¿Qué es la procrastinación y por qué tendemos a ella? 20 de enero de 2011 | 17:57 - Sergio Parra Yo tiendo a la procrastinación, a veces peligrosamente. La gente que me rodea, tiende a la procrastinación. Probablemente todos vosotros tendéis en mayor o menor medida a la procrastinación. Pero ¿qué diablos es la procrastinación y por qué está tan de moda en Internet? En pocas palabras, la procrastinación sería el hábito de aplazar las cosas que deberíamos hacer, enredándonos en tareas menos importantes o incluso gastando nuestro tiempo deliberadamente en cosas que nos obligamos a creer que son más perentorias. Todo ello por miedo, por pereza, porque analizar demasiado algo nos lleva a la parálisis! porque nuestro cerebro está diseñado para ello. Posiblemente el término, hace unos años casi ajeno del acervo cultural de la gente, está tomando relevancia gracias a Internet. Y es que Internet en sí mismo es una fuente infinita de procrastinación, que se lo digan a los oficinistas que tienen un ordenador delante y no dejan de entrar en Facebook para comentar fotos de gatitos. Las distracciones son tan poderosas porque nos permiten evadirnos de lo que no tenemos ganas de acometer. Aunque nuestros objetivos mentales sean razonables o incluso necesarios para alcanzar algún fin importante, la mayoría de nosotros, en un momento u otro, “nos despistamos”. No, lo haré mañana; no, todavía no me he puesto con el inglés porque últimamente tengo mucho trabajo; no, me queda por resolver cuatro cosas antes de acudir a la autoescuela! ¡son cosas muy importantes! ¡De verdad! Si nuestro cerebro estuviera mejor ensamblado, quizá estaría dotado de una voluntad más férrea que, ante las urgencias más serias, se atendría sólo a objetivos fijados detenidamente. Según el psicólogo Gary Marcus, esta generalizada propensión a las distracciones y las ausencias mentales (y la facilidad para esgrimir excusas) es una consecuencia más de: la deficiente integración entre un conjunto reflejo y ancestral de mecanismos orientados a fijar objetivos (quizá compartido con todos los mamíferos) y un sistema deliberativo de evolución más reciente, que, por inteligente que parezca, no siempre participa en el proceso. w w w . g o t t t r a i n i n g . e s Las estadísticas nos indican que entre el 80 y el 95 % de los estudiantes universitarios postergan sus obligaciones, y dos tercios de todos los estudiantes consideran que tienen por costumbre postergar las cosas. Según otros cálculos, entre el 15 y el 20% de todos los adultos se ven crónicamente afectados; y no puedo por menos que preguntarme si el resto sencillamente miente. A la mayoría de las personas les preocupa la tendencia a postergar; en general la describen como algo malo, perjudicial y estúpido. Y, sin embargo, casi todos incurrimos en ella. El problema, pues, es que a menudo aplazamos lo que es importante hacer, incluso para mejorar nuestra vida de algún modo, a fin de sumergirnos en otras actividades que no nos permitan sentir remordimientos: ver la televisión, por ejemplo. No digo que ver el último capítulo de Lost no sea importante, pero seguramente es un objetivo con menos prioridad que muchos otros. Y ¿cuáles son las cosas que suelen excitar nuestra procrastinación al máximo? Las tareas más susceptibles de ser postergadas reúnen, por lo general, dos condiciones: no nos divierten y no es obligatorio realizarlas ahora mismo. A la menor oportunidad, aplazamos las tareas que más rechazo nos producen y nos recreamos en lo divertido, a menudo sin detenernos a pensar en el coste final. La postergación es, en suma, el hijo ilegítimo de la tasa de descuento al futuro (la tendencia a devaluar el futuro respecto al presente) y el uso del placer como brújula chapucera. En fin, lo dicho, que mañana me pondré. Prometido. Vía | Kluge de Gary Marcus w w w . g o t t t r a i n i n g . e s Ponerse en modo hacer y terminar ¿Sabes cuál es el día de mayor productividad en las empresas? El día antes de irse de vacaciones. Todo el mundo quiere “cerrar temas” antes de irse y se pone a trabajar como un poseso. Ese día, en el que a veces sólo se trabaja por la mañana, eres capaz de cerrar frentes que llevaban abiertos semanas, terminar tareas complejas, enviar propuestas, escribir emails que tenías pendientes, tomar