Aisthesis N° Instituto de Estética 27, 1994 Pontificia Universidad Católica de Chile Facultad de Filosofía Santiago - Chile Presencia de la Cultura Precolombina. Pedro Miras RESUMEN ABSTRACT La imagen hombre ria- que americano de una proviene de sí mismo tiene el -doble y contradicto perspectiva europea The image self-made the of American Man, double and contradictory, derives from European a perspective que, por razones de dependencia cultural, which, forreasonsofcultur al dependency, hemos heredado. Esta idea del americano we formó primero, en la época de la Con quista a partir de la contradicción entre el American Man se y el medieval de Se afianzó durante quie- espíritu renacentista have inherited. This idea the period of Conquest, between the contradiction Renaissance and en la oposición de la América del "buen y aquella que no pro duce sino "animales fríos y seres débiles" who It became Esta visión de América, por un lado, como of nes vinieron. el Iluminismo carne. del el continente por otro, del "no futuro, de la libertad, presente en nuestra en ca, las literatura, en la políti relaciones entre las les. Se postula, finalmente, mirada nueva de índole the land that clases socia que sólo una estética que recupere sin prejuicios nuestras raíces and of America strongly only "cold beings" "weak . on one This visión the continent of land" relations between our social classes. Finally, it is look der type nosotros mismos. the those as, had, future, of liberty, and on the other, of a "never, never is still present in our our political literature, life, and in the new de by the precolombinas puede permitirnos acce a una mirada no esquizofrénica more the of Enlightenment in produces animáis" sigue of spirit the concept of the "good savage", and that y, todavía" ser nunca during the the during out the Medieval salvaje" established of first formed was of a only a aesthetic one which should retrieve without - prejudices our lead proposed that predominantly us to Pre-Columbian roots - can a nonschizophrenic view of ourselves. El presente tructura formada trabajo tiene por tres una es El primero se titula "Los descubrimientos de América" pal y tiene la imagen que como motivo princi Europa se de nuestro Continente y sus través del tiempo. El to lleva por nombre ciudades" movimientos. ha formado variaciones a segundo movimien remoto. retoma le El tercero, finalmente, "Elogio de la mado que "Una historia de dos y es un retorno hacia un pasado los motivos cultura de los he lla mestiza", movimientos preceden en un ensayo armónica. que de síntesis Primer movimiento: Los descubri de América. mientos Ya edad y nuestros o ya es sólo en tiempos el llegada la Cielo de que promete el Pastor un que sucede con Señor, se acerca, dichosa de pormenores una grey suelo por suerte a seres que, al venida al mundo igual de los humanos, no tiene otra significación la de que un evento la señalar simplemente un antes brumoso y un después El "trauma del siempre incierto. nacimiento" reservada. en otros Hernando de Acuña. (1530 aprox.) casos- no pasa a posteriori para de éste ser una como ficción insertar un pretérito sos inventado pechado o -en en un destino gene ralmente poco venturoso. Primer descubrimiento, o fiesta de la Raza: Cambiemos, pues, el centro natural Como todos sabemos, descubrimiento, este primer al que por antonomasia llamamos así, tuvo lugar a mediados de Octubre de 1492. Las probables migracio nes o visitas que a América de desde Levante llegaron, des Poniente, no constituyen, propiamente hablando, des el o en cubrimientos, la el medida en que no hubo entonces interlocutor ante quien des cubrir lo nace a la Historia singular otros"; Pues América antes encubierto. -y a destino de casi la Geografía- con el ser siempre nunca, o nunca "para todavía, para y tradicional del mos el cuándo qué. ¿Quién Raza. Como ha sido, para no del sur, la Fiesta de la octubre sotros americanos quien dice, el aniversario tribal, un hito entre la nada y la historia. Para España, además, la fecha apunta, junto con otras nuestro nacimiento del destino, al comien el poeta llama "edad di manifestaciones de esa que Cielo..." chosa que terminará un narca, las demás promete tas y el imperio y que y por reconocer sólo "un mo espada" Para una de Europa, apenas victoria de España en esa naciones una primera olimpiada de descubrimientos, conquis colonizaciones que entonces se incontables productos que Europa obtu de América: hermosos frutos de la vo tierra destinados des olfativa y les a colmar preciosos que sensibilida y la decadencia de otras; fabricados por el hom singulares objetos bre que harían exclamar a Durero, frente a de tal manera, regocijado ellos un arte admirable do del países genio sutil lejanos" Del cuándo, del cómo y del por qué descubrimiento, mucho se de mi vida me pues he he visto en y estoy maravilla hombres de estos (1). No, el qué al cual hago referencia es más bien la imagen peo comienza a do, a que el hombre euro formarse del nuevo mun las ideas y representaciones que las mentes de estos frente a esta "novedad tan nueva (2) comienzan a surgir en lados de nuevas dice tierras y gentes" nuevas como en anáfora renacentista un monje de la época. ha ha blado ya. No viene al caso detenerse en los es que América nace Es decir que, antes de insertar verdad como mito. 82 las de la época; meta harían la riqueza de gustativa algunas naciones La este aquí que hace referencia a los muy ricos ini cia. de y el descubre América y qué es lo te del Nuevo Mundo: "en El 12 de zo reemplace los presentes reales llegados recientemen sí misma. de y descubre? Debo hacer notar que este qué no e y problema el cómo por el quién se en ese mundo material que el del Renacimiento ampliando estaba hombre descubriendo, interior y exteriormente, es- tructurado, América hombre ha heredado y como trasunto instala se imaginario en el universo más bien que el mismo que porta consigo de épocas poderoso ante riores. crueles y gentes rantes se extremada y seres medidos decir, atrevería a entre monos América de y tanta diferencia seres humanos" "Los árboles sos que sus fuerza de (6) son aquí hojas llegan verdura" tan podero a ser moradas a "La belleza de estas explicarnos la de estos textos por la oposición de sus respectivas intenciones. Colón y Las Casas tratan de engalanar su visión de la realidad