12 F a c u l t a d d e M e d i c i n a de R o s a r i o . C a t e d r a de Clínica Quirún>ica del Prof. CAMES P o r el Doctor RICARDO ERCOLE PERFORACION DEL URETER EN PERITONEO L I B R E (*! L a perforación espontánea del uréter en peritoneo libre parece ser, de acuerdo con nuestra búsqueda bibliográfica, una complicación realmente extraordinaria por su rareza de un cálculo impactado en el uréter. Ello justifica el relato de la presente observación cuya historia clínica resumimos: Observación personal. — Davidina de C. de 41 años, argentina, casada. Ingresa a nuestra CKoisgs nrívada p a r indicación del Dr. Rilesio el 28 de noviembre de 1 9 3 8 . Ai-rtecvdi'ntes permnak'.s: gulares, indoloras. Enfermedad Apendiecetomía hace 10 años. N o es constipada. uclual. 'Tiene una hija sana. Menstruaciones re- N o hay abortos. — I lace 24 días fuerte dolor en su región lumbar dere- cha con irradiación al h i p o c o n d r i o del mismo lado, seguido de vómitos y temperatura elevada, fenómenos que le d u r a n 2 a 3 días y habiendo seguido después de entonces con dolores moderados f a veces temperatura subfebril. en ana ocasión bemaUma discreta, total, sin coágulos, Ha tenido Dice la enferma que hace 3 ó 4 años t u v o varias vares un dolor semejan te seguido de vómitos, escalofríos y temperatura, Eütad u úe luid, ción. — Tin ferina bien constituida, en moderado estado de nutri- Piel v mucosa más bien pálidas. y corazón nada de par¡indar. mente por debajo del reborde Aparato urinaria, grande, indoloro. Cistoscopía: Tensión arterial Mx A b d o m e n : globuloso. 1 2 . 5 ems. P u l m ó n Hígado se palpa inmediata- costal. - - Riñones: el derecho se lo palpa en su polo inferior, El izquierdo no se palpa. buena ¿¿paridad. P u n t o s ureterales indoloros. Trígono con ¿estivo. Del Constata la presencia de dos nícalos, urétera les en buena posición. lado derecho se Del lado izquier- do hay un solo meato. Exámenes de laboratorio: no hay. ;*i Sedimento: Orina: albúmina a b u n d a n t e cantidad de pus. 0.10 «rs. p o r mii. Bastantes hematíes. Presentado en 'a Reunión del 2 > de Noviembre de 1939. Glucosa: evlsía J^rgetitina de ta Examen bacteriológico. - —• Se observan P c c o s diplocccos gram positivos t i p o Sangre. — blancos 7 3 0 0 . tos. Hemoglobina 83 en bastante cantidad. neumo. %. Glóbulos T i e m p o de sangría 3 m i n u t o s . rojos' 4 . 000 000. Glóbulos T i e m p o de coagulación 5 m i n u - Urea en suero 0 7 2 grs. p o r mil. C o n s t a n t e de A m b a r d 0 23. del l a d o i z q u i e r d o . Exploración F r a n c o retardo eyaculatorio Del lado derecho no se observan radiográfica. izquierdo se constata opacidad Cromocistoscopía: Se inicia la eliminación del colorante a los 8 m i n u t o s , t i n u a n d o 1? coloración débil. riñon colibacilos 13 m u y débil. — Radiografía la existencia de un Correspondiendo simple: En con- eyaculaciones. la proyección cálculo de t i p o c o r a l i f o r m e . a la proyección del uréter del de derecho a la altura del sacro se visualiza una sombra opaca de u n o s 4 cms. de largo p o r 1 cm, de d i á m e t r o transversal Pieloqratía (fig. endovenosa. 1). — Se esboza una pequeña pelvis del lado derecho. Se d i b u i a n apenas los cálices dilatados del lado decide una pielografía ascendente del lado izquierdo. derecho. Por este m o t i v o Se caterizan ambos se uréte- res deteniéndose en u n o de ellos la sonda a los 10 cms. Doble de los uréteres. Se constata que la otra Se d i b u j a una pequeña pelvis superior. entrecruzamiento sonda ureteral se ha detenido a la ahur?, del cálculo ureteral. r e f l u y e n d o parcialmente el l í q u i d o a la vejiga y d i b u j á n d o s e p o r encima un (Fig. 2 ) . uréter m u y dilatado. N o se considera p r u d e n t e insistir en la inyección de más l i q u i d o contraste para visualizar la pelvis renal