decisiones, completar documentos, ponerte de una vez con tareas procrastinadas e incluso desatascar algún problema de un compañero. Ese día, tal vez por el desayuno, es uno de los más productivos en el trabajo: te llegan las horas que tienes, además avanzas un montón y te sientes bien contigo mismo. ¿Y por qué no actuamos así siempre? * ¿Abrirías el Email nada más empezar? * ¿Con cuántas tareas te pondrías a la vez? * ¿Pedirías concentración a los que te rodean? * ¿Qué tarea elegirías para empezar? * ¿Abrirías tu lector de feeds? * ¿Te darías una vuelta por tus redes sociales? * ¿Te meterías en la primera reunión que te propusieran? * ¿Abrirías skype o el messenger al empezar? * ¿Te pondrías a descargar cosas o “mariposear” online? * ¿En qué momento harías las tareas manuales o las rutinarias? * ¿Cómo actuarías con las llamadas al teléfono fijo o móvil? * ¿Dejarías el Email abierto para chequearlo cada cinco minutos? Porque cuando tenemos tiempo de sobra la mente se relaja (se descuida), llama a la puerta de los malos hábitos, descuida la organización, cae en la improvisación, se deja llevar por distracciones, admite y recibe cualquier interrupción... pierde eficacia. Y luego nos lamentamos amargamente porque nunca nos llegan las 8 horas. Recuerda, sólo tienes tres horas y mucho trabajo por delante. En cuanto te fuerzas a pensar así tu actúas de un modo completamente distinto: Esto es falso. Las 8 horas del día siempre llegan. De hecho sobran. Porque nuestro problema no es el tiempo que tenemos sino lo que hacemos con él. Y si no, prueba a hacer este ejercicio que a mí hace tiempo que me cambió la forma de trabajar y la forma en la que veo el tiempo de trabajo. 3. Disfrutarás luego de tiempo extra para el resto de cosas. Imagina el día que tienes muchas cosas por delante. Cuando vayas de camino al trabajo mentalízate de que ese día sólo tienes tres horas de trabajo. Sí, sólo tres. Tienes tres horas para hacer todo lo que te habías propuesto: Consultoría, formación y teambuilding 1. Te pondrás el sombrero de “cerrar puertas abiertas” 2. Harás antes y mejor las tareas importantes. Cuando piensas así tu mente se pone en modo Hacer-y-Terminar y avanzas por tus tareas con una eficacia y resolución que te sorprenderá. Del mismo modo que un viernes o el día antes de vacaciones te fuerzas a ti mismo a cerrar temas. Y lo consigues. Por Berto Pena www.thinkwasabi.com www.gottraining.es Gestión del Tiempo - 25 Trucos!! #1 No leas el Email a primera hora Retrasa ese gesto 45 minutos y reserva ese privilegiado momento para concentrarte, hacer y terminar una de las dos o tres grandes tareas de tu día. Una tarea Clave. #2 Pon un Inbox físico en tu mesa Es un lugar donde irás poniendo todo el inevitable papeleo (informes, facturas…) que vas recibiendo o te dejan a lo largo del día. En lugar de abarrotar tu mesa lo arrinconas todo en esa caja o bandeja. Al final del día “procesas” y decides qué hacer con todo ese papeleo. #3 Herramientas de captura siempre a mano En cualquier momento va a surgir una idea, una tarea, un encargo, un contacto o algo que debes anotar. Si no utilizas una herramienta digital para capturar todo eso (tipo Evernote), ten siempre a mano un bloc de notas donde anotar rápidamente cualquier cosa. Siempre a mano pero a la vez escondido. #4 “Arrincona” las tareas manuales Destina los momentos de baja productividad o de mayor cansancio para las tareas manuales, mecánicas y monótonas. Procesar documentos, ordenar papeles, organizar carpetas y ficheros en tu ordenador, comprobar cifras… Hacer todo eso en tus horas de máxima productividad es un error. #5 Destina momentos para la actividad online Si en tu día tienes momentos fijos e inamovibles para tu actividad online (blogs, redes sociales…) es mucho más difícil que no sean una distracción. Ahora, si no hay un momento para todo eso entrarás y saldrás una y otra vez sin parar. Elige qué “ventana” del día es la mejor en función de tu carga de trabajo, energía y rendimiento. Por ejemplo: “la última media hora de la mañana me dedicaré a todo eso”. #6 Utiliza auriculares Si puedes, hazlo. Puedes escuchar música relajante que estimule tu concentración o bien utilizar un generador de ruido blanco ( SimpleNoise, por ejemplo) que ayudarán a aislar ruidos