Energía suficiente ¿Y si no sopla? Para Uruguay, el análisis riguroso y completo de la viabilidad de las diversas formas de generación de energía, no admite la menor demora. S i hay una única solución para el problema, es fácil decidir qué hacer, decía mi padre. El problema, insistía, es precisamente llegar a la conclusión que efectivamente hay una sola alternativa. Y, aparentemente, en Uruguay ya hemos resuelto el dilema energético: estamos apostando a la generación eólica. ¿Hemos evaluado profundamente las diversas alternativas? ¿Sabemos qué hacer cuando el viento no sopla? I - Un difícil punto de partida Quien crea que resolver cómo abastecer la demanda actual y futura es fácil está loco. No tenemos nada a nuestro favor: • Uruguay no cuenta con petróleo • la producción hidráulica no alcanza para satisfacer el consumo • instalar una planta de energía nuclear llevaría 30 años como mínimo • la solar fotovoltaica resulta cara • generar a partir de biomasa es una solución, pero la dispersión geográfica de la materia prima hace a esta alternativa poco eficiente para producciones de más de 5 MW • y, si lo anterior no fuera suficiente, el gas nos llega solo si Argentina no lo necesita. A la brasilera En Brasil existe la subasta inversa de precios. El Gobierno publica la cantidad de generación de energía instalada que está dispuesto a comprar y el precio a pagar por megavatio. Las empresas interesadas se anotan y el proceso se sigue por Internet. Supongamos que se realiza un llamado para comprar 100 MW, a 70 US$ por MW. Al momento de apertura, el Gobierno se encuentra con ofertas que totalizan 300 MW. Por lo que comienza a bajar el precio del mega y cada empresa es libre de salirse del ruedo cuando quiera. Conforme pasa el tiempo, el precio va bajando y las empresas se van retirando hasta que, quedan suficientes pocas empresas con ofertas como para proveer los 100 MW. Brasil puede darse el lujo de tener competencias centradas en el precio. Si los proyectos no se construyen, tienen petróleo, gas, madera y energía nuclear. Con este panorama lo único claro es que necesitamos fuentes de generación propias. Entonces ¿nos jugamos por el viento? II - Buenos vientos El desarrollo de la energía eólica ha sido un éxito. El programa www.energiaeolica.gub.uy impulsado por el MIEM estimuló la inversión extranjera y nacional y generó mano de obra y conocimiento local. Este estímulo se logró mediante procesos licitatorios centrados en el precio. Si bien las empresas deben probar cierta capacidad de operación y solvencia, el ganador es el que cotiza más bajo. Y este sistema ha demostrado ser bueno, pero no debería ser el único. III - Comprar barato, a veces, es comprar caro Es sabido que cuando la presión está del lado del precio, la reacción es abaratar el costo para cotizar mejor. Esto se logra ganando eficiencias en la cadena de producción o reduciendo el margen de proveedores. O bajando la calidad, o la seguridad del producto ofertado. No es noticia, tampoco que este tipo de licitaciones impulsa la participación de especuladores. En la energía eólica, estas son empresas que arman un proyecto con la única intención de que sea comprado por otra empresa. Sin planes ni esperanzas de construir. En Uruguay ya tuvimos de estos casos. Tener una competencia centrada en el precio genera riesgo de seguridad, calidad y cumplimiento. Por más que se eche mano a garantías, el daño de incumplir será mayor a lo asegurado. IV - Pequeños parques, pequeños riesgos El Gobierno ha impulsado la construcción de pequeños o medianos parques eólicos. En las primeras oportunidades se ofrecía la construcción de parques de 10 MW y después de 50 MW. Pero, no se ha permitido la construcción de parques más grandes cuando existen eficiencias que se alcanzan sólo a través de economías de escalas. Por lo que, con las reglas actuales, no se está permitiendo lograr precios óptimos. Martín Colombo [email protected] La teoría detrás de lo anterior parece ser que con pequeños parques, con distintos proveedores, se atomiza el riesgo. Pero no hay que olvidar que así también se encarece el precio y se renuncia a los grandes operadores que sólo van a mirar al paisito, si la oportunidad es mayor. Los precios Cada fuente energética cuenta con costos distintos de recolección de la materia prima, proceso y transporte, por los que los economistas los comparan mediante el LEC (levelized energy cost): Fuente energética Solar fotovoltaica Solar térmica Eólica Carbón Biomasa Geotérmica Nuclear Gas Natural Hidráulica Costo en US$ por KW 0.21 0.31 0.15 0.11 0.11 0.10 0.11 0.09 0.09 Fuente: www.renewable-energysources.com V - ¿Entonces? Con este escenario nacional, deberíamos impulsar un proceso competitivo atento al precio y que, además, cuide por igual el cumplimiento del proyecto y la construcción de parques más grandes. O, inclusive, combinar los procesos actuales con llamados que se concentren en la experiencia y compromiso de los oferentes. En materia de energía eólica, lo hecho por el Gobierno es un éxito. Esto debe consolidarse y complementarse al verificar las demoras que existen para ampliar nuestras fuentes de generación energéticas. La vía es reducir los riesgos de incumplimiento y atraer grandes operadores.