para lograr, uno y otro, islas, con sus montes y sus sierras, regadas a sus pretensiones. de abundantes ríos, es un espectáculo que otros cronistas que no ninguna otra de tan El tierra bajo el sol puede ofre glorioso cuyo anteriores Almirante de la Mar Diario hemos extraído citas, escribe, refiriéndose están animados pero que de envidia ni de los bienes de los demás... Están a tal punto desprovistos de artificio y dotados de tal generosidad en relación bienes, que nadie lo cree sin haberlo visto antes". (4) con sus propios Cincuenta años más tarde, Bartolomé de las Casas escribirá, por su parte: "Estos indios son tan mansos, y que más que cualquiera nación en el mundo entero son una Indias, de estas situación propia a anexión que trazos oscuros pintan con toda guerra de busca justificarse. a ambición por decentes, citamos, comparten una misma visión nuevas los habitantes de las islas recién descu biertas: "Todos eran muy bien hechos, hermosos de cuerpo y agraciados de ros tro... No apoyo Sepúlveda y tantos magnífico" Océano, de ría como Podríamos tratar de antinomia las intempe y templados. Me inventa (3). Veamos cómo: cer clemencia, o entre seres prodigiosamente otra inclinados Sin embargo, esta ambivalencia es antes de la percepción que de la intención, como lo prueban las innumerables imáge nes visuales quista del Descubrimiento y Con ofrecen idéntica visión que nos bipolar. Mostaert, de Bry y otros dibujantes que imágenes sus propias las ajenas, suelen pintar pusieron en experiencias o indígenas de rasgos europeos, torso, universo también de esa armónico y imagen de América la de en un Pero equilibrado. podemos encontrar a aparecer: no amplios de sí, dominadores seguros otra cara que comienza tan sólo guerreros feroces, y prontos a abandonar la adoración de sus ídolos y a aceptar, provincia por provincia amazonas, salvajes y caníbales, sino tam bién toda la fauna mitológica de serpien y pueblo por pueblo, la palabra de Dios y la prédica de la verdad". "Los Lucayos ninguna parte. pájaros y reptiles de Como también esas razas infra-humanas que vivían realmente como en que poetas y cronistas la Edad de Oro, han cantado. Creía ver en ellos a nuestro padre tiempos cia". Adán en que vivía en estado en los de inocen (5). Y sin embargo, hacia 1550, Ginés de Sepúlveda dirá: "En prudencia como en tes aladas, elefantes, poblaron las durante tantos siglos tinieblas de la razón: seres de cuadrada, hombres descabezados de un ombligo, sólo pie, melenudos con las rodillas al revés, como las avestruces. Monstruos ge cabeza con la boca en el gigantes neralmente enemigos de del hombre; habi térra incógnita habilidad, en virtud como en humanidad tantes no estos bárbaros son solían indicar los mapas de siglos anterio sino verídicos les... Entre diferencia ellos inferiores a los españo y los como españoles entre gentes ya esa de que hay tanta res, feroces y tierras recién descubiertas, comoesos hom- pobladores estas 83 bres azules que Diego Velázquez buscaba desesperadamente. América un mito nace bicéfalo. Es una cién que el descubridor conquistador- de dos es - él Es, por hombre del Renacimiento, re parte, abierto las a libre, mismo; se inventa- como -o como en seguida el mismo un hombre o cabezas. de profundidades sí de serlo, de la en vías de señores, de gremios y corpo raciones, de ciudades y estamentos. Se sujeción dirije con resuelto deberá La imagen de mítica afán al mundo amparar su naciente que individuali latente desde logrado el fondo de los tiempos, ha de emigran movilizar millones tes que, hasta nuestros días, han venido a poblar las regiones más europeas Unidos, Argentina, Uruguay, Brasil atlántico, Chile. Del otro lado, una América de tinieblas, feroz cuan do no indolente, casi siempre menos que humana, la América del Indio y de la dad: conoce mares y cielos, indaga, descu naturaleza imponiendo dar espíritus más racionales: suelta reencontrada como propios límites. ha para reconocer sus un pasado vuelto recién a historia: las impetuosidad su Su mirada está doblemen te dirigida hacia que a idealizado y en la instalarse edades clásicas sus antiguas leyendas (la ciudad dorada, la fuente de la juventud eterna) posible, como que repetirá la hacia edad un de de dar gio y subversivos su negra los refu paña, Iglesia de los alzados, salvoconduc to de los mujeres homicidas, añagaza general de libres, engaño común de muchos y remedio particular de pocos", dirá Cervantes en El Celoso Extremeño. y Segundo descubrimiento al acaban América la o romántica. el descubridor tiene también una cabeza medieval. Sabemos que el Re Dirija Ud. que pienso Patagonia. largamente preparada y que conserva, por nadie se acercó lo tanto, mucho Y de un mundo que está es a ese mundo moribundo al que recurre el hombre entender o sobrepasa. Así, tan independiente y tan alegre, ánimo tan algo que lo Carta de A. de Humboldt, 1799. diabólica, El hombre del Renacimiento dará nido de acechanzas, sub-mundo de sombras y de monstruos. El conquistador es un don vez, surgirá Quijote que, después de todo, ha vencido al mundo. Y como el Hidalgo ingenioso e convertirá en enfrenta sus propios fantasmas furia y denuedo. Sólo que, desgracia damente, son, en América, cerdos, molinos seres con activo. novedoso puede no ser sino maquinación ingenuo y maravillosa! Probablemente jamás a aquella zona con un de acción cuando justificar todo lo grandiosa espíritu Continente ¡Cómo me deleitaré en esta natura leza muriendo. una mirada al recorrer, desde California a la nacimiento no es ruptura sino eclosión y esperpentos humanos. origen al aventura to. La rio, hombre Ilustrado, del cual, a su el hombre Romántico. La de la la conquista aventura del del mundo se conocimien ciencia reemplaza al saber autorita ilustrado al absoluto, los de justicia a los de obediencia y las el monarca valores buenas maneras a la fogosidad inmadura. Pronto, 84 aun a "América: una configuración realista. Pero con terminará de los desesperados de Es amparo - desea que impronta futuro oro cual, Tomás Moro y Campanella del Con tinente: los Estados bre, destruye y mata. No tanto quizás para rienda América esta descubierta es, pues, doble. De un el lado, Continente Paraíso, fuente inago table de recursos, ámbito de la vida fácil y libertadora. Imagen optimista ésta que, recién a fines de este siglo XVIII, entre de y revoluciones