TEMA 28.- El ordeño en ganado ovino. Higiene y calidad de la

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Producción Animal e Higiene Veterinaria (Grupo A)
Manuel Sánchez Rodríguez
TEMA 28.- El ordeño en ganado ovino. Higiene y calidad de la leche. Lactancia artificial de
corderos.
En ganado ovino se ha impuesto ya también el ordeño mecánico, y aunque aún no se puede hablar de
una implantación total y generalizada como en vacuno, si se pude afirmar que está presente en la
inmensa mayoría de los rebaños. En esta especie se va a hablar siempre de ordeño fijo, donde todavía se
pueden encontrar bastantes instalaciones con ordeño a cantara, sobre todo en algunas explotaciones
familiares pequeñas o medianas, pero cada día son más las instalaciones con ordeño directo y unidad
final
No se van a repetir aquí las definiciones del ordeño mecánico y sus fundamentos, ya vistos en vacuno
lechero. Este tema se centrará por tanto en las características diferenciales del ordeño en esta especie,
prestando especial atención a la aptitud al ordeño mecánico, a la máquina de ordeño y a la rutina del
mismo
Aptitud al ordeño mecánico en ganado ovino
Se trata de “la capacidad de la oveja para liberar la máxima cantidad de leche que hay en la ubre ante el
estímulo del ordeño mecánico en el menor tiempo posible, y con el menor número de intervenciones del
ordeñador”. En esta especie este es un punto muy importante, ya que existe una menor facilidad para el
ordeño mecánico que en vacuno o caprino. Por ello, es muy importante conocer los criterios para la
valoración de esta aptitud. Sin duda, el criterio básico de valoración es el “fraccionamiento de la leche en
el ordeño”, es decir la cantidad de leche asociada a cada operación de la rutina de ordeño, y se pueden
distinguir:
-Leche máquina (LM): fracción de leche que se recoge desde la puesta de pezoneras hasta la siguiente
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operación o cuando el flujo de la leche se hace muy débil o cesa
-Leche apurada a máquina (LAM): Fracción de leche extraída mediante masaje vigoroso del ordeñador y
termina con la retirada de las pezoneras
-Leche repaso a mano (LRM): Fracción de leche obtenida por el ordeñador de forma manual tras la
retirada de las pezoneras. En la actualidad generalmente ya no se realiza esta operación, y por tanto esta
leche no es extraída
Sin embargo hay otros factores que intervienen y explican también este criterio, y que es conveniente
tener en cuenta, algunos de los cuales ya se han comentado en el tema anterior:
-La cantidad y composición de las distintas “fracciones de leche” liberadas durante el ordeño
-La cantidad de “Leche Residual” (LR) que queda en la ubre tras el ordeño y que no se va a extraer
nunca
-Las características de la emisión de la leche durante el ordeño o “Cinética de emisión”
-La caída de pezoneras
-La tranquilidad del animal durante el ordeño que afectará a la cinética de emisión y a la caída de
pezoneras
-La morfología de la ubre
-La influencia de las relaciones madre- cría existentes antes del destete
Las ovejas con mayor aptitud al ordeño mecánico ceden con mayor facilidad más leche sin manipulación
del ordeñador. Otro buen indicador de la aptitud de las ovejas es el “tiempo de ordeño” o duración del
flujo de la leche, que por un lado interesa que sea rápido, pero por otro, hay que tener en cuenta la
eyección de la leche alveolar, y que a mayor duración la eyección de la leche alveolar será superior (no se
pueden primar las ovejas con un solo pico de leche)
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Rutina de ordeño
Consiste en el conjunto de operaciones que tienen por objeto obtener la máxima cantidad de leche en el
menor tiempo posible sin alterar el estado sanitario de la ubre. Antes de describir las diferentes rutinas es
conveniente definir algunos términos de los procesos que se van a realizar para obtener los diferentes
“tipos de leche” ya vistos:
-Ordeño a máquina: proceso de extracción de la leche por la máquina de ordeño que transcurre desde
la colocación de las pezoneras hasta su retirada o hasta el comienzo del apurado
-Masaje intermedio: Consiste en un masaje suave y de corta duración (5-7 segundos) durante el ordeño
a máquina
-Apurado a máquina: Consiste en realizar un masaje vigoroso de la ubre, con las pezoneras puestas,
durante 10-15 segundos, que termina con la retirada de las pezoneras
-Repaso a mano: Se trata de un ordeño manual, tras concluir las operaciones a máquina
Tradicionalmente en el ganado ovino se seguía una rutina de ordeño que incluían todas estas fases:
-Colocación de pezoneras
-Ordeño a máquina
-Masaje intermedio (MI)
-Apurado a máquina (AM)
-Retirada de pezoneras (RP)
-Repaso manual
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Esta rutina es muy laboriosa (no permite ordeñar más de 70-80 ovejas por operario y hora), por lo que en
la actualidad se tiende a simplificar, y de ahí la importancia de la selección de ovejas con una mejor
aptitud al ordeño mecánico. En la actualidad:
-Colocación de pezoneras
-Ordeño a máquina
-Retirada de pezoneras
Se trata de evitar el mayor número de intervenciones del operario posibles, si acaso se realiza también el
masaje intermedio. Con esta rutina se puede llegar a ordeñar 200 ovejas por operario y hora. No obstante,
debido a la diversidad genética y de sistemas de producción existentes en ovino lechero todavía se
utilizan diferentes rutinas de ordeño
Para elegir una adecuada rutina de ordeño es muy importante tener en cuenta el tiempo medio de ordeño
de una oveja, que oscila entre 65 y 90 segundos, para así tratar de evitar el sobreordeño (tiempo que
permanecen las pezoneras en la ubre una vez finalizado el flujo de leche), que como ya se vio con el
vacuno tiene un efecto muy negativo sobre la mucosa del pezón, provocando la aparición de mamitis.
