¿Traducción, mejor que original?

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24 LA VANGUARDIA
O P I N I Ó N
MIÉRCOLES, 25 ENERO 2006
¿Traducción, mejor que original?
B
rokeback Mountain se
ha convertido en una de
las películas de la temporada. Ello ha hecho que
se hable como nunca hasta el momento de la narradora cuyo relato
da origen a la película, E. Annie
Proulx. De ella leí, en 1997, Accordion crimes, la historia de un acordeón fabricado por un siciliano y
que, desde Nueva Orleans, pasa
de un propietario a otro: granjeros
del Medio Oeste, un músico texmex, un pastor vasco, un huérfano
quebequés... En El Periódico Núria Navarro entrevistó a Proulx el
miércoles pasado, y ahí explicaba
los orígenes de su familia, que tienen bastante que ver con ese personaje huérfano: “La familia de mi
padre llegó a Quebec en 1637. Mi
padre se avergonzaba de ser un canadiense francés. Hizo lo imposible para ser un yanqui. Nunca hablaba en francés. Borró su pasado.
Y se casó con mi madre, que era
de Nueva Inglaterra”. Proulx habla también de su timidez infantil, de cómo observaba a los otros
niños mientras jugaban y de que
se refugiaba en los libros: “Cuando tenía unos nueve años iba a la
biblioteca pública y escogía los libros por el color de la cubierta.
LA IDEA DE QUE
los libros son mejores
o peores según el color
de su cubierta es
atrevida
Descubrí que los beige eran los
más interesantes. El motín del
Bounty era uno de los beige”.
La idea de que los libros son mejores o peores según el color de su
cubierta es atrevida. Dicen en inglés algo que, precisamente, afirma lo contrario: “Never judge a
book by its cover”, nunca juzgues
a un libro por su cubierta. Es un
consejo sensato, porque a menudo
encontramos maravillas escondidas tras cubiertas sin ángel. Descubrí a Jordi Sarsanedas en la edición original de Mites en Editorial
Selecta gracias a que no hice caso
de la tapa. Y las de los libros de los
escritores latinoamericanos que
sorprendieron al mundo en los 60
y los 70 eran en muchas ocasiones
horrorosas. La de Cien años de soledad era anodina, y las de los libros de Cortázar, que en aquel entonces aparecían en Editorial Sudamericana y en Edhasa, tres cuartos de lo mismo.
Pero hoy hago caso a Proulx,
porque la admiro, y busco entre
los libros que tengo en casa. No
hay muchos beige: Sobre el llenguatge de Gabriel Ferrater; Cuentos picarescos de Honoré Balzac;
Coses de l'Albert Llanas de Josepa
Llanas; Poesia eròtica i pornogrà-
m Tot sigui per la foto
m Una foto per governar-los
a
tots, això és el que devia pensar Artur Mas dissabte, que amb la foto
s'assegurava el protagonisme que
tant reclama, i sumava punts davant les properes eleccions. Espero
que sapiguem posar-lo al seu lloc i
li donem la reprovació electoral
que es mereix per haver venut Catalunya per una foto.
Aquesta maleïda foto ens ha sortit cara, i ha mostrat els interessos
partidistes de CiU. Sense anar més
lluny, fa una setmana Mas es negava a que el terme nació se situés
només en el preàmbul del text i no
aparegués en l'articulat. “Donde
dije digo, digo Diego”, deu pensar,
i si després de negar-se a reformar
l'Estatut durant el govern de CiU
ara té l'oportunitat d'apuntar-se el
mèrit, s'accepta i punt.
ANTONIO GARCIA
Barcelona
m Unidad familiar
m En una familia de 17 hermanos, siempre puede haber tres o
cuatro que sobresalen. El ritmo
que llevarán unos no será el mismo que el de los otros. Han despuntado en los estudios, en el trabajo,
saben idiomas, ganan un buen sueldo... lo que les permite afrontar el
futuro de forma diferente. Ni mejor ni peor. En cualquier familia
pasa esto, lo importante es saberse
integrado. Unos y otros se miran
con orgullo y satisfacción. Se ayudan y se solidarizan entre ellos.
Pero es normal que existan diferencias de estatus económico, social o cultural. Es ley de vida. Cada
uno en su nivel y con respeto, se
afianzará un modelo de familia
ejemplar. El problema aparece
cuando algunos hermanos sienten
celos de otros. Quieren equipararse en todo. A poder ser, quieren parecer mejores, y para ello intentan
dominar y someter (como hicieron
sus antecesores conquistadores), y
no están dispuestos a que sus hermanos puedan ser diferentes. Les
llaman insolidarios y separatistas.
No recuerdan que son sus hermanos y los desprecian. Dinamitan la familia e ignoran que la unidad no se consigue por la fuerza.
Cuando aparecen rencillas y envidias, desaparece la confianza.
