas de los no Residentes (IRNR)
Este impuesto grava las rentas de fuente uruguaya obtenidas por entidades (personas
físicas o jurídicas) no residentes, que no actúen en el país mediante establecimiento
permanente.
A efectos de una correcta delimitación del aspecto subjetivo de los impuestos que
gravan las rentas, se estableció a nivel legal definiciones de residencia fiscal y de
establecimiento permanente acordes a las tendencias internacionales en la materia.
- Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas (IRAE)
Se trata de un impuesto que grava la renta neta de fuente uruguaya.
13
En rigor no se trata de una alineación perfecta, la alícuota que grava las rentas del capital es del 12%,
mientras que la alícuota marginal inferior de las rentas del trabajo es 10%.
14
Ver Revista de la CEPAL N. 92 (Agosto 2007) “Reforzando un pilar fiscal: el impuesto a la renta dual
a la uruguaya” - Alberto Barreix y Jerónimo Roca
22
Este impuesto vino a reemplazar básicamente al Impuesto a las Rentas de la Industria y
Comercio (IRIC) y al Impuesto a las Rentas Agropecuarias (IRA) y a otros impuestos
menores, manteniendo en términos generales la lógica de los dos impuestos
mencionados en primer lugar, con algunos ajustes que se comentarán en forma muy
breve:
- reducción de alícuotas
Tanto el IRIC como el IRA presentaban una alícuota proporcional del 30%. El nuevo
impuesto se definió con una alícuota del 25%.
Con esta reducción se pretendió promover la inversión con un estímulo de cinco puntos
porcentuales que actúan como un incentivo general que actúa adicionalmente a los
incentivos específicos a determinadas actividades o sectores.
- nuevas rentas gravadas
Tal como se había explicado anteriormente, el STA no gravaba la totalidad de las rentas
generadas.
Con la aparición del IRAE se gravaron la totalidad de las rentas obtenidas por las
sociedades comerciales.
Con esta ampliación de la base se logra una situación de mayor equidad horizontal,
porque ahora todas las rentas quedan gravadas, con independencia de quien sea el
perceptor de la misma.
- mayor plazo de arrastre de pérdidas
Los impuestos preexistentes (IRA e IRIC) preveían un mecanismo de arrastre de
pérdidas (“carry forward”) que se extendía por un plazo de tres años.
En el IRAE dicho período se extiende a un plazo de cinco años.
Esta medida también pretende ser un elemento que promueva la inversión productiva.
- modificación en el régimen de exoneración por inversiones
El régimen de exoneración por inversiones estaba vigente desde el año 1987,
consistiendo en un beneficio que se otorga a las empresas que invierten en ciertos bienes
que puede llegar - según las circunstancias – hasta una deducción en la base del
impuesto del 40% del valor de los activos adquiridos.
Este beneficio operaba solamente en el año de incorporación de los bienes referidos, y
solamente podía ser utilizado si la empresa tenía rentas fiscales de donde deducir el
beneficio. Esto implicaba que en el caso de nuevos emprendimientos, sobretodo
aquellos de lenta maduración, el beneficio no era aplicable porque la empresa
comenzaba a generar rentas positivas en ejercicios futuros al que se realizó la inversión.
23
La reforma estableció la posibilidad de arrastre del beneficio hasta los tres ejercicios
siguientes al que se efectuó la exoneración.
- beneficios por la generación de mayor masa salarial
Se estableció un beneficio en el impuesto a la renta empresarial para aquellas empresas
que aumenten la masa salarial en términos reales si a la vez aumentan también la
cantidad de puestos de trabajo.
c) aportes patronales a la seguridad social
Respecto a las contribuciones especiales de la seguridad social, en lo atinente a los
aportes patronales, se eliminaron asimetrías sectoriales tanto a nivel del sector público
como del sector privado, promoviendo de este modo una mayor equidad horizontal y
por otra parte un estímulo a los sectores que ocupan mayor cantidad de mano de obra,
dado que les significó una reducción importante.
En consecuencia se aplicó una alícuota única a todos los sectores del 7,5%
9. Algunas reflexiones sobre el NST, luego de transcurrido más de un año de su
vigencia
El NST comenzó a regir el 1 de julio de 2007, a la fecha aún no se cuenta con los datos
de un ejercicio fiscal entero con dicha vigencia, por lo cual se considera prematuro
poder realizar evaluaciones categóricas en relación al mismo.
Por lo tanto nos limitaremos a realizar algunos comentarios primarios respecto a los
aspectos más evidentes que surgen de cotejar los primeros datos (parciales) obtenidos.
En primer lugar se entiende necesario señalar que la evaluación del NST se debe
realizar tomando como referencia al STA y no en relación a un sistema tributario ideal.
