CONTEXTO HISTORICO SOCIOCULTURAL Y FILOSOFICO Santo Tomás nació en Roccaseca en el siglo XIII. A los 20 años ingresó en la orden de los dominicos y su maestro Alberto Magno le influyó a la hora de adoptar la filosofÃ-a de Aristóteles como modelo. Entre sus obras más importantes están summa theologica y suma contra gentiles. Aunque pertenece al siglo XIII cabe remontarse a las circunstancias sociopolÃ-ticas del siglo XII. Durante esta época el sistema feudal comenzó a decaer como consecuencia del ascenso de la burguesÃ-a y el resurgimiento de las ciudades. Las circunstancias que determinaron este resurgimiento fueron: el inicio del comercio con Oriente y el aumento de la demanda de productos manufacturados por parte del sistema feudal. Las ciudades pasaron a ser centros de distribución. En cuanto al ámbito cultural, durante el siglo XII surgieron las primeras universidades. La vida en la universidad se incrementó con las traducciones de las obras de Aristóteles y de los principales filósofos árabes (Avicena). A partir de la reconquista de Toledo, se crea la escuela de traductores de Toledo El sistema filosófico de Santo Tomás de Aquino se configuro con polémica con el agustinismo, la filosofÃ-a árabe y judÃ-a y el pensamiento aristotélico. La filosofÃ-a cristiana medieval recibe el nombre de escolástica. Durante el siglo IX se llamó scholasticus al maestro en las artes liberales compuestas por el trivium y el quadrium. Después se aplica al maestro en filosofÃ-a y teologÃ-a en las escuelas. La escolástica englobaba una diversidad de corrientes. Uno de los temas tratados en la escolástica es el problema de los universales. Los universales son reales, se revaloriza la razón que los tiene por objeto; si lo único que existe son seres singulares, entonces los universales son palabras y la vÃ-a racional se infravalora. Las respuestas a este tema son: el realismo exagerado, que es la doctrina de los que entienden que los universales son reales; el nominalismo, que defiende que los universales son solo palabras. En cuanto al agustinismo, mantiene vigentes las doctrinas agustinianas de la iluminación, el dualismo, la primacÃ-a de la voluntad divina y la Ã-ntima relación de filosofÃ-a y teologÃ-a. La filosofÃ-a agustiniana aceptó el argumento ontológico sobre la existencia de Dios propuesto por San Anselmo. Este argumento se puede describir asÃ-: todos (incluso los ateos) entienden por Dios un ser mayor que cualquier otro que se pueda pensar; este ser mayor tiene que existir, porque de lo contrario no serÃ-a el mayor concebible (se podrÃ-a concebir otro mayor), luego dios existe. Santo Tomás rechazó este argumento porque entiende que de la definición de una idea no puede extraerse su realidad. Antes del siglo IX las ciencias y la filosofÃ-a árabe y judÃ-a y sobre todo musulmana, estaban mucho mas avanzadas que la cristiana. Los dos filósofos más influyentes fueron Avicena y Averroes. La difusión del pensamiento aristotélico en occidente, pasó por distintas etapas. Santo Tomás empezó a enseñar y habÃ-a dos posturas ante Aristóteles: la de los averroÃ-stas latinos, que, entendiendo que la doctrina aristotélica es la mejor explicación disponible sobre el mundo, consideraban que podÃ-an defenderse tesis que fueran verdaderas en filosofÃ-a pero no en teologÃ-a; y las prohibiciones de leer a Aristóteles en la universidad de ParÃ-s. Franciscanos y dominicos manifestaban sus reservas con las obras de Aristóteles acrecentadas con las interpretaciones de los averroÃ-stas. El agustinismo de los franciscanos insistÃ-a en que la sabidurÃ-a cristiana estaba perdiendo terreno ante una excesiva atención a la sabidurÃ-a mundana de Aristóteles, sin embargo, los franciscanos impulsaron los estudios sobre filosofÃ-a natural. El dominico Alberto Magno quiso recuperar todo el sistema filosófico de Aristóteles. PENSAMIENTO DE SANTO TOMAS 1 Santo Tomás es un filósofo del sigo XIII cuyas dos obras principales son summa theologica y suma contra gentiles. Su objetivo fue conciliar la doctrina cristiana y la aristotélica respecto a otras posiciones. Santo Tomás criticó a los mÃ-sticos, a los dialécticos y a los defensores de la doctrina de la doble verdad. Santo Tomás realizo además una distinción entre filosofÃ-a y teologÃ-a. Dios ha creado al hombre como ser racional queriendo que use la razón para llegar a la verdad. Solo la razón puede avalar las verdades filosóficas. Las verdades que defendió de la teologÃ-a tienen su origen en la fe en Dios. Santo Tomás defendió una distinción entre filosofÃ-a y teologÃ-a, dado que su distinto origen implicaba distinta perspectiva. A