Unos consideran que no se puede
fica catalana del segle XVII, a cargo de Albert Rossich... Otros libros parecen ahora beiges sólo porqué sus cubiertas eran blancas y el
paso del tiempo las ha oscurecido:
Los siete locos de Roberto Arlt; Si
fa no fa, fals de Josep Albanell; Doña Bárbara de Rómulo Gallegos;
Le Procès-verbal de J.M.G. Le
Clézio; L'escarabat d'or de Poe, La
casa inundada de Felisberto Hernández... También algunos de los
lomos naranjas de la colección A
Tot Vent han empalidecido por
efecto de la luz y son ahora beiges.
El de El castell de Kafka, por ejemplo. El caso más sorprendente es el
de Als límits de la sal de Carles
Torner, cuyas cubiertas eran en
1985 verdes y ahora son nítidamente beiges y sólo conservan un
rastro verdoso en la zona que la
luz no toca. ¿Son ahora mejores
esos libros porque el tiempo los ha
vuelto beiges? ¿Y qué pasa con todos los libros excelentes que, en
esos mismos estantes, tienen cubiertas azules, amarillas, verdes o
rojas? Y luego está el caso de Botho Strauss. Tengo su obra Cares
conegudes, sentiments barrejats
con cubiertas beige y, en cambio,
en la edición original en alemán
sus cubiertas son blancas.
m Psicólogo clínico
m Estoy de acuerdo con
Un nuevo partido liberal
m No es la primera vez que Josep Piqué se desmarca del discurso oficial del PP fijado desde Madrid, hacia posiciones
más centristas y que seguramente tienen mejor acogida en la sociedad catalana. Hace un tiempo se habló de la posibilidad de
crear un nuevo partido que representara a un amplio sector
que no se siente identificado
con ningún grupo político.
Hasta hace poco, CiU simbolizaba el catalanismo racional,
partidario de mantener buenas
relaciones con el resto de España, porque beneficiaba a ambas
partes y se mantenía una cierta
identidad propia. Con la nueva
convivir y quieren salir de la familia,otros quieren imponerles la permanencia y sumisión. Cuando se
llega a este extremo, la razón de ser
de la unidad familiar se termina.
CARLOS LLAUSÍ
Bigues i Riells
m Surrealista atención
m El 11 de enero a las 5 de la madrugada acudimos al servicio de
urgencias de materno-infantil del
hospital Vall d'Hebron, ya que mi
hija presentaba síntomas de aborto espontáneo. Una vez confirmado el diagnóstico, requiere ser ingresada para practicarle una intervención, pero el médico de guardia no la considera urgencia inmediata, así que nos cita a las l0 h del
mismo día y nos envía a casa
Puntualmente estamos allí, pero
la situación de urgencias es caótica, nos citan nuevamente a las
15 h y nos vuelven a enviar a casa.
Esperanzados, volvemos al hospital por tercera vez en una mañana
(a esas horas mi hija padecía dolores, hemorragias, cansancio y una
gran pena por la pérdida del bebé
tan deseado). ¡Tengo órdenes de
generación de líderes convergentes, esta idea se fue perdiendo y hoy parecen competir con
ERC por quién es más radical.
Es una buena oportunidad
para empezar con un nuevo proyecto que ilusionara a los ciudadanos moderados que han perdido la confianza en la política.
Podría ser un partido liberal, al
estilo europeo, con la confluencia de diversas ideologías centristas y donde las personas, sus
preocupaciones y bienestar, fueran más importantes que el prólogo de un Estatut que muy pocos han leído.
ALFONSO GARCÍA
Barcelona
no ingresar a nadie!, nos dice una
doctora de guardia en un tono brusco y desconsiderado. Perpleja le
pregunto: Bueno, ¿qué podemos
hacer? ¿Volvemos mañana? (me
acordé de Mariano José de Larra,
con su Vuelva usted mañana). Y
me dice: ¡Me da igual lo que hagan, no puedo ingresar a nadie!
Así las cosas, decidimos volver
al día siguiente. Por fin ingresan a
mi hija y la suben a la 2.ª planta, a
reanimación, y es allí donde compruebo, incrédula, que comparten
en un espacio pequeño, divididos
los boxes por cortinas, mujeres en
situaciones tan diferentes como
las que acaban de tener un hijo
(con el bebé en brazos) y las que
acaban de perderlo. Mi hija, oyendo al bebé, me dice: “Mamá, esto
es surrealista ¡adónde hemos venido!”. Siento tanta vergüenza que
no sé qué contestarle. Mientras,
nos dan una carta de la dirección
dirigida a los usuarios que dice:
“Deseamos conserve de su estancia un recuerdo satisfactorio, al
tiempo que deseamos seguir contando con su confianza”.
TRINIDAD CUESTA
Barcelona
Laia
Boixeda, autora de la carta Futur
adult malalt (16/I/2006). Soy psicólogo escolar y en 30 años de profesión he vivido tantas veces la experiencia de alertar y aconsejar a
los padres sobre sus hijos, recomendarles un psicólogo clínico, y
que me contesten: es cosa de niños, yo a su edad era igualito, es demasiado caro, no tengo tiempo de
llevarlo, conozco una chica que le
dará unas clases y ya verá como sacará buenas notas, el pediatra dice
que está sano...