exteriores. Y aun cuando no escuches nada los auriculares ahuyentan las ganas de interrumpirte que pueda tener algún compañero que pase a tu lado. w w w . g o t t r a i n i n g . e s Gestión del Tiempo - 25 Trucos!! #7 Pide concentración a los que te rodean Un gesto que no demasiada gente hace y que funciona. Antes de empezar una tarea importante reclama a tus compañeros una tregua y un poco de silencio. Lo entenderán perfectamente porque ellos necesitarán eso mismo poco después para poder hacer bien sus tareas. El compañerismo no sólo está en las cervezas después de la oficina. #8 “Arrincona” tus llamadas de teléfono Muchas de las llamadas que haces sabes que las tienes que hacer por adelantado. En lugar de salpicar todo tu día llamando ahora, luego, más tarde, concentra todas las llamadas que puedas en el mismo tramo del día (por ejemplo 30 min.) y haz una ronda de llamadas. #9 Reduce y limita tus salidas Hay personas (clientes, proveedores, compañeros…) que lo primero que te dicen para tratar cualquier tema es: “¿por qué no nos vemos y lo hablamos?”. El teléfono, una videoconferencia… hay formas de tratar en remoto casi cualquier tema y son más respetuosas con tu tiempo que hacer una salida. Y si tienes que visitar a alguien, no lo hagas a media mañana o media tarde, o romperás por completo tu ritmo de trabajo. #10 Cuenta y comunica tus rutinas Que tus compañeros, colaboradores y clientes conozcan tus rutinas de trabajo. Cómo te organizas, cómo haces tus tareas, en qué momentos estás más concentrado… Comunicar eso hará que tú les des un servicio mejor, que colabores mejor, que trabajes mejor con ellos y para ellos. Anima al resto a que hagan lo mismo. (El problema es que casi nadie hace esto.) #11 Reduce y limita tus reuniones Cuando te convoquen a una reunión, pregúntate si procede, si tienes que asistir, si vas a aportar algo, si te va a aportar algo a ti. Si no es así, habla con el responsable para hacérselo saber. Dejarte liar por cualquier reunión es nocivo a corto y largo plazo (porque luego siempre va a más). w w w . g o t t r a i n i n g . e s Gestión del Tiempo - 25 Trucos!! #12 Prepara tus reuniones Si finalmente tienes que asistir, prepáralas. No vas de paseo al campo. Estás trabajando. A) Acuerda cuánto va a durar B) Averigua de qué se va a hablar C) Si tienes que aportar algo prepáralo D) A la salida ten muy clara tu próxima tarea. #15 Acuerda “periodos de silencio” Si con nuestros compañeros no nos cuesta hablar para organizar una cena de empresa, ¿por qué nos cuesta tanto organizarnos en el trabajo? Podéis acordar tener periodos de silencio, de tregua, de tranquilidad, donde TODOS podréis trabajar y rendir mejor. Al final todos pasáis por lo mismo y necesitáis soluciones comunes a un mismo problema: ruido+interrupciones. #16 Recopila información online antes Al preparar documentos, presentaciones, informes, estudios… es normal capturar información de Internet. El problema es que ahí, las posibilidades de distraernos se multiplican por mil. Recopila toda la información que puedas antes de empezar a teclear y te costará mucho menos terminar ese documento. #17 Antes de empezar revisa tu Planificación Un ejercicio que te llevará 5 minutos que te servirá para dos cosas: A) Asegurarte que lo que habías planificado para hoy es, en efecto, lo que debes hacer B) Visualizar el día que te espera y detectar las tareas más importantes. Es como el “trailer” de tu día de trabajo. #18 Haz descansos frecuentes Haz pausas y “descansos activos” entre tareas. Y eso significa hacer algo completamente distinto a lo que hacías (ponerte a chatear no es descansar). Aléjate de tu mesa, haz estiramientos, relájate, sal fuera… A partir de cierta hora no rindes más y mejor sino menos y peor. Hay que saber descansar bien para ofrecer calidad y agilidad. w w w . g o t t r a i n i n g . e s Gestión del Tiempo - 25 Trucos!! #19 Utiliza la Técnica Pomodoro Esta técnica en la práctica estimula tu concentración e intensidad. Puedes utilizarla de forma puntual (si tú o tus compañeros tienen un día demasiado “festivo”) o de manera continuada, como tu forma de trabajo habitual. #20 “No me pases llamadas, estoy fuera” Si vas a necesitar una o dos horas para terminar una tarea importante, pide en recepción o a tus compañeros que no