El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Extract of MUNDO CULTURAL HISPANO http://mundoculturalhispano.com/spip.php?article13730 España El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe - PSICOLOGÍA - Publication date: Miércoles 23 de marzo de 2011 Description: El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO - Todos derechos reservados Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 1/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe <!--[if gte mso 9]> <w:WordDocument> <w:View>Normal</w:View> <w:Zoom>0</w:Zoom> <w:HyphenationZone>21 </w:HyphenationZone> <w:PunctuationKerning /> <w:ValidateAgainstSchemas /> <w:SaveIfXMLInvalid>false </w:SaveIfXMLInvalid> <w:IgnoreMixedContent>false</w:IgnoreMixedContent> <w:AlwaysShowPlaceholderText> false</w:AlwaysShowPlaceholderText> <w:Compatibility> <w:BreakWrappedTables /> <w:SnapToGridInCell /> <w:WrapTextWithPunct /> <w:UseAsianBreakRules /> <w:DontGrowAutofit /> </w:Compatibility> <w:BrowserLevel> MicrosoftInternetExplorer4</w:BrowserLevel> </w:WordDocument> <![endif]--»<!--[if gte mso 9]> <w:LatentStyles DefLockedState="false" LatentStyleCount="156"> </w:LatentStyles> <![endif]--»<!--[if !mso]> <![endif]--»<!--[if gte mso 10]> <![endif]--»<!--[if gte mso 9]> <o:shapedefaults v:ext="edit" spidmax="1026" /> <![endif]--»<!--[if gte mso 9]> <o:shapelayout v:ext="edit"> <o:idmap v:ext="edit" data="1" /> </o:shapelayout><![endif]--» SOPEÑA BALORDI, A.Emma (2010)"El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe". In: Genius and Psychosis in Edgar Allan Poe: New Interdisciplinary Perspectives. Estévez, N. et al. (eds.) Universitat de València, Servei de Publicacions. pp.163-173. ISBN: 978-84-694-0751-6 Resumen El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe El objetivo del perfil criminológico es delimitar las caracterÃ-sticas de la personalidad del criminal focalizando las posibilidades de investigación. Nuestro trabajo se basa en el análisis del discurso de los narradores criminales de cuatro cuentos de Poe. En ellos estudiaremos las escenas de los crÃ-menes, el modus operandi, las firmas o motivos de los crÃ-menes, la victimologÃ-a y la selección discursiva de los narradores. La personalidad psicópata comete acciones criminales sin experimentar sentimiento de culpa; incapaz de experimentar emociones, se excita con el riesgo, no admite normas y presenta rasgos de impulsividad, irresponsabilidad e irritabilidad, capacidad de seducción y manipulación. Palabras clave: perfil criminal, discurso del criminal, personalidad psicópata Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 2/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Criminal profiling in four stories by Poe The aim of criminal profiling is to establish the features of a perpetrator’s psychology in order to zero in on the possibilities of the investigation. This paper analyses the discourse of criminal narrators in four tales by Poe. The objects of study are the crime scenes, the modi operandi, the signatures or motives of a crime, victimology and the discursive selection of narrators. The psychopathic personality executes crimes without experiencing any feeling of guilt; unable to feel emotions, the perpetrator becomes excited with risk, rejects norms and is typically impulsive, irresponsible and easily irritated; furthermore, the criminal mind possesses the skills to seduce and manipulate others. Key words: criminal profiling, discourse of criminal subjects, psychopathic personality El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe 1. Introducción Siguiendo a Garrido (2006), el objetivo del perfil criminológico es delimitar las caracterÃ-sticas de la personalidad del criminal focalizando las posibilidades de investigación. No obstante, el perfil tiene sus limitaciones, no es una ciencia exacta, está basada en el análisis de la huella psicológica que el asesino deja en sus crÃ-menes y en datos estadÃ-sticos recogidos de otros casos y de los datos teóricos aportados por la psicologÃ-a y la criminologÃ-a. Se trata, por lo tanto, de un estudio de probabilidades. Uno de los ámbitos de este análisis del perfil es su función teórica, puesto que sirve para profundizar en el conocimiento del hecho criminal. El trabajo que hemos emprendido se basa en el análisis del discurso de los narradores criminales de Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 3/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe cuatro cuentos de Poe. En ellos estudiaremos los siguientes elementos: a) las escenas de los crÃ-menes, lugares