Cuando el trastorno sale en televisión, como la hiperactividad o la
dislexia, se acepta más fácilmente.
Pero ante problemas de conducta
o personalidad, deben implicarse
en la terapia y variar su forma de
educar. Yo diría que sólo un 15%
de los alumnos que han sido derivados han seguido un tratamiento
el tiempo necesario.
IRENE VAN DEN BOSSCHE
Barcelona
m El puerto de Badalona
m Desde hace dos años vivo en la
zona residencial de Front Marítim
de Badalona, y la mayor parte de
este tiempo me la he pasado reclamando ante las diferentes instancias municipales para que doten
de los servicios necesarios a este
nuevo barrio; desde la limpieza
hasta el transporte público, desde
la iluminación de sus accesos hasta el paso peatonal que permite superar la vía del tren, pasando por
la lucha por la libertad de paso por
la calle Eduard Maristany sin necesidad de pagar peaje, para acceder
a mi vivienda, a Barcelona, o a
donde crea conveniente.
Es lamentable que tenga que ser
una ciudadana de a pie la que le diga al Ayuntamiento, con políticos,
técnicos, asesores, cargos de confianza y un presupuesto enorme,
cómo debe afrontar y resolver los
problemas del barrio. Esto merma
de forma considerable mi confianza en las instituciones locales, que
deben ser las que resuelvan los pro-
blemas inmediatos de los ciudadanos, y no poner mil trabas, haciéndote sentir engañada por aquellos
a los que has votado. Pido a mi
Ayuntamiento que reflexione. Nadie puede dividir un barrio por un
puerto y menos cobrar para cruzarlo. No olviden que fueron votados
para solucionar problemas en nuestra ciudad y no para crearlos.
ENCA MARÈS
Badalona
m Generació M 68
m Excel·lents les raons i suggeriments bibliogràfics que Oriol Pi
de Cabanyes ens dóna al seu article Generación L. (16/I/2006). Descriu el desgavell de la Logse, posa
el dit a la llaga, fa referència als pares amb un lacònic “supuestos expertos de relumbrón” i dóna una
recepta sensata per al malalt gens
imaginari. Trobo a faltar, però,
nom i cognoms de les ideologies,
pedagogies i polítiques que els
aguanten i dels qui les apliquen. I
em temo que arribaríem a un llistat amb un altre títol generacional
comú: Generació M 68.
Són els qui predicaren prohibit
prohibir quan deien que sota les
llambordes de París hi trobarien
les platges de la llibertat i no sé
quantes collonades més (els qui
s'ho podien permetre, que encara
hi havia classes, i també les volien
abolir, deien). Són els elegits intocables que avui manen arreu. Els
que ens parlen de tolerància zero,
des de l'assenyat no demanar la lluna al profilàctic sortir pixats de casa... I no em malinterpretin, jo també sóc fill (natural i no reconegut) i
continuo oferint flors a alguns rebels, no pas tots, que fracassaren...
JOAQUIM PIJOAN
Barcelona
m Regular a los ciclistas
m Salgo de mi casa a las 8 de la
mañana y un ciclista pasa por delante de mí a toda velocidad por la
acera. Llego a la Gran Via y el paso
de peatones coincide con el carril
bici, otro ciclista pasa rozándome
los talones. Dos calles más abajo
un papá ciclista, que lleva un niño
en la sillita de la bicicleta, se salta
el semáforo en rojo, como si la señal no fuera con él.
Entiendo que éste no es el comportamiento de todos los que van
en bici, pero ¿no hay nada ni nadie
que regule este nuevo método de
transporte ecológico? ¿No hay leyes que lo rijan? No llevan casco,
no pagan impuestos, no obedecen
las normas de circulación, no llevan matrícula... Eso sí, la ciudad
pone a su disposición carriles especiales, aparcamientos preferentes.
Antes de que los accidentes de bici
engrosen las listas de accidentes de
tráfico, tomen cartas en el asunto.
ELENA RIGAU
Barcelona
m Carga y descarga
m Que Barcelona no es para vivir se denuncia continuamente, es
una ciudad sólo válida para el negocio y los turistas. Se da más prioridad a la carga y descarga de mercancias, para lo cual hay habilitadas zonas especiales durante toda
la jornada laborable, que a la carga
y descarga de los niños a la escuela, para lo cual no hay tolerancia ni
durante media hora, como ocurre
en Balmes-Travessera de Gràcia.
La calle Balmes es una arteria principal, pero hay una escuela a la que
llevar los niños, y no todo el mundo podemos llevarlos andando. Paradójicamente, las calles son para
circular, pero para llegar a ninguna parte, porque no te dejan parar,
a no ser que pagues, claro.
JORDI ORENGO
Barcelona
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