revista final - Fileteadores

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AÑO 1 N°0 / SEPTIEMBRE DE 2013
PUBLICACIÓN DIGITAL DE LA ASOCIACIÓN DE FILETEADORES
EDITORIAL
L
a presentación de un nuevo
proyecto es siempre un motivo
de celebración. Por eso no es casual
que lancemos la revista Fileteadores
en el marco de los festejos por el día
del filetead@r. Esperamos ser un
puente de comunicación entre l@s
coleg@s, un espacio de intercambio
y una fuente de donde nutrirnos de
información acerca de nuestro
oficio.
Quienes la editamos, miembros de la
Asociación de Fileteadores, venimos
trabajando ya desde hace un tiempo,
en la puesta en valor del filete
porteño. Velando por la
preservación de su legado histórico,
la expansión de sus posibilidades en
el presente y su divulgación entre las
futuras generaciones. Con una
fuerte dirección integradora,
alentando a la participación, al
intercambio de ideas y al trabajo
mancomunado.
Hoy ponemos a disposición esta
herramienta de comunicación
bimestral a nuestros soci@s, colegas
fileteador@s y a todos los amantes
de éste arte tan argentino. El
formato digital que hemos elegido,
corresponde no solo a la idea de
gratuidad que nos interesa
establecer, sino también
a la
velocidad de la información, a la
diversidad de las vías de difusión y a
una amplia distribución a los
distintos rincones del país.
Fileteadores queda de ahora en más
abierta a sus propuestas y aportes.
Esperamos que la reciban con la
misma alegría y emoción con la que
la hacemos.
Colaboran en
este número
Maria Rosa Córdoba
Memo Caviglia
Claudia Berlusconi
Gustavo Ferrari
Roberto Marin
Julián Aloise
Cesar Palacio
Fabio Prieto
Arístides Piazza
Diego Prenolio
Beto Yapan
CARLOS
CARBONI
El legendario fileteador de Villa Urquiza
por: Ignacio Xurxo*
“Ya no sale a pintar
camiones blindados
Pero todavía multiplica sus
famosos “gardeles”
Carlitos, traé p' acá el filinú!,
¡Pibe prepará el espúlvero y
después metéle a pomar los
rayos! Aquél chico de los
mandados y aprendiz era Carlos
Carboni a los nueve años. El era
quien le acercaba al pintor el
filling-up, una especie de
imprimación; él quien se aplicaba
pacientemente a pasar la piedra
pómez a los rayos de una rueda
de sulky.
Ocurre que ya casi cuesta tanto
develar los códigos de aquella
fábrica de carros porteña de
principios de siglo, como
descifrar los de una factoría
robotizada de nuestro tiempo.
Aunque para el entrevistado el
mundo debe haber cambiado
menos porque sus herramientas
son casi las mismas que en 1908.
“No crea –acotará él- los papeles
de diario ahora arden distinto y
no dan carbonilla. Comprar
carbón y lijarlo no es lo mismo.”
Más rápidamente cambió la
jerarquía del trabajo. Aquel chico
pasó pronto a pintor “de liso”,
luego a letrista y antes de los
quince años a tentar el fileteado,
su pasión.
Próximo a cumplir los noventa,
está reconocido como uno de las
más grandes, sus trabajos se
exhibieron en la galería
Wildenstein y están también en
el Museo del Hombre en París,
aunque no hace mucho aceptó a
firmarlos a instancias de Nicolás
Rubió. Explica:
¡Bah! En mi
tiempo casi
todos los
letristas eran
fileteadores. La
fábrica de
carros donde
me inicié era la
de Antonio
Césare y el
p r i m e r
fileteador que
vi fue Salvador
Venturo, un
napolitano de
facha rara que
fumaba una pipa con cazoleta de
barro de caña larga cambiable.
No era ningún genio pero cuando
me descubría mirándolo me
desalentaba: “¡Eh! Só muy
bambino, tené mucho tiempo
por delante”. El que me impulsó
fue Césare quién un día me dijo:
“Ya que te gusta, en vez de irte al
mediodía a patear la pelota,
practicá con el pincel, hay que
acostumbrar la mano porque el
filete no tiene guía, es puro
pulso.”