elegidos por los criminales de las obras analizadas para matar a sus vÃ-ctimas b) el modus operandi, métodos utilizados para llevar a cabo los crÃ-menes, describe las técnicas y las decisiones tomadas por los asesinos, cómo se realizan los crÃ-menes y qué caracterÃ-sticas psicológicas se pueden deducir de los métodos (planificador, inteligente, descuidado, perfeccionista, sádico...) c) las firmas, esto es los motivos de los crÃ-menes, el por qué, reflejan las razones por las que los asesinos llevan a cabo los homicidios; presentan qué quieren decir los asesinos con los crÃ-menes y pueden explicar sus necesidades psicológicas d) la victimologÃ-a, protagonista del hecho criminal, nos da información de cómo su asesino se relaciona con sus vÃ-ctimas, lo que nos proporciona una huella psicológica importante para realizar el perfil. En un crimen hay dos protagonistas, el asesino y su vÃ-ctima, entre ellos hay una relación, el asesino usa a la vÃ-ctima para narrar su historia, para satisfacer sus fantasÃ-as personales pero también para dejar constancia de su relación con el mundo. Y es en esta relación donde se refleja más su personalidad (Jiménez, 2006). e) la selección discursiva de los narradores; por medio del propio discurso de los cuatro narradores, intentaremos conocer el perfil psicológico que Poe ha creado. 2. La personalidad psicópata: el perfecto depredador El psicópata comete acciones criminales sin experimentar sentimiento de culpa por su total ausencia de escrúpulos, puede ser una persona de comportamientos aparentemente normales pero incapaz de empatizar, por lo que interactúa con los demás como si fuesen objetos utilizables para satisfacer sus necesidades. Incapaz de experimentar emociones, se excita con el riesgo, no admite normas y puede ser muy inteligente en la organización de sus acciones criminales. Presenta rasgos de impulsividad, irresponsabilidad e irritabilidad. Otra de sus caracterÃ-sticas es, incluso, la capacidad de seducción, pero es un manipulador que, sabiendo diferenciar el bien del mal y conociendo las leyes, no le importan lo más mÃ-nimo, asÃ- como tampoco el dolor infligido. Los cuatro personajes elegidos para el presente trabajo corresponden a cuatro personalidades psicópatas, cuatro perfiles criminales. Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 4/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe 3. El corazón delator La historia presenta a un narrador obsesionado con el ojo enfermo de un anciano con el cual convive. Finalmente decide asesinarlo. El crimen es estudiado cuidadosamente y, tras ser perpetrado, el cadáver es despedazado y escondido bajo las tablas del suelo de la casa. La policÃ-a acude a la misma y el asesino acaba delatándose a sÃ- mismo, imaginando alucinadamente que el corazón del viejo se ha puesto a latir bajo la tarima. No se sabe cuál es la relación entre vÃ-ctima y asesino. La ambigüedad y la falta de detalles acerca de los dos personajes principales están en agudo contraste con el detallismo con que se recrea el crimen. El narrador insiste, desde el primer momento, en que es una persona normal pero muy nerviosa, y esa enfermedad (sic) ha agudizado sus sentidos, sobre todo el del oÃ-do. El anciano tiene un ojo "propio de buitre, un ojo azul pálido, cubierto por un tenue velo" (Poe, 2001:117). A pesar del gran afecto que siente por él, la mirada del anciano le produce tal ansiedad que, de forma gradual, toma la decisión de quitarle la vida, librándose asÃ- para siempre de su ojo maldito. Se siente orgulloso de su hazaña, llevada a cabo con maestrÃ-a, lo que pone en evidencia para demostrar que no está loco, ya que, desde su punto de vista, un loco no podrÃ-a proceder con su pericia. Es hábil, taimado y demuestra grandes dosis de paciencia para conseguir su propósito. Si ustedes continúan tomándome por loco dejarán de hacerlo cuando les describa las astutas precauciones que adopté para esconder el cadáver. (El corazón delator) Sin embargo, empieza a sentirse indispuesto, un malestar insoportable se hace presa de él, hasta terminar conduciéndole a la confesión para ponerle fin: al cabo de un rato, empecé a notar que me ponÃ-a pálido y deseé que se marcharan. Me dolÃ-a la cabeza y creÃ-a percibir un zumbido en los oÃ-dos; (…) El zumbido se hizo más intenso; seguÃ-a resonando y era cada vez más intenso. Hablé en voz muy alta para librarme de esa sensación, pero continuaba lo mismo y se iba haciendo cada vez más clara... hasta que, al fin, me di cuenta de que aquel sonido no se producÃ-a dentro de mis oÃ-dos. Sin duda, debÃ- de ponerme muy pálido, (…) el sonido aumentaba... Era un resonar apagado y presuroso..., un sonido como el que podrÃ-a hacer un reloj envuelto en algodón. Yo jadeaba, tratando de recobrar el aliento, (…) el sonido crecÃ-a continuamente. (…) el sonido crecÃ-a continuamente. (…) el sonido sobrepujaba todos los otros y crecÃ-a sin cesar. 