te pasen llamadas. Di que vas a salir fuera a una reunión (aunque sea mentira). Terminarás tu tarea (muy bien) y luego podrás devolver las llamadas cuando tú decidas. (Lo mismo aplicable a tu teléfono móvil, que debe estar en silencio y boca abajo. ¡El buzón de voz funciona de maravilla!) #21 Combate al interruptor Hay gente que nació para hacer gracietas, molestar, parlotear y no dar un palo al agua. Llevan la vagancia en su ADN. Sé tajante y expeditivo con ellos. Como te vean tibio o incluso interesado en sus chorradas, te utilizarán como público y no pararán de hacer visitas a tu mesa. Ser exigente con tu Productividad requiere mantenerse firme, tajante y hasta enérgico con esos interruptores. O eso, o te acribillarán y sufrirás. #22 Aprovecha la hora de la comida Haz todo lo posible por no comer en tu mesa de la oficina. Aun cuando te hayas llevado la comida de casa puedes salir fuera o encontrar algún rincón alejado de tu monitor. Si aprovechas bien esa 1-2 horas de la comida, puedes hacer más en tu día y recuperar fuerzas para afrontar lo que queda del día. #23 Utiliza las tareas de baja intensidad Si estás despistado, espeso o hay mucho ruido a tu alrededor puedes echar mano de ciertas tareas de baja intensidad productiva pero útiles al cabo. Algunos ejemplos que yo practico: ordenar-limpiar mi Evernote, actualizar mis filtros y reglas en Gmail, actualizar mis suscripciones en GReader, revisar estadísticas de visitas, seleccionar o guardar en PDF artículos de interés, etc. w w w . g o t t r a i n i n g . e s Gestión del Tiempo - 25 Trucos!! #24 Planea el día siguiente por adelantado Destina los últimos 15-20 minutos a elaborar la lista de tareas que vas a hacer mañana. De todo lo pendiente que hay por hacer qué se tiene que hacer mañana y qué tareas son las más importantes. Hacer esa “foto” por adelantado te ayuda a empezar con más ritmo e intensidad. (Es un fantástico —créeme— hábito que animo a todo el mundo a practicar.) #25 Antes de marchar “resetea” todo Dedica los últimos dos minutos a recoger y limpiar tu mesa. Será como el ritual que te ayudará a “resetear” toda la actividad del día. Y al día siguiente, cuando llegues para empezar, la visión de una mesa despejada y limpia te transmitirá más calma que otra cosa. El caos es divertido pero no funciona. * Ideas recopiladas en thinkwasabi.com por Berto Pena Los contenidos de este Documento están bajo una licencia Creative Commons, que contempla las siguientes restricciones: El material creado por Gottraining XXI S.L. sólo puede ser distribuido, copiado y exhibido por terceras personas si se muestra en los créditos. El material original y los trabajos derivados no pueden ser distribuidos, copiados y exhibidos para uso comercial. El material creado por Gottraining XXI S.L. puede ser distribuido, copiado y exhibido pero no se puede utilizar para crear un trabajo derivado o igual del original. Para cualquier información adicional sobre autorizaciones no concedidas en esta licencia: [email protected] w w w . g o t t r a i n i n g . e s formación, teambuilding y ergosalud El efecto Zeigarnik O por qué las películas con mensaje acaban mal... Tras años y años viendo películas de todo tipo creo estar en condiciones de subirme al tonel más cercano a proclamar una verdad universal: si uno oye hablar de un “film de denuncia” que pretende transmitir algún mensaje con el que despertar las conciencias de los espectadores, puede tener por seguro que en él morirá el protagonista. Hay una explicación psicológica para ello. Desde “El jardinero fiel”, pasando por “La vida es bella” o “Diamantes de sangre”y, en fin, el título que al lector se le venga a la mente, da la impresión de que una película militante -llamada también “de denuncia social” o “cine de protesta”- ha de tener un final trágico que le haga a uno salir del cine apesadumbrado. Para ello suele ser necesario que muera el protagonista, o en su defecto algún personaje estrechamente unido a él y que haya sido retratado previamente como la inocencia personificada. Ante cuyo cadáver el protagonista, arrodillado, alce los puños al cielo clamando justicia entre lágrimas contra sus asesinos. La explicación más inmediata es que un final trágico da el adecuado tono de seriedad que la denuncia de cualquier injusticia