inferior. E n esLas condiciones se decide la intervención sobre su cálculo derecho. de K'Ñevisía J¡.rgenüm ^ d e Operación. — 9 de diciembre de 1 9 3 8 : Anestesia con ciclopropane, Incisión ilíaca oblicua, I,ligado al peritoneo se lo rechaza, visualizándose el uréter e n f e r m o que- está m u y engrosado y rodeado de un proceso de peri ureteritis de tipo esclerolípomatosa. T a l l a del uréter extrayéndose el cálculo. Se explora el uréter en ambos sentidos, constatándose que Su luz está libre. T r e s p u n t o s separados de catgut a ¡a pared del uréter. Un tubo y una gasa de drenaje, Sutura de los músculos en dos planos; lino a la piel. Pos/ operatorio. — Sin particularidades. 20 días de la intervención. La enferma es dada de alta a los Se indica tratamiento médico. La enferma ha con- t i n u a d o sin novedades hasta el m o m e n t o de su reingreso con m o t i v o de su accidente. /•i't !!.'•/''(.•,,.!. — 2 3 de | u I i o de 1 9 3 9 : Refiere la enferma haber estado bien hasta hace diez días en que nota polaquiuria, orinas más turbias que de habitual y un. discreto dolor en su fosa ilíaca derecha, razón por la cual nos consulta hace 3 días, en cuya Ocasión indicamos una radiografía de control, constatándose en til misma y correspondiendo a la proyección del extremo inferior del uréter derecho una sombra alargada, pequeña, de poca opacidad, no permitiéndonos p o r sus caracteres sacar conclusiones definitivas sobre su naturaleza. Coincidiendo con este examen, el día de ayer tiene bruscamente un intenso dolor a nivel del hipogastrio, sin localización específica que es seguido de abundantes v ó m i t o s y de detención de las materias fecales y de los gases. El médico que la asiste cu ese m o m e n t o índica dos enemas que la enferma no evacúa. que sospechan u n o oclusión intestinal, Es atendida en consulta por dos médicos pero, teniendo en cuenta sus antecedentes urinarios, desisten de la intervención que se indicara en un principio y nos es enviada para dilucidar V e m o s en estas condiciones a la el problema. enferma al día siguiente de la iniciación de sus fenómenos agudos, constatando el siguiente; Etiladp gua acluul. húmeda, E n f e r m a que se queja espontáneamente de dolores. saburral. regular rítmico. domen — Pulso taqtiicárdico, T e n s i ó n aríe.rial M x . globuloso, de paredes: poco depresibles, ambas fosas ilíacas la palpación la pared, de Timpanismo marcado. despierta A nivel Una radiografía simple de abdomen del dolor exquisito. par, dada la tensión de las paredes abdominales. minuto, Tonos cardíacas normales. No g j observan genital negativo, lo mismo que el tacto rectal dos. í 30 do frecuencia por 1 2 cms. hipogastrio N ó hay LenAby en defensa de ondas peristálticas. Examen Los ríñones son difíciles de palT e m p e r a t u r a axilar 3 8 .5 gra- buscando niveles líquidos es negativa. INo se visualizan tampoco sombras de cálculo en la proyección del uréter pelviano. Evolución, tre, suero — clorurado Sé indican envolturas húmedas calientes a nivel de su vienhipertónico, suero fisiológico, tónicos cardíacos. siguiente sus dolores se han atenuado aunque persiste la temperatura, ma tiene espontánea mente deposición de tipo diarreico. Esta mejoría Al día Ta enferse man- tiene 4 días más, basta que el 28 de julio reaparecen dolores muy intensos en el b a j o vientre, vómitos, detención de materias fecales y de gases, taquicardia, so pequeño. pul- A b d o m e n nuevamente tenso, teniéndose la impresión de existir una moderada defensa muscular con dolor más exquisito en la fosa iliaca izquierda. ^^evisia rgentina 3 de m ~ — — = • U n a nueva radiografía de a b d o m e n sulta 15 en el sentido de buscar niveles l í q u i d o s re- negativa. E n este m o m e n t o el cuadro, el es de un a b d o m e n a g u d o y en este sentido indicamos la intervención. Sin e m