4. El barril de amontillado Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 5/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe El cuento se centra en la venganza como castigo implacable por un insulto cuyo contenido no llegamos a conocer. El asesino, Montrésor, se dirige a su/s interlocutor/es en lo que parece una confesión, pero no podemos tener la certeza, tal vez las palabras in pace requiescat son pronunciadas por el mismo asesino refiriéndose a la vÃ-ctima. "Lo mejor que pude habÃ-a soportado las mil injurias de Fortunato. Pero cuando llegó el insulto, juré vengarme. Ustedes, que conocen tan bien la naturaleza de mi carácter (El barril de amontillado)." Los criminales de Poe son frÃ-os y calculadores, perfectos depredadores, incapaces de exteriorizar – y seguramente de experimentar – el más mÃ-nimo sentimiento de piedad hacia el prójimo. Estudian la situación, el modus operandi y a la vÃ-ctima al acecho de la oportunidad idónea para llevar a cabo su crimen. " No solamente tenÃ-a que castigar, sino castigar impunemente. Una injuria queda sin reparar cuando su justo castigo perjudica al vengador. (El barril de amontillado)." Siempre son presas fáciles. En este caso, el hecho de estar bebido y de ir vestido de bufón en el Carnaval nos muestra el lado grotesco de la vÃ-ctima: Poe lo desprecia y nos conduce igualmente a despreciarlo. Montrésor es, además, un pobre infeliz a quien se puede engañar fácilmente haciéndole caer en la trampa del orgullo de ser connaisseur de vinos. "Aquel Fortunato tenÃ-a un punto débil, (…). Se enorgullecÃ-a siempre de ser un entendido en vinos. (El barril de amontillado)." La cripta es un estereotipado escenario gótico, oscuro, húmedo, con esqueletos … y allÃ- se quedará el pobre infeliz, lapidado, haciéndoles compañÃ-a. el suelo húmedo de las catacumbas de los Montresor. (…) Por entre las murallas formadas por montones de esqueletos, mezclados con barriles y toneles, llegamos a los más profundos recintos de las catacumbas. (…) Las gotas de humedad se filtran por entre los huesos (…) Pasamos por debajo de una serie de bajÃ-simas bóvedas, bajamos, avanzamos luego, descendimos después y llegamos a una profunda cripta, donde la impureza del aire hacÃ-a enrojecer más que brillar nuestras antorchas. En lo más apartado de la cripta descubrÃ-ase otra menos espaciosa. En sus paredes habÃ-an sido alineados restos humanos de los que se amontonaban en la cueva de encima de nosotros, tal como en las grandes catacumbas de ParÃ-s. Tres lados de aquella cripta interior estaban también adornados del mismo modo. Del cuarto habÃ-an sido retirados los huesos y yacÃ-an esparcidos por el suelo, formando en un rincón un montón de cierta altura. Dentro de la pared, que habÃ-a quedado asÃ- descubierta por el desprendimiento de los huesos (El barril de amontillado). El psicópata recobra la sobriedad al darse cuenta de lo que le va a suceder, pretende huir pero en vano intenta liberarse; sus lamentos son un dulce canto para los oÃ-dos de su asesino. "¡Je, je, je! SÃ-, el amontillado. Pero, ¿no se nos hace tarde? ¿No estarán esperándonos en el palazzo Lady Fortunato y los demás? Vámonos. (…) ¡Por el amor de Dios, Montresor!" (El barril de amontillado). 5. El demonio de la perversidad Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 6/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe El demonio de la perversidad es un discurso autopunitivo y autodestructivo. A diferencia de El corazón delator, este texto no presenta los detalles meticulosamente, el modus operandi está poco elaborado pero sabemos que es perfecto por sus resultados. Sin embargo, incomprensiblemente, empieza a obsesionarse con la idea de delatarse a sÃ- mismo, pierde la razón y confiesa su crimen. La "perversidad" - perverseness en el texto original - remite a un impulso primitivo e inmotivado que empuja a quien lo padece a cometer delitos, incluso en contra de sus propios intereses. No es la única vez que esta tendencia aparece en Poe, como veremos más adelante, en El gato negro utiliza igualmente este problema psÃ-quico al igual que en El corazón delator. La perversidad es pues entendida por Poe como la capacidad de ciertas personas para emprender