limites de la autoridad civil

LIMITES DE LA AUTORIDAD CIVIL
ALUMNO:
Jaziel Cruz Méndez
PLANTEL:
16 “Mitla”
SUBSISTEMA:
Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Oaxaca.
ENTIDAD DE RESIDENCIA:
San Pablo Villa de Mitla, Distrito de Tlacolula Oaxaca.
DIRECCIÓN ELECTRÓNICA:
[email protected]
TÍTULO DEL ENSAYO:
“¿La autoridad civil existe?”
RESUMEN:
Autoridad civil nos referimos a aquella que no ve religión, clases sociales, culturas
y distintas formas de vivir. ….es una autoridad que no tiene fuerzas armadas. “La
verdad, la belleza y la justicia coinciden en una idea del bien”.
LIMITES DE LA AUTORIDAD CIVIL
¿La autoridad civil existe?
En primer término nos hemos hecho esta pregunta ¿la autoridad civil existe? Para
muchos resulta fácil responderla, ya que piensan que esta autoridad solo es una
de las bastas dependencias de gobierno, pero cuando en realidad muchos no
conocen el verdadero significado.
Para iniciar con éste tema es importante saber qué es, la autoridad civil ….es una
autoridad que no tiene fuerzas armadas; es aquella que todos poseemos para un
bien propio ante la sociedad y es aquella que no se fija en clases sociales,
religiones o características propias; es aquella que nos apoya en el entorno
cotidiano para no sufrir ofensas, ésta autoridad se ejerce por cada uno de los
humanos y es nuestra responsabilidad que estos límites no se rebasen pero que
tampoco se dejen a un lado
y es por eso que nos planteamos la siguiente
interrogante ¿la autoridad civil existe?
Cuando nos referimos a autoridad civil pensamos en aquella que no ve religión,
clases sociales, culturas y distintas formas de vivir. Pero al tener este beneficio
también tenemos límites
con esto demostramos que el concepto que teníamos
de esa autoridad era erróneo ya que no es una dependencia gubernamental, sino
que todos tenemos autoridad civil. Lamentablemente la civilidad de estos tiempos
se ha perdido por completo, cualquier persona te falta el respeto y de igual forma
hacemos lo mismo. Platón pensaba “La verdad, la belleza y la justicia coinciden
en una idea del bien”. Con esto podemos ver que desde tiempos remotos se tenía
ésta por lo cual retomo la idea de platón que pensaba en esto y coincido que la
justicia es una idea del bien ya que si aplicamos justicia vamos a tener como
resultado una sociedad que respeta sus límites de autoridad civil. (Enciclopedia
Encarta 2009).
En la actualidad, existen percepciones erróneas sobre autoridad civil, por lo mismo
no imponemos limites propios a ésta autoridad, por ejemplo, cuando dejamos que
cualquier persona nos impida expresar ideas, hacer protestas, manifestar
inconformidades; o si alguna religión está sobrepasando la autoridad civil de la
persona. Esto se debe a que lo están privando de su libertad de culto y con esto el
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(2011) agresor sobrepasa sus límites de autoridad civil, como pensaba Henry
David Thoreau: “No hay peor olor que el que despide la bondad corrompida.”
(“Colores de Otoño”, Edit. José J. de Olañeta, año 2002).
En la actualidad no se respetan estos límites, con esto iniciamos a contestar la
pregunta con la que iniciamos
argumentando que la autoridad civil no existe, ya
que en la actualidad nos hemos impuesto tabúes que nos ocultan y distorsionan
éstos límites al pensar que está mal la personas con otra cultura, religión, raza o
aun más relevante y perceptible a simple vista “las clases sociales.”
El porqué de la situación planteada es de un alto grado de dificultad para darle
posible origen de su pérdida pero en esta ocasión inicio a plantear la posible
pérdida y resulta más fácil del punto de vista propio decir que los culpables de que
los límites de autoridad civil se pierdan somos nosotros; nosotros, al referirnos no
sólo a las personas que insultan o cometen arbitrariedades en la sociedad sino
también en las personas que inconscientemente ofendemos o conscientemente
herimos en su patrimonio o sentimientos y resulta fácil decir que eres una persona
que no comete arbitrariedades o cualquier ofensa pero nunca vemos el lado
opuesto el lado que nos dice la verdad moral, en lo que estamos mal, nos
referimos a esas veces que por demostrar poder, dominio, prepotencia; o
autoritarismo, actitudes que afectan a quienes están en nuestro entorno.