Esta precisión no constituye un tema menor, dado que se alinea a la pretensión ya
manifestada anteriormente de constituir un sistema “administrable”, por lo tanto no debe
implicar en absoluto una relativización de los logros, ni una modestia excesiva en la
delineación de los objetivos, sino un simple baño de realismo.
En efecto, ya se señaló que una de las razones de los fracasos de las reformas en nuestro
país y en América Latina en general, era precisamente definir estructuras teóricamente
“ideales” pero que en la práctica no reconocían las restricciones que la realidad imponía.
En otras palabras, considerando que constituye un proceso, lo importante es el rumbo
adoptado, no se debe considerar que se trate del estadio final.
Por lo tanto la evaluación deberá considerar si el NST constituye un avance respecto del
STA y si las modificaciones “tienden” o van en dirección hacia un sistema definido
como “ideal”.
24
Teniendo presente lo anterior, la Asesoría Económica de la Dirección General
Impositiva a efectos de evaluar el impacto de la reforma, realizó una serie de estudios
que arrojaron los resultados que se exponen a continuación.
En lo que tiene que ver con la estructura tributaria, se verificó un incremento
(moderado) de la participación de los impuestos directos respecto de los indirectos.
Esta evolución es consistente con lo proyectado en ocasión del diseño del nuevo
sistema, tal como puede apreciarse en el cuadro 7.
Cuadro 7
Evolución de la composición de la estructura tributaria
Impuestos Indirectos
Impuestos Directos
Estructura Anterior
71%
29%
Proyectado NST
68%
32%
Observado Ago07-Jul08
68%
32%
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
Otro aspecto relevante es ver como evolucionó la presión impositiva con el NST.
Cabe recordar que la reforma se fundamentó básicamente en mejorar la composición de
la estructura tributaria, pero no para recaudar más.
Cuadro 8
Evolución de la composición de la presión impositiva
Presión impositiva
STA
18.69%
NST
18.59%
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
Las cifras expuestas en el Cuadro 8 demuestran claramente que la presión no solo no
creció, sino que además se redujo en 0,1%.
Es importante señalar que dicho Cuadro indica la evolución de la presión impositiva sin
considerar el efecto que sobre la recaudación tiene el crecimiento de la economía
(estamos ante una elasticidad Recaudación Producto mayor a la unidad) y por otra parte
tampoco se toma en cuenta el aumento del índice de eficiencia de la DGI15.
En particular, interesa destacar que si se consideran las circunstancias anteriormente
señaladas (aumento del PIB y de la eficiencia de la Administración Tributaria), se
15
Ver: http://www.dgi.gub.uy/wdgi/hgxpp001?6,4,150,O,S,0,MNU;E;14;7;MNU;, se trata de un índice
que pretende medir como contribuye la mejora de gestión de la DGI en la recaudación.
25
concluye sin mayor hesitación que el NST no fue diseñado para obtener una mayor
recaudación.
A efectos de ilustrar mejor lo dicho en el Cuadro 9 se exponen los efectos en la
recaudación de las modificaciones introducidas por el NST considerando el efecto de la
variación del PIB.
Cuadro 9
Impacto en la recaudación de los cambios propuestos (en porcentaje del PIB)
Modificaciones
Pérdida
efectiva
ago07-jul08
Ganancia
efectiva
ago07-jul08
Impuestos eliminados
IRIC
0,37%
IRP
1,46%
COFIS
0,61%
IMABA
0,17%
IMESSA
0,13%
Impto. a las Comisiones
0,10%
ITEL
0,11%
ICOSIFI
0,02%
Impto. a las Tarjetas de Crédito
0,02%
Impto. a las Vtas. Forzadas
0,01%
ICOME (derogado en set-07)
0,09%
Subtotal
3,09%
Impuestos modificados
Reducción de tasa básica IVA
0,45%
Reducción de tasa mínima IVA
0,20%
Eliminación del COFIS como base del IVA
Cambio en la tributación del IMESI
cigarrillos
0,14%
"IMESI de frontera"
0,01%
Reducción de tasas en el IMEBA
0,11%
0,03%
Extensión de la base de IVA t.b.
0,16%
Extensión de la base de IVA t.m.
0,08%
Subtotal
0,94%
0,24%
Impuestos incorporados
IRAE
0,11%
IRNR
0,16%
IRPF Categoría I
0,26%
IRPF Categoría II
2,00%
Subtotal
2,53%
TOTAL
4,03%
2,77%
Déficit
1,26%
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
26
Del Cuadro anterior se puede observar que en rigor la presión impositiva como
consecuencia de la reforma tributaria disminuyó en 1,26%
Esto era particularmente interesante de señalar, debido a que como consecuencia de las
experiencias anteriores de reformas (con la lógica del ajuste fiscal permanente) donde
siempre significaban un aumento de la presión, existía la “sospecha” de parte de varios
sectores, que luego de cerrado el primer ejercicio se iba a verificar un aumento de la
presión.
