¿QUÉ INFORMACIÓN GENERAL DEBE PROPORCIONAR UN

eMarket Services hace más sencillo el uso de los mercados
electrónicos para los negocios internacionales
¿QUÉ INFORMACIÓN GENERAL DEBE
PROPORCIONAR UN MERCADO ELECTRÓNICO EN
SU WEB?
e-Business
Issue
Teresa Rodríguez de las Heras Ballell
Profesora de Derecho Mercantil de la
Universidad Carlos III de Madrid (España)
www.emarketservices.es
Abril 2010
Resumen
Esta es la segunda entrega, de una serie de cuatro artículos, cuyo objetivo es exponer qué
información obligatoria se debe mostrar en una página web. En este informe Teresa
Rodríguez de las Heras Ballell responde a la pregunta de cómo debe presentarse la
información obligatoria, los requisitos de este tipo de información, así como qué datos
específicos deben estar disponibles.
Teresa Rodriguez de las Heras Ballell, Profesora Titular Interina en Derecho Mercantil de la
Universidad Carlos III de Madrid (España), es también autora del libro sobre aspectos
legales de los mercados electrónicos “El régimen jurídico de los mercados electrónicos
cerrados (e-marketplaces)” y su experiencia y conocimiento hacen de esta serie de
artículos lectura obligada tanto para los nuevos mercados electrónicos como para los ya
existentes, a los que puede servirles como validación de sus prácticas actuales.
Información General Obligatoria
El contenido de la obligación de información general prevista en la normativa no resulta de
especial complejidad ni su cumplimiento excesivamente gravoso. No obstante, dos
consideraciones asociadas a la naturaleza del entorno electrónico recomiendan prestar una
cuidadosa atención a la forma de cumplimiento del deber de información.
En primer lugar, las posibilidades que ofrece la Red para organizar la información, ilustrar
los datos, incorporar recursos multimedia o ampliar los contenidos sin restricciones de
tiempo ni espacio imponen una mayor exigencia en el enjuiciamiento de la calidad, la
suficiencia y la capacidad informativa de los datos de constancia obligatoria. En este
sentido, es recomendable no escatimar en la puesta a disposición de información con
alguna relevancia para la adecuada identificación del prestador. No obstante, la facilidad de
organización de la información en el espacio digital aconseja que se empleen mecanismos
de estructuración de los datos según nivel de importancia, de agrupación de la información
y de localización sencilla y directa de contenidos según criterios de búsqueda. Debe
evitarse que la sobreinformación, favorecida por las facilidades del entorno electrónico,
conducta a la desinformación del usuario.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta que el debido cumplimiento de la obligación de
información que la ley impone a los prestadores ha de satisfacer una serie de requisitos:
1. PERMANENTE: que se pueda acceder a la información de forma permanente, lo
que conduce únicamente a reforzar los controles de accesibilidad continua de la
web.
2. FACIL: que el acceso a la información sea fácil, lo que apunta a un especial
esmero en el diseño de la página web para asegurar que la localización de la
información resulte sencilla para el usuario medio, identificada bajo títulos
suficientemente expresivos (Datos de la compañía, Quiénes somos, Conócenos,
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Datos de contacto, Datos de identificación, Información general) y ubicada en un
lugar visible de la pantalla. En este sentido, no resulta convincente la práctica
bastante usual de colocar esta información bajo el enlace “Aviso legal” que se ubica
habitualmente al final de la página junto a los enlaces relativos a la política de
protección de datos y los términos de uso del sitio web. No puede considerarse
esta opción satisfactoria por varios motivos: primero, el enlace suele ubicarse en la
parte inferior de la página que queda oculta en la zona no visible de la pantalla si
no se desplaza el cursor (denominada zona low traffic); segundo, la expresión
“Aviso legal” para denominar el enlace donde se pongan a disposición los datos de
identificación del prestador y otra información general no parece la más adecuada,
pues a pesar del origen legal de la obligación de información, no contiene ni un
aviso ni una advertencia; tercero, el enlace “Aviso legal” suele ser el lugar elegido
para incorporar todo tipo de información de relevancia jurídica (propiedad industrial
e intelectual, prohibiciones de uso, información de sociedades cotizadas e incluso
política de protección de datos personales) lo que puede convertirlo en un cajón de
sastre que dificulte la rápida localización de los datos deseados.