Don Carlos cierra los ojos y es
seguro que ve aquella fábrica de
villa Urquiza, el
barrio en el que
vivió desde los
tres meses de
vida cuando su
f a m i l i a
campesina llegó
de Italia. “Era
villa, no barrio,
puras quintas.
¿Sabe lo que fue
el año de la
helada negra? Y
estaba la fábrica
d o n d e
trabajábamos
unos cincuenta
obreros entre fragua, herrería,
carpintería y pinturería;
hacíamos charrets, jardineras,
sulkys, carritos verduleros y de
m e d i a
changa. Al
empezar
sólo me
d a b a n
cincuenta
centavos
por semana,
pero también
cada día a las
once, un sánguche
de medio pan francés con
salame de verdad, no de éste de
ahora que parece de goma. A los
diecisiete ya ganaba uno ochenta
la semana, cuando me vino a
buscar Alejandro Mentaberri, un
radical que discutía mucho con
Césare, que era socialista. El vasco
me hizo ver que yo podía ganar
diez pesos por trabajo y me
convertí en pintor independiente
pero seguí simpatizando con
Palacios y Juan B. Justo.”
En cierto momento, llamada por la
memoria de unos fragantes
pelones del pasado, en Congreso y
Capdevila, tercia Doña Josefa.
Tiene ochenta y seis años y está
casada con Carboni desde hace
sesenta y tres. “¿Vió como se
acuerda de todo? Y eso que a los
ochenta tuvo una caída terrible
desde la cabina de un camión muy
alto que estaba pintando, se partió
la cervical y no lo curaron bien
pero va a seguir viendo nacer
bisnietos. Tenemos una hija y un
hijo, tres nietos ¡Y ya seis
bisnietos! Lástima que el oficio de
Carlitos se vaya a perder, ninguno
lo aprendió y ya no quedan
fileteadores como él.”
El aludido parece dar señal de
incomodarse pero ella
sigue…”Fijesé que hace sólo tres
años Carlitos trabajaba de…” y
menciona a una de las mas
conocidas empresas
transportadoras de caudales. En
ese justo momento sobreviene el
choque…”pa´ que hablás si no
sabés” y ella, “que no voy a
saber, sé
mejor que
v o s ” ,
protesta
antes de
callarse.
¿ C ó m o
describir
cuanta ternura
pudo caber en ese
conato beligerante,
acaso repetido durante seis
décadas? Más cuando Don Carlos
concede: “sí, creo que tiene razón
ya debe hacer tres años que dejé
de ir a pintar las letras de los
camiones blindados.”
Lo venían a buscar en auto “a las
ocho de la mañana y me traían a
las ocho de la noche. Pero un día el
delegado me vino a torear: Que
qué arreglo tenía yo?... que porqué
me traían?… y lo saqué cortito. A la
otra noche no me pusieron el auto,
me cabrié y no volví. Ni cuando me
vino a buscar el dueño.”
Tal vez porque Carboni había
tenido ya otra mala experiencia, al
cambiar de manos en una
cervecería, hace cosa de cuarenta
años: “Yo había pintado sus carros
y les pintaba los camiones, los más
lindos que había en Buenos Aires.
Un día entró una
mafia y cambió
todo. Yo soy
un tipo
legal y no
transé
c o n
cosas
sucias
q u e
hacían.
Empeza
ron a no
pagarme y
me tuve
que ir.”
Carboni cita sin vacilar hasta las
palabras y números de teléfono
que pintaba en aquellos vehículos,
así como recita los carteles que
hizo para los primeros colectivos
en 1928, o como rememora una
voluta inventada para un remoto
carro del Once. “¿Sabía que fue
barrio de vascos lecheros?, evoca
pero pasa a añorar, “…ya no salgo a
filetear. Hago en casa virgencitas,
gardeles, esas cosas… El embajador
sueco me compró una Difunta
Correa, pero el filete es para la
libertad, necesita andar al aire, al
sol.”
Hace poco el Museo de la Ciudad
exhibió unas bellas réplicas de
carros y camiones antiguos,
hechas por Rubió y fileteadas por
Don Carlos. Eso dice que hay aún,
modos de salvataje y preservación,
pero no deberían omitir al propio
artista y a su amada Giussepina.