De los cuadros 7, 8 y 9 puede deducirse entonces que efectivamente la reforma no se
implementó con un enfoque cuantitativo, sino cualitativo, es decir no fue para recaudar
más, sino para recaudar de forma más equitativa.
Respecto a la distribución de la carga impositiva en los hogares ordenados por deciles,
se verifica la siguiente evolución como consecuencia del pasaje de un sistema al otro.
Cuadro 10
Distribución de carga tributaria ordenada por deciles
Decil de hogares ordenados por
ingreso per cápita
Situación STA*
Situación NST**
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
Total
3,7%
5,2%
6,1%
7,1%
7,4%
8,4%
9,8%
11,8%
15,2%
25,3%
100,0%
2,8%
4,0%
4,6%
5,4%
5,8%
6,8%
8,5%
10,8%
15,8%
35,5%
100,0%
* IRP, IVA y COFIS
** IRPF e IVA (reformado)
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
De lo anterior surge claramente que en términos de ganadores y perdedores, los ocho
primeros deciles “ganan” con el cambio del sistema.
Resulta significativo que los dos deciles más altos (9º y 10º) pasan de una participación
del 40,5% al 51,3%, lo que representa un incremento del 26,67%.
Y si nos detenemos en el último decil, el incremento de la participación es aún mayor
(40.31%), lo cual denota el efecto distributivo.
Ahora, si se analiza la carga impositiva en los ingresos de las familias (Cuadro 10), se
visualiza nuevamente que los ocho primeros deciles resultan “ganadores” en el pasaje
27
del STA al NST, mientras que nuevamente los deciles más altos (9º y 10º) ven
sensiblemente incrementada su carga tributaria, que pasa de un 26.7% a un 32.1%,
aumentando por lo tanto un 20.22%
Una vez más se puede señalar que el incremento se potencia sensiblemente si se analiza
lo que ocurre con el último decil que pasa del 12,8% al 17,8% (un incremento del 39%).
Todo esto mientras que en el primer decil la carga tributaria disminuye más de un 25%
como consecuencia de la entrada en vigencia del NST.
Cuadro 11
Carga tributaria sobre ingresos ordenada por deciles
Decil de hogares ordenados por
ingreso per cápita
Situación STA*
Situación NST**
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
Total
13,5%
13,8%
13,8%
13,7%
13,3%
13,1%
13,7%
13,8%
13,9%
12,8%
13,4%
10,1%
10,3%
10,3%
10,3%
10,3%
10,5%
11,7%
12,5%
14,3%
17,8%
13,3%
* IRP, IVA y COFIS
** IRPF e IVA (reformado)
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
Por último, también se pretendió analizar el impacto del Nuevo Sistema Tributario en la
distribución del ingreso viendo la evolución del índice de Gini como consecuencia de la
reforma tributaria.
Para ello, se comparó el índice antes y después de impuestos bajo los efectos del STA y
del NST.
Es preciso señalar que se trata de un Gini “doméstico16” que se construyó en base a los
datos relevados de la encuesta de hogares y de consumo con los datos consolidados por
decil, a los solos efectos de analizar las consecuencias de la acción del sistema tributario
antes y después de la reforma.
16
Elaborado en la Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva a estos efectos. Si bien se
podría identificar a otros indicadores como mejores indicadores del efecto distributivo, se optó por este
índice por ser el más simple en cuanto a su cálculo.
28
Por lo tanto más importante que observar el valor absoluto del índice, resulta analizar la
evolución del mismo como consecuencia de la aplicación práctica de la política
tributaria.