por venir, aparecerá el hombre romántico que, viajes no sin exploración costo, proclama miento la la los añadirá a valores que burguesía surgente el senti del otro como igual a uno mismo y rebeldía como factor del espíritu. civilizaciones americanas, pero ellas nos dicen simplemente sido sigue siendo y puntos Entre indígena, el racialmente señor el cambiado. política cultural, sometido, y el y peninsular, de vidas y de haciendas, ha surgido criollo, cuya existencia se extiende en un abanico social que abarca desde una europeización cabal. humanos razón frente principal cho al nal. un poco (8) y Sin embargo, del mismo reem americana conquista y ciudades, la imagen que esta nueva Europa América? a que expresa un hombre re la naturaleza americana), todo lan se corrompe y se sofoca; el aire y la tierra, sobrecargados de vapores húme dos y dañinos, no logran depurarse ni beneficiarse de la influencia del sol; éste inútilmente contra esta masa condiciones así como de sus rayos más vivaces fría, pero ésta no está en responder a su ardor. América sino seres húmedos, insectos. No bres fríos y no logrará plantas, débiles" Es producir reptiles podrá alimentar sino animales XVIII e hom (7). Algunas décadas más tarde, nes Hegel añadirá tocantes el filó de los americanos la visión naturalística de implica mediados posee algunos rasgos al menos que, del sin la los textos citados, la persistencia de una del Es la americano. hombre, del hombre actitud que está en el del "buen salvaje", este puros y de corazón sentimientos ser de abierto, de inteligencia fácil y de habili origen del mito dad innata, que vive en contacto estrecho con una naturaleza antes benevolente que hostil y que rechaza, por voluntad o igno rancia, la vida urbana. Mito amable que la crítica de Montaigne hizo Rousseau elevó a categoría posible y fundamental de la humanidad. Voltaire, de Foe, B. de St. Pierre, Chateaubriand, le darán la ve rosimilitud de la existencia literaria, ha del buen salvaje una figura típica mente americana. Pero, trascendiendo el mito y la leyenda, rechazando la fácil generaliza ción sobre Buffon: "Tenemos dos también algunas consideracio al espíritu que completarán forja hacia así entrar en contradicción absoluta con ciendo sofo contradictorias, visión optimista guidece, envía de tiempos de la que encontramos en de ciencia, el naturalista Buffon: "En tal estado de abandono (se fiere siglo modo que colonización reconocía aquella que se visto surgir puertos, formas sociales de corte europeo. Veamos lo perso individuos, los en y la filosofía han esta nueva de dignidad estos mu europeos incluso en lo que respecta a su talla, es algo ca, por su parte, ha hace de los que La inferioridad de vertientes se de carácter Pasará americanos. antes plazado, pues, en Europa, al mito. Améri ¿Cuál es europeo; tal es el de los tiempo de ingenios y factorías. ciencia impotente desde los y la carencia de la humildad espontaneidad, y una sumi sión rastrera frente al criollo y con mayor la imagen La civi patente" colorean mosaico, sobre todo avivan este aledaños Algunos grupos de África venidos de mansedumbre logren darles mo dos y hábitos casi totalmente autóctonos a trataba de vista físico y espiritual". Y aña de: "La También América ha que se lizaciones naturales, que debían sucum bir a la llegada del espíritu. América ha noticias acerca de las la base de supuestos, usando el oj o, la razón y el sentimiento, el verdadero 85 descubridor de casi esta América En de un momento en que el mundo estaba ya repartido y en que toda explora ción no era sino una empresa comercial, el del Barón de Humboldt viaje rior vieja ya tres siglos es Alejandro de Humboldt. de América contemporáneo típica es una aventura mente romántica. inte por el Admirador de Goethe, de Hegel, de Kleist, de los hermanos Grirnm, bajo la influencia con fesada de Rousseau, de Chateaubriand y de St. Pierre, el suyo será un viaje en busca del otro; del hombre y del paisaje antes que de lo insólito o espectacular, de lo familiar de que Capacidad de observa y sensibilidad ante el paisa dos- capacidades de Humboldt muy de marchan romántico. la Treu que acorde con el pathos und lebendig -compromi era, como y con la se sabe, la divisa de su generación. O, como dirá el también romántico Víctor so con vida- verdad Hugo más tarde, vos de refiriéndose a su visión poética: nature et la sabía de ciertas regiones tropicales; Hegel, de la carencia en los los de como Alejandro de la ga sólo parar en puede lo comparable: se hacen falsas sión rápida de de indio americano Pero se forma ser menos na, imagen de América esta del Iluminismo, a partir mítica, hijo de Europa, formación, se sabe si por simple del en plena pero y bullente trans inmaduro y retrasado, no incapacidad congénita desfase en la marcha progreso. Esta imagen europea de América- también, por cierto, la imagen los americanos, cultural, tienen de sí dependencia en su mismos. Y dada han mediante la Estos analogías. sus emociones. de infantil la suce Pero ellos hubieran crecido; lo son pobres labriegos del Este esta los diver surgido Mundo. Españoles y criollos enriquecidos, dueños del poder, identifi en el nuevo cados con la Corona española, adoptarán y desdén la imagen de con autosuficiencia una América en permanente minoridad y se aferrarán al sempiterno cargo tanto triarcas de Europa a quienes la barbarie de tras instituciones feudales en la pleo mayor sujeción. de la fuerza nues mantiene aun Considerar como el primero el em y único medio para civiüzar un salvaje es un prin cipio como falso en su aplicación a en el caso juventud" (9). de la los pueblos educación de la su imagen no son niños que como esos o por inmarcesible en alegría o en que no por y moder Continente sos estamentos sociales que algo y más racional es menos ambivalente: un que el salvaje no indios del Orinoco tienen en sus expresiones el fundamental ambivalencia, se reflejará de modo diverso sino gobernado ser fuerza, dice el directa y vivida, la de Alejandro de América: se quizá objetividad que otor experiencia niña-aun es observaciones de espí el siervo europeo. la nature, done la vérité. "Cuando falta de objeti He aquí, a modo de ejemplo, una de Humboldt su sensibilidad razonadora que le lleva a com que las tantas de la historia así Humboldt, la primero, añade a una modalidades tiempo, deducía medir