acciones perversas con un móvil sin motivo, un motivo no motivado esta sinrazón conduce al sujeto a comportarse de manera incomprensible, y esta inclinación, en ciertas condiciones llega a ser absolutamente irresistible (El demonio de la perversidad). Una tendencia irreprimible a hacer el mal por el mal mismo: Es un impulso radical, primitivo, elemental (El demonio de la perversidad). Y nadie está a salvo de, en alguna ocasión, ejercer de perverso, incluso con el discurso: No hay hombre viviente a quien en algún perÃ-odo no lo haya atormentado, por ejemplo, un vehemente deseo de torturar a su interlocutor con circunloquios. El que habla advierte el desagrado que causa; (…) se le ocurre la idea de que puede engendrar esa cólera con ciertos incisos y ciertos paréntesis (…) El impulso crece hasta el deseo, el deseo hasta el anhelo, el anhelo hasta un ansia incontrolable. (El demonio de la perversidad). Para Poe, la perversidad es una instigación directa del demonio (El demonio de la perversidad) y el enunciador del cuento se considera una de las innumerables vÃ-ctimas de este demonio de la perversidad. Como los otros personajes analizados, el criminal es un hombre meticuloso que durante meses analiza escrupulosamente los detalles de su modus operandi con el fin de no dejar ningún detalle al azar; al final, inspirado en una obra literaria, se decide por el envenenamiento por inhalación utilizando una vela con emanaciones tóxicas. Realiza su crimen concienzudamente, elimina todas las posibles pistas con inteligencia y se siente satisfecho por su trabajo perfectamente ejecutado, Es inconcebible el magnÃ-fico sentimiento de satisfacción que nacÃ-a en mi pecho cuando reflexionaba en mi absoluta seguridad. Durante un perÃ-odo muy largo me acostumbré a deleitarme en este sentimiento. ( El demonio de la perversidad) A diferencia de los otros tres cuentos objeto de análisis, en esta ocasión, el criminal tiene un objetivo material: hacerse con la herencia de su vÃ-ctima. Sin embargo, la enorme complacencia que experimenta no procede tanto del disfrute de la riqueza como de su hazaña perversa: "Me proporcionaba un placer más real que las ventajas simplemente materiales derivadas de mi crimen." (El demonio de la perversidad) Cuando empieza a notar los sÃ-ntomas de la obsesión, se repite a sÃ- mismo, como una letanÃ-a, estoy a salvo; como un obsesivo compulsivo, el asesino sigue repitiéndose el conjuro con idéntica formulación hasta que, un dÃ-a, lo cambia: Estoy a salvo, estoy a salvo si no soy lo bastante tonto para confesar abiertamente. El criminal de esta historia padece trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y queda preso de una cavilación que le llevará al desastre. El TOC es un sÃ-ndrome psiquiátrico perteneciente al grupo de los desórdenes de ansiedad, caracterizado por obsesiones, ideas, pensamientos, imágenes o impulsos recurrentes y persistentes que son egodistónicos, es decir, producidos involuntariamente, pensamientos que invaden la conciencia y que son vividos como muy negativos o sin sentido; el enfermo realiza intentos para ignorarlos o suprimirlos, pero es incapaz de conseguirlo. Los llamados atormentados y obsesivos puros experimentan pensamientos negativos reiterados, que resultan incontrolables y muy perturbadores, no obstante, a diferencia de quienes sufren los demás tipos de TOC, Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 7/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe no se entregan a comportamientos reiterativos de tipo fÃ-sico (compulsiones), sino cavilaciones reiteradas. La obsesión puede estar asociada a un sentimiento de culpa o de vergüenza. Podemos comprobar que el sentido que Poe confiere al vocablo perversidad en este cuento es, precisamente, el de pensamiento obsesivo puesto que el criminal ya lo ha experimentado en anteriores ocasiones: "TenÃ-a ya alguna experiencia de estos accesos de perversidad (cuya naturaleza he explicado no sin cierto esfuerzo) y recordaba que en ningún caso habÃ-a resistido con éxito sus embates." (El demonio de la perversidad) Los pensamientos obsesivos de los atormentados y obsesivos puros pueden conducirles a realizar acciones contra el propio interés; esto es precisamente lo que le ocurre al protagonista: "la casual insinuación de que podÃ-a ser lo bastante tonto para confesar el asesinato del cual era culpable se enfrentaba conmigo como la verdadera sombra de mi asesinado y me llamaba a la muerte." (El demonio de la perversidad) Por ello, Poe lo denomina demonio de la perversidad. Una especie