Oficio 220-000084 del 3 de enero de 2008 ASUNTO: Comunidad de pérdidas o principio de la igualdad al interior de los procesos concursales. Me refiero a su escrito radicado en esta Superintendencia con el número 2007-01-185076, mediante el cual consulta cuál es la aplicación que hace la Superintendencia de Sociedades en los diferentes procesos concursales adelantados ante esta entidad sobre el tema de la “ comunidad de pérdidas” , “ … según lo consagrado en la sentencia T-575/03, del dieciséis (16) de julio de dos mil tres (2003), Magistrado ponente Dr. ALFREDO BELTRÁN SIERRA… ” , respuesta que solicita sea apoyada en casos concretos y explicada en forma amplia. Sobre el particular, cabe mencionar que uno de los principios fundamentales que rige los procesos concursales que se tramitan al interior de esta Superintendencia es el de la igualdad, conocido también como el de “ comunidad de pérdidas” y expresado en la máxima latina par conditio omnium creditorum, el cual aplicado de manera general al universo de procesos concursales que se han surtido y actualmente se surten al interior de este organismo, “ … supone que los acreedores que concurran al trámite concursal de su deudor común, lo hagan en igualdad de condiciones jurídico procesales, sin perjuicio de la existencia de privilegios o garantías que conforme a la ley detenten algunos créditos, ya sea por su prelación al pago o porque les fue otorgada, paralela, concomitante o posteriormente al nacimiento de la obligación, una garantía accesoria para su cumplimiento; Vr. Gr. Un contrato de prenda o hipoteca, un certificado de garantía extendido con ocasión de la celebración de un contrato de fiducia mercantil, etc… ” (Memorando 220-222 de septiembre 19 de 2000 expedido por esta oficina). Es así como, en relación con el referido principio, los acreedores se sitúan en una comunidad de suerte que las resultas del proceso afectarán por igual la satisfacción de sus acreencias, en proporción a sus respectivos créditos. Dicho de otro modo “ … .los activos de la empresa en liquidación, se convierten en prenda común de todos los acreedores y ante la insuficiencia de activos las acreencias se satisfacen a prorrata, es decir, a través de la llamada comunidad de pérdidas lo que significa que todos corren la suerte de la pérdida, mas no unos pocos..” (Auto 441-005260 del 18 de abril de 2007, proferido dentro del proceso adelantado respecto de la sociedad EMPRESA COLOMBIANA DE CURTIDOS S.A., EN LIQUIDACIÓN OBLIGATORIA). Dicha igualdad se predica de lo material, no de lo formal; así, la totalidad de acreedores de un mismo tipo (prelación) son tratados en forma igual, de tal suerte que sus acreencias serán canceladas en igualdad de condiciones que sus iguales, a prorrata del porcentaje que su crédito represente respecto del cien por ciento de los de su tipo. Ahora bien, respecto de la aplicación del principio de igualdad según lo consagrado en la Sentencia T-575 de 2003 proferida por la Corte Constitucional, consideramos que no es este el escenario para pronunciarnos sobre tal particular, siendo que dicha situación corresponde ser resuelta por el juez del proceso liquidatorio a propósito del cual ésta se refiere. En los anteriores términos se ha dado respuesta a su consulta, no sin antes observarle que el alcance de los mismos es aquel al que alude el artículo 25 del Código Contencioso Administrativo.