el ritu. diferentes sus de americanos concepción evolucionista exótico, de síntesis antes antes análisis. ción científica je, Buffon comp araba los amplios cam de trigo de Europa con lo que de oídas pos que podrán dejarán de pero que nunca Para los criollos aprendizaje son ción lo cuando es sólo europeos, Es a pa ser absolutos. cuyos años pero cuya medias, América inmadura, lleva posibilidades zación. liberales, a de llegar a ser benévolos en sí de filia aun todas las de construir una gran civili ellos, mejor que a quienes puede aplicarse la otros afirmación a de Octavio Paz: "la palabra americano desig- 86 hombre nó a un había que (10). En en sino por definía lo por lo haría" que ellos pesará siempre esa radical ambivalencia da que no se hecho, de Europa: nuestra América, de familiaridad con sus formas expresivas los convierte más do fueron tierras del "ser Museos y encontrando ubicación en museo. De todas las artes cación nos que una falaz clasifi da el nombre de primitivas, y que algu de los más connotados yfuriosos represen tantes de triste nuestra civilización tildan de salvajes, la más mis teriosa es quizá aquella que surgió en el continente americano. cieron la rueda ni tuvieron No cono contacto con otras formando pando su lugar en se en la mera apariencia. quesas segunda década del de ocu galerías o en recuperar honda carga expresiva les hacía sumir ban Todas estas joyas jades y tur estos peruanas, andinas, esas armas y esos tejidos esas cerámicas multicolores esta sutiles, Desde la vitrinas fue a constituir te mudos. La imposibilidad de mexicanas o rís. sitios- y hogares de millonarios, pero perfectamen elevaron a una altura que otras civilizaciones Tristan Tzara, Cahiers d'Art. Pa 1920. de inge América de Museo, una verdadera su alcanzado. diversos envergadura, llegando gran de -productos poco a poco un conjunto Pero, sin embargo, en estos pueblos de América, la idea y la abstracción se han creciente cantidad grandes obras niería realizadas en civilizaciones. raramente y de surgir, nun de modo pleno en el Universo del Arte. La de estos objetos excavaciones los objetos exóticos que por entonces comienzan a Tercer descubrimiento o una Amé de de colecciones ca lograron insertarse rica en curiosidades antropológicas o etnológicas. Y aun cuan imagen fabrica nunca, todavía". bien simplemente allí, en una presencia perfectamente ausente. Del siglo mismo modo que la América XIX, la fiebre de viajes hacia el Continente viva, de tierra y de hombres, durante tres descubierto y ya liberado de la tutela hispánica dará origen a una im siglos no había ramente geográfica, nuevamente de relatos, de dia rios de vida, de dibujos y grabados repre sentativos de la vida americana de enton presionante cantidad Casi ces. a llegar ma a como los época, contrapartida, países europeos, multitud de comienzan por objetos la mis -algunos mirada -como sido sino una entidad pu Humboldt- podía ria, así esta que sólo una nueva la de a la histo América de Museo esperaba la nueva visión que pudiera pe Alejandro de un incorporarla hacerla partíci de la existencia humana y de la historia. Un cambio de perspectiva que, sin dejar de metal, otros en piedra o cerámica, talla de considerar estos objetos extraños como dos, productos esculpidos, monios canas de de pintados- mudos testi antiguas civilizaciones ameri desaparecidas. La excelente factura culturas estas piezas: su perfecto cocimiento, salidad de arte es y significación que sólo la obra de capaz de portar. Solamente un cambio de la modelado en el caso y ornamentación, las cerámicas; la fineza de su ejecución, cuando son de plata y otros metales; la expresividad hierática de la piedra; todo contribuye a hacer de ellos pequeñas obras de de paradigmáticos desconocidas, viera en ellos la huella de la creación humana, la impronta de univer arte. Pero, al mismo nocida filiación cultural tiempo, su desco y la absoluta falta dar en su día, allá de Como la que, y valorar las permitió reconocer subyugantes so. sensibilidad estética puede esta nueva perspectiva. formas del arte gótico más su simbolismo puramente religio O la que dará una significación estética 87 creadora a las máscaras e ídolos africanos. Sensibilidad nueva, que reconocemos en Gauguin, en los Fauves y una de cuyas expresiones más famosas llevará por títu d'Avignon" lo "Les demoiselles América ofrece al diosa, apropiamos americanos, nos de la imagen de América for XVIII francés, así nuestra sensibilidad, formada por Europa, nos ha permitido darle a estos objetos -nuestros jada si en el siglo los hay- una carta y corrieron ha que parte de modo natural cultural. e forzaran tan sobrevivientes Aun cuan Es y en mantener esa hablaba Mallarmé; semi-natural queció abiertas, falaz propia fácil de de presencia sonore" de de esa su un producto obtener arañando la la tajante discontinuidad histórica tiempo y el nuestro, ra profunda entre con la ruptu las formas de vida a que alusión no sucede, sin y la nuestra. Algo embargo, cuando se que trata de una figurilla de Tanagra o de una más cara gabonesa. A la una, por venir de lejos de afuera, a la otra por su acepta da modernidad, les es más fácil conciliar pero no su existencia con C. Levy-Strauss. Tristes Tropiques. Después de todo, Hegel tenía ra pueblos autóctonos de América Los zón. no tenían historia. El tiempo, la la sola verdad tre crónica la nuestra. El 88 de un la memorizado confusión en la Conquista, propia pasado, con la sin palabra todos indicios de la son ahistoricidad de las culturas precolombi No hay proceso, dirección, finalidad, los trabajos y los días precolombinos. No hay tampoco necesidad. Y dado que, en para nuestro Hegel, es en la necesidad del desarrollo de la historia donde la Idea, donde irrumpe América, para plar. continente el se cumple Espíritu, no es inacabado desde siempre, donde éste habrá de No puede haber, so entonces, historia de dos ciudades, ni de dos pueblos, ni de dos culturas. Y sin embargo, bien pudiera ciudades. puente del y poesía, la imposibilidad de hecho nuevo, como por conservada, en Segundo Movimiento: Una Histo del texto existente, la entroncarlo con el nas. cómputo cíclico tradición oral que asienta en correcta expresión y de dos cuyo ejemplo enri Montaigne, Rousseau, Hurones, Iraqueses, Voltaire, Caribes, Tupíes, heme aquí!. ejemplo ria Indios, través de to, que este