de venganza demonÃ-aca enviada del más allá por la vÃ-ctima. El criminal acude a comportamientos compulsivos, conductas repetitivas y aparentemente finalistas, que se realizan según determinadas reglas de forma estereotipada, la conducta no es un fin en sÃmisma, está diseñada para evitar algún acontecimiento. El acto se realiza con una sensación de compulsión subjetiva junto con un deseo de resistir a la compulsión, por lo menos inicialmente. Por lo general, el individuo reconoce la falta de sentido de la conducta pero le procura un alivio de su tensión. Tal es el comportamiento del criminal de la historia: Al principio hice un esfuerzo para sacudir esta pesadilla de mi alma. Caminé vigorosamente, más rápido, cada vez más rápido, para terminar corriendo. SentÃ-a un deseo enloquecedor de gritar con todas mis fuerzas. Cada ola sucesiva de mi pensamiento me abrumaba de terror, pues, ay, yo sabÃ-a bien, demasiado bien, que pensar, en mi situación, era estar perdido. Aceleré aún más el paso. Salté como un loco por las calles atestadas. (El demonio de la perversidad) También sufre trastornos psicosomáticos: "abrÃ- la boca para respirar. Por un momento experimenté todas las angustias del ahogo: estaba ciego, sordo, aturdido;" (El demonio de la perversidad) Hasta que una fuerza más poderosa que su resistencia le conduce a la confesión de su crimen: la fuerza del demonio de la perversidad. Y en ese momento, alcanza la serenidad: "Dicen que hablé con una articulación clara, pero con marcado énfasis y apasionada prisa, como si temiera una interrupción antes de concluir las breves pero densas frases que me entregaban al verdugo y al infierno." (El demonio de la perversidad) 6. El gato negro El gato negro es, sencillamente, un relato espeluznante en el que el alcohol altera la personalidad de un hombre, convirtiéndolo en un ser irascible y furioso que acabará matando al gato que vive en casa con su mujer. Un demente sádico por adicción a la bebida que, por medio del relato, desea descargar su conciencia antes de morir. En este punto apreciamos una diferencia con los protagonistas anteriores, incapaces de exteriorizar sentimientos ni de necesitar liberarse de sus fantasmas y sus yerros. "Las consecuencias de esos episodios me han aterrorizado, me han torturado y, por fin, me han destruido." (El gato negro) Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 8/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe El criminal se describe a sÃ- mismo como un ser bondadoso y dócil, amante de los animales; su bondad incluso tuvo efectos perjudiciales para él ya que llegaba a convertirse en objeto de burla de sus compañeros. Se sentÃ-a dichoso con su mujer con quien compartÃ-a su amor por los animales. Pero su temperamento sufrió una transformación que el enunciador atribuye a la presencia del demonio en su interior. Se torna irritable, melancólico e indiferente hacia los sentimientos ajenos; precisamente esta actitud emocional es la que caracteriza, como hemos visto, al psicópata. Al principio de este trastorno de personalidad, el gato se libra de sus ataques de violencia, pero en un momento en que el felino, asustado por la violencia del amo, le muerde ligeramente la mano, se apodera del psicópata una furia demonÃ-aca: " Fue como si la raÃ-z de mi alma se separara de golpe de mi cuerpo; una maldad más que diabólica, alimentada por la ginebra, estremeció cada fibra de mi ser." (El gato negro) Es el momento del fin del animal, el protagonista le arranca un ojo con un cortaplumas. Sin embargo, de nuevo aparecen sÃ-ntomas que diferencian a este personaje de los otros que nos ocupan: "Cuando la razón retornó con la mañana (…), sentÃ- que el horror se mezclaba con el remordimiento ante el crimen cometido." (El gato negro) El sentimiento de culpa hemos visto que no existe en el psicópata; lamentablemente la sinrazón es mucho más poderosa: "mi sentimiento era débil y ambiguo, no alcanzaba a interesar al alma." (El gato negro) Pero debemos tener presente que el protagonista atribuye su perturbación demonÃ-aca a los efectos del alcohol: ¿qué enfermedad es comparable al alcohol? (El gato negro). "Cuando la razón retornó con la mañana, cuando hube disipado en el sueño los vapores de la orgÃ-a nocturna" (El gato negro) El alcohol es, como suele suceder, por un lado el elemento propulsor de los comportamientos violentos, por el otro el refugio del sentimiento de culpa: "Una vez más me hundÃ- en los excesos y muy pronto ahogué en vino los recuerdos de lo sucedido." (El gato negro) El espÃ-ritu de la