Aunque al humilde departamento
del pasaje Pérez Rosales acuden
tanto el más alto respeto como un
voraz snobismo, el infortunio del
accidente multiplicó las
necesidades de la bella pareja.
Ellos no son Dalí ni Gala, claro,
pero que no quede duda de que
serán igualmente irrepetibles.
Ignacio Xurxo.
Un agradecimiento especial a Luis Alposta
que nos facilito este material inédito.
Año 1989 para el diario La
Nación. Texto inédito, no
publicado a causa del
fallecimiento de Carboni
en ese mismo año.
Agenda / novedades
L
uego del éxito y gran repercusión del Primer
Encuentro, la Asociación de Fileteadores
invita al SEGUNDO ENCUENTRO ANUAL
DE FILETEADORES.
Esta nueva edición, que se realizará los días 13, 14 y
15 de septiembre de 2013, tendrá lugar en las
instalaciones de Museo de la Ciudad y la Sala
Permanente de Filete Porteño, ubicado en Defensa
217, San Telmo, Ciudad de Buenos Aires.
APERTURA
Es nuestra intención, a partir de estas nuevas
jornadas, profundizar la difusión del Fileteado
Porteño reuniendo a más de 70 artistas de todo el
país quienes expondrán sus obras y participarán
en charlas, seminarios, proyecciones y
demostraciones en vivo.
Siendo el fileteado un arte dinámico que busca
actualizarse sin dejar de lado la herencia de la
tradición, el Segundo Encuentro Anual constituye
un espacio privilegiado de intercambio, discusión
y aporte de nuevas visiones, generando una
reflexión sobre la historia, la identidad y las
prácticas y permitiendo el contacto de quienes dan
sus primeros pasos en esta disciplina con maestros
de reconocida trayectoria.
Asociación de Fileteadores.
PROGRAMACIÓN
Viernes 13 Inauguración del 2do. Encuentro
Anual de Fileteadores.
18 hs. Palabras de Bienvenida.
19hs. Presentación de la Revista FILETEADORES.
19:45 hs. Lectura de la programación del evento.
20hs. Brindis y apertura de la muestra.
22hs. Cierre Musical: Cuarteto de Ocasión y
Banquete Criollo (Tango y Folklore)
23 hs. Mariel Caló, blues y góspel.
Sábado 14 Festejos por el Día del Fileteador
14hs. - Asamblea abierta Asociación de Fileteadores.
16hs. - Taller en vivo, mural colectivo durante toda
la jornada.
16hs. - Video Documental / Debate - Paredes
fileteadas17hs. - Video - Entrevista inédita a Carlos Carboni,
En la voz del poeta Luis Alposta
21 hs. - Cierre Musical. Tango con Marina Ríos,
Facundo Radice, Gabriel El Sayer y Julio Masini.
Domingo 15 Homenaje a Nicolás Rubió*
14hs. - Videos Documentales.
15hs. - Charla: La Mesa de los Maestros.
16.30 hs. - Homenaje a Nicolás Rubió.
18hs. - Entrega del Premio Orden del Pincel.
Entrega de diplomas de asistencia a los expositores
del 2º Encuentro.
20 hs. - Cierre e Invitación a participar de las
actividades aranceladas. Lectura cronograma de los
Seminarios.
*Nicolás Rubió. 1er. Investigador sobre el filete, autor de los
libros: “Los maestros fileteadores de Buenos Aires” y “El
Filete Porteño”. Curador de la 1ra. Exposición de Filete
Porteño en 1970, muestra cuyas obras posteriormente donó
al Museo de la Ciudad y forman la actual colección
patrimonial del museo.
Durante todo el mes, se realizarán seminarios y
clínicas de Fileteado.
Martes 15 de Octubre – Cierre de la Muestra
Contacto:
[email protected]
facebook.com/Fileteadores
www.fileteadores.com
Pte. Memo Caviglia: (011)155347-6162 / 2062-3740
Prensa: Mariana Bocca 1530890655
Una pincelada
de humor
Por Julián Aloise
Fileteado no tan porteño
Se menciona Buenos Aires como punto
de partida del filete, pero es bien
sabido que recorrió en carro, camión, o
bondi extensos kilómetros por nuestro
país. En muchos lugares se quedó para
multiplicarse. Rosario es uno de ellos.
