EL APORTE DE LOS FILÓSOFOS GRIEGOS EN LA FORMACIÓN DE LA IDEA DE DERECHO POR. OSCAR PAUL ALVARADO CORNEJO JUEZ (P) MIXTO PERMANENTE DE TUMBES. Debemos a los sofistas griegos el haber puesto al hombre como centro de la especulación racional. Estos científicos de la edad antigua no sólo pensaban que el uso adecuado de la retórica podía servir para justificar y obtener cualquier acción práctica sino que tenían una concepción de la vida al margen de cualquier valor absoluto: para ellos no existía la verdad absoluta, el bien absoluto, ni la justicia absoluta, sino “mi” verdad, “mi” bien, “mi” justicia”. Esa manera de entender las cosas hacía disoluta la vida en común, dado que se cuestiona la posibilidad de principios universales del entendimiento humano. Sócrates -filósofo rival de los sofistas- nos enseña que la especulación racional tiene una base moral, y que si es posible tener la mejor definición de lo que la cosa es, mediante el uso de diálogos con argumentos opuestos y pertinentes. De ahí que el argumento en contrario del interlocutor no lo posiciona como si fuese nuestro enemigo, sino un amigo que nos ayuda a encontrar la verdad; la mejor definición de la cosa. Esa aptitud une a la ciencia con la democracia, y plantea la posibilidad de que sobre la misma cosa existan diversas opiniones. Pero a diferencia de los Sofistas, Sócrates cree en la virtud, como valor absoluto, al que se tiene acceso por medio de la razón. porque el sistema de justicia de la polis griega, causó Platón, desilusionado la muerte de su maestro Sócrates, como consecuencia de la acusación que le hiciera Meleto (poeta griego que lo acuso de pervertir la conciencia de los jóvenes y de divulgar falsas doctrinas sobre los dioses griegos), en aptitud de discordia con los Sofistas, se dedicó a demostrar que la “verdad absoluta” sí existe, e inventó su teoría de la ideas. Dijo que las cosas son, existen, en la medida que participan en ellas las ideas correspondientes. A partir de un mundo de verdades aparentes y de verdades absolutas, de un mundo dual, dijo que, con la verdad aparente no se puede sostener válidamente nada, porque el destino de esta verdad es perecer. Un mundo de ideas absolutas lleva a Platón a sostener que aquellos mejores dotados para conocerlas, serán los que están mejores dotados para gobernar a todos. De ahí obtuvo como conclusión que corresponde a los filósofos gobernar la polis griega. Posteriormente se dio cuenta, por su experiencia con el emperador Dionisio de Siracusa, que no era posible conseguir el “arte regio” en los gobernantes, en cuyo caso es necesario ponerle límites a sus pasiones en el gobierno. Platón propuso que la “ley” sea no sólo un instrumento de educación de los ciudadanos sino un “limite” a la “hibrys” del gobernante. Un límite al ejercicio del poder. El Estado Bienestar de Platón es un Estado ético porque aspira a hacer eficaz la virtud. Aristóteles, cree que la afirmación de su maestro de que las cosas son en la medida que participa de el la idea, es una metáfora vacía que no explica nada. La esencia de las cosas, según Aristóteles está dentro de ella, no es una idea que la trasciende. Aristóteles tiene que explicar como problema relevante porqué las cosas cambian, y la respuesta que se da es el invento de la categoría del “ser en potencia” y del “ser en acto”; así, el movimiento es el paso del ser en potencia al ser en acto. Un pedazo de madera es por ejemplo un ser en potencia, y una mesa es un ser en acto. Lo que la madera es, es su causa material, la forma que adopta la madera es su acusa formal, el trabajo del carpintero es la causa eficiente, y el para qué sirve la mesa es su causa final. Aristóteles demuestra, en su ética a nicómaco –libro V- que el arte específico del derecho es la justicia conmutativa. Para Aristóteles la justicia conmutativa no es un ideal metafísico, sino una acción correctiva que repara un desequilibrio que contiene el problema humano. La respuesta a la pregunta: ¿porqué se debe obedecer la ley?; la encontramos en Sócrates. La respuesta a la pregunta: ¿cuál es el sentido de la democracia como sistema de gobierno?; la encontramos en Platón. Y la respuesta a la pregunta: ¿cuál es el arte específico del derecho?; la encontramos en Aristóteles. De ahí, nos vienes otras cosas, como por ejemplo la idea de proceso judicial como debate argumentativo, público, oral,… entre las partes, sobre ciertas pretensiones. Además, queda en pie la duda para saber si el acceso a la verdad supone la existencia de alguna entidad oculta que le da existencia o no. La duda para saber si la vieja querella entre filósofos y sofistas aun se mantiene, con otros nombres y carteles, … ¡todo esto es muy interesante …!. El doctor Oscar Paúl Alvarado Cornejo, desarrollando su conferencia, el día 4 de mayo del 2,011, en el Auditórium de nuestra Corte Superior de Justicia de Tumbes, con la elocuencia de un buen orador, no solo nos ha demostrado, al exponer las cosas en la forma que lo decimos, que domina estos temas, y que además, las ideas de los filósofos griegos aun son útiles a la práctica forense y a la práctica política, y de algún modo guían nuestra vida, sino, en cierto sentido cuales son las bases de la racionalidad occidental. Fue sumamente ilustrativo su discurso y la Corte celebra su aniversario, mostrando la fortaleza espiritual que tiene en su vitrina. En honra buena.