silencio, tenga mucho que ver hacen una retaguardia que honor de mantener las Diderot. ¡Oh, comprender un ellos ha sido propuesta a la sustancia con que nos nutrió nuestra tierra. Es muy posible que este retraimien entre su mi incorporarlos como si ellos mismos se es perficialidad enigmática con de cruelmente pagó el creador a nuestra vida de "bibelot Gracieux d'inanité que humanidad, importante de nuestra heren modo vivo cotidiana. la vosotros, sobrevivien intelectualmente cia cultural, nos resistimos de la tros, reconozcamos en estos objetos precolom binos del el viaje a lo entre americanos que no parece encajar Universo héroes contacto no nos escuela a voluntariamente esos aventura suprema una retaguardia que ta resistencia, un cierto rechazo hacia aque do de la humanidad, mi pensamiento se eleva a voso puertas en nuestro la única oh una civilización (esperando sido propuesta a de hoy, tan abiertos a las muy diversas formas del arte extranjero, existe una cier llo encima pensamiento se eleva a tes de de la jamás. Incluso permitió luna) para exploradores y conquistadores Mundo- que Nuevo Acrópolis te rechazamos, ciudadanía que de propia observación Por moderno más ade una hoy nodriza enclaustrada! navegantes, Así como nosotros, Desde sus plegarias. anémica hombre Atenas cuadamente que barco con rumbo a ser que, indagando en lo que queda de dos cualesquiera de la vasta zona del Perú, de dos culturas que no conocieron ni la rueda tal vez la escritura, El pueblos costera trazas de encontremos ese Espíritu. No., Historia, dése luego, pero sí tal vez como Idea, como Universal concreto. Re como corramos un instante la preincásicas civilizaciones ron hacia el de dos florecie existencia que Norte, a comienzos de nuestra largo de Mochica, disperso pueblo a lo 350 kilómetros de costa, hacia el norte del Perú actual, estaba cons tituido de los que unos dependientes por varias ciudades fluviales de la pocos sistemas luchan desesperadamente al mar. El unos mil Nazca, pueblo por por su kilómetros hacia parte, de el sur y desconocidos contemporáneos zona llegar sus vecinos, y que, algunos siglos antes de la llega da del conquistador español habían ya se estructurada desaparecido. Las parecer contacto alguno entre ambas cul era culturas Nazca y Mochica. Una mo clasificación siglos primero antes de nuestra tradicional de las estas culturas. floreciente o clásico de Aun cuando esta clasifica ción ha envejecido un en cuenta que, entre de Cristo y déci era, aproximadamente, se extiende el período tanto, pues no toma diversas situaciones de difusión discrónica de algunos estilos o modos for ella nos parece males, en relación a ciertos de la útil como referencia hechos básicos. Antes fecha indicada, el hombre había logrado ya pleno domi primera americano nio sobre su habitat. El de de la conocimiento las técnicas de cultivo, de los ciclos naturaleza y de las condiciones climáticas le ha permitido dejar la pesca y la caza como fuentes principales emplazamiento de definitivo de sustento. grupos y la de técnicas utilización El hu manos en zonas agrícolas cercanas a costa la que re desarrollo del saber, tales la alfarería, el urbanismo y la hi quieren un alto como dráulica, le permiten modificar profunda mente su ambiente e iniciar un milenio de Durante todo este período surgen y desaparecen varias destacan dos ras cuya No hubo, ha de asegurado por el cultivo racional al te el maíz. de la autóctonas, En ambas sociedades regulado por las origen estaciones de la el ritmo duda semejante, existencia era sin agrícola, y el trabajo mayor parte de grupos menos civilizados que sus cultivos. por Cazan los productos Ambos pueblos, Mochica y Nazca, han logrado similar en ciertas un perfeccionamien técnicas tales como el modelado, de cerámica, el artesanales pintura y cocción trabajo delicado del oro, la y el cobre, el uso y ornamentación de fibras textiles, etc. Saber práctico de orden superior, de una Techne en su sentido plata aristotélico: en el pueblo de la irrigación artificial, otras obras Mochica, que de kilómetros de canales y de ingeniería, muchas cultu caso preservado de del el a*te les permitirá pueblos, dos tiem del les proveen de una buena cantidad de proteínas. to más por placer que necesidad, aunque mar destruían cuales se encuentran aun en uso. que el sus y fiestas. Condicionado por guerras frecuentes, en general defensivas contra ritos Entre de lo poco va primordialmen- rias especies poblaciones. definida personalidad podemos reconstruir a partir po nos en varias pobla costa. Sus características, en lo general similares, forman los rasgos propios del llamado Período floreciente: pequeños po blados ligados entre sí por lengua, etnia y hábitos comunes y cuyo sustento estaba construir miles sostenida civilización. ellas se la turas. culturas precolombinas señala los también ciones cercanas a pueblo Nazca, la un calendario que se de las En confección regula, al el de parecer, por constelaciones. ellas. 89 Se trata último, de este una obra trucción, en seguida, de un sistema más y figurativos, sobre una alta meseta costera que no logran aun ser enteramente desci la organización, direc ción alimentación de grandes masa de y trabajadores, lo que conducirá a nuevas frados en su compleja estructura formas de la perspectiva aérea permitió gigantesca, inmensos diseños geométricos sólo y que descu brir. vida Mochicas y de Nazcas, ambos de la una gran orquestación lado, por un parte, maniza en el otro, los que hombre el trabajo creador y elementos de un mar generoso sierto de inquieto entre mar y, forman que se hu en el ocio y, una naturaleza de espléndida: altas montañas picos, pueblos, se nos aparece como nevados aunque siempre el y montaña, abigarrados colores. Pero, de como Estado, como una forma de dirección diente: la o una el la buena parte del año. Para En primer término, temporal. La un Mochica los siglos TV y V de nuestra era. La cultura Nazca, entre los alcanza su apogeo entre siglos V y VI. Pero es en la a su empleo, construcción plos, pirámides, caminos, murallas, trajín este y nos dedicados alta calidad la clase y los aparecen ingenieros e construcción leve despla cultura esclava de grandes obras urbanísticas, ciudades, tem encargados en la superior los de la de la infra de la sociedad; a producir etc. especialistas: mantenimiento estructura material