perversidad surge de nuevo. Ese impulso primordial que Poe considera permanente en el ser humano y que arrastra al hombre a buscar el mal para sÃ- mismo; es la razón que lleva a los protagonistas de Poe a confesar contra su voluntad sus asesinatos, "una de las facultades primarias indivisibles, uno de esos sentimientos que dirigen el carácter del hombre." (El gato negro) La pulsión que lleva al individuo a cometer acciones malvadas por la simple razón de que no debÃ-a cometerla, el insondable anhelo del criminal que se veja a sÃ- mismo, que violenta su propia naturaleza, que actúa con maldad impulsado por la misma maldad vacÃ-a de objetivo si no es el de dañar al prójimo. La lucha entre el personaje y la maldad que se ha apoderado de su libre albedrÃ-o es feroz: "lo ahorqué mientras las lágrimas manaban de mis ojos y el más amargo remordimiento me apretaba el corazón;" (El gato negro) El tema de la ley divina y humana surge en ese momento, al recordar su acción criminal: una tendencia a transgredir lo que constituye la Ley por el solo hecho de serlo. (El gato negro) lo ahorqué porque sabÃ-a que, al hacerlo, cometÃ-a un pecado, un pecado mortal que comprometerÃ-a mi alma hasta llevarla -si ello fuera posible- más allá del alcance de la infinita misericordia del Dios más misericordioso y más terrible. (El gato negro) Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 9/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Tras el acto criminal, el psicópata pierde su hacienda y fortuna en un incendio, y cae en profunda depresión, pero deja bien claro que serÃ-a una debilidad establecer relación de causa-efecto entre este desafortunado evento y sus acciones criminales posteriores. Hemos comentado en El corazón delator y en El barril de amontillado la meticulosidad de las descripciones, el modus operandi. En este caso, el enunciador comenta esta minuciosidad: "estoy detallando una cadena de hechos y no quiero dejar ningún eslabón incompleto." (El gato negro) La explicación de la aparición de la imagen del gato ejecutado tras el incendio es escalofriante, hasta el punto de que se llega a convertir en un fantasma para el ejecutor, que le atormenta y hace crecer en él el sentimiento ausente siempre en un psicópata: el arrepentimiento: "Durante muchos meses no pude librarme del fantasma del gato, y en todo ese tiempo dominó mi espÃ-ritu un sentimiento informe que se parecÃ-a, sin serlo, al remordimiento." (El gato negro) Intenta encontrar un sustituto del gato y termina por hallar uno bastante parecido para llevarlo a su casa; su mujer lo acoge con cariño pero el criminal no lo soporta, le recuerda demasiado su salvaje acto y le produce imaginaciones estremecedoras: la mancha blanca del animal se le antoja un patÃ-bulo. El carácter se le endurece de tal manera que pierde la poca cordura que le quedaba: intentando matar al gato asesina a su mujer. Con toda la sangre frÃ-a propia de los psicópatas, decide emparedarla (vs. El barril de amontillado). Con todo lujo de detalles, el enunciador procede a la descripción de la ocultación del cadáver. El final de la historia no deja de tener un aspecto algo sádico: el animal que le habÃ-a llevado a la locura es el que le delata con sus maullidos habiendo quedado atrapado con su mujer emparedada. 7. Los elementos de análisis en las cuatro obras: El corazón delator (Cd) El barril de amontillado (Ba) El demonio de la perversidad (Dp) El gato negro (Gn) Cd Ba Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Dp Gn Page 10/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Escena -habitación de vÃ-ctima -bodegas-catacumbas -dormitorio pequeño -asesinato del primer -la esconde bajo tablas -cripta y mal ventilado gato: noche en casa del suelo -vÃ-ctima encadenada -asesinato de su en nicho mujer: escalera de casa Modus -decide asesinar - castigar -premeditación y -saca un ojo a su operandi: a hombre tuerto impunemente reflexión por gato con decisiones, con quien vive -aprovecha encuentro búsqueda de cortaplumas métodos, -le asusta con en bullicio de carnaval impunidad -lo ahorca en la rama técnicas linterna y que vÃ-ctima está -envenenamiento de un árbol -lo ahoga ebria por inhalación de -queriendo matar al -lo descuartiza -aprovecha que humo de vela segundo gato, mata -esconde las partes vÃ-ctima está ya ebria envenenada: a su mujer de un bajo el suelo para seguir se inspira en relato hachazo por -actúa meticulosamente embriagándole con francés querer impedÃ-rselo excusa del frÃ-o de -meticulosidad -la empareda bodega Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 