Desde allí nos comparte una historia el
colega Fabio Prieto.
P
odemos hablar del fileteado en Rosario y
para ello tenemos que trasladarnos a
principio del siglo pasado. En interminables
charlas de café con mis maestros y viejos colegas
en las que tuve la suerte de participar,
manifestaban que los primeros en desembarcar
fueron los hermanos Blas y Enrique Munnè, este
último padre del gran pianista Enrique Juan
Munnè.
Entre sus alumnos se destacan Julio Vanzo y
Antonio Berni. Cuentan que estos dos hermanos,
extraordinarios artistas plásticos escaparon del
Viejo continente perseguidos por su condición
política, eran anarquistas.
Ya en Rosario y al no poder vivir de la pintura
artística deciden abrir un taller de letreros y
fileteado en Córdoba y Maipú realizando trabajos
como los frescos del famoso prostíbulo Madame
Safò o los escudos del Banco Monserrat hechos en
oro a la hoja e incrustaciones de mica con unas
ornamentaciones increíbles o los viejos carritos
fileteados de la panadería La Europea.
De este taller se desprenden grandes artistas de
este oficio para abrir el propio, como Martinio y
Duboe inventores de la letra rosarina; Graziani y
Tinivella con el taller Apolo Coromina e Indaco;
los hermanos Miranda; más adelante los
Simolai y su sobrino Alberto radicado en
Miami desde hace mucho tiempo,
quienes dejaron un estilo de filete
llamado rosarino que es el ornato liso sin
luces ni sombras llamados palomitas
que hoy continua Miguel Logiudise.
Otros fileteadores de carros como los
Simolai fueron Martin y Baseti Molinero
y hoy Gallito de Lata en colectivos, Pello
y Albanesetenian con su galpón enfrente
del Mercado en la casa natal de Libertad Lamarque
con la particularidad de sus bondis en los que
detrás del asiento del conductor hacía un
pergamino con un poema.
Serioli y Vázquez se dedicaban a los colectivos de
larga distancia. El único que hacia el estilo de
fileteado porteño en esa época era mi maestro y tio
Alberto Bono por haber trabajado en la carrocería
El Detalle y con Mesadra y Luchina en el Viejo
Teatro Nacional pintando carteleras de cines. Es la
escuela que yo sigo. Otros baluartes del fileteado en
Rosario fueron Hector Pozi, Carlos Graziani,
Francisco Mazola, el gringo Yaria. En la actualidad
Francisco Artacho, Alfredo Ferrari, quien les habla
y algunos más. La idea es pasar este hermoso oficio
a las nuevas generaciones por medio de las clases ya
que hoy las verdaderas escuelas que eran el taller y
las carrocerías desaparecieron.
Anécdotas tengo muchas, la que me viene a la
mente es la del "loco" Gatica chofer de la línea B de
colectivos, que pedía que pintemos los dragones
con cara de "buenos" porque la gente tenia miedo y
no los tomaba.
EL YERTA
El lugar donde más horas
pasamos y también donde
más experimentamos y
aprendemos. Entre filetes y
llaves nos abre las puertas de
su taller marplatense:
Roberto Marín.
E
l “filete” (del ital. fileto, línea
fina) se pinta con un pincel de
pelo largo, entre 6 y 9 cm, también
llamado “bandita”. No tiene mango
o tiene uno muy corto y se toma
con la punta de los dedos, entre el
índice y el pulgar. Con este pincel el
artista fileteador decora con
maestría y creatividad carrocerías
de colectivos, camiones, carros,
letreros y diferentes superficies.
E
l filete nació como una línea
divisoria entre dos colores y
evolucionó a ondulaciones,
enmarcados, llaves y diseños
ornamentados y simétricos, cada
vez mas elaborados.
En la Argentina, en los últimos 30
años se desarrolló un estilo con
identidad propia, el famoso y
querido “Filete porteño”.