b a r g o mejoría no acepta la operación. la familia impresionada FlG. 2. — Del lado izquierdo cálculo de t i p o coraliforme. a m b o s uréteres. En p o r la primer Al día siguiente y a pesar del t r a t a m i e n t o u n o de ellos la sonda se detiene Se h a n mé- cateterizado a nivel del cálculo ureteral y se visualiza p o r encima del m i s m o urétero m u y dilatado. dico el estado general es s u m a m e n t e grave y recién en ú l t i m a instancia ios f a m i liares consienten en que la enferma sea intervenida. Operación. para-rcctal — izquierda. sanguinolento, con 2 9 de julio de 1 9 3 9 . de Anestesia con cicloprane. Abierto fuerte olor el p e r i t o n e o amoniacal. sale una gran Peritoneo cantidad de uniformemente Incisión liquido conges- tivo. L l e v a n d o la exploración hacia D o u g l a s se constata que el proceso neal es más intenso a dicho nivel, viene más cantidad también líquido de la enferma, p,G. 3. purulento na franco. se considera Pictografía Dadas prudente ascendente: las una de l i q u i d o condiciones exploración y finalmente sumamente más del lado derecho que d i b u j a peritograves cuidadosa. un uréter Se muy dilatado y en la parte inferior la efracción del l i q u i d o de contraste en el sitio de la r o t u r a ureteral. situado m u y p o r d e b a j o del sitio en que asentaba el a n t i g u o cálculo ureteral ( V e r Fig. 2). procura evacuar r á p i d a m e n t e t o d o el l í q u i d o peritoneal y se dejan c u a t r o gasas y un t u b o colocados en el D o u g l a s . p u n t o de partida aparente del proceso p e n toneal. Cierre parcial de la herida operatoria en dos planos. (fyevista j£rgenfiná ^ d e na- I'ost operatorio, — — Ai día siguiente la e n f e r m a 17 se encuentra dolores han desaparecido a u n q u e persiste la taquicardia. operatoria hay a b u n d a n t e salida de liquido. trata efectivamente índigo carmín inyección. de liquido el cual mancha Se conectan los urinoso, A través de su se hace tubos una de inyección drenaje giéndose d i a r i a m e n t e alrededor de 5 0 0 c,c. de orina, las vías naturales de u n o s 6 0 0 c.c. con herida endovenosa de 8 m i n u t o s de la un recipiente reco- siendo la eliminación por A los 1 0 días se i n t e n t a cateterizar el uréter derecho, pero la sonda se detiene a 5 cms. de la vejiga. izquierdo con facilidad y se deja la sonda pero sin d i s m i n u i r la cantidad sus C o n el o b j e t o de c o n f i r m a r que se las gasas de la curación a los gruesos mejor, de orina Se cateteriza el riñon 24 h o r a s d r e n a n d o bien dicho riñon p o r la herida hipogástrica con lo cual se descarta que sea el uréter izquierdo el que hubiera s u f r i d o el proceso de perforación. Se repite la tentativa de s o n d a j e a los dos días consiguiéndose pasar una pequeña sonda ureteral N" 8 en u n o de los uréteres del lado derecho, que se deja a permanencia reemplazándola al día siguiente p o r una sonda más gruesa y d r e n a n d o bien su riñon con lo cual n o sale más orina p o r la herida trica. Esta sonda se tapa con facilidad p o r cuyo motivo hipogás después de dos días se extrae la sonda y se desiste de seguir cateterizando el uréter c o n s t a t a n d o en este m o m e n t o que la e n f e r m a ya no m o j a más su herida a b d o m i n a l e l i m i n a n d o toda su orina por las vías naturales. Aprovechando su sonda ureteral a ascendente que d i b u j a el uréter dilatado, chados y apenas visualizados, permanencia se hace una pelvis pequeña d i b u j á n d o s e en el e x t r e m o A los 29 días de la intervención se retiran va cicatrizando bien, el estado general ha (Fig. pielografía y con cálices estre- inferior del uréter trayecto extra-ureteral que corresponde a la rotura del uréter. vado radiográficamente el sitio de la perforación una Queda así o b j e t i - 3). los t u b o s