Nuestro “Licant” El Liceo Antioqueño es un colegio lleno de grandes metas, tiene muchos proyectos y una gran visión, más que eso es una gran familia, compuesta por todo quienes en él se encuentran, muchas veces olvidamos el valor sentimental que este pueda tener para nosotros, nosotros que ya tenemos un hogar (bueno tal vez la mayoría) que ya tenemos familia y que tal vez no sintamos ni el mas mínimo aprecio por lo que es nuestro colegio. Si juntáramos todo lo malo o más bien no malo, lo “negativo” que tiene el hecho de ir al colegio, pues si, tendríamos TANTO para decir, podríamos decir muchas cosas como las tareas, las madrugadas, los profesores que nos caen mal, las materias que consideramos relleno, el poco tiempo del descanso, que nuestro bolso pese tanto, el frio tan tremendo, el sueño y todo esto que mas que algo negativo del colegio lo podemos resumir en una sola palabra ¡PEREZA! Aun cuando todo esto resulta tan pero tan extenuante aun está ahí una sola razón que nos hace levantarnos a las 4:30 AM (a algunos incluso más temprano), para cada quien es una diferente, pueden ser los amigos, el “desparche” o no falta el buen mentiroso que diga “el deseo de aprender”, como sea el colegio es el lugar donde pasamos la mayor parte de nuestro VALIOSO tiempo, todo tiene que ver con el colegio ¡PERDON! Corrijo, todo tiene que ver con cómo nos va en el colegio, todo tiene una gran relación incluso nuestro futuro depende de ello (casi nada ¿no?). El Licant es más que un colegio, diría yo, bueno por lo menos para mí lo es, es decir, es un lugar bastante cómodo, allí tenemos amigos, nos llevamos bien con uno que otro profesor, y pasa lo mismo con los compañeros; es decir aunque nos engañemos diciendo que vamos a estudiar es bastante obvio que no es lo que hacemos algunas veces, me refiero a que claro que si, debemos centrarnos en eso, ya que es el principal objetivo, pero, no es con lo que nos encontramos cuando vamos a estudiar. A lo que quiero llegar es a que nuestro colegio está lleno de grandes dificultades aun con todo lo bueno que tiene, porque algunas veces nuestro papel como estudiantes tiende a verse distorsionado, es decir si nosotros mismos hacemos parte de nuestro desarrollo integro como personas ¿Por qué no podemos nosotros tomar parte de él y hacerlo posible? Todo aquello que hagamos ahora en el colegio será lo que determine lo que seremos en un futuro muy próximo y es importante que sepamos que es “eso que estamos haciendo” para contribuir a “ese futuro” bastante próximo, es importante que cada uno de nosotros tengamos claro eso, el ir al colegio tiene más que un millón de razones para hacerlo y nuestra opinión cuenta demasiado para lo que nosotros queremos ser, mas bien no cuenta demasiado, cuenta más que cualquier persona en el mundo, en el Licant hace falta eso hace falta que nos escuchen que nos hagan parte de lo que hacen por nosotros, es decir cómo es que logran hacer tantas cosas por nosotros y ni siquiera incluirnos, no con ello quiero decir que los profesores y las directivas hacen un pésimo trabajo porque de ninguna manera es así, lo importante es que tengamos claro todos que lo que hacemos lo hacemos por nosotros que nadie más lo debe hacer. Así como he dicho que la forma de educarnos no es diciéndonos lo que debemos hacer, si para nosotros mismo no tiene eso sentido, también debo decir ahora que si nosotros mismos no nos tomamos en serio, si no estamos centrados en lo que queremos y lo que no queremos nadie nos puede decir que es lo mejor para nosotros pero de ese mismo modo debemos tenerlo claro para nosotros mismo y lo que hacemos al ir al colegio sin saber en verdad que queremos, es hacerles perder el tiempo a todos, porque si, son todos a quienes estamos perjudicando. Al igual la educación debería ir desde una perspectiva mucho más amplia y nuestro colegio no podía ser la excepción se trata de tener mas espacio para nosotros, se trata de dejar de ver a los profesores como algo divino o algo insuperable, podemos tener una buena relación y tener claro los limites que esto implica. Como seria si muchos de nosotros le dejáramos el miedo a lo que es hablarle a un profesor, y con miedo me refiero incluso a quienes son capaces de enfrentársele a un profesor porque de ninguna manera se logra nada si estamos a la defensiva porque estar así, como esperando el golpe para atacar también eso es peor que el miedo, si lográramos hablar y mejor aun que nos escuchen todo sería mejor incluso para quienes no nos escuchan. Lo más importante de todo esto es que tal vez las cosas no cambien en nuestra institución, o lo más probable es que estas palabras no sean lo sufriente para que logren ser más que un ensayo, lo importante es que debemos aprender a generar en nuestra institución espacios donde se dé el dialogo, donde tanto estudiantes como maestros sepamos el verdadero significado de lo que es educación. Nos han enseñado toda la vida la importancia de aprender a respetar a un superior, nos han inculcado que la autoridad como tal merece ser acatada y nunca refutada, pero nunca nos han dicho porque, si lo que en verdad queremos es quedarnos en el deber sin tener claro el por qué, pues sí, entonces seamos fieles a la autoridad como entes que están aquí solo para ello para obedecer, se nos dice sin embargo que aquello que dice la autoridad es lo que está bien, mas como podemos estar seguros de ello, si tal vez sea lo que no está bien para mi, pues bien no se trata de rebelarse ni mucho menos refutar todo porque simplemente es algo que dice la “autoridad” y ya por ello debemos contradecirlo todo, no, se trata de pensar él porque de nuestros actos y de cómo esto está influyendo o no en nosotros él porque nos dicen no sin el dialogo, se trata de pedir explicaciones porque se trata de nosotros de quien se está hablando todo gira en torno nuestro, la institución existe por nosotros, los profesores las directivas, los vigilantes, los empleados, todo en cuanto conocemos en el Licant tiene una razón de ser y esa razón de ser somos nosotros, porque no hacer parte de ello si es que somos nosotros precisamente por lo que está allí.