363375. . Tercera Sala. Quinta Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo XXXIII, Pág. 936. TRASPASOS DE ESTABLECIMIENTOS MERCANTILES. Cuando el traspaso de una negociación mercantil se efectúa por medio de documentos privados, pero cuya fecha queda autentificada por el sello de una oficina del gobierno, dichos documentos deben conceptuarse como pruebas de la posesión, por parte del nuevo adquirente, puesto que son documentos de fecha cierta, que llevan el sello de una oficina del gobierno, ante la cual, deberán surtir efectos, con la fecha respectiva; debiéndose tener, además, en cuenta, que ese traspaso indica una compraventa mercantil, la cual, de conformidad con el artículo 378 del Código de Comercio, desde el momento en que el comprador acepta que las mercancías vendidas quedan a su disposición, se tendrá por virtualmente recibido de ellas; por tanto, es incuestionable que la posesión a favor del nuevo adquirente, queda acreditada, sin que para la comprobación del traspaso, sea requisito indispensable la inscripción en el Registro Público de Comercio, de los documentos en que tal operación se llevó a cabo, por que conforme al artículo 19 del código mercantil, la inscripción de que se trata, es potestativa y no obligatoria para los comerciantes. Amparo civil en revisión 2010/31. Dobin Samson. 3 de octubre de 1931. Unanimidad de cinco votos. La publicación no menciona el nombre del ponente. -1-