3. DIRECTA: que la información sea accesible de forma directa, lo que ha llevado a
plantear si podrían ubicarse estos datos identificativos tras un enlace o si
necesariamente habrían de constar permanentemente en algún lugar de la página
principal o del frame (marco) del sitio web. Las exigencias estéticas y comerciales
en el diseño de la página llevan razonablemente a rechazar la postura más rigurosa
que obligaría a publicar la información en la página principal. Más aún, de admitir
esta opción se estarían nuevamente imponiendo innecesarias restricciones de
espacio sobre la información. Parece entonces perfectamente admisible que la
información se ubique tras un enlace denominado de forma suficientemente
expresiva. La exigencia legal de que la información sea accesible de manera
directa trata de evitar entonces que los datos, al menos los mínimos de constancia
obligatoria, se oculten tras una sucesión interminable de enlaces encadenados que
terminen dificultando el acceso y conocimiento de la información por parte del
usuario.
Con respecto a esta misma condición de cumplimiento puede llegar a plantearse
otra cuestión estructural relevante para la configuración del sitio web. Dada la cada
vez más habitual instalación en los dispositivos de acceso de filtros y mecanismos
de bloqueo de pantallas emergentes (pop-ups), en la medida de lo posible, puede
ser acertado evitar que esta información básica conste en pantalla emergente para
asegurar que los riesgos de imposibilidad o mera dificultad de acceso sean
mínimos.
Los requisitos referidos de permanencia, facilidad de acceso y carácter directo son los
exigidos expresamente del texto de la normativa comunitaria. De la lectura de otras normas
nacionales de trasposición, se pueden extraer algunos requisitos adicionales:
4. GRATUITA: que el acceso a la información sea gratuito, lo que se garantiza
publicando los datos exigidos en la página web. Obviamente el hecho de que el
acceso a Internet implique para el usuario el pago de una tarifa a su proveedor de
acceso no contradice la exigencia legal. Pero sí perdería la condición de gratuidad
si la información legal obligatoria no estuviera accesible hasta un momento
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posterior a la contratación de un bien o servicio que exigiera un pago previo por
parte del usuario.
5. ACCESO ELECTRÓNICO: que el acceso a la información sea a través de medios
electrónicos, lo que fácilmente se cumple poniendo a disposición del usuario los
extremos exigidos en algún punto del sitio web.
6. GARANTIA DE VERACIDAD: se trata de ofrecer las máximas garantías de
veracidad y autenticidad de la información mostrada en la website. Se propone
como medida para el cumplimiento de la medida propuesta, la protocolización
notarial de toda la información de cada una de las promociones mediante el
oportuno instrumento notarial, haciendo referencia expresa del número de
protocolo y la concreta Notaría, para mayor garantía y transparencia del mercado, y
por supuesto, de los derechos de los usuarios. Este requisito será de especial
relevancia en materia de estricta información precontractual.
En las condiciones descritas y tomando las precauciones apuntadas, los extremos
informativos que deben ponerse a disposición del usuario son los siguientes:
a. Nombre del prestador de servicios (Denominación social, razón social).
b. Domicilio social o dirección geográfica donde esté establecido el prestador
c.
Dirección de correo electrónico y cualquier otro dato que permita contactar de
forma directa y efectiva con el prestador.
d. Datos registrales si el prestador está inscrito en el registro mercantil otro registro
público.
e. Número de identificación fiscal.
f.
Datos de la autorización administrativa previa, en su caso.
g. En caso de profesiones reguladas, datos de colegio, título expedido y normas
profesionales aplicables.
h. Información clara y exacta sobre el precio del producto, indicando si incluye o no
los impuestos aplicables y los gastos de envío.
i.
Códigos de conducta a los que esté adherido el prestador y forma de acceder
electrónicamente. Este extremo es tratado en la Directiva como pura información
precontractual, mientras que en alguna legislación nacional, como la española, se
incluye entre la información general.
Se observa de inmediato que la información legal exigida no es excesiva ni plantea
especiales dificultades de cumplimiento. Conviene, sin embargo, optar por una estrategia
de cumplimiento que, satisfaciendo las exigencias técnicas, estéticas y comerciales de la
compañía, asegure de forma adecuada las condiciones de acceso impuestas por la ley.
En el próximo artículo, el número 3, revisaremos cuáles son las obligaciones sobre la
información precontractual que un mercado electrónico debe proporcionar.
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