* Artísta plástico / Diseñador gráfico
Fileteador y letrista de oficio
A
la migración italiana, española
y de Europa central, allá por
1890.....los recibe Buenos Aires, con
su tracción a sangre, chatas grises y
la necesidad de destacar su
vehículo, herramienta de trabajo
físico y personal. Nuevos horizontes
sociales lo convidan a dejar atrás los
fracasos del hombre, que se ve
reflejado en un medio ajeno a su
pretensión. Cómo continuar su
cultura en una nueva tierra, espíritu
de quimeras, superadas las
necesidades básicas. Una forma de
premiar el esfuerzo del desarraigo,
de manifestar su origen es de
manera artistica visual, no solo en
su música o atuendos -tiempos de
óperas y vestimenta sencilla,
proletaria- con un caudal humano
forjado a lo largo de muchos siglos
por una sociedad físicamente lejana
pero grabada en las venas de los
inmigrantes.He aqui el crisol donde
acuden los sentimientos que han de
nutrir este arte popular llamado
Filete Porteño, que porta ese
nombre por el hecho de haber
nacido en Buenos Aires. Aquí
quedan atrás la quimeras y sueños
que forjaron en la bodega de algún
buque. Todo esta por hacer, el viejo
Hotel de Inmigrantes, el nuevo
hogar en forma de conventillo
donde se gesta la necesidad de
mostrarse tal cual, su origen.
Distintos personajes fueron dando
forma a una cultura urbana, con el
alma como un cofre, llena de
latentes sueños que acompañan el
FILETE PORTEÑO
fines del siglo XIX
siglo XX y principios
del siglo XXI.
diaro trajín...la identidad porteña
que no es solo un hecho gráfico,
esta cargada de lo emotivoespiritual que nos hace ver de esta
manera..! sí, se va instalando en el
nuevo siglo, un paisaje de colores
itinerante, como mostrando un
sueño de un corsario en el pescante
de un carro, anunciando su llegada
a la playa del mercado con una frase
elegante, manos cayosas de rienda,
alma blanca de recuerdos....filete
porteño rebelde y valiente
desafiando el gris de sueños
dormidos..nuevos carros coloridos
que visten los adoquines...silbando
una canzoneta...al tranco va
conquistando esta antigua Buenos
Aires de la mano de algún
tango.Combinación mágica de
poetas del tango y maestros de los
pinceles van forjando esta expresión
ciudadana, sin la mezquindad
academica, con la frescura sencilla
de algunos improvisados de talento.
Rescatan ornatos de las
mamposterías de los frentes de
casonas y palacetes, rejas barrocas
con secretos de amoríos, iluminan,
los candiles del claroscuro porteño.
Así se va alimentado..del brillo de
los adoquines, en la bruma de la
boca...barcos cargados de sueños
centralizan una imagen, relzada por
ornatos remadas con filetes..la
presencia de la patrona, el recuerdo
de una madre en tres flores muy
sencillas...a la que abrazan dos
banderas.De esta manera se va
haciendo espacio..el colectivo
despacio le va sacando terreno y el
camión que siempre llenó las calles
del abasto instala al mismo Gardel
en los tiempos de Yatasto; los bares
le dan escenario junto al farol y al
tranvía, pero un día ...mama mía lo
destierran de los bondis. Al no
perder su alegría lo recibe el
caballete como si fuera un purrete,
le da vida a los pasillos, no esta el
viejo conventillo, ilumina las
cocinas con frase bien argentinas, se
hace dueño de la casa decorando las
terrazas, algún quincho o bien
parrilla hace ahora las valijas...y se
lanza por el mundo,..soñador y
vagabundo.
Hoy tiene nuevos actores herederos
de una historia, nutridos por la
memoria de lo que algunos
contaron...como el filete es varón le
conquistó el corazón a las damas
soñadoras,,,se hicieron fileteadoras
que Dios bendiga las manos .. de la
mujer nueva actora.
La Gayola
Los artistas y sus obras
En esta página proponemos conocer mas
de cerca a l@s artistas a través de su
obra. Nos cuentan de inspiraciones,
soportes, estilos y una pasión en común:
el Filete.
