Cansancio Se me doblan las espaldas, con este cansancio viejo, cansancio de andar la vida, tramo a tramo sin sosiego, arreando ariscos y bravos, esta majada de sueños. Se me doblan las espaldas con este cansancio viejo, se me nubla el horizonte, con negra sombra de tiempo, se me cierran los ojos se me hace seña el silencio. Estoy por desensillar el pingo de mis desvelos, porque de tanto pensar me asudean los senderos. Peregrino del dolor en la fuente del deseo, abre todas mis ansias y me invade el desconsuelo se me doblan las espaldas con este cansancio viejo. Cansancio de desengaños, de pelear contra los vientos, del mal, de la ingratitud, de la injusticia y el miedo, seguir viviendo siempre deseando estarme muriendo. Cansancio de ver los triunfos de los malos y los buenos, cansancio de los olvidos, de amigos que no lo fueron. Cansancio, siempre cansancio que aquí nomás, yo me quedo, y desensillo el pingo de mis desvelos me acuesto a contemplar mil lunas y mil luceros. SEUDÓNIMO: PEREGRINO AUTOR: CARMEN BAVARO