11/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Firmas: -No persigue -decide vengarse por -móvil sin motivo, -odia al primer gato motivos propósito definido injurias recibidas motivo no motivado porque le mordió un -no busca recompensa -fuerza irresistible= poco al sentirse económica perversidad en peligro por -tiene afecto al viejo (instigación directa la brusquedad -no está colérico del demonio de la del dueño -no le tiene rencor perversidad) -odia a todos por su -el ojo tuerto del - tendencia a hacer adicción al alcohol viejo le produce temor el mal por el mal -quiere matar al y enfurecimiento -impulso radical, primitivo, elemental segundo gato porque a pesar de conflicto le recuerda al interior primero que habÃ-a -pero habla de matado herencia recibida -arremete contra su mujer porque quiere impedirle matar al segundo gato Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 12/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe VÃ-ctimas; -viejo indefenso -punto débil: soberbia -se desconocen sus -gato de casa perfil y relación -bondadoso de ser entendido en datos, pero debe -su mujer, amante de vinos existir vÃ-nculo los animales y -ingenuo y confiado familiar con paciente con su -criminal lo considera criminal porque éste crueldad "charlatán" hereda con criminal -carece de sentido del ridÃ-culo Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 13/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe Discurso -reivindica su cordura del criminal -orgullo por (antes y meticulosidad y después del habilidad crimen) -orgullo por sagacidad -expresa breve sentimiento de compasión -expresa ansiedad ante la proximidad del acto criminal -expresa satisfacción por haber realizado acto diligentemente -expresa tranquilidad por haber solucionado irritación que le producÃ-a ojo del viejo -se muestra excesivamente solÃ-cito con policÃ-a Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 14/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe -expresa terror y -expresa firme rabia por oÃ-r latido resolución de del viejo y creer que se venganza impune están burlando de su -premeditación y espanto alevosÃ-a -demuestra preocupación por salud de vÃ-ctima para ganarse su confianza y aumentar su deseo de mostrar conocimientos -cinismo: se burla de vÃ-ctima respecto a sÃ-mbolo de masonerÃ-a -expresa momento de vacilación cuando está terminando de cerrar el nicho -para fortalecerse supera con sus gritos Copyright Page 15/20 © MUNDO CULTURAL HISPANO El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe a la vÃ-ctima -reivindica su - reivindica su cordura pero cordura vÃ-ctima del demonio -se confiesa de la perversidad aterrorizado por su -orgullo por acto criminal meticulosidad -reconoce debilidad -expresa placer en infancia experimentado por -culpa al demonio de crimen perfecto, la perversidad de su mayor que beneficio cambio económico de comportamental herencia -se compadece de sÃ- -satisfacción se mismo al hablar de convierte en su adicción al obsesión (T.O.C.) alcohol de confesar su -expresa crimen remordimiento -termina por -explica que lo hace confesar e voz alta a sabiendas de que su crimen su acto no tiene -describe opresión en corazón al terminar de encerrar a vÃ-ctima pero la atribuye a humedad perdón Copyright Page © MUNDO 16/20 CULTURAL El perfil del criminal en cuatro cuento -cuando mata a su mujer siente el peso del crimen sobre su alma Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 17/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe 8. Coincidencias En tres de los cuatro cuentos, el criminal - el enunciador - reivindica su cordura, como en un intento de asegurarse de que no quepan dudas sobre su capacidad de hacer el mal desde la plena conciencia del acto criminal. No se hace mención alguna al mundo sobrenatural sino al mundo interior del criminal, un mundo grotesco y complejo habitado por sentimientos encontrados. Hemos comentado al principio del trabajo que el perfecto psicópata no conoce la empatÃ-a; en un primer acercamiento, los personajes analizados tienen muchos puntos en común con el criminal psicópata: se excita con el riesgo y muestra inteligencia en la organización de sus asesinatos, sin embargo el sentimiento de culpa o arrepentimiento aparece en algunos enunciados, aunque sea de forma pasajera. La vacilación en el momento de cerrar el nicho en El barril de amontillado demuestra una mÃ-nima inseguridad por la atrocidad del acto que está cometiendo. De igual manera, el criminal de El corazón delator expresa un breve