Mi obra consiste en mostrar la belleza de lo simple y
cotidiano. Por eso elijo objetos domésticos viejos, en desuso
para transformarlos a través del fileteado, en piezas que
despierten alegría. Elijo colores cálidos y tiendo a las
composiciones con flores y pajaritos.
Silvia Dotta
Esta es una de mis obras preferidas, Encanto de bandoneón. Siento que
aquí he podido volcar lo que me inspira el fileteado porteño:
dinamismo, pasión, color, estética, armonía, unidad, sensualidad,
belleza, distinción, síntesis... Es un constante desafío a mi creatividad
e inspiración, como en un permanente juego de movimiento,
contrastes, luces y sombras, lo que me ha permitido plasmarlo en una
diversidad de superficies y texturas. La motivación puede surgir
desde una imagen ,un personaje , una canción , una frase , una
emoción.. es ahí donde el filete renace a la vida.
Claudia Berlusconi
"EL Filete y Yo", obra que trata de sintetizar mi experiencia
junto a esta pasión, esta obra reune la Fuerza, la suavidad, la
simpleza, lo complejo y las vueltas de la vida. En mis obras
siempre pongo el corazón y el alma, dejando ver a traves de
ellas una gota de nostalgia, una cuota de perseverancia y un
alto porcentaje de pasión, los cuales trato de plasmar en el
soporte mediante mi pincel.
Walter Quiroga
Nos interesa difundir tu obra. Manda una foto y una breve reseña a:
[email protected] y nosotros la publicamos.
YIRA YIRA
RECORRIENDO FILETES POR LAS CALLES
Untroib y el Bar
Plaza Defensa.
L
eón Untroib
(1911-1994) fue
uno de los
mayores maestros que
tuvo el fileteado en su
historia. Pintor de
carros y camiones,
Untroib fue uno de los primeros en
realizar cuadros y carteles cuando el
fileteado empezó a realizarse sobre
nuevos soportes a principios de la
década de 1970. En la actualidad, a
casi 20 años de su fallecimiento,
todavía es posible ver algunos de sus
trabajos por el barrio de San Telmo y
en otros puntos de la ciudad de
Buenos Aires. Estos carteles, pese al
mal estado debido al paso del
tiempo, nos siguen acompañando en
nuestro andar cotidiano y
mantienen viva la memoria y la
presencia del maestro.
Uno de los lugares donde más obra
de León puede encontrarse es el Bar
Plaza Dorrego (Defensa 1089), café
notable y refugio de los
puesteros de la tradicional
feria de anticuarios de la
plaza homónima, donde
Untroib vendiera sus
fileteados por casi un cuarto
de siglo. Allí, sus bellos
cuadros nos invitan a beber
mil tragos y a deleitar el
paladar con lomitos y
hamburguesas.
Gustavo A. Ferrari
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www.fileteadores.com
Me
lo
conto
un
pajarito
HISTORIAS PARA COMPARTIR
Beto Yapán
LIBROS QUE NO MUERDEN
EL PRIMER LIBRO
SOBRE FILETEADO
P
ublicado por Ediciones
de La Flor en 1974,
Chofer buena banana
busca chica buena mandarina
fue el primer libro dedicado al
fileteado porteño. Su autor, Norberto Folino, retoma y
complejiza lo que había sido un breve capítulo de Las
cosas que se piantan, editado por el CEAL en 1971.
Escrito en un tono entre irónico, socarrón y erudito, el
libro ofrece una mirada general sobre el fileteado,
empezando por el tema de las frases, discutiendo la
lectura metafísica de Borges sobre el saber de los carreros
y planteando comparaciones con otras formas de arte
decorativo.
Si bien el autor estudia al fileteado en tanto estilo pictórico
ya que “las inscripciones de los carros complementan una
decoración” y remarca lo absurdo de “tratar de interpretar
los textos separándolos de la unidad plástica donde están
insertos”, gran parte del libro es un compendio de frases
tomadas de los carros, camiones y colectivos.
A nivel gráfico, se destaca la tapa pintada por León
Untroib y las imágenes de camiones de época, aunque es
de lamentar la falta de una mayor cantidad de fotos.