requiere. Pero hay otra, algo más sutil, para la que la psicóloga rusa de origen judío Bluma Zeigarnik otorgó un epónimo: el Efecto Zeigarnik: la tendencia a recordar tareas inacabadas o interrumpidas con mayor facilidad que las que han sido completadas. Bluma se percató de esto al observar cómo un camarero era capaz de recordar fácilmente una larga lista de pedidos pendientes y sin embargo difícilmente recordaba los platos que acaba de servir, lo que le llevó a publicar un estudio al respecto en 1927. Lo interesante de este hallazgo estuvo en que tiene consecuencias más allá de la hostelería. En general todas las tareas inacabadas provocan estrés y resultan difíciles de apartar de la cabeza. Por ello la gente olvida tras los exámenes lo estudiado, los pilotos intentar aterrizar a pesar de que las condiciones no sean las adecuadas y cada episodio de una serie a menudo termina en un momento de gran dramatismo conocido como cliffhanger, que incita al espectador a permanecer delante del televisor la semana siguiente a la misma hora. La importancia del desenlace Cuando somos espectadores de una narración nos encanta que la historia se cierre, que el malo reciba su castigo y que, en definitiva, el conflicto quede resuelto. Por tanto una historia con un final trágico en el que no se haya impartido justicia es una trama irresuelta que incita al espectador a pasar a la acción y tomar alguna clase de iniciativa para que dentro de su cabeza la historia pueda tener el final que le corresponde. Dejando de lado el cine, en muchas reivindicaciones políticas se rememoran no los logros sino las derrotas y agravios sufridos. Para movilizar a la población y que busque su particular “cierre” de tales narraciones. Extraído de: http://cienciaparagentedeletras.wordpress.com/ 2011/03/09/el-efecto-zeigarnik-o-por-que-las-peliculascon-mensaje-suelen-acabar-mal/ www.gottraining.es La lista "B" M e encantan las continuas ideas que voy encontrando por la red y los truquis que se van planteando por la blogosfera acerca de como ir gestionando nuestro tiempo. La verdad es que te sorprendes cuando, además, esas pequeñas ideas de sentido común son aprovechadas por grandes visionarios, por que otra cosa no, pero gente avispada hay por doquier, y lo transforman en libros de éxito o varitas mágicas de la eficiencia. ¿Que sugerimos? - Coge una pequeña hoja de papel y anota 5 únicas tareas, entre las cuales incluyas al menos, una de esas que ocupan altas posiciones en tu lista. A partir de aquí, dedícate única y exclusivamente a ellas, ve tachando y no hagas otra cosa hasta que las termines. Cuando termines, repite la operación con otras 5, verás como es más fácil ir poco a poco que viendo la lista de golpe! Ojo: * Elige bien las 5 tareas * No las abandones hasta cumplir las 5 * Registra nuevas tareas que te lleguen para después En este caso, voy a comentar un pequeño truco que ya ponía en marcha hace tiempo pero que a día de hoy he visto ya en varios blogs, se trata de como atacar la interminable lista de tareas que tenemos día a día sobre nuestra mesa, agenda, sistema GTD... * Si has conseguido 4... solo te queda una, que no salte de lista en lista!! Como siempre, aparecen webs preparadas para usar estos sistemas, échales un ojo por s i t e p u e d e n a y u d a r : t h i n g l e r. c o m o teamly.com ¿Qué ocurre cuándo la lista es demasiado extensa? - Nuestro ímpetu por ir bajando el número de cosas por hacer, ir tachando o marcando como realizadas diferentes acciones, nos lleva a coger y ponernos manos a la obra con aquellas que menos nos cuestan, sea por procrastinación o porque requieran más tiempo y concentración, vamos dejando de lado algunas de ellas, de modo que... tendremos una serie de tareas inmóviles que irán ocupando las primeras posiciones de mi lista y que serán inamovibles de allí. w w w . g o t t r a i n i n g . e s Emilio Solís Consultor Formación gottraining SL GTD y la matriz de Eisenhower para priorizar tareas y algunos le colgaron la medalla, pero en realidad fue “Ike” quien la hizo pública por primera vez. Cuenta la historia que, finalizada la Hace poco tiempo, en un artículo de la guerra, un periodista de la revista Fortune serieGTD para dummies, escribía sobre la quiso saber qué técnica había utilizado necesidad