En los cuadros siguientes se exponen los valores obtenidos en dichas estimaciones:
Cuadro 12
Índice de GINI (antes de impuestos) ordenado por deciles
decil de hogares ordenados por
ingreso per cápita
distribución de ingresos antes de impuestos %
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
índice de Gini
1,8
3,2
4,3
5,4
6,6
7,9
9,6
12,1
16,4
32,8
0,4238
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
Cuadro 13
Índice de GINI (después de impuestos) STA
STA
decil de hogares ordenados
por ingreso per cápita
(IVA + COFIS) / ingreso %
IRP / ingreso %
(IVA+COFIS+IRP) / ingreso %
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
índice de Gini
variación
14,5
12,0
10,8
9,9
9,4
8,6
8,5
8,1
7,6
6,3
0,4328
2,14%
0,2
0,7
0,8
1,0
1,1
1,3
1,4
1,7
2,1
2,3
0,4209
-0,68%
14,7
12,7
11,6
10,9
10,5
9,9
9,9
9,8
9,7
8,6
0,4298
1,43%
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
29
Cuadro 14
Índice de GINI (después de impuestos) NST
NST
decil de hogares ordenados
por ingreso per cápita
distribución de ingresos
antes de impuestos %
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
índice de Gini
variación
1,8
3,2
4,3
5,4
6,6
7,9
9,6
12,1
16,4
32,8
0,4238
IVA / ingreso %
IRPF / ingreso %
(IVA+IRPF) /
ingreso %
11,2
9,5
8,6
7,9
7,4
6,9
6,9
6,6
6,2
5,2
0,4305
1,59%
0,1
0,1
0,2
0,3
0,5
0,8
1,1
1,8
3,0
6,6
0,4124
-2,69%
11,3
9,6
8,8
8,2
8,0
7,7
8,1
8,4
9,2
11,8
0,4185
-1,25%
Fuente: Asesoría Económica de la Dirección General Impositiva
Un aspecto interesante que se puede deducir de los valores reseñados es que el
desempeño del índice post impuestos mejoró en el NST no solo por la introducción del
IRPF, sino que también las modificaciones introducidas en la imposición al consumo
implicaron que la imposición al valor agregado tenga un efecto menos regresivo que el
que presentaba en el STA.
En efecto, en el Cuadro 13 puede observarse que en el STA el GINI después de la
imposición al valor agregado crecía (“empeoraba”) 2.14%, mientras que el GINI
después de aplicar el IVA en el NST solo crece un 1.59% (Cuadro 14).
Asimismo, el GINI luego de aplicar el IRP (STA) disminuía 0.68 % (Cuadro 13), en
tanto en el NST (Cuadro 14) el GINI mejora 2.69% luego de aplicar el IRPF.
- La reforma tributaria y los niveles de pobreza
Si bien es cierto que el NST nunca se propuso como objetivo central reducir los niveles
de pobreza, es necesario realizar algunos comentarios al respecto en ocasión de analizar
los efectos distributivos del mismo.
En ese sentido, es necesario señalar que la reforma tributaria no tuvo un impacto
relevante en términos de pobreza.
¿Por qué el NST no impactó en esta materia?
Básicamente podemos identificar un par de motivos.
Previo a la identificación de estas razones, resulta oportuno indicar cual es la realidad
del Uruguay en esta materia. En nuestro país, la población que se encuentra por debajo
30
de la línea de pobreza pertenece al primer quintil (el 20% con menores ingresos),
representando algo más del 20% de la población.
El primer motivo entonces, está vinculado a que en este sector de la población los
niveles de informalidad son significativamente más altos que en el resto de la población.
Informalidad que se refleja tanto a nivel laboral (no pagaban impuesto a la renta del
trabajo ni antes ni luego de la reforma), pero también en términos de los lugares de
abastecimiento de bienes (niveles muy altos de evasión de imposición al consumo).
Por lo tanto el impacto de los efectos en los cambios impositivos no afectan a quienes
no pagan impuestos.
El segundo motivo, resulta de que aún aquellos trabajadores pobres que se encuentren
en el mercado laboral formal, dado lo exiguo de sus ingresos, ya no pagaban el
impuesto a la renta al trabajo anterior a la reforma, y tampoco pagan el IRPF, con lo
cual este cambio tampoco los afecta.
Por lo tanto, el impacto en esta materia es prácticamente imperceptible, afectando
solamente a sectores muy reducidos de la población, en hogares en los cuales previo a la
reforma se encontraban muy cerca de la línea de pobreza (por debajo), y los cambios
impositivos les permitieron salir de dicha situación.
Por último, a manera de síntesis, podemos señalar que el NST tiene un impacto
distributivo moderado si lo comparamos con los sistemas tributarios vigentes en el
mundo desarrollado.
No obstante, es importante recordar que en la comparación con el STA la “ganancia” en
esta materia es muy importante debido a la regresividad del régimen anterior.
10. Otros aspectos a considerar en futuras etapas del proceso
En el marco del mantenimiento de la visión estratégica definida, seguramente se irán
efectuando ajustes que permitan una mayor profundización del efecto redistributivo del
sistema, a través de modificaciones en la estructura.
A efectos de poder seguir avanzando hacia un sistema más equitativo, importa destacar
que a nuestro juicio será necesario encarar en el futuro las siguientes líneas de trabajo:
-
continuar avanzando en el proceso de implantación del IRPF
incluir el secreto bancario dentro del secreto tributario
creación de tribunales jurisdiccionales especializados en la materia tributaria
profundización de la autonomía de la Administración Tributaria
31
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