En definitiva, se trata de un libro pionero, cuya mayor
virtud fue la de intentar abrir un campo temático en el
momento en que el fileteado lograba su reconocimiento
artístico.
Gustavo A. Ferrari
Q
ueridos amigos y colegas: Tenemos el gusto y
la alegría de invitarlos a todos a la
Asociación de Fileteadores. Luego de varios
meses de mucho trabajo, se está concretando el
sueño de muchos Fileteadores de poder brindar a
todos los colegas esta herramienta.
La asociación de Fileteadores es un ámbito de
intercambio y discusión de ideas, plural y abierta a la
participación de todos los colegas y amantes del
Filete Porteño.
Esta Asociación surgió del Foro Abierto realizado en
2012, en el 1er. Encuentro de Fileteadores en
Mataderos. De esta propuesta realizada en aquella
oportunidad con la presencia de aproximadamente
200 personas, un grupo de Fileteadores se abocó a la
realización de éste proyecto, quedando conformada
en su inicio por unos 25 socios fundadores y una
comisión directiva de 18 Fileteadores, y esperamos
que se vayan sumando muchos otros colegas a
colaborar en este proyecto.
Entre las actividades realizadas hasta el momento,
podemos comentar que éste mismo grupo de
trabajo es el que ha organizado el 1er. Encuentro de
Fileteadores; Realizamos una Muestra colectiva en el
Centro Cultural Cine El Plata de Mataderos, con la
participación de más de 40 Fileteadores expositores
y aproximadamente unos 500 asistentes; Se han
hecho conferencias y clínicas de filete a cargo de
reconocidos Maestros Fileteadores; Charlas debate
sobre las distintas problemáticas del oficio;
Realización de un Video Documental sobre
Filete Porteño; Homenaje al Maestro Leon
Untroib; Festival artístico en el marco de los
festejos por el día del Fileteador;
Inauguración de la Sala permanente de
Filete Porteño en el Museo de la Ciudad;
Cena de Fin de año de Fileteadores, y
recientemente la muestra de socios
fundadores en el Museo de la Ciudad.
Cabe destacar que gracias al esfuerzo
de la Asociación se pudo finalmente
inaugurar luego de 5 años, la Sala
permanente de Filete Porteño en el
Museo de la Ciudad, que es además la actual sede
social de la Asociación de Fileteadores. Y que éste
año estamos impulsando el Concurso Anual de
Fileteadores, que nos vienen prometiendo también
desde hace 5 años y que confiamos se concretará
éste año.
Creemos que en éste corto tiempo, estos logros que
quizás no son muchos, pero si importantes para
nosotros, pueden multiplicarse con la ayuda de
todos nuestros colegas.
Algunos de nuestros objetivos y aspiraciones son:
Elaborar proyectos culturales, difundir y valorizar el
Filete Porteño, velar por los derechos laborales de los
fileteadores, realizar acciones de difusión,
seminarios, cursos de capacitación, talleres,
congresos y conferencias, gestionar espacios para
muestras colectivas e individuales de los socios,
gestionar subsidios para la concreción de
emprendimientos laborales, creación de un archivo
documental y confeccionar un padrón oficial de
fileteadores, velar por los derechos de autor, etc.
Creemos que estas cosas solo podemos lograrlas con
la ayuda de todos ustedes. Y sabemos que las
características de nuestro oficio en algunas
oportunidades ha generado individualismo y
muchas veces la competencia y hasta la rivalidad
entre algunos colegas. Pero confiamos en la fuerza
de la unión, y creemos que es más beneficioso para
todos lo que podamos lograr en conjunto, aceptando
las diferencias, pero poniéndonos a trabajar en
aquello que nos une. Quienes hemos decidido ser
fileteadores tenemos cierta sensibilidad, y un amor
por éste arte popular argentino. Apelamos a estas
cosas que tenemos en común para ponernos a
trabajar en conjunto por el Filete Porteño.
Por esto queremos comunicarles a todos los
que quieran sumarse como socios, que
pueden ponerse en contacto con nosotros a:
[email protected]
O a través de nuestra web:
www.fileteadores.com
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