En la actualidad desde el hogar se pierden los límites de autoridad civil, ya que
ahora los niños o jóvenes e incluso adultos le faltan el respeto a sus padres y con
este simple hecho se violan o sobrepasan los límites. Tomando lo anterior
vayamos a la calle; el joven que le falta el respeto a sus padres también lo podrá
hacer en la calle ante cualquier persona ya que al no haberle inculcado estos
principios se sentirá sin ninguna responsabilidad civil al agredir u ofender a sus
conciudadanos, para hacer más claro éste ejemplo cuando se agrede al individuo
regularmente es por su apariencia, clase social, color de piel, ideología, etcétera y
con esto se violan los límites de civilidad, es muy claro ver por qué se violan estos
límites ya que la autoridad civil no ve clases, apariencia; es decir, el joven que
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agrede; viola los límites civiles de la otra persona, en consecuencia su libertad
como ciudadano.
¿La autoridad civil existe? Claro que no, esta autoridad se ha ido perdiendo. Con
el paso de los años se inician las revueltas para poder llegar a “una libertad
deseada” y sólo se ha logrado llegar al libertinaje, al encontrarse carente la
sociedad, (nuestra sociedad), carente de valores cívicos; es evidente entonces ver
que con estas revueltas han propiciado pérdida de los límites ya mencionados.
Cabe señalar que lamentablemente en la actualidad estos límites se encuentran
dispersos por distintas razones, una de las más relevantes es el hecho de no
recibir la educación cívica necesaria para poder ejercer la autoridad civil, así
también los estereotipos que el mismo gobierno nos impone. Una de las
soluciones más próximas aunque no por ello fácil en estos tiempos, es el cambio
de actitud, dejando atrás las diferencias que nos dividen y que nos hacen
permanecer inertes carentes de interés por la sociedad y la convivencia en
libertad.
Hoy en día es nuestra responsabilidad rescatar estos límites para poder vivir de
manera ecuánime, con alteridad. Como individuos debemos apoyar su rescate, la
manera más simple de hacer esto es predicar con el ejemplo, si las autoridades no
lo hacen nosotros tenemos que poner el ejemplo respetando, dejando de
discriminar, rechazar o insultar a personas por su clase social o su religión, o
ideas, sin sobrepasar los límites de autoridad civil.
Para finalizar en la actualidad los límites de la autoridad civil no existen, tenemos
libertad en todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana; libertad que se nos ha
dado desconociendo límites en sí misma.
Como dijo Antonio Cánovas del
Castillo: “La libertad en una autoridad fuerte e indemne, no es libertad al cabo del
poco tiempo, sino anarquía” ( http://www.proverbia.net/artasautor.asp?autor=160)
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realmente nosotros mismos somos responsables al no ejercer nuestra autoridad
ciudadana y defender nuestra libertad. Con esto podemos responder la pregunta
del inicio ¿la autoridad civil existe? Simplemente la autoridad civil es inexistente y
nosotros somos responsables de que se haya perdido.
Citando a Henry David Thoreau que dijo: “Bajo un gobierno que encarcele a
alguien injustamente, el sitio adecuado para una persona justa es la cárcel”
(“Desobediencia Civil y otros”).
Tomo su idea y puedo decir que es cierto ya que por no tener límites de civilidad
los gobernantes hacen lo que quieren y se confirma que la autoridad civil ¡no
existe!
Elaboró: Jaziel Cruz Méndez
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Fuentes de consulta.
Thoreau, Henry D. “Colores de Otoño”. Edit. José J. de Olañeta, año 2002.
Thoreau, Henry D. Walden; or life of the Woods “ La Vida en los Bosques”;,
Edit. Cátedra.- Año 1848
Thoreau, Henry D. “Desobediencia Civil y otros” Edit. Tecnos.- Año 1862;
http://www.proverbia.net/artasautor.asp?autor=160.