de drenaje, la herida mejorado. Sin e m b a r g o desde enton- ces la enferma empieza a d i s m i n u i r su diuresis que antes era alrededor de litro y que en los días subsiguientes llega 2 0 0 c.c. un a mantenerse en una cifra de 1 5 unos C o n c o m i t a n t e m e n t e con ésto aparecen v ó m i t o s , el estado general decae, hay inapetencia. Fa tasa de urea que i n m e d i a t a m e n t e después de la era de 0 4 8 grs. p o r mil. se eleva a 2 2 0 grs. combatir anemia, la suero clorurado hipertónico general se agrava y su diuresis es cada vez m e n o r . intervención T r a n s f u s i o n e s de sangre endovenoso etc. El para estado A los 4 0 días de la interven- ción la enferma con el cuadro claro de una uremia, pide el alta, talleciendo a los pocos dias en su domicilio. A pesar cíe n o h a b e r p o d i d o d e m o s t r a r al través de r a d i o g r a fías c o n c l u y e n t e s o en el acto o p e r a t o r i o la presencia de un cálculo, creemos q u e esta p e r f o r a c i ó n debe a t r i b u i r s e a u n cálculo q u e origin ó p r i m e r o al i m p a c t a r s e en el uréter, un cólico ureteral y el c u a d r o a b d o m i n a l r e f l e j o q u e s i m u l a r a u n a oclusión i n t e s t i n a l y secundar i a m e n t e la ulceración de la pared a n t e r i o r del uréter p e l v i a n o que evisía de Jlrgertün a ta 18 p r o v o c ó su perforación en p e r i t o n e o libre, Es interesante destacar la mejoría inmediata al acto q u i r ú r g i c o con el simple d r e n a j e del f o n d o de saco de D o u g l a s y además el cierre de la fístula a los 2 0 días de la intervención, lo que nos h i z o pensar en la curación de la en l crin a. Sin e m b a r g o la agravación de la insuficiencia renal que presentaba ya antes de su primera intervención, llevó a u n a uremia progresiva que t e r m i n ó con nuestra paciente. F u n d a m o s la presunción diagnóstica de un cálculo enclavado en el uréter en los antecedentes litiásícos de nuestra enferma, en el carácter del episodio inicial de un cólico ureteral y en el hecho de ser difícil e n c o n t r a r otra explicación satisfactoria para justificar esra complicación. La no visualización radiográfica del cálculo en el m o m e n t o del accidente d o l o r o s o se explicaría por el hecho de la existencia de gran cantidad de gasiM en el intestino que dificulta la visualización de cualquier s o m b r a a n o r m a l , sin contar con la posibilidad de que el cálcalo p o r su t a m a ñ o o por su composición química fuera t r a n s p a r e n t e a los rayos X . Y en c u a n t o al acto operatorio él fué por fuerza incompleto, d a d o que por las condiciones generale.; graves de la enferma, nos l i m i t a m o s t a n sólo, u n a vez cons:a:ada la peritonitis por i n u n d a c i ó n perifonea], a dejar un dren a j e en el f o n d o de saco de D o u g l a s , sin i n t e n t a r n i n g u n a exploración en el sitio de la supuesta perforación. P o d e m o s accp'.ar que la perforación del uréter es una complicación m u y rara de la litiasis ureteral, si nos atenemos al escaso n ú m e r o de observaciones publicadas y en relación sobre t o d o de la frecuencia de la litiasis urinaria. F o u l d s y V a r e y en el a ñ o 1 9 3 4 a p r o p ó s i t o de una observación personal de rotura del uréter y extravasación de orina al espacio perírrenal, revisan la bibliografía e n c o n t r a n d o en total 8 ca^os publicados desde la primera observación de A l b a r r a n en el a ñ o 1895, y agregan además tres observaciones meditas. E n n i n g u n o de estos casos estaba c o m p r o m e t i d o el peritoneo. G o í d i n en el a ñ o 19 36 al presentar a la Sociedad de U r o l o g í a de P a r í s u n a observación de perforación del uréter, hace n o t a r que L i o n en el a ñ o 19 30 recopila 20 casos en casi todos los cuales, c