de diferenciar entre lo urgente para priorizar las tareas ante la ingente y lo importante a la hora de priorizar cantidad de decisiones que había tenido nuestras que tomar mientras lideraba a los Aliados. tareas. Comentaba que con demasiada frecuencia caemos en el error Einsenhower de acciones cuadrante, en el que la importancia de las urgentes como si fueran importantes, y cosas se representaba en el eje horizontal aún peor, asimilamos una interrupción y la urgencia en el eje vertical, de manera como que quedaba una matriz de cuatro celdas. gestionar si las próximas fuera una urgencia. dibujó entonces un Consecuencia: terminamos haciendo el Cuando algo era importante pero no trabajo según llega, en lugar de atacar urgente primero las próximas acciones que son agendaba para hacerlo más adelante. Si prioritarias. era urgente pero no importante –arriba a Saber todo eso está muy bien, pero ¿cómo la izquierda–, entonces lo delegaba a podemos trabajar con la importancia y la alguno de sus colaboradores. Finalmente, urgencia en la práctica diaria de GTD? si era importante y urgente –arriba a la Bueno, estamos de suerte, porque hay un derecha–, lo hacía personalmente en ese par de preguntas y una matriz –la matriz momento, o lo más rápidamente posible. de El periodista, muy perspicaz él –igual que Einsenhower– que nos ayudarán –abajo a la derecha–, él lo muchísimo. Vamos a ello. alguno de vosotros, ya os conozco– se dio La matriz de Eisenhower cuenta de que no había dicho nada Sí señores, Dwight David Eisenhower, el comandante supremo de las tropas de los Aliados en el Frente Occidental durante la respecto a las cosas que no eran ni urgentes ni importantes. Se lo hizo saber a “Ike” y este le dijo: Segunda Guerra Mundial, y a la postre –Verá presidente de los Estados Unidos, resulta importante, simplemente no lo hago. que “inventó” una muy interesante técnica Como podéis ver, con esta matriz resulta para la toma de decisiones. Muchos muy sencillo captar visualmente dónde años quedan las tareas, y podemos tomar una después Stephen Covey la redescubrió en su libro “First Things First” jóven, decisión si rápida w w w . g o t t r a i n i n g . e s no de es cuáles urgente deben ni ser nuestras próximas acciones. Sin embargo, respuesta la importante. matriz sólo sirve para tener una es “no”, entonces no es representación visual de qué hacer una De nuevo, esta pregunta aparentemente vez conocemos la urgencia e importancias simple encierra mucho más poder del que de las cosas. No nos dice cómo priorizar, sugiere. Imagina la cantidad de asuntos es decir, cómo determinar dicha urgencia que podrás enviar al calendario o la lista e importancia. “algún día/quizá” de tu sistema GTD, Cómo determinar la urgencia simplemente con responder rápidamente Hay una pregunta muy simple que nos a esta pregunta. Hacerlo significará ser ayudará honesto con tus listas de acciones, pues a determinar con meridiana claridad si algo es urgente o no, y así contendrán poderlo de urgente e importante, y apartarás la paja Eisenhower correctamente. La pregunta de lo que es poco urgente o poco es: Y si no lo hago ahora, ¿qué puede importante. ocurrir? En encuadrar Si la en la respuesta matriz es “nada”, solo definitiva, lo aplicar verdaderamente la matriz de entonces no es urgente. Eisenhower, en conjunto con estas dos No os dejéis engañar por la aparente poderosas simpleza de la pregunta. Es mucho más sencilla de priorizar, y una receta infalible útil de lo que parece. En no pocas para tener listas de próximas acciones ocasiones decidimos hacer una próxima más pequeñas y manejables, eliminando acción mucha presión de tu sistema GTD. que nos parece urgente, preguntas, es una forma simplemente porque nos resulta fácil de Jero Sanchez hacer, o es más agradable de hacer que la Elgachupas.com que deberíamos estar haciendo. A la luz de la respuesta a esta pregunta será imposible ignorar la realidad, y deberíamos ser capaces de ignorar o delegar –lista “a la espera” de GTD–, muchas más tareas de las que habitualmente delegamos e ignoramos. Cómo determinar la importancia Para saber si algo es importante hay otra pregunta clave: ¿Yo o alguien más se acordará de este tema dentro de una semana –o quince días, o un mes…? Si la w w w . g o t t r a i n i n g . e s