sentimiento de compasión por el pobre viejo. Un sentimiento de opresión aparece en el asesino de El barril de amontillado al terminar de encerrar a su vÃ-ctima, mas lo atribuye a la humedad. En El gato negro es donde más claramente se aprecia el remordimiento y el terror del daño infligido; el personaje confiesa su debilidad en la niñez, en la que fue vÃ-ctima de burlas por parte de sus compañeros. Se adivina un ser que ha sufrido el desengaño de falsas amistades, y que en el amor de su mujer y de los animales ha podido encontrar refugio. Por ello, atribuye sus actos criminales a la influencia de una fuerza exterior, el demonio, asÃ- como a su debilidad, que le ha conducido a la dependencia del alcohol. Los personajes de los cuentos analizados son psicópatas en muchos aspectos, de ninguna manera son enfermos mentales sino sujetos afectados por trastornos de la personalidad, no tienen alucinaciones ni delirios, y son totalmente conscientes de la diferencia entre lo real y lo imaginario, estando perfectamente situados en las coordenadas espacio-temporales. Los enfermos mentales cometen los delitos llevados por alucinaciones, no planifican, en tanto que los psicópatas utilizan una estrategia y premeditan cómo van a atraer a sus vÃ-ctimas y cómo van a llevar a cabo cada movimiento. El tipo de psicopatologÃ-a que Poe utiliza es siempre el mismo, no se trata de asesinos en serie ni de delincuentes sino de hombres que llevan una vida normal y que arremeten contra personas de su entorno más cercano en un momento dado, movidos por una obsesión o bien por un impulso irrefrenable. Individuos absorbidos en sÃ- mismos sin conciencia ni sentimiento alguno hacia los demás y para quienes las reglas sociales no tienen ningún significado. Depredadores en quienes la violencia es planeada, decidida y carente casi siempre de emociones reflejando un estado de desprendimiento, de audacia y posiblemente de disociación. Tal vez la motivación última es el control y la dominación, y la ausencia de temor es probablemente la caracterÃ-stica prototÃ-pica. Finalmente, la literatura clÃ-nica distingue entre varios tipos de psicópatas. Los primarios son inmunes a la aprensión y parecen incapaces de experimentar cualquier tipo de emoción genuina. En cambio, los secundarios pueden sentir el estrés, la ansiedad y la culpabilidad, no son pues Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 18/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe completamente psicopáticos. Tanto los primarios como los secundarios están subdivididos en descontrolados y carismáticos. Los descontrolados parecen enfadarse o enloquecerse más fácilmente, los carismáticos utilizan su talento a su favor para manipular y conducir la situación donde les interesa para conseguir sus fines. Por lo tanto, según esta taxonomÃ-a, concluimos que Poe crea psicópatas primarios y secundarios tanto descontrolados como carismáticos. Referencias GARRIDO, V. (2003): El psicópata. Un camaleón en la sociedad actual. Alzira: Algar. GARRIDO, V. & P. LÓPEZ (2006): El rastro del asesino. El perfil psicológico de los criminales en la investigación policial. Barcelona: Ariel. JIMÉNEZ SERRANO, J. (2006). Perfil psicológico criminal. < http://www.psicologia-online.com/articulos/2006/perfil_psicologico_criminal.shtml> VII Curso de CriminologÃ-a Psicosocial. Universidad Complutense de Madrid, 2006. [Fecha acceso 10/06/2009]. KNIGHT-JADCZYK,L. ¿Qué es un psicópata? <http://quantumfuture.net/sp/pages/psicopatia.html> [Fecha acceso 20/ 07/2009] LAMNEK, S. (2006). TeorÃ-as de la criminalidad. México: Siglo XXI. POE, E.A. (2001). Narraciones extraordinarias. (1ª selección). Barcelona: Editorial Juventud, S.A. Obras de Poe digitalizadas: El barril de amontillado [Fecha acceso 10/06/2009] <http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/poe/barrilde.htm> El corazón delator [Fecha acceso 10/06/2009] <http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/poe/corazon.htm> Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 19/20 El perfil del criminal en cuatro cuentos de Poe El demonio de la perversidad [Fecha acceso 10-6-2009] <http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/poe/demonio.htm> El gato negro [Fecha acceso 10-6-2009] <http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/poe/gato.htm> Notas: The Tell-Tale Heart, publicado por primera vez en el periódico literario The Pioneer, en enero de 1843 y republicado en el periódico The Broadway Journal en su edición del 23 de agosto de 1845. Copyright © MUNDO CULTURAL HISPANO Page 20/20