o m o en la observación de G o i d i n , la perforación había p r o v o c a d o u n absceso subperítoneal. Surraco en el a ñ o 19 37 describe con el n o m b r e de r u p t u r a s espontáneas píelo-ureterales un s í n d r o m e consecuencia de un cálculo enclavado en el uréter, el que al o r i g i n a r u n proceso de periureteritis estrecha d i c h o c o n d u c t o p r o v o c a n d o su r o t u r a y s e c u n d a r i a m e n t e la f o r m a c i ó n ele u n a colec- ción de o r i n a , causa del proceso a n a t ó m i c o f i n a l , el f l e m ó n per i nefrítico. Relata en total 8 observaciones personales con m u y b u e na d o c u m e n t a c i ó n radiográfica que revela el sitio de la r o t u r a a nivel del cálculo. Hace pocos días hemos tenido oportunidad de operar un e n f e r m o q u e después de u n f u e r t e cólico renal inicia u n proceso febril, c o n s t a t á n d o s e la presencia de una colección peri- i r e n a l de o r i n a y d e m o s t r á n d o s e en el acto o p e r a t o r i o un cálculo e n c l a v a d o a 5 cms. de la pelvis, que h a b í a o r i g i n a d o u n proceso de periureteritis m u y intensa y l ó g i c a m e n t e la p e r f o r a c i ó n de uréter y s e c u n d a r i a m e n t e la colección de o r i n a perirrenal. P e r o si la r o t u r a del uréter en el espacio r e t r o p e r i t o n e a l es de observación muy rara, su p e r f o r a c i ó n en el p e r i t o n e o parece ser excepcional, G a u m e en el a ñ o 1 9 3 5 relata a la Sociedad de U r o l o - gía de P a r í s la observación de un e n f e r m o de 2 4 a ñ o s que es i n t e r v e n i d o p o r un absceso v o l u m i n o s o i n t r a p e r i t o n e a l ya q u e su p a r e d está c o n s t i t u i d a p o r una serie de asas intestinales a d h e r i d a s y a d e m á s p o r el uréter que está p e r f o r a d o y presenta u n cálculo de c a r b o n a t o de calcio t r a n s p a r e n t e a los ¡ a y o s X . Se ha c i t a d o t a m b i é n algún caso c o m o en la o b s e r v a c i ó n de T h o m p s o n y Spencer W e l l s en q u e un cálculo ha sido e l i m i n a d o p o r el recto. sin e m b a r g o en nuestra búsqueda N o hemos bibliográfica encontrado ninguna ción s e m e j a n t e a la n u e s t r a de p e r f o r a c i ó n del uréter en observaperitoneo libre. BIBLIOGRAFIA Füitlds G. S. y Varey D. lo ureteral caiculus. H. — Brit. Extravasation of urVie f r o m J o u r n a l of U r o l o g y VI, uréter secón da ry 1 9 3 4 . Pag. 27. Gaume P. — Calcul ureteral, abcés péri-urétcral o u v e r t dans le peritoinc. nal d ' U r o l o g í e , X X X I X , 1 9 3 5 , Pag. 6 3 . Jour- Goidm. Abcés — Sur un cas de calcul de I'uretére ayant péri-uréiéral, Lion Nepbrectomíe. K. — S p o n t a n p e r f o r a t i o n 1 9 3 0 . Pag. 1 8 9 2 . Surraca /.. A. — XLIII, 1 937, Ruptures P a g . 34 Bull. von Soc. Pranc, ureterstein. spontanées rompu ce c o n d u i t . d'Urol. 1 936, Medízinisehe pyélo urétérales. Pag. Klinik. Journal 217. XXVI. d'Urologie, DISCUSION: D r . Surra C a n a r d . — r's indudable que la presencia permanente de un cálculo en el uréter tiene una función isquémica sobre la pared del mismo. Además, si es un proceso inflamatorio, no es extraño que a la isquemia se agregue un proceso mortificante de la pared ureteral y entonces, la complicación de perforación del uréter es una consecuencia lógica y razonable. Hace pocos días, tuve oportunidad de operar un enfermo con un cálculo en el uréter, al que se le agregó un fenómeno inflamatorio y cuando se fué a hacer la extirpución del cálculo por la vía lumbar, se comprobó que el cálculo estaba ya en el uréter perforado. Se sacó el cálculo y por supuesto, el riñon y al hacerse la ligadura, se desgarró) el muñón ureteral. lo que significa que ese uréter que ha estado alojando un cálculo durante mucho tiempo, por su proceso de