zamiento Este tipo de ocupación constante que, sino, permanecería ociosa Estado da inicio técnicos no, por quie de trabajadores esa gran masa servil sobre el fondo desarmonías. clase sacerdotal. gobierno requiere Con de un mismo tema america despótica ejercida disponen del saber y de mayor ascen nes de Podría de éste el momento en que apare más o menos trozos en una tonalidad diferente, aunque surgen algunas organización social. cirse que es ce el La por amplio requerirá artesa objetos de cantidad que requiere para su uso, boato y ceremonia. términos de y de creación artística donde las diferencias entre ambos pue te de la población, los derroches de la clase blos dominante Finalmente, el crecimiento constan organización social son más significativas. conquista La civilización Mochica un ejemplo característico de culturas (11), regadío constituye de las llamadas entre las que se territorios, la a anexión al surgimiento militar que reemplaza a y a la de una clase casta sacerdotal la decadencia y muerte de los imperios inca, egipcio y mesopotámico. En este tipo de civilizacio de gloria y de nuevos o el simple anhelo llevan esa cultura. reconocen nes, la el abandono únicos medios aumento cia, la y mejora de los cultivos y de la caza y la pesca como extensión de existencia provoca un de la población y, necesidad de explotación agrícola. to de las valles del una mejor Luego, 90 mayor -como regados por es el caso Perú- conduce a de la obras de la queda de adobes, cons restos ella de -esta sus del pue historia- apa ciudades, en sus gigantescas pirámides en su monumental sistema lo de de regadío que continua conduciendo el agua. sus artes. realización La los rece en Pero la costa norte regadío comunes. blo Mochica. Pero la na cierto punto figurada- -hasta de los la mancomunidad de varios poblados en vistas a de y el agotamien capacidades productivas irregularmente turaleza en consecuen Esta es, en líneas generales, la histo ria encontramos ceramista todo también referida en El muy rico talento narrativo del Mochica modelar- lientes de los supo dibujar -y sobre aspectos más sobresa su vida cotidiana. Sus labores agrícolas, los productos de su cosecha, la flora y la fauna de sus militares en vida y dignidades, la guerra o con el fruto de sus victorias, su precisa ca, la tierras, la sus con sus sacerdotes oficial, y la imaginativa eróti En suma, ilustrado" una especie de "diccionario del enfermedad pueblo Mochica, muerte. ha como sido llamado de representaciones, este vasto conjunto y personajes y formarnos una imagen que nos permite escenas de casi completa tarnos, la razón por de la propios Pues tampoco cas? artes des de ese verdad es que ni entre cios ni entre trar los egip los etruscos podemos una visión tan precisa humildes más como las labores liar u otras. las de la dos Es vida de la relato oficial sión a los grandes bien religiosas, exigencias señores, del del sumi nada hay temerosa sino una proximidad mica naturalista apa importantes. En los una actitud servil o fácil. De pueblo de más esta cerá Mochica po demos deducir una visión amable, opti de la realidad. Un sentimiento como los como artes, de estas formas plenas de simpa de respeto, al hombre a decirlo todo a través del arcilla no iría más allá pero trásemos modelado de de la si acaso no encon en esta vasta colección algunas singularidades. En toda la pueblo vida del por él representada. serviles, capacidad de una técnica y una destreza excepcionales como la primer término, Mochica ha no sido Faltan allí los trabajos construcción la identificación, de pirámi de forma que su propio que encontramos para en del las mun -vía la pro todas las formas transformarse de en una voluntad que otorgue objetive, obra objetivo de arte. Mochica, En esta del y de nacimiento individuo, dis el caso del es sólo con mundo real. ¿Por qué el otra, las por apoyadas en el la naturalismo identificación -podemos tituía, por una parte, y, de la que surge preguntarnos- par eciera no parar mientes en lo que cons la cotidianeidad banal grandes trabajo construcciones, servil? ver aquí un paradigma: Nos parece la constitución, en la libertad de la experiencia, de un mundo humano modo universal. natural, aquello que, Un mundo comienza a no surge a artesano co tancia, a aquello que será forma estética. Y es en ese doble proceso de creación de un externa ni por del y con objeto artístico, requiere toda referencia de segura del universo. Pero este impulso orgánicas des y de obras de regadío. Falta asimismo trabajo. Aspectos todos de los panteísta que identificarse sentimental- yección alfarero Mochica Pero como si Worringer, (12) veía una aceptación cabal una parte singular trabajos, una relación amable lleva a lo ya conciencia en el esta Es vida y las ínfimas labores de la mundo veces de la grandes de libertad recientemente adquirida pare tía, de humor, a jamás de temor. grandes parce otras. nos estuvieran vedadas mista ce surgir dos como si Las tendencias naturalísticas preciso de los hechos y de la personajes de retratos indispensables pero domésticas, la vida fami realidad do, liberada de las activida sobrevivencia cotidiana. implican rece como hay referencia, en las familiar u mente serviles las ceremonias militares o ese pueblo no se grandes parcelas de la fauna y la flora locales. Aun cuando esta cerámica haya estado destinada a servir un cotidiana, inventario tan encon temas que algunos de pueblo, a esas otras nocimiento: La la encuentran representados en sus cerámi Mochicas sus existencias. vida limitado que, de formarse por la con coacción los hábitos de lo cotidiano, la vez como objeto y como imagen disponibles: los seres de la naturaleza vis sin embargo en otra cultura similar como tos sin sujeción obsesiva al mito, el Otro en la su egipcia. ¿Cuál es, podríamos pregun individualidad, la relación sexual que 91 conduce al placer el humor, las y no la reproducción, la muerte. a enfermedades, Del gran número esta zona parece taba de Este espacio de libertad personal se nos de revela, por ejemplo, la en la imaginería retratos que nos ofrece de alfarera rica galería Aquí este pueblo. encontra término, modelados casi con fruición, una serie de personajes mar mos, en primer Quizás ginales. objeto de desprecio, tal vez venerados por su singularidad cho cante, estos seres deformes, lados, desollados, Mochica. Sólo