También son importantes, independientemente de la rutina elegida, la extracción de los primeros chorros
de leche antes de la puesta de pezoneras, cuya utilidad es eliminar esa pequeña fracción de leche muy
cercana al esfínter y con una gran carga bacteriana, así como observar la presencia de posibles mamitis.
También es recomendable la desinfección de pezones tras el ordeño
Las rutinas más utilizadas son:
-Apurado y Retirada (AR): Consiste en colocar las pezoneras en primer lugar a las ovejas situadas en
los puestos impares (se empieza por la primera) para, a continuación, volver hasta la primera oveja y
realizar la la operación de apurado a máquina, retira la unidad de ordeño y colocarla a la primera oveja
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situada en puestos pares, y así
sucesivamente hasta completar
la tanda. Después, volver a la
primera oveja par. Realizar el
apurado y retirada de pezoneras,
y repetir la operación hasta
finalizar la tanda. Esta rutina
mantiene un buen estado de la
ubre,
y
se
consiguen
rendimientos medios de 80-90
ovejas/operario/hora
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-Doble puesta de pezoneras (DP): Esta
rutina consiste en la puesta de pezoneras a
ovejas situadas en puestos impares;
retirada y puesta a ovejas situadas en
puestos pares; retirada y vuelta a colocar a
las impares; retirada y vuelta a colocar a las
pares; retirada final. Con esta rutina el
rendimiento horario medio es de unas 100
ovejas/operario/hora
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-Masaje intermedio: Se colocan las pezoneras
a todas las ovejas de la tanda situadas en
puestos impares; después se procede a realizar
un masaje de corta duración a toda la tanda; se
vuelve a la primera oveja y se retiran las
pezoneras que se coloca a la oveja par
correspondiente, y se repiten las operaciones
sobre las ovejas pares. Esta rutina tiene un
rendimiento
medio
de
unas
115-120
ovejas/hombre/hora y mantiene también un buen
estado de la ubre
(no se realiza el apurado a máquina)
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Comparación de rutinas
Las ventajas e inconvenientes de las distintas rutinas están en función de sus efectos sobre el estado
sanitario de la ubre, sobre la producción de leche, sobre la composición de la misma y sobre el
fraccionamiento en el ordeño
En cuanto a la producción, con la rutina AR se obtiene un 6% y un 8% menos de leche que con las DP y
MI respectivamente. En el fraccionamiento de la leche la que peor se adapta es la rutina AR. Respecto a la
composición no hay diferencias significativas entre las tres rutinas. Por último, en cuanto al estado
sanitario de la ubre, las rutinas DP y MI pueden provocar una mayor incidencia de mamitis (hasta un 15%
más de casos) si se sobrepasan los tiempos medios de ordeño, sometiendo a los animales a sobreordeño
En conclusión, DP y MI tienen un mejor rendimiento pero requieren operarios más entrenados y atentos,
en tanto que AR puede ser la más recomendada para ovejas de menor producción y sistemas más
extensivos.
Hoy, en muchas explotaciones de tamaño grande y con ovejas especializadas de alta producción, se está
asistiendo a una revolución de la rutina de ordeño, implantándose el ordeño con retirada automática de
pezoneras, generalmente por flujo, que simplifica mucho el ordeño
En ganado ovino, a diferencia del vacuno, no se realiza el lavado previo de la ubre, ya que generalmente
se presentan bastante limpias al ordeño, ni tampoco se hace el masaje previo en la ubre para facilitar el
apoyo (no da buenos resultados). Por lo tanto, las operaciones en la sala se limitan a las propias del
ordeño ya vistas, y las operaciones complementarias que son:
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-Distribución del concentrado
-Apertura de puertas y entrada de los animales
-Colocación de los animales en los puestos de ordeño
-Salida de animales
Generalmente estas operaciones son más importantes que en el vacuno, ya que en ovino se suele poner
aún algo de concentrado en la sala y el nº de animales a ordeñar es mayor. Por tanto, y aunque en
muchas instalaciones estas operaciones puedan estar más o menos automatizadas, se producen tiempos
de espera o muertos que hay que tener en cuenta para estimar el rendimiento horario de una instalación
de ordeño, y poder así elegir la sala de ordeño adecuada para cada situación. Para ello hay que tener en
cuenta la duración de las fases del ordeño:
-Tiempo de ordeño de cada oveja : 65-90 segundos (media de 77 segundos)
-Rutina de ordeño, supone unos 10-15 segundos por oveja (media 12 seg.) (rutina AR)
-Tiempo de las operaciones auxiliares, es más variable y depende del grado de automatización de la
sala, entre 6 y 12 segundos (media 10 seg.)