isquemia, ha mortificado ¡os tejidos nobles del uréter y predispuesto a cualquier complicación de esta índole. D r . García. — El caso mencionado por el doctor Etxole es extraordinario, por el hecho de haber sido ejecutado en el peritoneo libre, lo que estaría justificado por el efecto de la intervención ulterior. I oda ureterostomía significa una adherencia mucho más intensa con el peritoneo, y aunque a juzgar por la uréter ogvaf'ía podría considerarse que la abertura es más baja que el sitio de la incisión, es evidente que el sitio de la incisión con la cicatrización del tejido ureteral, es posible que cree un sitio de menor capacidad de resistencia al pasaje del cálculo. En cuanto a la ubicación radiológica, el uréter en su cicatrización. en su fijación, después de la ureterotomía, es susceptible de sufrir desviaciones, por las cuales es muy difícil comparar el sitio de la ureterotomía primitiva con el s lio de la rotura posterior, Considero que la abertura del peritoneo, debe estar supeditada hasta cierto punto, a la intervención ulterior que ha creado una adherencia del peritoneo con el uréter. D r . Pagliere. — Teniendo en cuenta que el uréter es un conducto extra-peritoneaí. hay que admitir que primero se ha hecho ía perforación del uréter en el tejido celular. Secundariamente, por evisía J¡^rgeniina de ía 21 necrosis del peritoneo y del tejido celular que bordea al uréter, se ha perforado el peritoneo y se ha conducido secundariamente, a la rotura del uréter, en comunicación con el peritoneo. He observado un par de veces perforaciones del uréter; unas provocadas por cálculos y otras, por litiasis, en las que había hecho anteriormente una ureterotomía para extraer un pequeño cálculo del uréter pélvico, D r . G r i m a l d i . — Quiero agregar un caso que indica lo ordinario de la presentación del docto Ercole y que contradice de lo que dice el doctor García. extraalgo Opera un enfermo al año de haberle hecho una ureterotomía por un cálculo bajo del tamaño de una nuez. Al año, el enfermo viene con un cálculo en el mismo sitio. Hago una nueva ureterotomía laboriosísima, 1:1 peritoneo adherido se abrió una cantidad de veces y llegué al cálculo pudiéndolo sacaré El enfermo hace un postoperatorio perfecto, pero tratándose de un hombre con un riñon único —una hidronefrosis muy grande — y teniendo que irse al interior, se me ocurrió hacerlo una ureterostomía por electro-coagulación. Después de. eso, a las pocas horas, el enfermo siente un dolor intensísimo y entra en anuria. por ¿4 horas no elimina ninguna cantidad de orina por vejiga, haciéndose después de ese tiempo la Cüteterr/MCión del uréter. D r . Ercole. contribución de los No me queda colegas. más que agradecer la interesante En cuanto a las observaciones que nos refiere el doctor Surra Canard, el doctor Pagliere y el doctor Grimaldi, son muy inte re san tes porque son perforaciones del uréter subperiloneales y porque son observaciones poco frecuentes., pero que no se superponen a la nuestra de perforación en peritoneo libre. En cuanto a la sugestión del doctor García, debo decirle que en el abordaje del uréter sobre el cálculo caemos inmediatamente, sobre el cálculo, cosa que se deduce fácilmente, porque siendo el cálculo tan grande, al decolar un poco el peritoneo se cae en seguida sobre el mismo, Yo no creo que el acto operatorio haya tenido en ese sentido influencia para provocar una adherencia mayor del uréter con el evisía Jirgentina de peritoneo. <1Q Me parece Pagliere. También sido vez tal doloroso un hemos pequeño con un poco per i tone al que secundariamente más también lógica pensado abeeso de temperatura se podía la perforación la deduccióm que que seguramente peri-ureteral y sobre explicar del uréter que todo, por y del eso, hace el doctor el proceso dio el la gran y que peritoneo. ha cuadro reacción originó