pueblo helenista una puede encontrarse una tenden insólito den- lo humano, que fue, como sabemos, forma de negar los cánones abstractos de la belleza clásica. Pero lo más sobresa liente en esta colección de retratos, son las figuras modeladas de grandes dignatarios. El retrato es presupone, identidad o la percepción cabal del tanto, por él. La dignidad con majestuosa sólo pueden cribirse por quienes son capaces fuera de ellas. Si guardaban celosamente por sus de gobernados, des de poner recordamos que los emperadores incas como los dos otro y fundamental una la distancia desdeñosa se tanto aztecas se ser observa bajo de pena y que, en otras culturas, el cronis ta tiende a desaparecer en la impersonali muerte, dad de su retratista gen relato, deberemos Mochica de libertad conceder al un considerable mar personal menos en ciertos y a su respectos, cultura, al un carácter Prácticamente contemporáneos del Mochica los Nazcas desarrollan su Perú actual. A diferencia de vida al sur del que acontece con contramos en nuevo grupo la los Mochicas, zona habitada de pueblos, grandes construcciones, mides, como 92 en bien autó existen central poder de ni una institucionalizada. A juzgar religión por la dispo de las tumbas, el arreglo de los cadáveres y la ornamentación de sus cerá sición micas, trataba de se religioso mente miento de un pueblo profunda celoso en el cumpli y sus ritos y ceremonias. El arte de estos antiguos americanos nos revela una extraordinaria capacidad en el manejo de de los colores, descuido un cierto sus acompañada en el modelado. confeccionados con una perfección cho que a En jarros de formas bastante regulares, no alcanzada por otras culturas la cerámica Nazca técnica (se ha di sólo es inferior la porcelana china), pareciera que el arte sano Nazca se hubiera complacido en rea lizar algo más que objetos de uso cotidiano o ceremonial. de sinfonía Como si se tratara de (empleando colores hasta once tonos diferentes) equilibrio una a veces apoyada en el del dibujo y de las superficies, el decoración con alfarero Nazca armoniza la la forma del vaso utilizando una estilización de las figuras que lleva a la abstracción. Tanto, que semejanza y modelado pierden toda importancia frente al juego y superficies coloreadas. enlazados con de la se lo más la cultura de formas Los Nazcas están tardía de Paracas cual proceden extraordinarios teji dos, de trama fina y luminoso colorido que laico y desaprensivo. pueblo tra y hasta cierto punto democráticas. trazas de la existencia de un nomas la época en cia semejante a representar lo tro-de idiotas, for enfermos, ciudades, que se dividía importante de la iconografía man parte del ciegos, muti abiertas en una sociedad que se varias pequeñas No de tumbas desprenderse no en por este resto alguno templos de o pirá tampoco obras de regadío. han mantenido milenios. intactos por casi dos Apoyados en la regularidad de la trama y representando figuras humanas, y antropomórficas, estos tejidos hacen de la estilización geométrica, de la animales y de la repetición los elementos fundamentales de un arte que se prolonga, simetría sin solución y cerámicas de continuidad, Nazcas. en los tejidos Para algunos historiadores del arte, la tendencia a la abstracción en las formas artísticas es propia de las prana de una etapa muy tem Según W. civilizaciones. Worringer, esto acusa una cierta impoten cia del hombre mundo visible la gio en bullente -dice- la de peso hombre aterrado por un refu la vida, bus significa para "Bajo sus y fuerte terror metafísico, este primitivo recarga sus actos En toda suerte su rechazo lugar de y debe captar la espacio el surgido". tridi únicamente en o grabados sobre las planos, del (pues) representaciones planas podía encontrar un símbolo para en muchos éste a que casos, el aspecto de ya no es capaz de la han que (15) Es muy vida de este hombres. Ni creencias ni poco la No tene bolos, de que sabemos de la de conglomerado formas de vida, sus ni sus connotación que e su vida el amor sociales, lo antiguo tenían la religión, tampoco (12) objeto de los Incas y al estas obras han "Si relación religiosa la imagen for particular" nos sus de motivos reli del hoy, confu a otros de lo caricaturesco, de lo demoníaco y de lo grotesco para el observador occidental, ello se actividad artística consiste mal tomado que junto Ernesto Grassi refiriéndose al arte de los Aztecas, el orgánica, "su sólo en dice, confesión- ser colocada Keyserling él vida mensional, dibujos tantos de una necesidad mágico (14) y en una digna de sión caprichos" vida empresas con giosos". del interior. "El hombre lo inánime... Crear arte eludir caos y la búsqueda de experiencia primitivo ca ante el función de en religiosa". el trabajo, las relaciones y la muerte. No el exacto significado sus serpientes sabemos de sus sím bicéfalas, de sus mos, desgraciadamente, elementos de jui cabezas-trofeo, de la interminable serie de cio que nos pudieran permitir afirmar que monstruos. los Nazcas tenían todo de ante la vida primitivo. frente a o que era, siqtiiera, que ellos están una profusa simbología nido mítico-religioso. estilos en su del pasado Museo sirven arte, de hablan muy nos "Todos los grandes sus capacidades igual que el arte otros pueblos de los Nazcas de sus autores. forma... El Pero el observador que sabe desen y que tenderse de gran arte religioso no es una manera interesa estilo (13). Y reglas pretendidamente uni de la historia del más en la forma lo sente que en arte que se y que se hace pre que ella aparentemente sagrado" en una afir mación general que pareciera aplicarse especialmente a la cerámica Nazca, simboliza, técnica, ese que butos cerámica otro, resultante de las expresiones plástica, musical y espacial de un mundo mítico que domina por com y la acción del hom ideas o abstracciones en pleto el pensamiento bre. No persigue porque lo que describe lo hace de forma y una amorosa que trascienden toda sujeción a precolombino es, tal vez con mayores atri que ningún sabrá apreciar en esta cerámica una voluntad Leopoldo Castedo afirma: "elllamado arte mismas, de de sus cerámicas André Malraux de ver las cosas, sino el medio de incluirlas sí alto al o casi calidad parecería negarse a contar nada versales todo Pero, hijos del desierto, de en un tejidos, de sus dotados de Imaginario- son religiosos adquieran En todo caso, la