diferencia de San AgustÃ-n, Santo Tomás diferencia razón y fe. La filosofÃ-a ayuda a la teologÃ-a porque demuestra que Dios existe y que es sabio y veraz. Por su parte, la teologÃ-a ayudó a la filosofÃ-a porque abre horizontes de conocimiento insospechables para la razón. Santo Tomás trató otro de los temas propios de la escolástica: la necesidad de demostrar la existencia de Dios. La existencia de Dios es evidente por si misma, pero no es evidente para nosotros. Debido a esto, es necesario demostrar su existencia. En palabras de Santo Tomás Dios existe, es evidente para mi fe, pero no para mi razón. Para demostrar la existencia de Dios, recurre a las cinco vÃ-as: La primera, llamada del movimiento: de influencia aristotélica, defiende que hay cosas que se mueven. Todo aquello que se mueve es movido por algo. Como conclusión hay un primer motor: Dios. La segunda, la de la causalidad, influenciada por Aristóteles, propone que las cosas concretas que causan y que toda causa es a su vez causada. De esto se deduce que hay una primera causa: Dios La tercera vÃ-a, la de la contingencia, influida por el cristianismo primitivo, dice que hay seres contingentes (que nacen y perecen). Esos seres contingentes exigen otro para existir. Concluyendo, hay un ser necesario: Dios. La cuarta vÃ-a, denominada la de los grados de perfección, de influencia platónica defiende que hay cosas más o menos perfectas: los grados de perfección suponen la existencia de un máximo. El único ser sumamente perfecto es Dios. La quinta y última vÃ-a, la de la finalidad, de influencia presocrática (Heráclito) dice que los seres inertes actúan siempre o casi siempre igual. Exigen una inteligencia que les gobierne. No existe proceso al infinito en la serie de inteligentes y el ser sumamente inteligente es Dios. Una vez demostrada la existencia de Dios, Santo Tomás nos explica sus atributos y el modo de dirigirnos a él. Emplea las vÃ-as de negación y eminencia. Santo Tomás explica también la diferencia entre naturaleza humana y divina. La primera es contingente y la segunda es necesaria. Para explicar estos conceptos recurre a la esencia y la existencia. La esencia son los casos por definición y la existencia son los que de hecho, ya son, Santo Tomás dice esencia es en potencia lo que existencia es en acto. En Dios esencia y existencia se identifican puesto que la existencia va incluida en la propia definición de Dios. En el hombre ambos son diferentes puesto que la existencia humana viene dada por Dios y no depende de la esencia. De esto Santo Tomás extrae la esencia de un ser (materia y forma). Está en potencia respecto al acto de existir. Si no tienen la existencia por si mismos, los seres vivos necesitan de Dios para pasar de la potencia al acto de existir. De aquÃ- Santo Tomás introduce el concepto de la contingencia radical de los seres creados: 2 pueden ser, no ser, nacer y perecer. Por otra parte se presenta la pregunta de la relación existente entre las criaturas y el creador. Los seres creados por Dios (entes) participan por analogÃ-a de él que es necesario, simple, inmutable e infinito; las criaturas son contingentes, compuestas, mutables y finitas. Santo Tomás muestra influencia platónica al identificar la participación de las criaturas del ser de Dios. Sin embargo, Santo Tomás no acepta que el cuerpo y el alma fueran dos sustancias unidas accidentalmente como dijo Platón. Rechazó el dualismo platónico y defendió el hilemorfismo aristotélico. El ser humano es una sola sustancia compuesta de cuerpo y alma. De Aristóteles también hereda la teorÃ-a de la abstracción. Santo Tomás comprendió que el entendimiento agente es inmaterial e individual. Por ello afirmó la inmortalidad del alma, porque el entendimiento es una función del alma. Aunque el alma está hecha naturalmente para estar unida al cuerpo, cuando muere no puede seguirle por su carácter inmaterial. En cuanto a la ética, entendió que el fin último del hombre es la felicidad y esto se alcanza con la contemplación de Dios. Por ello añade una nueva perspectiva a la ley natural: coincide con las inclinaciones naturales del hombre y participa de la ley eterna. Esas inclinaciones incluyeron la conservación de la vida, la procreación y educación de los hijos y el precepto social. Son preceptos evidentes, universales e inmutables. Como Aristóteles, Santo Tomás cree que el hombre es por naturaleza un ser polÃ-tico. Sin embargo advierte de los peligros de que la monarquÃ-a se convierta en tiranÃ-a y defiende que el Estado debe estar subordinado a la iglesia para que éste dirija a la humanidad hacia dios 3