Complejo de inferioridad ¿Qué es el complejo de inferioridad? Llamamos complejo de inferioridad a un sentimiento constante por el cual la persona afectada se siente impotente, inferior, y frecuentemente reprimida ante otras personas y su propia forma de ser. Esto termina convirtiéndose en un complejo existencial para la persona que lo padece, quien finalmente puede terminar por caer en depresiones y auto-despreciarse a un grado de no querer mostrar su individualidad y perder toda autoestima. ¿Por qué se causa el complejo de inferioridad? El complejo de inferioridad es causado por uno o varios conjuntos de traumas o trastornos emocionales que terminan por causar un fuerte desánimo en uno mismo. Son varios los factores que pueden derivar a este complejo; diferencias sociales, raciales, o gustos personales. Incluso puede comenzar desde la infancia. Por ejemplo; si nuestros padres nos reprendían dura y continuamente por alguna travesura o error que cometíamos, puede causar que gradualmente baje nuestro ánimo y nos sugestionemos a la idea de que somos inútiles por el simple hecho de ser nosotros mismos. También es muy frecuente en edades de la adolescencia y la madurez, cuando se ha tenido una relación de pareja estrecha o duradera y esta ha llegado a su fin y comenzamos a pensar que el quiebre de la relación es por causa nuestra. ¿Cómo salir del complejo de inferioridad? Paso 1 Antes que nada, date cuenta que al igual que todos tú también eres un ser humano, con valores, orgullo y dignidad. Tienes iguales derechos que todos los demás y nadie tiene porque hacerte sentir inferior. No pienses que todos están adelante de ti y que tus metas son inalcanzables sin antes haber luchado por conseguirlas. Paso 2 Medita e intenta descansar. Es más fácil relajar la mente y pensar profundamente si estas recostado o en cama. Piensa una y otra vez, qué es lo que te hace sentir de esta manera, cómo comenzó todo y si realmente vale la pena estar en ese estado de ánimo por algo así. No te eches culpas, deja atrás los recelos y rencores que tú mismo te fomentas. Si te es cómodo, charla con alguien de confianza y no te inhibas en mencionar todo lo que te afecta, así automáticamente sentirás una liberación de cargas emocionales. Paso 3 Una vez que concluyas con eso que te acompleja, déjalo atrás por más difícil que sea, no caigas en obsesiones. Ya sea por un asunto, un error, un accidente o una relación sentimental, no dejes que eso te absorba y dependas de eso para seguir con tu vida. Muéstrate diferente, demuestra que eres una persona decidida y con dignidad. ¿Qué puede causar una recaída? Si piensas que no vas a poder dejar atrás tu problema, y sigues persistiendo en eso con frecuencia, es muy probable que caigas de nuevo en esto. Evita seguir pensando en eso sin forzarte y si llegas a pensar en eso, míralo de una forma con sentido y como algo que ya pasó. Distráete con cosas nuevas.