creativas. de un claro conte -expresa su Lo desconocemos todo ellos. por el cera fundamentalmente para hacer los dioses todo un pueblo Nadie puede negar, en cambio, los temas diseñados Nazca, mista actitud negativa una ignoto mundo de significaciones. Por todos sus elementos, en una pieza de Nazca, parecen confluir hacia un sólo fin, parecen estructurarse en torno a la obtención de una finalidad precisa: conformación de un objeto único en sí mismo. La armonización perficies coloreadas en relación la y valioso de las su tanto con 93 la complementariedad tamaño de las con el de los tonos zonas del dibujo adecuación como respectivas, la las formas del a fetas, consiste en un pulimiento acabado que cía pensar que más allá un jarro utilitario o la nia o a estilizada fin, en conduce a de la fabricación de destinado a la ceremo del mundo que Nazca lo rodea, lo que la es el placer por obra misma. Pues aparece en esos objetos algo tendencia a más que una simple la crea ción artística entendida como pura volun tad de Más armonía. elucubraciones o de las Márquez sente -en al tan dar mos- la a vez profundo allá de las extrapolaciones a El motivo y tiempos, no condenar a ellas, son material que autentificado. día en toda la historia del arte. Esta consis te en el descubrimiento de la individuali dad de la obra, en el despojo de de mero signo iconográfico o de para convertirla en objeto cuando, seguramente, la experiencia lenguaje ni la experiencia. que las ha novela. ni la Sociología En la última ha sido, latinoamericanos, medida en para nosotros de ejercicio un autoconocimiento. Del simbólico Aun arte. de existiera aun el conciencia plena de dicha En todo caso, pudiera decirse aquí, también, siglos ello no nos su calidad en esos albores estética, no Y de la Historia de la que esta contrario, imagen. Varios nuestra propia han debiéramos el misma, forman en su contradicción sino el arte bastante tar de nuestro variaciones desaparecer. Por parece cierto que en este pueblo se puede ignorancia, encontrar una actitud que es y desenraizado. movimiento, esto es, ni nuestra por las diferentes Americas que la imaginación europea ha venido construyendo a lo largo de los primer informado invita inventado otros como desatendido por nosotros mis nos que nos de nuestro pre cuenta gran medida o menos representación más guía al artesano las malandrines, todas hemos tenido que pedirle muy poco la imaginación", continua diciendo Gar a barniz; todo, y de esta desaforada realidad ame ricana vaso, la terminación cuidadosísima, que asemeja guerreros criaturas alguna vez sopló el mos tro segundo movimiento retenga también el verdadero sentido denues- viaje a las muerto está. ración catacumbas. Lo muerto, Ni la nostalgia ni la conmise lograrán restaurar formas de vida, mitologías, creencias desaparecidas para siempre. espíritu. Pues hay no memoria que pueda reconstituirse con materiales que Tercer Movimiento o elogio de la Una realidad que no es la del papel, sino que vive con nosotros instante de pleno y que determina nuestras muertes sustenta un manantial de cotidianas, que de creación insaciable, de desdicha y belleza. recepción del Premio éticas y ajenos, políticas así parecieran exigir lo. Porque, a pesar de que buena parte de los americanos de hoy descienden de esas que un día "manos de color de Nobel) crearon objetos imperecibles, "Poetas y mendigos, músicos y pro parece ha berse perdido para siempre la continuidad histórica y cultural entre esos hombres y nosotros. Recuperarla no es, a nuestro jui cio, un problema de conocimiento o de voluntad, sino de mirada. visión arqueológica que 94 son arcilla" cada Gabriel García Márquez. (Discur so vivencialmente nes cultura mestiza. le aun cuando razo utilizado como única De cambiar esa hasta vía de hoy hemos acceso a las la culturas precolombinas por del mirada todo lo contacto estético con que ellos crearon. nos será siempre El lengua italiana amorosa objeto arqueológico distante. La del habla na a construir su grandeza política de arte, obra con materiales vulgar; Fichte, instando a la nación alema- y espi latinas y germanas que lo que yo pudiera ritual sobre sus raíces en cambio al establecer una identidad fun- han damental contemplador hacer aquí, el elogio de la cultura mestiza. nos entre creador muestra, los gía, de límites y el mejor ideolo mejor que cualquier anchos mestizaje y hecho, fundamental Porque, en verdad, toda verdadera nuestra cultura. cultura es deuda con muchas es varias veces mestiza. Cicerón, hablando de revivir en cultura mestiza no Roma las formas del arte y del pensamiento griegos; Dante, el creando la elogio nueva ya, de la cultura, El vertientes, de la elogio sería, entonces sin más. Pero sino esto es, otra sinfonía. NOTAS 1. en Alberto Durero: Journal de Connaissance. 2.- Bruxelles, Reconozco el origen dans les voyage anciens Pays-Bas, année 1520. La 1970. de mi preocupación por estas "imágenes de América" en los trabajos de Miguel Rojas Mix. 3.- Esta "invención" no es necesariamente sinónima de la que postula O'Gorman (E. O'Gorman: La invención de América. F.C.E. México, 1958. 4.- Cristóbal Colón: Los 4 viajes, Testamento. Edición de Consuelo Várela. Alianza Editorial, Madrid, 1986. 5.- Bartolomé de las Casas: Brevísima relación de la destrucción de las Indias. Edición de André de St. Lo. Edit. Cátedra, Madrid, 1982. 6.- Juan Ginés de Sepúlveda: Tratado F.C.E. 7.- México, G. L. Leclerc de Buffon: Histoire París, sobre las justas causas de la guerra contra los indios. 1941. naturelle genérale et particuliére de l'homme. Tomo XX. s.a. 8.- G. W. F. Hegel: Lecons 9.- Alejandro Humboldt: Viaje sur la philosophie a las de l'histoire. Trad. J. Gibelin. Vrin, 1963. regiones equinocciales del Nuevo Continente (1799- 1804). París. 1826. 10.- Octavio Paz: Puertas 11.- Wittfogel, al campo. F.C.E. México, 1972. Karl: Oriental Despotism. Yale Univ. Press. 1957. Yale Como también: E. Steward. Washington, 12.- (Edit.): The irrigation civilisations. Symposium Pan American Union, 1955. W. Worringer: Abstracción y 13.- André Malraux: naturaleza: F.C.E. México 1983. LeMuséelmaginaire. Tomo I de Psicologie del Art. Skira, Généve. 1949. 14.- Leopoldo Castedo: Historia del Arte y de la Arquitectura latinoamericana. Edz'f. Pomaire. Madrid, 1970. 15.- Ernesto Grassi: Arte y mito. Nueva Visión. B. Aires. 1968 95