El nº de unidades que puede manejar un operario se calcula dividiendo el tiempo de duración del ordeño
de una oveja entre el tiempo dedicado a la rutina de ordeño. Los valores medios son 77/12 = 6,4. Es decir
se debe disponer de 6 unidades de ordeño por operario. Con ovejas de mayor producción y rutinas más
cortas se puede llegar hasta 9 unidades por operario (90/10)
El rendimiento horario o productividad horaria teórica de una rutina de ordeño expresada en ovejas por
hora y operario, se calcula mediante la siguiente expresión:
r= 3.600/To + Tc
Siendo To el tiempo consumido en las operaciones de
ordeño y Tc en las operaciones complementarias y tiempos muertos
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A partir de estos datos se pueden estimar unos rendimientos que oscilan entre 60 y 135 ovejas/hora,
dependiendo de la rutina elegida, y especialmente, de la automatización de la sala y de la habilidad de los
ordeñadores, siendo muy frecuentes grandes divergencias entre los rendimientos teóricos calculados y
los rendimientos reales
Para una rutina de apurado a máquina y en una sala sin automatizar el rendimiento horario sería de :
3600/ 1,1 + 2,6 + 4,2 + 2,8 + 6 + 10 +6 +10 +0,6 + 3 (= 46,3 seg.) = 77,7 ovejas/operario/hora
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La máquina de ordeño
Las bases del ordeño mecánico, el funcionamiento de la máquina de ordeño y sus componentes ya se
estudiaron detalladamente en el vacuno lechero, ahora nos vamos a limitar a las características que
deberá tener para adaptarse al ordeño de las ovejas, destacando:
-El nivel de presión o vacío
-La relación de pulsación o succión/masaje (%)
-La velocidad de pulsación (pulsaciones/minuto)
-La pezonera de ordeño (copa y manguito)
-El lactoducto o tubería de leche (nivel alto, medio o bajo)
-El nivel de vacío en ovino debe estar entre 36 y 44 Kpa, ya que niveles más bajos provocan la caída de
las pezoneras, y niveles más altos aumentan los recuentos de células somáticas (RCS)
-La conducción o tubería de la leche puede estar colocada en:
-Línea alta, por encima de la plataforma de ordeño, tiene la ventaja de que una misma unidad de
ordeño se emplea en ambos lados de la sala. El nivel de vacío debe ser 4-6 Kpa más alto, para una buena
ascensión de la leche (en la actualidad es poco utilizada)
-Línea media, también por encima de la plataforma de ordeño, pero como máximo a 1,40 metros de
la misma, también tiene la ventaja de compartir la unidad de ordeño para ambos lados de la sala, y
necesita menos nivel de vacío que la anterior
-Línea baja, la tubería está colocada por debajo del nivel de las ovejas. La conducción de la leche se
hace con mucha facilidad, pero cada unidad de ordeño solo sirve para un lado de la sala
-La velocidad de pulsación (VP) más utilizada en ovino varía entre 120 y 180 ppm (180 para razas
autóctonas y 120 para Assaf y Lacaune)
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-La relación de pulsación (RP) más utilizada es la de 50/50
o 40/60 en las ovejas más productivas
-El juego de ordeño se debe adaptar a la especie,
lógicamente sólo está compuesto por dos pezoneras, con
sus copas o portapezoneras, que pueden ser metálicas, pero
que actualmente son generalmente de plástico, y sus
manguitos o pezoneras propiamente dichas que son de
caucho o de silicona, Las pezoneras tienen que ser cortas y
también ligeras para evitar las caídas, pero tampoco en
exceso, ya que si no se trepan hacia arriba a medida que se
extrae la leche dificultando el final del ordeño. También hay
diferencias en el colector de leche, que puede ser común
para las dos pezoneras, o bien puede ir incorporado a cada
pezonera con corte automático del vacío, lo que facilita
bastante el ordeño. Los demás componentes de la máquina
son exactamente iguales a los vistos para el vacuno
El centro de ordeño y sus componentes se verán en un tema
común con el caprino, ya que es igual para todos los
pequeños rumiantes
Juego de ordeño para ovino con sus diferentes componentes
(Manual Instalaciones Lecheras, Junta de Andalucía)
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Pezoneras para ovino con copa plástica y manguito de silicona
(Manual Instalaciones Lecheras, Junta de Andalucía)
Pezoneras con colector individual con sistema de corte
automático de vacio (modelo Top-Flow de Westfalia)
(Manual de Instalaciones Lecheras, Junta de Andalucía)
Colector común para ovino (manual Instalaciones
Lecheras, Junta de Andalucía
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